*Renji pov*
Parece que algo se traen los nobles, pues en estos días no ha habido ningún combate lo que hace que me pique la curiosidad, el mono ese no se me ha presentado de nuevo y empiezo a creer que era solo imaginación mía, pero cada día me siento mas estresado en este lugar, deseo salir. Es de día por lo que puedo apreciar a través de mi gran y hermoso ventanal, pero no escucho ningún alma cerca, esta es mi oportunidad de escapar. Ojeo por los barrotes con un trozo de espejo que pude rescatar en uno de mis combates, el pasillo despejado, rebusco entere mis prendas un pedazo de alambre y lo inserto en la cerradura, mas cuando comienzo a forzar la puerta escucho voces por lo cual oculto todo y me hago al dormido. Puedo deducir lo que esta ocurriendo, han venido a contar que todos estemos, ah y yo que ya creía poder sentir el viento en mi rostro, lo cálida del agua en las termas, el delicioso sabor del
Taiyaki…
Si ese sabor tan exquisito que…-de nuevo nos volvemos a ver mono-
-ah? Estas mal de la vista no, aquí el único mono eres tu- escucho como me responde el guardia, ¿Qué soy el único que lo puede escuchar y ver? Dirijo mi atención hacia el mono que me mira sin cambiar su faceta.
Solo tu me puedes escuchar, Renji ya te lo dije soy tu espirito protector, no hay necesidad de que otros sepan de mi existencia.
-claro y mientras yo te respondo el mundo creerá que estoy loco, muy convincente, ¿estas seguro de que no tratas de maldecirme o algo por el estilo? – observo que el guardia me mira entre intrigado y divertido, se acerca a su compañero y le susurra algo para luego ambos echarse a reír en mi cara.
No es necesario que hables, todo esta ocurriendo en tu alma.
Tal ves podrías haberlo dicho con anterioridad.
No estoy para ello, espera a tu llamado pero dado a que no eres un ser muy hablado, me veo en la obligación de hacerme presente, de nuevo.
¿Y a que debo su presencia en esta ocasión?
A que ya cumplirás la mayoría de edad, tu cuerpo estará preparado para…su destino.
Sigues con eso, no soy un jodido doncel, no se de donde sacaste esa conclusión pero mira, fui abandonado en una zona casi desértica y sobreviví por que no se… ¿suerte? Aunque con lo que me toco vivir, no creo que se le pueda llamar así, no es posible que sea un doncel, soy varón, estoy seguro de ello, quiero decir, hay algo entre mis piernas.
Serás idiota, ¿Qué piensas que es un doncel?, es un ser místico y mágico y el hecho de que haya o no algo entre tus piernas te asegura que no eres un doncel, como te venia diciendo, cumplirás los 18 la próxima luna llena, es ahí cuando tu cuerpo se acoplara al de un doncel. Veo con horror al mono mientras por inercia llevo mis manos a mis partes nobles como protegiéndolas. No se te va a caer si eso es lo que crees, ah…tendré que explicarte todo, lo diré de la manera en la que lo puedas entender. En el interior de tu cuerpo se formara algo similar a un útero que se conectara con tu canal anal, ya que al ser un varón es el único acceso directo, pero lo que si podría molestarte un poco es que comenzaras a “lubricarte”. Pongo una cara de no entender nada.
Haber me estas diciendo que la próxima semana tendré un ¿útero?
En efecto, y como decía al igual que las mujeres tendrás un lubricación natural. Mire hacia toda la habitación buscando sentido a sus palabras, claro que se que es lubricar pero “natural”.
! Oh por favor!...que esa zona se tornara húmeda ¿me explico? Los colores se me suben a la cara, no puedo creer que esto este pasándome, no, no ¿Qué he hecho en mi vida pasada?
Como estas tan seguro de que eso sucederá.
Por que si no fuese ese el caso yo no estaría aquí y tu tampoco correrías este destino, pero ya vez que esta pasando, por cierto, puede que ese día sufras un pequeño “calorcito”, pero estoy seguro que con tu personalidad lo sabrás superar, hay mas cosas que debes de aprender, pero creo que por el momento ya estas al tanto de lo más importante. No olvides a partir de ese día a los ojos de los demás serás como un trozo de carne más, debes de tener mucho cuidado. Si tienes dudas llámame, siempre acudiere a tu llamado. Y como vino se fue dejándome totalmente pálido, será endemoniado me jodio el día, saber que eso me pasara…no, no me va a pasar es imposible, ya vera hare que se trague sus palabras, no me convertiré en un doncel.
-oye ¿no escuchaste?-giro mi atención hacia los guardias, que esta vez no están solos, si no el viejo de mirada escalofriante esta con ellos, me levanto y extiendo mis manos en espera de alguna cadena o algo, mas solo recibo un empujón que hace que comience a avanzar. Salimos a la arena de combate, pero esta totalmente vacía, el anciano se para frente a mí y hace una seña a los guardias para que se retire, quiero partir esa cara a puñetazos, pero es un anciano y por mas callejero que sea nunca me iría a los golpes con uno.
-puedes preguntar lo que deseas muchacho- dice con total calma, será…solo falta que me invite una taza de te y nos sentemos a charlar cual viejos amigos.
-¿Por qué me trajo aquí? ¿Qué es lo que desea?-
-eres un doncel, y lo que se necesita de ti no esta en campo a discusiones, tendrás que hacerlo quieras o no- su mirada me causa escalofríos, este hombre es de temer.
-¿quiere que quede preñado? Y luego ¿que? me desechara, no soy un juguete ni u-
-no puedes decir lo que eres o no, en estos momentos te encuentras bajo el poder del 6to reino y del clan Kuchiki, si eres lo suficientemente inteligente te habrás dado cuenta de que llegaste al final de los combates y posees el don de realizar Kidou, no hay por que seguir con más peleas innecesarias, eres tu el que fue elegido-
-¡me niego! No pienso hacer tales cosas solo por- antes de que diga algo siento un ardor en mi mejilla, me ha golpeado, el muy carbón me…sin embargo no puedo devolvérselo, mi cuerpo no me lo permite.
-no dejes que más personas como tu sufran por esta causa, de entre todos ellos fuiste tu al que se le esta concediendo este honor, ¿no oíste al joven con el que luchaste?- esta hablando de Yumichika, el es un doncel y por lo que me conto ha padecido mucho, pero no es mi problema, solo quiero salir de todo. Para esto nos utilizan, si es que no somos vendidos como esclavos…me prometí que llevaría en alto el honor que alguna vez ostentamos en llevar y el orgullo que significaba ser un doncel, - ¿serás indiferente al dolor de uno de los tuyos?- si que sabe como jugar con las palabras, maldito viejo.-¿Cuántos crees que anhelan tener lo que se te esta ofreciendo?-
-si accedo ¿todos ellos serán liberados?- trago el nudo que se me esta formando en la garganta, no es que sea un mártir, pero vivir como ellos creo que debe de ser muy doloroso, y si puedo ayudar de alguna forma ¿esta bien no?.
-todos y cada uno de ellos, e incluso podrás ver a esa chica…Rukia- presto total atención, ¿dijo Rukia? Entonces ella esta bien.- Un amigo mío la encontró y esta cuidando, se que ella es muy importante para ti, puedo asegurarte su seguridad y una buena vida, llena de todo lo que no pudo tener-este anciano sabe mas de lo que aparenta.
-acepto- se que si le doy mas vueltas al asunto saldré corriendo, pero si se va a llevar a cabo eso…¿Quién…?
-¿Quién…? Será- el solo pensarlo me asquea- ¿será usted?- veo la impresión en su rostro que luego cambia a una de ¿gracia? No me joda estoy haciendo mierda mi orgullo y el se burla de mi.
-quien seguirá con la línea será mi nieto, pero no hace falta que lo conozcas…aun- parece que no tengo opción.- sígueme a partir de ahora recibirás clases de ética, esgrima de igual manera aprenderás a controlar tus poderes de doncel, Yumichica te enseñara lo que debes de saber- un guardia se acerca y susurra algo al viejo que hace que enarque una ceja y frunza el ceño, dirijo mi atención a donde esta viendo, nunca creí que me quedaría viendo como idiota a otro hombre, pero ahí en lo alto un hombre de no mas de 20 años, de tez increíblemente pálida y hebras negras esta observando donde estamos. –vete muchacho, lo guardias te guiaran- sigo sin chistar, pero siento que algo de mi se ha quedado en la arena, tal ves mi orgullo o mi libertad, pero eso ahora ya no importa.
Ahora solo siento que ya he visto una silueta igual…
*Ukitake pov*
No estoy seguro de que si lo que hice es lo correcto, pero no podía ocultarlo, después de todo la encontré en el reino de Ginrei-dono, tenia que comunicárselo, aparte que me sorprendió sus rasgos, la encontré muy mal por ello no me sorprende que aun no haya despertado, a pesar de haber pasado casi 2 semanas.
-¿Jushiro? – escucho la voz de mi prometido en la entrada-eh! Estas de nuevo con la pequeña, creo que comienzo a ponerme celoso-dejo a la joven en el futon mientras me levanto para recibir con los brazos abiertos a mi futuro esposo.
-Shunsui sabes que soy solo tuyo-le doy un suave beso en los labio mientras siento con su barba raspa contra mi rostro causándome un estremecimiento.
-claro que lo se, solo que me gusta que tu lo digas- de nuevo nos besamos con lentitud, paso mis brazos tras su nuca profundizando el beso, por un momento olvido en donde nos encontramos cuando veo a la pequeña comenzar a despertarse, trato de zafarme del beso pero cada vez me nubla la razón, lo siento, muerdo su labio inferior logrando que así me suelte. Le hago un gesto con la cabeza para que vea a la joven.
-juju….ah que ruda manera de avisar- meneo la cabeza y sonrió, me acerco a la joven al ver como su desorientación.
-tranquila, no te hare daño- la joven se sobresalta al oírme, pero no parece asustada, un alivio.- mi nombre es Ukitake Jushiro, y el es Shinsui Kyoraku ¿me podrías decir tu nombre?-
-Rukia, solo Rukia- la joven me regala una sonrisa algo triste, es muy bonita y no puedo permitir que vuelva a las calles-muchas gracias por su hospitalidad, pero yo… ¡Renji!- grita aquel nombre exaltada mientras se pone de pie dispuesta a irse- yo estaba buscando a mi amigo, entonces debido a…mi descuido cai desmayada, prometo que le pagare todos los gastos, pero ahora debo buscarlo-
-he, con calma pequeña, una cosa a la vez-hablo Shinsui con su típica actitud relajada- lo primero es lo primero, mira nada mas lo delgada que estas, con un soplido y te caes-
-Kyoraku-llamo su atención.
-¿que? es la verdad- suelto un suspiro resignado, no puedo contra el.
-Rukia-san, ¿no crees que lo mejor seria que te recuperaras? No creo que estés en condiciones de salir, no te preocupes por los gastos, lo primero es tu salud.-
-Shiro-chan como amo tu amabilidad, no puedo esperar a verte con un bebe-siento el asfixiante abrazo que me propina mi prometido-ya lo oíste pequeña, bienvenida al treceavo Reino, estarás bajo la protección de Jushiro y de mi- aprecio como sus ojitos se abren debido a la noticia, me observa, le sonrió mientras asiento, y ella suelta un sollozo.
-oh, Rukia-san por favor no llores- me acerco a ella mientras me inclino a su altura, siento como se abraza a mi con fuerza y susurra un “gracias”, sin duda había tomado la mejor decisión.