Ritsu se encontraba arrullando a Haruhi para que se durmiera, su bebe poco a poco fue cerrando sus ojitos color avellana mientras chupaba con insistencia su dedo pulgar quedándose dormido. El pelinegro entro a la habitación de Haruhi en donde se encontraba el castaño arrullando a su bebe, la imagen se le hacía demasiado tierna, a su castaño ya se le comenzaba a notar la pancita, pero no por eso le dejaba de parecer lindo, más bien le parecía mas violarle cada día.
El castaño se asusto al sentir como lo rodeaban por la espalda en un tierno abrazo.
- ¿Cómo estuvieron mis tres amores? – Ritsu se sonrojo hasta las orejas ante semejante pregunta, mas bien no era la pregunta en sí, la palabra “amores” le hacía inmensamente feliz pero nunca admitiría algo tan vergonzoso << Takano-san, siempre es cariñoso conmigo>> pensó sintiéndose algo mal por no ser ni la mitad de detallista y romántico de lo que Takano era.
- ¿Cómo te fue en tu día cariño? – pregunto un tomatito, que se suponía que era Ritsu. Takano se sorprendió por la pregunta de Ritsu << parecemos recién casados>> sonrió ante la idea que se formaba en su cabeza.
- Normal – respondió
No podía decir que bien ya que la situación seguía igual, kisa ya había cumplido 5 meses de embarazo así que en un mes dejaría de trabajar, eso aumentaría la cantidad de trabajo para ellos, Yokozawa seguía teniendo un humor de los mil demonios tanto que todos deseaban que zen lo hubiera convencido de dejar de trabajar, los únicos “normales” eran Hatori y mino.
- Me alegro – dijo Ritsu aun avergonzado, dejo al bebe en la cuna cubriéndolo hasta la cintura con las mantas.
La cena fue preparada por Takano aunque este quería “cenar” otra cosa, a cada rato que pensaba en el contenido de la bolsa una sonrisa pervertida se formaba en su rostro, sonrisa que no pasaba desapercibida por Ritsu. Pero a Ritsu no le molestaba, el también quería hacer el amor con Takano << maldito pervertido, por su culpa me estoy convirtiendo en uno>> pensó el castaño mientras terminaba de cenar al igual que Takano.
Takano lavo los platos, el que Ritsu estuviera embarazado provoco que Takano hiciera absolutamente todo en cuanto a tareas del hogar no dejando levantar un dedo a Ritsu, el castaño se sentía inútil y siempre le reclamaba al mayor, pero al darse cuenta de que este parecía sordo cuando tocaban el tema dejo de insistir.
Ritsu entro a la habitación dispuesto a tirarse a la cama y esperar a que Takano llegara para tener relaciones. El castaño se sorprendió al ver que una caja estaba en medio de la cama, camino hasta ella, la alzo encontrando una nota.
Póntelo
Leyó las palabras sintiendo curiosidad << ¿qué será?>> abrió la caja encontrándose con…..
<< ESE MALDITO PERVERTIDO>> grito internamente mientras dejaba la caja de nuevo en la cama << definitivamente no lo usare……o tal vez si….no Ritsu piensa con la cabeza no con otra cosa>> se quedo quieto por un momento pensando en que hacer << si uso esto estoy seguro de que Takano-san no me dejara dormir en toda la noche>> se ruborizo ante la idea, tomo el contenido de la caja y se comenzó a vestir con él.
Takano termino de lavar los platos creyendo que le había dado el tiempo suficiente a Ritsu para vestirse estando completamente seguro de que su ahora pervertido novio lo haría. Primero se dirigió a la habitación del bebe a darle el beso de las buenas noche como siempre lo hacía. Luego con una pervertida sonrisa plasmada en el rostro se dirigió a la habitación, abrió la puerta no pudiendo ver nada ya que la luz estaba apagada, entro sintiendo como alguien lo abrazaba por la espalda.
Takano volteo para encarar a la persona que lo abrazaba de manera tierna y a la vez deseosa, quedo embobado con la vista que tenía. Ritsu estaba con los ojos cerrados, sonrojado y nervioso << ¿será que le gusta?>> se preguntaba internamente el castaño sin saber si se veía bien o no.
Toda duda se fue al abrir los ojos y notar el bulto formado en el pantalón de Takano, hasta el pelinegro se encontraba sorprendido << solo con verlo me pasa esto>> pensó mientras abrazaba a Ritsu cargándolo estilo “princesita” y colocándolo de forma tierna en la cama.
Ritsu estaba vestido con un traje de conejito bastante lindo. Era negro con las orejas blancas.
- Sabía que lo harías – dijo Takano con tono victorioso mientras lamia el cuello del castaño.
- Bien, ¿ya puedo quitármelo? – pregunto Ritsu al sentirse avergonzado ante la violadora mirada de Takano.
- NO – dijo de inmediato Takano – primero tengo que disfrutar de la vista, te ves muy lindo – le lamio las labios mirando fijamente a Ritsu poniéndolo más nervioso de lo que ya estaba.
Takano ataco los labios de Ritsu impidiéndole protestar, mordiendo su labio inferior para poder introducir su lengua empezando a jugar con la de Ritsu chupándola.
<< Se siente bien>> pensó Ritsu mientras sentía la mano de Takano recorrer su cuerpo y la otra acariciar su entrepierna mientras lamia y mordía su cuello.
- Lo quiero dentro – dijo Ritsu por impuso sonrojándose al darse cuenta de sus palabras.
- Lo que tú quieras – dijo Takano mientras desvestía a Ritsu y el hacía lo mismo arrancando algunos botones de la camisa de Takano – tranquilo, tienes toda la noche para gemir.
- Pervertido – dijo Ritsu, Takano empezó a masturbar a Ritsu, el castaño sentía que explotaría en cualquier instante, pero antes Takano metió el miembro de Ritsu en su boca fingiendo embestidas haciendo que Ritsu se aferrara a las sabanas de la cama por el placer.
- Ahh…ahhh….taka…ah…no - << ¿Por qué Takano tiene que ser tan bueno en esto?>> se preguntaba Ritsu al sentir la lengua de Takano recorrer su miembro.
Ritsu termino por correrse en la boca de Takano quien bebió todo sin desperdiciar nada, la temperatura de sus cuerpos comenzó a aumentar, Takano se recostó en la cama tomando a Ritsu de la cintura posicionándolo encima de él.
- Takano-san – susurro Ritsu sonrojado haciendo que las ganas de Takano de hacerle el amor aumentaran y las orejas que Ritsu aun traía puestas no ayudaban mucho a su autocontrol.
El castaño sintió como algo duro presionaba contra su entrada, Takano fue introduciéndose lentamente al cálido y suave interior de su castaño, << tan apretado>> pensó al estar completamente dentro de Ritsu. Takano le dio una nalgada
- Deja de hacer eso – dijo molesto Ritsu.
- Me gusta tu trasero – dijo causando un gran sonrojo en el menor – muévete – dijo mientras tomaba a Ritsu de las caderas comenzando a moverlo de manera lenta de abajo a arriba. Después de un rato Ritsu ya se auto penetraba una y otra vez aumentando el ritmo cada vez mas.
- Ahh…mas….profundo – el miembro de Takano salía casi completamente para luego volver a entrar por completo tocando aquel punto que enloquecía a Ritsu.
Takano se incorporo en cama quedando sentado con Ritsu aun montándolo, llevo una de sus manos para atender el miembro del castaño quien y sentía cerca el orgasmo, y la otra mano la llevo al trasero de Ritsu apretándolo mientras lamia los botones rosas de su amado causándole un gran placer. No podía evitar mirarlo por momentos, el cómo su cabello castaño se pegaba su frente a causa del sudor, sus mejillas sonrojadas, las orejitas de conejo se movían al ritmo de las embestidas y sus ojos tenia con aquel brillo de lujuria que tanto le gustaba.
- Ahhh…taka…-san….me…ahh….vengo – confeso Ritsu antes de manchar ambos vientres, con un par de embestidas mas Takano se corrió en el interior de Ritsu.
Ambos se acostaron en la cama abrazados.
- El papel de conejito te queda muy bien, se ve bien que te gusta saltar.
- ¡Takano-san!, no digas ese tipo de cosas – se quejo - ¿puedo quitármelas? – dijo Ritsu señalando las orejitas.
- No, te ves muy lindo – declaro Takano causando un sonrojo en el menor.
<< Este pervertido>> pensó Ritsu antes de quedarse dormido.
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Ya había pasado tres meses, dentro de poco Haruhi cumpliría diez meses y Ritsu cinco mese de embarazo.
- Ma..ma – dijo Haruhi mientras extendía sus bracitos hacia Ritsu.
Haruhi había tomado como su primera palabra “mama” cuando tenía 9 meses, Ritsu lloro ese día, literalmente, las hormonas estaban en su apogeo en esa etapa del embarazo. Mientras tanto la palabra “papa” la había dicho hace tan solo unas semanas dejándola como la segunda palabra que aprendió a decir, haciendo a Takano muy feliz.
- ¿Cómo está el bebe que más quiero? – dijo Emily mientras entraba al departamento
- E..mi.. – fue lo único que dijo Haruhi.
- Casi dice mi nombre – dijo Emily sonriéndole a Haruhi - ¿Piensas seguir yendo a la universidad? – pregunto mirando ahora a Ritsu.
- No lo sé, si terminare de estudiar, pero ya casi no puedo ocultar mi vientre – dijo mientras acariciaba su pancita – además es incomodo cuando el bebe se comienza a mover mientras estoy en clases.
- Creo que deberías tomarte un tiempo, ya luego veras de qué forma repones los meses que faltes.
- Creo que deberé de hacer eso – dijo Ritsu desanimado mientras se dejaba a Haruhi en su silla para darle de comer
- Por cierto ¿Dónde está Takano? – pregunto Emily al no notar a su seme favorito.
- No lo he visto desde ayer que fue fin de ciclo – dijo Ritsu algo “preocupado” pero no lo diría por vergüenza.
- Papa – exclamo Haruhi al ver a Takano, quien tenía una aura negra a su alrededor por no haber dormido bien en días.
- Buenos días Takano-san – dijo Emily sonriendo.
- Buenos días,……solo quiero dormir –dijo Takano mientras le daba un corto beso a Ritsu en los labios y otro en el vientre.
- Duce – dijo Haruhi al ver que Takano le había traído dulces que compro antes de venir.
- TAKANO-SAN, NO LE DES COMIDA CHATARRA AL NIÑO
- Pero a él le gustan – dijo Takano – además uno de vez en cuando no hace daño
- De acuerdo, pero deja de consentirlo tanto
- No – dijo Takano mientras se encerraba en la habitación dispuesto a dormir no sin antes recordarle a Ritsu – recuerda que en un rato tenemos que ir a tu chequeo.
- Si, si, ya se – dijo Ritsu mientras le quitaba el dulce a Haruhi y lo criaba con una papilla de frutas.
Como ya casi tenía 5 meses podrían saber el sexo del bebe. El bebe según Ritsu era bastante energético a comparación de Haruhi que era más tranquilo durante el embarazo, el bebe se movía constantemente y también pateaba demasiado.
- Entonces ya sabrán que es – dijo Emily emocionada – creo que será una niña, ya ves lo que dicen, las niñas son mas inquietas.
- Eso lo sabré hoy, solo quiero que todo esté bien... – deseo Ritsu.
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Y ahí estaban, en el consultorio del doctor. Takano se veía mejor, un par de horas de de sueño le hacen bien a cualquiera, pero sus ojeras aun se mantenían.
- No estés nervioso – dijo Takano mientras apretaba la mano de Ritsu dándole confianza.
- No lo estoy – dijo Ritsu mas tranquilo.
- Lamento la tardanza – dijo un joven doctor de cabellera azul y ojos del mismo color – mi nombre es kusama nowaki y seré quien los atenderá.
Los tres se saludaron, luego el doctor le indico a Ritsu que se recostara en la camilla y se desabrochara el pantalón y alzara su camisa, todo ante la atenta mirada de Takano quien no quería que el doctor se le acercara más de lo necesario a su Ritsu.
Nowaki aplico el gel al vientre de Ritsu para después pasar la maquina por el buscando al bebe.
- Aquí esta – dijo nowaki señalando la pantalla, inmediatamente tanto Ritsu como Takano miraron la pantalla viendo a su bebe, aunque no se podía distinguir bien todavía a los dos les pareció especial y hermoso - ¿quieren saber qué es?
- Si – dijeron ambos esperando la respuesta de nowaki.
- Es……felicidades es una niña.
<< Una niña…..>> la mente de Takano quedo en blanco por un momento, una niña, siempre había querido una pero eran mucho más difíciles de criar a comparación de un niño, y no solo eso, sino que tendría que cuidarla las 24 horas del día para que ningún pervertido se le acercara.
Ritsu también estaba feliz de que fuera una niña, pero sabía que sería algo difícil criarla especialmente siendo dos hombres, pero le daría todo el cariño de madre, eso sí lo podía asegurar.
Ambos salieron del consultorio, había ido en el auto de Takano así que subieron a el rumbo al departamento, o eso era lo que creía Ritsu.
- ¿Qué no íbamos a casa? – pregunto el castaño al ver que Takano se estaciono en el centro comercial.
- Tenemos que comprar cosas para la bebe – respondió Takano mientras salía del auto y abría la puerta del copiloto para que Ritsu saliera.
- No vayas a hacer lo mismo que la otra vez y terminar llevándote toda la tienda – recordó Ritsu.
- No te preocupes, solo compraremos lo necesario.
- Tu concepto de necesario no es muy adecuado que digamos.
- Ven – dijo Takano tomando la mano de Ritsu guiándolo a una tienda.
Como Ritsu había previsto después de un par de horas, Takano cargaba una excesiva cantidad de bolsas, ni siquiera había dejado que Ritsu cargara algo, aparte de que había varios empleados cargando aun más bolsas tras ellos.
<< Este tipo no sabe lo que es ahorrar>> pensó Ritsu con una gotita estilo anime en la nuca.
- Ahora vamos ahí – dijo Takano señalando a la última tienda a la que no habían entrado.
- No, ya es demasiado – dijo Ritsu molesto.
- Será la última.
- Ok – accedió Ritsu sabiendo lo necio que era Takano.
La tienda era como las demás, Ritsu sentía que veía las mismas cosas que en las demás, casi todo en su totalidad era color rosa y lila, miro la ropa por un rato habiendo perdido a Takano de vista, << lo más seguro es que este comprando juguetes>>, Ritsu vio un vestido color verde pastel bastante lindo con bordados de flores rojas y blancas, iba a tomar el vestidito cuando sintió que alguien tocaba su trasero.
Volteo enseguida a encarar al pervertido, que casi podía asegurar era Takano pero no era así, el desconocido trato de hacer como si nada pasando de largo no sin antes sonreírle a Ritsu quien estaba a punto de reclamarle cuando….
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- ¿Qué eres? ¿un animal acaso? – decía enojado Ritsu pero la vez feliz aunque no lo demostrara.
- Ese hombre te toco, yo soy el único que puede hacer eso – dijo Takano intentando contener las ganas de volver a hacer lo que hizo.
Ya se encontraban en el departamento discutiendo por lo que sucedió en el centro comercial, cuando Ritsu iba a reclamarle a aquel hombre por tocarlo, en un instante Takano ya se encontraba golpeando.
- Pero eso no te da derecho a golpearlo por poco lo mandas al hospital
- Tiene suerte de que los encargados de la tienda me sacaran
- Era obvio que harían eso – dijo Ritsu lanzando un suspiro – y….supongo que gracias, pero yo podía defenderme solo, no era necesario que hicieras eso.
- Yo solo defendí lo que es mío – dijo el pelinegro sin un poco de arremetimiento por sus acciones, lo volvería a hacer sin dudarlo.
- No soy un obje….olvídalo – se resigno a seguir discutiendo, sabía que era una pérdida de tiempo.
- Por cierto, creo que debemos comprar un regalo para Yokozawa, su bebe nacerá en mes y medio.
- Sí, creo que podriam….
Ritsu se vio interrumpido por el celular de Takano. El pelinegro contesto poniendo cara de sorpresa.
- ¿Qué paso? – pregunto Ritsu.
- El bebe de Yokozawa acaba de nacer…
Continuara………..