ÿþEscucho desde la sala como se abria la puerta de su cuarto y vio a Ciel bajando las escaleras con un gran sonrojo en su
rostro.
-Ciel per...-fue interumpido por su pareja.
-Perdon Sebastían yo tengo la culpa, tienes razon no hemos tenido relaciones desde que nacieron los gemelos y quiciera
compesarte por tenerte estos dias en abstinecia-puso sus dos piernas alado de la cintura de su esposo y se sento
arrbia de su miembro que rozaba con su entrada.
-Ci...el-esto comenzaba a gustarle.
-Los niños estan durmiendo ahora...tenemos algo de tiempo-susurro en su oido que comenzo a lamber.
-Agh me estas tentando, estas tentando a un demonio-agarro con sus dos manos la cintura de Ciel y comenzo
a moverla sobre su ya miembro exitado.
-Ah se como ah solucionarlo...castigame-fue la gota que derramo el baso. A una velocidad sorprendeste ya se encontraban
en la cama.
Sebastían comenzo a besar el cuello de su pareja dejando marcas de propiedad. Ciel frotaba los dos miembros.
-Ah quiero intentar algo-hizo que sebastian se sentara en la cama con la espalda pegada al respaldo, despues el
se sento arriba de el fortando los dos miembros.
-Hoy seras mio demonio-beso con pasion a su pareja que con gusto le correspondio, lambio los labios del ojirojo
pidiendo permiso para entrar y este se lo concivio. Ambas lenguas danzaban al compas de los movimientos
de las caderas de Ciel.
-Ciel ya no agh aguanto-pedia Sebastian poder poseer ese cuerpo que lo tenia loco.
-A un no mi amado demonio-desabrocho la camisa y comenzo a mordet y besar el torso de su pareja hasta llegar
a la zona abultada y humeda. Con su mano masajiaba sobre la tela-.¿Que es lo que deseas Sebastían?
-Queiro agh tu ah boca en mi pene-cuando tienen sexo siempre usan palabras obsenas eso en cierta manera los enciende.
No decidio torturarlo mas, bajo con sus dientes la brageta del pantalon al igual que los boxers. El miembro de
Sebastian se encontraba ya escuriendo el pre-semen de la punta roja. Primero lo lambio para despues meterlo en su
boca.
-Ah Ciel-automaticamente puso sus manos en la cabeza de Ciel marcando el ritmo: ariba y abajo. Daba leves mordidas
en la punta mientras que en lo sobrante lo masajiaba con su mano derecha y con la izquiera de encargaba de los testiculos.
Sentia que ya pronto su pareja se vendria a si que con sus labios mordio el pene de su compañero.
-Ah ¡Ciel!-expulso todo su nectar en la boca de su niño que lo trago con gusto.
-¿Que mas quieres?-volvio a preguntar.
-Quiero mi pene en tu culo para poder follarte tan duro y que grites de placer solo para mi-de un rapido movimiento
le bajo los pantalones de Ciel y lo puso en cuatro, metio su miembro en la estrecha entrada de Ciel que ya no aguantaba la
exitacion.
-Rapido.
De una sola estocada entro causandole espamos a Ciel. Las envestias comenzaron suaves pero al pasar los segundos
se volvieron rapidas.
-Quiero porbar-Ciel no entendio lo que quiso decir hasta que sintio como Sebastian lo voltiaba quedando de espalas
del colchon. Sebastian se acerco a los pezones abultados de su niño y comenzo a lamberlos al rededor, leche comenzaba
a brotar de los botones rosas del conde. Estaba apunto de morder uno hasta que vio una pequeña mordida alrededor del
pezon, checo el otro y alli estaba la misma mordida.
-"Logan y Julian"-penso en los dos gemelos que habian marcado los pechos de su pareja.
Con algo de enojo mordio con fuerza el pezon de Ciel que empezo a sangrar, la sangre mesclada con la leche de Ciel
era un elixir para Sebastian.
-Aaaaah Sebastian no muerdas tan fuerte-no podia pensar con claridad, su pareja aparte de que lo estaba penetrando le
mordia sus pechos haciendo que la leche saliera a chorros.
Sebastian succionaba como loco no se le escapaba ninguna gota; comenzo a maturbar el miembro de su pareja e hizo mas rapido
y profunas las embestinas hasta tocar el punto que hacia loco a Ciel.
-¡Sebastina!-grito su nombre en el orgasmo.
-Agh Ciel-se vino adentro de su pareja.
Se quedaron en la misma posicion un rato hasta que escucharon el llanto de los gemelos.
-Yo voy-se separo de Sebastian y tomo una bata para salir del cuarto.
Miro hacia el techo y comenzo a reflexionar sobre los celos hacia sus hijos. Una sonrisa aparecio,
-Dios celando a mis hijos por tocar a Ciel. Espero que asi de celosos sean de sobreprotegidos con su madre-penso en le futuro-.
Solo son dos que malo puede ocurrir.
1 mes despues
-Sebastian estoy embarazado-al escucharlo se desmayo sobre la cama-.¡Sebastian!
15 años despues
Estaban la familia Michael en el parque de picnic.
Ciel estaba comprando algunas cosas en la tienda que estaba sercas del parque, Logan y Julian ya de 16 años y Maicol de 15
años jugaban en el agua y Sebastian preparaba la manta.
Ciel iva de regreso hasta que se le cae la bolsa con el mandado y un joven le ayudo a recojer la comida hasta que trataba
de conquistar a Ciel. Sebastian lo noto enseguida.
-Logan, Julian y Maicol; mama los nesecita-hizo una seña a los tres hermanos que voltaron a ver con odio hacia el joven.
Corriendo, Maicol le quito la bolsa al joven y Julian y Logan abrazaron posesivamente a Ciel.
-¿Quien eres tu para hablar con mi madre?-pregunto Maicol enojado.
-Si no ves que ya tiene a 3 hombres que lo cuidan-apoyo Logan.
-Si no te basta con nosotros mi papá ya vendra en camino-dijo Julian.
-¿Donde esta que no lo veo?-pregunto con burla.
-Aqui-toco el hombro del joven que al ver la sonrisa fingida de Sebastian salio corriendo.
-Asi se hace papa-felicitaron los tres que abrazaban a Ciel que era unos sentimetros mas bajo que sus hijos.
-Ya dejen a su madre-comezaba a molestar tantos brazos sobre su Ciel.
-No.
-Mama es nuestra-dijo Julian serio.
-No te la daremos-siguio Maicol.
La sonrisa desaparecio del rostro de Sebastian que los miraba con los ojos de demonio, grande fue su sorpresa al ver a sus
hijos igual que a el. Un golpe en la cabeza se llevaron los cuatro por parte de Ciel.
-¿Donde esta su nombre que no lo veo en mi cuerpo para que dijan que soy suyo? Soy su madre y esposo para que me traten
como un objeto-dijo enojado.
-Pero mama...
-Nada, ahora vayan a arreglar todo que tengo hambre-camino hacia la manta del picinic con sus cuatro guardespaldas
siguiendole.
-"Sin duda son mis hijos"-penso Sebastian con una sonrisa en el rostro.
Fin
Amor Yaoi
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