-MAMAAAA~ dile a Taeyeon que me deje en paz- decía Taemin enfadado tratando de librarse de su molesta hermana.
-¡No quiero! Eres tan lindo... pareces una chica- Taeyeon trataba de abrazar a su hermanito; sabía que eso lo molestaba y a ella le encantaba provocarlo.
-¡Basta niños! Estamos en un lugar público- dijo la mamá de ambos disimulando su enfado.
La familia Lee estaba reunida en un restaurante para cenar juntos, aprovechando que el Sr Lee no estaba en algún viaje de negocios y podían pasar tiempo con él.
Como siempre... los hermanos se pasaban su tiempo peleando y molestandose entre sí.
La Sr Lee siempre reprueba el mal comportamiento de sus hijos, ya que son mayores y deben actuar como tal. Mientras que al Sr Lee no le molestaba en lo absoluto, de hecho... se divierte. Le hacía recordar esos maravillosos tiempos cuando eran sus pequeños y siempre iban corriendo a el llenandolo de besos y abrazos exigiendo su total atención. Los tres siempre jugaban llenando la casa de gritos, risas y momentos felices. Sonrió con nostalgia. Hoy en día con suerte se acordaban que el existía.
-Lástima que no tengas las caderas más pronunciadas- dijo Taeyeon a su hermano con tono triste- así podrías modelar mis diseños.
Taemin rodó los ojos y dirigió sus atención a otra parte ignorando a su molesta hermana.
Pone su atención en un chico que va caminando de espalda a el. Nota que es muy alto y el traje que lleva le queda exageradamente bien. No puede evitar seguirlo con la mida.
De pronto muchas personas que pasan bloquean su campo visual y le pierde la pista al chico alto y sexy. Su teléfono suena y lo saca del bolsillo de su saco. 'Key', dice en la pantalla, con una foto de el con la cara llena de tarta de fresa y haciendo aegyo.
Se disculpa un momento con su familia y va a un sitio un poco alejado para hablar tranquilamente. Atiende.
~~Llamada Telefónica~~
-Aló- dice Taemin.
-Baby... necesito tu ayuda- escucha que esta hablando en susurros casi inaudibles. No se alarma, de hecho, tratándose de Kibum era lo más normal.
-¿Que pasó ahora?- preguntó Tae con fastidio.
-Creo que mi papá se enteró de lo que hice. Llamó en la tarde y Minho contestó la llamada porque yo dormía, y desde entonces no ha dejado de llamar. Tengo miedo- Taemin se alarmó al escuchar eso.
-Por Dios... Kibum, ¿ahora que hiciste?. ¿por que estabas con Minho y dormías?.
-Estoy en su departamento, es una larga historia. Mi tío Hee me envío un texto diciendo que el y mi padre están en mi departamento. Por favor... ve allá y trata de dialogar con el y calmarlo. Sabes como es cuando se enfada- le pidió la rubia en súplicas.
-No. Lo siento, pero el tío Jae pierde su humanidad cuando se enfada. Kibum, tienes que aprender a ser responsable por tus actos- le regaño.
-Lo se Tae, pero ahora estoy en el baño del departamento de Minho. No puedo discutir esto aquí. Por favor ve a hablar con mi padre mientras yo llego.
-Kibum...
-Por favor baby... porfis porfis porfis porfis porfiiiiiiiiiiiiiiiiiissssssss~- le pedía con tino dulce e inocente- ¿siiiiiiiiiiiiiiiiii~?.
-Ash... esta bien- Tae no sabía por que no terminaba de resignarse; Kibum siempre consigue lo que quiere.
-¡Gracias baby! Te debo una- se quedó pensativa- bueno... te debo como un millón. Jiji.
-No te preocupes... yo llevo tu contabilidad- no la dejó responder y colgó.
Suspiró frustrado, ahora el tenía que domar al tigredragónlanzafuegoconcomplejodeninjaasesino (N/A: me encantó Rain en esa peli. Se me cae la baba sólo de recordarlo XD).
Cuando se dirigía a su mesa para disculparse e irse, noto algo que lo alarmó.
El chico alto y sexy que vio hace un momento estaba en su mesa conversando tan alegremente con sus padres. ¡Y NO SOLO ESO!.
Es el mismo chico de sus sueños, su enamorado, el que casi lo viola en el baño del instituto. Tae se puso totalmente nervioso ¿QUE HACIA EL CONVERSANDO CON SUS PADRES? Hasta Taeyeon estaba encantada con su presencia.
¡AL DIABLO CON LA DESPEDIDA! No se sentía capaz de verlo a la cara y menos con su familia presente. Necesitaba escapar de allí sin ser visto. Escaneo rápidamente el lugar y noto que la salida no estaba muy lejos, sólo tenía que rodear muy rápido sin ser visto.
Así lo hizo. Comenzó a caminar rápido lo más disimuladamente posible camuflajeandose con algunos camareros.
Por fin... ya había salido. Se dirigió a su auto ya que todos habían llegado por separado. Arrancó rumbo al departamento de Kibum.
~*~Departamento de Minho~*~
Gwiboon seguía en el baño tratando de idear un plan para salir del departamento sin ser vista por Minho, ya que no quería dar ningún tipo de explicacion sobre el porqué de su actuar momentos atrás.
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-¿¡QUEEEE!? MI PADRE- oh dios... ahora si que estaba perdida. Presentía que su tío Hee lo había vendido- y-y... ¿q-que dijo?- preguntó nerviosa.
-Pues... nada exacto, concreto o lógico- respondió Minho sin entender nada de lo que había pasado. El padre de Gwiboon estaba loco.
¡AY DIOS AY DIOS AY DIOS...!- comenzó a dar brinquitos y mover las manos en señal de nerviosismo- ¡AHHHHHHHHH!- comenzó a llorar- AHORA SI PUEDO CONSIDERARME OFICIALMENTE OCCISA. EL ME MATARÁ- sabía que por muchas travesuras que cometió en el pasado, esta era la PEOR de todas- MINHO... PROMETEME QUE MI FUNERAL SERÁ FABULOSO- el moreno miraba la escena con incredulidad. Ahora sabía por que Gwiboon era así.
Gwiboon se acercó a el y lo abrazo.
-Te amo *snif* nunca lo olvides- dijo una muy dramática Gwiboon abrazada como Koala al cuerpo del moreno.
Minho sonrió y le agarró el rostro para que lo mirase.
-Nunca dejaría que nada malo te pasara- besó su naricita.
KYAAAAAAAAAAAAAAAAA... si, podría morir ahora mismo.
Gwiboon estaba completamente descolocada, no se esperaba eso. Sólo se quedó mirando esos hermosos llenos de ternura.
Minho no lo soportó más, se inclinó hasta llegar a los labios acorazonados de su rubia para así besarlos. Gwiboon cerró los ojos al sentir el contacto. Lo besos que le daba Minho si que eran deliciosos, sentía que su cuerpo explotaba y se volvía sensible con tan sólo esa acción.
Minho mordió suavemente el labio inferior de la rubia. Esta los abrió un poco y el moreno pudo colar su lengua en la pequeña cavidad.
Todo en Gwiboon era suave, delicado y delicioso. Su boquita era lo máximo, deleitaba de lo cálida y dulce con sabor a fresas y cerezas producto del brillo labial. Su lengüita tímida a penas rozando a suya.
El beso era suave pero demandante. Gwiboon era frágil como una muñeca de porcelana, y sabía que tenía que tratarla como tal, no podía perder los estribos como el clase de educación física.
Gwiboon paso sus brazos al rededor del cuello de Minho, mientras esté ponía las suyas en la pequeña cintura bajando por las amplias caderas hasta llegar a sus bien formados glúteos. Ahí se detuvo un momento, luego comenzó a acariciarlos y delinearlos.
La rubia se estremecia cada vez más, nunca le habían tocado de esa forma; era extraño y excitante... y le gustaba.
Minho subió una de sus manos y la coló dentro del suéter de la rubia, acariciando su tersa piel. Esto provocaba que miles de mariposa volaran en el estómago de Gwiboon y comezara a emitir suaves gemidos entre el beso.
La mano del moreno terminó en el broche del sujetador, pasando por allí varias veces como decidiendo si desabrocharlo o no.
-Ah...- gimio suave Gwiboon cuando Minho apretó un poco su glúteo. Lo que la hizo reaccionar un poco.
Creía saber las intenciones de Minho. Kibum siempre ha sido un chico inocente; sabía como funcionaba su cuerpo, pero hasta ahí. El nunca sufría de "ataque hormonales" porque no se lo permitía a si mismo, y evadia ese tema de todas las formas, es decir: no ha tenido erecciones (sabiendo lo que es) y por lo tanto nunca se ha tocado o visto pornografía. Sólo sabía lo que era tener sexo o hacer el amor por las clases o por los dramas y películas románticas que le gusta ver nada más evadiendo ese tipo de escenas.
Cuando su padre iba a tener "la charla" con el, gritó, se tapó los oídos y se fue corriendo.
Y por mucho que estuviste enamorado de Minho, nunca se imaginó este tipo de situaciones; no pasaba de románticos besos de película.
Ambos se separaron un poco para tomar algo de oxígeno, pero Minho quería seguir, así comenzó a besar su mentón y bajar por su cuello donde mordisquio un poquito.
-Ah... Minho...- al oír eso dio uno más fuerte- Min...ho por favor espera- Minho paró.
-¿Que sucede?- la rubia ya estaba totalmente ruborizada y tratando de normalizar su respiración. Minho definitivamente quería seguir.
-Es que... mmmmm...- desvió la mirada- yo... ¡ahora vuelvo!- salió corriendo de allí dejando a Minho confundido.
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Se moría de los nervios de sólo pensar en hacerlo con Minho, además... tampoco sabía cómo manejar una situación de esa magnitud. Aunque su cuerpo le llevaba la contraria a su cerebro.
-Gwiboon... ¿estas bien?- la llamó Minho tocando la puerta. Genial... ahora su plan de fuga de había frustrado.
-S-si... ya salgo- rápidamente arregló su aspecto.
Abrió lentamente la puerta y... ¿que se encontró?.
Minho se había quitado la camisa y su perfecto torso quedó al descubierto. Gwiboon apretó los ojos y los desvió. Era una imagen demasiado sexy para la salud de cualquiera, aún más para la de ella.
*~*~*~*~*~*~*
Taemin estaba al frente del departamento de Kibum, meditando sobre si entrar o no. Sabía que estaba a punto de poner en riesgo su propia vida, pero ya se había comprometido y el cumplía su palabra.
Suspiró. Abrió la puerta y sin hacer absolutamente nada de ruido fue entrando. Atravesó el pequeño pasillo y llegó al living, se detuvo y escaneo el lugar. No había nadie y tampoco se escuchaba ningún tipo de ruido; quizás ya se habían ido.
Por fin pudo respirar y relajarse, no tendría que enfrentar al demonio después de todo.
-Hola... Taemin...- pronunció una voz sombría a sus espaldas.
-AHHHHHHHHHH- pego un grito nada masculino de la impresión. Su cuerpo se volvió a tensar y llenó de escalosfrios. El aura de lo que se encontraba a su espalda era maligna.
-Veo que llegaste, pero... ¿dónde está Kibum? ¿no se encontraba contigo?- tal y como lo supuso Taemin, era Jaejoong quien se encontraba detrás.
Muerto de miedo fue girandose lentamente para quedar al frente de Jaejoong, que en ese entonces no era Jaejoong.
-Ho...la tío Jae- dijo Tae con una sonrisa muerto del miedo- ¿como has estado?.
-Taemin... sólo lo preguntaré una vez más, ¿donde... está... Kibum...?- se fue acercando a él de forma amenazante.
-Eh... pues... el...-Taemin no sabía que decir, estaba muerto de miedo- ¡está de compras!- bueno, eso si era creíble, Key compraba a toda hora y cualquier momento del día.
-¡MENTIRA! ¡Cuando lo llame a su celular contestó un chico diciendo que estaba dormido en su habitación!- de sólo recordarlo Jaejoong sentía su sangre hervir y la necesidad de matar gente.
-Y-yo no lo sé, sólo dijo que viniese para acá- si le llegaba a revelar que estaba en el departamento de Choi Minho, el chico que vuelve loco a Key, no se quería imaginar lo que sucedería- el vendrá en un rato, lo juro.
-Bien... creeré en tu palabra- Jaejoong se relajó un poco- sabes... Taemin- empezó a caminar por el lugar rodeando al castaño quien seguía todos sus pasos- Heechul me contó una historia muy interesante, tal vez la hayas escuchado- se paró en seco, frunció el ceño y lo miró.
-¿Cu-cuál es esa historia?- tragó duró.
-Una donde un chico pide un deseo a un ser mitológico- oh Dios... estaban todos perdidos- queriendo convertirse en una chica. Y el ser se lo concede- Tae abrió desmesuradamente los ojos- ¿es cierto eso, Taemin?- asiente- obviamente no puedo creer en eso.
-Yo... tampoco lo podía creer, pero... así pasó.
-Bien... como nadie quiere cooperar diciendo la verdad, me sentaré tranquilamente a disfrutar de mi té mientras espero a Kibum- de la nada apareció una tasa de té en sus manos la cual comenzó a beber mientras se sentaba cómodamente en un sillón- ¿gustas uno?- le ofreció amablemente con una sonrisa.
-¡claro!- dijo alegre Tae.
A Taemin nada le resultaba extraño, conocía a la familia Kim desde hace demasiado años y sus comportamientos bizarros.
Los dos estaban sentados tranquilamente bebiendo su té y conversando de trivialidades. Oyeron la puerta abrirse y pisadas de tacones dirigirse a living.
El corazón de Taemin palpitaba con cada pisada de los tacones.
-Hola papi- la mandíbula de Jaejoong llegó al suelo.
Dejó la tasa en la mesita, se paró y dirigió tranquilamente hacia la rubia y empezó a detallarla minuciosamente, tomando cada uno de ellos.
Efectivamente, era Kibum... sólo que...
Para que contarles lo que pasó. Taemin decidió que eso era un asunto familiar y salió de allí como un rayo.
-Pobre Key, rezaré por el... dijo mientras esperaba el ascensor.
Estaba por salir de ascensor cuando...
-Oh... hola- Tae paró en seco y subió la mirada.
"¿¡POR QUE EL UNIVERSO ME ODIA Y CONSPIRA CONTRA MI!?"
-¿Por que te fuiste tan abruptamente del restaurant? Tu familia se extrañó y te buscaron por todas partes. ¿O estabas tan nervioso que no podías estar cerca de mi?. Noté como me observabas- Taemin lo ignoró y trató de salir, pero este se lo impidió.
-¿Me seguiste?- le preguntó Tae enfadado.
-No. Yo vivo aquí- no le dio tiempo de accionar y oprimio el botón de su piso.
Tae se quedó totalmente descolocado. El chico tenía una sonrisa triunfal en su hermoso rostro mientras lo devoraba con la mirada.
¿ahora que sería de él?.
~Tierra de las hadas~
~Reino de Lee Sooman~
-JAJAJAJAJAJAJAJA- se reía estruendosamente el rey sentado en el trono- ¿en serio creían que jamás encontraría al príncipe?- preguntó retóricamente limpiandose una lágrima con su dedo índice.
-¿Ahora que planea hacer, maestro?- preguntó uno de sus discípulos.
-El príncipe ya no nos sirve. Para el conjuro se necesita sangre real pura- habló otro.
-Eso no es problema- dijo el emperador restandole importancia- necesitamos que el príncipe procree un nuevo heredero, y haremos que pase.
Todos esbozaron una sonrisa maligna.