Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Taste of Love por UniPandaHamster

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 Advertencia! bueno, en reaidad no xD pero aclaro que le cambién el nombre al fic porque... tengo pensado otra cosa para el título anterior, y porque no me gustaba para este en especial :3 

 Solo eso, espero que les guste ^^

 Daj… pensar en él hacía que mis sienes comenzaran a doler. Últimamente lo único que lograba ese chico era darme muchos dolores de cabeza.

 Hacía casi dos años que vivíamos bajo el mismo techo, ¿las circunstancias que nos llevaron a eso?, no las recuerdo. El punto es que con toda esa bola de la convivencia “algo” empezó a unirnos más de lo que debía. Si, está bien, ese “algo” se llama sexo. De vez en cuando, en esas ocasiones en las que volvíamos agotados de nuestros trabajos, la escuela, o tal vez con los humos subidos por alguna riña que hubiésemos tenido, nos dábamos algunos revolcones para descargar tensiones. Solo conveniencia, como siempre.

 Nuestra relación nunca pasó a mayores, solo éramos amigos que de vez en cuando, se toqueteaban un poco… solo un poquito:

Hyde:- Llegaré tarde hoy, así que no me esperes para la cena- en realidad no tenía nada importante que hacer, pero este último tiempo no aguantaba más de cinco minutos la presencia de Kiyoharu cerca de mí, por lo que buscaría alguna excusa para llegar muy tarde… o no llegar.

Kiyoharu:- Está bien, estaré esperando por ti-

 Y antes de que saliese por la puerta, se acercó a mí con total confianza y me estampó uno de sus asquerosos besos como si fuese dueño y amo del mundo, como si pudiese hacer lo que se le antojara. Por suerte fue en la mejilla:

Hyde:- ¿Qué haces?- lo empujé y le dediqué mi peor cara de asco- Sabes que odio que me besen- pasé el dorso de mi mano por aquel rastro de baba que había dejado en mi mejilla y salí de la casa dando un portazo.

 Me encrespaba compartir casa con él, ya no lo quería ver siquiera en figurita, me hartaba.

                                               ____________________________

 Cuando llegué al edificio, Tetsuya me estaba esperando en la entrada con una sonrisa que no era necesario ser adivino para darse cuenta de que se traía algo entre manos:

Hyde:- ¿Ya vienes con una noticia?, ¿Tan temprano?- mi día había comenzado con humor de perros.

Tetsu:- Mm… tu cara me dice que no estás en tu mejor momento- se cruzó de brazos y me dedicó una sonrisa- Déjame adivinar, ¿Kiyoharu?- alzó una ceja y sonrió victorioso cuando suspiré dándole la razón- Te dije que te deshicieras de él. Tarde o temprano tendrás que echarlo o terminarás matándolo. Conociéndote, no creo que dures mucho aguantándolo- rió.

 Caminamos por los pasillos de aquel enorme edificio hablando de temas poco importantes, hasta que muy entusiasmado, Ken corrió hacia nosotros saludándonos de la forma más escandalosa posible:

Tetsu:- No es necesario que pongas la escuela patas arriba para saludarnos- le golpeó la cabeza ligeramente.

Ken:- ¡Es que tengo una noticia increíble!- sus ojos se iluminaron y siquiera nos dio tiempo a preguntar qué era, o a marcharnos sin dejarlo hablar- ¡Conseguí baterista nuevo!-

 Levantó los brazos en señal de victoria y la euforia no tardó en hacerse notar por parte de Tetsu:

Tetsu:- ¡Te adoro, juro que esta noche te invito a cenar todo lo que quieras!-

 Se abrazaron animadamente y rieron de forma estruendosa:

Hyde:- ¿Y de dónde lo sacaste?- interrogué curioso llevando una de mis manos a mi cadera.

Ken:- Ni te imaginas- sonrió alegremente.

 Oh, claro, antes debería explicar el tema de la banda.

 Bueno… hace más o menos… toda la vida, o al menos desde que conozco a Tetsu (hace 13 años, y tengo 18), él sueña con tener su propia banda. Durante un buen tiempo, él y yo nos dedicamos a estudiar música (porque en parte también era mi sueño formar una banda), tiempo en el que Tetsu aprendió a tocar el bajo y yo la guitarra. Cuando Ken se unió a nuestro “círculo de amistad”, comprendí que tocar la guitarra no se me daba tanto como a él, algo que en su momento me frustró y me llevó a abocarme a mi otra pasión, la pintura. Sin embargo Tetsuya seguía insistiendo con la idea de formar nuestra propia banda, y un buen día, se nos ocurrió probar haciendo una canción propia. Tetsu y Ken le pusieron la música, y como yo seguía con esa idea de “soy un inútil que no puede hacer sonar bien un par de cuerdas” decidí componer la letra. Cuando se las presenté terminada, me miraron con sorpresa, incluso cuando le di la última leída yo mismo me sorprendí de ese logro:

Hyde:- Podría ser el Shakespeare de la música- me halagué con presunción aunque a modo de chiste. Bueno, tal vez no tanto.

 Desde ahí decidimos que yo compondría las canciones. Pero faltaba algo muy importante…:

Ken:- ¿Quién cantará?- nos miramos entre los tres.

Tetsu:- ¡Él cantará!-

 Tetsuya me miró y apuntó con su dedo de forma acusadora, casi dándome una orden:

Hyde:- ¿Yo por qué?, siquiera me gusta cantar- me quejé.

Tetsu:- Pero lo haces bien, verás que será divertido, por favor Doiha- me miró con ojos de perrito mojado, que si bien no entiendo del todo a qué hace referencia eso, imagino que un perrito mojado debe verse como Tetsu cuando me suplica que haga algo.

Hyde:- ¿Y cómo sabes que canto bien?-

Tetsu:- Te he escuchado cantar alguna que otra vez cuando practicabas con la guitarra- sonrió felizmente- Así que, ¡está decidido!-

 Y de esa forma, sin que pudiese oponerme… nació L’Arc-en-Ciel.

 Bueno, no fue tan simple como eso pero es más o menos un resumen. Volviendo a lo que nos compete…:

Hyde:- ¿A quién llamaste esta vez?- alcé una ceja expectante y casi con enfado.

 Claro, ya lo recuerdo, de allí salió Kiyoharu. Todo eso de que viviese conmigo surgió porque a Ken se le ocurrió. Decía que de esa forma se afianzaría nuestro lazo de amistad. Amistad mis cojones:

Hyde:- Recuerda que aún sigo compartiendo mi oxígeno con ese desgraciado de Kiyoharu. Y ojalá solo fuese mi oxígeno- rodé los ojos fastidiado diciendo eso último más para mí mismo.

 Antes de que pudiésemos seguir con la charla, sonó la campana que daba inicio a las tortuosas horas de clases:

Tetsu:- En fin, lo hablaremos mejor en la hora del almuerzo. Nos vemos luego Doiha-

Ken:- Hasta luego chibi- pasó a mi lado despeinándome “cariñosamente” y le encajé un golpe en las costillas, también “cariñosamente”.

                                               _____________________________

 En las horas de clases solía distraerme con bastante facilidad. Era cuestión de encontrar cualquier boludez en el lugar o mirar por la ventana no más de cinco segundos y me bastaba para estar disperso por el resto de las cuatro horas.

 Y ahora tenía la distracción perfecta sentada justo a mí lado, y pretendiendo estar concentrado en la clase, te veías más seductor de lo usual. Varias veces te observé de refilón y sé que te percataste de ello, porque en varias ocasiones de esas tantas que te miré tus ojos se cruzaron con los míos. Luego llegaban los días en los que maldecía a todas esas distracciones que se interponían entre mi aprobación en el año y yo.

                                           ________________________

Sakura:- Sabes, no quiero ser antipático pero…a veces me resulta un tanto… incómoda la forma en que me miras durante la clase- reí con ganas ante tu comentario.

 Nos habíamos quedados solos en el salón durante la hora del almuerzo, fue sorprendente como todos se escaparon como cucarachas a punto de ser exterminadas. Te giraste hacia mí con mirada seria y luego dijiste aquello. Debo admitir que cuando te miré creí que me golpearías:

Hyde:- Lo lamento, no es a propósito, es solo que llamas mi atención y no puedo evitar hacer ese tipo de cosas cuando algo me interesa- apoyé mi mejilla sobre mi mano y sonreí cual diva intentando conquistar al mundo con su encantadora sonrisa.

 Debo admitir que aprovechando esa carita de nena que nuestro señor me había brindado como queriendo burlarse de mí y ese cuerpo afeminado que poseía para completar aquél paquete de hombre andrógino, intentaba conseguir todo lo que quería, incluso tener a mis pies a aquellas personas que me interesaban. Tú no eras la excepción. Me miraste entre extrañado y curioso, pero no dijiste nada más al respecto:

Sakura:- En fin, ¿te parece ir a almorzar?, tengo que ir a la azotea pero puedes acompañarme si no te molesta- te levantaste e inmediatamente me diste la espalda, la cual no pude evitar apreciar. Se veía tan ancha y varonil que por un momento me pregunté que se sentiría aferrarse a ella mientras me hicieses el amor y darme el lujo clavar mis uñas en tu piel, dejándote marcado. Reí ante aquel pensamiento bizarro, mi mente siempre me jugaba esas malas pasadas:

Hyde:- También debo ir, mis amigos y yo almorzamos allí-

                                           _______________________________

 Sorpresa fue la mía cuando al abrir la puerta de la azotea, Ken corrió de forma amistosa hacia ti y tomó una de tus manos con inmensa felicidad:

Ken:- ¡Me alegra que hayas aceptado ve-…!- y viró la mirada hacia mí con sorpresa- ¿Chibi?-

Tetsu:- ¿Doiha?- ambos me miraron con sorpresa.

Sakura:- ¿Chibi, Doiha?- está bien, los tres.

Hyde:- Oigan, el que debería estar sorprendido soy yo no ustedes- fruncí el entrecejo- ¿Qué es todo esto?-

 Nos sentamos en el medio de la azotea y escuché toda la explicación. Como siempre, Tetsu debe contar desde los inicios de la humanidad para terminar explicándome por qué rayos estábamos todos juntos en la azotea, algo que se podía haber resumido en dos palabras:

Hyde:- ¿Nuevo baterista?- lo miré casi incrédulo.

Ken:- ¿No es genial?- parecía un niño con juguete nuevo.

Hyde:- Pero… ¿acaso te han escuchado?- asentiste mientras encendías tu cigarrillo con total calma.

Sakura:- Y según dijeron, están conformes- los miraste esperando su aprobación.

Tetsu:- De igual forma, nos gustaría poder verte tocar y de paso, que Doiha también te escuche, ¿no?- asentí sin mucho interés llevando mi vista hacia el cielo.

Ken:- Perfecto, entonces cuando salgamos, ¿qué tal si vamos a mi casa y nos muestras tu talento?-

 Sonreíste con amabilidad y esa tarde, a la salida de la escuela, terminamos en la casa de Ken.

                                                ___________________________

Ken:- Pónganse cómodos, les traeré algo para beber-

Tetsu:- Te ayudo-

 Mientras se escuchaban los ecos de sus voces hablar en la cocina de forma animada, me estiré sobe la cama echándome hacia atrás y cerré los ojos:

Hyde:- Que cansancio- bufé molesto.

Sakura:- Prometo que será rápido y podrás irte cuanto antes- sentí la cama ceder a mi lado percatándome de que te habías sentado junto a mí, recargándote sobre tus brazos apoyados en la cama y tirando tu cabeza hacia atrás.

 El negro azabache de tu cabello se me antojaba hermoso por alguna razón, y no era como si fuese especial porque la mayoría de las personas en Japón tenían el mismo color de cabello. Pero las cosas en ti, incluso las más corrientes, se veían de forma distinta, por alguna extraña razón, adquirían una belleza diferente:

Hyde:- ¿Tienes pareja?- pregunté curioso. Desde mi posición pude apreciar como tus ojos se entornaban en un rictus de sorpresa por mi pregunta.

Sakura:- No, ¿tú?- ladeaste el rostro y nuestras miradas se encontraron.

 Aquel escalofrío que sentí esa primera vez que cruzamos miradas volvió a recorrer mi espina dorsal haciendo que me estremeciera, y de nuevo me asaltaron esos pensamientos bizarros: si con solo mirarme podías hacer que me estremeciera de esa forma, ni imaginar las cosas que me harías sentir si intimáramos. Tal vez por fin podría disfrutar del sexo como es debido:

Hyde:- Debería probarlo…- susurré para mí mismo mientras con mi antebrazo tapaba mis ojos- Perdón… no, no tengo pareja tampoco-

 Kiyoharu se cruzó por mi cabeza fugazmente, pero no, él no era siquiera mi amante, era repugnante pensar en eso. Bufé fastidiado cuando recordé que luego de allí probablemente debería volver a mi casa y aguantar a ese pesado, ¿cuándo podría echarlo apropiadamente?

 Todas las noches me encargaba de acordarme de Ken y toda su familia cuando Kiyoharu se ponía pesado con que quería follar. Después de todo, era culpa de Ken que estuviese viviendo con él:

Tetsu:-Perdonen que tardamos- rio nervioso y nos dio una lata de cerveza a cada uno y se sentaron en el piso.

Ken:- Estaba pensando que…- le dio un sorbo a su bebida- Sería interesante que tocaras un tema nuestro para ver que tan bien quedas con la banda… ¿eh?- nos miró a Tetsu y a mí buscando la aprobación. Ambos asentimos.

Sakura:- Claro, con gusto-

 No era que L’Arc-en-Ciel no me interesara, de hecho, durante los primeros años también fue mi sueño así como el de Tetsu. Pero con todo lo que había pasado y con el hecho de que yo debería dedicarme a cantar y componer, la idea ya no me entusiasmaba mucho. En el fondo había empezado a tomarle el gusto a mi nueva posición en la banda, pero sentía que algo me hacía falta, no me sentía conforme con lo que llevábamos haciendo hasta el momento…

 Sin embargo esa misma tarde, al verte y escucharte tocar la batería, por muy tonto que suene, mi corazón dio un vuelco…:

 Tetsu:- ¿Qué piensan?- se cruzó de brazos y nos preguntó mientras tú seguías tocando para nosotros.

Ken:- Yo mantengo mi palabra, es genial- sonaba muy convencido, y podía comprender por qué.

Tetsu:- ¿Doiha-chan?-

 Ambos me miraron con interés por saber mi opinión. Estaba decidido:

Hyde:- Esto es lo que necesitamos para L’Arc-en-Ciel-

 Una sonrisa se dibujó en mi rostro, en nuestros rostros, decidiendo esa tarde cuál sería la nueva formación de la banda. 

Notas finales:

Gracias por leer ^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).