Konta Omomura… mi apellido no le queda mal ¿pero porque no tiene apellido?, ¿acaso no tiene familia?, tengo tantas preguntas que hacerle, pero debo comenzar con algo sencillo, entonces nos sentamos cada quien en su cama y comenzamos a hablar.
-oye Konta ¿puedo hacerte unas preguntas?
-claro, tu dime- dijo con una sonrisa en su cara, tal vez estaba esperando mis dudas.
-de acuerdo… ¿Qué edad tienes?
-creo que almenos unos 234 años.
-¿¡que!? Imposible- quede asombrado con su edad, ¿acaso es tan viejo?, pero si solo aparenta ser un adolescente.
-jajajajajaja, es broma, en realidad tengo 16.
-idiota, por poco creí que eras matusalén.
-jajajajajaja, no puedo creer que hayas caído en eso, tal vez sea por mis orejas y mi cola.
-hablando de eso ¿Por qué tienes cola y orejas de perro?
- porque soy un Devil Beast.
-¿Devil Beast?, ¿Qué es eso?
-un Devil Beast es un arma viviente creada en el inframundo a partir de la fusión del alma de un humano y un demonio salvaje, son creados para destruir y matar a sangre fría, generalmente siempre vienen acompañados de un “tamer” quien los controla.
-¿¡eres un demonio!?- pregunte muy asustado.
- si y no, veras... poseo las habilidades de un demonio y el cuerpo de un humano, pero en realidad durante la fusión del alma con la criatura hubo un error, mi alma logro resistir la fusión y me quede con los poderes, sin embargo fui declarado como defectuoso así que cualquier otro de mi especie tratara de matarme- parecía muy feliz y orgulloso cuando decía eso, daba algo de miedo, pero aun así su compañía era agradable.
-así que técnicamente sigues siendo humano.
-exacto, pero las armas como las garras de bestia o la espada de ejecutor no son mías, estas las tome “prestadas” del inframundo.
-mejor dicho las robaste.
-algo así jajaja.
Parecía tranquilo y alegre aun cuando sabia que todos querían matarlo, definitivamente no conozco a este tipo de personalidad, pero es muy agradable y generosa.
-otra pregunta, ¿que es un tamer?
-significa domador, ya que somos como bestias ellos son nuestros amos y nos dan ordenes, por ejemplo tu.
-¿yo?- pregunte muy confundido.
-si, ¿no recuerdas las palabras que dijiste ayer?
-ahora que lo mencionas, dije algo así como “te doy mi fuerza a cambio de tu lealtad”.
-ese era el contrato, al decir eso te conviertes en mi tamer, debo admitir que pese a como soy, los Devil Beast necesitamos a un tamer, ellos elevan nuestra fuerza hasta las nubes, aunque claro, esto depende del tamer y de las habilidades del Devil Beast.
-ayer le dijiste a spider que se trago a su tamer, ¿eso no lo hacia mas débil?
-no, porque su tamer aun estaba siendo digerido en su estomago aunque no lo creas, su tamer era un enano, por eso no se notaba, así que la conexión aun seguía en pie, pero su contrato no se acabo debido a que tal vez estaba inconciente y no muerto.
-que asco jajaja, y ¿Cómo acabas un contrato?
-¿a caso quieres dejar de ser mi tamer?
-no, para nada, es solo que tengo curiosidad- por alguna razón eso me hizo sentir algo mal, quizás no quería que el me dejara, porque no sentí miedo, sino preocupación.
-de acuerdo, hay dos formas: la primera es que el tamer del Devil Beast muera y la segunda es lo contrario, que el Devil Beast del tamer muera, ambos anulan el contrato, sin embargo uno de los dos muere.
-ya veo…- dije un poco deprimido, el solo pensar en que yo podía morir, o que incluso el muriera, me hacían sentir algo triste.
-no te preocupes- me tomo los hombros con sus manos y me miro de frente- no pasara nada, ahora que eres mi tamer tu y yo somos aun mas fuertes, nadie podrá vencernos jamás, además no tengas miedo, yo siempre te protegeré.
-gracias… Konta Omomura- dije con un poco mas de animo.
-jajaja, no te hagas tantas ilusiones enano- dijo revolviendo mi cabello, por alguna razón no me molesto esta vez.
Eso que me dijo me subió mucho los ánimos, incluso quería llorar pero contuve mis ganas, tras mucho tiempo de estar solo, por fin alguien me quería, el podría ser un animal, un arma o lo que fuera, pero no era una mala persona, pero no sabia si me decía eso porque yo le agradaba o porque yo era su tamer, no importa cual fuese la razón, no quería destruir esa ilusión.
-oye, ¿quieres ir a la plaza del instituto?, tal vez eso te haga sentir mejor- propuso el orejas de can pelinegro.
-¿acaso no esta destruida?
-mejor la ves por ti mismo- dijo confiado, quizás sabia lo que estaba haciendo.
Así que me cambie de ropa y me puse unos jeans con unas gomas blancas y una franela azul con mangas amarillas, esta era mi vestimenta favorita, que bueno que este instituto permite vestir libremente los fines de semana, por otro lado Konta aún se estaba cambiando apenas se estaba subiendo sus jeans de color negro, creo que se veía un poco tierno con sus boxers azules a pesar de su edad, sobre todo con su linda cola de perro y sus orejas que hacían juego con su cara, ¿¡pero que estoy pensando!?, es un chico, no me puede parecer así, volviendo al tema, se coloco unos jeans negros con una franela de color blanco sobre una camisa verde a cuadros manga corta y unos zapatos converse negros de suela blanca, sin embargo algo me inquietaba, tenia un collar con la mitad de un corazón,¿a caso tenia novia?
-oye Konta, ¿tienes novia?- pregunte algo curioso.
-¿ah?, ya veo, debe ser por mi collar ¿no?, en realidad no tengo novia, este collar lo encontré junto a su otra mitad hace algún tiempo, de hecho esta ahí en una de mis gavetas.
-y si nadie usa la otra mitad, ¿Por qué tu la usas?
-porque espero a esa persona que algún día la usara la otra mitad, no se quien será, pero se que algún día colgara en el cuello de alguien, de esa persona especial para mi.
-ya veo…-de algún modo sentí que mi corazón latía mas rápido de repente, ¿que será esto que siento?
Konta termino de prepararse para salir, y yo seguía sentado en mi cama pensando en muchas cosas, como lo que paso ayer y cuando me levante esta mañana, la forma tan amable con la que me trato.
-de acuerdo, ya estoy listo, vamos a la plaza- tras decir eso fue caminando a la puerta, pero… ¡sus orejas y su cola!, aun puedo verlas.
-¡Konta espera, tus orejas y tu cola aun puedo verlas!
-tranquilo, solo tu puedes verlas.
-¿solo yo?
-ayer cuando tropezamos en el pasillo nadie vio mis orejas, solo aquellos que han estado al borde de la muerte pueden verlas, así como también pueden ver a los Devil Beast, pero como soy un hibrido cualquiera puede verme mas no puede ver mis oreja ni mi cola.
-entiendo.
-oye Takeru, excluyendo el día de ayer ¿alguna vez has estado así de cerca de morir?- pregunto algo preocupado, con su pregunta quede estático, no me moví ni dije nada, quede en shock, pero no iba a desmayarme- lo siento, no debí preguntar eso, olvídalo y salgamos a caminar.
-mi padre…
-¿eh?
-cuando mi padre murió…
Le explique a Konta lo que me paso hace 4 años: cuando tenia 8 años papa fue en su auto a buscarme a la escuela, fuimos directamente a la casa, pero en el camino, sufrimos un accidente, un auto que iba a toda velocidad choco contra nosotros, el accidente fue grabe, el auto que nos embistió estaba vació, como si alguien hubiera querido hacer eso a propósito para matarnos, yo quede en coma y con heridas un poco graves ya que yo estaba en el asiento del copiloto, sin embargo papa resulto gravemente herido, mi coma duro una semana, cuando me desperté, una enfermera fue a verme, me ayudo a levantarme y me trajo de comer, cuando estuvimos hablando, ella me comento sobre mi estado y mis heridas habían sanado gracias a Dios ya que no tenia fracturas, pero durante el tiempo que estuve en coma, nadie vino a visitarme, mucho menos mi madre, cuando le pregunte a la enfermera por papa lo que me dijo fue: “lo siento, pero tu padre no tuvo tanta suerte, al entrar en la sala del quirófano… murió”, no podía creerlo, papa había muerto, era imposible, lo negué muchas veces, pero la enfermera me dijo que esa era la realidad, lo único en lo que podía pensar era que ahora yo estaba solo.
-Takeru… lo lamento, no tenia idea- dijo algo deprimido y con sus orejas de perro hacia abajo.
-esta bien… almenos se que ahora esta en un mejor lugar, además si no fuera por ese accidente no hubiera conocido tu yo real- en realidad, pensar en eso me subió un poco la auto estima.
-créeme una cosa, si descubro quien fue el que les hizo esto, lo matare sin pensarlo dos veces- dijo mientras apretaba sus puños, de algún modo eso me ayudo a sentirme mejor, siento que tal vez si le importo.
-vamos, ya hemos estado aquí un buen rato y ahora quiero caminar un rato.
-de acuerdo.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Entonces fuimos a la plaza del instituto, cuando la vi no podía creerlo, el césped y los árboles no se habían quemado, había personas en los alrededores, y la sangra de Deadly Spider no estaba en el suelo, es como si nada hubiera pasado.
-¿Cómo es posible que esto siga en pie?
-simple, cuando un demonio o un Devil Beast muere, su alma queda flotando, al estrujar el alma de la criatura esta explota irradiando una energía que hace que el campo de batalla en el que esta criatura lucho vuelva a la normalidad, el alma de Deadly Spider fue suficiente para reparar el instituto.
-¿donde aprendiste eso?- pregunte un poco curioso.
-vi como un arcángel acabo con un Devil Beast, todo había quedado destrozado y al hacer eso todo volvió a su estado original, cuando luche contra un Devil Beast al acabarlo intente lo mismo y funciono, ¡zap! Todo volvió a la normalidad.
-wow, eso debe ser asombroso.
-no tanto, la luz que emite la onda expansiva es muy brillante y casi me deja ciego.
-jajajaja, entonces es difícil ¿no?
-jaja, si un poco, pero no debo dejar evidencias de mis batallas.
Estuvimos caminando un buen rato cuando de pronto paso lo impensable, mi amigo rubio Kaito se convirtió en una antorcha de furia, no literalmente, pero venia corriendo hacia nosotros un poco enojado… de acuerdo estaba furioso, llego hacia donde estábamos y tomo un momento para respirar ya que creo que vino corriendo a 120 kilómetros por hora, estaba vestido con unos jean azules, unos tenis blancos y un suéter blanco, tras tomar mucho aire, comenzó a regañarme.
-¿¡¡¡¡donde has estado?, Te he estando buscando por todos lados desde esta mañana!!!!- su grito fue tan fuerte que pensé que iba a lanzar a Konta al espacio jajaja.
-estaba hablando con mi compañero de habitación, te lo presento su nombre es…-me detuve porque estaba mirando a Konta con algo de nervios, ¿¡habrá notado sus oreja y su cola!? Tal vez no, Konta no parece nervioso.
-¿estas bien niño?- pregunto Konta.
En ese mismo instante, Kaito me tomo del brazo y me llevo a otro lugar a toda velocidad, creo que hasta casi me arrastra.
-¡quédate ahí, no tardo!- le grite a Konta mientras el rubio me llevaba a otro lado a la fuerza, la cara de Konta era de mucho asombro.
-¡o… ok!- respondió con su cara de asombro.
Mi amigo rubio me llevo cerca de las mesas donde la gente se reúne a comer y conversar, el se sentó de un lado y yo de otro.
-¿¡tu compañero de habitación es Konta!?- dijo muy sorprendido.
-eh… si, ¿hay algo de malo en eso?
-¿¡malo!? Al contrario, es lo mejor que te puede pasar en la vida- su cara tenia una sonrisa de victoria.
-¿de que me estas hablando?- pregunte algo confuso, en ese momento el bajo su tono y comenzó a hablarme como cuando nos conocimos.
-Konta es uno de los estudiantes mas buscados por las chicas, todas lo aman por su forma de ser y su trato hacia las personas, las chicas de todos los salones hicieron una lista sobre los chicos mas lindos del instituto, y el que estaba en primer lugar era Konta, si nos ven con el las chicas nos caerán como la lluvia, sobre todo por ser su amigo- dijo con una expresión en su cara que me decía “tengo un plan”.
-no lo creo, en realidad el no parece ese tipo de persona- enserio que no lo creo, sobre todo sabiendo lo de sus bromas de mal gusto y el hecho de que me llama enano, aunque creo que si las chicas pudieran verlo como yo lo veo, con su cola y sus orejas tal vez lo tratarían igual que a un perrito muy tierno.
-si no me crees solo mira ahí.
Mire hacia donde Kaito me indicaba y vi a 20 chicas detrás de los arbustos arrimándose unas sobre otras para ver algo, estaban viendo a Konta, y ¿Qué es eso?, una chica se le esta acercando y tiene una carta con forma de corazón, parece ser que quiere declarársele a Konta.
-no te dejes engañar por la escena, mira lo que pasa después- dijo Kaito con un poco de seriedad.
La chica estaba frente a Konta, le entrego la carta, parece un poco nerviosa pero porque debería de estarlo si el es una persona muy amigable, aunque en estos momentos siento que mi corazón acelera su pulso a una velocidad muy rápida a parte de algo de nervios igual que las demás chicas que están observando, aunque algunas de ellas se comen las uñas por la tensión.
-me gustas mucho, desde que te conocí no he podido dejar de verte sin sentir nada, quisiera ser tu novia, estar a tu lado siempre- dijo la chica un poco nerviosa
En ese momento Konta se levanta y le entrega la carta sin siquiera abrirla, ¿Qué estará pensando ese idiota?
-gracias, pero no quiero ser tu novio, no estoy interesado, tu no eres la indicada para mi así como yo no soy el indicado para ti, esto que sientes es una ilusión, no es real, tacha mi nombre y escribe el de otra persona porque ni aunque vuelvas a intentarlo aceptare- dijo Konta muy serio.
La… la rechazo, ¿como es posible que la rechazara de ese modo?, ese no parecía el Konta que vi esta mañana es alguien diferente, las 20 chicas que estaban ocultas tras los arbustos parecían festejar felices pensando en que tendrían una oportunidad, pero la pobre chica que intento declarársele se quedo de pie llorando, en estos momentos los nervios que sentía se fueron y mi corazón volvió a su pulso normal, es como si al igual que esas chicas me… me gustara Konta.
-deberíamos ir con tu amigo a ver que paso- dijo Kaito un poco preocupado.
-de acuerdo- yo también estaba preocupado, por dos cosas, la primera era la forma en como Konta rechazo a esa chica, pero la segunda es que… creo que tengo sentimientos por ese idiota.
Fuimos hacia donde estaba Konta, pero en el camino, la chica que Konta rechazo nos paso por un lado corriendo y llorando, eso me hizo sentir algo triste.
-oye Konta, ¿qué fue todo eso?- pregunte algo nervioso.
-nada, solo era otra chica queriendo mi afecto, eso es todo.
-de acuerdo… ¿no crees que fuiste algo rudo con ella?- pregunto mi amigo rubio.
-no… solo le dije la verdad, cambiando de tema, ¿quieren beber algo?
Kaito y Konta fueron a beber unas latas de refresco, pero antes de seguirlos vi en el suelo la carta de amor que le dio esa chica a Konta, estaba algo sucia, quizás la dejo caer mientras se iba, solo por curiosidad la agarre y la metí en mi bolsillo para leerla después, en ese momento los muchachos me llamaron para darme una lata de refresco, fui hacia donde ellos estaban, pero estaba algo nervioso al ver ese corazón de papel sucio y arrugado… sin amor.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Ya es de noche, me puse mi pijama de color blanco y tengo que dormir, mañana es domingo y Konta y yo iremos con Kaito al estadio de football del instituto, ahora que lo recuerdo en el bolsillo de mi pantalón esta la carta que recogí del suelo, tengo curiosidad por saber que dice, saco de mi pantalón la carta para leerla y lo que dice es algo que de algún modo me hizo sentir que mi corazón acelero su pulso otra vez:
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
“desde la primera vez que te vi, nunca deje de pensar en ti, quise acercarme pero tuve miedo de mi y de mis sentimientos, porque pensé que eran falsos, pero al verte de frente supe que fue amor a primera vista, pero era amor puro y sincero, te amo, quiero estar contigo para siempre, quiero que me ames y que seamos felices juntos”
-Att: Haruni Daisuke.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
No podía creerlo, era amor sincero y el lo rechazo, en ese momento y estaba muy molesto con Konta, en serio es una bestia sin consideración ni sensibilidad hacia las personas, ahora mismo esta entrando a la habitación, parece que trae su ropa sucia la cual pone dentro del cesto, se pone unos shorts azules y apaga las luces para dormir, pero aun así lo sigo mirando con rabia por lo que le hizo a esa chica, ella no tenia la culpa de sentirse así, el se acuesta en su cama y me mira.
-¿porque no dices nada?, te comieron la lengua las arañas- era otro de sus malos chistes, debe ser por la pelea de ayer contra Deadly spider.
-…- me quedo callado pero mi respuesta es simple: mostrarle la carta para avergonzarlo por lo que hizo.
-¿que es eso?- me pregunta con una voz nerviosa.
-¡esto es el corazón de esa pobre chica, el corazón que tu destrozaste, debe ser típico para un Devil Beast hacer eso ¿no?, hacer pedazos los corazones de otros!- le dije muy molesto.
-Takeru…-en ese momento lo interrumpí para leerle la carta que escribió esa pobre chica.
-¡¿tan siquiera te molestaste en leerla?, ¿sabes lo que dice?- leí toda la carta, mientras la leía el trataba de hablar pero no lo deje para que sintiera todo lo que le costo a esa chica escribir esa carta- todo eso era sincero, ¿acaso no lo oíste?!
-Takeru…- volví a interrumpirlo, esta vez me levante de mi cama y me dirigí a la suya mientras lo seguía regañando.
-¡que tal si tu le hicieras una carta a una persona y esta la rechazara, que tal si otra persona te enviara una carta de amor, ¿la rechazarías?, que tal si yo te envió una carta de…!- me quede paralizado al lado de su cama en ese momento, dije algo que nunca debí decir, creo que a la final yo… si siento algo por Konta, no puedo seguir negándolo, pero no se lo puedo decir.
-¿qué ibas a decir?- pregunto Konta algo asombrado, sus orejas de perro estaban levantadas.
-yo…- en ese momento Konta se levanto de su cama y se paro frente a mi colocando su mano en mi hombro y otra en mi pecho, donde esta mi corazón.
-lamento haber sido rudo con esa chica, te prometo que nunca volverá a suceder… parece que tu pulso se elevo mucho, deberías descansar, mañana iremos al estadio de fútbol y debes estar en buena salud, descansa- al terminar de hablar, me dio un abrazo aun con lo que paso, aun así le correspondí su abrazo.
Me acosté en mi cama, pero no pude dejar de pensar en lo que acaba de pasar… Konta.
Creo que no podré dormir esta noche…