El padre asintió con los ojos y una grata sonrisa.
–Muy bien. Les pido que unan sus manos y den sus votos
Yuuki miro a Kaname por unos segundos, al ver que estaba dudoso se acerco rápidamente a el abrazándolo fuertemente acercándose a su oreja para susurrarle.
~Odio decir que te amo~
–Kaname senpai… Este es nuestro día…
–¿?...
~Cuando es tan difícil para mí~
–Deje de pensar en Zero… Debo ser yo su centro de atención…
~Y odio, decir que te deseo~
–¿De qué hablas Yuuki?...
~Cuando dejas claro que tú me deseas a mi~
–Por favor Kaname senpai… No diga que no me quiere, no en este momento. –Le abrazo más fuerte–
~Yo nunca te pediría, porque en el fondo, estoy seguro que se lo que dirás~
–Yuuki...
–Se que ama a Zero, pero hoy no… Hoy debe amarme a mí y solo a mí.
Kaname abrió los ojos sorprendió sintiendo como la castaña le dejo volviendo a su posición anterior.
~Dirás “Lo siento, créeme, te quiero, pero no de ese modo”~
–Yo, a ti Kuran Kaname, te entrego mi voto de amor y confianza.
~Y odio decir que te necesito~
– [Zero… Te necesito….] -Dijo en su mente mientras sus ojos iban mostrando una clara tristeza.
Miro a Yuuki unos segundos para después proceder a dar respuesta a la castaña.
~Soy tan confiado~
~Soy tan dependiente~
~Soy tan estúpido~
–Yo….A ti Yuuki Cross te doy mi voto de amor y confianza…
~Cuando no estás ahí, me encuentro cantando el blues~
~No puedo soportar~
~No puedo afrontar la realidad~
–Que el Señor confirme este consentimiento que han manifestado ante la Iglesia y les de su bendición. Que lo que Dios acaba de unir, no lo separe el hombre. Los declaro marido y mujer.
~Tu nunca, conocerás ese sentimiento~
~Tu nunca, veras con esos ojos~
–Puede besar a la novia.
Kaname se quedo callado por unos minutos.
~Yo nunca te pediría, porque en el fondo estoy seguro que se lo que dirás~
–¿Sucede algo joven Kaname?
~Dirás “Lo siento, créeme, te quiero, pero no de ese modo”~
~Dirás “Lo siento, créeme, te quiero, pero no de ese modo”~
–Sí… –Soltó despacio y lentamente la mano de la castaña para después dedicarle una mirada tranquila y liviana– Lo siento… Yuuki… –Miro a los invitados para después cerrar los ojos volteando nuevamente hacia Yuuki– Te quiero pero no de ese modo…
–Ka-name-senpai…. –Sus ojos comenzaron a ponerse cristalinos mientras bajaba la cabeza pero Kaname la detuvo alzándole del mentón.
–No quiero que bajes la cabeza ante mi u otro hombre… ¿Entendido?
–Pero Kaname senpai yo…
–Amo a Zero…
–Kaname….senpai
En la academia.
Zero se encontraba en su habitación con Shinji el cual le había obligado a colocarse un smoking.
–Vámonos, seguro ya va a terminar la misa.
–Yo iré… Pero no a ver la boda…
–¿De qué hablas?
–Yo… –Apretó sus puños para mirar fijamente a Shinji– ¡Iré por Kaname!
–¿Q-que? N-no qui-quisiste decir ¿Yuuki?
–No… Yo iré por el… Iré por la persona que amo… Tsk, es un idiota pero… Lo amo… Y no se lo dejare fácil a esos estúpidos vampiros del congreso.
Zero tomo su saco y salió de la habitación apresuradamente para así tomar uno de los carros que había afuera quitando al chofer y así irse en dirección a la iglesia.
–¿Ka-kaname? –Dijo estando solo Shinji– ¿He? No, Zero espérame. –Fue a alcanzarlo.
En la iglesia.
–Lo siento Yuuki, no puedes obligarme a sentir algo que jamás podre sentir por ti…
–¿Por qué?
–Porque esa es la verdad… –Le dejo para después voltearse por completo hacia los invitados mirándoles seriamente–
Fuera de la iglesia.
Zero por fin había llegado, lo más rápido que pudo se bajo del automóvil pero Shinji lo alcanzo en la puerta tomándolo del hombro.
–Espera, no puedes.
–No me toques Shinji.
Dentro de la iglesia.
–¡Yo amo a Zero! –Grito para que todos lo oyeran, era lo suficientemente fuerte como para que también se oyera fuera de la iglesia.
Fuera de la iglesia.
–Kaname… –Abrió los ojos de par en par el peli plata.
–Kaname. –Parpadeo Shinji.
Dentro de la iglesia.
– Asato Ichijou… Mika Mikaze…. Rido Kuran… Midori Shiki… Kaien Cross… Y a todos los presentes, lo lamento, pero no puedo casarme con Yuuki Cross, yo amo Kiryuu Zero y si con alguien llegare al altar un día… Sera con el…
–Kaname… –Sorprendido Kaien miro a los demás, al ver que nadie decía nada se paro y fue con aquel castaño, al llegar se paró a su lado quitándose los lentes– Apoyo la decisión de Kaname…
–¿Cross san? –El castaño le miro sorprendido, el director solo le respondió con una sonrisa.
–Pff…. Lo que faltaba, mi sobrino se enamoro de alguien de la familia de cazadores y tenía que ser los Kiryuu… Jajaja. –Rido se echo a reír pero en eso Midori le pego en los bajos, aquel se los agarro con un gesto de dolor, la pelirroja procedió a levantarse y dirigirse al pura sangre frente a frente.
–Sí hubiera sabido que tu boda era obligatoria no me hubiera presentado... Es bueno debes en cuando romper las tradiciones de los pura sangre al tener que casarse con algún familiar forzosamente…
–Midori sama… –Sorprendió Kaname no supo que decir.
–En verdad… –Sonrío tiernamente la pelirroja– Te deseo lo mejor, ahora ve con él, y díselo.
–¡Awww! Qué lindo, jamás se había revelado un sangre pura con tanta sinceridad y romanticismo –Dijo mika muy emocionada para después abrazarse ella misma.
–Mika compórtate. –Menciono Asato para después mirar a Kaname y cerrar los ojos– Bien… No puedo contradecirte siendo de la familia Kuran… Solo te diré que… –Abrió los ojos– No estoy conforme con esta decisión pero la acepto.
–Les agradezco mucho que aceptaran mi decisión…
–Tchu, que par de mocosos. –Miro a otro lado Rido.
Kaname esbozo una sonrisa para proceder a dar paso a la salida pero Yuuki le detuvo.
–Kaname senpai… –Se acerco tomando su diestra para quitarle en aniño el cual luego se lo puso en su mano– No lo tengas puesto todavía… ¿Entiendo? –Comenzó a llorar como anterior mente lo hizo, pero ahora de un modo feliz.
–Yuuki… Entiendo. –Sonrió para después soltarle y abrir la puerta cerrándola.
Kaname iba a tomar la limosina pero en eso vio a Zero recargado en el automóvil donde había llegado y por su parte a Shinji parado a un lado.
–Zero… ¿En verdad eres?…
No pudo continuar pues Zero lo vio y rápidamente se iba a ir pero Shinji le detuvo poniéndose frente a él.
–Lo siento, no puedes dejar a mi hermano así.
–Tsk, quítat…
Kaname lo interrumpió tomándolo del brazo y llevándolo hasta la parte trasera de la limosina, abrió la puerta y lo aventó dentro, se dirigió al copiloto sacando al chofer para después subir y arrancar.
–Aah... Me dejaron solito. –Se rasco la cabeza Shinji.
–¡Kaname! ¡Detén el auto!
Kaname no le respondió y siguió conduciendo hasta llegar a la academia, al llegar se salió cerrando la puerta dirigiéndose a las puertas de la academia abriéndolas, volvió y se introdujo nuevamente al carro conduciéndolo dentro, automáticamente las puertas de la academia se cerraron, siguió hasta llegar frente a los dormitorios nocturnos donde se detuvo.
–Tsk… Me largo.
El peli plata se salió del carro e igualmente el castaño el cual no le permitió avanzar interponiéndose en el camino.