Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Conociendo a papá por Kaoru Himura

[Reviews - 149]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 


Habían pasado tres días desde que Naruto se instaló en la casa de Sasuke y la convivencia no estaba resultando pacífica. La primera noche, ambos adultos estuvieron discutiendo sobre con quién dormiría la pelirroja, pues a Sasuke no le parecía correcto que una niña durmiese con un adulto que no era ningún familiar, aunque la verdadera razón es que se había acostumbrado a que Kaoru se colase en su dormitorio para dormir con él y le abrazase, a pesar de que al final acababa arrinconándole en un pequeño lado de la cama, pero jamás lo admitiría delante de Naruto.


 


Éste por su parte le había dicho que siempre dormían juntos y Sasuke puso el grito en el cielo al enterarse. Kaoru propuso que durmieran los tres juntos pero ninguno de los mayores accedió a ello y al final decidieron que se turnarían cada noche.


 


Tras esa noche, las cosas no fueron a mejor, Naruto y Sasuke discutían sobre cualquier nimiedad, pero a la pequeña no le preocupaba, esas peleas no eran en serio como cuando se reencontraron y sabía que era su forma de comunicarse, además cuando el otro no le estaba mirando, sonreían con complicidad.


 


En la aldea, ya se habían enterado de la vuelta del ninja número uno en sorprender a la gente. En cuanto habían localizado a Bee para ponerle al corriente de las últimas decisiones, incluso la de que se tenía que buscar un lugar donde hospedarse, fueron a ver a Kakashi. Pronto la noticia corrió como la pólvora y todos los amigos del rubio fueron a verle y, aunque todos se alegraron de su vuelta, también le regañaron por haber tardado tanto tiempo en volver.


 


Hoy habían acordado reunirse todos en casa de Shikamaru para pasar un rato juntos recordando viejos tiempos y divertirse.


 


 - ¡Kaoru! ¡Deja de engullir como un animal y come como las personas civilizadas! - le regañó Sasuke


 - ¡Deja de decirle cómo debe comer, teme! - la defendió Naruto.


 - ¡Ya sé de quién ha aprendido a no tener modales! - insinuó el moreno - ¡¿Se puede saber qué clase de educación le has dado a mi hija, dobe?!


 - ¡La mejor de todas, bastardo! ¡Mejor que sea así a que se parezca a un amargado como tú! - siguió con la discusión el rubio.


 - Uchiha, no te atrevas a darnos lecciones, al menos nosotros hemos estado ahí para ella, tú no – intervino Killer Bee creando un ambiente tenso.


 


Bee y Sasuke se lanzaban miradas de odio, no se llevaban nada bien desde que Sasuke intentó asesinarlo pero lo que más odiaba Bee de Sasuke, era el hecho de que Kaoru tuvo que criarse sin él por culpa de sus irresponsabilidades.


 


 - Oe, oe, estamos aquí para pasárnoslo bien y no para pelear – interrumpió Shikamaru.


 - Es cierto. ¡Comamos y bebamos hasta que no podamos más! - gritó entusiasmado Kiba alzando una jarra de cerveza y derramando parte del contenido sobre el suelo.


 - ¡Ten más cuidado, idiota! - le reprendió Temari.


 


La ninja le lanzó un trapo de forma violenta que se estampó contra su cara haciendo que se cayese hacia atrás y todos comenzaron a reírse. Kaoru se aproximó hasta donde se hallaban los adultos y se acercó a Bee.


 


 - ¡Tío Bee! Ven, enséñales cómo se rapea – dijo arrastrando a su tío donde se encontraban algunos de los hijos de los ninjas presentes en la fiesta.


 


Killer Bee empezó con sus rimas deslumbrando a gran parte de los pequeños mientras que Kaoru hacía poses y gestos de rapero. Los adultos miraban el espectáculo divertidos y Naruto observaba a la pequeña con gran ternura.


 


 - Se parece mucho a ti.


 - ¿Qué? - se sobresaltó Naruto al oír una voz muy cerca de él.


 - Se nota que la has estado cuidando desde hace bastante tiempo – dijo Gaara a su lado.


 - Sí, así es y no me arrepiento de haberlo hecho – le comentó con una sonrisa en la boca.


 


Naruto analizó detenidamente a su amigo centrándose en su cabello.


 


 - Deberías cortarte el pelo, no me gusta nada cómo lo llevas, antes parecías más duro – le sugirió el rubio.


 - No eres la primera persona que me lo dice, Kaoru opina lo mismo que tú – le reveló el pelirrojo.


 


El rubio no pudo aguantarse la risa al saber que la pequeña también se había metido con su peinado.


 


 - Las grandes mentes piensan igual – le contestó aún riéndose - Espero que Bee no os esté dando mucho trabajo quedándose aquí con vosotros – cambió de tema cuando vio la cara de fastidio del Kazekage.


 - No te preocupes, no es ninguna molestia, ha estado ayudando mucho en los temas del hogar – intervino Temari – pero me sorprendió que nos pidiese quedarse aquí, supongo que era porque estaba Gaara. Los jinchûrikis tenéis una conexión especial entre vosotros.


 


Naruto y el Kazekage se miraron por unos segundos y sonrieron con complicidad.


 


 - Sí, nos entendemos entre nosotros y compartimos muchos sentimientos – argumentó Naruto.


 


 


La fiesta continuó entre risas, gritos, canciones y mucha diversión hasta pasada la medianoche. Muchos de los invitados comenzaron a marcharse con sus parejas e hijos, muchos de los cuales se había quedado dormidos en los brazos de sus padres. También era el caso de la pelirroja, que tenía la cabeza apoyada en una de las piernas de Gaara y descansaba tranquilamente.


 


Naruto se levantó comenzando a recoger todos los desperdicios y platos sucios para llevarlos a la cocina siendo imitado por Sasuke. En ella se encontraban Killer Bee y Temari que estaban limpiando y guardando las sobras.


 


 - No hacía falta que os molestarais, chicos. Sois los invitados – dijo apenada la rubia.


 - No nos supone ningún esfuerzo, queremos ayudar – le replicó Naruto.


 - De acuerdo, ahí puedes tirar la basura y allí está el fregadero – señaló los diferentes lugares – Bee, acompáñame a seguir recogiendo.


 


Éste le lanzó una mirada de advertencia a Sasuke y fue arrastrado por Temari hacia el exterior. Naruto comenzó a fregar en silencio mientras el moreno se dedicaba a tirar los desperdicios al cubo de la basura.


 


 - Extrañaba este tipo de reuniones, echaba de menos estar con todos juntos pasando un rato divertido – comentó el rubio con nostalgia.


 - Humf... - fue toda la respuesta que recibió por parte de Sasuke.


 


Naruto notó que algo raro le pasaba a su amigo, así que decidió preguntárselo.


 


 - ¿Pasa algo?


 


Sasuke no le contestó, terminó con lo que estaba haciendo y se giró para mirar pensativo cómo el rubio seguía con sus quehaceres.


 


 - ¿En qué piensas, teme? - preguntó Naruto.


 - En que te he echado mucho de menos y... - hizo una pausa aproximándose al rubio.


 


Éste se tensó al sentir al moreno tan cerca de él, dejó de fregar e intentó alejarse de él pero Sasuke le detuvo agarrándole de la muñeca.


 


 - …en que estás mucho más atractivo – dijo rozando la mejilla del rubio con su mano libre y delineando sus labios con su pulgar.


 


Naruto se quedó paralizado momentáneamente pero frunció el ceño y apartó de un puñetazo a Sasuke tirándolo al suelo.


 


 - Deberías mirarme bien y darte cuenta de que no tengo curvas así que no me confundas con una de tus tantas amantes porque no me parezco en nada a ellas.


 


Dicho esto, salió muy cabreado de la cocina y se encaminó hacia el salón con los demás dejando a Sasuke en el suelo limpiándose el rastro de sangre de la comisura de sus labios.


 


 - Mierda... - maldijo golpeando uno de los muebles con el puño.


 


 


Naruto llegó al salón intentando ocultar lo alterado que se encontraba pero Bee se acercó rápidamente al darse cuenta de su estado. Se alejaron un poco para tener algo de intimidad y que nadie escuchase su conversación.


 


 - ¿Qué te ocurre? - le interrogó preocupado.


 - Nada, estoy bien, no te preocupes – contestó forzando una sonrisa.


 - A mí no me la intentes colar, Naruto, te conozco demasiado. ¿Te ha dicho algo ese imbécil?


 


El rubio se mordió el labio y desvió la mirada.


 


 - Voy a partirle la cara.


 - Déjalo, no tiene importancia – dijo deteniendo a su amigo por el brazo – además ya se la he partido yo – dijo con una sonrisa de triunfo.


 


Bee se relajó y sonrió al ver que Naruto se había tranquilizado.


 


 - Sabes que nunca me ha caído bien y que nunca quise que Kao se enterase de que era su padre porque es un irresponsable que no se la merece – dijo con tono serio – si intenta arrebatárnosla, juro que lo mataré.


 - Tranquilo, eso no pasará, por muy inconsciente que sea a veces, sabes que nosotros somos su familia y no tratará de alejarnos de ella.


 


Ambos centraron su mirada en la pequeña que seguía dormida apoyada en Gaara.


 


 - Parece que le cae bien – comentó Bee.


 - Sí, eso parece – dijo sonriendo – siempre ha tenido un cariño especial a los bijûs y a los jinchûrikis. Shukaku es uno con los que mejor se lleva, después de Kurama y Gyûki.


 


Kaoru abrió de repente sus ojos asustada y se levantó rápidamente llamando la atención de los presentes. Se había quedado mirando hacia la puerta que daba a la entrada y temblando ligeramente. Naruto se iba a acercar para averiguar qué le ocurría pero la voz enfadada de la pequeña se lo impidió.


 


 - ¡¿Le habéis dicho dónde estamos?! - gritó alterada.


 - Kao, ¿de qué estás hablando? - preguntó Naruto con un tono suave intentando tranquilizarla.


 


Sasuke fue al salón atraído por el grito de su hija. La niña se había girado para encarar a sus familiares.


 


 - ¡No deberíais haberle avisado! - acusó a Naruto y a Bee con rabia.


 


Ambos se miraron confusos, no entendían qué es lo que le ocurría a la pelirroja. De repente, Shikamaru entró por la puerta acompañado por un hombre de pelo oscuro, ojos claros y de más o menos de la misma edad que los presentes.


 


 - Oe, Naruto, te buscan – dijo el ninja señalando al desconocido – Kakashi me ha mandado a por él, había estado preguntando por ti en toda la aldea.


 - ¿Sôjirô? - preguntó el rubio sorprendido - ¿Qué haces aquí?


 


El hombre se aproximó hasta quedar cerca de la pelirroja que le miraba con odio.


 


 - Leí la nota que me dejaste avisándome de que venías a Konoha a por Kao y decidí venir a ayudaros – dijo acariciando la cabeza de la pequeña.


 - No me llames Kao, tú no puedes llamarme así – le contestó apartando bruscamente la mano que tocaba su cabello.


 - ¡Kao! - la regañó Naruto.


 - No pasa nada, Naruto – dijo Sôjirô.


 


Toda la escena era observada por Sasuke que no sabía quién era ese hombre ni de qué conocía a Naruto pero no le daba una buena sensación. No le gustaba el tono ni la confianza con el que hablaba al rubio ni cómo trataba a su hija. Al menos, la pelirroja parecía sentir lo mismo que él, se notaba que odiaba a ese tipo.


 


 - No hacía falta que vinieses, te dije que volveríamos pronto - argumentó Naruto.


 - Pero es que tenía ganas de estar con mi novio – dijo Sôjirô acercándose hasta Naruto y agarrándole de la cintura.


 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).