Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Caprichos por kelpieax

[Reviews - 57]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo 9 Desconfianza

Al llegar a sus habitaciones el duque despidió amablemente a su guía diciéndole que no necesitarían de ninguna clase de servicio por las siguientes tres horas e hizo una liguera señal hacia sus acompañantes para que se reunieran con él lo más pronto posible.

Pasaron solamente diez minutos para que Kiba y Shino estuvieran en su habitación.

-Y ¿qué opinan?

-No creo que haya nada extraño, sólo son dos familias tratando de aumentar su poder, pero no parece haber ninguna amenaza en contra de la reina.-habló Shino quien más que sirviente y consejero era un verdadero amigo para ambos, su familia tenía varios años trabajando para la familia Inuzuka pero desde que el pequeño Kiba había comenzado a visitar los corredores del palacio había sido su fiel acompañante y cuando conocieron al menor de los Sabakuno simplemente tuvo que ejercer su papel como la voz de la sensatez en cada aventura emprendida.

-Sin embargo no me agrada. El vizconde me parece un tipo arrogante y prepotente no me parece que sea el hombre adecuado para la joven Hinata.

-Tú dices eso porque te gusto la chica.- respondió el Duque.

-Bueno claro ella es muy hermosa habría que estar ciego para no notarlo pero más allá de eso el sujeto no me agrada Akamaru le gruño bajo aun a distancia y lo mismo puedo decir del tal Neji.

-¿Tú qué opinas Shino?

-A pesar de lo comprometida que pueda estar la opinión de Kiba debido al impacto amoroso sufrido, creo que en eso tiene razón, esos dos sujetos parecen ser bastante imbéciles. No creo que vaya más alla de hacerles la vida imposible a sus sirvientes, insisto en que no creo que ninguno planeé nada en contra del estado, pero si quieres asegurarte del bienestar de los habitantes de la región podrías vigilarlos unos días.

-Supongo que tienen razón. Nos quedaremos un par de días más de lo acordado. Shino por favor avisale a mi hermano de nuestros nuevos planes, y claro si de paso puedes conseguir mayor información de nuestros anfitriones.

-Así será señor con permiso.- se despidió estoico como siempre, era extraño que sus amigos fueran tan distintos entre sí, mientras Shino era todo silenció y practicidad Kiba por otra parte.

-Yo saldré a divertirme, no hay nada como unos sirvientes cansados y alcoholizados para conocer los sucios secretos de sus amos.

-Claro que sería muy buen plan sino fuera porque ningún sirviente se pondrá a beber con un marqués de una región lejana.

-Eso déjaselo a mi encanto natural. – Sonrió a punto de salir cuando el pelirrojo le llamó.

-Por cierto ¿en dónde dejaste a Akamaru?

-Ya lo conoces debe estar vagando por ahí.

-¿¡Lo dejaste libre!?

-No te preocupes no causara ningún problema.

-Más te vale que así sea.

-Confía en mí. –Sé despidió su amigo con su típica sonrisa de autoconfianza.


A pesar de ello el Duque no estaba dispuesto a dejar sin vigilancia a la mascota, sabía que aunque Akamaru era mucho más manso de lo que aparentaba quería estar seguro de que no causaría problemas, además que quería investigar por su propia cuenta, por lo que salió de su habitación a deambular por ahí pensó que efectivamente Kiba tenía razón y no había mejor método que escuchar las conversaciones de los sirvientes para averiguar los oscuros secretos del lugar. Claro que a diferencia de su amigo quien confiaba en su propio encanto para acercarse a los demás él prefería las sombras. Escuchar desde algún rincón escondido pasando desapercibido era uno de sus talentos.

Camino por la habitación de la prometida, en donde escuchó como ella misma confesaba a la que probablemente sería su dama de compañía cuan nerviosa estaba con el anuncio del compromiso. Claro que eso bien podría no significar nada, después de todo que novia no se ponía nerviosa ante la boda. Luego fue hacia las cocinas en donde no vio nada extraño, claro había mucha agitación pero eso era normal ante un banquete como el que se daría aquella noche, por ultimó decidió salir del palacio buscaría a la mascota de su amigo y aprovecharía para ver a sus queridos caballos.

Llegó a las caballerizas sin encontrar al mitad lobo por ahí, claro si Akamaru no deseaba ser visto podía competir con él en cuanto anonimato.

Entró a las caballerizas en dónde vio muy a gusto a sus caballos siendo consentidos por el chico de cabellos negros que los había recibido, el muchacho cepillaba a su Yegua mientras Shukaku llamaba su atención relinchando levemente mientras acercaba su rostro.

-Sabe señorita creo que impresionó a cierto galán de por aquí, le diré que aunque tiene fama de conquistador parece ser que usted lo pones nervioso. Calma Kaku ya voy contigo sonrió al caballo de al lado. – He calma ¿Qué pasa Arena?

-¿Kaku?

-Señor, lo siento no lo vi entrar.

-No tienes porque disculparte.- habló acercándose a la yegua acariciando su rostro calmándola completamente.

-Vaya que te quiere.

Gaara miró hacia él serió y tras unos segundos de silencio el pelinegro se puso nervioso.

-Lo siento señor, no debí hablarle de manera tan familiar. Lo que pasa es que cuando veo a alguien tan amigable con mis amigos me olvido a veces de mi posición.

-¿Tus amigos?

-Pues sí, vera señor desde muy pequeño me he dedicado a este trabajo, mi padre me enseño el oficio y cuando él murió se convirtió en el mío, así que he crecido junto a estos hermosos animales y a veces me parece entenderlos mejor que a las personas.

-Creo que comprendo.

-Por eso puedo decir sin miedo a equivocarme que esta muchachita lo quiere de verdad señor, estoy segura que debe ser muy sobre protectora con usted. ¿Por eso quería que alguno de sus acompañantes los trajeran? Le aseguro que no tiene de que preocuparse cuidaré muy bien de ellos.

-Creo que así será.- afirmo viendo esos firmes ojos negros el chico era extraño era un poco más alto que él lo cual no era tan peculiar, lo que le extrañaba era que normalmente la gente “común” bajaba la mirada ante él. Y no recordaba una conversación tan amena con nadie que no fuera de la nobleza y quisiera obtener algún benefició a través de si intervención. –Pero a un no me has respondido ¿Kaku?

-Je bueno es que creo que le queda bien.

-¿Y por qué estás haciendo de celestina con mi yegua?

-Señor no es como si ya los hubiera dejado en el mismo corral, además, si tuvieran un potrillo podría llamarse tormenta de arena, lo cual suena increíble.

-Increíble o no, no quiero arreglos de ningún tipo sin que sea consultado.- sonrió de medio lado el hermano pequeño de la reina.

CONTINUARA………
Notas finales: Les agradezco a todas las que me han comentado en verdad lo aprecio. Aunque a veces me tarde procuro contestarles así que por favor síganme regalando sus reviews.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).