Me quedé estupefacto después de haber escuchado la petición del gran Sasuke Uchiha. No entiendo porque él quiere mi ayuda, la ayuda de alguien que posee un conocimiento nulo para atraer mujeres. Lo único que él necesita hacer es pedirles que sean parejas y ellas, inmediatamente, caerán a sus pies. Además, estamos hablando de Sakura san, la mujer que más lo ha amado y que es capaz de perdonarle absolutamente todo gracias a ese "amor". Así que no comprendo porque necesita mi ayuda. No estaba seguro de haber tomado la decisión correcta al haber caído en el chantaje del Uchiha, algo me decía que él tenía una razón oculta para pedirme semejante cosa, como me gustaría que Neji estuviera vivo, si él estuviera aquí vería a través de las acciones de Sasuke, después de todo era un genio. Ahora, la única persona que podría ayudarme a esclarecer la verdadera razón de que Sasuke actuará de semejante manera era Gai sensei.
Cuando me dirigía a la casa de Gai sensei apareció en frente mío una nube de humo e, inmediatamente después la única persona que era capaz de hacer semejante técnica, Kakashi sensei. —Te esperan en la torre hokage — Solo asentí y pase a lado del peliplateado y cuando estuvimos a la misma altura alcance a escucharlo —¡Suerte!— No entendía la causa que le hacía decirme esas palabras, sin embargo estaba seguro que muy pronto lo averiguaría. Me quedé atónito por unos instantes y después continúe mi camino hacía la torre hokage. Estaba seguro que Naruto me iba encomendar alguna misión de un rango elevado, después de todo él era de las pocas personas que habían reconocido que yo era un auténtico ninja con solo taijutsu. Aunque todavía estaba confundido con el "mandato" que ese engreído me había hecho, estaba aliviado de que el hokage por fin me diera una misión y mi mayor deseo es que fuera lejos de Konoha, lejos de Sakura y, por supuesto, lejos de Sasuke, ese vengador mala leche.
Cuando llegue a la torre hokage, Naruto levanto su cabeza y dirigio su mirada hacía mí. Él permaneció sentado y yo estaba al otro lado de su escritorio, esperando que hablará. Se aclaró su voz y comenzo a hablar — Me han llegado rumores de que Gaara está en peligro. Al parecer los familiares de las personas que mato cuando estaba lleno de odio y pensaba que lo único que podría reafirmar su existencia era matar y así, poder demostrar que es el más fuerte — Asentí, después de todo yo había vivido en carne propia el gran resentimiento que Gaara experimentó en esa época y gracias a eso viví el peor momento de mi vida cuando Tsunade sama me dijo que tenía que dejar de ser shinobi. Naruto me saco de mis pensamientos cuando volvió a hablar
— Sé que, probablemente, no te agrade la misión que te voy a dar porque él, una vez, te lastimo y por su culpa casi dejas de ser un ninja. Sin embargo, eres el único que puede llevar a cabo esta misión. Necesito que vayas a la aldea de la arena y protejas a Gaara de los ninjas que quieren asesinarlo por algo que sucedió hace tanto tiempo — Todo lo que el hokage decía era verdad; sin embargo, no le guardo ningún rencor al kazekage después de todo también fue gracias a él que yo pude sobrevivir. Él me había salvado cuando yo me empeñe en luchar contra Kimimaro cuando aun me estaba sobreponiendo a mi operación y le conteste — Es verdad lo que dices Naruto, mas no odio a Gaara. Es más yo lo admiro y si yo estoy aquí ahora también es gracias a él — Naruto se veía sorprendido ante mis palabras, pero esos eran mis sentimientos. Naruto iba a decir algo, pero fue interrumpido por el ruido del pomo abriéndose y me mostro una sonrisa con todos sus dientes. No me dio tiempo de voltear porque Naruto volvió a hablar — Me alegra oírte decir eso. Eres noble y, precisamente, acaban de llegar tus compañeros de equipo: Sakura y Sasuke — Solo sentí como mi mandíbula caía hasta abajo y por un momento me quede sin habla. El hokage se dio cuenta de mi sorpresa y me dijo — No puedo dejarte ir solo en esta misión. Ten Ten está cuidando estos días de Gai sensei y quien mejor que mis compañeros de equipo para acompañarte. Mañana partirán a primera hora. Pueden irse — Quería objetar, pero que le iba a decir al hokage, que Sasuke me perturbaba. Lo viera por donde lo viera, no tenía otra opción más que quedarme callado e ir a esa misión.
Salí de la oficina del hokage y cuando creí que ya podría ir a visitar a Gai sensei, escuche su voz. Él estaba atrás de mí — Al parecer, pasaremos mucho tiempo juntos. Espero que mañana ya tengas preparada la primera carta que le daré a Sakura. Se la obsequiaré durante el transcurso del día. Nos vemos mañana, Rock Lee y más te vale llegar antes que Sakura — Al parecer, mi visita a Gai sensei tendría que esperar porque solo faltaban unas 6 horas para el anochecer y yo tenía que preparar mis armas para ir preparado a la misión y también tenía que escribirle esa carta de amor a Sakura. Sé que, a lo mejor, estoy cometiendo un grave error al hacer lo que este tipo dice, pero solo podre averiguar sus verdaderas intenciones si le sigo la corriente. Además, no estoy haciendo nada malo, solo estoy protegiendo mi secreto. Mi amor por Sakura, ella cree que lo he superado y así quiero que siga pensando.
Después de arreglar mis cosas me senté en una mesa, dispuesto a escribir mas no se me ocurría nada; es decir, entiendo mis sentimientos, pero ¿Cómo podría plasmarlos haciéndolos pasar por los de él? Y posteriormente, opte por solo reflejar mis sentimientos y no tratar de ponerme en los zapatos de Sasuke. Y eso facilito mi trabajo y comencé a escribir. Al principio no me complacía lo escrito, pensé que Sakura san pronto averiguaría que no la había escrito Sasuke, después de todo era inteligente. La corregí varias veces y esto es lo que resulto, todavía me preocupaba que descubriera que la escribí yo, pero, muy a mi pesar, Sasuke también era inteligente y calculador. Sabría convencer a Sakura y, en su defecto, la manipularía bastante bien.
Sakura, tu nombre significa flor de cerezo. En la flor de mi juventud cometí errores irremediables cegado por el resentimiento y todo lo hacía por venganza. Sin embargo, ahora, la flor del amor se ha abierto en mi corazón, un corazón que ahora late por tí, un corazón que te anhela, el mismo que hoy te entrego por medio de esta hoja de papel y que si se pudiera materializar, el sonido de mis latidos susurrarían tu nombre y solo tu nombre.
Atentamente: Sasuke kun, tu Sasuke kun.
PD.- Siempre tuyo.
En el barrio de los Uchiha, Sasuke había insistido en seguir viviendo en la casa que había abandonado cuando se fue con Orochimaru, para conseguir poder. Se arrepentía de ello, lo que en ese entonces vio como algo justo, hoy sabía que había hecho mal. Su hermano no fue ni será nunca un traidor, solo protegía lo que creía y eso solo era digno de admiración y nada más. Ya había terminado de guardar su equipo para la misión de mañana y lo único que ocupaba su mente era lo que sucedió cuando fue a dar su reporte a Naruto.
FLASHBACK
Antes de entrar a la oficina, Sasuke escucho conversar a Shikamaru y a Naruto, hablaban de que Gaara había pedido que le proporcionen a Rock Lee como guardaespaldas. Cuando Sasuke escucho eso, apretó su puño y susurro para sí mismo —¿Qué es lo que ese mapache pretende?—
Siguiendo sus instintos, Sasuke entro en la oficina y fue entonces que tanto Shikamaru como Naruto lo vieron. Sasuke hablo — No puedes enviar solo a Gaara, también iremos Sakura y yo. Acepta mi petición, porque si algo le pasa al amado alumno de Gai sensei, te arrepentirás toda la vida — Era la primera vez que Sasuke hablaba tanto, tanta fue la sorpresa de Naruto que solo asintio y acepto la petición de Sasuke —
FIN FLASHBACK
Observaba por la ventana, mientras cerraba su puño — No sé lo que pretendes, kazekage, pero me asegurare de no dejarte ni un minuto a solas con Rock Lee. No sé cómo sucedió, pero pienso protegerlo. Tal vez sea porque se parece a lo que una vez perdí —
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