Capítulo 7 Un perdón y un beso
POV Grell
William estaba caminando, no tengo ni la menor idea de a dónde vamos o que es lo que aremos, aunque – jugar – un poco no me molestaría.
– William, ¿A dónde vamos? – le pregunte, con tuno de voz serio y frio como el de el
– a mi oficina – me dijo William
El despacho de los shinigamis es enorme, desde donde estábamos a la oficina de William son al menos 25 minutos y peor aún, no tengo ni la menor idea de que decir. La atmosfera era horrible y William al no decir nada la hacía peor
Pasaron 25 minutos y ninguno de los dos dijo nada, hasta que llegamos a la oficina de William. William no había cambiado nada de lugar, la oficina esta tal y como cuando me fui…
– no has cambiado nada de lugar ¿verdad? – le dije como broma
– no quise cambiar nada de lugar, ya que mi oficina me recuerda a t…– William se detuvo como si no quisiera que escuchara el resto de la oración, aunque era más que obvio que iba a decir que le recordaba a mi
– te recuerda a mí ¿no es así? – le dije con una sonrisa de felicidad
– yo no dije eso – me respondió – aunque no estás en lo incorrecto –
– ahora estoy muy feliz– dije sin pensar, o más bien pensé en voz alta
– tengo que pedirte algo – me dijo William
– no llevo ni dos días aquí y ya quieres algo, eres de lo p…– antes de que pudiera seguir William me interrumpió
– quiero pedirte que regreses a Londres – me dijo William, yo me sorprendí, pero también me sentí muy feliz
– yo…– no sé qué hace, no que hace, no sé qué hace… quiero quedarme con William, pero tengo miedo de que William consiga a alguien mas, aunque la carta decía algo muy diferente, pero aun tengo miedo…
– no tienes que responderme ahora…– me dijo William bajando la mirada. Él nunca había hecho eso – qué bueno que estés aquí, te extrañe mucho –
Ahora quiero besarlo, aunque se siente extraño que William hable de ese modo es como si no fuera el mismo, talvez cambio en el tiempo que yo no estuve aquí.
– William… si me quedo aquí ¿Qué crees que pasaría? Tú dices que soy un escándalo andante – le dije para ver qué era lo que me decía
– ya me había decidido que cuando hablara contigo dejaría de lado mi frialdad…– no entendí muy bien eso – la verdad es que me haces falta Grell–
Escuche mal, yo lo se escuche mal, William nunca diría algo como eso, es imposible. William dijo que me extrañaba, es lo más extraño y lindo que William me pudiera decir, sin dudas quiero besarlo
– tú no eres William, yo lo sé, William jamás diría algo así, es imposible. Mi William nunca me diría eso. Mientras éramos pareja nunca me dijo algo lindo, bueno lo hizo 2 veces, pero porque yo lo obligue – le dije yo, ya que en verdad era imposible que el William que yo conozco dijera algo como eso
– Lo que ocurre es que cuando tú no estabas me di cuenta de que… sin ti me deprimo mucho, antes te regañaba cada 10 minutos, pero me sentía muy feliz al hacerlo no me preguntes, porque la verdad no sé porque – me dijo William
– quiero besarte…– dije y luego me cubrí la boca – ¿dije eso en voz alta? –
– si, lo dijiste en voz alta – me dijo William mientras se acercaba a mi – yo también quiero besarte –
William me sujeto por la cintura y como era obvio me beso. Extrañaba los labios de William, bese a muchos otro hombres, pero ninguno es capaz de besar de la forma en la que él lo hace.
El beso duro varios minutos, la única razón por la que nos separamos fue porque alguien llamo a la puerta
– señor Spears, algunos de los empleados de gestión y reparto quieren discutir algo con usted – dijo la secretaria de William, al parecer ella tampoco ha cambiado, siempre aparece en el momento menos oportuno
– tengo que irme – me dijo William mientras caminaba a la salida – si quieres puedes quedarte en mi casa –
– ¿sigue siendo la misma dirección? – dije yo y William asintió con la cabeza, claro que me voy a quedar con William. Si lo conozco bien, y así es, la noche va a ser divertida…