Susurro maliciosamente Nightmare en el cuello de su tierno oji-azul, aprisionándolo más contra el árbol, aumentando la fricción entra ambos cuerpos y la temperatura de estos, Freddy por su lado solo pudo abrazarse al cuello del mayor y dejarse ya que sabía muy bien que por más que se quejara ese enorme y cicatrizado oso negro de brillantes e inquietos ojos rojizos no se detendría y francamente tampoco quería que se detuviera, pero la vergüenza que sentía por hacerlo a la intemperie era demasiado grande, es cierto que él y su oji-rojo son seres silvestres, se supone que no debería molestarle, sobre todo porque no era la primera vez que se “amaban” en medio del bosque, pero Freddy simplemente es demasiado tímido y mientras Nightmare es demasiado salvaje e impulsivo.
-Po-por favor… Night…… nos podrían ver…- Murmuro Freddy sumamente sonrojado
-Ya relájate mi osito… estamos solos tu y yo…- Lo calmo Nightmare apartándose un poco para acariciar con cariño las mejillas coloradas del menor -Además… Solo quiero demostrarle a mi cachorro lo mucho que su padre ama a su “madre”- Comento divertido el pelinegra sonriendo acariciando con cuidado la barriga del castaño que ya estaba algo hinchada pero la disimulaba su ropa holgada
-No me digas así…- Susurro el castaño bajando la mirada con las mejillas aún más coloradas de lo que ya estaban, sacándola una gran carcajada al mayor que en un acto impulsivo lo agarro por la cintura para alzarlo sin ningún problema, haciendo que los rostros de ambos quedaran a la misma altura, sorprendiendo al más joven -Nightmare!!-
-Así será más cómodo ¿no crees?-
Dijo seductor el oso negro relamiéndose los labios para acercarlos a los de su oji-celeste, uniéndolos en un lento y suave rose que conforme pasaban los segundos y subía la temperatura se convirtió en un beso apasionado y luego una lucha de bocas, el Night se daba gusto mordiendo los labios del menor para hacerle abrir más la boca explorando con su lengua el interior toda aquella cálida y húmeda cavidad bucal, jugar con la lengua del otro, probando aquel sabor dulce que lo volvía loco, lo excitaba, mientras hacía esto con una mano jugaba con los cabellos castaños del oso más joven y con la otra lo mantenía elevado y fuertemente abrazado por la cintura, por su lado el oji-azul se abrazaba con firmeza al cuello del oso mayor y enredaba las piernas en la cintura de este, siento como su miembro que empezaba a despertar bajo la tela se frotaba contra el de su pareja que ya estaba más que despierto, esa batalla de lenguas continuo hasta la necesidad de oxigeno se hizo presente en ambos, forzándolos a separarse y dejando solo un fino hilo de saliva entre ambas bocas que se rompió cuando el mayor dirigió su boca al cuello del más joven, sacándole jadeos y gemidos conforme recalcaba las marcas ya existentes en su piel.
-Aah… N-Night…Nightmare ah…- Gemía Freddy cerrando fuertemente sus ojos abrazándose aún más al mayor
-Como me encanta… oírte gemir mi nombre…… eso me enciendo más- Susurro Nightmare bajando hasta el borde del pecho del castaño dejando chupetones y leguetazos en su camino, para mordelo y dejar la sutil marca de sus colmillos
-Nightmare!! Aah!!...- Gemio sonoramente al sentir los dientes del mayor
-Freddy… uhmm… te are gritar…- Jadeo el oji-rojo separándose del menor y bajándolo para quitarle la jodida camisa holgada que le estorbaba rápidamente acto que el oji-azul imito, ya que también empezó a quitarle la camisa al mayor pero se detuvo en el cuándo se disponía a quitarle los pantalones, ya que el oso negro so coloco a la altura del castaño para saborear todo su suave pecho desnudo, para luego atacar con mordiscos suaves y succiona uno de los botones rozados de su pecho a la vez que estimulaba el otro con retorciéndolo y arañándolo con su mano libre, ya que tenía la otra ocupada sujetando con firmeza sus caderas, Freddy solo podía estremecerse por oleadas de placer que le estaba provocando aquel tacto experto que sabía justo como y donde tocar, era simplemente delicioso
-Nigh-Nighttmare… espe…. Aahh… espera un momento…-Hablaba entre jadeos el castaño, aferrándose a la espalda del pelinegro
-Por qué… si se ve que encanta…-
-Es… es que…yo... también quiero probar…-
Finalmente Gemio Freddy en el oído del Nightmare tratando de ocultar su ya muy sonrojada cara en el cuello de su pareja, quien detuvo sus carisias al acto y separándose del menor, ya sabía lo que le estaba tratando de pedir tan tímidamente su osito y no iba a negar que el encantaba la idea, antes de que dijera algo el menor ya se había colocado de rodillas con su cabeza a la altura del sexo del pelinegro que seguía atrapado en esos estorbosos pantalones, con cuido bajo estos con sus dientes al igual que su ropa interior para encontrarse con el falo ya sumamente erecto y rojizo de Night, que se notaba necesitaba atención de inmediato, el castaño no lo pensó mucho y empezó a bombear el miembro del mayor mientras besaba y chupaba con cuidado punta de este, Night cerró los ojos y empezó a jadear por las carisias y chupadas del menor, llamándolo por su nombre una y otra vez, sobre todo cuando sentía como de Freddy comenzó a rozar con sus labios todo el contorno del órgano, para volver hacerlo con su lengua, pero no fue hasta que sintió como se llevó el erecto miembro dentro de su boca que empezó a gemir y gruñir sonoramente por los vaivenes de su cabeza y las succiones suaves de su boca, que los alternaba con lengüetazos rápidas y chupadas al glande
-Aah!… Freddy... si-sigues así….. me correré- Jadeo Nightmare cerrando fuertemente los ojos al mismo tiempo que acariciaba con ambas manos el cabello del menor
-Eso es lo que quiero…-
Pensó Freddy complacido y concentrado, aumentando los movimientos de su cabeza, así como la velocidad de estos, con cada movimiento engullía aún más el pene del pelinegro, hasta tocar el fondo de su garganta y lo succionaba con fuerza, solo necesito un par de vaivenes y succiones más para poder sentir como su oji-rojo le sujetaba con fuerza su cuero cabelludo mientras se corría en su boca de golpe, tragando toda la esencia que podía, Nightmare sintió una corriente eléctrica exquisita recorrer su espalda por el orgasmo, esa pequeña boca que tenía “su osito” le daba un placer inigualable, aun estando envuelto por los efectos del clímax, saco su miembro aun erecto de la boca húmeda de Freddy, acaricio con suavidad las mejillas del oji-azul mientras miraba como este recuperaba el aliento con la boca sumamente abierta y mancha con su semen
-Eres un goloso… lo sabias…- Dijo sonriente el pelinegro sin quitarle la vista de encima al menor
-Si… pero tú lo eres más…- Respondió jadeante el castaño poniéndose en pie para abrazar por cuello a su pareja
Nightmare solo sonrio maliciosamente mientras seguía acariciando las mejillas rojizas y el cabello del menor que adoraba tanto, ver lo así, en esa posición tan sumisa que pedía más, completamente despeinado, esos bellísimos ojos azules llenos de lujuria y deseo, como su pecho desnudo bajaba y subía hondamente por las respiraciones de excitación, su rostro aun con restos de la esencia blanca en sus labios, era demasiado excitante para él, lo encendía de nuevo, pidiendo por más, ya no podía esperar ni un minuto más y su pareja tampoco, se abalanzo sobre el más pequeño, besándolo de forma frenética y desesperada, volviendo a escudillar con su lengua el interior de la boca del joven oso, Freddy correspondía tales actos salvajes con la misma desesperación, también quería más, más de esa fiera intimidante y bestial que es “su” Nightmare, estaba tan absorto en esos salvajes besos que no se dio cuenta del momento en el mayor deslizo has su vientre para acariciarlo, asiéndoles cosquillas al más pequeño que lo hizo sonreír entre besos, siguió descendió hasta el borde la única prenda que le queda eran sus pantalones, los que quito de un tirón, para empezar masturbar el miembro hinchado al menor, sacándole gemidos ahogados entre los besos y los mordiscos, pero es interrumpieron de cuando además de las caricias sintió una intromisión abrupta de tres dígitos en la parte más sensible de su cuerpo.
-Ngh…Aaah!! Nightmare!!- Reacciono tensándose al momento
-Aguanta un poco, sabes que se te pasara- Dijo tranquilo el pelinegro moviendo los tres dedos en la estrecha entrada de su castaño, sacándolos y metiéndolos repetidamente y la vez que realizaba un movimiento de tijeras, cuando los quejidos del más joven se convirtieron en gemidos de placer saco los tres dígitos de su interior –Ya estás bien flojito… Respira profundo Freddy… Intentare algo nuevo-
Tras decir esto con una sonrisa perversa hizo que su amante se colocara de espaldas a él, Freddy no pudo evitar ponerse nervioso, sabía que cuando Nightmare decía “intentar algo nuevo” era sinónimo de que no podría sentarse en una semana por lo menos, antes de que protestara de alguna forma sintió como lo volvía a levantar por la cintura, sintiendo contra su espalda el pecho sudoroso del pelinegro y llevando ambas manos el cuello del más grande para mantener el equilibrio ya que el mayor llevo sus manos a las piernas del menor para levantar y separarlas, dejando la entrada del castaño justo sobre el miembro erecto y húmedo del pelinegro, para el esa la posición perfecta, en un rápido movimiento rudo dejo caer el peso del joven de golpe penetrándolo con brusquedad, sacándole varios quejidos dolorosos y que se aferrara con más fuerzas a su cuello.
-Ahh!! Night…!-
-¿Te duele?- Pregunto el pelinegro agitado a lo que él joven respondió solo sintiendo con la cabeza sollozando levemente -Tranquilo mi amor… Relájate-
Dijo depositando besos en las ardientes mejillas, cuello y hombro del menor para calmarlo, esperando quieto a que le diera una señal para continuar, Nightmare sabía que había sido muy rudo pero simplemente a veces no podía reprimir sus instintos salvajes cada que estaba con ese muchacho que se había enamorado de él, justo ahora estar quieto le resultaba una verdadera tortura, la entrada de su osito era tan estrecha y caliente, en esa posición le daba una fricción tan deliciosa a su miembro, para su suerte en un par de minutos sintió como tímidamente el castaño movía sus caderas buscando más contacto, ese era visto bueno que necesitaba para empezar al embestirlo, primero moviéndolo lenta y suavemente de arriba abajo, tratando de mantener el control, pero conforme el oji-azul jadea y gemía ahogadamente en el cuello del mayor, este perdía a pocos el autocontrol subiendo la velocidad y el ritmo de las envestidas, aumentando los sonidos que salían de la boca del menor y así como el agarre de este en su cuello, sobre todo cuando el falo golpeo aquel punto en el interior del oso castaño que lo hacía retorcerse de placer y gritar
-AHH! Uhn!… Night!...ahí…aahh… más ahí!!…-
Trato de hablar Freddy entre sus gemidos y gritos de placer, solo eso basto para que Nightmare mandara al carajo el poco autocontrol que le quedaba para dar rienda suelta a toda su ferocidad y empezar a entrar y salir de las entrañas del castaño como una bestia sin control, subiendo y bajando su cuerpo de forma frenética y acelerada, tratando siempre de dar en ese botón del placer que así al menor delirar de gozo y pedir por más, gruyendo y rugiendo sonoramente con cada penetración, mientras que castaño por su lado su lado estaba completamente extasiado por todas las sensaciones placenteras en su cuerpo, toda su anatomía temblaba, corrientes eléctricas corrían su espalda, sus mejillas ardían, sentir el aliento del mayor en su cuello y escuchar sus gruñidos de excitación en su oído lo hacía alucinar, ambos estaban cubiertos por una fina capa de sudor, cuando sintieron en sus cuerpos que se acercaba de clímax para ambos.
-Night… Aahh… Aah... ya… casi voy a… AAH!!-
No pudo acabar la frase ya que sintió como el oso mayor lo mordía en su cuello sorpresivamente, provocando que Freddy se corriera en el acto con sonoro gemido, manchando con su semen su propio vientre, sintiendo un gran holeada de éxtasis estrenarse todo su ser, también hizo que las paredes internas apretaran el miembro de Night quien sin más también alcanzó el orgasmos en un instante y se corrió en el interior de su pareja con un potente rugido descomunal a la vez que le daba una última embestida con muchísima fuerza, haciendo sentir al más joven como si lo partieran en dos. Sin bajarlo todavía, el oso oji-rojo se salió de interior del oji-azul, quien aún envuelto en las sensaciones del reciente orgasmo, suspira ligeramente al sentir como escurría una cantidad generosa semen fresco de entre sus muslo y aun podía sentir que había quedado mucho de esa cálida semilla en sus entrañas, mientras que el mayor, con cuidado de no dejar caer a su exhausta pareja lo cambio de posición, ahora cargando al estilo nupcial, acercando su rostro al del más joven, que se acurrucaba contra su pecho, para un besarlo de forma casta en la frete y mejillas de forma amoroso, el castaña ante tan cariñosos actos se abrazó al cuello el pelinegro para mirarlo directo a los ojos y besarlo en los labios
-Nightmare… te amo…- Dijo con una sonrisa cansada abrazándose mas al mayor
-Yo también te amo… te adoro Freddy…- Dijo tomando el mentón del oji-azul para besarlo tiernamente, quien se lo correspondió gustoso profundizando aún más el beso introduciendo su lengua en la boca del mayor -Jejeje… me estas calentando de nuevo mi osito… quieres otra ronda- susurro divertido
-Pe-pero aquí no…- Tartamudeo sumamente sonrojado a la vez escondía su cara en el pecho del mayor
-Está bien…- Comento divierto bajándolo y alejándose un poco para levantar la ropa de ambos –No me molesta seguir en nuestra cama-
Rio ligeramente Nightmare con un tono algo burlón en su voz mientras le daba sus ropas a Freddy, no cabía duda de que ese chico oso que era ahora su pareja le encantaba y que una de sus facetas así como las cambiantes expresiones de su rostro le enamoraban cada día más, mientras que el de la vista azulada con la cara roja como tomate se preguntaba a sí mismo mentalmente “Aun no entiendo por qué me enamores de él”, mirando de reojo el bien formado y bronceado cuerpo de su pareja, plagado de cicatrices entre otras marcas, para luego subir su mirada hasta encontrarse con el sonriente rostro y su mirada rojiza y peculiarmente brillante, después sintió como este con un brazo lo acerba a su pecho y lo abrazaba de forma protectora a la vez que acaricia el rostro del menor de forma tierna, “Así… fue por esto…” volvió a pensar Freddy para sí mismo disfrutando la cercanía del mayor, aun que Nightmare tuviera una apariencia intimidante y personalidad difícil, hasta agresiva cuando se enojaba, también tenía su lado amable y protector, lado que solo se lo mostraba a “su” Freddy, sobre todo ahora que iba a volver padre en algunos de meses.
Pero con lo que ambos hombre osos no contaban es que, a pesar de la hora y de lo fría de la noche si había alguien rondando por la zona, había salido solo a recoger algo de madera para ahuyentar el frio de su casa, no estaba ni cerca de los amantes claro está, pero gracias a su excelente oído de zorro y por la potencia de los rugidos y gritos de la pareja, fue capaz de escuchar casi todo el acto le gustara o no.
-Por Dios… ¿Porque ese par de osos calientes no se pueden esperar a la temporada de celo para cojer? o al menos llegar a su cueva- Se quejó Foxy mirando en dirección de dónde habían escuchado los gemidos y rugidos de sus amigos, porque si, Freddy y Nightmare son amistades del pelirrojo desde hace años, desde que el era cachorro
-A mí no me molesta en lo más mínimo- Hablo babeando con un par de gotas de sangre saliéndole de la nariz, una chica peli-blanca colgada de cabeza de un árbol, con orejas y cola similares a Foxy así como la tonalidad de su único ojo
-COÑO!- Exclamo sorprendido ante la aparición de la sonriente chica, para luego regañar -Joder Mangle!! Cuando dejaras de aparecerte así! Un día mataras de un infarto a alguien-
-BA!! Tú eres un zorro muy nervioso que es diferente-
-Y tú eres una loba anormal, que no sabes que los lobos viven en tierra y no colgados de los árboles-
-Eso es aburrido, estar aullando y corriendo no es para mí y mucho menos cazar, me desmayo cada vez que veo sangre, es más fácil comer frutas y mucho más divertido saltar entre los árboles y colgarse de cabeza-
-Aja y por jugar a la acróbata es que te llevas tus madrazos contra el suelo, después Chelsea, Chica y Yiggy tienen que ver cómo curarte, tienes suerte de solo haber perdido un ojo la última vez que te caíste- Dijo el pelirrojo a forma de regaño
-Cuantas veces tengo que decir que no fue mí culpa, no calcule bien la altura la que estaba y la pendeja de Candy había roto la rama donde me senté- Se defendió la peli-blanca asiendo un puchero y agachando las orejas
-Como sea, no deberías seguir haciendo eso es peligroso, la próxima vez podrías acabar muerta-
-Me lo dice el zorro que se aventuró a ir al pueblo de los humanos- Comento sarcástica la menor bajándose del árbol, mientras el zorro solo aparto la mirada molesto -Eso me recuerda ¿Cómo sigue tu conejito, aún sigue sin moverse?-
-Más o menos, todavía sigue muy débil por la sangre que perdió y las heridas del rostro……… NO LE DIGAS “CONEJITO” Tiene nombre y es Bonnie!!- Grito el pelirrojo mientras pensaba “Solo yo le puedo decir conejito a mi Bonnie”, la pequeña loba estaba por reclamarle pero se silenció al instante ante una intromisión inesperada
-Espera Nightmare! Dijiste que seguiríamos en casa!!... A-Aah!- Se escuchó gritar a Freddy lo lejos provocando que ambos caninos voltearan a ver, Mangle con una sonrisa de oreja a oreja volviendo desangrase por la nariz y Foxy con expresión de fastidio a la vez que de molestia
-Joder… Me largo, ya tuve suficiente de los gritos de Freddy por lo que me resta de vida- Se quejó el zorro empezando a caminar lo más rápido posible en dirección contraria a la de los nuevos gemidos
-Yo creo que me acercare un poquito más!- Comento la loba subiendo a un árbol cercano para empezar a saltar en dirección de los sonidos apasionados
-Si Nightmare te pesca fisgoneando te noqueara…… de nuevo –
-Valdrá la pena!!- Aullo contenta mientras se alejaba entre las ramas de los árboles –Hasta luego Foxy, luego iré con las chicas a visitarlos!-
-CLARO QUE NO!!- Grito molesto pero la chica loba ya estaba lejos -Pequeña pervertida…… le sacaran el otro ojo a este paso-
Comento el zorro para sí mismo mirando por un momento a la peli-blanca alejarse para luego continuar con su caminata o mejor dicho continuar con su huida, ya que empezó a correr a toda velocidad para alejarse lo más rápido posibles de los sonidos salvajes de sus amigos que habían empezado la segunda ronda de sexo de esa noche. En su cabaña, ya muy pero muy lejos de cualquier sonido lujurioso que le pusiera los nervios de punta, entro tranquilo a esta cargando la madera sobre su hombro, para llevarse la sorpresa de que el aun lastimado y enceguecido peli-morado estaba sentado en una silla a la mesa de la sala, delante de la chimenea débilmente encendida.
-Bonnie!! ¿Cómo llegaste hasta aquí? Te dije debías guardar reposo, aun no estas sano- Dijo preocupado el Foxy, dejando la madera a un lado para acercarse al herido oji-rubí
-Perdona pero tenía mucho frio, trate de buscar algo con que abrigarme y llegue aquí que es cálido y pensé que quedarme por un rato- Se excusó Bonnie girando su cabeza en dirección de la voz del pelirrojo
-Ya veo… lo siento por eso, esta cabaña está hecha de madera y piedra, además es algo antigua y le hacen faltan algunos arreglos, así que se enfría con facilidad…- Explico el oji-miel tomando de nuevo la madera para avivar el fuego en la casi apagada chimenea
-Descuida, no me molesta, de hecho se siente más cálida que donde vivo y seguro se ve más linda que la casa de… mis hermanos…- Susurro esto último en un tono triste
-¿Pasa algo?- Pregunto el zorro toman asiento junto al joven
-Mis hermanos…no saben que estoy aquí, tampoco saben lo mal que estoy, deben estar muy preocupados por mi…-
-¿Los extrañas mucho?-
-Más que extrañarlos… me preocupo por ellos- Hablo tratando de sonar menos triste -Bonbon es joven y es muy apegado a mí y a mi otro hermano, debe estar buscándome como loco por todos lados y Springtrap tiene una personalidad complicada y es muy impulsivo cuando esta enojado, seguro ya se dio cuenta de que Vincent me lastimo y se agarró a golpes con él… espero que no lo echen del pueblo…- Dijo esto último en un susurro, empezando a sollozar ante la idea de volver a ver a su familia
-Hey no llores, lastimaras más tu vista…- Trato de calmarlo el pelirrojo colocando una mano en su hombro
-Yo… yo no quiero que se preocupen por mi… ni que se lastimen por mi culpa… ya nos han lastimado demasiado, ya no quiero que sufran más…-
Dijo el peli-morado entre sollozos ahogados, haciendo un esfuerzo por no romper a llorar desconsoladamente, ya que sentía que con cada lagrima que le salía lastimaban un poco sus ojos y sus parpados, justo como le había advertido el pelirrojo, quien a ver lo tan frágil y dolido, no pudo resistirse sus instintos protectores y se le echó encima al más joven para abrazarlo con fuerza para transmitirle todo su calor y hacerlo sentir mejor, el zorro notaba que la vida que había llevado hasta ahora el peli-morado y su familia había sido sumamente dolorosa y difícil de soportar en ese sitio que nunca fue un hogar para ninguno de ellos, el único consuelo que tuvieron los hermanos curanderos era que se tenían entre ellos para apoyarse
-Tranquilo Bonnie, ellos seguramente son chicos fuertes y valientes como tú, estarán bien, vas a ver que estarás mejor antes de lo que piensas y podrás volver a verlos, además no creo que la gente de ese pueblucho se atrevan a echarlos solo porque si-
Calmo Foxy con un tono suave en su voz a la vez que tímidamente acariciaba los cabellos purpuras y la espalda del más pequeño, tratando de reconfortarlo, hacerlo sentir mejor y que se olvidara de todo lo que había sufrido hasta el momento, Bonnie por su lado, además de estar estupefacto y sutilmente sonrojado por la acción del mayor, solo se dejó hacer ya que era la primera vez desde que era niño que alguien le profesaba cariño de esa forma tan cálida y tan protectora, además de que aquellas palabras lo hicieron dejar de llorar casi al momento pues le daban el alivio que tanto necesitaba en ese momento, se aferró con su mano sana a las ropas cubrían el pecho del pelirrojo mientras hundía más su rostro en este, respirando profundamente ese perfume tan peculiar que emanaba del cuerpo del zorro, era dulce y un tanto salado pero sin llegar a ser desagradable, ese aroma le provocaba un sentimiento de nostalgia y recuerdos en su interior, pero no comprendía el porqué de esa sensación.
Ambos se quedaron en esa posición durante varios minutos, hasta que Foxy sintió como el joven curandero parecía haberse quedado dormido en su pecho, hay aprovecho para cargarlo en sus brazos al estilo nupcial, lo llevo al cuarto y lo depositarlo con cuidado en la cama para no despertarlo, se quedó mirándolo unos segundos pensativo, cuestionándose y preguntándose qué tanto lo habrán lastimado tanto a él como a sus hermanos, cuando se dispuso a alejarse, sintió como el muchacho semi-dormido lo agarraba de la manga de la camisa impidiéndole que continuara.
-¿Quédate… Por favor?- Pidió adormilado el oji-rubí
-Por supuesto…- Contesto tranquilo oji-miel tomando asiento en la cama sin quitarle la vista de encima al más joven
-Gracias… gracias de nuevo…-
-No me agradezcas… no es necesario- Fue todo lo que dijo el pelirrojo mientras pensaba “Como quisiera quitarte todo ese dolor que cargas Bonnie…”
-Yo… eh olido esto antes… pero ¿Dónde?-
Pensó Bonnie respirando hondamente aquel fragancia dulce y un tanto salado mientras se quebrada profundamente dormido, cosa que Foxy aprovecho para cambiarle los vendajes y abrigarlo mucho mejor, permaneciendo a su lado, velando por su los sueños del más y mirando ocasionalmente la ventana quedaba al bosque que es su hogar, aquella noche era particularmente fría aun para la época en la que se encontraban, al parecer el invierno de ese años se adelantaría, como el de hace 10 años, cuando todo comenzó.
Mientras en el pueblo, Bonbon se las ingeniaba para escaparse de la vigilancia continuaba de Scott para buscar por sus propios medios a su hermano perdido, pero este último no se la dejaba nada fácil…
CONTINUARA…