Capítulo 4.- Sentimientos a flor de piel
Seiya despertó de golpe al sentir como un pequeño bulto le cayó encima, Ryu se le había lanzado y reía divertido tratando de destapar a su papá que se había tapado con las cobijas hasta la cabeza y gruñó
- Levántate papi que hoy en mi partido de futbol, vamos que nos atrasamos – Ryu empezó a saltar en la cama y reía
- No no no, aún no suena el despertador y yo tengo sueño – dijo Seiya destapándose finalmente y recibiendo en sus brazos a su revoltoso hijo
- No no no, no sueño, yo tengo hambre papi, hay jugo? – Ryu se había sentado en el estómago de Seiya y le aplastó los cachetes para besarlo en la nariz
- No sé, supongo que sí, ok., vamos a ver que hay para el desayuno – Seiya se incorporó y bostezó, Ryu saltó de la cama y fue por la habitación de su papá hasta la puerta al decir:
- Ok., le voy a saltar a Tak
- Mejor no le saltes muy duro a tu hermano, mira que se pone mal genio – Seiya trató de detener a Ryu, es que Tak si estaba atravesando una de sus temporadas en donde ni él mismo se soportaba, ayer habían discutido por algo sin importancia, pero esa había sido la dinámica de esa familia esa semana
- Él siempre está mal genio papi – dijo el pequeño encogiéndose de hombros
- Tienes razón, ve y sáltale encima – contestó Seiya con una sonrisa, el pequeño Ryu entre risas se fue a la habitación de su dormido hermano
Seiya se levantó y se estiró, fue al baño y luego mientras caminaba por el pasillo a la cocina escuchó un gruñido que salía del cuarto de su hijo mayor, al escucharlo sonrió y abrió la refrigeradora, para ver que había para el desayuno, Takeshi podía ser todo lo histérico que quisiera, pero él nunca era grosero con su pequeño hermano, Ryu era el que suavizaba todo sin proponérselo, y solo por eso, Seiya sacó panqueques congelados para calentarlos, eso haría feliz a sus niños
Casi a las diez de la mañana llegaban Ikky y Hyoga al estadio de la escuela de Ryu, el partido era a las 9 y media pero por el tráfico no habían podido llegar, allí vieron a Seiya que estaba al borde de la cancha y charlaba animadamente con el entrenador del equipo, Takeshi estaba en los graderíos con su amigo Han y con Shun, vaya… Ikky no sabía que su hermano venía a los partidos de su hijo, pero eso lo complació mucho, los tres miraban todo relajados el partido, Shun estaba usando lentes de sol y estaba fumando un cigarrillo, Tak estaba a su lado y le estaba enseñando algo en su teléfono celular y sonreía mientras lo hacía, Ikky pensó en ese punto que su hijo nunca le había mostrado nada en su teléfono celular, diablos… ni siquiera tenía su número…
Ikky y Hyoga saludaron con una seña a los tres que estaban en los graderíos y buscaron un espacio en las gradas pero en la parte de abajo, se sentaron junto a una pareja que tenía un cartel de apoyo a su hijo seguramente. Los minutos pasaban y en uno de esos momentos, Ryu regresó a ver a los graderíos y alzó feliz la mano saludando a su papá, Ikky se puso de pie y lo aplaudió, por lo que el pequeño corrió por la cancha con una maravillosa sonrisa en los labios, Seiya se volteó e hizo una seña de saludo también la cual fue correspondida por Ikky y Hyoga, aunque se notaba a leguas que el rubio estaba muy incómodo de estar allí, Seiya sonrió complacido, era tiempo de que Ikky empezara a cumplir sus promesas
Ikky no entendía la razón por la que Seiya estuviera en la banca con el entrenador hasta que uno de los pequeños se cayó en el césped y se lastimó la rodilla, el árbitro pitó una pausa y Seiya corrió al campo para ver la herida del pequeño que lloraba, era solo un corte sin importancia, así que rápidamente limpió la herida y la parchó para que el pequeñito pudiera seguir jugando. A la final el partido terminó con la ganancia del equipo de Ryu
- Viniste papá, viniste – el pequeño Ryu sonreía feliz cuando corrió a los brazos de Ikky que estaba de pie junto a la cancha
- Te lo prometí, puedes decirle hola a Hyoga? – Ikky besó a su hijo en la mejilla y luego lo giró para que pudiera ver a su esposo que estaba un poco más atrás de ellos
- Hola Hyoga
- Hola pequeño, te luciste en el partido – dijo el rubio acariciando los azules cabellos del niño
- Gracias, vamos a ir a un día de campo en el parque, quieres venir papá?, puede mi papá venir al día de campo con nosotros papi Seiya? – Ikky depositó a su hijo en el suelo y el pequeño le tomó la mano pero llamó con la otra a Seiya que estaba un poco más allá despidiéndose del entrenador
- No sé si puedan hijo, pero son bienvenidos si quieren venir, que bueno que pudieron venir al partido, estuvo buenísimo – Seiya se acercó y se acunclilló para acomodarle la ropa a Ryu
- Muchas gracias, nos encantaría – respondió Ikky con una sonrisa
- Ok., hazme un favor pollito, ve con tu tío Shun que está allá con tu hermano y llámalos que ya nos vamos al parque – Seiya señaló a Shun y mandó a Ryu que fue corriendo hasta allá y se lanzó a los brazos de Shun que lo levantó y lo besó en la mejilla, Seiya se cubrió los ojos del sol con una mano y dijo: - Es un día de campo pequeño, solamente vamos a estar nosotros, Shun y mi amigo Shyru del hospital con su esposa y su hijo que es el arquero del equipo de Ryu, no se sientan obligados a venir, Ryu entenderá si no pueden – Seiya se dio perfecta cuenta de la incomodidad de Hyoga y quiso hacer las cosas más fáciles para todos, pero Ikky tomó la mano de su esposo y dijo:
- Claro que iremos, un día de campo suena genial, no es cierto Hyoga?
- Si… claro…
- Ok., - Seiya se encogió de hombros y fue de vuelta al borde de la cancha, tenía que recoger sus cosas y las de su hijo, al volver vio a Ikky de pie junto a su hermano, ambos reían con ganas, Shun era muy divertido y sus hijos lo amaban, pero eso no impidió que Tak estuviera con el ceño fruncido y tuviera los ojos en su teléfono, su hijo era todo menos sutil en demostrar su disgusto ante la presencia de Ikky, dioses…
- En serio estabas en el equipo de básquet tío Shun? – preguntó Ryu todo emocionado
- Claro, mi pobre profesor de Educación física intentó por años que me interesaran los deportes, él decía que como yo era pequeño y delgado podía explotar mi agilidad y ser un jugador armador para el equipo
- Y lo fuiste?
- Nahhh… yo me hacía a un lado cuando alguien osaba pasarme la pelota – dijo Shun e Ikky asintió con una divertida sonrisa en el rostro
- Entonces no juegas nada tío Shun?
- Pocker, pero eso no es considerado como deporte, el deportista de la familia es tu papá, yo no la verdad, creo que heredaste eso de él – Shun tocó la nariz de su sobrino y le sonrió, el pequeño lo abrazó pero luego fue hasta donde Seiya y tomó su mano al preguntar:
- Ya nos vamos papi?
- Si, Shyru y su familia vienen conmigo, quieres ir con tu tío Shun o quieres venir con nosotros? – preguntó Seiya a su joven retoño, Shyru, que era uno de los médicos cirujanos generales del hospital venía caminando con su esposa y con su hijito, Shyru y Seiya habían sido amigos desde la universidad y sus hijos eran compañeros de escuela, el destino los había juntado, eso es lo que Seiya solía decir porque Shyru era su amigo más antiguo, no trabajaban en la misma área en el hospital, pero almorzaban juntos cuando tenían oportunidad y se tenían mucha confianza, era a Shyru a quién Seiya recurría cuando tenía un problema, claro… cuando no podía localizar a Kanon primero, de cualquier manera, Ryu se abrazó a su pierna y dijo:
- Voy contigo papi
- Han y yo vamos con el tío Shun – dijo inmediatamente Tak, Seiya tenía un auto todo terreno bastante cómodo, pero no para siete personas, si ellos iban con su papá, les tocaba ir en la cajuela y eso dejó de ser divertido cuando dejaron de entrar cómodamente en ella
- Pueden venir con nosotros… si quieren… - ofreció Ikky pero Tak frunció mas el ceño y dijo:
- No no no, nosotros vamos con el tío Shun – el muchacho se dio la vuelta y empezó a caminar hacia el parqueadero, Shun se acomodó los lentes de sol y se encogió de hombros para seguir a su sobrino
- Que grosero – dijo Hyoga y Seiya arqueó una ceja al decir
- No es grosero, solo muy directo, nos vemos allá, si aún desean ir claro está, tu sabes en qué parque, verdad? – preguntó el castaño con clara molestia, no le agradaban ese tipo de comentarios de Hyoga, y no era la primera vez que los hacía, Hyoga criticaba mucho a sus niños y eso a cualquier padre que se respete, le hace perder la paciencia
- Si, nos vemos allá – contestó Ikky algo molesto también, Seiya tomó la mano de su hijo y fue rumbo al parqueadero también
En el parque, Seiya llegó primero y con la ayuda de Shyru, llevó varias cestas a un punto específico del parque, era un árbol muy torcido que estaba junto al lago, siempre iban allí porque era el punto mas plano del lugar, tenían cobertura del sol por los árboles cercano y era muy hermoso. Shun llegó pocos minutos después con los muchachos, al llegar Tak abrazó a Seiya con fuerza y no le dijo nada, luego se fue a sentar en uno de los árboles, Ryu, Rhuyo, el hijo de Shyru y Shunrey, fueron con él y Han también, Seiya solo los vio y suspiró con pesadez, Shyru y Shunrey estaban de pie junto al lago, estaban hablando bajito tomados de la mano, Shunrey estaba embarazada y la pareja estaba feliz con la noticia
- Escuché bien e Ikky va a venir? – preguntó Shun al que fuera su cuñado
- Eso dijo pero no lo sé, y tu?, aún crudo?
- Aún medio borracho, solo porque era el partido de futbol de uno de mis sobrinos favoritos me levanté de la cama, solo esos niños consiguen eso de mí, necesitas ayuda con algo? – preguntó el hombre de cabellos y ojos verdes, él tenía la edad de Seiya y trabajaba en las empresas de su hermano, aunque… él no trabajaba realmente, Ikky lo mantenía en nómina como un pretexto para pagarle un sueldo, Shun era abogado pero nunca ejerció su profesión, él vivía dedicado a la vida nocturna y a los placeres de la vida
- No, ya lo tengo todo listo, y qué tal la fiesta de anoche?, a dónde fuiste? – preguntó Seiya con una sonrisa en el rostro, a él le caía muy bien su ex cuñado
- A un concierto, estuvo genial, debiste haber ido conmigo
- Ayer tuve guardia, si vez mis ojeras?, llegué a la casa a las cinco de la mañana y mi pollito me levantó a las 6 y media – dijo Seiya y señaló su rostro, Shun lo vio y meneó la cabeza
- Por eso no trabajo yo, mucha presión y pierdo mi flow, wow… Ikky si está viniendo, a Tak no le va a hacer mucha gracia que digamos, vino hablando todo el camino y a mi sobrino no le ha pasado el dolor de estómago que siente cada vez que ve a Hyoga, y… bueno… eso yo puedo entenderlo – Shun se alzó los lentes de sol y vio a Ikky llegar con Hyoga, ellos venían caminando lentamente por el césped, pero se notaba que no estaban bien, tal vez ellos también vinieron hablando en el camino, aunque discutiendo sería una mejor palabra
- Por favor no eches más leña al fuego, estoy intentando que las relaciones de Ikky y mis hijos mejore
- Por qué lo haces eh? – a Shun eso le parecía extraño, Seiya siempre fue muy racional y civilizado, pero esto le pareció demasiada civilización para su gusto
- Porque ese idiota es su padre y no quiero que las cosas continúen como están, y lo hago por mis pollos pero lo hago por él también, si no lo obligo a venir se perdía el partido, y mira lo feliz que se puso Ryu al ver a Ikky aquí, esas son las cosas que no debemos dejar perder, no quiero que con los años se conviertan en extraños que ni se reconozcan en la calle
- Pues si, Ikky ama a sus hijos y sufre por ellos, yo lo sé, me lo ha dicho, el problema que tiene es… Hyoga, él se lo pelea y… bueno… es complicado pelear incesantemente con la persona con la que vives
- Esa no es justificación, pero luego hablamos de esto, voy a llamar a los chicos
Ikky llegó y se quedó de pie junto a Shun que les sonrió amablemente y en silencio esperaron hasta que los chicos llegaron con Seiya, Ryu vino corriendo y le quitó las gafas de sol a Shun y siguió corriendo hacia los árboles con Ryuho, Shun sonrió y resignado corrió tras su sobrino que reía muy divertido. Tak estaba usando un gorrito que le cubría la cabeza entera y eso le pareció extraño a Ikky que alzó la mano para quitárselo pero el muchacho se dio cuenta y se hizo el quite
- Qué crees que haces? – preguntó Tak muy molesto
- Por qué estás usando un gorro?, la mañana está hermosa y hace sol
- Porque si… - respondió el muchacho encogiéndose de hombros
- Sácate eso de la cabeza por favor – dijo Ikky muy serio y molesto, él no aguantaba que su hijo le hable de la manera en la que le hablaba
- No…
- Sácate eso de la cabeza, estamos por sentarnos a comer y no debes tener nada en la cabeza al hacerlo, en dónde están tus modales? – insistió Ikky
- Estamos en el parque, vamos a comer hot dogs con coca cola, no estamos en ninguna casa o en una cena formal, y no me voy a sacar mi gorro así que deja de molestarme
- Esa no es forma de hablar a tu padre – dijo Ikky señalándose a si mismo
- Estoy hablándote a ti, no a mi padre – respondió Tak y miró a Ikky en claro desafío luego de señalar a Seiya como su padre, sus palabras eran por demás claras, Seiya estaba arrodillado sacando las cosas del cesto ayudado de Han y Shyru pero se puso de pie al escuchar la discusión
- Yo también soy tu padre
- No, no lo eres, el único padre que tengo es él, no tu – Tak señaló nuevamente a Seiya que miró a su hijo y suspiró, esto se veía venir, Tak estaba al borde de estallar y bueno… estalló
- No te permito que me hables de esa manera – dijo Ikky todo indignado, Tak estaba rabioso como nunca antes lo había visto, por eso a Seiya no le sorprendió lo que dijo su hijo a continuación:
- Y qué vas a hacer?, enviarme a mi cuarto sin cenar?, cortarme el dinero semanal para el almuerzo?, irte de la casa y nunca más volver?, ohhh espera… eso ya lo hiciste… - el tono del muchacho era sumamente ofensivo, Ikky levantó la mano para cachetearlo pero se contuvo, el muchacho lo miró desafiante y dijo: - Es lo único que me faltaba, dale pégame si eso te hace feliz
- Por favor basta los dos, este día de campo se supone que es para celebrar el partido de futbol, lo están arruinando para Ryu y eso no es justo con él – Seiya se puso en medio de ambos y eso hizo que Ikky bajara la mano
- Lo siento Seiya, pero no puedo dejar que me hable así, yo soy su padre – dijo Ikky y aún sonaba molesto
- Solo eres mi padre cuando te conviene, cuando tuve apendicitis el año anterior y estuve en el hospital por tres días, ahí no fuiste mi padre porque nunca me fuiste a ver, ni una tarjeta me mandaste, de cuándo acá te ha renacido el amor por nosotros?, es solo porque ahora necesitas que mi papá te ayude?, es eso verdad?, pues déjame decirte que no te necesitamos
- Ya Tak… basta – Seiya se volteó y puso sus manos en los hombros de su hijo para mirarlo a los ojos, el muchacho le sostuvo la mirada a Seiya pero luego relajó su postura y bajó la cabeza
- Lo siento papá, puedo ir a la casa de Han?, ya se me fue el apetito, no quiero estar aquí – dijo el muchacho en un susurro
- Creo que será lo mejor, me llamas después?
- Si papá
- Ve…
El muchacho se dio media vuelta y tomó a Han del brazo y empezaron a caminar hacia el lago, Ryu estaba más allá en el césped acostado viendo las nubes con el tío Shun y con Ryuho, Shyru y Shunrey estaban sentados un poco más allá, Seiya se cruzó de brazos y frunció el ceño, esto no era lo que él quería, no estaba funcionando como había pensado
- Ese muchacho es un grosero, mira que hablarte así?, qué le pasa? – dijo Hyoga pero lo dijo en un tono bastante audible, Seiya se volteó muy molesto y algo iba a decir pero no pudo hacerlo porque por el rabo del ojo vio que Tak, que también lo había escuchado y se le lanzaba al rubio, así que Seiya atrapó a su hijo por la cintura e impidió que se le acercara, si lo hubiera hecho todo hubiera terminado en tragedia
- Tu no tienes derecho de decir nada, tu no me conoces así que cierra la boca – Tak gritó en este punto lo que llamó la atención de Shun y Ryu que se levantaron y se acercaron al claro del parque en donde la tensión se podía cortar con un cuchillo
- Takeshi… discúlpate con Hyoga ahora mismo – exigió Ikky muy alterado
- No tengo por qué disculparme con ese…
- Basta dije, ya vete… ahora… - Seiya interrumpió antes de que las cosas llegaran a mayores, Takeshi le dedicó una mirada de profundo desprecio a Hyoga y sin decir nada más se dio la media vuelta y empezó a caminar, Ikky iba a decir algo pero Seiya levantó la mano indicando que se callara, ya cuando el muchacho y Han estaban fuera de su rango de audición Seiya dijo: - Si tu objetivo es alienar más a Tak, pues déjame decirte que lo estás haciendo maravillosamente bien
- Él está agresivo conmigo, yo solo le dije que se sacara la gorra, él fue el que me saltó al cuello
- Necesitas hablar con él, necesitas reconectarte con él y discutiendo no lo vas a conseguir, tu hijo tiene 14 años, es un adolescente muy rabioso e iracundo, en especial contigo, antes de decirle algo piénsalo bien, no empeores las cosas por favor
- Tu apoyas que me hable así?
- Claro que no Ikky, pero por favor entiende, él no te visto en meses y antes de eso tus visitas se espaciaron muchísimo, tú ya no eres una figura de autoridad para él, el hecho de que seas su padre no arregla todo mágicamente, las relaciones requieren trabajo y tiempo
- Todo es mi culpa, es lo que me estás diciendo? – Ikky gritó esto, Seiya estaba tratando de conciliar el asunto pero el carácter de Ikky hizo su aparición, así que el castaño se cruzó de brazos y preguntó en el tono más sarcástico que pudo:
- Y qué esperas que te diga?, quieres que aplauda tu actitud?
- Fue una mala idea el venir, nos vamos – dijo Ikky lívido, Seiya contestó inmediatamente:
- Bien
- Bien
Ikky tomó la mano de Hyoga y ambos caminaron rápidamente por el parque, Ryu se abrazó de la pierna de Seiya, el pequeñito estaba al borde de las lágrimas, Shun se cruzó de brazos y meneó la cabeza al decir:
- Si quieres voy por los muchachos, no deben estar lejos, ahora que Ikky se fue ellos pueden volver, no?
- Mejor no, deja que Tak camine un rato, cuando tengan hambre volverán, los papás de Han no estén en la ciudad entonces no tienen a dónde ir, pueda que vayan a casa de Han pero no hay nada comible allí, quieres quedarte con nosotros?
- Si… si no es molestia claro está
- Por supuesto que no, espero que tengas hambre porque tengo muchos hot dogs
- Haré mi mejor esfuerzo – dijo Shun con un suspiro, un hot dog le caería muy bien
- Voy a llamar a Shyru y a Shunrey, pobres… deben estar muy incómodos con todo esto
- Nahhh… ellos saben toda la historia, y conoce muy bien a mi hermano, así que no te preocupes – Shun se encogió de hombros cuando dijo esto, él conocía a esa pareja por años, Seiya había sido el padrino de Shyru en su boda, ellos eran familia para Seiya, no solo amigos así que el peliverde no le vio el problema, en todas las familias habían broncas y esta no tenía por qué ser la excepción