Naruto Uzumaki POV
-¿¡Que hiciste qué!?-gritaba alarmado Gaara, reacción al decirle que salí con Sasuke.
-Fue solo un par de horas, aparte no pasó nada-dije para tranquilizarlo.
-Sabes que corremos un peligro constante ¿Y aún así sales con u tipo que apenas conoces? ¿No crees que eso es entregarte en bandeja de plata Naruto?-recordaba más que molesto.
-Y yo te dije porque es la primera vez que me pasa, nunca más te cuento nada-dije girando la cabeza con el seño fruncido.
-No es que no me alegre eso, sino que es con quien lo hiciste. Eres mi mejor amigo y siempre voy a advertirte de algún peligro-dijo mientras ponía su mano en mi hombro; una señal de compresión que siempre ha habido entre nosotros.
-Lo sé-dije y nos tumbamos en la cama, cansados de pensar tanto el asunto de Sasuke- Y dejando de lado eso... ¿Tú cómo
andas?-pregunte mientras golpeaba suavemente su brazo con el codo.
-¿De qué estas hablando?
-No puedo ser el único que haya conocido a alguien ¿Qué hay de ti?-dije con mi mano cerca de mi boca, como contando algún secreto.
-¡No!-gritó fuertemente sonrojado. Gaara es muy tímido en estos temas aunque tiene experiencia- No ha habido nadie después de...
-Después de Sai ¿No?-dije terminando su frase, aún no era un tema superado.
-Lo extraño...-dijo con la voz rota.
Flashback.
Gaara y Sai eran la pareja ejemplo de todas, eran cariñosos, atentos y muchas otras cualidades. Eran el uno para el otro.
Se conocían desde niños y a los 12 años comenzaron su relación que duró hasta el año pasado, cuando ambos tenían 15 años.
Una noticia los separó.
-No quiero que te vayas Sai, no soy nada sin ti-decía mi amigo el cual estaba al borde de las lágrimas abrazando a su pareja.
-No te preocupes-respondió el con una sonrisa- Voy a volver, y cuando lo haga vamos a formar una familia; vamos a ser felices-le dijo y juntaron frentes, a la vez que se dieron su último beso. Las lágrimas corrían por los ojos de ambos.
Pude ver como, con dolor, Sai se separó lentamente de Gaara rumbo al avión con su familia hacia Rusia... "Sai tiene un problema mental, no puede besarse con otro hombre. Será instruido en Rusia"... Esas fueron las palabras de sus padres.
Como si el amor entre hombres fuese anormal.
Gaara estaba destrozado en ese momento, y tomó mucho tiempo que volviera a la normalidad.
Fin Flashback.
-El te dijo que volvería-le dije positivamente- Que bueno saber que aún le eres fiel a pesar de que ya no son... Ya sabes...
-Sigo esperando a que vuelva-decía adolorido tocándose el corazón.
-Te lo prometió-dije cerrando el tema.
Después seguimos hablando de muchos temas, recordamos y reímos demasiado con nuestras aventuras a los 6 años.
En la tarde, Gaara se fue y me quedé solo; Deidara y Nagato habían ido con sus amigos. Fui a mi pieza y bastante grato fue lo que encontré.
Sasuke estaba revisando mis cajones... ¡De ropa interior!
-¡¿Qué haces?!-grité sonrojado guardando mi ropa y cerrando el cajón- ¡No revises esas cosas!
-¿Te molesta?-dijo acercándose, y al ser más alto que yo, puso sus manos en mis mejillas.
-Si ¡Así que no lo hagas!-dije cerrando los ojos. Sasuke se sentó en el suelo con las piernas cruzadas, mirándome como un pequeño cachorro- ¿Qué pasa?
Solo parpadeo dos veces. Me senté frente a él y me seguía mirando.
-¿Naruto?
-¿Si?
-Estoy aburrido
-Haz algo
-No quiero solo
Nos levantamos y salimos de la casa al jardín. Fue cuando Sasuke me tomó en brazos y comenzó a girar. Del susto grité y me afirmé desesperadamente a su pecho al mismo tiempo que escuchaba como se reía.
-¡Bájame!-dije entre vueltas. Poco a poco fue parando y me dejó en el suelo.
-Vamos a un parque-decía tomando mi polera.
-De acuerdo, vamos-dije mareado aún.
Fuimos al parque, en el cual había mucha gente, pero eso no nos importó. Entramos y era difícil decir quien de los dos parecía más infantil, porque corríamos de un lado a otro y nos subimos a montones de juegos, atracciones acuáticas y bromas a la gente. Comimos algodón de dulce y fue realmente divertido.
¡Al parecer el dicho "Las apariencias engañan" aplica muy bien en Sasuke!
Cuando volvimos nos costó mucho calmarnos: La adrenalina y energía del parque nos hacía actuar como niños pequeños.
Ya entrada la noche, estábamos tumbados en el suelo mirando el techo, exhaustos de tanto correr, saltar, jugar y tontear.
-¿Me acompañas a mi casa? Te tengo algo...-dijo animadamente Sasuke.
Fuimos por bus hacia el barrio donde se encontraba la Mansión Uchiha, lo cual fue demasiado cómico: Sasuke me tenía amarrado a sus brazos, yo me afirmaba de los barrotes y la gente nos miraba diciendo "¿Qué pasa con esos chicos" "Son raros" "No te acerques a ellos Natsu", entre otras cosas.
Llegando a la Mansión Uchiha, Sasuke me decía que fuese paciente con lo que me iba a dar, porque no iba a ser instantáneo ¡A mi que me encantan los regalos... Me va a costar mucho esperar!
Bastante sorpresivo fue escuchar a algunas personas discutir en el dormitorio principal con la puerta cerrada. Ambos pegamos oído para escuchar lo que decían.
-¡Eres menor de edad para andar fumando este tipo de cosas!-reprimió el primero haciendo sonar una caja.
-¡Lo que yo haga no les incumbe! ¡Piérdanse imbéciles!-gritó el segundo bastante enojado por su tono de voz.
-Tienes razón, no me importa en absoluto lo que hagas-intervino un tercero- Pero tus padres están muy mal por ti, se preocupan indebidamente de un crío como tú... No creo que seas el mayor.
Se escuchó un gruñido de enfado y luego unos pasos hacia la puerta, Sasuke y yo nos escondimos donde pudimos y tres personas salieron de la habitación.
-Hey... ¿Sabes quién es el rubio?
-Si me dices quienes son los morenos que estaban ahí- dije muy bajo.
-Son mis hermanos mayores, Itachi y Shisui Uchiha-dijo en el mismo tono- ¿Y el rubio? ¿Quién es?
-Es mi hermano mayor, Deidara Uzumaki-dije sorprendido y ambos abrimos los ojos de la sorpresa ¡Nuestros hermanos se conocían! ¡Y eran como aceite y agua!
Deidara iba saliendo cuando Sasuke me dijo que Itachi lo tomó muy fuerte del brazo; lo afirmó y quedaron cara a cara.
-Te estoy tratando de ayudar ¿Porqué no quieres entender?-preguntó Itachi sin expresión alguna a mi hermano tomándolo de los hombros.
EL cabezazo que le dio Deidara al hermano de Sasuke fue lo único que se escuchó, viendo unos adoloridos Itachi y Deidara y a un sorprendido Shisui.
Antes de que se pararan y pelearan en serio, Shisui se puso en medio para que no hicieran alguna estupidez.
-Es suficiente-dijo en tono sombrío Shisui- Puedes irte a casa Deidara.
Se escuchó el suspiro e mi hermano y salió de la Mansión Uchiha.
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