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El cortesano, el noble y el príncipe. por Maby de Sagitario

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Notas del capitulo:

¡ Hola!

Espero que estén bien n.n

Les traigo el octavo capítulo.

 

Despidió a su invitado con todos los honores, Isaac complacido prometió volver cosa que para el rubio sonó muy halagador. Revisó su aspecto, ya no tenía esas ojeras que aminalaban su atractivo; debía buscar una forma de captar nuevamente al atención de Camus por que estaba seguro que si se esmeraba en su físico, Milo sería historia y tal vez ( tuvo un pensamiento muy quimérico) Camus lo enviaba de regreso a su principado. Pero primero debía mover los hilos entre algunos nobles, comenzaría con Shura el cual según sus contactos sentía atracción por Aioros, el heredero de Sisifo, el tercer hombre más importante del reino después de Saga y Dégel.
Se puso una camisa blanca , un chalaco con filos adornados con diamantes engastados y encima una chaqueta de terciopelo rojo tinto y despidiéndose de sus empleados dirigió sus pasos hacia la casa Capricornio.
Shun que había observado cada uno de los movimientos sólo esperaba que su amigo no se excediera en sus movidas, eran muchos que ansiaban su destrucción por varios motivos.
Casa Capricornio, sala principal.
Como la última vez que estuvo por esos lares, Shura lo recibió con los brazos abiertos.
" Perfecto", pensó.
El Cid como siempre no estaba, por lo que resultaría más fácil.
—¿ cuéntame? ¿ a qué debo el honor de tu visita?
Decidió ir al grano.
—¿recuerdas la fiesta ofrecida por Sisifo Sagittarius?
—si ¿ por qué?
Shura fingía que no entendía nada de lo que estaba hablando, no obtante sabía de sobra de lo que era capaz el rubio.
—por que resulta que descubrí muchas cosas en ese evento.
—¿ cómo cuales?
—verás hay mucho interés por parte de Aioros Sagittarius hacia tu persona—se calló para ver el efecto que producían estas palabras.
Por unos largos minutos, Shura permaneció en completo silencio, lo único que se oía era su respiración y el choque de las tazas de té. La mirada oliva de Shura estaba posada sobre su taza, Hyoga se estaba hartando de tanto mutismo por lo que rompió el silencio con un carraspeo.
— y bien.
—yo..... no sé qué decir.
—puedo hacer que ese interés se convierta en algo más—se inclinó hacia adelante a tal punto de rozar su nariz—y a cambio quiero a Camus para mi.
—no quiero perder la amistad de los Acuario, en especial de Krest y Dégel.
Hyoga hizo una mueca de fastidio, en la corte se jugaba al mejor postor y ese era él.
—el primero está retirado oficialmente de la corte, estimado—refutó—y el otro es un amargado que odia los placeres.
—los estimo.
—si me ayudas no sólo tendrás a Aioros también tendrás un obsequio mío.
La mente de Shura trabajaba por hallar una salida a la encrucijada que tenía enfrente. Miró desconfiado a Hyoga el cual sonreía desvergonzadamente.
—bueno me retiro, muero por ir a la corte, ¡ Adiós querido Shura!—se levantó de la mesa obviando la molesta expresión de su anfitrión—¡ qué pases buenas tardes!
Shura oyó la risa burlona a lo lejos, su mandíbula se tensó. Su tío El Cid no admitiría esa clase de propuestas.
—ahora me doy cuenta por qué Dégel te califica como un inescrupuloso.
                    *********************
Principado de Antares.
Palacio Girtad, Salón Scarlet Escorpión.
Kardia miraba con aparente desinterés el pequeño discurso del Concejo de Regencia gobernado por el tío de su hermano, hasta que él y su hermana madre de Milo no salieran del palacio o en su defecto la influencia en la corte, no podía gozar de sus derechos que estaban despojados.
Molesto por la palabrería confusa comenzó a zapatear dispuesto a boicotear el discurso, logrando que su madrastra le reprochara su falta de respeto.
—¿ qué haces estúpido?
—acaso no lo ves—zapateó más fuerte siendo apoyado por unos cuantos más—el discurso de tu hermano me causa alergias.
—¡ Insolente!—bramó indignada.
Kardia sonrió de medio lado, le encantaba sacarla de quicio.
—yo diría rebelde.
Así era él rebelde y desafiante cosa que siempre odió ella por que a palabras de Kardia, esa mujer pretendía gobernar Antares a través de Milo, más fue un alivio al saber que su hermano no iba a permitir que lo "mangoneen"; desde le día en que el carácter de Milo salió a flote, Kardia pudo respirar tranquilo.
—¡ Guardias!
Los mencionados hicieron caso omiso a su petición por que respetaban a Kardia, además Milo había ordenado que en su ausencia trataran a su hermano como un príncipe como el príncipe que debe ser.
—¡ guardias!—insistió.
El jefe de todos ellos se adelantó y antes de que la mujer dijera algo nuevamente, relató los motivos de por qué no la obedecían.
—lamentamos, mi Lady si no la obedecemos, pero tenemos órdenes de Su Alteza Real Milo en no hacer nada en contra de su señoría Kardia.
La sorpresa se instaló en Kardia y los demás, se suponía que era " bastardo real", pero ahora lo llamaban " Su Señoría". La madre de Milo estaba boquiabierta, su rostro desencajado, sus ojos desorbitados, su odiado hijastro estaba venciéndola sin siquiera mover un dedo.
—¡ bastardo!—escupió airada mientras recogía su vestido adornado con perlas, terciopelo y tules de color rojo sangre, se retiró del salón seguido por su séquito.
—¡ arpía!—dijo Kardia con desprecio.
                    **********************
El pequeño triunfo sobre Shura lo tenía un poco contento, ahora faltaba Aioros que justamente se hallaba ahí junto a su hermano Aioria conversando con Saga y Kanon asuntos que a él no le convenían.
Unos cuantos le sonrieron hipócritamente, otros pasaron a su lado empujándolo, justo en esos momentos Asmita hacía acto de presencia acompañado de Shion y el hijo de este Mu el cual según las habladurías de algunos nobles era cotejado por Saga, para Hyoga, Mu no era competencia nadie era más bello que él.
Todos hicieron una reverancia ante Asmita, el rubio Conde de Helias no había reparado en que toda la corte se hallaba reunida en el gran "Salón Maradevi", el cual había sido restaurado y poseía un ambiente sobrio muy distinto al resto del palacio que era muy lujoso.
—¿ qué querrá Asmita?—se preguntaba.
Más allá Camus estaba junto a su padre Dégel, este último tenía un semblante muy serio, demasiado serio, bufó exasperado él no se desprendía de Camus.
La mirada del rubio rey se posó sobre lo más poderosos y antiguos del reino, era sabido que el rey en cualquier momento nombraría un sucesor ya que el que tenía, renunció a sus derechos y se retiró a un monasterio.
Eran cuatro las familias candidatas a sucederlo, los Acuario, los Sagittarius-Leons, los Aria y los D´Pisces a la cual pertenecía Afrodita pero como era parte de la chismografía palaciega a veces se hacía llamar Afrodita Roses. Los más opcionados eran los Acuario y los Sagittarius-Leons, Hyoga recordó lo que una vez le dijo Ikky que Camus estaba lejanamente emparentado con Asmita.
—¿ crees que elija a Dégel?—comentó Afrodita a Ángelo en voz baja.
—muchos se joderían aquí—dijo mirando sin disimulo a Hyoga.
—ese sería el primero en salir de quí.
Mientras los comentarios seguían, Sisifo intercambiaba saludos con Dégel y Camus, cabe decir que la familia Condal Acuario contaba con varias ramas pero la principal la conformaban los anteriormente mencionados aunque como siempre los rumores tan comunes decían que el abuelo de Camus llamado Krest estaba por regresar y que el trono era de Dégel.
—el patriarca Acuario está por regresar, Dégel en su ausencia ha logrado llevar muy bien las riendas de su casa—quien decía esto era Saori, joven Baronesa de Athens a Pandora Heinstein.
—¿ hay algo que deba saber?—la voz de Asmita calló los murmullos generales.
Saga muy serio se adelantó.
—la corte está reunida a la espera del nombramiento de su sucesor.
—eso será después—muchos exclamaron sorprendidos a excepción de Dégel que para él representaba algo más serio—por ahora me dedicaré a lo político y económico del reino.
Alguien se arriesgó a preguntarle sobre su posible eterna viudez.
—¿ no hay un candidato para gobernar a su lado?
En vez de enojarse, Asmita contestó con un no que no convenció del todo.
El joven rubio había notado una incomidad en Dégel Acuario, lo que había oído de que había alguien más sobre él le dio una especie de curiosidad insana.
—creo que trataré de averiguar tu talón de Aquiles—dijo teniendo como próximo objetivo al Conde de Bluegard.
Asmita siguió hablando de diversas cosas que para Hyoga no eran de importancia. luego de una hora, la audiencia con el rey finalizó siendo él quién se retiró primero, el resto de los nobles después.
Un paje se acercó y le entregó un sobre con el sello de los Acuario, miró hacia donde estaba Camus pero no lo halló. Lo abrió lejos de las miradas impertinentes hallándose con las siguientes palabras.....
" El martes, en la Quinta Taurus a las 2:30 de la tarde.
Camus Acuario"
Volvió a guardar la hoja con una sonrisa, para él todo se volvía a su favor.....

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

Se me cuidan :)


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