¿Usagi? ¿Misaki? ¿Qué les sucede? ¿Se van a quedar todo el día parados en la puerta?-esas simples preguntas formuladas por la tranquila y pasiva voz de Takahiro me hacen dirigir mi mirada hacia él, esperando encontrarme una mirada de odio y decepción pero solo me encuentro con la siempre amable expresión de Takahiro, este viene bajando de las escaleras
¿Eh?-escucho como dice Misaki detonando una gran confusión
Que se vengan a sentar, no pretendes tener a Usagi cargándote todo el día, ¿verdad, Misaki? –al instante camino hacia el sillón para depositar a Misaki en este con mucho cuidado sentándome a su lado
Entonces eso quiere decir que no nos vio, si lo pienso bien y conociendo mí casa a la perfección es ligeramente posible que no nos viera, pero aun así muchas veces me he quedo en las escaleras esperando a Misaki y puedo verlo perfectamente bien, así que no creo muy posible que no nos viera a menos que Takahiro estuviera saliendo del cuarto del marimo que es el más cercano a las escaleras pero aun así no es muy probable pero al observar la tranquila expresión de Takahiro junto con esa amable sonrisa no puedo evitar pensar que tal vez no nos vio, regreso a la realidad al escuchar su animada platica tal parece que Misaki olvido rápidamente el peligro en el que estuvimos hace unos minutos, intento concentrarme en su plática pero extrañamente me estoy sintiendo un tanto somnoliento, mis ojos se sienten sumamente pesados, me pregunto porque de un momento a otro me siento así, escucho sus voces a lo lejos llamándome pero no puedo responderles aunque siento como muevo mis labios no sale ni un sonido de mi boca, extrañamente tengo unos grandes deseos de cerrar mi ojos por un buen tiempo, mi cuerpo se siente tan pensado ¿Qué demonios pasa? ¡Ha! Ya recuerdo. En todo este tiempo no he dormido más de dos horas, incluso después de que despertó Misaki no pude cambiar ese hábito que se había adherido a mi aunque ahora tengo una gran sueño, supongo que el sentir a Misaki en casa juntos nuevamente puede darme la tranquilidad necesaria para dormir, así que simplemente me dejo abrazar por los brazos de Morfeo.
Estoy recostado en un gran jardín rodeado de una inmensa calma puedo sentir el césped en mi manos extendidas sobre el me causa unas ligeras cosquillas, sobre mí se extiende un infinito cielo que poco a poco se va tornando más y más oscuro hasta llegar a un negro total justamente cuando creí que quedaría en una completa oscuridad me levanto un poco hasta quedar sentado solo para poder apreciar como un camino se extiende frente a mi siendo marcado solamente por unos enormes y hermosos arboles de cerezo que en su tronco cuentan con unas pequeñas luces blancas iluminando solo lo necesario. No tengo idea de donde es este lugar pero eso no me preocupa, es tan tranquilo tan relajante tan hermoso irradia una calidez tan acogedor que me recuerda justamente cuando estoy entre los brazos de Misaki. Simplemente el lugar que describe perfectamente a Misaki
Me pongo de pie solo para avanzar tranquilamente entre este tranquilo sendero admirando el lugar, por más que avanzo el camino sigue siendo el mismo nada parece cambiar incluso llego a pensar que estoy caminando en círculos pero me doy cuenta de mi error cuando alcanzo ver una estructura a los lejos que conforme me voy acerando va tomando forma hasta convertirse en un kiosco que se encuentra rodeado de loa arboles de cerezo dándole un fin al camino. Me paro en medio de ese kiosco dándole vueltas solo admirando todo este lugar pero justamente en una de esas vueltas alcanzo a percibir por el rabillo del ojo una persona sentada abrazando fuertemente sus rodillas mientras esconde su cabeza ahí mismo, me detengo justamente en su dirección. Puedo asegurar que es un niño por lo pequeño de su cuerpo, justo cuando me poso frente a él solo unos pocos centímetros de distancia el pequeño levanta el rostro dejando ver unos relucientes ojos esmeraldas que me son sumamente familiares pero ya viendo bien al niño puedo decir sin dudar que es un tierno Misaki de niño pero extrañamente este tiene los ojos hinchados y rojos dejando en claro que estuvo llorando un buen tiempo.
Misaki ¿Estas bien?-me siento frente a él formulando una amable sonrisa
¿Puedes verme?- se pone rápidamente de pie mientras muestra una expresión de sorpresa
Claro ¿Por qué no lo haría?-al momento lo tomo ligeramente de sus pequeños brazos para sentarlo de lado sobre mi regazo
Hace tiempo que nadie puede verme, además dejo de haber personas aquí-escucho como empieza a sollozar un poco mientras esconde su cabeza en mi pecho
¿Qué edad tienes, pequeño?-creo saber que sucede
¡No soy ningún pequeño! En unos meses cumpliré 10 años-Claro para esta época sus padres ya habían fallecido, Takahiro pasa una buena parte del día trabajando, así este hermoso mundo que creo el tierno Misaki se quedó solo junto con una parte de la infancia de Misaki. Me pongo de pie con el pequeño Misaki en mis brazos para avanzar entre los árboles, mientras paseamos puedo ver como por el pasto hay juguetes tirados que es claro tienen mucho sin utilizarse, este lugar está realmente solo ¿Cuánto tiempo ha estado solo? Me detengo al lado de un tierno peluche que me recuerda Suzuki-san tomándolo
Hey Misaki ¿Por qué no juegas con este lindo peluche?-le pregunto poniendo el peluche frente a el
¡No quiero! ¡No debo!- toma al peleche en sus brazos para lanzar con mucha fuerza lejos de nosotros
Pero aun eres un niño, es normal que quieras jugar ¿No quieres muchos juguetes?-sigo caminando
Yo soy grande, no debo molestar a Niichan-murmura haciendo un puchero pero muestra una expresión sombría
Pequeño, te prometo que algún día hare este mundo aún más hermoso-el pequeño me ve durante unos segundos para después formular una sonrisa infantil que he visto en Misaki grande
Aquí hay un lugar muy hermoso pero últimamente no puedo meterme-me dice mostrando una cara de confusión
¿Hacia dónde está ese lugar?-pregunto curioso
El levanta uno de sus brazos luego con su mano forma un puño solo dejando un dedo recto apuntando hacia unos árboles lilas que no había visto hasta ahorita, así que emprendo camino pasando por entre los árboles, nunca había visto ese tipo de árbol, son como los de cerezo pero de color lila, pasado un buen rato llego a los que parece una cabaña. Bajo al pequeño Misaki de mis brazos y este se va corriendo hasta está llegando a su puerta veo cómo logra abrirla pero extrañamente cuando esta por entrar algo lo detiene, me poso a su lado puedo ver su carita de tristeza, tomo suavemente una de sus manitas para caminar adentrándome en el lugar y para mi sorpresa y la del pequeño Misaki este puedo entrar sin ningún problema. El pequeño se va corriendo por toda la casa riendo fuertemente abrazando todos los peluches, es cuando caigo en cuenta que el interior de este lugar es idéntico al departamento. Todo es igual los sillones rosas, Suzuki-san sentado en uno de ellos, voy a cada uno de los cuartos para encontrarme lo mismo que en mi departamento, el cuarto del marimo, la muralla china a medio construir, el tren en perfecto funcionamiento, el cuarto de los Suzuki´s que me caen encima como avalancha, mi estudio hasta mi cuarto pero lo único diferente es el cuarto de Misaki, este está lleno de todas las cosas que a Misaki le gustan desde mangas de ese idiota Mangaka hasta pasteles de fresa en las mesas, bueno es el cuarto de un niño ¿Quién soy yo para decir que esto es raro? Pero ahora lo que ronda en mi mente es ¿por qué el pequeño no puede entrar aquí? Al menos sin mí. Justamente cuando estoy por salir del cuarto de Misaki el pequeño entra corriendo hacia mi dirección para después lanzarse a mis brazos lo recibo gustoso, lo levanto hasta dejar su cabecita en mi cuello pero él tenía otros planes levanta su rostro solo para estampar sus pequeños y suaves labios sobre los míos, en definitiva el beso más inocente de mi vida, solo un tierno contacto que conlleva grandes emociones, el pequeño se separa de mi con una gran sonrojo en sus mejillas.
¡Tienes que hacer que vuelva entrar a este lugar!-me grita tomando mi rostro con mis manitas
¿Cómo hare eso?-pregunto acariciando una de sus mejillas
Simplemente despierta-deja ver una hermosa sonrisa
¿Eh?-murmura extrañado
¡DESPIERTA!
Estrepitosamente abro los ojos al mismo tiempo que intento levantarme pero unos cálidos brazos me detienen dejándome en la misma posición por un momento respiro agitadamente pero me calmo al enfocar mi mirada hacia arriba solo para observar el común techo de mi cuarto y después voltear para encontrarme con un dormido Misaki que me aprisiona fuertemente con sus brazos ¿Cuándo llegue a la habitación? Veo un poco hacia la ventana en mi cuarto solo para encontrarme con una gran y bella luna que brilla iluminando solo una parte del cuarto ¿Qué hora será?
Me separo lentamente de Misaki sin hacer grandes movimientos logrando salir de sus brazos y dejándolo dormir ¿Qué diablos? ¿Quién me puso la pijama? Mejor no me preocupo por eso, salgo del cuarto solo para dirigirme al baño a tomar una buena ducha fría.
Cuando ya termino voy un momento al estudio, ahí me encuentro sobre mi escritorio la historia que escribí hace más de 8 meses en la que la pareja junai romántica terminaba, al final no se publicó por todos las cosas que surgieron en ese tiempo, me pregunto que debería hacer ¿Doy por terminada esa pareja? Al final a Misaki siempre le molesto que lo usara para estas historias, lo que debería hacer es cambiar la apariencia del personaje que representa a Misaki, que conserve su personalidad pero con diferente aspecto, eso es lo mejor, además todavía tengo Hiroki para un buen material.
Apenas salgo del estudio mi estómago hace un gran ruido dejando en claro mi hambre, que extraño hace tanto tiempo que no tenía ganas ni de comer, me gustaría comer algo preparado por Misaki pero no quiero despertarlo además debe descansar, supongo que cocinare algo ¿Qué podría salir mal?
Misaki Pov
Me remuevo en la cama estirando los brazos por toda la extensión de está buscando a Usagi-san al momento en que no lo siento abro rápidamente mis ojos solo para confirmar que efectivamente Usagi-san no está aquí, puedo ver como la luz del sol entra ligeramente en el cuarto, me siento en la cama estirándome sintiendo la relajación en todo mi cuerpo pero esta se va un poco al escuchar un estruendo proveniente de afuera del cuarto, rápidamente me pongo de pie para salir corriendo solo que a una velocidad un poco más baja de lo normal.
Apenas afuera puedo ver desde las escaleras a Usagi-san rodeado de una gran bola de humo bajo rápidamente encontrado con la cocina hecha un desastre, hay una especie de masa negra junto con un líquido verde y algunos vidrios rotos cuando apenas estoy por decir algo ciento como agua cae sobre mí mojándome cada vez más. Claro los detectores de humo.
Le humo se disipa poco a poco hasta dejar la cocina libre del mismo pero con un gran olor a humo, en ese momento Usagi-san me ve parado al lado de lavavajillas y formula una sonrisa tonta a modo de disculpa
¿Qué haces? ¿Por qué decidiste acercarte a la cocina?-pregunto un poco molesto mientras me acerco a él cuidando de no pisar los vidrios
Tenía hambre y pensé que podría cocinar algo pero pensándolo mejor ordenare algo a domicilio- con una de sus manos se rasca la cabeza dejando ver su vergüenza con una risa nerviosa
¿Por qué no me despertaste? Yo puedo cocinarte todo lo que quieras- lo miro fijamente
Era muy temprano, tú debes descansar- explica tranquilamente mientras saca su celular de su bolsillo es en ese momento cuando como hay cortadas en uno de sus manos me acerco rápidamente quitándole el celular de la mano tocando ligeramente las heridas, son algo superficiales
¡Por esto no debes acercarte a las cocinas!- grito un poco dejando en claro mi molestia mientras tomo el botiquín que se encuentra en uno de los estantes de la cocina, siempre está ahí por lo mismo de que Usagi-san siempre se corta cuando se acerca a la cocina, curo un poco sus heridas para después poner una que otra curita en las heridas más profundas
Se supone que yo te cuide a ti, no tu a mí-suelta un bufido de frustración
Y lo haces pero en estas cosas deja que yo te cuide ¿Si?-le digo sé que ese comentario lo hizo feliz
Dejando su mano libre me dispongo a limpiar el desastre de la cocina para después cocinar un desayuno no puedo evitar sentir una grata felicidad al cocinar, hacer estas cosas tan comunes hacen que me sienta tan dicho y más por saber que estoy aquí en la casa junto a Usagi-san, todo está bien ahora. Unas horas más tarde ya bien comidos Usagi-san se va la sala sentándose en uno de los sillones para tomar un libro y empezar a leer, con un poco de vergüenza me acerco sentándome a su lado sin ningún espacio entre nosotros, hace 8 meses pondría a Suzuki-san en medio pero ya no más, puedo sentir un poco la mirada de Usagi sobre mi como si quisiera decir algo pero al final no dice nada y continua con su lectura
¿Qué libro es ese?-nervioso intentando iniciar una conversación
Los años de peregrinación del chico sin color*-responde sin dejar de leer y todo se vuelve a quedar en silencio
¿Y esta bueno?-intento volver a iniciar la plática tal parece que lo logro un poco ya que baja el libro
Sí, es muy interesante, nunca había escuchado del pero ha resultado ser una maravilla-puedo ver el brillo en su mirada al contarme
¿Y cómo supiste del?-pregunto feliz al saber que tengo su atención
Me lo regalo Takeo-san-ese idiota y lo que más me molesta es que Usagi-san lo dice sonriente
Oh-murmuro simplemente agachando un poco la cabeza dejando que mi flequillo cubra un poco mis ojos
De casualidad ¿A ti no te agrada Takeo-san? – pregunta Usagi-san dejándome sorprendido pero gracias a mi flequillo no puedo ver mi rostro
¿Eh? ¿Por qué preguntas eso?- evado completamente su pregunta
No lo sé por un momento me dio la impresión, además Takeo-san también lo menciono- me cuenta con una sonrisa amable ¿El idiota le dijo eso? ¿A que está jugando?
N-no es que no me agrade, es que simplemente todavía estaba un poco cansado- ¡Lo odio! Pero que le voy a decir a Usagi-san “Tu amigo me amenazo, es malo, no vuelvas hablar con el nunca” Parecería un celoso paranoico, me vería como Usagi-san con Ijuuin-sensei prohibiéndole hablar con alguien aunque en los dos asunto los dos tenemos razones ya que Ijuuin-sensei si quería conmigo al igual que Takeo-san quiere con Usagi-san pero no soy así, nunca podría hacer algo así.
Justamente eso le dije, con el tiempo van a conocerse mejor y estoy seguro que se llevaran bien- ¿Qué? ¿Volveré a ver al idiota? ¿Llevarnos bien? Entonces a Usagi-san realmente le agrada ese idiota, justamente cuando creí que todo volvería a la normalidad.
Han pasado unos cuantos días desde que regrese a casa, casi la misma rutina de siempre lo único que no hago es ir a trabajar, todavía tengo un mes entero vacaciones, me puedo mover normal mente en lo que a mí respecta ya estoy completamente bien aunque Usagi-san insiste en que el doctor dijo que serían dos semanas para que este bien. Lo peor de todo esto es que Usagi-san no hace ningún mínimo movimiento de querer pasar a más de un simple beso superficial en mis labios o mejillas, despeinarme despreocupadamente el cabello, uno que otro abrazo pero estos aunque cálidos y reconfortantes no son como los de antes que también tenían una posesividad y una gran fuerza que lograba envolverme por completo dejando atrapado entre sus fuertes brazos, sin ninguna escapatoria.
En este momento llevo un café al estudio de Usagi-san junto con un listón verde para ponerle a Suzuki-san, entro lentamente para ver a Usagi escribir rápidamente en su laptop tal parece que está inspirado lo cual es bueno porque Aikawa ya le dio fecha límite, dejo el café en una parte del escritorio sin que estorbe para irme al sillón donde se encuentra Suzuki-san y cambiarle el listón en silencio mientras observo a Usagi-san, sin querer suelto una gran suspiro que provoca que Usagi-san se detenga para voltear a verme
¿Estás bien, Misaki? –se pone de pie caminando en mi dirección para sentar a mi lado acariciando suavemente mi cabello
E-estoy bien-¿Qué podría decir? ¡Quiero que me toques! Eso sería demasiado para mí, moriría de vergüenza, así que simplemente dejo caer mi cuerpo sobre para esconder mi rostro en su pecho aspirando fuertemente intentando atrapar su característico aroma, Usagi-san me envuelve en sus brazos protectoramente esto me provoca en extraño cosquilleo que nace en mi estómago hasta mi entrepierna, con solo un poco de él me empiezo a calentar de sobremanera, no sé en qué momento me moví pero me encuentro sentado en su regazo con mis piernas a sus costados con mi rostro en cuello, extrañaba tanto sentir su suave piel, puedo sentir como Usagi-san se estremece con las caricias que reparto suavemente por su cuello, lentamente levanto mi rostro hasta quedar a milímetros del suyo, siento mi cara arder debo estar en extremo sonrojado pero no me importa esto es por el bien de nuestra relación, viendo directamente los ojos de Usagi-san me acerco a sus labios sonrió al ver como cierra los ojos aceptando plenamente lo que viene.
Hago una ligera presión sobre los labios de Usagi-san, ellos me aceptan por completo dejándome sentir la suavidad el amor en ellos, las manos de Usagi-san se pasean por mi espalda bajando hasta mi cadera haciendo una leve y exquisita presión en ella, una ligera mordida de su parte en mi labio inferior provoca que me arquee mientras suelto un jadeo que el aprovecha para introducir su húmeda lengua a mi boca, explorándola sin pudor alguno, suelto un gemido de completo gusto al sentirla entrelazarse a la mía, es el beso más intenso que he tenido toda esta semana, no voy a desaprovechar la oportunidad menos al sentir como introduce sus manos dentro de mi camisa repartiendo calientes caricias por mi abdomen, saliva sale por la comisura de mi boca pero no me importa, solo quiero sentirlo apenas siento como va levantando mi camisa alzo mis brazos pero un odioso ruido proveniente del celular de Usagi-san hace que este se detenga por completo, de inmediato saca sus manos de mi camisa al mismo tiempo deja de besarme para ponerse de pie tomando su celular
Ta- Aikawa… ¿Qué? ¿Ahorita? No quiero… bien, llego en 15 minutos-suelta un suspiro aventado el celular hacia el sillón cayendo a solo unos centímetros de mí, al igual que el también suelto un suspiro, justo cuando creí que llegaría as lejos nos interrumpen
Misaki, tengo que ir a la editorial, intentare no tardarme tanto-apenas me ve asentir sale del cuarto para ponerse ropa decente ya que Usagi-san extrañamente estaba en pijama
Me quedo un momento sin hacer algo solo estoy ahí sentado pero un sentimiento extraño dentro de mí me hace tomar el celular de Usagi-san siendo que nunca había sentido la necesidad de revisar que es lo que hace, abro tranquilamente las llamadas recibidas para ver el número de Aikawa pero para mi sorpresa solo veo el nombre de Takeo-san como última llamada recibida, no puedo evitar sentir un dolor en el pecho, sofocante casi dejándome sin respirar mientras sigo observando el nombre de ese idiota. Pero Usagi-san dijo que iría con Aikawa
¿Usagi-san me mintió?