Estaba conduciendo hacia casa y tan solo me puse a pensar en lo que paso en mi trabajo con Sehun horas atrás, me pregunto a mi mismo como pude dejarme llevar por el momento, por sus besos y caricias. Lo admito, fue algo placentero, pero dejarme por un tipo quien me estaba acosando ya hace mucho tiempo creo que no hubiese dejado, bueno lo que paso ya tenia que dejarlo en el olvido, de ninguna manera mi hermana debe enterarse de lo que paso no es que se lo contaría pero no tenia que enterarse en lo absoluto.
Ahora estaba conduciendo en mi vecindario y estaba conduciendo lo mas despacio posible ya que los niños tenían la costumbre de dejar algunos de sus juguetes en la calle, por fin evadí todos los obstáculos de mi camino y estacione mi auto en el garage, apague el motor y abrí la puerta de mi casa, coloque las llaves en el llavero que estaba cerca y de pronto comencé a olfatear el olor de la exquisita comida que mi hermana prepara siempre todas las noches.
Entre a la cocina y vi a mi hermana con su sonrisa, a ella siempre le gusta cocinar y se nota ya que siempre compra libros o ve programas de cocina. Le tape los ojos por detrás y ella soltó una risa y retiro mis manos y me dio un golpe amistoso en mi hombro, me gusta mucho cuando mi hermana y yo tenemos momentos buenos ya que en ella puedo contar siempre, excepto por la parte de sexo con Sehun eso en definitiva no se lo diré.
- Hermanito que te pasa? - dijo mi hermana mientras se retiraba el delantal de cocina.
- Nada, solo comamos esta bien? - dije con tono de voz un tanto nervioso.
- Luhan... - me vio con una mirada fria.
- Que paso? - me senté en la mesa frente al plato vació.
-Conozco esa expresión en tu rostro y se que algo pasa.
Claro, olvide por completo ese instinto que mi hermana tiene al saber cada vez que miento, pero debia hacer algo para ingeniármelas para librarme de su posible interrogatorio, algo que le gusta mucho hacer a ella hasta que por fin se me vino algo a la mente.
- Ya llamaste a mama y papa?
En eso mi hermana abrió los ojos y golpeo su frente con la palma de su mano y yo di un suspiro por su olvido.
- Es cierto! Gracias hermano!!
Di un suspiro de alivio ya que de no ser por esa buena idea ella me hubiera estado interrogando. Poco tiempo después que mi hermana volvió a la cocina yo ya había cenado, mi estomago rugía tanto del hambre y no podía esperar por mucho tiempo. Serenity me vio con cara de de decepción a lo que yo se la regrese con una sonrisa y la comida de ella ya servida en su plato, le di un beso en la frente y me fui corriendo directo hacia mi habitación.
Al subir a mi habitación me desvestí y fui directo al baño a darme una ducha a quitarme toda esa suciedad de encima, me queria sentir limpio después de lo que había pasado. Empece a pasarme el jabón por todo mi cuerpo y de pronto cuando cerré los ojos para pasármelo por el rostro de pronto comencé a sentir como una caricia agradable, y ya me estaba imaginando de nuevo a ese chico de cabello oscuro quien me acosa todo el tiempo.
Sus suaves y delicadas manos pasando por mi cuerpo, de pronto abrí mis ojos de golpe y comencé a quitarme el jabón tan rápido como pude y salí con una toalla envuelta en mi cintura. Solté un grite un grito tan fuerte de ira ya que enserio haré algo al respecto, cuando? Sera pronto! Eso lo tengo por seguro.
- Luhan estas bien? - dijo mi hermana tras la puerta.
- Si hermana, descuida - dije y escuche y un silencio lo cual quería decir que mi hermana ya se había marchado.
Luego de un par de horas mas me acosté en mi cama y cerré mis ojos y quede profundamente dormido. Al amanecer me levante y quite esas cosas feas de mis ojos cuando me levanto. Me levante de mi cama y me metí al baño y como siempre hice mi rutina, cepille mis dientes y tome una ducha, me puse una ropa casual ya que hoy es mi día libre.
Salí de mi habitación y como pude ver mi hermana recordó que exactamente hoy yo no voy a trabajar, ya que si fuese así el desayuno estaría preparada pero por lo visto seguía durmiendo. Bueno ahora me tocaba a mi hacer el desayuno.
Saque un par de sartenes y unos recipientes, saque todos los ingredientes que necesitaba para preparar lo que haría. Comencé a poner la harina, la azúcar, la soda, y los demás ingredientes secos. Luego de juntarlos todos puse los líquidos y al mesclarlos los puse junto con los ingredientes secos, y al colocarlo todo en un bol, encendí el horno y puse mi mezcla en el horno, puse el temporizador y me puse a limpiar todo mi desastre.
Cuando iba por la mitad de mi limpieza el timbre sonó y deje todo lo que estaba haciendo y fui directo a atender la puerta y por lo visto era el cartero Ben.
- Hey Luhan, buen día - dijo alegre y comenzó a buscar algo en su maletín.
- Buen día, que te trae por aquí? - dije mientras me pasaba la mano por mi cabeza.
- Tienen una carta.
- Una carta? - dije extrañado ya que hace mucho no recibimos cartas excepto por nuestros padres, pero solo las mandan una vez al mes.
- Pues si - dijo ya con un tono de voz menos alegre.
- Por que ese tono de voz? - pregunte muy curioso.
- Ahh no nada, solo ignorame - dijo y se fue a la siguiente casa.
Cuando estaba a punto de entrar de nuevo a mi casa el chico de los periódicos apareció y me tiro el mio el cual me dio en la cabeza. El chico se disculpo y yo solo tome mi periódico y entre en mi casa. Coloque el sobre en la mesa de la cocina y tiempo después saque mi pan del horno y lo puse encima de la estufa. Mientras esperaba que se enfriara tome el sobre y lo abrí y quede boca abierta ya que era una carta de embargo, si no pagaba en tres días esta casa ya no seria mía y quedaría con Serenity en la calle.
Y para colmo el timbre volvió a sonar y fui de mala gana abrir la puerta mientras tenia mi cara arrugada.
- QUE! - exclame molesto frente a la persona quien estaba enfrente mio.
- Es así la forma en que me tratas? - exclamo Sehun frente a mi.
- Que haces aquí? - exclame furioso.
- Vine a proponerte a que vengas a vivir conmigo.
Las palabras que salieron de su boca me quede totalmente sorprendido ya que a esto había venido a mi casa?
- Vete al demonio - exclame y cerré la puerta en su cara.
- Si no aceptas te quedaras en la calle Luhan - dijo ese chico quien no se iba aun.
Y la verdad el tenia toda la razón, debía hacer algo pronto, si no mi hermana y yo no tendremos a donde ir.