Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El dinero ¿Compra el amor? por AndriiNaruu

[Reviews - 484]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Si con lo que estan a punto de leer no consigo la reaccion que espero con respecto a Sasuke... No se que más hacer! xd

-Ni siquiera en fin de semana descansas ¿Verdad? –Preguntó Naruto observando a Sasuke en el pequeño living revisando su laptop, se acercó hasta quedar a su lado parecía que Sasuke no le prestaba atención- No sabía que usabas lentes –Notó-

-Por supuesto que uso lentes a veces, son de lectura

-¿Y que lees? –Preguntó curioso-

-¿Te interesa?

-¿Por qué no?

-… Hm –Sonrió- Mira…

 

  Naruto había despertado de madrugada y se dio cuenta de que estaba en la cama del moreno y que además no se había cambiado pero poco le importó en ese momento, cuando vio al moreno en la otra cama rió bajo, seguro se lo cobraría. Solo volvió a dormir hasta que despertó después de las siete notando que Sasuke aún dormía, se bañó y cambio, bajó a desayunar y pidió algo para llevar a la habitación, dejó que el empleado acomodara todo y se fue… Cuando volvió encontró a Sasuke aun en ropa de dormir trabajando

  Sasuke en cambio cuando se despertó lo primero que hizo fue preguntarse donde estaba el rubio ¿Habría vuelto a la ciudad como si nada? Pero todo quedó de lado y le dio crédito sonriendo cuando notó que le había pedido el desayuno. Apenas terminó de comer una llamada lo hizo suspirar volviendo a la realidad, tenía trabajo…

 

-Eso es muy… ¡Aburrido!

-Jaja, claro pero el jefe tiene que hacerlo –Sasuke se quitó los lentes observando al rubio en el sofá individual- No sabes lo que es tener una empresa encima

-Si si –Dijo aburrido- Ya lo sé, pero ¿Ni siquiera en fin de semana? ¡Es domingo! Todos necesitan un respiro ¿No era esa tu idea de este viaje?

-Tienes razón, pero si me divertí y relajé ayer… Míralo así, todas las compañías asociadas a Sharingan y sus franquicias, sucursales responden ante sus jefes y ellos todos responden ante mí. No es fácil ¿No?

-Es demasiado para una persona, necesitas asistente

-Tengo asistentes, pero me gusta que las cosas se hagan a mi manera, prefiero hacerlo por mi mismo –Naruto suspiró con fastidio-

-Te volverás viejo rápido ¿Cuántos años puedes tener? ¡Demasiado trabajo!

-¿Quieres hacerlo tu?

-No, gracias –Sonrió-

-Naruto ¿Qué edad tienes?

-¿Eh? 23 ¿Y tú?

-27

-¡Ves! Aunque no lo parezcas eres joven

-¿Cómo que no lo parezco? –Alzó una ceja- Soy joven y atractivo

-Aja… -El sarcasmo fue obvio-

-¿No soy joven y atractivo? ¿Además de rico?

-Lo de rico nadie puede negártelo, por lo demás… Eh… -Naruto movió el rostro como pensándolo y viendo a todos lados, Sasuke se cruzó de brazos- Deberías preguntarle a una mujer

-Solo respóndeme. Además todas las mujeres que conozco me creen muy guapo

-Egocéntrico

-Sigo siendo guapo, lo sabes solo que no quieres admitirlo –Volvió a ponerse los lentes y observó la pantalla-

-Presumido…

-No me falta mucho aquí, ¿Quieres hacer algo más antes de volver?

-¡Ah! –Suspiró con fuerza- Pasó muy rápido

-¿Quieres quedarte más tiempo?

-¿¡Puedo!? –Preguntó viendo al moreno, pero éste seguía viendo la pantalla- No, claro que no puedo…

-No te preocupes, te traeré otra vez… En un par de años quizás –Bromeó-

-¡Hey!

-Jaja ¿Ves? No fue tan malo aceptar mi invitación

-Aja…

-Orgulloso

-¡Mira quién habla!

-No cambies el tema… ¿Quieres hacer algo más antes de irnos?

-¿A qué hora nos vamos?

-Ah… -Sasuke observó la hora- Después del mediodía

-¿No quieres ir tu a algún lado?

-Sí, quiero ir al onsen contigo –Lo observó fijamente, Naruto alzó una ceja pero su rostro estaba serio, Sasuke sonrió con gracia- No lo sé… Quizás simplemente a caminar un poco por ahí

-Me parece bien

 

  Cuando Sasuke terminó y salieron llevaba además de lentes un sombrero y a Naruto le parecía extraño

 

-Te da un toque andrógino

-No lo creo

-…

-Solo me preocupo por mi piel, y porque no me reconozcan estando contigo

-¡Hey! –Sasuke sonrió, solo bromeaba- Tú fuiste el que me invitó, te agrada mi compañía

-No

-Claro que si

-Me encanta tu compañía… -Naruto no pudo decir algo más y al moreno le daba gracia eso-

 

  La mañana pasó simplemente caminando por las calles, por algún parque, hablando, observando… Una salida cualquiera y tranquila de dos amigos cualquiera… Desde una terraza el rubio se quedó observando el puente y la ciudad del otro lado

 

-No quiero irme –Confesó en voz baja, Sasuke a su lado no dejó de ver el horizonte-

-Aunque no lo creas, yo tampoco… Hace mucho no me relajaba y divertía así

-Gracias a mí-ttebayo

-Si claro –Ambos sonrieron un momento-

-Hablando en serio, gracias por invitarme teme

-De nada…

-No eres tan malo después de todo

-Claro que no lo soy –Comenzó a alejarse-

-¡Solo por esta vez no lo eres! Ne, teme… -Llegó junto a él deteniéndolo del brazo-

-¿Qué?

-Volvamos en el metro

-No ¿Por qué?

-Para hacer algo diferente

-No me gustan los lugares con mucha gente a mí alrededor

-No estará lleno de gente

-¿Ah no? ¿Por qué tan seguro?

-Confía en mi… -Sasuke se lo pensó un momento, esa había sido la frase que le había pedido siempre al rubio y ahora oírla era diferente… ¿Debería? ¿O no?-

-Está bien

-¡Sí!

-Me siento un padre consentidor… -Naruto rió con eso- O un amante desesperado –El rubio alzó una ceja-

-¿Amante desesperado? ¿En serio? Jajaja

-Claro, acepto a todo lo que propones

-Lo haces porque quieres

-No dije que no…

 

  Sasuke suspiró esperando la llegada del metro, no podía creer que haría eso, hacia demasiado tiempo que no usaba el metro y agradecía no llevar nada, pues su auto y sus cosas serian llevadas luego a su casa.

 

-No sé como acepté a esto…

-No es tan malo –El metro llevaba personas pero no demasiadas, podían sentarse con comodidad- Te dije que no estaría atestado de gente

-Si si como digas

-Te cuesta aceptar que no tenías la razón ¿Cierto?

-Hmp…

-Jaja ya lo sabía… Mira, mira como se ve desde aquí…

 

  Apenas bajaron del metro Naruto comenzó a caminar

 

-¿Dónde vas?

-A casa ¿No?

-… ¿No quieres ir a comer? –El rubio sonrió-

-No puedes comprarme con comida

-Lo intentaré –Le siguió la corriente-

 

  Ambos se dirigieron a comer y luego a pasear por un jardín japonés donde las horas se fueron de repente entre caminatas y charlas

 

-Estos jardines son hermosos…

-Son pacíficos –Dijo Sasuke mientras estaban detenidos en un pequeño puente observando el agua bajo ellos-

-Solía venir con mis padres y mi hermano cuando era pequeño. Mi papa se le propuso a mi mama en un jardín como este, estaban todas las flores abiertas según él… -Sasuke observó en el reflejo del agua que la sonrisa del rubio aumentaba y resplandecía de recordar aquello- Y se casaron en ese mismo jardín…

-Eso… Eso suena muy lindo, y seguramente fue muy romántico

-Así parece –Suspiró profundamente alzando la vista y viendo al frente, la brisa comenzó a soplar mientras que Sasuke observaba el perfil del rubio-

-Dobe…

-¿Y ahora por qué me llamas así? –Preguntó sin comprender y observando al moreno, que aunque parecía igual de serio que antes, un aire extraño lo rodeaba algo como… ¿Nostalgia? ¿Melancolía?- ¿Qué?

-Me gusta la forma en que brillas cuando hablas de tu familia –Sonrió sinceramente, el rubio aceptó el cumplido regalándole una sonrisa igual-

 

  La tarde ya caía sobre ellos cuando al salir del jardín tuvieron que separarse

 

-Las cosas que compraste puedes irlas a buscar cuando quieras

-Claro

-Y también la ropa que usaste si la quieres

-¿Hablas en serio?

-Claro

-… Está bien, me envías tu dirección y pasaré mañana quizás. Buen fin de semana –Sonrió- Gracias

-De nada… Ojalá se repita

-Claro-ttebayo

 

  Cada uno tomó dirección contraria, Naruto llegó al departamento y lo encontró vacío, le pareció extraño pues el domingo era el día libre de su hermano pero entonces recordó que seguramente estaría con Itachi y se le pasó… Ese fin de semana lo había ayudado mucho y ahora estaba más tranquilo, más relajado, tenía que darle crédito a Sasuke, porque le hizo un favor al alejarlo de la ciudad aunque fuera solo un par de días. Ahora tenía que volver a la realidad, mañana volvía a la rutina diaria…

 

  Deidara no pudo evitar reír cuando Sai cayó de repente al resbalar en el césped, pero debido a eso Itachi apareció de repente tomándolo desde atrás y cargándolo

 

-¡Ah! ¡Itachi bájame! ¡Nos vamos a caer! –Y justo en ese momento, cayeron-

-¡Jajaja! ¡Eso se llama karma! ¡Por burlarte de mí! –Gritó Sai ya sentado, los otros dos se separaron sentándose también y comenzaron a reír-

-Itachi nos hiciste caer

-Ah claro, la culpa es solo mía

-¿Me llamas pesado?

-Quizás –Deidara se hizo el ofendido-

-Sigue siendo tu culpa

-¿¡Qué demonios está pasando aquí!? –Toda risa quedó suprimida ante la potente pregunta desde la puerta corrediza, todos observaron a Sasuke parado ahí observándolos con molestia, el ambiente cambió rápidamente- ¿¡Que está haciendo él en mi casa!?

-También es mi casa –Respondió Itachi, los tres se habían levantado y el moreno dio un paso adelante defendiendo su postura-

-Sabes que él no es bienvenido

-Solo por ti

-Vete de mi casa –Se dirigió al rubio que apretó sus puños evitando decir algo-

-No –Todos se sorprendieron cuando Deidara habló colocándose junto a Itachi-

-¿Cómo te atreves?

-Me voy cuando Itachi me lo pida, él me invitó

-Ya veo… ¿Y tú? ¡De cómplice! –Culpó a Sai que se mantuvo seriamente al margen de todo el asunto-

-¿Cómplice? Esto no es una escena de un crimen, es solo un día entre amigos y familia –Respondió Itachi-

-¿Amigos? ¿Ya son amigos Sai? Creí que no tenías amigos, que eras incapaz de sentir lo que era el amor el cariño y la amistad –Todos se sorprendieron- Que eras insensible –Escupió con rencor-

-Sasuke cállate –Itachi observó de reojo que Sai se sintió dolido y molesto-

-¿Familia? El no es parte de esta familia –Se refería a Deidara- Ninguno de los dos lo es –Sai seguía siendo golpeado con cada palabra- Son unos recogidos, agregados simplemente

-¡Basta! –Por primera vez Itachi alzó la voz-

-Déjalo… -Intervino Deidara- El tiene razón, yo no soy aún tu familia Itachi… Pero algo es cierto –Se dirigió a Sasuke con rabia- Yo jamás seré familiar tuyo

-Por supuesto que no lo serás. Nunca

-Pero será mi esposo –Sentenció Itachi- Y como mi hermano…

-¿¡Hermano!? ¿¡Ahora soy tu hermano!? Curioso porque desde que él apareció yo dejé de ser tu hermano y no fue solo mi decisión…

-Eso no es verdad

-Si claro, como sea…

 

  Sasuke se dio vuelta y azotó la puerta, encontró el auto estacionado en el frente de la casa y se subió acelerando rápidamente… En la casa Deidara fue el primero en darse cuenta de lo hiriente de las palabras de Sasuke, Itachi quedó pensativo y Sai se veía triste. El rubio se acercó primero a Sai y colocó una mano en su hombro

 

-¿Estás bien?

-Si… -Sai se alejó dirigiéndose dentro de la casa, Itachi lo notó y observó a Deidara, ambos se observaron con pena ¿Cómo habían llegado a eso?-

-No sabía que llegaría tan pronto –El moreno habló primero-

-Y yo sabía que esto podía pasar… -Itachi abrazó al rubio y este le devolvió el abrazo- Pero no esperaba que pasara

-Ven conmigo

-¿A dónde? No podemos dejar a Sai solo, también él pagó los platos rotos

-Tienes razón…

 

  Pero cuando llegaron a la habitación del moreno, estaba vacía… La casa por completo estaba vacía

 

-¿Salió?

-Eso parece… Deberías llamarlo –Dijo Deidara-

-Sí, pero vámonos –El moreno tomó su mano- No quiero que Sasuke vuelva y te trate mal otra vez

 

  Después de entrar en el auto Itachi le dio el teléfono al rubio pero Sai no contestaba

 

-Creo que está bien, seguro fue a despejar la mente un poco –Suspiró-

 

  Gaara se sorprendió cuando observó a Sai frente a su puerta, ambos tenían el teléfono contra su oreja, el moreno lo había llamado y de repente estaba ahí

 

-¿Dijiste que eras mi amigo? ¿De verdad?

-¿A qué viene esa pregunta? –Gaara bajó el teléfono- Pasa

-… -Sai entró y a los ojos del pelirrojo se veía que algo rondaban sus pensamientos- Gaara ¿Eres mi amigo?

-Claro que si –Aunque Sai había entrado solo se quedó ahí parado- ¿Cómo sabias donde vivo?

-Fue coincidencia, un día simplemente te vi. ¿Cómo sabes que es la amistad?

-Actúas más raro de lo normal…

-… Me disculpo por eso

-¿Quieres sentarte? –Sai asintió y tomó asiento- ¿Algo de beber?

-No… Está bien. Ni siquiera sé que hago aquí

-Supongo que buscar ayuda… De un amigo

-Creo que tienes razón, necesitaba saber que sí tenía un amigo

-¿Tenías? ¿Qué es lo que se te hace difícil de comprender? Somos amigos  ¿Por qué lo analizas tanto?

-Supongo que es porque en realidad jamás había tenido un verdadero amigo… O si, pero hace mucho tiempo. Solo tengo un medio hermano con el que pensaba conocer la amistad…

-¿Y me dices que olvidaste como hacer amigos?

-Creo que en realidad jamás he sabido hacer amigos

-… -Sai era complicado- Las relaciones son algo que se dan, no que se planean

-Entonces… No soy insensible

-¿Insensible? ¿Cómo podrías? Eres humano es normal tener relaciones con otras personas

-Sí pero jamás he sabido relacionarme

-Eso no es ser insensible –Gaara no pudo evitar sonreír con gracia, el hombre analizaba demasiado todo- Es solo ser retraído… O algo así

-¿Algo así? –Eso le dio gracia al moreno y por primera vez desde que había llegado sonrió-

-Le pides consejo a la persona incorrecta, yo tampoco soy muy popular que se diga

-¿No?

-No, siempre me han tomado más como un chico serio y sombrío con el que no hay que relacionarse y a mi poco me importaba…

-Pero eso en tu frente… -Preguntó con curiosidad- ¿No es el kanji de amor?

-Si ¿Y?

-Debe significar algo importante

-… -Gaara llevó una mano a su frente rozando el tatuaje- Fue por mi mama de hecho… -Sonrió de solo recordarlo y Sai comprendió que Gaara amaba a su mama y por eso sonreía de solo recordar algo- Cuando ella murió –Sai se sorprendió-

-Lo siento

-No te preocupes…

-¿Me cuentas?

-… -Gaara se lo pensó, no solía hablar de cosas personales- Soy el menor de tres hermanos, después de que nací prematuramente mamá se enfermó y siempre fue de salud delicada, eso le trajo muchas otras cosas, yo tenía quizás… Unos cinco años cuando ella finalmente murió y siempre nos decía que nos amaba, y nos daba un beso en la frente… Yo quería recordarla por siempre, que ella me amó de verdad y por eso lo hice, me recuerda a ella cada vez que lo veo –Gaara jamás le dirigió la mirada a Sai mientras hablaba y este solo escuchó atentamente-

-Eso es muy tierno –Sonrió, solo entonces Gaara lo miró- Eres tierno, no siniestro

-Jaja, claro, es primera vez que oigo eso… Y suena extraño

-Sabes lo que es el amor

-Solo el de familia o el de amigos, jamás me he enamorado –Confesó-

-¿No?

-No

-Yo tampoco

-Supongo que entonces también me puedes considerar un insensible –Bromeó causándole gracia al otro-

-Ya lo creo. Gracias

-¿Por qué?

-Por contarme, y ayudarme

-Para eso son los amigos –Con su mano palmeó la rodilla del moreno-

-Amigos.

-¿Dijiste algo de un medio hermano?

-Sí, se llama Shin… Vive en Australia y éramos muy unidos, más que hermanos éramos también amigos. Lo más cercano a un amigo que he tenido, y a los Uchiha

-¿Itachi?

-Y Sasuke también, aunque no lo parezca antes no era lo que es ahora

-No lo conozco en realidad, solo he oído de él…

-Pero ya no parece mi amigo, así que estoy muy perdido en ese tema

-Ahora entiendo…

-Palabras sin sentido –Se burló de sí mismo-

-Ni tanto

 

  Sasuke frenó de repente y sintió el corazón en la garganta, casi había causado un choque, pero apenas el otro auto se movió él se alejó también, llevó una mano a su pecho mentiría si dijera que no se había asustado, aterrado de casi tener un accidente, todo por tener la mente en otro lado y acelerar…

  Se detuvo dándose cuenta de lo idiota que estaba siendo, estacionó observando la noche afuera… El iba con una muy buena actitud a casa y apenas entró escuchó risas ¿Estaban divirtiéndose Itachi y Sai? Quizás lo recibirían un poco menos a la defensiva pero no fue así… Los buenos ratos que nunca tenían con él, los estaban teniendo con Deidara, un hombre completamente ajeno a ellos.

 

-No se quedará así…

 

  Los días siguieron pasando como si nada. Itachi no había aparecido por la mansión Uchiha, Sai intentaba cruzarse con Sasuke lo menos posible y Sasuke claro que notaba como los otros dos lo ignoraban por completo. Naruto había buscado ya sus cosas justo el día después de haber llegado del viaje y seguía en contacto con Sasuke como dos amigos cualquiera, Sai se había vuelto algo más unido a Gaara luego de darse cuenta que en realidad eran amigos.

  Ese día Sasuke estaba almorzando en el restaurante que sabía era donde Deidara trabajaba, luego de comer esperó afuera hasta que un cocinero apareció entregándole una pequeña bolsa

 

-¿Todo bien?

-Si… -Respondió algo nervioso observando a todos lados-

-Bien, toma… -Sasuke le entregó un sobre que al abrirlo el hombre encontró dinero y volvió a su trabajo. Sasori que iba llegando y estaba en la acera contraria se extrañó de ver a Sasuke en ese sitio pero le dio igual y lo dejó de lado, lo conocía solo de vista, sabía que era el hermano de Itachi y que además era el dueño de Sharingan Corp-

 

  Itachi estaba en el cafetín del hospital cuando sintió alguien abrazarse a su cuello desde atrás

 

-¡Feliz cumpleaños! –Le dijo Konan alegre y le regaló un beso en la mejilla, luego se sentó con él y otro colega-

-Jaja, gracias

-No creas que lo olvide –Dijo el otro hombre palmeando su brazo- Feliz cumpleaños amigo

-No me imagino que lo hayas olvidado tranquilo –El sarcasmo fue obvio-

 

  Para cuando Konan e Itachi quedaron solos la chica le entregó una pequeña caja

 

-Ábrelo –Sonrió- Por cierto, ¿Me puedo ir hoy directo contigo?

-Claro –Itachi abrió la caja encontrando un perfume que reconoció de inmediato, sonrió- Jaja, ya lo necesitaba

-¡Lo sabia! ¿Qué sería de ti sin tu olor peculiar de siempre? Nada

-Gracias, ya veo que importo solo por mi perfume

-No me culpes –Se burló- Las chicas amamos el perfume de hombre jaja

 

  Cuando salieron al final de la tarde se dirigieron a un sitio de comida y subieron a la terraza

 

-¡Hola!

-¡Feliz cumpleaños! –En la mesa más apartada estaba ya Deidara con Sai esperándolos, era día de semana así que solo cenarían un poco, pasarían un rato y ya. Itachi le regaló un beso al rubio como saludo y se sentó junto a él, luego saludó a Sai-

-Estoy asqueroso apenas salí del trabajo hace una hora –Dijo el rubio-

-Gracias Sai, eso no me importa ¿Y Naruto?

-Me dijo que viene en camino –Respondió Deidara-

-No empiecen sin nosotros –Todos voltearon a ver a Naruto y Gaara que iban llegando- Feliz cumpleaños Ita-nii

-Feliz cumpleaños

 

  Luego de comer, hablar un rato y pasarla bien todos tomaron camino, pues mañana había trabajo… Deidara no se dio cuenta, sino hasta después de bañarse, que faltaba algo

 

-¿¡Donde está mi anillo!? –Se preguntó preocupado intentando no gritar, porque no quería que Naruto lo escuchara- Lo dejé en la filipina –Pero no estaba ahí- Seguro lo olvidé en el restaurante –Suspiro más tranquilo- Si, ya recordé. Uf, menos mal.

 

  Itachi no se esperó ver a Sasuke frente a la puerta de su departamento esperándolo…

 

-¿Qué haces aquí?

-Es tu cumpleaños ¿Creíste que lo olvidaría?

-…

-Relájate, vengo tranquilo sin ganas de pelear ni nada, solo quería felicitarte y hablar un poco. Feliz cumpleaños –Le entregó su regalo, pero Itachi lo observó un rato sin saber si tomarlo o no- Esta bien, lo entiendo y… No pienso llevármelo porque es tuyo pero lo dejaré aquí y puedes aceptarlo cuando quieras o no –Lo dejó a un lado de la puerta- Y me disculpo por lo del otro día en casa

-No es a mí a quien le debes una disculpa, sino a Sai y a Deidara

-Le pediré disculpas a Sai… Con Deidara dame tiempo pero lo intentaré, lo siento

-Bien –Itachi tomó la bolsa- Gracias

-Ojalá hayas pasado un buen día. No te molesto más, nos vemos –Itachi observó a Sasuke partir y suspiro, a veces no entendía al hombre y ya no sabía cuando creerle y cuando no-

 

  Ya era sábado otra vez cuando Itachi esa noche pasó por Deidara y aunque intentara no demostrarlo, se veía extraño

 

-¿Me dirás que estas escondiendo?

-No escondo nada…

-Claro. ¿Qué pasa? Dime

-No pasa nada –Era obvio que algo pasaba pero Deidara no quería hablar y eso preocupaba a Itachi-

 

  Itachi ya estaba acostado observando su teléfono cuando Deidara apareció bañado y cambiado, simplemente se acostó a su lado sin decir nada

 

-¿Te dormirás?

-Si…

-Buenas noches entonces

-Buenas noches… -Claramente algo pasaba-

-Dei –Alejó la vista del teléfono- ¿Y tu anillo?

-… Lo olvidé en casa, discúlpame

-No te preocupes… -Itachi se acostó abrazando al rubio desde la espalda, no podía verle el rostro- ¿En verdad te sientes bien?

-Si… Solo estoy muy cansado

-Entiendo. Vamos a dormir

 

  Deidara sintió el pequeño beso del moreno en su mejilla y se mordió el labio intentando relajarse… Itachi era observador, era obvio que notaria que no llevaba su anillo de compromiso ¿Cómo evitar lo inevitable? Tenía que aceptar, que había perdido su anillo… Tenía días sin verlo y eso lo estaba volviendo loco.

  Si Itachi se enteraba… ¿Qué podía pasar? Todo. Incluso Naruto ese día temprano le dijo que era raro verlo sin su anillo… ¿Cómo ocultarlo? Lo peor era que se desesperaba cada día más, había dejado revuelto el departamento, había interrogado a todos en el restaurante y el anillo no aparecía…

 

  Sasuke en ese momento se colocó los guantes, abrió el paquete y tomó el anillo de oro blanco sonriendo con maldad.

 

-¿Y ahora? ¿Cómo habrá boda Deidara?

 

*****

 

-Es muy temprano para estas cosas… -Se dijo Sasuke a sí mismo cuando Karin entró dejando su cartera en el sofá y se acercó a él para besarlo, claro que una mirada fue suficiente para dejarle claro que se alejara-

-¿Cómo estas hoy Sasuke? La verdad es que me tienes en el olvido, hace días no sé nada de ti

-Estoy ocupado Karin… -Sasuke siguió con la mirada fija entre su laptop y sus papeles-

-Si si pero siempre dices eso ¡Debes tomarte un tiempo! Y pensar en mí… Bueno pero pasando de eso –Ella tomó asiento en el sofá observando el ventanal detrás de Sasuke, comenzó a jugar con su rojizo cabello- Siendo sincera yo también he estado tan ocupada, entre los castings para las modelos, la compra de los materiales para la colección, terminar cada diseño –Suspiró- Necesitaba descansar un poco, por eso vine a verte

-…

-¡Sasuke! –Se quejó- ¡Préstame algo de atención!

-No puedo –Respondió simplemente-

-Llegará el día que me canse de tus desplantes –Se cruzó de brazos, ambos sabían que mentía- Y entonces verás que debiste prestarme atención antes…

 

  Al no ver respuesta del hombre Karin se levantó y caminó hasta él colocándose a su lado, su rostro mostró duda ¿Cómo Sasuke entendía todas esas palabras raras? ¿Esos números? ¿¡Esas cosas!? Definitivamente Sasuke era un hombre inteligente y preocupado, eso lo hacía aún más atractivo a los ojos de ella.

  Karin aprovechando que Sasuke en ese momento solo leía unas hojas lo abrazó por el cuello acercándose hasta casi chocar mejillas, sonrió complacida cuando el hombre no la apartó y sabía que él necesitaba de ella…

 

-Sasuke… -Pero el moreno estaba tan metido en su lectura que sabía que solo debía ignorar a la pelirroja hasta que se alejara. Error, la voz de ella había cambiado a una más empalagosa y coqueta- ¿No quieres descansar un poco? ¿Un masaje quizás? No es bueno que te exijas tanto querido… -Karin llevó sus manos a los hombros del hombre y comenzó a masajearlos- Necesitas algo de distracción y relajante…

 

 Karin dejó toda cautela de lado al notar que el moreno no hacía nada para apartarla como en otras ocasiones, Sasuke no vio nada malo en dejar que ella le diera un masaje, si ella quería hacerlo ¿Para qué detenerla? El no salía perdiendo después de todo. Dejó que el saco saliera de sus brazos y terminara en el respaldar de la silla, la mujer no era experta en dar masajes pero en realidad no se sentía mal, le dio ese punto a su favor.

  Sasuke se mantuvo serio, y sabiendo que ella no se quedaría contenta con un masaje pensó que quería ver lo que ella intentaba… Karin se sentó de lado sobre Sasuke y lo observó luego cruzó las piernas, él en cambio mantuvo su vista lejana, la pelirroja pasó una mano por el torso del moreno recorriéndolo por completo ni siquiera notó que el moreno a veces la miraba de reojo para ver cómo reaccionaba

  Alejó la vista por primera vez del escritorio y se recostó en la silla, pero su rostro no mostró emoción alguna, Karin aflojó el nudo de la corbata y abrió los primeros botones, se acercó al cuello del moreno y lo besó, no notó la mueca de desagrado que el moreno mostró, solo la dejaba continuar porque quería saber ¿Qué estaba ella dispuesta a hacer? Y si quizás, a él aún le atraía al menos físicamente ella, pero no… Ya se había dado cuenta que con cada roce sobre la ropa o directamente contra su piel su atracción no aumentaba en lo más mínimo ¿Cómo alguna vez pudo acostarse con ella? Esa era la pregunta, quizás esa era la cosa, él ya sabía cómo se veía ella, como lo hacía ella, como se escuchaba… El ya sabia y no le causaba nada recordarlo, claro, si jamás se había interesado en alguien después de una vez… Después de estar con alguien, él jamás volvía a acercarse a esa persona

   Sasuke la detuvo cuando sintió que ella rozaba el cinturón de su pantalón, con sus manos tomó las muñecas de ella bruscamente y la miró, Karin sintió temblar de miedo ¿Había hecho algo mal?

 

-¿Sasuke?

-No vuelvas a tocarme de esa forma… -Soltó sus manos pero ella se mantuvo sentada ahí, ató sus botones y acomodó la corbata-

-Déjame consentirte

-No quiero –En ese momento sonó la puerta- Pase

-Disculpe jefe pero… -Ino quedó en silencio cuando notó a la pelirroja sentada sobre el moreno, Karin la miró molesta mientras que Sasuke la miró seriamente-

-¿Qué pasa?

-Sí, eh… El supervisor de producción dejó un mensaje y dijo que no podría venir a verlo hoy

-Dame el mensaje por escrito –La rubia asintió dejando la oficina, Karin volvió a ver a Sasuke y cuando intentó tocar su rostro él tomó su muñeca con fuerza- Te dije que no me tocaras

-Pero Sasuke…

-Me das asco

 

  La mujer se levantó inmediatamente llevando una mano a su pecho, miraba al moreno con sorpresa y dolor ¿En verdad había oído aquello? Sasuke en cambio no mostró arrepentimiento pena ni culpa alguna mientras ella se alejaba lentamente

 

-E-Eso no puede ser cierto… -Claramente ella no entendía aquella frase, no la creía verdadera- Solo lo dices porque estas molesto

-Supéralo Karin –El se levantó colocándose su saco una vez más- Esa fantasía tuya de que siento algo por ti es solo una ilusión… No me inspiras nada. Deja mi oficina

 

  Sasuke apenas abrió la puerta encontró a Ino que iba a abrirla, ella le entregó una pequeña nota él la tomó y salió, Ino entonces notó a la pelirroja sorprendida y triste en la oficina… Esa era otra faceta de su jefe, un conquistador empedernido que luego de obtener lo que quería no le importaba nada los sentimientos que pudieron quedar en la otra persona… Odiaba ese lado de su jefe, aunque la pelirroja siempre se dio aires que no debía.  Karin tomó sus cosas y salió rápidamente, apenas entró al taxi dejó sus lágrimas salir

 

-Señorita, ¿Se encuentra bien?

-¡Solo conduce!

 

   El hombre no dijo más, pero ¿Quién podría haber hecho llorar a una mujer? ¿O qué? Después de llegar a casa no paró de llorar y es que las palabras del moreno volvían una y otra vez golpeándola con fuerza ¿Por qué Sasuke tenía que ser tan cruel? ¿Por qué? Su mente no encontraba las palabras para hacerla sentirse mejor, alguna otra mentira no aparecía en ese momento. Esta vez, se sentía ofendida, rechazada y además odiada… Se observó en el inmenso espejo de su habitación y tomó lo primero que vio del tocador arrojándolo al reflejo, el perfume entero se partió haciendo que se viera aún peor, vio una foto de ella y Sasuke en el espejo y la tomó rompiéndola por completo, igual tenía otras de ellos dos…

 

-¡Maldito seas! ¡Maldito Sasuke! ¡Jamás podrás amar a nadie! ¡Y nadie jamás podrá amarte! –Se dejó caer sentada en su cama, notó que sus manos temblaban- No dijo la verdad, no, solo lo dijo porque la idiota mal vestida entró en ese momento, sí, eso fue… -Observó el rostro de Sasuke aún intacto en el suelo y lo recogió observándolo seriamente- Y si fuera verdad… Igual te haré cambiar de opinión amor mío –Besó la foto- Porque si no eres mío… Tampoco serás de alguien más.

 

  Esa noche había quedado con su tío Nagato de comer juntos, pero lo que menos esperó al llegar fue ver que Nagato estaba acompañado…

 

-¡Ah, Karin al fin llegas!

-Karin…

-Deidara, Naruto, Konan… -A todos los observó despectivamente, pero los otros tres la miraron con desagrado también-

-Toma asiento querida –Solo por Nagato haría esto. Se sentó junto a su tío, en frente estaban los otros tres- Mis tres queridos sobrinos y la mujer más hermosa, no puedo pedir algo mejor…

 

 

Notas finales:

Creyeron que Sasuke queria hacerle algo malo a Naru? Nah, se equivocaron:3 Pero no se esperaban esa jugada contra Dei, ¿Cierto? Ni contra Karin...

¿Merece review? Nos vemos!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).