Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El dinero ¿Compra el amor? por AndriiNaruu

[Reviews - 484]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola hola!! Aqui con la actualizacion! Algo me dice que les gustara el final de este capi... Jajaja

Amo sus reviews*-* Como me animan! Gracias gracias graciassss

 Sai sonrió, estaba mostrando a su jefe su idea para la página web y el hombre solo mostraba una gran satisfacción, algunos retoques se hicieron pero le dio camino libre para seguir como iba, perfecto. Además ahora tenía que hacer algunos eslóganes publicitarios para darle más nombre a la compañía, este sería un trabajo largo pero eso solo significaba que a su jefe le gustaba su trabajo y eso era una gran notica.

 Esa tarde recibió una llamada mientras afinaba algunos detalles en un pequeño café dentro de un centro comercial, era Ino. Y parecía que tenía una oferta nueva para él, estaba en pleno trabajo de construcción un centro comercial y necesitaban publicidad desde ahora, no dudo en aceptar porque pronto terminaría la pagina web y solo quedarían ideas publicitarias de que ocuparse.

 Itachi revisaba unos papeles tranquilamente en una mesa de la cafetería cuando sintió alguien sentarse en la silla frente a él, ni siquiera levantó el rostro

 

-Hola Konan

-¿Cómo estás?

-Bien de hecho ¿Y tú?

-Bien

 

 Entre ellos se llevaban bien, trabajaban en el mismo hospital y era normal a veces cruzarse por los pasillos. Itachi trabajaba tanto en el hospital donde estaba Konan como en una clínica. Ella llevaba un simple vaso de jugo de naranja en su mano

 

-¿Qué lees?

-Un adolescente –Le mostró las hojas- No tiene siquiera 20 y necesita una cirugía de corazón abierto pero parece que hay algunos problemas con sus exámenes clínicos, valores alterados no es bueno

-Mm… Bueno, algo tiene que hacer si en verdad necesita esa cirugía

-Bueno, ¿Y tú que cuentas? –Ella suspiró colocando las hojas sobre la mesa-

-Hoy no ha sido fácil, hay una epidemia viral y es para mí a veces tan triste ver tantos bebes y niños llorando –Itachi rió un poco-

-No sé cómo pudiste elegir pediatría

-Yo a veces también me digo lo mismo… -Suspiró- Pero es por eso mismo, porque me gustan los niños me encanta ayudarlos –Sonrió- Además solo es a veces, si me sintiera mal de cada niño que pasa la puerta ¡No tendría trabajo! –Ambos rieron-

-Cambiando de tema. ¿Conoces al nuevo ginecólogo?

-Eh… No ¿Por qué? –Llevó una vez más el vaso a su boca-

-Me pidió tu número… -Konan tuvo que hacer uso de toda su fuerza para no escupir todo el jugo mientras Itachi reía, ella le envió una mirada molesta y desentendida, luego rió también-

-Lástima

-Se lo di –Comentó como si nada-

-¿¡Tú que!?

-Mentira –Rió-

-¡Itachi!

 

 Gaara atravesó las puertas de cristal y llegó a la acera observando su teléfono, giró viendo a ambos lados y encontró el auto, entró

 

-Vaya, lindo auto

-¡Sí! Primero, lo necesitaba, segundo ¡Al fin-ttebayo!

 

 Naruto le había comentado que pasaría por él, hacía poco tenía auto, uno por el que había estado ahorrando y negociando con un amigo, junto al regalo en efectivo de Tsunade por su graduación, además de su ahora trabajo, lo había logrado. No sería último modelo pero ¿Y qué? Ya era bastante tener auto, algo que pensaba jamás tendría…

 

-¿Recuerdas donde queda? –Hablaba de su departamento-

-Sí, claro que si ¿Cómo te fue?

-Día cualquiera, bueno, quizás más tranquilo que otros días de hecho. ¿Y tú?

-Hoy me tomé el día libre

-Pero que vida tan dura

-Jajaja tú de qué te quejas si tuviste un día tranquilo, ¡Lo acabas de decir!

-Sí, si ya se

-¡Llegamos!

-Tienes razón, si te acuerdas. ¿Pasaras?

-Ah claro, vamos

 

 Luego de dejar el auto en el estacionamiento subieron al departamento del pelirrojo. Apenas había los muebles suficientes y necesarios para una persona, claro Gaara no tenía mucho tiempo ahí y los que estaban alquilados ya habían dejado el sitio un tiempo antes.

 

-¿Quieres agua?

-Lo que tengas está bien por mí

-¡Toma! –El rubio se giró tomando en el aire la botella de soda, Gaara pasó junto a él dirigiéndose al balcón con dos sillas- Sinceramente me siento un extraño

-¿Cómo un extraño?

-Como un inmigrante

-¡Pero si naciste aquí!

-¿Y?

-Ah claro ya extrañas los canguros ¿No? –El pelirrojo rió y Naruto lo imitó-

-¿Por qué todos tienen la idea de que Australia son solo canguros?

-Televisión-ttebayo

-¡Cierto!

 

 Los días siguieron pasando, ya el calendario mostraba otro mes. Ese día Karin sonrió alegre, ¡Tendría que contárselo a Sasuke! Era diseñadora de ropa femenina y su última línea acababa de ser aceptada para la próxima semana de la moda, en Shanghái

 Ahora es que tendría trabajo por hacer, los bocetos, las telas, las agujas, las maquinas, modelos, maquillaje, peinado, accesorios… Cuantas cosas hacían falta y le encantaba. Con su asistente estaban revisando el inventario de su propia tienda mientras su mente divagaba más en el moreno.

 Al día siguiente se encontraba frente a Sasuke hablando, claro, que ella no notaba que él ni siquiera le prestaba atención. Pero es que ella solo estaba concentrada en compartir el tiempo que podía pasar junto al moreno, éste dirigió la vista a través del ventanal dándole la espalda a la pelirroja sin siquiera oír sus palabras.

 Su mirada se sorprendió y luego sonrió orgulloso, el destino estaba de su parte, al otro lado de la calle observó a Naruto caminar, pero su sonrisa se convirtió en pregunta con su ceja alzada cuando notó un pelirrojo a su lado, desde ahí no notaba bien el rostro del rubio pero era obvio que sonreía. ¿Por qué a él no le había sonreído cuando hablaron?

 

 Deidara estaba en el supermercado cuando de repente alguien lo abrazó desde atrás y al ver quien era sonrió.

 

-Haruno Sakura, que bueno verte

-¡Cuánto tiempo Dei!

 

  Haruno Sakura, de piel clara, cabello rosa claro largo y ojos color esmeralda.

 

-Sí, desapareciste de repente –Deidara siguió moviendo el carro mientras que la chica tenía una cesta en su mano caminando junto a él manteniendo la conversación-

-Sí, ¿No te dijo?

-No ¿Qué cosa?

-Bueno me fui por un contrato, un trabajo. Pero volví, no puedo pasar mucho tiempo lejos de mi amada ciudad

-Que bueno verte en serio

-¡Pienso lo mismo! ¿Cómo está Itachi? ¿Como estas tú?

-Yo estoy bien, Itachi también… Estamos bien jaja

-Que bueno –Sonrió llegando a la caja seguido del rubio, de repente se sonrojó un poco- Y… ¿Cómo esta él?

-Jaja –Deidara rió, Sakura no había cambiado- Ya me extrañaba no hubieras preguntado por él

-Bueno, -Sonrió- Después de todo Naruto es el hombre del que estoy enamorada

 

 Sakura era amiga de los rubios desde hacía mucho, y casi desde el mismo tiempo estaba enamorada de su mejor amigo Naruto. Sakura se ganaba la vida bailando, bailarina era su profesión y bailar era su pasión, tenía trabajo en un estudio de baile y había estado en una gira por todo un año por Asia gracias a un contrato que había conseguido. Solía ser graciosa y amable a veces incluso tímida… Pero de mano dura.

 

-¿Crees que pueda ir contigo y así visitarlo?

-Claro, vamos

-¡Sí! –Ella sonrió- Gracias

 

 Pero al llegar no había nadie, la pelirrosa se quedo ayudando al rubio con las compras mientras seguían hablando, el sonido del timbre hizo a la chica llegar a la puerta

 

-¡Itachi! ¡Bienvenido! –El hombre se mostró sorprendido y luego correspondió el abrazo de la chica entrando-

-¿Hace cuanto no te veía?

-Más de un año jaja

-No sabía que vendrías –Comento Deidara cuando el moreno llegó frente a él con un pequeño beso, luego tomo asiento a su lado-

-Ah, fue cosa de último momento, así que… ¿Cómo has estado Sakura?

-Pudiera estar mejor, como ustedes por ejemplo… -Todos rieron- Pero he estado muy bien gracias

 

 Mientras tanto Sai acababa de entrar por las puertas de cristal saludando a algunas personas, su mirada se dirigió por completo a la laptop entre sus manos hasta llegar donde debía

 

-Buen día

-Buen día –Respondieron dos personas más, levantó la vista observando al castaño y luego se sorprendió al ver al rubio, pero volvió a su estado normal acercándose más-

-Naruto, el es Sai el diseñador gráfico que se está ocupando de la publicidad del centro comercial.

-Mucho gusto –Dijo el rubio con una sonrisa mostrando su mano- Naruto Namikaze

-Igualmente, Sai Shimura

-Él es el arquitecto

-Ya veo, perfecto les explico…

 

 ¿Naruto Namikaze? Se preguntó mentalmente mientras explicaba su idea en la pantalla de su laptop, ese chico era el que había visto con Gaara… Vaya casualidad que ahora estuviera en el mismo sitio en el mismo tiempo.

 Para cuando salieron de ahí era medio día y el rubio se dirigió al departamento, apenas abrió la puerta sus ojos mostraron sorpresa, frente a él se mostró una chica pelirrosa igualmente sorprendida

 

-N-Naruto… -Ella se sonrojó y luego sonrió- Hola

-¡Sakura-chan!  -Desde la sala los otros dos rieron, Naruto atrapo a la chica en un abrazo que ella correspondió- ¿¡Que haces aquí-ttebayo!? ¡No avisaste!

-Lo siento… -Con Naruto, Sakura era a veces tímida a pesar de tantos años de conocerse. El rubio terminó de entrar al sitio- Estaba a punto de irme

-Te estaba esperando –Mencionó Itachi, Deidara lo golpeó y la chica se dio la vuelta sonrojada-

-¡No, no puedes irte! No sola, yo te llevo –Comentó abrazándola una vez más- Pero no aún, ¿Almorzamos?

-Sakura cocinó –Dijo Deidara levantándose-

 

 Todos se dirigieron al comedor, entre charlas risas comentarios y chistes pasó la comida. Luego Naruto decidió llevar a Sakura… Los dos mayores los vieron salir, Itachi rió cuando la puerta se cerró

 

-¿De qué te ríes?

-Sakura es muy tierna cuando Naruto está cerca

-Solo cuando no se enfada

-¿No tiene posibilidades con él? –Deidara se recostó contra el pecho del moreno, ambos estaban en el sofá, sintió una mano del moreno jugar con su cabello-

-No lo sé, pero solo sé que él siempre la ha visto como una amiga

-Mm…

 

 El semáforo mostró verde y él volvió a andar el auto

 

-¿Si sigues en el mismo sitio?

-Sí, claro

-Ne, sinceramente ya te echaba de menos-ttebayo

-Jaja yo también

-¿No tienes más planes de seguir viajando?

-No por ahora… -Ella dirigió la vista a la ventana a su derecha y con una mano rozó el cristal- Me gusta estar aquí

-Gaara también volvió

-¿¡Gaara está aquí!?

-¡Sí! Tenemos que salir un día, él también sigue en el mismo apartamento

-Es aquí, gracias por traerme

-No hay de qué –Sonrió, ella se acercó depositando un beso en su mejilla y luego bajo, antes de entrar saludó con una mano y él le devolvió el saludo. Se tocó la mejilla y sonrió un poco triste-

 

  Se alejó nuevamente en el auto, él sí sabía de los sentimientos de su amiga pero nunca pudo corresponderla, siempre fue más una amiga que una conquista y aún no lograba verla como más que una amiga. Cuando ella se le declaró no se lo esperaba por más que algunos de sus amigos se lo habían comentado, lo tomó por sorpresa. Fue doloroso ver a su amiga con los ojos aguados, no, ella no lloró frente a él pero estuvo a punto…

  Pero no por eso dejó de ser su amigo, siempre siguió tratándola igual, siguió apoyándola y ayudándola, claro ella también siempre estuvo ahí. Sabía que siempre podrían contar con el otro.

 Se detuvo apagando el auto y saliendo de él, había quedado con Sai de encontrarse en aquel centro comercial para hablar más del proyecto en construcción, apenas llegó no encontró a nadie en las afueras del pequeño local, al entrar tampoco vio a nadie, pidió un simple coctel para cambiar de rutina y tomó asiento en una de las pequeñas mesas fuera del local, revisó su celular un rato, había llegado a la hora exacta sin siquiera planearlo de hecho creía que iba tarde.

 

-Buenas, disculpa el retraso –Escuchó levantando la vista para ver al moreno sentarse frente a él-

-No se preocupe, acabo de llegar –Sonrió, el otro le devolvió la sonrisa-

-Me puedes tratar de tú

-Perfecto –Dirigió la copa a sus labios cuando una chica se acercó a tomar el pedido del moreno- Sobre el centro comercial…

 

 El iba directo al grano, lo notó rápidamente. El rubio mostró su tableta y él sacó su laptop, sin notarlo entre palabras y palabras el tiempo pasó rápidamente, para cuando notaron ya estaban hablando como dos viejos conocidos de cualquier trivialidad que pasara por su mente

 

-Entonces ¿Acabas de volver después de cuánto tiempo?

-Unos… No lo sé, quizás más de siete años… Creo que llego a nueve ya ni recuerdo jaja quizás paso de nueve

-¡Eso es mucho tiempo-ttebayo!

-¿Tebayo? –Ya era la tercera vez que escuchaba aquella terminación-

-Ah sí lo siento jaja es una muletilla que heredé de mi madre

-No te preocupes es gracioso solo no entendía que significaba

-Nada realmente –Rió, observó su reloj- Yo tengo que irme –Dijo levantándose, el otro lo imitó-

-Sí, se nos fue el tiempo jaja

-Supongo que eso es bueno –Sonrió mientras ambos comenzaban a alejarse- ¿Nos vemos después?

-Claro ¿Por qué no? –Se dieron la mano, tomando caminos diferentes-

 

  Ino rodó los ojos molesta, Karin no le agradaba pero de todas maneras no valía la pena comentarlo. Ese día la pelirroja estaba sentada frente al moreno hablando de cualquier cosa mientras Sasuke mantenía su mirada fija en la laptop frente a él, de repente observó a su jefe sonreír de lado

 

-Karin… -Dijo levantándose- Hablaremos otro día ahora mismo tengo una reunión

-¿Reunión?

-Sí, y no puedo posponerla ¿Cierto Ino?

-Así es señor, lo están esperando…

 

  Karin la observó molesta, Ino no necesitaba ni siquiera preguntar algo no era la primera vez que le seguía una mentira al moreno para zafarse de alguna situación, la pelirroja pasó junto a ella saliendo del sitio. Ella sintió una mano sobre su hombro

 

-Bien hecho –Dijo el moreno, ella simplemente asintió observándolo irse-

-¿Por hoy terminamos?

-Sí, puedes irte

 

 Ella sonrió, observó el sol comenzar a ocultarse, era temprano y le agradaba poder irse temprano pero sabía que aún tenía algunas cosas por terminar.

  Sasuke subió al auto y luego el chofer cerró la puerta, tomó el teléfono marcando un número mientras observaba a través de la oscura ventana, se soltó un poco la corbata, le dio al hombre en el asiento delantero un pequeño papel aún hablando por teléfono…

 

 Gaara se removió el cabello suspirando frustrado, ¿Por qué existían parejas tan molestas a la hora de divorciarse? Comenzaba a pensar que no debió hacer aquel máster. Mejor se hubiera quedado como estaba, ya no podía dar marcha atrás, pero a veces los clientes lo hacían todo tan difícil, algo que pudiera resolverse fácilmente…

 Se levantó dirigiéndose al balcón de su apartamento y apoyó los brazos en el barandal observando la ciudad bañada de color naranja. Sin saberlo desde lejos un moreno apuntaba su cámara hacia él y tomaba una foto, sonrió, sin siquiera planearlo ahora sabía donde vivía el pelirrojo. Siguió con su camino como si nada.

 Gaara entró cuando el sonido de su celular llegó a sus oídos.

 

 Mientras, Naruto iba saliendo de la cafetería que tanto le gustaba con dos vasos en mano, llevó uno a sus labios pero no le duró mucho el sabor en la boca cuando sintió su cuerpo estrellarse contra algo, el café en su mano izquierda manchó por completo la blanca camisa frente a él, se sorprendió

 

-¡Lo lamento! Yo no sé… -Sus palabras callaron al ver aquellos ojos negros mirarlo con rabia- Señor Sasuke

-Sasuke, solo Sasuke… -Se relajó dejando pasar el hecho, observó su camisa-

-En verdad lo siento, no me fijé

-No te preocupes –Naruto alzó una ceja no comprendiendo, pensaba que todos voltearían a verlos cuando el moreno comenzara a gritarle pero… No lo hizo- También fue mi culpa –Observó los ojos azules mostrar sorpresa-

-Bueno… ¿Puedo hacer algo para compensar mi torpeza?

-Sí –Sonrió complacido de aquella pregunta, Naruto arrugó el entrecejo- Acepta beber algo conmigo… Ahora

 

 Sentenció. El rubio asintió, y aunque él no solía frecuentar ese sitio entró a la pequeña cafetería seguido del rubio, sin este verlo Sasuke dirigió una mirada despectiva a todo el sitio y a cada persona, definitivamente de ser por él no estarían en un sitio tan ordinario como ése. Tomaron asiento

 

-¿Cómo has estado? –Preguntó una vez tuvo su café en frente, lo observó alzando una ceja y lo llevó a su nariz-

-Bien… -Le desagradaba la manera de actuar de ese hombre- ¿Y… tú?

-Apartando el baño de café, estoy bien también –Sonrió tomando del café, el rubio bebió de su chocolate- ¿Te estoy robando mucho tiempo?

-No realmente, solo me dirigía a casa –Comentó restándole importancia-

-Supongo que somos dos, ¿Cómo va mi centro comercial? -¿Mi? Tercera impresión, era posesivo-

-Dudo que no sepa cómo va, todo está sobre la marcha como debe ser. Seguro estarás complacido

-En realidad sí

-Pero dudo que lo que quieras sea hablarme solo del proyecto ¿Cierto? –Sasuke sonrió-

-Ya lo había dicho me gusta esa actitud, tienes razón. Yo sé cómo van mis inversiones, ¿Por qué eres tan serio conmigo? Solo intento ser amable y pasar un rato… Conocernos

-¿Quieres conocerme?

-¿Por qué no? –No veía a un hombre como Sasuke interesado en conocer a alguien como él, alguien que seguramente en un día normal vería hacia abajo- ¿Algo que quieras contar?

-¿Algo que quiera saber?

-Ja, si… ¿Cómo hago para que me regales una sonrisa? –Observó una ceja del otro arquearse- Ambos sabemos que no eres tan reacio y serio como lo estas ahora conmigo, ¿Por qué?

-No nos tenemos confianza

-¿No te causo confianza?

-… No

-Directo –Bebió de su vaso- Me agradas. ¿Cómo cambiar eso?

-¿En verdad quieres agradarme?

-Sí

-…

-Puedes decirme lo que sea –Movió los hombros restando importancia- No te haré nada, ya te lo había dicho –Se cruzó de brazos y sonrió con orgullo incitándolo-

-Eres odioso y en verdad no entiendo este juego de querer hablar conmigo –Sasuke entornó la mirada borrando su sonrisa, esto se pondría importante- Yo sé que no soy la “clase” de persona con la que usualmente querría hablar… -Sasuke no pensaba dejarlo insultarlo como si nada, así que interrumpió-

-Digamos que me atraes –El rubio se sorprendió- Si te pidiera vernos otra vez ¿Aceptarías?

-¿Cómo dijo?

-¿Qué? Que nos viéramos otra vez, estás tan cerrado que tú también estas siendo odioso solo intento hablar contigo y me evades…

-…

-Bien. Al grano, lo entiendo –Colocó ambos codos sobre la mesa y el rubio sintió que le podía ver el alma con esos ojos- Llamas mi atención y por eso quiero conocerte más, me gustas ¿Algo más? –Observó la sorpresa invadir aquella mirada azulina y sonrió- ¿No te esperabas eso?

-¿Me estas intentando seducir?

-Mm… No realmente, intento primero hablar

-¿Eres homosexual?

-¿Aceptarás hablar conmigo otro día? –Se levantó- Porque ahora debo irme, nos vemos –No avanzó mucho cuando la voz del otro lo detuvo en seco-

-No me gustan los hombres… No soy gay

 

 

Notas finales:

*TAN TAN TAAAAN*

Si, la historia es lenta tenganme paciencia. Se vienen muchasss cosas:3

PD: No suelo colocar a Sakura como la mala, ya que todos la tienen asi xP no se esperen eso aqui

¡Nos vemos!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).