-¿Tienes planes hoy? –Preguntó Sasori, Deidara estaba a su lado, ambos vestían de blanco y tenían cuchillo en mano preparando todo para el servicio de esa noche. Ninguno levantó la vista simplemente hablaban-
-Itachi quiere que conozca a un primo pero no sé, si es que nos veremos hoy o haremos algo, en verdad no lo sé ¿Por qué?
-Me invitaron a un sitio, pero no sé si ir
-Ja
-¿Qué?
-Siempre dices lo mismo, ve. Haz algo diferente
-Lo pensaré… Tendré que ir solo –Ya había terminado y recostó los antebrazos del mesón- Porque invitarte a ti y a Itachi será dejarme como violinista
-Jaja ya dijo
-Es verdad
-No lo es
-Si, claro. Bueno… -Escuchó que lo llamaban- Suerte con el primo
Deidara suspiró, detuvo todo movimiento un momento, “suerte, ¿Sera suerte lo que necesito?” Según Itachi esta vez no sería igual que con Sasuke, ojala fuera así, era todo lo que pedía que no fuera un segundo Sasuke.
-Seremos solo tu yo
-¿Y eso? –Naruto caminaba por calles tranquilamente con el teléfono contra su oreja, de su otra mano guindaba una bolsa-
-Sakura está ocupada
-Ah, fuiste a verla
-Claro. Pero no puede
-¿Y donde estas ahora?
-Comprando unas cosas por aquí… ¿Por qué?
-Estoy aburrido…
-No me cuentas algo nuevo jajaja
-Ja, ja gracioso ¿Qué haremos?
-Sinceramente Gaara, no tengo idea hoy es de esos sábados que parecen domingo
-Tienes razón
-Tengo que colgar, nos vemos después
-Bien
La noche llegó rápido y Sasori se despidió de Deidara viéndolo alejarse en el auto de Itachi, se dio la vuelta caminando en sentido contrario y se colocó sus auriculares… “Ve. Haz algo diferente” recordó ¿Debería? Pero primero debía entonces ir a casa, bañarse, porque el olor a cebollas y cocina estaba impregnado en él. Se detuvo y decidió manejarlo como la mayoría de los hombres en un dilema…
-Cara voy, cruz me quedo en casa… -Una moneda-
Sakura acababa de llegar al sitio y estaba conversando con algunas amigas tranquilamente, observó llegar a su pareja de baile y se disculpo con sus amigas acercándose a este, luego de presentárselo al anfitrión de la velada estuvieron por ahí un rato hasta que llego el momento de ir a cambiarse, pronto bailarían.
Sai lavó un par de cosas que estaban en el fregadero no más por perder el tiempo y luego se dirigió a una de las habitaciones del departamento, antes dio una vuelta por todo éste, Itachi era un Uchiha, eso era claro mantenía todo en su sitio, todo estaba donde debía estar y aunque suponía que el mayor ganaba muy bien no notabas que fuera así a menos que detallaras algunas cosas, el sitio para una sola persona o dos era grande pero era cómodo, nada demasiado ostentoso, pero seguramente venía de parte de Mikoto, recordó. Decidió acostarse en la cama del cuarto y sin darse cuenta se quedó dormido…
Poco después la puerta de entrada se escuchó Deidara e Itachi entraron al sitio
-Necesito un baño urgente
-Opino igual –Bromeó el moreno ganándose una mirada molesta del otro- jaja, anda vamos
Tomó la mano del rubio y lo llevo a su cuarto, vestían casi la misma talla así que la ropa no era problema, además de que ya Tenía algunas cosas en el departamento del moreno gracias a quedarse seguido ahí. Entró al baño del cuarto mientras que Itachi simplemente se cambió de ropa y salió del cuarto ¿Dónde estaba Sai?
Sai acababa de abrir los ojos por el sonido del agua caer y supuso que sería Itachi así que le restó importancia, volvió a cerrar los ojos, justo en ese momento Itachi se asomó por la puerta y lo creyó dormido, siguió a la cocina y bebió un poco de agua. Un mensaje en su teléfono robó su atención un momento mientras se sentaba en la sala y dejaba la ventana abierta para que la brisa fría entrara…
Deidara se sentía más relajado luego de la ducha, tenía el cabello suelto y acababa de secarlo con la toalla, lo olió un momento “Mucho mejor” pensó. Había olvidado la camisa en el cuarto así que salió solo en pantalón al cuarto y abrió el ropero buscando una camisa. Sai acababa de levantarse y mientras se estiraba salió al pasillo y notó la puerta del cuarto de Itachi abierta, se asomó y observó un cabello dorado caer por una desnuda espalda color canela claro, se sorprendió, ese debía ser Deidara.
-Itachi, Deidara es demasiado para ti –Comentó en voz alta, lo único que Deidara vio cuando se vio vuelta fue un cabello oscuro, sintió vergüenza por un segundo. Mientras que Itachi en la sala se extrañó del comentario y luego vio aparecer al otro moreno por el pasillo-
-¿Por qué dices eso?
-Muy guapo para ti
-Jajaja gracias me halaga saber que tengo buen gusto
-Que autoestima tan baja –El sarcasmo fue obvio, se dirigió a la cocina y abrió la nevera, en ese momento Deidara apareció observando a Itachi sonreír-
-¿Qué?
-Sai cree que eres muy guapo para estar conmigo –El comentario sorprendió al rubio que volteo y en ese momento la puerta de la nevera se cerró dejando ver a Sai bebiendo de una botella de agua, ambos se vieron un momento. Itachi se levantó acercándose al rubio- El es Sai y Sai el es Deidara
-Mucho gusto, por fin te conozco –Dijo amable y sincero Sai ofreciendo su mano, en ese momento toda preocupación desapareció del rubio definitivamente Sai no era como Sasuke, sonrió recibiendo la mano del otro-
-Mucho gusto igual, ya había oído de ti
-Es mutuo el sentimiento. ¿Qué haces con alguien como Itachi? –El moreno se cruzó de brazos negando con la cabeza mientras que el rubio rió-
-¿Por qué no? ¿Qué tiene de malo?
-… -El silencio duró unos segundos- No esperaba esa pregunta no tengo respuesta –Todos rieron- No sé que responder a eso
-¿Nos vamos? -Preguntó Itachi tomando las llaves de su auto-
-Claro
Gaara bebió el trago que acababa de servirle el rubio como si nada pero no le fue posible parar la pequeña risa que salió luego, Naruto rió con él. Gaara solía reír cuando bebía pero duraba poco
-¿No estamos un poco viejos para esto? –Preguntó levantando el control en su mano-
-Mm –El rubio bebió la misma cantidad- A mi parecer nunca se es demasiado viejo para jugar play, a mi parecer
-Jaja. Parecemos dos colegiales dos universitarios que se yo
-Me gustaría volver a esa época –Confesó- Jajaja además no le veo lo malo. Hablas como si fueras muy viejo y ni llegas a los treinta ¿Se te ocurre algo más?
-No. He ahí el problema
-Jajaja –Estaban en el departamento de los Namikaze pasando el rato como dos amigos que tenían tiempo sin verse-
-¿Y Deidara?
-Los fines de semana suele quedarse con Itachi
-Mm…
-¿Cómo crees que le esté yendo a Sakura?
-No sé, supongo que bien ¿Por qué te preocupa?
-No me preocupa, solo es curiosidad
-Tengo una idea
-¿Idea? –Observó al pelirrojo levantarse-
Mientras que Sakura acababa de salir al pequeño escenario del lugar, sobre sus puntas de ballet, solo se escuchaba la música nadie perdía detalle, nadie decía nada. La puerta se abrió dejando entrar a Sasori que al ver que estaba una presentación en proceso se quedo junto a la puerta observando. Cuando el solo de la pelirrosa acabó los aplausos no se hicieron esperar, Sasori sonrió esa chica bailaba hermosamente y físicamente también se veía hermosa, entonces salió un hombre por un lado del escenario pero vestía como latino, la música cambió a un tango… Combinaban tal para cual, ambos vestían de negro y rojo y todo lo lento y delicado que había bailado ella quedo atrás comparado con lo lento pero apasionado que bailaban juntos, parecían dos amantes ocultos entre las sombras que querían gritar su amor al mundo, eso al parecer de Sasori que quedo impresionado por completo de la presentación.
Al final los aplausos no se hicieron esperar y los dos bailarines después de cambiarse volvieron con los invitados, el anfitrión fue felicitado y los bailarines igual. Sasori entre tantas personas se dirigió a buscar una bebida y en ese momento Sakura apareció junto a él
-Baila muy hermosamente
-Eh… -La chica volteó a ver al pelirrojo- Ah, pues gracias muchas gracias –Sonrió-
-Mucho gusto, Akasuna No Sasori
-Haruno Sakura, igualmente
-¿Baila hace mucho?
-Pues sí, desde que tengo memoria de hecho…
El pelirrojo no pudo evitar seguir hablando con ella, la chica había robado su atención desde que la vio, Sakura no tuvo problema en seguirle la conversación el hombre parecía tan amable y sin dobles intenciones escondidas le agradó rápidamente.
Itachi, Sai y Deidara estaban en un bar, pasando el rato, hablando conociéndose bebiendo viendo televisión. Itachi se alegraba que Deidara y Sai congeniaran bien, aunque ya sabía que eso pasaría, saber que alguien no te juzga sino que te acepta tal como eres y también acepta a quien amas, era más de lo que podía pedir.
Sasuke estaba a oscuras, lo único que alumbraba la sala en penumbras era el pantalla plana encendido, el moreno dejó las pocas palomitas que no había comido de lado y siguió viendo la pantalla pero casi sin interés. ¿Ese era su sábado? Se preguntaba que harían las demás personas usualmente un sábado, ya su mente no prestaba atención a la pantalla frente a él. Se acomodó un poco mejor en el sofá ¿Se divertirían los sábados? ¿Saldrían con familia o amigos? ¿Qué harían las demás personas un sábado?
¿Por qué él no disfrutaba un sábado? Esa era la pregunta, él no tenía nada que hacer un sábado, el no tenia nadie con quien salir un sábado, el no tenía a donde ir un sábado, con quien beber o hablar, excepto de esas veces que la carne necesitaba atención… Entonces, ¿El no tenía amigos? Si lo pensaba bien, no tenía. ¿No tenia?
Apagó todo, limpio y guardó para irse a su habitación pero antes se detuvo en la habitación que Sai usaba la observo a oscuras desde la puerta, fue hasta el cuarto de Itachi, ni siquiera parecía que alguien usaba esa habitación. Se dirigió al suyo, ese que antes era el de sus padres, se acostó observando el techo oscuro y luego observó a través de la cortina y de la ventana, la luna, iluminada y llena. Era relativamente temprano, seguramente aun faltaba para media noche pero él se dejó llevar por Morfeo en ese preciso momento.
La soledad lo acompañaba como cualquier otro día.
Gaara dibujó una mueca de desagrado luego de beber el pequeño shot que había pedido, Naruto hizo la misma mueca luego y rieron
-¡Esta era tu idea! –Tuvo que alzar un poco la voz a pesar de estar lado a lado ya que la música del bar estaba a todo lo que daba-
-Si vamos a pasar un rato bien y bebiendo ¡Hagámoslo bien! ¡Salud!
-¡Salud!
Si la noche era joven, ¿Por qué simplemente quedarse en casa? Beber en la calle podía ser más divertido.
*****
Sasuke se detuvo un momento respirando de forma agitada y bebió de su botella de agua, observó alrededor a las personas en el parque, siendo tan temprano y empezando la semana la mayoría iba apurado a algún sitio o como él, estaban ejercitando, se acomodó mejor los auriculares y volvió a ponerse en marcha.
Llegó a la empresa puntual como siempre e impecable, escuchó de parte de Ino todo lo que haría ese día, parecía que no era un día atareado y lo agradecía internamente. La hora del almuerzo se acercaba ya y se dirigió al ascensor con el teléfono contra su oreja…
-No, no. Kakashi escúchame bien, no tengo intenciones de cambiar algo de lo que ya hayamos hablado, ya di un presupuesto, se fijo un presupuesto y espero que se mantengan dentro de ese presupuesto.
Mientras él subía, las puertas de la entrada se abrieron y Naruto pasó por ellas, observó a su alrededor, preguntó dónde ir y siguió de largo hasta que se detuvo frente a Ino, la chica le pidió un momento mientras terminaba una llamada, luego observó al rubio y se arregló las gafas
-Buen día, bienvenido a Sharingan Corp. ¿En qué puedo ayudarlo? –Preguntó amable-
-Buen día, mi nombre es Naruto, soy el arquitecto a cargo, y vengo de parte del señor Yamato para hablar sobre el centro comercial con el señor Uchiha
-Ah, claro ya sé quién es. Espere un momento… ¿Tiene cita?
-Eh, no. El señor Yamato si pero me mando a mi porque no pudo evitar una reunión
-Ya veo… -La chica tecleó rápidamente- Bueno, le pido se siente un momento mientras el jefe baja
-Gracias –Sonrió, la chica le devolvió la sonrisa mientras lo veía ir a sentarse, hombre amable-
El rubio simplemente se alejó un poco y tomó asiento observando alrededor, la empresa funcionaba como una máquina bien aceitada solo con lo que él podía ver. ¿Cómo soportaría Sasuke pasarse todos los días vestido de traje y entre cuatro paredes? El definitivamente no era una persona para eso, no podía, por su trabajo vestía bien pero ¿De traje? ¿Todos los días? No, demasiado. Su vista se dirigió a un par de folletos y revistas cercanas… Se sorprendió, claro, con razón Sasuke se había sorprendido porque él no lo reconoció cuando se conocieron. El moreno aparecía en una revista entre los empresarios más jóvenes, los emprendedores más jóvenes y los ricos más jóvenes, seguramente no era la única revista donde aparecía y por eso se había sorprendido, definitivamente presumido.
No se dio cuenta de que Sasuke pasó frente a él y el moreno no notó a Naruto por estar observando unas hojas en sus manos, apenas tomó asiento en su escritorio el teléfono sonó
-Diga
-Señor, tiene una visita y…
-No estoy para nadie
-Pero es que es sobre el centro comercial del señor Yamato
-¿Esta Yamato ahí?
-No, no pudo pero mando al arquitecto
-… Bien, hazlo pasar
¿Naruto estaba en su empresa? Vaya suerte. El rubio escuchó a la chica llamarlo y abrirle la puerta, él entró agradeciéndole y se encontró con Sasuke que ni siquiera lo observaba
-Buenas
-Pasa, siéntate
-Gracias
-¿Cómo has estado? –Preguntó rápidamente el moreno tomando por sorpresa al rubio frente a él, Sasuke levantó la vista, totalmente serio-
-Bien, gracias por preguntar ¿Y usted?
-Dentro de lo que cabe, bien.
-El señor Yamato no pudo venir por una reunión urgente de último momento con unos socios y… -El teléfono sonó y el moreno lo tomó con rapidez-
-¿Si?
-Disculpe la molestia, pero el encargado del departamento de mantenimiento esta aquí
-Dile que entre –Observó al rubio- Un momento –Las puertas se abrieron dejando pasar a un hombre mayor- ¿Qué pasa? –Naruto se mantuvo al margen por completo-
-Señor se nos presentó un problema esta mañana con algunos empleados y
-¿Hasta ahora me lo dices? –Preguntó molesto- ¿Desde esta mañana?
-No fue nuestra culpa jefe, operaciones no nos avisó a tiempo y nos dimos cuenta porque los empleados de producción notaron que la maquina productora del sector B estaba detenida y no encendida
-¿Y a qué hora se dieron cuenta de eso?
-Hace una hora
-¿¡Hace una hora!? –Sasuke se levantó- ¡Una maquina productora estuvo detenida por horas me dices! ¡Quién sabe cuánto dinero me debe costar! Dime que ya está en funcionamiento
-Sí señor. Venía a informárselo para que estuviera al tanto de por qué la producción seguramente estaría un poco más baja hoy en los registros
-Dile al jefe de operaciones que esta despedido, a los demás que esto no vuelva a pasar y tú vuelve a tu trabajo, bien hecho –Habló más calmado-
-Sí, señor. –El hombre se dio la vuelta saliendo de la oficina, Sasuke suspiró y volvió a sentarse, luego alzó el teléfono una vez más-
-Ino, prepara la liquidación de Suzuki y que la obtenga hoy mismo. Etsuko tomará su lugar a partir de mañana –Colgó y llevo una mano a su cabello cerrando los ojos y suspirando, pero entonces recordó que no estaba solo y abrió los ojos observando al rubio al otro lado del escritorio- ¿Y? ¿Qué venias a hacer aquí?
-… -“Que diferencia” pensó, cuando había llegado Sasuke estaba serio, como siempre, pero accesible y su actitud cambio tan rápido cuando ese hombre le contó aquello, se volvió tan cerrado y frío…- Si bueno, esto es para usted –Le entregó una carpeta al moreno que la abrió leyendo el contenido de las páginas- Como puede ver todo va en el camino correcto, el contratista ya tiene a los obreros y…
-¿Tienes hambre?
-… ¿Qué? –Naruto tardó unos segundos en procesar la pregunta repentina, Sasuke observó el reloj en su muñeca y luego miró al rubio con seriedad-
-Tengo que almorzar y al volver tengo una reunión, si quieres salir de esto hoy vamos a comer y me explicas todo –Era obvio que ya lo había decidido, no era algo que Naruto pudiera evadir. Se levantó con la carpeta en mano y se dirigió a la puerta, Naruto bufó solo por esta vez y porque el hombre se veía tenso, molesto y estresado haría las cosas como él quería- Ino necesito que aplaces una hora la reunión iré a comer mientras termino una conversación con el arquitecto
-Bien
Sasuke se abrió paso tranquilamente por los amplios pasillos, tenía que admitir algo, destilaba elegancia a pesar de todo lo demás. Naruto también notó otra cosa, nadie se interponía en el camino de Sasuke, él simplemente observaba al frente y los demás se alejaban dejándolo pasar, miraban pero jamás fijamente a los ojos, el moreno era tratado por todos de “jefe” “señor” no por su nombre menos su apellido, todos hablaban con calma pero a la vez algunos con miedo difuminado. Definitivamente era el jefe, se hacía respetar como tal.
El portero lo veía acercarse y abrió las puertas, el auto ya estaba estacionado al frente y el chofer esperaba paciente, Sasuke entró tranquilamente y Naruto también. Se mantuvo en silencio pues era obvio que el moreno estaba estresado, solo indicó donde ir al chofer y recostó la cabeza hacia atrás cerrando los ojos, desajustó la corbata y abrió el saco, suspiró. Naruto por un momento se sintió tan cansado como él, Sasuke era joven ¿Cuánto podría tener? ¿30 como máximo? ¿25 como mínimo? Y estaba completamente al frente de Sharingan Corp, se desempeñaba bien pues parecía que nadie lo cuestionaba ni llevaba la contraria a pesar de su edad… Fácil no debía ser.
-¿Me seguirás mirando fijamente todo el camino? –El rubio se vio descubierto y se sorprendió, Sasuke abrió los ojos mirándolo. Con el chofer los dividía un gran cristal oscuro que acababa de subirse, el rubio ni notó cuando pero eso no estaba ahí cuando entraron al auto- ¿Qué?
-Nada… -El rubio observó fuera de la ventana a su lado- ¿Está cansado?
-¿Hm?
-Quizás prefiera que hablemos en otro momento –Sasuke sonrió de lado, burlón, eso no era nada comparado con otros días atareados-
-Siempre es mejor salir de las cosas de una vez. Claro que estoy cansado, pero eso es normal
-No creo que sea normal… O que haga bien al cuerpo –Sasuke alzó una ceja. Se mantuvo observando el perfil del rubio, había algo que no había notado ¿Qué eran esas marcas en sus mejillas? ¿Cicatrices? ¿Maquillaje? ¿Tatuaje?-
-¿Por qué?
-Eso dicen, que no es bueno estresarse tanto ni tener tanto trabajo
-Mm… Ellos no tienen una empresa encima de sus hombros 24 por 7 –Comentó como si nada mirando ahora por la ventana a su lado- Estoy acostumbrado
-Supongo –Susurró-
Apenas el auto se detuvo Sasuke volvió a acomodar su corbata y saco antes de salir del auto. Naruto lo seguía de cerca, el moreno pasó tranquilamente al restaurante y un mesero lo guio a una mesa apartada entregándole un menú a cada uno
-Yo no tengo hambre
-Eso es problema tuyo –Dijo Sasuke simplemente, el rubio lo odio mentalmente ¿Siempre era tan chocante y odioso? Pero el moreno ni se inmuto simplemente siguió ojeando el menú-
-Sopa de fideos, filet mignon en salsa verde con vegetales gratinados, vino Merlot y de postre un mouse de tres chocolates. Gracias –Naruto quedo sorprendido, eso sonaba a mucha comida- Ultima oportunidad ¿Comerás algo o qué? –Le entregó el menú al hombre y observó al rubio-
-Por mí el especial del día por favor, gracias. –El hombre se dio la vuelta mientras que Sasuke tomaba de la copa de agua frente a él- Tiene hambre
-Si ¿Y?
-… Volviendo al tema por el que estoy aquí… -Sasuke alzó una ceja aburrido- El terreno está en perfectas condiciones ya está limpio, estamos en el presupuesto ya los obreros están contratados y los materiales también, el contratista dice que la próxima semana se puede empezar con los cimientos ¿Me está prestando atención?
-Sí, pero quisiera no hacerlo si soy sincero
-…
-¿Por qué me vienes a decir esto?
-El señor Yamato me lo pidió. Usted dijo que quería estar al tanto de la construcción del centro comercial
-Mm… Tienes razón –Suspiro, en ese momento apareció el mesero con la comida de ambos-
-Supongo que por eso no lo paso por escrito
-Hay cosas que prefiero oírlas a tener que leerlas
-Buen provecho
-Igual
En realidad, ahora frente a él, no parecía tanta comida. Si la sopa era apenas un pequeño plato, el plato principal era un simple trozo de carne y algunos vegetales… Aunque todo se veía tan bien y elegante que a simple vista daba hambre, su propio plato se veía y olía maravillosamente seguramente Deidara le encontraría un detalle o lo elogiaría pero para él se veía perfectamente bien. Y sabía igualmente bien.
-¿Vino? –Preguntó mientras se servía de la botella, el rubio acercó su propia copa-
-Gracias, si
-¿Has probado el Merlot?
-Solo una vez y me gustó mucho
-Hm, por lo menos tienes buen paladar con respecto a los vinos –Naruto rodó los ojos y Sasuke rió por lo bajo, una vez más el rubio lo miro extrañado parecía que Sasuke no reía con regularidad, lo ocultaba y se tragaba su risa con rapidez-
-Esto está muy bueno –Sonrió, ya llevaba mucho tiempo serio y comer siempre alegraba el alma, según decían por ahí, Sasuke sonrió de lado pero complacido de por fin ver al rubio más relajado con él y sonriendo-
-¿No habías comido aquí?
-No suelo frecuentar estos sitios
-Deberías
-No tengo el dinero para pasarme todos los días por aquí
-¿Ah no?
-Yo vengo de orígenes muy humildes, apenas empiezo a surgir por mi mismo
-… Eso es admirable
-El admirable es mi hermano
-¿Tienes hermanos?
-Uno, y es quien siempre se sacrificó por mí y me dio todo mientras crecía –Naruto no se había dado cuenta de que Sasuke dejó de comer por oír el relato, el rubio si estaba entretenido en su comida. A los ojos de Sasuke, Naruto podía decir venir de un sitio humilde y eso se notaba, el rubio siempre usaba “gracias” “por favor” “buenas” “disculpe” siempre era amable y respetuoso, tenia modales a la hora de comer, seguramente su hermano lo había educado bien-
-Son huérfanos
-… -El moreno había afirmado aquello, solo entonces Naruto alzó la vista- ¿Usted tiene familia?
-… -Sasuke calló por un momento y observó el vino dentro de su copa mientras el mesero se llevó todo y dejo el postre frente a él- No. No tengo hermanos, tampoco padres –Dijo casi con odio. Naruto por un momento se sintió mal, luego el moreno lo miro fijamente- Pero tú tienes suerte por tener un hermano con el que te llevas bien. Brindo por eso –Sonrió un poco, Naruto por primera vez sonrió completamente alegre y abierto levantando su copa igual, Sasuke se dio cuenta que para Naruto su hermano era importante-
-Salud
-Salud… ¿Quieres? –Preguntó después de comer el primer bocado de su postre, el rubio dudó, Sasuke sonrió era obvio que quería pero seguramente porque ya conocía a Sasuke tan serio y frio se estaba negando a aceptar- Es obvio que si, toma –Tomó otra cuchara y luego ofreció el plato entero al rubio- Comételo, no suelo comer dulce y ya no quiero mas
-… -El rubio dudo- Gracias –Pero prefirió no rechazar al moreno-
-Ya vuelvo
Solo por esta vez, Naruto aceptó que quizás Sasuke no era tan malo como le había parecido al principio. Quizás ya era parte de él ser serio y de carácter fuerte. Sasuke salió del baño y se dirigió a la barra entregándole una tarjeta a la chica mientras sacaba su teléfono y observaba un mensaje, luego de pagar se dirigió a la mesa una vez más donde el rubio terminaba de tomar de su copa y el mesero se llevaba lo demás
-Vamos
-¿Eh? Pero no he pagado
-¿Quién dijo que pagarías algo?
-… No debió
-Unas simples gracias estaba bien
-Iré al baño
El rubio se preguntó por qué el moreno habría hecho aquello, pero realmente agradecía la generosidad de éste. Para cuando salió el moreno esperaba junto al auto mirando el teléfono en su mano
-¿Listo? –Preguntó sin siquiera verlo-
-Gracias
-¿Hm?
-Por la comida –Sasuke solo le restó importancia con los hombros-
-Entra… -Una vez el auto se puso en marcha el moreno dejo el teléfono de lado- Puedes decirle a Yamato que comience todo y al contratista igual, si pasa algo manténganme informado pero no por escrito. Y preferiría seas tú quien me tenga al tanto de todo
-¿Qué?
-Ya me oíste ¿O qué? ¿No puedes? –Lo retó-
-… Mandón –Susurró-
-Soy el jefe, es obvio que soy un mandón –Bromeó, Naruto rió por aquello-
-Es cierto
-Deberías estar agradecido
-¿Por qué?
-No permito que la gente se ría de mi, mucho menos un empleado
-… -Naruto se sorprendió, Sasuke observaba fuera de la ventana, pero le lanzó una mirada de superioridad, Naruto se mostró molesto- Yo no soy cualquiera de sus empleados, no piense que me humillaré frente a usted solo por ser mi jefe
-Lo sé… -El rubio se extraño, Sasuke sonrió sinceramente, notó que la mirada del rubio se sorprendía era la primera vez que veía sonreír de frente al moreno y más una sonrisa tan… Sincera, pequeña pero sincera, pero su sorpresa se hizo mayor después de oír lo siguiente- No eres como los demás, eres tú mismo… Eso me gusta
-…
Sasuke era extraño, era lo único que Naruto podía decir después de lo poco que conocía al moreno. El resto del camino fue silencioso pero para nada incomodo. Cuando llegaron el rubio bajó y mostró su mano al moreno que lo miro alzando una ceja
-Gracias por todo, que pase buenas tardes
-Hm –Sonrió de lado el moreno y no le devolvió la mano- Dile a Yamato lo que te dije –Se dio la vuelta- Nos vemos, usuratonkachi –Saludó con la mano mientras se alejaba el rubio quedo sorprendido-
-¡Deja de llamarme así, teme engreído! –No gritó pero, el chofer y el portero quedaron sorprendidos y asustados observando hacia Sasuke, que solo se giró un poco observándolo tranquilamente y siguió su camino hacia adentro de la empresa-
Naruto se dio la vuelta para ir por su auto, el chofer y el portero se observaron sorprendidos y sin comprender ¿¡Como se había atrevido a hablarle a Sasuke Uchiha así y aun seguir con vida y tranquilo!? ¿¡Cómo!? Ese hombre tenía agallas…