-Uzumaki-kun/ Uzumaki-senpai- era los gritos de todos los días junto con lo de los Uchiha, cuando llegaban a la academia. En el mes que llevaban de asistiendo en la academia se había vuelto populares no solo por su belleza envidiada por mujeres y doceles, sino por la amabilidad, caballerosidad y su peculiar personalidad… Eso sin duda era algo que no querían, porqué a pesar de ser varones recibían miradas lujuriosas por parte de otros varones y aquello los incomodaba. También estaba el hecho de que los Uchiha los trataban amablemente cuando se veía que no trataban bien a ningún otro varón, docel o mujer, al contrario, parecían odiarlos y más a las hermanas Haruno, quienes se autodenominan como novias de los hermanos Uchiha cuando no lo eran. Algo que sin duda los Uchiha dejaron claro en el almuerzo de hace tres semanas.
------Flash back------
Deidara y Naruto había estado evitando a los Uchiha ¿La razón? Konan y Sakura Haruno. Por algún motivo que desconocían se sentía extraños al ver a los Uchiha con las Haruno, por ello llevaban tres días evitándolos hasta que los acorralaron en la cafetería cuando se disponían a almorzar.
-¿Es mi imaginación o nos están evitando?- pregunto el peli negro mayor.
-C-claro que no ¿Por qué lo haríamos?- cuestiono Deidara dejando su almuerzo en la mesa disponible.
-Eso es lo que queremos saber- gruño Sasuke, viendo que el dobe no lo miraba a los ojos.
-No los estamos evi…
-Sasuke-kun/ Itachi-kun- dijeron las hermanas Haruno colgándose de los pelinegros mal humorados-
-¡Ya me tienen harto!- grito Sasuke Uchiha llamando la atención de todos en la cafería y quedo en silencio. Algunos decidieron grabar, pues rara vez se vía explotar a algunos de los hermanos Uchiha.
-Sasuke-kun…- dijo rápido soltado al pelinegro e igual hizo Konan.
-Haber dime ¿Quién demonios te dijo que me llamaras por mi nombre? No somos nada para que me llames así, que fuésemos a la misma secundaria no te da derecho a llamarme por mi nombre y ya estoy harto de que digas que eres mi novia cuando NO LO ERES. AL contrario, jamás me fijaría en ti con lo chocante e insoportable que eres….Tú y tú hermana son iguales ¡DEJENOS EN PAZ, SON INSOPORTABLES! -grito a todo pulmón, y es que su paciencia había llegado al límite.
-No le hables a mi hermana así, Itachi-kun dile algo- decía Konan.
-Sasuke dijo todo lo que podía decir, Haruno. Estoy harto de ti, me tienes cansado de tú actitud. ¿Crees que no sé qué ambas han regado los rumores de que somos novios y que nos acostamos con ustedes? Sinceramente solo me dan pena, mujeres así no deberían de existir- respondió enojado ¿y cómo no? si Deiko Uzumaki lo estaba evadiendo y su paciencia se agotó.
Las hermanas Haruno, humilladas frente a más de doscientos alumnos, salieron corriendo mientras lloraban.
-Lo siguiente va para ustedes, doceles y mujeres: sí alguien de aquí nos interesara ya habríamos hecho algo, así que por favor, evítennos la pena de que algo así vuelva a suceder. Sinceramente no tengo más paciencia para personas como las hermanas Haruno- dijo Itachi más tranquilo y se sentaron con los rubios.
Deidara y Naruto veían incrédulos aquellas dos personas, se veían tan serias, sin duda alguna habían alcanzado su límite -¿No fueron muy duros?- cuestiono Deidara.
-Es que tú no las soportados por 6 años- dijo Sasuke en voz alta.
-Cuando estaba en la secundaria, dije que iría a New York a estudiar y cuando llegue a la preparatoria Konan Haruno estaba en el mismo salón, mismo horario y mismo complejo de departamentos. Regrese aquí ese mismo día y ella también lo hizo- dijo Itachi en voz alta –Está obsesionada.
-Wohhhh- dijeron los Uzumaki.
-Haruno Sakura es peor, me sigue por todos lados- dijo exasperado Sasuke, recordando las miles de veces que la había visto seguirlo.
----- Fin Flashback ------
-Naru-chan. Dei-chan. ¿Les gustaría hacer la tarea en nuestra casa? – pregunto Itachi antes de abordar el auto.
Naruto y Deidara se miraron indecisos, pero justo en ese momento les llego un mensaje “Dei, Naru, no voy a poder ir a dejarlos ¿Podrían irse solos?”. Mandaron una respuesta y esperaron… -Claro, vamos-.
Los cuatro abordaron el auto que recogía a los Uchiha. Los alumnos que aún quedaban miraron sorprendidos aquello, pues los Uchiha no llevaban a nadie pero también eran conscientes de la gran amistad que tenían los cuatro varones.
Llegaron a la gran mansión Uchiha –Es hermosa.
-Lo es. Vamos. Mamá querrá conocerlos- dijo Itachi tomando de la mano a Deidara y lo guio a la casa. Las mejillas de Deidara estaban muy rojas por la vergüenza.
Entraron a la casa y al llegar a la sala se encontraron con una mujer muy hermosa y muy parecida a Sasuke.
-¿Mi-mi-minato?- dijo viendo a los rubios. Deidara y Naruto palidecieron ¿Es que todo mundo conocía a su padre?
-¿Minato?- cuestiono Deidara para salir del trance.
- ¿Quiénes son?- cuestiono rápidamente.
-Deiko Uzumaki y mi hermano menor, Naruko- dijo Deidara con una reverencia, a lo cual Naruto copio.
-Disculpen es que se parecen tanto a un viejo amigo. Soy Mikoto, la madre de mis retoños- dijo acercándose a los pelinegros.
-mamá- dijeron apenados y los rubios sonrieron
-Mucho gusto, Uchiha-san- dijeron al unísono.
-No. Llámenme Mikoto- dijo viendo el uniforme -¿Varones? Creí que eran donceles, es que son muy hermosos.
Los hermanos Uzumaki se sonrojaron –Nos han dicho eso desde que ingresamos al instituto, si lo fueros mamá nos lo hubiese dicho- comento Naruto, rascándose la mejillas.
-¿De dónde vienen? ¿Su madre?- pregunto después de invitarlos a tomar asiento en la sala.
-América. Mamá es japonesa, se llama Miko Uzumaki y nuestro padre solo sabemos que es americano… un rubio de ojos azules, de él los heredamos- explico Deidara refiriéndose a su cabello y ojos azules.
-Son muy bellos- comento Mikoto con una sonrisa -¿Dónde están viviendo?-.
-Con Senju-sensei. Mamá no pudo viajar con nosotros y sensei nos da hospedaje- dijo Naruto más calmado.
-Ya veo. Ella es tan amable.
-Sí- respondieron al unísono.
De pronto un “ya llegue” se escuchó y vieron entrar a un hombre muy guapo y parecido a Itachi -Minato- dijo al ver a los rubios.
Los 5 rieron –No cariño, ellos son Deiko y Naruko Uzumaki, viene de américa- explico Mikoto.
-Lo siento. Fugaku Uchiha- dijo presentándose.
Platicaron un rato hasta que les avisaron que el almuerzo estaba listo. Después de almorzar fueron a la biblioteca para hacer la tarea que les habían dejado
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Los meses siguieron avanzando hasta que se cumplieron 7 meses de que habían llegado a Japón y ya no podían ocultarlo más; estaban enamorados de los hermanos Uchiha.
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Itachi y Deidara estaban haciendo un trabajo en equipo que les habían pedido. Deidara estaba nervioso de estar en ese lugar, tan cerca del pelinegro.
-Dei...Dei… DEIKO- dijo Itachi. Deiko la miro confundido, debía admitir que se veía muy tierno con esa mirada. Se aproximó y capturo los labios del rubio.
Pestañeo varias veces, cerró los ojos y disfruto del beso –Itachi- murmuro al separarse, toco sus labios.
-Me gustas, no me importa que seas varón. Me gustas, Deiko- confeso Itachi.
-¿No te importa?- el pelinegro negó –también me gustas, Itachi- susurro al borde del llanto.
-Deiko-lo beso una vez más y luego le limpio sus lágrimas – ¿Quieres ser mi novio?
-Sí- respondió emocionado y se lanzó brazos del peli negro, quien rio y volvió a besar al rubio.
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-¡Vamos a la noria!- exclamo Naruto apuntándola.
-Está bien- respondió con una pequeña sonrisa.
Subieron a la noria y esta comenzó a andar. Naruto estaba parado observando emocionado la ciudad, le encantaba el panorama; de pronto sintió que unos brazos rodearon su abdomen -¿Sasuke?
-Naruko desde que te conocí, mi vida ha cambiado. Sé que ambos somos varones y eso no me importa, Me gustas Naru- confeso viendo el reflejo de ambos, el rubio estaba muy sonrojado.
Naruto se giró y vio esas mejillas sonrojadas del azabache –Me gustas, Sasuke.
-¿Quieres ser mi novio, dobe?
-Sí, teme- respondió sonriendo. Se aproximaron poco a poco y sus labios se acamparon en un beso inocente, el primer beso de ambos.
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La noticia del noviazgo de Naruko Uzumaki y Sasuke Uchiha fue esparcido al siguiente día. Alguien los había visto y enviado la imagen de ellos tomados de la mano mientras salían del parque de diversiones.
Por supuesto mujeres, doceles y uno que otro varón no lo tomaron con gracia. En especial Sakura Haruno, que intentaba humillar a Naruko por ser raro al estar con otro varón pero Naru la ignoro y dejaba hablando sola. Pues estaba preparado para cualquier comentario, desde ese día Haruno Sakura se dio la tarea de desprestigiarlo y hacer que quedara mal con Sasuke, pero todo le salía mal y solo se perjudicaba ella.
A las pocas semanas Itachi y Deiko dieron a conocer su noviazgo, algunos los apoyaban y otros no, pero sabían que comentar algo era provocar al enojo de Deiko Uzumaki y eso no lo hacían, pues ya conocían al rubio mal humorado. Claro, que Konan Haruno se puso en el mismo plan que Sakura, pero a ambos todo le salía mal.
Las semanas pasaban y la tensión sexual era evidente para Itachi y Deidara -¿Estás seguro, Dei?
-Sí-
Continuará...