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It's My Party and I Cry if I Want 2 por KatsumiKurosawa

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Notas del capitulo:

Hola hola!!!

Alerta de GRi en este cap C: es sólo para desarrollar la personalidad de Riri xDU

bueeno :v

It’s my party and I cry if I want to

Por Katsumi Kurosawa

Capítulo 2

17

 

 Abrí los ojos.

Ya era de día y me dolía la cabeza como un carajo. Era de esos días en los que le prometía a Dios en vano que no volvería a beber y aunque lo volviera a hacer la siguiente semana.

21 años. Era mi cumpleaños número 21 y ese fue el primer pensamiento que vino a mi cabeza…

Recordaba la mayoría de mis días de cumpleaños con cierto rencor, pero no el número el número 17. Ese tenía un lugar especial en mi corazón.

En aquel tiempo, ya hacía cosas imprudentes, no tan graves, pero las hacía. Y Ji… mi mejor amigo, mi único amigo… Jiyong, estuvo ese día conmigo.

Recuerdo cómo la clásica fiesta de papá estalló en la planta baja y yo sólo veía todo de modo aburrido. ¿Para qué se molestaba en hacer todo eso si ni siquiera iba a estar?

─Ánimo, Riri… si tu papá te hace estas fiestas a pesar de que no esté, es porque te ama y no quiere que la pases mal el día de tu cumpleaños… ─la sonrisa preciosa de Ji se había extendido por sus labios. Joder, tenía cara de niña, era demasiado guapo y femenino.

A menudo solía preguntarme por qué no podía enamorarme de Jiyong… él había expresado abiertamente que sentía cosas por mí y no le molestaba saber que yo no le correspondía de ese modo.

Pero sabía la respuesta a esa pregunta. La sigo sabiendo.

─Yo preferiría una reunión con las cinco personas más importantes de mi vida... ─expresé bebiendo de mi copa de champagne, hasta en el alcohol me solapaba papá, siendo menor de edad─ una cena tranquila y un delicioso souflé de postre… ¿Es mucho pedir?

Triste me había quedado viendo el jardín trasero de la mansión lleno de luces, gente de la preparatoria con la que ni siquiera interactuaba… pero ninguno se perdía mis fiestas desde el preescolar. Todo de alta calidad, todo gratis y la posibilidad de salir en las revistas adolescentes de moda.

¿Quién no querría estar en la fiesta del hijo de uno de los CEOs más importantes de Samsung? Un idiota tal vez.

─Al menos tienes algo, Riri… mi último regalo de cumpleaños fue un cheque para que me comprara algo, ya que no tenían ni idea de lo que podría desear. La postal de la torre Eiffel con mi número equivocado de años cumplidos… ─miró todos aquellos globos en donde había un 17 de color verde neón.

─El viejo al menos sabe cuántos años estoy cumpliendo… bah… ─escupí mirando a un lado. Todos bailaban en la pista y el cumpleañero con su único amigo real, estaban apartados de todos.

─Me voy a América, SeungRi… ─había susurrado Jiyong haciéndome atragantarme con la copa de Champagne rosa─ Estudiaré la universidad ahí…

─Pero… ¿Qué hay de mí? ─mis ojos se pusieron cristalinos inmediatamente. Mi único amigo… el único que sabía cómo me sentía… el único que me escuchaba sin importarle si me limpiaba o no el trasero con dólares americanos.

─Puedes venir conmigo si lo deseas… sólo pregúntale a tu padre ─rió cándidamente sabiendo que eso no podría ser.

Papá no me dejaría jamás vivir en otro país porque Corea del Sur es el único lugar en donde sus ojos pueden estar sobre mí y él tiene control de lo que sucede a mi alrededor en mayor medida.

Si había comenzado a hacer idioteces bajo su guardia, haría cosas peores sin su supervisión.

─Sabes que no querrá… ─mi cuello estaba tenso por lo que comencé a moverlo para relajarlo─ ¿Cuándo te vas?

─En una semana…

─Quiero darte un regalo, Ji. ¿Me dejarías? ─una idea, solamente. Él me miró tranquilo, no había nada material que pudiera darle y que él no tuviera ya.

─ ¿Un regalo? ¿Tú, quieres darme un regalo Riri? ─nosotros no compartíamos más que compañía porque sabíamos que nada nos hacía falta. Hablar de regalos era algo raro.

─Ven… lo tengo en mi cuarto… ─sonreí.

Lo tomé de la mano para apresurarme a mi habitación.

De paso me topé a Seunghyun, con su habitual traje de mayordomo. En ese tiempo tenía el cabello tan largo que se lo ataba en una coleta, dándole un aspecto peculiar a su uniforme.

Parecía un asesino a sueldo disfrazado de mayordomo. Me reí para mis adentros imaginando la cara de idiota que pondría si le confesara eso.

Pero él y yo no hablábamos más. Yo había pintado una línea divisoria entre nosotros, así que pasé de él para llegar a mi habitación.

─Tu mayordomo es tan guapo… ─soltó Ji con una risita─ Dan ganas de meterlo a una de las habitaciones para tener un poco de diversión.

─ ¿Has tenido sexo antes, Hyung? ─le pregunté antes de cerrar la puerta de mi dormitorio. Jiyong sonrió misterioso y caminó hacia el enorme ventanal. Desde mi habitación podía apreciarse la fiesta.

─Sí. ─murmuró con simpleza─ Sabes que mis padres siempre están en Paris por los desfiles de modas y así… y yo siempre he estado solo en esa mansión enorme… tenía una nana…

Le miré absorto. Cuando dijo “nana” no pude dejar de concentrarme e imaginar su historia.

─Ella apenas es cinco años mayor que yo…  La pusieron a cuidarme cuando tenía quince y yo diez. ─suspiró sin borrar su sonrisa─ No podía evitar hacerme ideas tontas con ella… imaginarla desnuda, imaginar lo que sería colarme a su habitación… pasé mi pubertad masturbándome ante esa fantasía…

─La chica japonesa ¿Verdad? La recuerdo… ─me puse a reflexionar sus palabras y la bella chica llegó por fin a mi construcción imaginaria.

─Sí, Noriko… ─otro suspiro se le escapó─ Lo hice por fin. Cuando tenía quince me armé de valor y entré a su habitación…

─Joder, Ji… nunca lo creí de ti… ─me reí orgulloso de su descaro, pero él parecía demasiado avergonzado con lo que hizo.

─Le dije que tenía pesadillas… que no quería estar solo… me colé en su cama y ella me recibió en sus brazos… ─sin romper su relato, Ji se dirigió a mi cama y se botó en ella sin cuidado, al lado mío─ Luego sus caricias fueron demasiado adultas y comencé a calentarme… acabé haciéndolo con ella… fue maravilloso.

─Pero ella…

─Por supuesto que cuando alguien de la servidumbre le dijo a mis padres que me estaba acostando con regularidad con mi nana… la sacaron de mi casa. No volví a ver a Noriko… ─levantó ambas manos y se observó los dedos─ La extraño…

─Me imagino que sí…

─ ¿Por qué me preguntas si he tenido sexo, SeungRi? ─giró su cabeza hacia mí y yo sonreí.

─ ¿Has tenido sexo con un hombre? ─se me escapó en un jadeo y ante la tenue luz de mi cuarto, creí que se sonrojó.

─No… pero por qué estás haciéndome estas preguntas tan extrañas… ─se incorporó para observarme mejor y yo me incorporé con él.

─Te gusto… ¿No? ─susurré en otro jadeo y él contuvo el aire.

─Mucho… me encantas SeungRi, siempre he sido sincero al respecto ─me dijo con seriedad.

─Este va a ser mi regalo de despedida, Ji… ─me paré frente a él, quien continuó sentado en mi cama.

Desabroché los botones de mi camisa y me fui desnudando poco a poco.

Él me miró con los ojos brillosos por el morbo y la lujuria. Jamás había hecho algo como aquello.

─Vas a regalarme… ─comenzó, pero yo ya estaba desnudo sobre él y lo interrumpí con un beso fogoso que le quitaría el aliento mientras nos revolcamos en mi cama.

Lo desnudé con prisa. Nadie podría interrumpirnos…

Como un idiota inexperto, guié su pene en mi interior y chillé de dolor al sentir la mitad dentro.

─Tu tampoco has estado con un hombre… ─concluyó Ji sin contener la excitación en su voz. Estaba sorprendido, no porque fuera virgen, sino porque le estaba entregando a él mi primera vez.

─Shhh… ─necio como un niño, seguí empalándome hasta tenerlo totalmente dentro.

Lo cabalgué con prisa.

Aquella sensación me hacía sentir maravilloso. Amado, necesitado… podía ver el brillo de placer en los ojos de Jiyong posados en mí.

Sus gemidos eran música para mis oídos.

Sus caricias en mi cuerpo y sus besos eran mi droga. Me corrí abundantemente en su pecho sin dejar de cabalgarlo. Él me siguió poco después, tenía más resistencia al sexo al parecer.

Me acosté a su lado, llenándolo de besos.

─Ahora sí… ya no quiero irme… ─me dijo abrazándome la cintura y acercándome a su cuerpo de modo posesivo. Me sentía tan bien entre sus brazos que en verdad dudé si Ji me gustaba de ese modo o no…

Lo hice con él porque lo amaba como mi amigo. No porque tuviera pensamientos románticos hacia él… mi cuerpo reaccionó de modo natural, hasta conseguir el orgasmo.

Pero en ese momento en que Ji me miraba como el ser más valioso del mundo, me replanteé mis intenciones.

─Lástima… ahora te vas, porque si no te fueras, no habría cogido contigo… ─me froté contra él sintiéndome excitado de nuevo.

─Eso es muy malvado de tu parte… he querido cogerte desde que te conocí en la secundaria y ahora que me dejas, lo haces por lástima… ¡Joder SeungRi…! ─se carcajeó sin dejar de acariciar mi espalda.

─ ¿Querías cogerme? Por Dios hyung ─me reí con él.

─Claro que sí… tu cuerpo es… delicioso ¿No te das cuenta? ─sus caricias subieron de tono de nuevo mientras yo me reía halagado.

─Nope…

─Tienes a la preparatoria tras de tu culo y no lo notas, SeungRi… ─me besó de nuevo. Ahora tenía la libertad de hacerlo desde que el primer beso nuestro vino de mis propios labios─ Perdona, amor… tengo qué cogerte de nuevo o si no moriré...

Y lo hizo.

Lo hicimos una y otra vez toda la madrugada. Me di cuenta en ese momento que me encantaba tener sexo… me encantaban esas miradas sobre mi cuerpo haciéndome sentir importante. Me deleitaba con los gemidos de placer que yo provocaba.

¿Se la chupé? Oh sí. Lo hice. Él a mí.

Nos enseñamos de todo ésa noche. No me arrepiento de nada… mucho menos me arrepiento de mirar hacia las cámaras dentro de mi habitación y reír descarado.

Las habían instalado un día antes… estaba seguro de que mi padre mandó a alguien a espiar todo lo que hago. ¿Por qué no darle un espectáculo?

¿Por qué no mostrarle a papá como su hijito menor de edad es follado por su mejor amigo durante horas…? Oh, carajo… la risa que me daba imaginar la cara de papá…

─Buenos días, Señor Lee… ─ahí estaba mi mayordomo entrando con la bandeja de comida.

Hacía mucho que no desayunaba fuera de mi cuarto. ¿Para qué si de todos modos desayunaría solo?

─Buenos días, James… ─le dije frotándome un ojo. Me encantaba molestar a Seunghyun, él sólo controlaba el tic en la esquina de su labio cuando yo le decía algo que lo molestaba.

─Le traigo unos huevos revueltos con tocino, un waffle y un poco de jugo. ─comenzó a poner todos los platos de la bandeja a mi mesa.

Yo me levanté y me estiré como un gato para aliviar mi pereza. No funcionó.

─Y le traigo… este cupcake de cumpleaños… ─su gruesa voz se hizo un hilillo de vergüenza mientras encendía una velita─ Feliz cumpleaños, Señor Lee…

Miré el cupcake de fresas con los ojos brillosos.

Hace tres años que hace lo mismo… me hornea diez cupcakes y me trae uno en el desayuno. La primera vez que lo hizo fue un pastel pero me enojé tanto que le hice un berrinche…

Odiaba las cosas ostentosas… entonces él… con aquella amable sonrisa con la que me aguantaba todos y cada uno de mis berrinches, asintió y retiró el pastel de mi habitación.

Más tarde me entregó un cupcake con una velita y volvió a desearme feliz cumpleaños…

Carajo…

Ese tipo…

Apagué la vela como lo hice hace años.

─Gracias, Seunghyun… ─susurré. Mi vista estaba empañada de nuevo. Era odioso como Seung podía despertar ese corazón de piedra con gestos tan simples.

Es que desde que se dio cuenta que las cosas simples me llegan más al corazón, no ha parado de hacerlas para mí.

Arg… lo odio.

─Prepara mi atuendo Alexander McQueen para la fiesta… ya sabes, el que me enviaron ayer…

─Chanel y Versace mandaron un par de presentes también… ─murmuró colocando mis tenedores en su lugar y un pañuelo sobre mi regaso.

─Tendría qué verlos primero… ya sabes, a veces Chanel hace cosas tan anticuadas… ─me llevé un poco de huevos con tocino a la boca.

Seunghyun había dejado caer por accidente la enorme tapa plateada de la bandeja de comida que me trajo. Se agachó para recogerla dejándome a la vista su delicioso culo…

Sonreí y extendí la mano para tomar una de sus nalgas, llenándome la palma.

Él dio un chirrido de susto y se incorporó de inmediato, quedándose rígido como una tabla, mirándome con incredulidad.

─ ¿Creíste que me olvidé de lo de anoche antes de dormir? Es mi cumpleaños… puedo hacer lo que yo quiera y hay algo quiero hacer contigo…

Sus ojos estaban tan abiertos que daba risa. Estaba demasiado nervioso… y con razón. Yo jamás había cruzado la línea con él de ese modo…

Pero la noche anterior, mientras me escondía en su pecho y mis guardias se llevaban a Danny, hecho una piltrafa… quise que esos brazos me rodearan de otro modo.

Quise que sus manos me acariciaran de otro modo…

Quería acosarme con él… y lo haría.

─Cuando la fiesta de esta noche termine… te quiero aquí, en mi habitación… flojo y cooperando… ─susurré llevándome su cupcake a la boca ante su mirada de temor─ Voy a cogerte, Seunghyun… duro.

─Señor Lee… no puedo hacer eso… su padre me ha dado la confianza de cuidarlo estos años, no creo que sea muy agradecido de mi parte si me… aprovecho… de… su amabilidad… y… mancillo… su… tesoro… ─balbuceó las palabras.

Yo limpiaba la crema batida del pastelito en mis labios con mi larga y rosada lengua. Seunghyun sudaba.

─Sabes que no puedes negarte a mis deseos, Seung. Mi padre dio la orden de que, si no me hace ningún daño, cumplas mis caprichos… y sabes que este no me hará daño… al contrario, me dará mucho placer… ─sonreí recorriendo su cuerpo. Ese maldito esmoquin de mayordomo le quedaba tan bien…

─Pero señor… ¿Por qué yo?

─Te quiero aquí cuando la fiesta termine. Por ahora déjame desayunar solo. ─y tomé de nuevo mi tenedor llenándolo de huevos con tocino.

Seung se fue haciendo una reverencia antes de dejar la habitación.

─Te voy a coger, Seung ─susurré una vez que terminé los huevos y partía mi delicioso waffle─ Haré lo que se me dé la gana. Ya lo dije… es mi fiesta. Puedo llorar si quiero… 

Notas finales:

Algo así :v :v :v 

Ya saben que me encuentran en wattpad twitter o facebook page com KatsumiKurosawa C:


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