Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Con los niños lindos, condón. por Raven Rotten

[Reviews - 43]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

holas, holanda, jsdhjhsdjsdh aquí con un nuevo capitulo... con lemon <3 jshajh pues este capi lo escribi mientras escuchaba una cancion que amo con todo el corazón, pero sin embargo sólo la parte final esta inspirada en ella. Esa hermosa cancion es Amiga mia de Los Prisioneros, preciosa la cancion <3 pueden escucarla mientras leen el fic, aunque eso ya es desicion suya jsdhjsh

 

 

Cuando abrí la puerta de mi departamento, pude ver la televisión encendida y en ésta un programa de Mtv. Ignoré de cual se trataba.

 

Cerré la puerta dándole una patada y tiré la maleta al piso, sin importarme si ésta se abría o se rompía, estaba muy cansado después del viaje que había hecho con mis amigos a San Francisco para tocar en un tour. Fue divertido la verdad, no me puedo quejar tanto: mucho alcohol, habanos cubanos, desvelos, gritos, peleas, risas desquiciadas de locos dementes y mucho, mucho daño al golpearnos entre nosotros. Hermoso...

 

Olisqueé un olor a fresa cremosa, (muy fuerte, la verdad), mezclado con un intenso olor a tabaco, y entonces capté el humo que dominaba el ambiente. Me acerqué a la Tv y la apagué con algo de pereza, luego me dirigí a donde el humo era más espeso: el baño.

 

Linda sorpresa la mía cuando vi un cuerpo delgado y blanco sentado en la bañera, aun con la ropa y zapatos puestos, con sus lindas piernas fuera de la bañera llena de agua fría. En su mano, un cigarro color rosa. En sus labios, una tonalidad casi imperceptible de su labial rojo removido. Y en su cabello, algunas gotas de agua.

 

¿Y esa música? ¡Oh, Cranberries!

 

No me miró siquiera, estaba perdido en la música, tomando atención a la letra de la canción, inhalando su saborizante cigarro.

 

Qué lindo te ves ignorando el mundo, limitándote a escuchar tu música y llenarte los pulmones con humo, Sasuke.

 

Saqué un Blacks Stones de la cajetilla que tenía en mi bolsillo y me acerqué más a la bañera donde estaba ese muchachito.

 

Sin problema alguno, me senté dentro de la bañera mojándome la ropa, comprobando que sí: el agua estaba heladísima. Pasé mi brazo derecho por sus hombros de manera desinteresada, buscando con la mirada algún mechero.

 

Giré la cabeza al escuchar el sonido de un mechero; estaba prendiendo otro de sus rosados cigarros. Puse mi habano en mis labios y estiré el brazo izquierdo para tomar aquel mechero azul personalizado con brillo.

 

Pero mi mano fue detenida.

 

-Ven, acércate. -Dictó, acercando su lindo rostro al mío; juntó las puntas de aquellos dañinos falos. Yo inhalé el humo del habano, haciendo que se prendiera. Qué bonita forma de prender mi habano. - Creí que ya estabas muerto; como no llamabas. -Soltó aquellas palabras con ácido, camuflándolas con indiferencia. Estaba enfadado.

 

 

-Estaba drogado la gran parte del tiempo; no había ninguna línea telefónica; Deidara me rompió una botella en la cabeza y me mandó al hospital; los que organizaron el tour nos explotaron como si fuéramos máquinas de servicio público. -Conté con mis dedos cada una de las cosas que estaba diciendo con tanta ironía. - ¡Oh! ¿¡Cómo es que olvidé llamarte!? -Solté con sarcasmo muy exagerado.

 

Él ni siquiera me miró.

 

-Eres un pendejo...-Murmuró arrugando su respingada nariz. Aún sin mirarme. - Uno infeliz e imbécil...-Dijo, girando, por fin, su cabeza con algo de prepotencia.

 

Yo le miré, sonriendo con obvio sarcasmo.

 

-Sabes que te amo más que a mi propia vida...-Murmuré, soltando el humo junto con mis encantadoras palabras.

 

Me sonrió por fin, es más, se había reído en mi cara.

 

-¿De qué novela rosa sacaste eso?. -Escupió con burla e ironía, pisando mis palabras.

 

-Lo leí en una novela que estaba leyendo Konan. -Declaré, encogiéndome de hombros.

 

Él imitó mi acción.

 

-Yo igual te amo. -Rió, apoyando su cabeza en mi hombro. Le abracé por los hombros y disfruté de su aroma. -... ¿No tienes ganas de jugar? -Enredó uno de mis mechones en su delgado dedo.

 

-¿Por qué no me das un montón de ritalina y mucha cerveza antes?.-Fue mi respuesta.

 

Fumó lo último de su cigarro y tiró la colita al agua.

 

-Venga, amor, juega conmigo...-Besó mi cuello y acarició mi pecho, lo hacía lento y tan delicado, no podía evitar ser suave, después de todo es parte de él ser como una nena.

 

Pobre ingenuo, sólo él es lo suficientemente sensible para excitarse con unos besos en el cuello.

 

-Sasuke, acabo de llegar de un maldito tour en San Francisco. -Enfaticé la ciudad.- Estoy cansado...

 

Alejé mi habano del agua cuando Sasuke se montó encima mío, agarrando fuerte el cuello de mi camisa negra, mirándome feo, ¿Acaso estaba en celo que no podía estar sólo esta noche sin sexo?

 

-¡Escúchame bien, pedazo de mierda!.-Gruñó acercando nuestros rostros. Yo solté el humo, él gruñó como fiera y continuó: - ¡He estado dos puñeteros meses sin tener sexo! Y tú...-Me señaló. - Como el dominante que eres, debes darme sexo.

 

-¿Sólo porque estás en época de celo?.-Me burlé.- No habrá sexo ésta noche. Punto. -Finalicé sonriendo burlesco, mostrando los dientes.

 

-¡¡Pero, bebé...!!.-Me reclamó, dando excesivos saltos sobre mi pelvis.- ¿¡Qué tengo que hacer para que tengamos sexo!?.-Chilló.

 

-¿Qué te parece éxtasis y vino?.-Dije, sin siquiera pensar o analizar un poco las palabras.

 

Mi niño se cruzó de brazos y puso una mueca de decepción, pero al instante el rostro se le iluminó.

 

-Me parece perfecto. -Se salió de la tina y desapareció en la puerta del baño.

 

-Nunca se rinde...-Murmuré.

 

No me creo que haya ido a comprar sólo para tener sexo. No, mentira; si me creo que haya ido.

 

-¡Listo!.-Di un salto al percatarme de que ni siquiera había salido del departamento.- Hace unos días compré un poco de éxtasis para probarlo y casi lo olvido.-Rió dulcemente.

 

Puta mierda...

 

 

 

 

 

_______________________________________

 

 

 

 

 

 

 

Cómo nunca me intereso comprar un maldito catre, me vi obligado a dejar el colchón tamaño matrimonial en el piso alfombrado, tampoco es que me moleste, al contrario; me gustaba como se veía el dormitorio. Representaba mi personalidad, y molaba bastante, la verdad.

 

Además, fue bastante eficiente el no tener catre, ya que, con lo animados que éramos yo y Sasuke en la cama, no molestaba a los demás inquilinos del edificio.

 

Pero eso jamás implicó los gritos de Sasuke y los rasguños que hacía siempre en las paredes, o los ruidos que hacíamos cuando nos entraban las ganas justo en la cocina o en cualquier otro lugar poco tradicional.

 

Así que, resumiendo, ahora sólo se oía las paredes ser rasguñadas y gritos sinvergüenzas de parte de ambos, junto a sonidos obscenos de nuestros cuerpos chocar con brusquedad.

 

-¡Ahhh!... ¡Itachi! ¡Itachi! …-Gimió, quitando con las uñas el papel tapiz de la pared.

 

El éxtasis era algo fantástico, nunca había estado tan cachondo en la vida. No tenía ni idea de en qué cojonudo momento llegamos a la cama y ya se la estaba metiendo, (y supongo que él tampoco), ni menos sabía por qué se me estaba siendo tan difícil bajarme la calentura. Lo que si sabía es que ya llevamos más de 5 orgasmos, y que las ganas volvían cada vez con más fuerza.

 

Vi como empezaba a gatear, alejándose de mí.

 

Con que quería jugar al gato y al ratón, ¿eh? Pues bien, me gusta que se haga el difícil...

 

-¡Ven aquí!.-Gruñí con tono excitado, hundiendo mis dedos en la carne de sus caderas, agarrándolo con fuerza y tirando con brusquedad hacía mí.

 

-¡Ay! ...mmm... No seas tan brusco, bebé... ¡¡nnnghh!! -Mis instintos dominantes estaban por los cielos. Admiré el tatuaje de prostituta¹ que tenía escrito con una clara y nítida tipografía: "Fagott"², y aquél que tenía en la nuca también con la palabra "Vulgar".

 

-Grrr... como me encantan tus tatuajes... Mmmmm...-Subí más su camisa mojada, descubriendo más piel.

 

La verdad, es que ni siquiera me había sacado los pantalones y, con suerte, me había arrancado la camisa, para dejar lucir mi pecho. Por el contrario, él se rehusó a sacarse su camisa mojada y sólo se quedó con esa ropa interior femenina que tanto le gustaba usar y que, ahora, están en sus rodillas.

 

Apreté más su cuerpo al mío, sintiendo mi cuerpo convulsionar.

 

-¡Ahhh!... ngg... Itachi...mmmm...-Curvó a la perfección su delicada espalda, llegando al orgasmo. Al instante, le seguí en esa ola de placer, llenándolo hasta el tope de mi semen.

 

Nos relajamos y optamos por recostarnos para que nuestros cuerpos recuperaran la energía.

 

-Un cigarro; necesito un cigarro ahora -Dije, casi como un desesperado, buscando con mi mano en el suelo, pasando mi brazo por encima de Sasuke.

 

-Deja, ya te los paso yo. También necesito uno -Se dio la vuelta para buscar el mechero y las cajas de los cigarros- Ten. -Puso uno de mis Blacks Stones en mis labios.

 

Primero encendió el suyo, lo admiré con detenimiento, era tan lindo y al mismo tiempo vulgar.

 

-¿Pasa algo?.-Preguntó, mientras prendía fuego a mi habano.

 

-No.-Inhalé - Nada en particular...

 

Él se dio la vuelta y yo lo abracé por detrás. En los 5 minutos que nos duraron los cigarros, no dijimos nada en lo absoluto, sólo fumábamos.

 

Apagamos los casi extintos cigarros.

 

-...Ha jugar...-Dije, agarrándole la cintura y poniéndolo debajo mío. Me rocé contra su cuerpo, causándole espasmos.

 

Le dejaba chupones en la curvatura del cuello, mientras él ronroneaba en mi oído.

 

-Ay, bebé, otra vez...-Me pidió - Hagámoslo otra vez...-Gimió, abriendo por inercia sus piernas, y flexionándolas para mejor acceso. No lo dude ni un poco, sólo di un fuerte estocada. Todavía el éxtasis estaba en nuestro sistema, así que no era difícil estar cachondo. - ¡Ngg!... muévete... muévete rápido...

 

Me adentré más en su interior y puse mis manos a cada lado de su cabeza. Golpeé con fuerza nuestras pelvis una y otra vez.

 

-¡Ah!.-Chilló muy agudo, como si de verdad le doliera, como si fuera un virgen siendo desvirgado.- ¡Ah!... nggg... I-Ita...¡Dios!...-Agarró mis largos cabellos sueltos y me obligó a besarlo, siendo yo el que terminaba dominando, obligándolo a él a seguirme el paso.

 

El sabor a Jack Daniels y a tabaco seguía en esa boquita, sin siquiera darme cuenta nuestros cuerpos ya estaban rebotando en el colchón por la fuerza que estaba ejerciendo en las embestidas.

 

Rasguñó mi espalda, sacándome gruñidos excitados. Mi espalda estaba ardiendo y sangrando, pero él seguía rasguñando.

 

Contraataqué mordiéndole como bestia el cuello.

 

-¡Ay! ¡Bruto! Nggh...- Chilló, se estaba quejando, pero no intentaba absolutamente nada para separarme. Este niño es tan contradictorio. - Espera...-Me separé de él, y se intentó quitar la camisa con lentitud, ya que se le había pegado a la piel.

 

Controlado por la excitación, agarré aquella tela y se la quité con brusquedad, tirándola a la esquina llena de ropa.

 

Le atrapé la boca, saboreándola, chupándola, mordiéndola... perdiéndome en su lascivo sabor.

 

-¡¡Mmgg!!... ¡Itachi!... Nggg ahhh...-Rodeó mi cadera con sus largas piernas, haciendo más presión en las penetraciones. - Ngh.... ¡¡Ahhhh, Itachi!!...-El gemido que provocó ese orgasmo, fue uno de los más desesperados y hermosos que jamás había escuchado en todos los encuentros sexuales que habíamos tenido antes.

 

Esas suaves paredes me apretujaron de una forma tan deliciosa que fue imposible no correrme por octava vez dentro de él.

 

Y de repente, mi cuerpo se sintió muy cansado: el éxtasis se esfumó.

 

Me vi obligado a salir de aquel cálido y apretadito lugar, para recostarme a su lado.

 

-Itachi... -Me llamó, pasando su mano por mi espalda arañada, ya que yo le estaba de espaldas a él.

 

-¿Mmm?.-Fue mi gran respuesta.

 

-Abrázame. -Me ordenó con tal sutileza en la voz, que no parecía una orden sino como una petición desesperada.

 

Me puse contento, ya no nos levantaríamos en varias horas.

 

Y lo estreché en mi pecho, con toda mi alma.

 

Muero por él…al olor de su sangre, al sabor de su cuello, al dolor de su llanto, al color de su voz…

 

Este ser que tanto amaba, ya dormía escondido en mi cuerpo. Me dio envidia verlo así, así que hundí mi nariz en su tan hermoso cabello y me dormí.

Notas finales:

jashjash gracias por leer.

 

Punto 1: el tatuaje de prostituta es el que se posiciona en la parte baja de la espalda.

 

punto 2: Faggot significa Marica en ingles.

 

la cancion que escucha Sasuke es Salvation de Cranberries

para Mika Uchiha:

 

 

 

 

ojala les gusten los tatuajes, los dibuje ambos en clases jsdhjsdh me encantaron los tatuajes. <3

 

 

Se despide: El Cuervo Podrido.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).