Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Criaturas sobrenaturales (Xiuhan) por exolove1

[Reviews - 78]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Este es el final!

 

Epilogo y especiales en los siguientes días!

Una vez ambos estaban más relajados, tumbados en el sofá, el resto se dedicaban a pensar e investigar dónde podrían estar, habiéndoles dicho Minseok que podrían estar en una cueva. Habiendo cogido un mapa de Corea del sur y marcando una X grande en las diferentes cuevas que habían, ahora comenzaban a barajar ideas.


Cuevas que estuvieran en un bosque, escondidas preferiblemente. Cuevas que pudieran ser más grandes, con una entrada enorme.


Poco a poco estaban descartando ideas, mientras Kyungsoo y Minseok descansaban del dolor enorme que habían sufrido anteriormente debido al daño que ese cambiaformas le estaba haciendo a sus parejas. No podían creer que les estuviera pasando eso, que sus parejas estuvieran sufriendo tanto por culpa de algo que hicieron sus padres tan solo en defensa de Minseok, cuando según los pocos testigos y Minseok, fueron la pareja de cambiaformas los que atacaron primero.


Sehun, temblando, salió lentamente con Yixing detrás aunque este le dijo que no lo hiciera porque les dijeron que no salieran. Vio a su padre tumbado en el sofá, sudando, en un mal estado y a Minseok, su tío, en un estado parecido. Su instinto se lo decía, que Minseok también había perdido a Luhan, a quien  él solía llamar tía para burlarse de él.


-Papá… -Murmuró, Kyungsoo le miró.


-Te dije que no salieras. –Le habló, incorporándose –Vete a la habitación.


-Me aburro… -Dijo, puchereando –Y estoy preocupado por mamá… ¿Está bien mamá? ¿Lo sabes?


Kyungsoo miró con pena a su hijo, sin saber que decirle exactamente. Se sentó, lentamente, y abrió sus brazos a lo que Sehun supo que le pedía que viniera y le abrazara. Corrió, con lágrimas en los ojos, y saltó sobre su padre, escondiendo su rostro en el cuello de su padre.


-Tengo miedo –Dijo –Quiero a mamá de vuelta.


-Estamos en ello, tranquilo.


-Pero tengo que pedirle perdón –Relató. –Siempre le dijo que no es perfecto porque no es demonio  y otras cosas, pero no es verdad, es perfecto, mamá es perfecto. –Lloró, Kyungsoo le abrazó con más fuerza.


-Él lo sabe, cariño –Le consoló –Él sabe que lo dices de broma.


-¿De verdad?


-Claro, claro que sí.


Yixing, con un tierno puchero, fue a Minseok estirándole de la camiseta, mirándole con sus tiernos ojitos llorosos. El demonio le miró de reojo, sin humor para nada, pero sin querer pagar su estado con el pequeño, por lo que permitió que se le subiera encima y le abrazara, correspondiendo al abrazo con lentitud, cansado. Yixing no dijo nada, pero Minseok sabía que no hacía falta que lo dijera, porque el gesto valía más que mil palabras para él.


Mientras, los demás continuaron descartando cuevas para buscar el lugar donde residía Luhan y Jong In, mientras Jongdae seguía en la cama descansando a causa de las heridas y Tao permanecía a su lado, vigilándole por si empeoraba o algo.


-Entonces… Nos quedamos con tres cuevas –Dijo Chanyeol –Solo nos queda ver cuál de estas tres es.


-No podemos visitarlas todas –Protestó Junmyeon –Tenemos que descartar al menos una. Necesitamos algo más, algo que nos diga algo más para que podamos descartar más.


-No están en condiciones de usar la mente en busca de sus parejas –Le recordó Baekhyun –Podrían desmayarse si lo hacen ahora.


-Pero no sabemos cuánto tardaran en volver a torturarles y por lo tanto a atacarles a ellos –Dijo con brusquedad Yi fan –Es ahora o nunca, no podemos arriesgarnos más porque no sabemos cuánto tiempo los mantendrán vivos o qué clase de cosas les harán. Recuerda, Baekhyun, que por despecho o venganza podemos hacer cualquier cosa.


-¡Ya lo sé! ¡Yo he pasado por eso, joder! –Gritó, Chanyeol intentó calmarle pero Baekhyun no le hizo caso -¡Sé mejor que tú lo que ellos están pasando! ¡¿Has tenido que pasar por el sufrimiento de no saber si tu compañero estará vivo o cuánto durará en ese estado?! ¡Antes no había la medicina de ahora!


-¡No metas tus temas personales en esto!


-¡Meto lo que quiero!


-¡Ya basta! –Gritó Minseok desde el sofá, con Yixing temblando en sus brazos -¡Estáis asustando a los niños! ¡No sé quién parece más crío de los dos!


Ambos se callaron, sabiendo que se les había ido la discusión de las manos y que se estaban pasando, uno porque estaba mezclando temas personales y el otro porque no sabía entender ese dolor, aun si podía imaginárselo. Minseok dejó a Yixing en el suelo y mandó a Sehun y al otro pequeño a la habitación del hijo de Kyungsoo, volviéndose a encerrar. Se sentó de nuevo, cansado, y les miró.


-Lo intentaremos de nuevo –Confirmó Minseok –No puedo quedarme aquí quieto cuando sé que mi compañero está sufriendo. Yi fan tiene razón, pueden hacer cualquier cosa y temo que hagan algo más que golpes…


-Minseok, concéntrate al mismo tiempo que yo –Habló Kyungsoo -¿Podrás hacerlo? De esa manera, si nos unimos, podamos alcanzar más radio y ver que hay en los alrededores, incluso podríamos verles a ellos.


-Vamos.


Ambos cerraron sus ojos, con la sala en completo silencio porque era lo que necesitaban por ahora. La oscuridad les invadió a ambos pero eso no les impidió buscar al otro, a su hermano, para alcanzar ambas energías mentales y unirlas para alcanzar más territorio. Desde fuera, veían como sudaban como si estuviera haciendo un calor enorme, como sus respiraciones aun así eran relajadas, como si estuvieran durmiendo, y es que el nivel de concentración era máximo.


Lograron, después de un tiempo, encontrarse y avanzaron, en busca de ambos compañeros. Localizaron la misma cueva que Minseok había visto, con su enorme entrada, los árboles rodeándola y el riachuelo entrando en ella. Debían buscar más pistas. Los alrededores eran la clave para identificar cuál de las tres podría ser esa cueva.


Pudieron comprobar que no había civilización a su alrededor, por lo que debía de estar en una cueva que se encontrara en un bosque profundo o muy grande. Corea del sur no era un país grande, por lo que debía de estar en algún bosque pequeño pero lo suficientemente frondoso para ocultar una cueva así de la civilización.


Aun cuando comenzaban a estar mentalmente agotados, se adentraron dentro de la cueva, aun cuando no estaban preparados para lo que podrían ver, pero en esos instantes, la necesidad de saber cuál era el estado de sus compañeros era mucho más que una necesidad, era vital para ellos.


Lo necesitaban.


Y por unos segundos antes de romper la conexión a causa del agotamiento, los vieron. Heridos, maltratados, sangrando, sudados y aparentemente desmayados ambos; con cadenas atados a una pared de piedra con telarañas, a saber qué tipo de insectos podían haber ahí que les picaran, aun cuando no los matarían, pero les sería peor con las heridas que poseían.


Minseok y Kyungsoo, en el suelo, agotados y respirando con toda la fuerza necesaria miraron a los demás, los cuales corriendo traían agua y carne cruda para que se alimentaran.


-No… No hay… Ciudad cerca –Dijo Kyungsoo.


-Gracias, eso nos hace descartar dos, por lo que… -No terminó de hablar Baekhyun.


-Por lo que ya sabemos dónde están y nos vamos ahora –Dijo Minseok levantándose, aun cuando se tambaleaba, y se transformó de golpe, con la mirada hecha fuego –Porque no voy a esperar más tiempo.


-Yo tampoco. –Dijo Kyungsoo, transformado.


Lo que aguantaban por su pareja, nadie podría igualarlo nunca.


.


.


.


Luhan despertó, sin saber cuándo fue que se había dormido. Miró a su alrededor, descubriéndose en la misma cueva oscura de antes, con Jong in al lado aun inconsciente, cosa que comenzó a preocuparle demasiado porque no sabía cuándo tiempo él estuvo durmiendo, pero que Jong In siguiera sin despertar podría ser algo grave, nada bueno seguro. Pero él no podía hacer nada por ayudarle, aun cuando quería ir allí, estar a su lado, revisar sus heridas y aplicar lo poco que sabía de primeros auxilios para mantenerlo bien.


Respiró con fuerza, sintiendo su estómago vacío y su boca seca. ¿Cuánto tiempo llevaba ahí? Quizás un día, o menos, o más, pero si sabía que un cuerpo humano sin agua no duraría más de tres días.


Esperaba que les rescataran para entonces.


Movió sus manos, haciendo sonar las cadenas por toda la cueva, a ver si con el ruido Jong In despertaba, quizás durmiente, pero no parecía moverse. Tenía miedo de que estuviera muerto, pero no quería pensar demasiado en ello porque solo la idea le causaba ganas de echarse a llorar. Llorar por el pequeño Sehun, y por Kyungsoo.


-Mierda… -Murmuró, ante el dolor en su torso y hombro –Espero que lo devoren y lo torturen vivo…


Y que sinceras eran esas palabras, porque el odio que le tenía Luhan a ese cambiaformas no se lo había tenido nunca a nadie. Quizás fuera por lo que les estaba haciendo, quizás porque era el culpable de sus heridas o quizás por la tortura psicológica que tenía que ser para Minseok y Kyungsoo.


-Espero estar presente para ver como se lo comen vivo –Deseó en voz alta, como si de esa manera los deseos fueran más fáciles de cumplir, aunque quizás fuera más como liberación mental porque tanto silencio, siendo el único sonido que escuchaban sus oídos era el del riachuelo que al parecer había cerca.


Respiró con más fuerza, como si de esa manera pudiera calmar sus nervios a flor de piel. Miró de nuevo a Jong In, rezando a todos los dioses en los cuales no creía para que estuviera bien.


-Jong In –Le llamó –Jong In.


Pero nada, no se movía.


-¡Jong In! –Gritó -¡Jong In!


Decidió dejarlo, por lo que lo único que estaba consiguiendo era tener más miedo. Los pasos de una persona se escucharon de nuevo y Luhan asumió inmediatamente que era ese maldito cambiaformas. Se apareció, entonces, un enorme gato de más de dos metros, el mismo gato que vio antes de ser secuestrado. Así que de verdad esa era su verdadera forma.


El gato se volvió lentamente un humano completamente desnudo y por inercia, miró a otro lado, incómodo, recordando lo que dijo antes de que él cayera en un profundo sueño.


No sería capaz… ¿Cierto?


-Vaya, estás despierto. –Luhan le miró de reojo. Que supiera que había estado durmiendo, significaba que había estado de nuevo por ahí anteriormente.


¿Qué hizo en ese tiempo?


-Ya era hora ¿Sabes? Me tuve que entretener con Jong In de nuevo –Sonrió, importándole bien poco su desnudez. –Le torturé mentalmente, necesito que siga vivo, no puedo tocarle por el momento, ahora lo tengo en un sueño profundo, no despertará hasta unas cuantas horas.


-Como…


-Oh, bueno, la suerte de tener un hechicero como amigo. –Sonrió perversamente -¿Sabes? Creo que… Estoy aburrido.


-¿Y? Cómprate un juguete.


El cambiaformas sonrió de lado, acercándose poco a poco a Luhan, el cual se tensó. Su corazón comenzó a latir nervioso por el miedo que le estaba entrando, y es que era inevitable sentir ese terror recorrerle el cuerpo, las venas, la sangre hasta distribuirse por todo su cuerpo. Como si lo oliera, y era posible según sabía Luhan, siguió acercándose, divertido.


-¿Tiene miedo el asqueroso humano?


-¿Miedo? –Rió falsamente –Esa palabra no está en mi diccionario.


-¿Seguro que sí?


Al estar apenas un metro de distancia, paró. Luhan intentó no respirar aliviado y miró a otro lado, nervioso, deseando que Minseok llegara de una maldita vez porque tenía un mal presentimiento de aquello.


-Me serás un bien juguete…


-No lo hagas... –Murmuró Luhan, mirándole ahora con súplica. A la mierda el orgullo. –No… ¡No hagas nada!


El cambiaformas rió.


-¿Por qué debería de hacerte caso? A ti, el compañero del hijo cuyo padre asesinó a mi compañero…Bueno, ya están muertos, después de todo.


Luhan le miró con sorpresa. No podía ser, no podía ser que tuviera delante al asesino de los padres de Minseok. Él, quien mató a los padres de los tres hermanos; él, quien convirtió la infancia y adolescencia de Minseok en todo un infierno.


Él, quien era el responsable de todo.


-Te estuve buscando ¿Sabes? Contraté a tres cazadores estúpidos con grandes sumas de dinero, pero tu compañero y otro se los comieron… ¿Sabes la rabia que me recorrió por dentro? Pero cuando iba a ir a por ti… ¡Oh! Os mudasteis de casa… Me lo habéis puesto difícil, pero aquí estás, pequeño…Perfecto para que yo pueda cumplir de una vez por toda mi venganza.


-¡Ya mataste a los padres de Minseok! ¡¿Qué más necesitas cuando ellos no tuvieron la culpa?!


-¿Qué más necesito? Solamente, terminar de destrozar la familia de esos malnacidos… -Dijo con odio -¡Por qué ese día no solo perdí a mi compañero, sino a mi hijo! ¡El hijo que tenía dentro ella!


-No…


-Ellos destrozaron mi vida, yo destrozaré su descendencia.


Luhan se quedó en silencio. Podía entender su odio porque los padres de Minseok le destrozaron la vida, pero eso no justificaba nada. Quizás pensara así porque su moral le decía que cualquier asesino era malvado, quizás porque era el compañero de Minseok. Pero podía entender, o más bien intentar entender, que estaba dolido por todo.


Quizás… Quizás nunca pasó página.


De repente sintió unas manos que le quitaron de golpe la camiseta y Luhan se asustó. Comenzó a gritar, pero estaba atado y poco podía hacer. Comenzó a gritar el nombre de Minseok, de Jong In que seguía durmiendo por culpa de un hechizo y gritaba clemencia al cambiaformas, que como si aquello le excitara, parecía disfrutar.


Luhan comenzó a llorar, asustado, cuando vio que le estaba quitando los pantalones pero antes de que eso pasara, un rugido de enormes dimensiones se escuchó.


Fue apenas unos segundos, cuando dos demonios de enormes dimensiones, con los ojos completamente en rojo, se adentraron y fueron directos al cambiaformas, que se apartó y se transformó en un enorme gato.


Luhan vio como Minseok y Kyungsoo, los dos demonios, comenzaban a pelear contra el cambiaformas gato.


-Han perdido el control –Dijo alguien a su lado. Luhan observó a Junmyeon –Minseok presintió lo que estaba a punto de pasar y aumentó la velocidad, Kyungsoo perdió su control cuando sintió que no podía acceder a Jong In aun cuando nos estábamos acercando.


-Le han dormido –Dijo débilmente, abrazado al antiguo profesor, compañero de Jongdae. –Tenía miedo…


Miró de reojo como Jong in era cogido por Yi fan, el cual salió corriendo de allí con él compañero de Kyungsoo en brazos. Junmyeon miró a Baekhyun y este asintió, como si tuvieran un plan en mente.


-Que…


-Baekhyun te llevará a la salida –Dijo serio.


-Pero tú…


-Ese de ahí, hirió a Jongdae –Explicó –A ese de ahí, al menos, tengo que darle una paliza.


Luhan sonrió y se dejó coger por los extrañamente fuertes brazos de Baekhyun. Quien diría que en un cuerpo tan pequeño había tanta fuerza. Baekhyun salió de allí, reuniéndose con Yi fan, y lo dejó en el suelo.


-¿Cómo se encuentra Jong In? –Preguntó, a su lado.


-Está vivo, es lo que cuenta –Dijo Yi fan –Pero necesita cuidados ya o no será por mucho tiempo.


-¿No podemos llevarlo a casa ahora?


-No –Dijo Baekhyun –Tal como está Kyungsoo, hasta que no maté a ese idiota y tenga en brazos a Jong In, no se calmará. Lo mejor es desear que terminen pronto.


Al quedarse en silencio, el sonido de los rugidos, aullidos y los golpes se escuchaba como sinfonía. Luhan miró dentro de la cueva, pero una mano tapó su visión.


-No lo hagas –Dijo Baekhyun –Sé cómo es uno de nosotros cuando estamos de esta manera. Yo estuve igual. No será agradable de ver.


-Pero…


-Podrías no ver igual a Minseok, lo que estoy viendo ahora mismo de él, es algo que tú no quieres ver nunca. Lo que le está haciendo ahora al ya muerto cambiaformas…


-¿Qué está…?


-Digamos que, una versión para menores de diez años, entre los tres no están dejando nada que se pueda ver de su cuerpo…


Luhan sintió ganas de vomitar, y comprendió que mejor era no ver como estaban devorándole, aun cuando deseó poder verlo. Una visión así no sería agradable, supuso, y agradeció a Baekhyun mentalmente por haberle tapado los ojos.


-¿Jongdae…?


-Con Tao, Chanyeol y los dos pequeños.


De repente, la mano desapareció y unos fuertes brazos lo rodearon. Luhan cerró  los ojos, sintiéndose en casa en brazos de Minseok, el cual transformado y manchado de sangre, besó su cabeza, importándole poco si manchaba a Luhan. Al lado, Kyungsoo abrazó a Jong In, calmándose.


Estaban a salvo, todo había terminado, y ahora podrían vivir sin amenazas.


-Minseok… -Murmuró –Tú has…


-Shh… -Susurró Minseok –No debes saber nada de lo que sucedió ahí, Lu Ge… Pero te puedo decir una cosa, él no volverá a hacerte daño nunca más.


-Están lleno de sangre.


-Sí. –Susurró, sangre que no era suya, sangre de ese cambiaformas gato que intentó violar a Luhan, y es que entre Junmyeon, Kyungsoo y Minseok, sobretodo los dos demonios, le habían matado dolorosamente, y por si eso no fuera poco, lo devoraron entero, sin piedad, no dejando ni los huesos.  –Pero no es mía, tranquilo.


Miró de reojo a Kyungsoo, el cual había cogido entre sus brazos a un inconsciente Jong in y comenzaba a caminar para poder atender  a su predestinado, y es que esas heridas debían de ser curadas cuanto antes. Comenzó, Minseok, a tararear ese sonido característico que solía dormir a Luhan, y este supo lo que Minseok quería.


Y se durmió, cayendo en sus brazos.


-Ahora podemos irnos –Habló Minseok –No despertará hasta mañana, y para cuando lo haga, sus heridas estarán mejor.


 

Notas finales:

Espero que os haya  gustado!!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).