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Un amor prohibido. por Misil_iraqui 169

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Notas del capitulo:

Bueeenas lectores yaoi, ¿como estan hoy?, antes de comenzar les agradezco muchiiisimo los comentarios que me han dejado y me alegra que les haya gustado el primer capitulo. Estaba tan emocionada con subirlo que olvide aclarar que la historia esta basada en la pelicula Como entrar a tu Dragon, la verdad siempre quise escribir un Fic dedicado a esa tematica porque pense ''¡wow, los personajes de la pelicula son excelentes y realmente coinciden con la personalidad de los personajes de DBZ!''

Ahora, por favor disfruten el segundo capitulo y nos veremos el Viernes con un nuevo capitulo.

Capitulo 2

 

Bardock estaba alli, afilando su espada en la oscura de su casa, donde la unica luz presente en la misma era el fuego que emitia la chimenea, quemando los troncos de los arboles para asi emitir calor. Kakaroto abrio la puerta siguilosamente, asomando su cabeza con timidez detrás de la misma, viendo a su padre muy consentrado en su labor como para percatarse de su presencia, asi que entro a la casa cerrando la puerta detrás de si y sin hacer el mas minimo ruido camino a las escaleras, subiendo por estas.

 

-Kakaroto. -llamo su padre sin voltear a verlo, ya sabia que estaba ahi.

-¡Padre! -se asusto de repente, deteniendose en la mitad de las escaleras. Miro a su padre que se estaba levantando de su silla y comenzaba a caminar hacia él, levantando la vista debido a que el Son menor aun estaba en las escaleras. Kakaroto habia estado tan cerca de un Ozaru lo suficiente como para sentir su respiracion en su rostro y su penetrante mirada negra mirandolo con ojos de odio, ojos que solo destellaban una ira absoluta y que si hubiera querido, el Saiyajin tranquilamente lo mataria, ¿pero porque no lo hizo?, si antes el Son estaba seguro de que queria matar por lo menos a un Saiyajin, luego de ese encuentro con el Ozaru ¿que pasaria?. Tomo aire profundamente, dandose animos mentalmente. -Tengo...tengo que hablar contigo. -dijo finalmente mientras bajaba las escaleras.

-Yo...tambien tengo que hablar contigo, hijo. -decia suspirando mientras se frotaba la frente con algo de molestia. Suspirando tambien para lo que estaba a punto de decir.

-Decidi que no quiero combatir con Saiyajines/ Creo que es hora de que combatas con Saiyajines. -dijeron ambos al mismo tiempo. -¿Que?/ ¿Que?

-Tu primero, hijo. -le cedio la palabra Bardock.

-No, tu primero padre. -insistio el menor.

-Esta bien. -suspiro- Tu ganas, Kakaroto, vas a entrenar. Empiezas mañana en la mañana, junto a Raditz.

-Ui, tuve que haber hablado yo primero. -dijo Kakaroto nervioso mientras se sobada la nuca con su mano, mirando hacia el suelo avergonzado. -¿Pero sabes? Yo creo que ya....que ya hay bastantes Guerreros que pelean con Saiyajines, pero...¿tenemos suficientes Guerreros que sean....emm...panaderos? o ¿Guerreros que reparen armas? -sugirio Kakaroto al respecto, viendo como su padre le daba la espalda y se disponia  abuscar algo entre sus cosas.

-Vas a necesitar esto. -dijo Bardock, ignorando todo lo anterior dicho por su hijo, arrojandole un hacha. Kakaroto tuvo que atrapar el arma con ambas manos debido al peso de esta.

-Pero padre, no quiero pelear contra Saiyajines. -explico insistente, enojandose y frunciendo el ceño al ver como Bardock esbozaba una sonrisa ironica y se reia a carcajadas en su cara.

-Pero por favor, Kakaroto, claro que quieres. -dijo caminando hacia su silla en donde anteriormente estaba sentado.

-Padre, traduccion, ''No puedo matar a un Saiyajin'' -dijo caminando detrás de él, ya harto por la ignorancia que su padre le estaba estableciendo. -Estoy ultra seguro de que no quiero.

-Ya es hora, Kakaroto. -dijo caminando de nuevo, acercandose a él.

-¡¿Quieres escucharme aunque sea una vez?! -grito colerico.

-¡Kakaroto, esto es muy serio! -elevo su voz, Kakaroto pego un salto ante tal grito, encogiendose sobre sus hombros. -Porque cuando llevas esa hacha en tus manos, nos llevas a todos nosotros contigo. Es hora de que te comviertas en un verdadero Guerrero, ya se acabo...''esto'' -dijo señalandolo completo. -¿Me oiste bien?

-Se, se, ya oi. -dijo molesto pero con un tono de voz quebradizo, sin animos, mirando al suelo decaido.

-Bien. -dijo finalmente tomando su espalda recien afilada y su escudo. -Entrenen duro. Volveré....tal vez. -volvio a decir mientras abria la puerta principal.

-Y yo estare aqui, esperandote...''tal vez''. -la puerta se cerro por completo, dejando a un triste Kakaroto dentro de la casa.

 

A la mañana siguiente.

 

-¡Sean bienvenidos al entrenamiento! -decia Padbbukin euforico al mismo tiempo que abria la reja que mantenia cerrada y asegurada la jaula de entrenamiento. Consistiendo de una arena, protegida por cadenas gruesas para evitar que los Saiyajines escapasen y destruyeran el pueblo, incluyendo varias puertas de madera, donde alli estaban diferentes especies de Saiyajines aptos para el entrenamiento de los reclutas.

-Ya no hay marcha atrás. -susurro Raditz, siendo el primero en entrar a la arena, seguido de Turles y Broly que no paraban de hacer bromas al respecto, y de otros reclutas mas. Sorprendidos por lo pequeños que se veian al entrar a esa monstruosa jaula, mirando todo a su alrededor. Los jovenes ya estaban equipados con sus armas correspondientes, Raditz llevaba un hacha grande, Broly una lanza y Turles un martillo que posaba tranquilamente sobre su hombro derecho.

-Espero llevarme graves quemaduras a casa. -dijo Turles sonriendo complacido.

-Yo espero mordidas en el hombro o en la espalda baja. -respondio Broly haciendo movimientos circulares con sus hombros, haciendo sonar los huesos de este.

-Si, todo es mas divertido si te llevas cicatrices. -dijo Raditz sonriendo, deteniendose en el medio de la arena de entrenamiento, donde Turles y Broly siguieron su accionar.

-Si, es verdad. -dijo Kakaroto en tono de ironia, apenas entrando a la jaula, los tres jovenes al escucharlo voltearon a verlo fastidiados. -El dolor, es algo que me encanta. -dijo volteando los ojos en sarcasmo.

-Genial, ¿quien dejo entrar a este? -pregunto molesto Broly.

-¡Muy bien, es hora de empezar. El recluta que lo haga mejor, ganara el derecho y el honor de matar a su primer Saiyajin en frente de todo el pueblo! -dijo Padbbukin emocionado.

-Goku ya mato a un Ozaru, ¿eso no lo descalifica? -dijo Turles en tono de burla, ganandose las risas de todos, menos la de Raditz que simplemente le miro de reojo y siguio caminando al mismo tiempo que negaba con la cabeza.

-Descuida Kakaroto, eres muy pequeño y debil. -decia Padbbukin mientras le abrazaba por los hombros, insitandolo a caminar juntos hacia donde estaba el grupo. -No vas a ser un blanco facil, los Saiyajines te veran como un loco e iran tras los Guerreros mas jovenes. -finalizo. Luego de ver a todos los Guerreros en fila, el gordo comenzo a caminar en frente de ellos mientras iba explicando la dinamica del entrenamiento. -Detras de todas estas puertas, hay algunas de las especies de Saiyajines que aprenderan a combatir, ¿lo comprenden?

-¡Si!

-Primero esta, el Nadders...-dijo señalando la puerta en la que se encontraba dicho Saiyajines mencionado. -Segundo, el Dos Cabezas...-señalo otra puerta. -Tercero, la Pesadilla Temible, cuarto la Muerte Susurrante y...el Groncool. -dijo con una sonrisa maliciosa mientras tomaba la manija que mantenia cerrada la puerta en donde estaba encerrado el ultimo Saiyajin mencionado.

-O...oye espera un segundo, ¿no nos vas a enseñar primero? -dijo Turles, ya sabiendo lo que se iba a venir.

-Soy un vivo creyente del aprendizaje llendo directamente a la Practica. -dijo para luego bajar la manija, unos interruptores comenzaron a accionarse mientras una gran madera comenzaba a ser elevada mediante las cadenas. Una vez que la puerta ya no se vio bloqueada, un Saiyajin de especie Groncool salio disparado de alli a toda velocidad. -¡Hoy aprenderan a sobrevivir! -dijo mirando como los jovenes Guerreros corrian del Saiyajin que volaba sobre ellos, chocandose con las cadenas de la jaula a medida que iba tomando mas velocidad y mas altura. -¡Rapido, ¿que es lo primero que necesitan?!

-¡¿Un doctor?! -grito Kakaroto.

-¡¿Armaduras?!

-¡Un escudo! -grito Raditz.

-¡Exactamente, corran a tomar un escudo! -ante esto, los jovenes Guerreros corrieron a tomar un escudo cada uno, lo cual estaban esparcidos por toda la arena de entrenamiento. -¡El escudo es la pieza mas importante de todo su equipamiento! -Padbbukin se acerco hacia Kakaroto, lo cual este estaba luchando con su propio escudo para acomodarselo correctamente, tratando de tomarlo con ambas manos, era muy pesado. -¡Si tienen que elegir entre una espada y un escudo, tomen el escudo! -grito luego de ayudarle al Son a colocarse el escudo correctamente y empujarlo a la arena de nuevo.

-¡Quita la mano, Turles! -gritaba Broly, tirando del mismo escudo que ambos habian tomado al mismo tiempo.

-¡¿Que?! ¡hay muchos otros escudos idiota!

-¿¡Porque no tomas el que tiene una flor?! ¡las flores son de niñas! -Turles molesto logro arrebatarle el escudo a Broly, usandolo para golpearlo en la cabeza. -¡Que asco, ahora este tiene sangre! -el Saiyajin iba volando hacia ellos, dispuesto a lanzarles una bola de energia lo suficientemente poderosa como para hacerlos estallar, Turles logro quitarse del camino pero Broly aun estaba ahi aturdido por el golpe, tomando el primer escudo que se topo, protegiendose tras de el. El Saiyajin lanzo la bola de energia, impactando contra el escudo y haciendolo volar junto a Broly, impactando contra una pared.

-¡Broly, estas fuera! -grito Padbbukin. -¡Golpeen los escudos, hagan ruido con el! ¡el ruido servira para aturdir al Groncool y hacerlo que falle en sus tiros! -y efectivamente, todos comenzarona golpear sus escudos con sus armas, el Saiyajin comenzo a tambalearse en el aire, viendo solamente siluetas borrosas que se movian de lados a otros. -¡Todos los Saiyajines tienen un numero ilimitado de ataques, excepto el Groncool, ¿cuantos tiene?!

-¡¿cinco?! -grito Raditz.

-¡No, cuatro! -grito Turles.

-¡Si, cuatro para cada uno de ustedes! -Turles no tuvo tiempo a responder porque una bola de energia del Saiyajin dio directo a su escudo, haciendolo estallar. -¡Turles fuera! ¡Kakaroto, sal a pelear! -grito harto Padbbukin al ver al Son escondido detras de un trozo grande de madera.

-¡Raditz, luego de este entrenamiento te espero en el sotano de mis padres para hacer ejercicio! -grito sonriendo mientras corria del Saiyajin.

-¡Callate! -grito sonrojado.

- Cre...creo que solo quedamos tu y yo, hermano. -dijo tembloroso Kakaroto, escondiendose detras de su escudo.

-No, solamente quedas tu. -y de un movimiento rapido salio del blanco del Saiyajin que ya habia disparado su tercer bola de energia directo al escudo de Kakaroto, haciendo que este se le saliera de las manos y se alejara rodando de su alcanze. Kakaroto desesperado corrio detras de dicho escudo para tomarlo, sin percatarse que el Saiyajin lo estaba persiguiendo.

-¡Kakaroto! -grito Padbbukin. El mencionado volteo hacia atras, viendo que estaba por ser atacado por el Groncool, quedandose sin salida al estar atrapado entre la pared y el Saiyajin. Asustado, veia como el Saiyajin se preparaba para lanzar su proximo ataque extendiendo su palma frente a Kakaroto, viendo como esta se le comenzaba a alumbrar y el Son cerro sus ojos, esperando el impacto. Padbbukin llego a tiempo, tomando la mano del Saiyajin, haciendo que el tiro se viera desviado hacia una pared. -Y con ese son cuatro. Ya te divertiste, regresa a tu lugar, insecto. -dijo mandando a volar al Saiyajin, directo a su encierro nuevamente. -Recuerden, un Saiyajin siempre....siempre, ataca para matar. -dijo especialmente mirando molesto a Kakaroto, ayudandolo a levantarse.

 

Ya en un nuevo dia.


-Si un Saiyajin ataca para matar, ¿porque tu no me mataste? -susurro tomando las cuerdas que utilizo para inmovilizar al Ozaru y que anteriormente corto para liberarlo. Comenzo a caminar hasta llegar a un valle, repleto de montañas, rocas y un rio extenso, el atardecer hacia su trabajo y desde el lugar en donde Kakaroto estaba, la vista era asombrosa. Como si se hubiera olvidado la razon por la que estaba alli, se dispuso a sentarse para admirar dicho paisaje, pero ni siquiera llego a tocar el suelo con sus manos, porque ya enseguida cayo de espaldas al suelo cuando el Ozaru aparecio de repente a su lado, tratando de trepar la gran roca con sus manos pero fue inutil, el Saiyajin cayo de espaldas al suelo desde una gran altura, quedando mareado por el impacto pero no se rindio. No habia visto a Kakaroto, voló hasta otra roca en sentido contrario, pero desgraciadamente impacto contra ella, volviendo a caer al suelo.

Kakaroto vio esto, y sin perder un solo detalle saco su cuaderno junto con su lapiz, dibujando a la especie de Saiyajin. Cabello de color negro y en punta como flama de fuego, musculos de piernas y brazos pronunciados, abdomen marcado, short negros hasta las rodillas, guantes de color blanco y calzado del mismo color, y la detallada cola de mono que los caractetizaba. Realmente a Kakaroto le fascinaba dibujar semejante Ozaru, ¿como no iban a temerle? si su misma apariencia lo hacia intimidante y fuerte.

-¿Porque...no te fuiste volando? -se pregunto en susurros, lo comenzo a mirar mas detenidamente, no tenia la cola de mono, por que restandole importancia la borro de la hoja pasando su pulgar, dejando un ligero pero notable manchon negro.

El Ozaru, resignado, se acerca a la orilla del rio, sentandose en la misma, observando como los peces nadaban tranquilamente muy cerca de él mientras se lavaba el rostro. En un ataque de histeria, sumerge su mano velozmente al agua tratando de atrapar uno, pero estos escapan rapidamente. Kakaroto al observarlo totalmente enbobado, no presta atencion de que su lapiz se estaba escapando de sus manos, hasta que finalmente se resfalo y antes de que Kakaroto reaccionara e intentara tomarlo antes de que cayera al suelo, este ya lo hizo. El ruido del lapiz cayendo al suelo capto la atencion del Ozaru, diriguiendo su mirada hacia arriba y alli conectando miradas con la de Kakaroto. El Saiyajin se le queda mirando sin parpaderar, gruñendo para adentro suyo, alerta, respirando lenta y pausadamente, frunciendo el ceño ligeramente esperando a que Kakaroto hiciera algun movimiento estupido para atacar. Kakaroto no pudo hacer mas que morderse el labio inferior, ¿desde cuando una mirada como esa lo ponia tan nerviooso?

 

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-Aver, ¿en que se equivoco Broly? -pregunto Padbbukin. Todos estaban en el comedor, repasando las victorias y los errores mas tipicos que se han cometido en el primer entrenamiento de los jovenes Guerreros.

-Fue muy estupido pelear por un escudo ¬_¬, ese Saiyajin casi me mata.

 

Kakaroto justo hacia entrado al comedor, todos guardaron silencio al verlo, con molestia. El Son noto esto y sin prestarles atencion intento sentarse con el grupo, cerca de Turles, pero este se movio a un lado, impidiendo que Kakaroto se sentara, al mismo tiempo que sonreia burlon. Kakaroto molesto tomo su plato de comida y un vaso con agua, alejandose del grupo y sentandose en otra mesa, totalmente solo.

 

-¿Y en que se equivoco Kakaroto? -pregunto Padbbukin al percatarse de que ya nadie hablaba o hacia bromas.

-¿En que se presento? -dijo Turles.

-¿En que no se lo comieron ¬_¬? -dijo Broly.

-Quiere hacer todo a su maldita manera.

-Gracias, Broly y Turles. -dijo Padbbukin ironicamente, luego de golearlos en la cabeza a ambos. -Este, es el libro de Saiyajines, contiene todos los conocimientos sobre dichas especies que conocemos. -un trueno interrumpio a Padbbukin, dejando el libro sobre la mesa, frente a los jovenes. Ya estaba por llover y el gordo queria ser el primero en irse a casa a descansar. -No habra entrenamiento hoy. Estudien. -dijo despidiendose de los jovenes.

-¿Que? ¿hablas de leer? Pero si todavia seguimos vivos. -dijo Turles.

-Ustedes lean, yo ire a matar cosas. -dijo Broly levantandose de su asiento, caminando tranquilamente hacia la puerta, seguido de Turles que rapidamente lo alcanzo y se colgo en sus hombros, provocando que ambos casi se caigan. Kakaroto, viendo que su hermano quedo solo, se levanto tambien, acercandose a él.

-Hermano, ¿compartimos el libro?

-Ya lo lei. -contesto Raditz levantandose tambien, caminando tras sus compañeros.

-Oh, ¿en...entonces es mio? ¡Bien!, Gracias....-dijo desanimado, hasta su propio hermano se averguenza de él.

 

Espero a que el comedor de Guerreros estuviera 100% despejado para ponerse a leer ese libro. Iluminandose solo con una vela, abrio el libro en la primera pagina, empezando primero por el titulo del mismo.

 

-¿Trueno Tambor? Este Saiyajin produce un golpe de sonido capaz de matar a un hombre a corta distancia, en extremo peligroso, tirar a matar. -dio vuelta otra hoja.- El Caldero, rocia agua hirviendo a sus victimas, tirar a matar. -otra hoja. -¿Metamorfala?, apenas con 10 años de nacido y ya pueden levantar cosas el triple de su propio peso, tirar a matar. -Otra pagina. -Groncool...-otra.- Dos cabezas...-otra.- Escring. -otra.- Rome-huesos. -otra pagina. -¡Asfixia a sus victimas, las entierra, las quema, las voltea como calcetines, tirar a matar, en extremo peligroso, tirar a matar, TIRAR A MATAR! -pasando pagina por pagina, llego a al hoja donde esta el nombre de...-Ozaru. -susurro. Bajo dicho titulo no habia ni siguiera una representacion fotografica de dicho Saiyajin, solo palabras, muy pocas palabras. -Velocidad desconocida, fuerza desconocida, tamaño desconocido, el cruce maligno de la muerte y el relampago, tu unica salvacion esconderte y rezar a que no te encuentre...nunca enfrentar a este Saiyajin.

 

Continuara..


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