REDIMIR
Nunca se había sentido tan miserable como idiota en su vida como en esos momentos, había sido un tonto, claro que lo era pero cuando escucho a su señora hablar con la tía del doncel que lo ayudo en ese momento y que se la debía, ahora se daba cuenta de su error pero estaba enamorado, era un amor puro que tenía a su señora, pero todo ese amor que sentía así ella se esfumo cuando al fin la venda que tenía en sus ojos al fin se cayó, esa hermosa dama que tenía en un pedestal se había convertido en algo que no podía mencionar, se sintió tan patético, tan idiota por haber confiado en ella tan ciegamente, bueno a veces sabia que lo que hacia estaba mal, pero con tal de tener contenta a su amada, solo volteaba el rostro para no ver las perversiones que hacia su señora, pero se sintió fatal con el plan de ambas féminas, por primera vez en su vida no obedecería a su señora, no podía hacerle eso a ese doncel, ni muchos menos dejaría que su supuesto primo le pusiera las manos encima, esta vez no voltearía el rostro para no ser testigo del daño que ayudaba hacer, no, ya no lo haría pero ahora debía ser cuidadoso para no levantar sospechas de su revelación contra la mujer que alguna vez amo, sabia que también debía prepararse mentalmente como físicamente cuando les dijera la verdad al esposo de Tony. Era de seguro que Steve como sus protectores le darían la paliza de su vida pero él, lo iba a recibir porque lo tenía bien merecido y no buscaría la piedad de todos ellos porque él se merecía que lo golpearan hasta el cansancio por haber sido cómplice de ese delito, por haber permitido conseguir la droga que utilizaron para dormir a Rogers.
Sus ojos observaban con cautela todo lo que hacían los miembros de esa familia como su señora, toda su ira se iban en la hija de Sara como el mayordomo Jarvis, la joven dama Peggy que luchaba con todas sus fuerzas para no ser utilizada en ese plan perverso que tenía contra su primo, pero desgraciadamente para ella que estaba agotada de tantos golpes recibidos, era de seguro que si seguían lastimándola de esa manera se iba a desmayar en cualquier instante pero la mujer se resistía pero sus intentos eran inútiles, porque a los otros no le importaran su estado de salud, para su desgracia el sirviente sabía que no podía ayudar al hombre de tercera edad, estaba más herido que la señorita, pero también había un alta posibilidad que los atrapara a los tres por ir más lento con Jarvis, se sentía culpable de dejar atrás a un hombre como el mayordomo porque no tuvo necesidad de conocerlo unos minutos para saber lo importante que era el doncel para el anciano, recibió los golpes, los azotes, como la falta de comida y agua.
Todo estaba planeado para escapar, con un disculpa muda observo al anciano, hubiera jurado que Jarvis sabia lo que iba hacer, ya que al ver a los ojos del anciano, esos ojos llenos de sabiduría como inteligencia le agradecían de una manera muda por salvar al menos uno de ellos dos, que él estaba orgullosa de la joven que aun golpeada, como lastimada no delato al joven amo Tony, Peggy era joven, hermosa como humilde no merecía morir en ese lugar, mucho menos por los golpes recibidos de sus propios familiares, la joven estaba agotada de la lucha anterior no ayudaba que su cuerpo hubiera recibido tremenda paliza de parte de sus familiares, pero lo que la tenia en ese estado deplorable era la culpa de saber que no había cumplido con su promesa de proteger a Anthony, estaba semi inconsciente, alejada del plan que se estaba formando a su alrededor, pero ella temía que su propio hermano le haría daño a Tony, su propia madre le despojaría de la herencia que legitima le pertenecía, sus ojos miraban la oscuridad del cuarto, por un momento deseo solo cerrar los ojos y no despertar en ese infierno.
Peggy se tensó al sentir la mano de un desconocido tocarle el hombro, por un momento quiso moverse para liberarse de ese agarre pero estando tan débil era algo imposible, lo único que le quedaba era morderlo con todas sus fuerzas cuando colocar una de sus manos en su rostro, si ese tipo debía soltarla por el dolor, era de seguro que se ganaría otro golpe, pero con tanta cosas que se podrían pasar en su mente, solo se conformó en esperar el castigo, pero la mano en su boca hizo que su última esperanza se disolviera como sal en el agua, cerro los ojos esperando el abuso que su cuerpo sería sometido porque era lo único lógico que podía pasarle ya que nadie vendría a salvarlos.
— Tranquila señorita, no vaya a gritar solo vengo a ayudarla —dijo con voz baja el sirviente sintiendo como el cuerpo contrario se destensaba un poco, aun en la oscuridad podía sentir la mirada llena de furia como frialdad de la joven, era mejor aclararle lo que realmente deseaba hacer antes que lo matara en el menor descuido, porque aun estando débil Peggy había mostrado una fiereza única en esa mujer —No, podemos quedarnos mucho tiempo, le juro que vengo ayudarla, no estoy con mi señora, ni con sus familiares —explico para cargarla, sintió como se quejó al ser levantada de esa manera pero Peggy iba a pedir que ayudara a Jarvis, pero el mayordomo solo negó, la señorita pudo verlo con la poca luz que le brindaba la luna, contuvo un sollozo si existía una oportunidad para escapar no podía desaprovecharla, vio por ultima vez al que considera un segundo padre sonreír levemente y ella solo pudo despedirse con voz baja, jurando que lo volvería a ver, que esto no podía ser el final, él debía estar con ellos dos cuidándolos como lo ha hecho desde que era una bebé y Tony apareció en su vida. Solo la luna fue testiga de su escape, el sirviente no esperaría ningún momento más, debía salir de esa ciudad a caballo y alejarse lo más que podían de sus captores.
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— Bruce, te informo que le daré otra oportunidad a Steve — dijo seguro Tony entrando en el despacho de su hermano, Banner dejo caer una pluma con la que estaba escribiendo para ver directamente a Stark, el doncel tenia un rostro serio, y estaba determinando a realizar lo que dijo. Tony estaba cansado de luchar con sus sentimientos, amaba a Rogers y aún cuando pensó que este estaba con esa mujer, algo en su interior se rebelaba de creerlo, pero sobre todo sabia que Steve no seria capaz de serle infiel, claro que no lo pensó en el momento que lo vio desnudo en la cama de esa mujer, con los días de llorar y sentirme miserable, pero al ver al hombre rogando su perdón, verlo tan arrepentido algo en su interior le gritaba que le diera una segunda oportunidad, también estaba los recuerdos de su padres, era de seguro que su madre lucharía por su matrimonio y más cuando él lo seguía amando con locura, como a los pequeños que los consideraba como sus propios hijos pero ante todos sus hijos merecían crecer con su otro hermanito, como Rogers saber que sería padre nuevamente, algo le decía al doncel que estaba encita y quería a su familia unida para recibir al nuevo miembro de la familia.
— Sabes cual es mi respuesta Anthony y es un no —respondió serio Banner, viendo a Clint que solo negó con la cabeza, era de seguro que el doncel castaño no lo haría caso, que ya tomada la decisión no había nada ni nadie que le hiciera cambiar de opinión, aun cuando lo encerrar en su habitación Stark haría de las suyas era mejor darle el permiso para poder controlar a Rogers si esta vez salió con vida de esa situación otra próxima seria un cadáver —De que me sirve negártelo, cuando tú estas seguro de esto pero si él llega a lastimarte otra vez, esta vez lo mato — contesto para ver como el doncel corría en dirección donde estaba Rogers que al sentir nuevamente la calidez de su esposo solo lo abrazo llorando pidiéndole perdón, Steve sabia que los amigos casi familia de Tony, no confiarían en él pero Rogers estaba decidido a obtener su perdón como mostrar a su esposo que no se había equivocado en darle esa nueva oportunidad, con sus manos acariciaron el rostro de Anthony para besarlo con delicadeza, hasta que se separaron para tomarse las manos, Steve ese tiempo que estuvo lejos de Tony lo supo, lo amaba aun más que a su difunto esposo que su difunto doncel lo perdonara pero Stark se había ganado su corazón de una manera especial, sus hijos al ver a sus dos padres juntos corrieron abrazarlos para que los tres entraran al hogar de Banner, Anthony estaba seguro que luego le contraria la nuevas noticias a su esposo e hijos.
Banner no muy seguro del cambio de Rogers le pidió unos días más en su hogar, Steve había dejado encargado de su rancho a su amigo Bucky, él también deseaba estar ese tiempo solo con su esposo, fue en una tarde en que las noticias de que un caballo entrara en el pueblo de una manera violenta como cansado el pobre animal, sino Tony pudo reconocer a Peggy que estaba siendo sostenida por el sirviente de Rosalie, sin pensarlo fue ayudarla junto a Thor, que lo llevo al médico para atender sus heridas.
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Steve Rogers se sentía un completo idiota, un ciego al no darse cuenta de como era verdaderamente su difunto exesposo, como dio burlarse de haberse casado con un idiota como él, cada carta escrita por la mano de su pareja le era como clavarse varias dagas, porque sus hijos, sus dulces hijos sufrieron en manos de la persona que creyó un santo. Lo peor el hijo que estaba esperando no era suyo, por eso falleció su pareja, para evitar que descubrieran sus infidelidades se produjo un aborto pero al parecer no le salió como le esperaba. Estaba hecho una furia, destruyo todo a su paso, Tony quiso acercarse pero tanto Clint como Loki se lo impidieron, Steve necesitaba eso y Stark estaba ocupado con los niños como atender las heridas de su prima.
VARIOS DIAS DESPUES
Peggy al fin conoció al hombre que había cautivado a su primo, luego de digerir la verdadera naturaleza de Rodrigo, Steve se acerco a su pareja, y daba gracias a cualquier santo que le permitió conocer a su actual esposo, era una joya única y él juraba protegerlo, cuando todos se enteraron de la verdad de los golpes como heridas de la señorita, nadie deseaba dejar solo a Tony, esas brujas estarían aprovechando el menor descuido del doncel para raptarlo. Banner como Clint se extrañaron de que Pepper como Natasha no se hayan dado cuenta de eso, pero descubrieron que Sara no era una tonta, había llevado acabo su plan en otro lugar, uno desconocido para los detectives que no haya a Jarvis y todos esperaban que no hubiera muerto, Tony se contenía de pensar en cualquier escenario trágico para el que consideraba un segundo padre.
Cuando escucharon gritos de los pueblerinos indicando que el bar se estaba incendiando, no fue extraño que todos los hombres como mujeres y donceles corrieran ayudar apagar el fuego. Todo fue demasiado rápido para Stark en un momento estaba ayudando acarrear agua y en un segundo estaba frente a frente con su primo el cual estaba apuntando con un arma a James y Rosalie tenia del brazo a Alexander
— Por favor no les hagas nada, déjenlos en paz, es a mí al que quieren —hablo asustado Tony al ver como su primo le quitaba el seguro del arma y apuntaba a la cabeza su hijo — Me iré con ustedes, juro que no pondré resistencia solo déjenlos en paz —
— Hola primito, veo que sigues siendo tan hermoso como siempre, pero este par de mocosos, son nuestros boletos para que hagas lo que queramos, así que camina hacia el carruaje —Exigió el hombre apretando el hombro del menor que solo sollozo de dolor como miedo, no quería irse, no quería que su papi estuviera en peligro, ni su hermano deseaba gritar pero el miedo le impedía hacer algo.
— Vaya tu plan de prender fuego a la cantina funciono Rosalie — hablo Sara caminado directamente donde estaba Anthony para darle una bofetada en el rostro — tiempo sin verte querido sobrino, lastima que tenga que llevarnos carga, pero si no cooperas jura que yo misma le doy un par de balazos a esos mocosos que tienes como hijos — ordeno para tomar del hombro a Tony para llevárselo con él, Sara estaba decidida a matar a su sobrino como ese par de mocosos…
CONTINUARA…