Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Chibi Zero por Rigel23

[Reviews - 57]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

XD Disfruten! 

La lluvia había parado al fin y el sol salía alegrando a la tierra con su calidez y comodidad. Zero con un gran sombrero sobre su cabeza para cubrirlo y cuidar su delicada piel de bebé miraba fijamente al escarabajo subiendo lentamente el árbol, sus pequeñas manos sostenían el mango de una red con la que se disponía atrapar al insecto.

Espero el momento indicado, como el buen cazador que era…

Espero y…

¡Ahora! Su mente grito y movía su red hacia el lugar, con la rapidez y precisión de la que su pequeño cuerpo era capaz.

El escarabajo había escapado.

Un pequeño puchero se formó en sus labios no lo había logrado…

¡Pero él no se rendiría! No señor, aun había otras oportunidades.

Había determinación en sus grandes ojos lilas.

Unos metros más atrás tres cabezas eran notables, dos rubias se escondían tras un árbol mientras disfrutaban de lo adorable que eral el pequeño peliplata y una con un sombrero de arbustos estaba tras…bueno unos arbustos también disfrutando del espectáculo.

Aidou y Takuma estaban realmente disfrutando lo lindo que Zero se miraba con su trajecito y su sombrero y ahí todo determinado en cazar escarabajos, era una fortuna que aún no se desmayaban pero el ser testigos de la lindura de Zero les daba la fuerza para seguir consientes.

Más allá con su perfecto escondite en su perfecto disfraz en los arbustos Rido Kuran opinaba lo mismo.

Y porque podía y quería, apareciendo de la nada Kain Akatsuki vampiro controlador del fuego se encontraba agachando para quedar frente a frente con Zero quien lo miraba con su silenciosa curiosidad.

—Zero, los insectos están muy altos, por eso no puedes alcanzarlos ciertos…—Kain usaba su mejor cara de “yo tengo nada malo planeado” él era un simple civil que pasaba por ahí.

Moviendo su cabecita de arriba hacia abajo Zero asintió afirmativamente.

—Entonces solo siéntate en mi hombro para poder atraparlos mejor…—y ahora Zero sentado en el gran hombro del controlador del fuego, con su pequeña mano aferrándose al cabello del vampiro podía atrapar mejor a los escarabajos.

“Maldito Akatsuki, ¡Tan astuto!”

Dos rubios vampiros miraban con ira y envidia mal simulada al vampiro más alto que se hacia el de los panes con pollo. Lo que más les molestaba era que ellos no habían pensado en eso primero.

Y ahora Kain estaba con Zero.

Su lindo Zero!

Con Zero sentado en su hombro el controlador del fuego estaba en la gloria, podía morir ahí en su alma no habría arrepentimiento alguno.

Todo era perfecto.

Rido salió de su escondite, decidió que él no era un acosador y no tenía que estar haciendo tales cosas degradantes.

Se quitó su casco de arbustos para camuflaje.

Observo al cielo—, acaba de llover por lo que los insectos deben estar escondidos…—así que no era extraño que Zero no haya encontrado nada.

Silencio.

Parpadeando un poco, ojos bicolores buscaron a los dos rubios que habían estado a unos pasos cerca de él, pero no había nadie.

—¿A dónde se fueron?

Lo habían dejado solo.

Un grillo pasó por ahí y decidió sacar su canción especial.

Mientras Kaname había llegado con Zero y Kain (que no iba a dejar solo a su adorable pequeño con esos lunáticos) ser acerco al más alto de todos sus vampiros quien tenía en brazos a Zero.

—¿Han atrapado algo? —todo su ser gritaba para alejar a Zero de esos brazos que no eran los suyos propios.

Kain miro a su líder, suspirando de decepción internamente. Su tiempo con Zero se había acabado.

—Kaname-sama…no las arreglamos para atrapar uno…—mostro a Zero que en una de sus pequeñas manos sostenía un escarabajo, el cual enseñaba con orgullo al vampiro castaño, Zero brillaba de felicidad, una sonrisa alegre, ojos brillantes y un tierno sonrojo. Sobra decir que el niño estaba sumamente feliz con su logro.

Kaname miro por un momento.

—Oh Zero, tal enorme insecto, déjame tomarle una foto para el recuerdo….—sacando su celular, comenzó a tomar una serie de disparos continuos, uno tras otro, para conmemorar el momento.

Foto, tras foto, tras foto.

Rido salió de la nada con leve tic en uno de sus ojos bicolores—. Tu solo estas tomando fotos de Zero ¿Verdad?.... —ni siquiera debió preguntar, era obvio. 

El vampiro adulto suspiro, no debía sorprenderle, lo pervertido venia de familia.

Su ancestro Kaname era el culpable.

—Si conseguían algo dulce y lo ponen al árbol los insectos saldrá, la miel serviría…—si estaba más cerca, conseguiría una mejor visión del lindo Zero, así que mejor se acercaba.

—Pareces saber mucho del tema Rido…—había una…sonrisa demasiado amable en el rostro de Kaname.

Zero por su parte jugaba con su escarabajo hasta que este se fue volando lejos, mientras el peliplata lo despedía con su mano.

—Mi plan era el que Kain golpeara el árbol con fuerza, así los insectos saldrían…—habría mucho más fácil.

Con una póker face, Rido hablo—Detente, así solo destruirías al árbol…

—¿Bueno no importa, Kain trajiste algo de miel? —enfocando su atención en el más alto vampiro el Kaname decidio restarle importancia a lo que RIdo había dicho ¿Qué si se caía un árbol? Había muchos.

Una pequeña mariposa comenzó a revolotear enfrente del rostro de Zero, llamando su atención.

Kain sin darse cuenta se puso a  pensar si tenían miel, habían traído algunas cosas pero…

—Creo que si…veré…—poniendo a Zero en el suelo, que de inmediato comenzó a correr, con sus manos extendidas para atrapar a la mariposa, Kain comenzó a buscar entre la mochila por un poco de miel.

Kaname comenzó a tomar fotos de Zero tras una mariposa

Y Rido se limpiaba la baba que salía por su boca ante tan deliciosa visión.

Pervertidos esos dos.

Milagrosamente Kain había encontrado del dulce néctar, que curiosamente era todo un frasco el que habían traído.

—Solo es de ponerla en el árbol entonces.

Kain asintió, pero no podía abrir el frasco.

Kaname viendo eso, tomo el frasco por sí mismo y lo abrió, naturalmente él podía hacer de todo.

—Bueno, esto deberá servir…—la “amable” sonrisa de Kaname se volvió salvaje y llena de malos pensamientos.

Se escuchó un bote de vidrio quebrándose, que fue seguido de un mortal silencio.

Luego se podía apreciar a Rido, cubierto de pegajoso líquido y con algunos fragmentos de vidrio incrustado en su piel, aunque nada de sangre. Cualquier otro se había desmayado con un frasco de vidrio rompiéndose en su cabeza, pero él era Rido Kura, su cráneo era grueso.

Pero estaba lleno de miel, por culpa de Kaname.

—¡Maldito Kaname! ¡Porque rayos lo tiraste en mí!....—sabía que debió haber matado a su sobrino cuando tenía la oportunidad.

—Oh lo siento Rido, te confundí con un árbol…—la mentira era tan obvia.

Y Kain en silencio, disfrutando de las payasadas de esos dos.

Con el ceño fruncido Rido trato de quitarse la miel de su cuerpo—, esto es tan pegajoso…

Mientras seguía tratando de quitarse toda la sustancia pegajosa un sonido zumbante llamo la atención del bicolor, cuando levanto la vista, vio un enjambre de abejas acercándose cada vez más a su dirección.

Esperen…

¿¡A su dirección!?

—¡¡Waw!! ¡No vengan aquí!

“Zero es solo mío, sufre Rido”

No se necesita ni mencionar quien había  pensado eso…

Y mientras tanto en otra parte del bosque, Takuma miro hacia la dirección donde un extraño sonido provenía—¿Qué es lo que está haciendo Rido-sama?...—el purasangre solo acaba de pasar corriendo como alma que lleva el diablo, con un enjambre de abejas siguiéndolo.

Que raros eran los purasangre.

—Takuma! Mira! Creo que Zero estará feliz con esto!!

Cuando el rubio noble volteo a ver, se encontró con la visión de su homologo rubio de ojos azules en un enorme disfraz de escarabajo donde solo su cara se podía presenciar ante semejante disfraz.

Takuma tuvo que parpadear para asegurarse que estaba viendo bien.

Un silencio expectante.

Takuma se dio la vuelta, fingiendo no haber visto nada, si no lo reconoce como real entonces no lo es…

—Aidou tu eres un verdadero idiota….—aléjate, aléjate del idiota, no vaya a ser que se te peque.

—¡No soy un idiota!...

—¿Qué clase de disfraz es ese y porque brilla tanto?

—El escarabajo dorado es el insecto legendario…Zero lo amara y me amara a mi…—para Aidou era el plan perfecto.

Solo de imaginar la carita de alegría de Zero al verlo.

—No soporto seguir viéndote, mejor me voy…—si eso huía antes de contagiarse.

—Espera Takuma!...—Aidou se había dado cuenta de algo.

El otro rubio se detuvo, dándose cuenta que había dejado a la vista la jaula que había estado escondiendo todo ese tiempo.

—¿Qué hay en la jaula Takuma?... —sospechoso, Aidou sospechaba del otro rubio.

—No seas tonto Aidou, por supuesto que son insectos que capture por el bien de Zero…—así el pequeño estaría feliz por Takuma, y le daría un beso de agradecimiento y un abrazo y…

La mente pervertida de Takuma se fue por pensamientos más oscuros.

—Eso es…—Aidou se empezaba a asustar por esa aura perversa que salía del otro rubio…quizás no debió preguntar.

—Cierto, ¿Dónde estar Zero? ¿Sigue con Kaname-sama?...—Astutamente el controlador del hielo cambio de tema, era más seguro así.

Pero no, regresando con el castaño favorito y líder, Zero no estaba con él, de hecho Kaname y Kain estaban buscando por todos lados al pequeño.

Se les había perdido.

¿Dónde estaba Zero?

Pues Zero miraba sus manos juntas con una gran sonrisa en algún lugar del bosque completamente solo, pero él no estaba preocupado, tenía otros asuntos que hacer.

Rido se había salvado de las bestiales abejas al sumergirse en un pequeño rio cerca, se le ocurrió luego de estar todo empapado y a salvo que podría haber usado su aura para alejarse de los pequeños animales pero no lo había pensado en el momento, y ahora estaba mojado…

Al menos se limpió la jalea de su cuerpo.

—Pero donde demonios estoy…—no se había perdido, solo…no recordaba done  estaba.

Nada más, de todos modos ni que estuviera solo, ahí sentado a su lado estaba Zero completamente tranquilo y con sus manos juntas, si…Rido no está perd…

Esperen…

—¡Zero! ¿Desde cuando estás ahí?...—y el pequeño solo se le quedaba mirando con esos grandes ojos suyos…

Tan lindo!

El pequeño Zero se puso sobre sus rodillas, frente a Rido, extendió sus manos juntas y antes de que el mayor preguntara las pequeñas manos se abrieron y revelaron una mariposa que voló una vez liberada.

Una mariposa con un ala roja y otra azul.

Ojos bicolores vieron a la mariposa volar hacia el cielo.

Un ala roja y otra azul.

Sin darse cuenta sonrió—, La trajiste para que la viera ¿Verdad Zero?

El pequeño asintió, mejillas sonrojadas, feliz de que su regalo había sido apreciado. La sonrisa de Rido se mantuvo, este niño de verdad que era…

—Gracias Zero…

Y sin dudar sus labios se posaron en la cálida frente del menor, que Zero le haya querido dar tan presente, era tan agradable.

Este pequeño humano era único definitivamente.

El beso aunque casto podría haberse mantenido un poco más de lo normal pero nadie estaba ahí para molestar a Rido…

—¿Qué le estás haciendo a mi adorado Zero Rido?

Oh el demonio llego, es decir Kaname Kuran que con grandes intenciones asesinas acuchillaba mentalmente a su “adorado tío” por atreverse a tocar de esa forma a Zero.

—¿¡Cuando demonios apareciste Kaname!?

—Veo que las abejas no fueron suficiente—

Y mientras Rido era castigado por haber cometido traición ante Kaname y el pecado más grande que era el de tocar a Zero, los demás nobles, que se encontraban a salvo escondidos en un árbol trataba de llamar la atención del pequeño Zero para que fuera hacia ellos.

—Rido-sama es muy asusto…

—Beso a Zero…

—Está condenado…

Y ante los murmullos de los nobles, los gritos de terror de Rido y las amenazas de Kaname, Zero en medio de todo eso, miro a estos chicos tontos.

Y una pequeña sonrisa se formó en sus labios.

Estos chicos tontos suyos.

Continuara…

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

Que puedo decir, Zero es adorable!!! 

Lo amo!!! 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).