Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Viraha por Fer_the_human

[Reviews - 41]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola de nuevo! Han pasado meses... ser adulto consume mas tiempo de lo que imaginaba.

Sin mucho que decir, vayamos directo al grano.

 

Disfruta tu lectura!

 

Capítulo 17

Adam

Durante toda la semana, Esteban y yo hemos estado al pendiente de nuestro circulo social.

Lo hemos estado pensando, y ambos parecemos algo emocionados con la idea de hacerles creer a Nicolas y Dennis que algo pasará para después reírnos en sus rostros. El semestre acabó ya, así que no témenos mucho tiempo que perder, pronto volverán a Europa.

Siendo sincero, la idea de hacerlo fue mía, porque después de pensar sobre la propuesta de Alex, pareció buena idea y una manera divertida de matar el tiempo. Pero no es solo eso la razón por la que quiero que este plan sea ejecutado.

Planeo una fiesta sorpresa para el cumpleaños de Esteban. George me ayuda bastante. Los amigos de Esteban están enterados y al tanto de la situación, pero no podemos hacer mucho con Esteban pasando tanto tiempo con ellos. Cosa que es posible que suceda con su ahora tiempo libre. Todos necesitan tiempo sin Esteban para hacer su parte, y Esteban tendrá la mente ocupada mientras le tendemos una trampa a los chicos extranjeros.

Cuando he comentado la situación con Robyn, me ha dicho que es una total bobería totalmente innecesaria, aunque no la veo tan desanimada cuando hacemos chistes sobre las posibles expresiones que los chicos tendrán. Jason, por otro lado, me dice que me atreva a hacer lo que quiera, y espera me divierta en el proceso.

En cuanto a Brenda, a nadie le encanta la idea de volver a hablarle. Ni si quiera a mí.

Esteban está molesto con ella, y hemos pensado un montón antes de decidir darle una oportunidad de nuevo. Robyn no piensa que sea buena idea.

George piensa que es una terrible idea.

De cualquier forma, hemos salido todos juntos ya. Después de que la decisión de aceptarla de nuevo haya sido tomada, fui yo quien le dijo a Cara que podría invitarla si lo desea. Solo fue una vez, y no cruzamos miradas. Solo un cordial saludo al inicio y el resto del tiempo en que estuvimos juntos fue como si Esteban y yo no existiéramos, y ella no existiera para nosotros. Fue incómodo.

Entiendo que esta situación luzca extremosa. La verdad es que Brenda me trae malos recuerdos, pero muchos de mis problemas con Esteban han sido atribuidos a ella sin razón coherente. Ella no fue quien me hizo salir con Louis, ni quien lo hizo mantenerme en secreto o que yo mantuviera en secreto esta relación incluso a mis amigos. Muchas cosas pasaron, y ella solo fue el movimiento primario que desencadenó el caos.

Además, antes de mí, Esteban era amigo de Brenda. Fue una amistad de años, que se deshizo de la noche a la mañana. Jamás aceptaré ni justificaré las acciones de Brenda que fueron directamente un ataque contra mí, pero quizá diga la verdad y haya cambiado. La ocasión que inclusive compartimos una mesa, no lucia prepotente al ignorarnos, ni grosera, más bien pareciera como si le avergonzara estar ahí.

George justo ahora debe estar en casa de Esteban, aprovechando la presencia de su hermana para pedirle ayuda sobre la fiesta sorpresa. Yo por otro lado, estoy siendo la distracción.

Nos dirigimos a ver a Brenda. Vamos en su auto.

Fue extraño buscar un lugar para verla, no hemos ido a ningún restaurante ni a ningún lugar publico como un parque. Hemos querido citarla para hablar abiertamente, así que hemos elegido una cafetería.

-Aún no estoy seguro sobre esto bebé.

Esteban conduce algo despacio. Puedo notar que no tiene prisa por ver a Brenda.

Debo admitir que tampoco yo siento un gran frenesí por verla. Hablar con ella.

Pero recuerdo que antes de que las cosas terribles pasaran, estaba empezando a agradarme. Y Cara también le ha dado una segunda oportunidad. Si tengo recuerdos buenos de ella, ¿Esteban no los tendrá? Compartieron juntos toda la carrera, después de todo.

-Yo tampoco, Esteban. -Admito- Pero no podemos dejarla plantada.

-Puedo dar vuelta en la siguiente calle.

Su voz fue seria, pero solté una risa de todos modos. Mi risa fue el punto final de la conversación.

Llegamos al lugar. Esteban usaba una sudadera roja y unos jeans negros. Yo tenía puesto una chaqueta.

Noté a Brenda apenas llegamos. Caminamos algunos metros para llegar, porque Esteban insistió en traer el carro y tuvo que buscar donde estacionarlo.

Brenda usaba una falda a cuadros rojos y negros, con unas medias negras debajo. Y una sudadera color vino, con chaqueta roja a juego.

Mi estomago empieza a sentirse revuelto. Un sabor toxico es notable en mi boca. Empiezo a recordar la inseguridad que sentí incluso antes de dirigirle la palabra. Ella siempre quiso salir con Esteban. Y es tan bonita.

Llegamos a la mesa en donde se encuentra. Estaba sentada en una mesita de afuera, a pesar del frio. Cuando nos vio frente a ella, dejó los lentes de sol estilo aviador que estaba usando a pesar de que era un día nublado.

-Hola Brenda. -Saludo justo frente a ella. Esteban no parecía muy animado por comenzar la conversación.

 

***********************

Brenda

He estado esperando en la cafetería en que Esteban y Adam me citaron por 15 minutos. Decidí sentarme afuera, al aire libre, porque es la manera más rápida de salir en caso de que no llegaran. Sé que es tiempo razonable para un retraso, pero estaba empezando a creer que era una broma, o que me dejarían plantada.

Los veo acercarse, y seguro que siento algo. Quito mis lentes, como si de esa manera pudiera apreciarlos de una manera diferente.

Los he visto juntos ya, a lo lejos o en la salida que hemos tenido juntos, cuando Cara me dijo que saldríamos todos de nuevo. Pero aquí lucen diferentes, auténticos. Seguro siento algo, pero no son los celos que hubiera sentido hace meses. No es coraje, ni ira, ni si quiera tristeza.

Me siento apenada, y quiero correr. Pero eso no solucionaría nada. No los haría entender lo arrepentida que estoy por los problemas que he creado. No es que ellos sientan alguna clase de interés en saber lo que siento o lo que pienso, eso es seguro. Pero yo necesito que lo sepan.

Ambos llegan a donde estoy, y se encuentran de pie por un segundo total que parece eterno.

-Hola Brenda. -Adam me saluda, lo que me da una idea de quien es el que tiene la iniciativa de venir a hablar conmigo.

Lo cual me sorprende realmente.

-Hola. -Contesto.

Y simplemente respondo eso. No sé de qué otra forma podría continuar. “¿Cómo están?”.  Muy bien podrían contestar “llenos de rencor”, “Te odiamos y te queremos lejos”.

Doy un respiro fuerte, que soy consciente que hice justo después de que haya sido expresado. Quiero que me trague la tierra.

Esteban toma asiento, de manera incomoda e intenta no mirarme a los ojos. Cambio mi mirada a Adam, quien parece solo un poco mas relajado, e intenta darme una sonrisa.

Se la devuelvo, por cortesía, pero genuinamente espero que su sonrisa haya sido real.

- ¿Cuánto tiempo llevas aquí? Lamento demorar. No encontrábamos estacionamiento.

-No llevo tanto. Como diez minutos, no te preocupes. -Mentí.

-¿Has pedido algo ya?

-No…

Apenas y parezco iniciar conversación con Adam, Esteban le pide a un mesero que nos atienda. Puedo sentir su desesperación por irse. Puedo sentir el rechazo. El sentimiento me es conocido, y me trae un mal sabor de boca que creí olvidado.

Ser rechazada por Esteban es algo que siempre me dolió. Pareciera que me hice adicta al sentimiento.

Antes de que fuéramos amigos, él me hablaba con otros motivos. Llegamos a salir un par de veces, pero nunca se lo mencioné a nadie. Su rechazo nació cuando le demostré que también estaba interesada en él. Y por mucho tiempo tuve el constante e irrazonable por querer volver a como éramos antes. Éramos más que amigos. ¿Qué nos había pasado?

Sé que sueno encaprichada, pero no fue así. Él tenía un interés en mí. Por mucho tiempo incluso dudé de mí misma, y de mi reacción, pero estoy segura de que no estaba equivocada. Me hablaba con planes diferentes, planes que fueron destruidos en el lapso de un día.

Por eso, cuando sospeché que podía estar saliendo con alguien más, me sentí destrozada. Si bien me convirtió en su amiga, y me rechazaba día a día, no podía evitar pensar en las posibilidades de lo que pudo haber pasado si no le hubiera dicho que quería iniciar algo con él. Pensar que una chica que no lo conoce tan bien como yo tuviera más oportunidad me volvió histérica. Me dio rabia.

Ahora, darme cuenta de que en realidad prefirió estar con un hombre… Mis acciones no tienen excusa. Pero recuerdo mis sentimientos y lo que me llevó a ellas.

Nos traen las bebidas, no sé qué pidió Adam. Yo solo quise un Caffe latte y Esteban pidió un chocolate. Nadie come nada. Presiento que esto será rápido.

Me pregunto porque decidieron verme. Tengo mucho contacto con Thomas, y sé bien que Adam planea una fiesta sorpresa para Esteban. Dudo mucho que quisiera verme para eso.

Adam empieza la conversación, de nuevo. Es él quien guía la charla entera. Hago mi mejor esfuerzo para que esto parezca natural.

Una punzada golpea mi corazón tan pronto como un pensamiento intruso se introduce en mi mente. Claro que esto no es natural. No es normal. Cosas pasaron, hice cosas terribles.

Adam es el más afectado, quien debería estar molesto. Odiándome. Dios sabe que yo me guardaría rencor aun si alguien me hiciera lo que yo les hice. ¿Por qué es Esteban quien menos copera?

Comenzamos a hablar monótonamente, sobre banalidades como la escuela. Adam suelta risas forzadas que me veo obligada a responder. Sinceramente, no quiero arruinar mi oportunidad.

Esteban responde a los comentarios que Adam dirige hacía él. Él charla con Adam y de vez en cuando Adam dirige su atención a mí. Esto es tan incomodo… algo saldrá mal. Quiero correr.

Pero entonces, no cambiaría. Mi cambio a una persona mejor jamás estaría finalizado.

He estado trabajando en mi misma durante un tiempo. Cuando empecé a perder a la gente que quería por culpa me mis acciones, no logré entenderlo en un principio. Entendía a Adam, aunque me desagradara. Incluso a Esteban a pesar de mi ciega furia contra él. ¿Per los demás? Thomas empezó a distanciarse un poco. Cara lo hizo menos, pero podía notar en nuestras conversaciones que algo andaba mal.

Así que comencé a pasar mucho tiempo sola. Más de lo que quería. Y el resultado fue abrumador. Solo tenía mi propia compañía, y se sentía un completo fiasco. ¿Cómo podría querer la compañía de alguien tan insensato, inmaduro y nefasto? Mis actitudes eran las peores, y parecían venir de alguien cuya maduración emocional era la de un niño. Fui egoísta y patética. Así que tuve que cambiar.

Y he cambiado. Estoy en un camino para ser mejor persona. O eso quiero creer. Es un proceso continuo. He recuperado a Cara y Thomas. George parece no olvidar, mucho mejor que Esteban o Adam. Los demás han sido amables cuando nos hemos visto.

Es por eso que no puedo perder esta oportunidad. Necesito esto. Estar bien con Adam y Esteban. He cambiado, y mi propia compañía no me resulta aburrida y repulsiva. No soy más la persona que llegué a detestar, pero intento recuperar amigos. Y si Adam y Esteban no me quieren de esa forma, o de ninguna otra, al menos necesito que perdonen y olviden. Necesito estar bien con ellos. Si ellos son capaces, sabré que soy mejor persona.

Entre los comentarios vánales y corrientes que hemos estado compartiendo, encuentro una oportunidad, una pausa entre ellos para poder dirigir la conversación a otro rumbo. Aunque pareciera más como si Adam se hubiera quedado fuera de tema de conversación, así que voy directo a lo que quiero decir.

-Chicos… -Comienzo. Pensé que sería más fácil una vez que hubiera comenzado, pero mi garganta se hace pesada y las palabras son difíciles de sacar- No sé cómo comenzar… Estuve sorprendida de que quisieran verme… y feliz.

-Me siento igual, Brenda. -Contesta Adam- Los dos. ¿verdad, Esteban?

Esteban duda por un momento.

-Claro.

A pesar de que esa no fuera la respuesta que esperaba, decidí continuar. ¿Qué es lo peor que podía pasar? ¿Qué continuaran sin hablarme? Es donde me encuentro ahora. No tengo nada que perder.

-Déjenme continuar. No existe manera para hacer esto, y no espero mucho… Pero quiero decirles, que sinceramente… -No encuentro que decir, así que soy lo mas honesta posible- No encuentro palabras que demuestren lo realmente arrepentida que me encuentro, chicos. Por lo que he hecho. Por lo que les hice. Realmente lo siento.

Esteban abre los ojos en sorpresa. Mostrando por primera vez en mucho tiempo una reacción genuina hacia mí. Adam no tanto, lo que sí me sorprende.

-Adam, sobre todo contigo. Realmente lo siento. Casi arruino su relación y…

-Eso es verdad. -Me interrumpe Adam, con una voz fuerte y tranquila- Hiciste cosas malas. Me hiciste enfadar, ¿pero me recuerdas desquitándome contigo?

-No. Y realmente lo lamento…

Puedo sentir mi cara caliente. Puedo imaginarme roja, lo que me avergüenza y debe hacer mi rostro lucir aun peor. Adam niega con la cabeza, haciéndome callar. Tiene una sonrisa leve que transmite algo que no es agresividad… quiero decirle que es mejor persona que yo y que nunca debí desquitarme con ellos. Pero no me deja.

-Esta bien que lo lamentes, Brenda. Pero tus acciones no fueron todo lo que causó nuestra separación. -Me ve confundida. He manejado las ganas de llorar hasta ahora. Adam sigue explicando- Yo tenía problemas también. Esteban también. Tú… tus acciones. -Corrige- fueron lo que desató todo. Seguro, pasaron cosas, pero no fueron enteramente tu culpa.

Debe haber algo en mi rostro que hace que Adam quiera hacer contacto conmigo. Acerca su mano a mi lado de la mesa, lo que me provoca querer tocarla inmediatamente de alguna manera. Y lo hago.

Me acaricia. Y me transmite una paz que no sentía en mucho tiempo. Un sentimiento melancólicamente dulce entra en mí. No dudo ahora porque Esteban lo quiso como pareja.

-Está bien, Brenda. -Incluso suelta una sonrisa- Inclusive fue algo bueno que hicieras lo que hiciste, que fueras la gota que derramó el vaso. De cualquier otra manera, nos hubiéramos ahogado.

Escucha suspirar a Esteban y rodear a Adam con su brazo. Con una cara dura, puedo ver un ligero asentamiento de cabeza, y por un lado de sus labios una sonrisa casi invisible.

-En serio, Brenda. Está bien.

No puedo soportar mis instintos, y me pongo de pie y voy directamente a los brazos de Adam, que me responden con sorpresa al inicio y una inmediata aceptación al instante. Sé que es a él a quien más le debo.

Me acaricia por la espalda, y lo oigo decir.

-¿Sabes, Brenda? Antes de todo nos llevábamos bien. Fue una pena que nuestra amistad terminara antes de empezar.

-¡Lo sé! -Digo, con una voz triste y risa aguda- No debe acabar ahí.

Podría quedarme en los brazos de Adam eternamente, apreciando el momento. La satisfacción de sentir su perdón, porque, aunque no lo haya dicho textualmente, es lo que es. Podría quedarme probando el sentimiento por siempre, pero hasta yo sé que nuestro abrazo se prolongó lo necesario.

Adam se sienta, y abrazo a Esteban de una manera fría y rápida, pero es más de lo que esperaba de él.

Ya incorporada en mi asiento de nuevo, consciente de algunas miradas que desaparecen tan pronto como las noto y hago contacto con ellas, volvemos a charlar de cualquier otra cosa.

Adam tiene una habilidad especial para hacer desaparecer las situaciones incomodas que ya había olvidado. Tiene esa manera de hacerte cargar un humor fantástico, cambiando la atmosfera inmediatamente.

-Pero Brenda, -Suelta de repente- me atacaste dos veces. ¿Qué fue la segunda?

Me sentí abrumada por un momento hasta que vi su rostro burlón y un gesto gracioso en él.

-No lo sé… ¿por el drama? -Sentí un miedo creciente en el estomago apenas y lo dije, pero la risa que Adam respondió lo aprobó.

Dentro del lento pero consistente y creciente cambio entre nosotros, para bien, Adam confiesa.

-Estoy feliz de que hayamos llegado a hablar de esto.

-Yo también. -Le digo.

-Es mejor de lo que esperaba. Mejor de por lo que venía.

-¿A que te refieres? -Pregunto.

Adam nota mi pregunta, y noto el segundo de diferencia entre mi pregunta, su reacción, y la amanera en que sorbe de su café para no tener que responderme.

Esteban también lo nota y es consciente de la situación, y que de una manera u otra me tendrán que responder, así que es él quien responde.

-Queríamos hablar contigo porque necesitamos ayuda con algo. -Dice.

-¿En que podría ayudarles? -Pregunto, con sorpresa, pero secretamente, ansiosa.

Esteban quiere responder, pero Adam se apresura.

-No es necesario. -Dice- Es incluso tonto.

-Vamos Adam, -Responde Esteban- tú bien dijiste que merecían ser amigos. Dile. No está mal.

-Sí lo es. Y es raro.

-No es tan raro.

-¿Qué sucede? -Digo, antes de que olviden que estoy aquí.

Adam suelta un suspiro, y Esteban comienza a explicar lo que él no puede.

Parece ser que dos chicos han estado coqueteando con ellos.  Ambos de intercambio, y hace poco han descubierto que en realidad se conocen entre sí. Según los datos que me han dado, han interactuado como si no se conocieran y puede que incluso sepan que son pareja.

Parece que Adam y Esteban pensaron que yo podría ayudar a darles una lección. No los culpo, suena algo de lo que yo sería capaz, y me recuerda a la manera en que los ataqué.

Realmente no sé que pensar, y Adam se ha puesto bajo un plan en el que asegura que no tengo que hacerlo si no quiero, hasta se ve apenado. Y de alguna manera, siento que se lo debo.

Además, me están dejando ser mala. ¿Quizá una ultima vez? Los ayudare de todos modos, y estaría castigando a dos chicos que no han sido amables con ellos…

-Lo haré. -Digo.

-¿En serio? -Pregunta Adam.

-Será divertido. -Admito- Tómalo como mi manera de redención. Además, vamos, lo merecen.

-Exacto. -Dice Esteban,

Adam acepta, y dicho todo, continuamos hablando. Cuando empecé a planearlo, Adam dijo que lo planeáramos después, o en la noche, pues realmente le agradó que reconectáramos y no quería arruinarlo. Así que le hice caso.

Y aprecié cada momento en esa charla.

Pasamos un tiempo más ahí, hasta que terminamos de charlar. Entonces nos despedimos, incluyendo un abrazo largo de Adam y uno demasiado corto de Esteban. Nos decimos adiós con una sonrisa, y los noto alejarse; antes de decidir irme también, hago una llamada.

Thomas tarda solo un poco en contestar el teléfono.

-¿Cómo te fue?

-Estuvo bien. De maravilla, de hecho.

-¿Fuiste invitada a la fiesta de Esteban?

-No… -Digo- Pero es una fiesta sorpresa. Esteban estaba aquí.

-Cierto.

Thomas y yo hemos estado charlando por un tiempo ya. Y no me refiero a amigos. Creo que tiene un interés en mí. Y creo que me agrada. No es nada seguro, podría muy bien solo ser amable.

-¿Necesitas que vaya por ti?

Sonrío. Son esos detalles los que me hacen pensar que quiere algo conmigo. Y en ocasiones me encuentro pensando que yo quiero algo con él. Pero dejo que las cosas fluyan.

-No es necesario, me iré en taxi.

-¿Estas segura?

-Sí.

-Está bien… ¿hablamos más tarde?

Últimamente nos la pasamos hablando todo el tiempo.

-Por supuesto. -Digo. Y colgamos.

Pido un taxi enseguida y en lo que lo espero, pongo mi mente a trabajar. ¿Cómo haremos pagar a los extranjeros?

 

******************************

Adam

La charla con Brenda estuvo cargada de emoción que no esperaba. Esteban estuvo mas serio de lo que esperaba, incluso después de la declaración de Brenda. Yo sigo sorprendido.

Pero, por alguna razón, feliz.

Entramos al auto, pero lo detengo de arrancar.

-¿Sabes? Mi propio padre me llamó marica. -Esteban me ve con confusión atravesando su rostro. Continuo rápido- Y pude perdonarlo. ¿No crees que tú puedes perdonar a Brenda?

-Le dije que lo hice. -Dice. Serio, no molesto. Ni si quiera se toma el tiempo de estar enojado.

-Y lo hiciste con ese tono en tu voz, lo que significa que para ti no significo nada.

-Adam…

-No tienes que perdonarla. Esteban, está bien. -Digo- Pero lo que dije ahí fue real. No lo dije para quedar bien con ella.

-¿De qué hablas?

-Sobre nuestros problemas. Ella no los causo. Solo los sacó a la luz.

-Y nos causó dolor.

-Que hubiera sido peor si no lo hubiera hecho a tiempo.

Esteban lanza un suspiro.

-Adam, te juro que no lo hizo con buena intención. No actúes como si fuera así.

-Se ve arrepentida.

-No cambia los hechos. -Dice, con una mirada dura.

Lanzo un suspiro.

-Mira, no te pido que la perdones. Al menos inténtalo. ¿Sí?

Esteban no articula las palabras, pero a duras penas me da una afirmación con su cabeza.

-Además. -Continuo- Me siento mal

-¿Por qué?

-Lo que le pedimos. ¿Por qué me dejaste pedírselo? -Esteban saca una risa por fin- Soy peor que ella.

-Por eso necesitabas perdonarla. -Continúa riendo.

Me regocijo un momento con su risa. Me hace sentir que no todo va mal, como lo imaginé hace unos momentos.

-¿Sabes? Prometo que será mi ultimo comentario sobre este día. -Digo- Pero me alegra que esta conversación haya sucedido. Si arreglamos problemas ajenos a Brenda, gracias a Brenda.

Esteban toma mi mano con una sonrisa.

-Me haces tan feliz, en todo este tiempo… también me alegro de este día. -Dice- Y es bueno verlo de esa forma. Me siento feliz de que Brenda haya dejado de ser un punto de antes y después en nuestra relación.

Notas finales:

Espero les hay gustado! Estamos cada vez mas cerca de terminar...

No duden en dejar un review, pues su opinion e simportante para mi.

Justo ahora debo continuar con mis notas para lo que sigue, asi que... hasta la proxima! :) 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).