Adam
Los exámenes han acabado, y gracias a eso tengo unos días libres. He decidido que puedo dejar las cosas en paz con Esteban un momento. No me alejo, simplemente no acelero nada, y sé que parezco un cuento repetido cada semana, pero esta vez no le doy señales. No lo invito a salir y él tampoco lo ha hecho.
Intento entender que existo sin estar con Esteban, porque parece que desde que entró a mi vida todo para mí gira alrededor de él. Debo saber que existo antes que él, para poder estar con él.
Un día he hablado con Robyn, se sintió bien. George no estaba ahí, así que tuvimos tiempo de charlar como antes. Sus hermanos estaban presentes, pero no fue incómodo. Como dije, fue exactamente como antes.
Robyn sigue teniendo problemas por su antiguo pretendiente, increíblemente hace que me moleste por eso. Ella lo toma algo a la ligera, y debe tener mucha tolerancia, yo no soportaría tener a ese chico insistiendo. Es como acoso. Cuando Robyn habla de él suele mantener una voz baja, evitando que sus hermanos la escuchen.
Robyn me recuerda que mi cumpleaños se acerca, y me pregunta si tengo planeado hacer algo. La respuesta es no, y tengo pereza de coordinar a todos para poder vernos para comer, tomando en cuenta que debería invitarla a ella y a Jason, y sus horarios son diferentes a los nuestros.
-Esa no es forma de pasar tu cumpleaños, Adam.
Ignoro a Robyn, e ignoro la imagen de mí pasando mi cumpleaños en casa, solo. Quizá salga con alguien, puede que sea con ella o con Anna. Pero no quiero planear algo. No recuerdo haber pasado un cumpleaños solo, pero recuerdo que la compañía no fue elección mía. Ed siempre solía organizar algo conmigo, pero como él podía organizar algo grande cada cuatro años por mera costumbre suya, era como una fiesta de cumpleaños anual que él no podía hacerse.
Como tengo días libres tengo que ver a papá en casa. No me complace, me siento extraño. Ya no nos compartimos miradas incomodas, mucho menos de ira, ahora simplemente nos evitamos. Y sí, es mutuo, ya ni voltea a verme, pero supongo que me lo gané. No que este muy interesado en enmendar las cosas, tampoco.
He charlado con Nicolas. Dice no tener muchas personas con quien hablar, y está aburrido ahora que tenemos días libres en la universidad. Me ha invitado a un club, dice que ha estado buscando sitios en internet y además con chicos en la universidad. Me comenta que sería bueno que lo acompañara, quiere una noche para salir a divertirse.
Tengo mucho tiempo de no salir, así que le digo que posiblemente salgamos. Supongo que George sigue yendo a Hell’s heaven con Esteban y los demás, pero ya no he sido invitado. ¿Qué más da, entonces? No es que vaya a hacer algo malo con Nicolas.
Nicolas tiene muchos temas de conversación, es todo un personaje. Ha decir verdad me resulta una persona muy interesante. No tiene miedo a temas poco conversados, aunque si me he debatido si usa temas poco hablados para hacerse el interesante, pero, a decir verdad, suena autentico.
Hablamos de sexo, por sus experiencias meramente. Hablamos de experiencias con drogas. O bueno, él habla, le he dicho que ni marihuana he probado. No me hace sentir mal mostrando sorpresa, simplemente me habla sobre sus experiencias. Es interesante hablar con él.
Entre semana he tenido oportunidad de verme con Jason, aunque nuestras charlas suelen ser comunes. De todas formas, pasar tiempo con él es agradable, aprecio esos momentos fuera de pensamientos y bastos en falta de significado.
Con Jason me pongo al día, él me cuenta de su trabajo y yo de la universidad. Es siempre así, le digo lo que ha pasado con Esteban y Anna, entre otras cosas. Él me cuenta anécdotas vagas sobre el trabajo, pero no demasiado. No es que yo comparta mucho tampoco.
En medio de nuestra conversación he tocado el tema de Nicolas. Levemente solamente, pero he mencionado que saldríamos a un club. No sé cuál sea el problema de Jason, pero no le parece.
-No salgas con él.
-¿Por qué no? -Río.
-Porque no. No me da una buena espina. No creo que quiera simplemente salir contigo en plan amistoso.
-¿Por qué no?
-Por lo que me has contado.
-No creo que este interesado en mí. Más bien carece de amigos. -Digo- E incluso si fuera como dices, yo no quiero nada con él.
-¿Estás seguro? -Pregunta.
-Claro. -Contesto, pensando que en realidad no estoy interesado en nadie- ¿Por qué?
-Oh, por nada. De todas formas, pienso que sería darle motivos para emocionarlo inadecuadamente, ¿no crees?
-No… -Contesto, burlándome- ¿Cuál es tu problema?
-Ninguno. -Jason toma un momento antes de continuar- Pero yo tengo más derecho.
-¿Qué? -Pregunto con una risa.
-Sí, soy tu amigo desde antes y nunca hemos salido juntos.
-Eso no es cierto.
-Bueno, hemos salido, pero nunca como amigos tan cercanos como sales con Robyn. Tú entiendes. -Me contengo a oírlo solamente- Tengo más derecho que cualquier francés que conoces de un mes o algo así.
-Oh, Jason… no seas dramático. -Digo, medio en broma y medio en serio.
-Está bien, sal con el francés… Que por cierto no es tan interesante como pretende ser -Comenta, y yo respondo simplemente con una risa- Hablo en serio, solo te agrada por sus conversaciones de sexo y droga. Yo te he contado de eso. Además, el tipo es amateur. Cualquiera ha probado la marihuana. Y cocaína no es tan difícil de conseguir.
-Jason…
-Bueno, tú no eres cualquiera, Adam. -Bromea- Además, apuesto que solamente te agrada por el acento.
-Puede ser. -Contesto, con una sonrisa de broma.
-¡Bah! Yo soy más interesante y agradable que un europeo sobrevalorado.
-¡Claro que lo eres! -Digo, dándole un golpe en el brazo.
Ambos reímos un poco, quitando cualquier rastro de una atmosfera seria que ligeramente pudo haber aparecido.
-Pero enserio, Adam, debería llevarte a un bar. ¿Qué tal el fin de semana?
-¿Y qué pasara con Nicolas, entonces? -Bromeo.
-¿Debo volver a hablar sobre mis derechos de antigüedad como amigo? -Eso me hizo soltar una risa.
-Bueno, supongo que tendré que cancelarle a Nicolas. -Digo.
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Esteban
La semana ha sido relajada, aunque con un montón de trabajo.
He invitado a los chicos a la fiesta sorpresa de Adam. Hasta el momento saben Thomas y Roy. Roy le dirá a Anna e incluso lo hemos mencionado con las chicas, también a Louis y Michael. Ignoro el recuerdo de que Louis salió con Adam. Esto de ignorar cosas que me incomodan se me está dando muy bien.
Cara sabe todo también, y hemos concordado en que lo mejor es no invitar a Brenda, fue divertido que todo lo mencionáramos. No sé si Cara le mencione que haremos una fiesta para Adam de todas formas.
Se supone que Robyn debe visitar a Adam un día de esta semana o la próxima para organizar algo en su casa, tiene que decirles a los padres de Adam si puede ser en su casa, si no, George está de acuerdo en utilizar su casa. A decir verdad, la casa de George es más grande, y sería más cómodo, aunque ciertamente no invitaremos a mucha gente.
También le he dicho a Jason. Solo lo llamé para invitarlo y terminé charlando con él, sobre cualquier estupidez, la verdad es que es él quien mantenía la conversación. Me ha preguntado sobre mi relación con Adam, lo que quiere decir que habla con Adam y sabe que no estamos enteramente en buenos términos. Simplemente le dije que es complicado. Jason es buen tipo de todos modos, o esa imagen se ha ganado en mí. Ya no me siento amenazado por él.
Jason estuvo de acuerdo en la fiesta sorpresa y se ofreció a ayudar, así que tomando en cuenta que Robyn puede estar ayudando mucho en decoración, organizar, y cosas por el estilo, Jason es una perfecta distracción.
He avanzado bastante en la pintura de Adam. Estoy orgulloso de mi trabajo y espero que a Adam le guste. Está casi terminada, tuve que ir a comprar pintura nueva y demás cosas. Me siento como un niño ocultando una pintura de mis padres, puede que papá recuerde a Adam después de todo. No es como que entren a mi cuarto de todos modos. El problema es Ralph, con su curiosidad por el mundo y su sinfín de preguntas.
Han venido de visita, mi hermana, cuñado, y mi sobrino. Es divertido, porque significa jugar todo el día con Ralph, y me distrae. El niño me mete en su mundo y de repente no importa mucho cualquier preocupación que llegue a tener, ese niño es mi salvación. Aunque me ha sorprendido.
Ralph me ha preguntado por el “Tío Adam”. Tuve que contestar vagamente, diciendo que no ha venido de visita. Hasta Ralph lo extraña. Qué suerte que no vio mi pintura.
Con la pintura casi terminada y los exámenes finalizados, me doy tiempo de relajarme un poco. He salido con los chicos, incluyendo a George, Thomas, y Roy. También estaba Lucas.
Hemos mencionado la fiesta de Adam, así que ahora también asistirán Lucas y Al. Al lo ha mencionado en prácticas de lucha.
Esto no está bien, considerando que es una fiesta para Adam. Roy debe saberlo, porque ignora a los chicos preguntando por la fiesta y Al cierra su boca al ver mi falta de respuesta.
En medio de la semana tengo una llamada de Jason. Contesto de manera natural.
-¿Hola?
-¿Qué hay, Jason?
-Oh, nada. ¿Cómo estás?
-Bien. -Contesto. ¿Para qué me habla?- ¿Qué tal tú?
-Bien. Oye, debo decirte algo.
-Dime.
-Hablé con Adam. ¿Conoces a un francés? Se llama Nicolas… -¡¿A dónde se dirige con eso?!- Lo invitó a salir, me las arreglé para que saliera conmigo en su lugar. ¿Está bien?
-¿Qué? Sí. Está bien… ¿Adam quería salir con él?
-Sí. -Contesta- Pero no parece que tenga interés en él, Esteban. No te preocupes.
-¿Y por qué prefieres que salga contigo?
-No te preocupes por mí, Esteban. -Dice, pero no encuentro amenaza en su voz- Confío en Adam. No en Nicolas. Me provoca una mala corazonada. Deberías cuidarte de él.
-¿Tú crees eso? -¿Por qué de repente acepto consejos de Jason?
-Viejo, no lo sé. Es la imagen que me provoca…
-Está bien. Gracias Jason.
La verdad es que puede que haya cortado la llamada con Jason antes de que él quisiera, pero ni siquiera lo noté. Jason acaba de confirmarme lo que George ya me había dicho. Al menos sé que no está en mi cabeza, ese chico quiere algo con Adam.
Me incomoda de manera poco racional, hasta el punto de sentirme enojado con la nada y con todo. Me repito que tanto George como Jason me han dicho que Adam no parece interesado en él para calmarme.
Al día siguiente, le cuento a George mi enojo. No parece prestarme mucha atención, simplemente me dice que debería relajarme un poco, pero lo noto distraído, le pregunto que está mal.
Y como él suele escucharme, ahora es mi turno de escucharlo. Dice que sospecha algo de Robyn. No sospecha una infidelidad ni nada por el estilo, pero en su lugar un secreto. Me cuenta de actitudes que Robyn ha tomado, y no piensa que sean correctas.
De acuerdo a George, Robyn ha empezado a ocultarle cosas. Siente que le guarda un secreto, y lo mantiene pensado todo el tiempo.
Le he dicho que debería hablar con ella, porque siendo sincero, me hubiera gustado que alguien hubiera hecho que Adam y yo nos comunicáramos más en nuestro momento.
También le he dicho a George que se tranquilice, no hay razón para estar molesto por una simple sospecha de todos modos.
La semana, entonces, fue buena.
Paso una noche de tranquilidad terminando la pintura de Adam. Pienso en la manera correcta en que debería dársela. Quizá debo darle un detalle más. ¿Le gustaran los relojes?
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Adam
Es sábado en la noche, lo que significa que saldré con Jason. Me llevará a un bar.
Entre semana recibí una llamada de Nicolas para planear nuestra salida del fin de semana. Tuve que explicarle que ya tenía planes hechos, lo cual sonó totalmente estúpido porque él sabía bien que no tenía nada que hacer cuando me ofreció salir, pero no dijo nada de todos modos, simplemente lo aceptó.
Quería salir anoche, pero Jason tuvo que trabajar. Lo que mueve nuestra noche fuera para hoy.
Jason me recoge en su moto, y no me molesto en despedirme de mi papá. Son cosas que noto, me siento extraño. En mi casa ya sabían que saldría esta noche de todos modos.
Jason viste una camisa azul y pantalones negros, lo que me hace sentir bien con mi elección de camisa roja y pantalones negros. Sus pantalones se ven mejores que los míos, se ríe cuando se lo hago saber.
Jason no me lleva al bar directamente, me lleva a su casa primero. Le pregunto la razón y me dice que planea beber, obviamente, así que iremos en taxi.
Su casa es pequeña, y el barrio no se ve precisamente seguro. Vive solo, no sé por cuanto tiempo. No sé porque tomé por hecho que vivía aun con su madre, recuerdo que cuando éramos niños vivía con su madre y su abuela. Pero no estoy seguro, para ser honesto.
Llama a un taxi, y aprovecho nuestro tiempo de espera para charlar con él sobre cosas de las que no solemos charlar. No me dice cuanto tiempo ha vivido solo, pero si dice que ya es mucho tiempo. A veces visita a su mamá en casa de la abuela, me hace saber.
No le pregunto si en su casa saben sobre sus preferencias porque el taxi llega finalmente. Pero, de todas formas, Jason parece ser el chico al que no le importa eso.
Llegamos al bar. Nunca había estado en un bar, ahora que lo pienso. Es diferente a Hell’s heaven, obviamente. El bar luce más tranquilo, o menos pretencioso que el club. De todas formas me siento como la primera vez que fui al club con los chicos, con Esteban arreglándosela para hacernos pasar directamente.
Con Jason, el escenario es paralelamente lo mismo. Todos voltean a verlo y a saludarlo, escuche a alguien decir que es bueno verlo de vuelta. Jason me toma por la espalda para hacerme acelerar mi paso, y no estoy seguro si estaba caminando lento porque es mi primera vez aquí, o él quiere caminar rápido para evitar miradas y comentarios.
Jason nos lleva a una mesa desocupada que encuentra. El bar en sí no es muy grande. La música que tocan es buena. No es nada electrónico, nadie está bailando. Es agradable, todos están sentados simplemente disfrutando de una charla con sus acompañantes
Jason me pregunta si querré cenar aquí, y antes de que pueda contestar me dice que él muere de hambre. Decidimos comer después de beber algunas cervezas. Me deja solo unos momentos para ir por ellas a la barra. En su lugar mucha gente lo saluda. No a todos les devuelve el saludo con la misma efusividad, puedo ver.
Le pregunto sobre el lugar, y me dice que es un bar al que solía venir antes con mucha regularidad. Parece ser que muchos aquí se conocen. Como dije, no es un bar demasiado grande, debe ser eso. Veo un letrero en el baño con colores llamativos.
No des demasiado amor en el baño.
-¿Es eso necesario? -Pregunto a Jason con tono de broma, apuntando al baño. Jason suelta una risa.
-Te sorprendería. -Dice.
Como por accidente, recuerdo todos los besos que me di a escondidas con Esteban en los baños. Me hubiera servido alguno de esos letreros…
En medio de nuestra charla, sobre todo y nada como es costumbre, me pregunta por Nicolas. Le expliqué mi patética excusa y empieza a carcajearse por haber ganado ante “el francesito”. Quise hacerle un gesto por la mala broma y su innecesaria actitud, pero la verdad es que su risa contagiosa me hizo imitarlo.
Empieza a cambiar el tema, y me agrada que lo haga porque percibo que es un tema importante, y siento bien saber que tiene la suficiente confianza en mí como para hablar de temas serios.
Vuelve a hablar sobre su futuro, quiere ser policía. Ya me lo había dicho, pero ahora está seguro. Ha estado buscando requisitos al menos en línea, y se ha preguntado si realmente quiere hacerlo. La respuesta aparente es que sí, está seguro.
-¿Cuándo pensabas ir a saludarnos, Jason?
-Sí. Actúas como si no conocieras a nadie.
Volteo para ver a una pareja dirigirse a él. Sin aviso previo pasan a sentarse en la mesa. La chica al lado de Jason y el chico al lado mío.
El chico es solo un poco más bajo que yo, de tez blanca. Usa una playera negra y pantalones azules. Usa el cabello algo largo, pero hacia arriba. Tiene un tatuaje de una figura en su brazo derecho, el que está a mi vista. También tiene aretes, y es muy delgado. Pero un delgado estético, con músculos marcados.
La chica es de pelo castaño, y usa una blusa sin mangas blanca con una falda color oro. Las botas se le ven bien. Sonríe, y la verdad es que tiene una sonrisa muy amigable.
El chico, ahora que lo pienso, no ha parado de sonreír. Saluda a Jason y después, con la misma emoción, me saluda a mí. Parece una persona muy animada. Supongo que es bueno, pero para mí, es casi sobrecogedor.
-¿Es él un ligue tuyo? -Pregunta la chica justo en el momento en que se sienta, sin dejar a Jason contestar.
-Es extraño, pensé que tu estilo era elegir a tus ligues aquí, no traerlos, ¿dé donde lo has traído?
El chico finge una cara seria que le regala a toda la mesa, cuando llega a mí, vuelve a su sonrisa. Mueve mucho los brazos, supongo es parte de su personalidad. en su aire de bromista, me empuja ligeramente.
-Es broma, hombre.
-Es la primera vez que viene. -Dice Jason- No hagan que no quiera volver.
-Lo sentimos. -Dice la chica, riendo.
-Adam, ellos son mis amigos, Serena y Alex. Chicos, él es Adam. No es mi ligue, también es un amigo.
-Mucho gusto. -Digo.
-Igualmente. ¿De dónde conoces a Jason?
-Aaam. De toda la vida. -Bromeo, intentando acostumbrarme a tan rápida bienvenida- Íbamos juntos a la escuela, nos reencontramos hace algunos meses.
-¿Conocías a Jason de joven? ¿Cómo era? -Pregunta la chica, Serena- Di todo, cualquier detalle para poder burlarnos de él.
Alex ríe en respuesta. Su risa es muy cantarina y notoria. Supongo nos acompañaran en nuestra noche.
En un punto hemos decidido que debíamos comprar algo. Hemos comprado boneless, y papas fritas. La verdad es que estoy pasando un rato en verdad agradable. Serena parece amable y graciosa. Alex también me agrada, pero no termina de convencerme su entusiasmo excesivo. Aunque cada que se comporta así, Serena suelta una risa, o lo mira con una sonrisa. No tienen que confirmarme que son pareja.
Jason está bebiendo rápido, no sé si planee emborracharse hoy. Menciona mi cumpleaños, y tan rápido como lo hace los chicos preguntan si haré una fiesta, y les doy la misma excusa que me he dado a mí mismo para no hacer nada, pero no les explico lo de Ed.
Cuando a Jason se le pregunta la razón por la cual ha dejado de frecuentar el bar, se las ingenia para cambiar el tema. Ya con algo de alcohol en su sistema parece hablar más libremente sobre cualquier cosa, por ejemplo, les ha contado que quiere ser policía. Escucho su plan de nuevo porque se los explica a ellos.
Los chicos parecen auténticamente felices por él. Jason tiene buenos amigos, no sé por qué los dejo de ver, o porque se esmera en pensar que no tiene tantos amigos.
Me disculpo para ir al baño. Cuando llego, las puertas tienen un signo de hombre, otra de mujer, pero la puerta de en medio tiene dibujado la cara de un alíen. Saliendo del baño, lavándome las manos, un chico comparte miradas conmigo en el espejo. Es lindo. Lo ignoro para volver con Jason y los chicos.
Cuando vuelvo, Serena ha tomado mi lugar para abrazarse con Alex. Entonces me siento con Jason, quien tiene una sonrisa de bobo que le adjunto al alcohol. Como tema de conversación, hablo del baño.
-Tienen un baño marcado con la cara de un alíen. -Digo, sonriendo- Se ve genial. Gracioso.
Por alguna razón Jason suelta una risa baja.
-Es para los que se identifiquen fuera del sistema binario de genero… no sé cómo decirlo. -Explica Alex- Bueno, tu sabes, que no se identifican como hombre o mujer.
-Oh… que bien. -Digo- Pensé que era solo decoración. -Río. Jason comienza a reír más fuerte.
-No he visto ningún genderqueer en el bar de todas formas. -Dice Alex- Es un baño neutral, vaya. Gente trans puede ir sin sentirse intimidada a que le digan que no pertenece al baño al que decida ir.
-Entiendo. Es bueno que hagan eso, creo. -Digo, entonces río- Jason, no me dijiste que era un bar gay…
-No lo es. -Dice Serena.
-Es lo que adoro de este bar, enserio. -Completa Alex- Mira a tu alrededor, no es como un bar “de ambiente”. -Dice eso haciendo las comillas con sus dedos- No como a los que se acostumbran, al menos eso te aseguro. Pero de repente la comunidad empezó a venir, y nadie nos dice nada. Es genial.
-Y no se siente como exclusión propia, como cuando vas a un bar gay. O un club gay, lo que sea.
-Bueno, amor, exclusión propia no es lo que se busca en esos sitios. Es un sitio seguro.
-Adam es como tú, Alex. -Dice- Se llevarán bien. Él también es intenso sobre estos asuntos sociales.
-No soy intenso. -Digo- Y no digo que tú lo seas, Alex.
-No lo ves así porque eres igual, Adam.
-Alex si es exagerado. -Dice Serena.
-¡Hey!
-Cariño, te amo, pero en el momento en que Adam mencionó el baño supimos que serias el primero en explicarlo. Eres hasta predecible.
Alex suelta un suspiro y comienza a reír, hace un gesto aceptando lo dicho. No me queda más que reír también.
De todas formas, y creo que tengo algo de culpa en eso, volvimos a tocar el tema. Chicos y chicas como nosotros comenzaron a venir al bar, y si a alguien le molestaba, parece ser que ellos se iban antes que los chicos. Entonces el bar se convirtió en un lugar para LGTBQ+ y heterosexuales que no les importa nada. Este sitio es perfecto. El dueño es heterosexual, por lo que entiendo.
Me agrada Alex, porque no me hace sentir incomodo hablando de esto. En otros lugares, o con otras personas, puede que no les importe hablar de esto, o crean que estoy demasiado ocupado etiquetándome a mí mismo.
-Y es genial aquí. -Dice Alex- Aunque me sienta mal diciéndolo, lo que dice Serena es verdad. No se siente como discriminarse a sí mismo, tampoco me gustan mucho los lugares gais. Me siento mal diciéndolo. -Ríe- Pero sí, aquí no todos son de la comunidad. Mi novia, por ejemplo, ella es totalmente hetero…
-Es un ambiente genial, en realidad. -Comento- Tal y como dices. No tengo que decirle a nadie que soy gay porque a nadie le importa. Supongo, que como Jason, eres bi…
-Soy trans. -Dice Alex.
Toma su cerveza con ambas manos, y su rostro se muestra serio, sin expresiones, excepto quizá por nerviosismo. ¿Es enserio?
-Esa no es una sexualidad. -Bromeo.
Alex muestra un gesto algo molesto. Serena suspira.
-Oh, viejo, no me digas que eres de esos que piensan que la “T” les estorba…
-Alex…
-No. -Suelto una risa. No creo que debería reírme ante su rostro tan serio- No lo quise decir así. Dije lo que dije porque hablábamos de sexualidad. Una manera boba de decirte que no me importa que seas trans. Perdón si te molestó. -Digo.
-Ves. -Dice Serena.
-Lo siento viejo…
-Por nada. -Digo- Ni si quiera noté que no eras cisgenero, te lo juro. ¿Cuánto tiempo llevas así?
-Es porque no has visto las cicatrices de mis pechos. -Dice.
-Alex también hace bromas inadecuadas, como tú. -Dice Jason. Alex ríe.
-Empecé transición hace mucho tiempo. Es difícil, vas al hospital y tiene que revisarte un psicólogo, para que te diga que no estás loco y esas cosas…
Alex sigue contándome sobre su transición, y solo puedo quedarme asombrado por su entusiasmo y emotividad cuando habla de su vida como chica, antes de iniciar transición. Sus padres siguen sin hablarle.
Alex es hermoso, quijada marcada, aunque ahora entiendo y veo su rostro algo delicado. Y su voz no tan gruesa, pero son cosas minúsculas. Se ve contento cuando habla sobre encontrar su verdadero yo.
La noche sigue su curso, y bebemos un poco más de lo debido. Una pareja llega. Se sientan al lado mío sin presentarse. Alex y Serena no parecen extrañados por su presencia.
-Hola Jason. -Dice el chico- No te veíamos en mucho tiempo.
-¿Quién es el chico? -Pregunta la acompañante, supuesta novia, del chico que ha llegado.
Jason decide ignorarlos
-Vine a pasar un rato tranquilo. -Dice
-¿Por qué no pasamos un rato tranquilo en nuestro apartamento?
-Puedes traer a tu chico. -Dice la chica.
-No está de humor. -Dice Serena.
El chico voltea a ver a Jason, quien mira fijamente la mesa, evitando cualquier contacto visual con nadie. Entonces mi rostro es tocado por las manos del tipo, hace que mi cabeza gire, y me hace verlo.
-¿Y tú?
-Solo váyanse. -Dice Alex- Nadie en esta mesa está interesado en acompañarlos.
La chica suelta un suspiro con decepción.
-Seremos solo tú y yo entonces. -Dice ella a su pareja, antes de irse.
¿Acaban de proponerme sexo? ¿Una pareja?
Apenas y me siento enojado porque el tipo me haya tocado la cara.
-¿Quiénes eran? -Pregunto.
-La razón por la que no vengo. -Dice Jason- O una de las razones al menos… Adam, perdón. Quiero irme.
-No te vayas, Jason. -Dice Serena- Ellos ya se fueron. Y te extrañamos aquí.
-Alguien más vendrá. -Contesta Jason.
-¿De qué hablas, Jason? ¿A qué te refieres con que por ellos no vienes? -Pregunto.
-Venir aquí era conseguir a alguien con quien acostarme. -Contesta Jason- El sexo casual fue divertido, hasta que dejas de ser tú. De repente eres alguien con quien se puede tener sexo sin compromisos. Al final no mucha gente viene a charlar contigo. Vienen directo a querer tener sexo y nada más.
-Oh, Jason…
Jason mira hacia la mesa de nuevo, y abre la boca, como debatiendo si debería seguir hablando o no. Lo rodeo con un brazo.
-He hecho tríos con esa pareja… al principio es divertido. Al final simplemente quieren algo rápido, y te piden que te vayas. Sin momento para pensar, o charlar, o fumarte un jodido cigarrillo. Hiciste lo que saber hacer, ahora vete. -Dice con diferencia en su voz.
-Viejo, lamento escuchar eso. ¿Por qué no nos dijiste como te sentías? -Comenta Alex.
-Alex, todo este bar estaba lleno de malos recuerdos. Ustedes me vieron, la mayoría de las veces salía acompañado. Los últimos días me sentía como el prostituto fijo del lugar. Tan fácil como venir a presentarse conmigo y tenían seguro que los acompañaría a la cama.
-Suficiente bebida para ti. -Dice Alex, retirando la cerveza que Jason estaba por terminarse, este último levanta las cejas.
-Se suponía que hoy tenía que distraer a Adam, y terminé arruinándoles la noche.
-No arruinaste nada, Jason. -Dice Serena.
-Y me entretuve mucho, si sirve de algo. -Digo.
Jason ríe, y me dice que si le sirve.
Aun así, tenemos una pequeña charla sobre el tema. Jason dice que quería alejarse de todo ese asunto del sexo casual porque lo hacía sentirse mal. No lo digo, pero supongo que eso paso antes de que nos volviéramos a encontrar en el club, lo que explica su insistencia en buscar una amistad, incluso en Esteban.
Después de un tiempo decidimos que es hora de irnos. Alex y Serena piensan irse también, y se ofrecen para darnos un aventón. Les explico que vivo lejos, pero no les importa. Agradezco su amabilidad, sobretodo porque Jason está muy borracho.
En su coche, hablamos sobre mí, siendo la primera vez que me ven. Les he dicho lo mucho que me agradaron. Jason insiste en que debo invitarlos a mi fiesta.
-Jason, ya te dije que no planeo hacer nada en mi cumpleaños.
-Ya estamos en Octubre. Falta menos de dos semanas.
-¿Y eso qué? -Digo- Con mayor razón, no planeo hacer nada.
-No tú, Adam, tu fiesta sorpresa. La que los chicos planean.
-¿Qué?
Serena, desde el copiloto, muestra una sonrisa enorme, sabiendo que algo está mal.
-George, Robyn, y Esteban. O eso fue lo que dijo. No debo decirle a Adam, pero deberían ir. Será poca gente.
-Viejo, hablas con Adam. -Dice Alex, conduciendo y riendo.
Jason voltea a verme, se da cuenta que estaba mirando al frente e ignorando mi presencia. Su cara cambia a miedo cuando se da cuenta de que sigo a su lado, escuchando todo.
-¡Mierda!