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Sencilla Posesividad [Vikturi] por Sailor cosmos

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Notas del capitulo:

Gracias a:

-Flik [El casper :v]
-Daniela [En Wattpad la estoy resubiendo, busca en mi perfil y ahi explico que paso XD]
-anonymuss [el terrorista okno XD chiste interno...]
-Bunny Cyclone [y sus bellos cometarios largos que no he podido responder 7n7]
-PandaZorro [Mi animal amado :v]
-cheli [la que quedo impactada con lo de JJ xD]
-Fujoshi31 [Huye bn lejos, Viktor sigue molesto :'v]

Buenas buenas~~ mis amores <3He aqui el capitulo mas esperado [no es joda, cuanto me lloraron este capítulo sin saberlo]. El titulo en si lo dice todo, la que entendio entendio ¬w¬ 

 espero que les guste :3 cuando vean esto: ~*~ Significa lemon [Si habrá lemon en este cap, asi que me preparo *agarra un paraguas*]

6.Agape

Daba ligeras palmadas en la espalda de Yuuri que seguía llorando, comprendía que el susto no había sido pequeño y mucho menos lo olvidaría pronto. Apenas había dado un par de pasos fuera de aquella habitación cuando vio a la madre de Yuuri salir de la habitación contigua, arrugó el entrecejo, escucho a Yuuri gritando desde el pasillo contrario y la mujer no lo había hecho, algo estaba pasando

—Sra. Katsuki—le llamo pero esta no escuchó, parecía dormida—Sra. Katsuki—insistió y esta se sacó algo de los oídos dándose cuenta de que le estaba hablando

— ¡Oh! Señor Nikiforov ¿Paso algo? ¿Yuuri le está molestando? Le dije que no lo hiciera pero parece que no me hizo mucho caso—suspiraba decepcionada, Yuuri se abrazó aún más al cuello del ruso que alzó una ceja

—No me está molestando pero quiero que saque a Jean de Yu-Topia… Ahora—recalco con el ceño fruncido

— ¿Leroy? Vaya… Lo escuche hablando pero como Yuuri es muy molesto pensé que lo estaba fastidiando

— ¿¡No lo escucho gritar!? —pregunto un poco alterado

—Yuuri siempre ha sido alguien muy llorón y escandaloso, pensé que estaba solo jugando con el señor Leroy… Debería volver a la cama, yo llevaré a Yuuri a su habitación—antes de que se acercara lo suficiente se apartó

—Yo lo hago—farfulló empezando a caminar—Y Jean está ahí dentro, no sé si le quiere curar o llamar una ambulancia, haga lo que quiera

Caminaba apresurado y molesto, no podía creer que enserio la mujer fuera tan ciega o simplemente desinteresada con aquella situación, comprendía que quizás desde el punto empresarial Jean trajera muchos ingresos por ser quién era pero no podía estarle echando toda la culpa a su hijo por la situación

Ella no te puede cuidar… nadie te puede cuidar…—pensaba abrazándolo con fuerza. Al llegar a la habitación de Yuuri intentó dejarle en la cama para buscarle un pantalón y bóxer, pues ahora lo único que le cubría era la estirada camisa del pijama—Yuuri voy a buscarte ropa, suéltame…

A duras pena y con el cuerpo rígido logro sacarse a Yuuri de encima, dejándole sentado en la cama aun temblando, aunque apenas se dio la vuelta Yuuri le jalo de la tela de la camisa

—¿Pu-Puedo dormir contigo? N-no quiero estar solo…—moqueo suavemente y Viktor sintió su corazón contraerse

—Puedes dormir conmigo cuando quieras, ya te lo dicho—le sonrió poniéndose a su altura—No pasara nada, no permitiré que te pase nada malo ¿Esta bien? —Limpio con el pulgar la lágrima que iba cayendo por la mejilla del japonés—Eso me recuerda que te tengo un regalo, te lo hubiera dado más temprano pero te sentías mal… Te vistes y vamos a abrirlo ¿sí?

Yuuri le asintió aun moqueando. Después de vestirlo le condujo a su habitación en la cual estaban Makkachin y Vicchan esperándolos al parecer. Viktor tomó la caja y con una sonrisa en el rostro se la dio a Yuuri que la tomó con sus manos temblorosas, abrió lentamente la caja y la boca se le abrió de la impresión a la vez que sus ojos brillaban, impactado e indudablemente feliz

—Viktor…—en un intento algo pobre de reprimir su emoción por lo que había en la caja se detuvo a pensar que eso era increíblemente caro

—No hay nada mejor que tener tus propios patines. Las cuchillas están recién afiladas y supuse que te gustarían en negro—comentaba poniéndose tras Yuuri para ver los patines, recostando el mentón del hombro del niño—Los que se alquilan nunca son tan buenos

—Pero esto… son muy…—no sabía cómo expresar bien la vergüenza que le daba aceptar el regalo, era demasiado costoso

—No importa, si quieres ser patinador no puedes andar llorando por un precio—aseguro dándole un besito en el cuello, Yuuri sintió un ligero escalofrío— ¿Los quieres probar?

***

—De noche este lugar da bastante miedo—decía Viktor tranquilo y sonriente, el dueño de la pista le había dado una copia de la llave para que fuera a entrenar cuando quisiera, era de esos momentos en los que adoraba ser el campeón

—Aprietan… mucho…—se quejó Yuuri dando apenas unos pasos con los patines puestos

—Hay que aflojarlos… Puedes ponértelos para caminar normalmente o patinar lento hasta que este bien flojo—explicaba—Ah~ Imagínate que hay público y esperan a que tu patines…

—No creo que nadie espere a que yo patine—rio nerviosamente moviéndose muy lento, la sensación entre los patines que te daba la pista en alquiler no podía ser más diferente, tener unos nuevos era entre extraño y emocionante para él pues nunca tuvo unos propios por los costosos que eran

—¡Que poca confianza te tienes, Yuuri! —exclamó poniendo las manos en su cintura y haciendo una especie de puchero—Yo sí puedo imaginarlo, un cerdito transformado en un lindo príncipe...—Contaba patinando lentamente, mientras movía el resto del cuerpo al compás de la melodía que llenaba su cabeza—… Hipnotizando al público con su bello patinar…

—Viktor…—balbuceo algo ido en lo que estaba haciendo el peli plata

—Sin nadie que pueda apartar los ojos de la música que crea con su solo cuerpo—decía algo perdido en su propia imaginación de Yuuri más grande, escucho el sonido que producía la cuchilla sobre el hielo, volteo a ver que Yuuri le estaba imitando en lo que hacía, moviéndose ambos al mismo imaginario ritmo

Llegado cierto punto en el cual ambos hubieran chocado Viktor le tomó de la cintura alzándole por un momento y dándole un besito rápido en el cuello para luego dejarle en el hielo de nuevo. Ambos rieron de forma tonta por esto, Yuuri tomó la mano de Viktor e hizo como si estuviera saludando al público, el peli plata le siguió la corriente riendo hasta que una imagen se formó en su mente, una muy futurista y que aunque fuera un poquito fantasioso quería hacerla realidad

Aun si tenía que llevarse a mucha gente de por medio

***

—¿Sabes en dónde está Viktor? —preguntó el pequeño entrando a la habitación del rubio ruso que estaba en una extraña posición para solo estar viendo el celular

—Salió esta mañana muy temprano—contestó dejando el celular de lado para verle y bajando la pierna—Quizás vuelva más tarde, aunque no se llevó sus patines

—Oh… claro

— ¿No deberías estar en la escuela? —pregunto arrugando un poco el entrecejo, era martes y con lo aplicado que era el niño en el colegio le sorprendía que faltara

—Viktor me dijo que no fuera—respondió algo encogido, notablemente nervioso—… ¿Puedo quedarme aquí contigo? —preguntó con la cara algo sonrosado

—Por supuesto, aunque podríamos ir a patinar, a tus clases de danza…—ofrecía tomando ropa de su maleta—Y tengo que comprar ropa o lavar esta…—murmuro para sí mismo notando la pila de ropa sucia

—Puedes pedirle a Nee-chan que la lave, ella lava la ropa de los huéspedes que están por mucho tiempo hospedados—explico y Yuri torció un poco el gesto, de verdad que no creía poder siquiera pedirle algo a esa bipolar, con Yuuri parecía un ogro acabado de despertar pero en frente suyo se comportaba como la persona más penosa del planeta—Y Minako-Sensei me dijo que quería verte, así que podríamos ir juntos a la danza

—Bien. Entonces déjame llevar todo esto con tu hermana para que me lo lave y nos vamos—explico y Yuuri le asintió sonriendo para luego salir corriendo a vestirse

Rio levemente, Yuuri era en verdad adorable, lo cual era un poco extraño para él que generalmente se alejaba de los niños por ser fastidiosos… Quizás por eso nunca tuvo amigos si lo pensaba. Tomó la montaña de ropa sucia y se encamino a donde sabía estaba una especie de lavandería, apenas puso un pie se escuchó un estruendo de cosas cayendo

—Ejejeje… ¿Qu-que se te ofrece? —preguntó Marie con la cara roja y riendo nerviosa

—Necesito lavar esta ro—antes de darse cuenta ya no la tenía en las manos

—Te las llevaré a tu habitación cuando estén listas. ¡Adiós! —y le echó del lugar, no comprendió absolutamente nada de lo que pasó. Aún algo perplejo se encamino hasta su habitación, encontrando en el camino a Yuuri ya vestido, aunque no pudo evitar arrugar el entrecejo al verle

—Planeas ir así—le señalo entero—A practicar danza

—Siempre voy así…—respondió algo confuso, siempre iba con un sweater enorme porque le daba muchísimo frío de camino a cualquier lado, por lo general en Hasetsu había un clima frío así que era normal ver a mucha gente con abrigos, bufandas y guantes

—Oh no, ya no iras así—declaró sonriendo de forma un tanto maligna, Yuuri sintió un escalofrió por toda su espina dorsal mientras su cara se ponía azul

***

—Yuuri~ llegaste tarde—dijo Minako al escuchar la puerta del salón abrir y cerrarse—Pero supongo que te encontraste con- ¡Oh! Al final si vino—parpadeo impresionada

—El cerdo me dijo que quería verme—respondió encogido de hombros, Yuuri estaba detrás de él—No estás desnudo, no tiene porque darte pena—comentó riendo

—Pero… nunca había usado algo como esto…—dijo abrazándose a la pierna de Yuri

—¿Umm? ¿Qué cosa? —pregunto Minako curiosa acercándose. Yuri logró que Yuuri se separara de su pierna y dejarle a la vista de la profesora de ballet, la cual sonrió ampliamente con ojos brillante—¡Oooh, Yuuri! Pero si estas perfecto así… Incluso tienes un par de kilos menos a los que pensé

Yuuri se puso completamente colorado. Yuri le había ordenado llevarle a tiendas solo para comprarle ropa, le había comprado licras negras –en total 5-, camisas deportiva ceñidas al cuerpo y aunque lo negó hasta el cansancio tres pares de zapatillas para ballet, todo esto con la excusa de que si no le permitía hacerlo iba a molestarse con él

—Eres un cerdo desnutrido—apoyó el codo de la cabeza del menor—Ahora, más te vale poder romperte porque si no, no podrás ganarme nunca

—Y-ya se…—respondió avergonzado

Entre Minako y Yuri comenzaron la clase al pequeño japonés que hacía con completa concentración y muchas ganas que era lo más importante. Minako no podía estar más fascinada con Yuri, pues él era casi un maestro en el ballet, era una visualización de lo que quería para Yuuri sin necesidad de compararlos, pues veía que Yuuri podría ser incluso mejor y sabía que Yuri pensaba lo mismo

—Creo que ya está bien por hoy—Yuuri cayó como peso muerto al suelo, sudando como nunca, era la primera vez que estaba ahí por más de 5 horas, quizás porque esta vez Yuri lo regañaba a cada mínimo error entre otros detalles. Yuri volvió a una posición normal, pues parecía tener manía a alzar la pierna haciendo gala de su flexibilidad

—Estoy muerto~—lloriqueo tirado en el piso

—Si estás muerto podemos ir Yu-Topia de una vez y no a la pista de hielo

—¡Hii! —se paró poniéndose rígido. Minako rio levemente por la reacción del más pequeño—Voy al baño—aviso corriendo hacía el lugar. Minako volteo a ver a Yuri que se soltó el pequeño moño que pudo hacerse en el corto cabello

—Es bueno que por fin Yuuri haya encontrado a gente como tú y Viktor… Le hacía falta amigos que le entendieran—comentó acercándose al rubio y este desvió la mirada

—Tendremos que irnos después—dijo con notorio pesar y fastidio, Minako solo sonrió levemente

—Lo sé y él sabe también—se recostó del barandal que había en la pared cubierta de espejos—Pero no quita que es feliz ahora… Sus padres tampoco están muy contentos con que practique ballet o que su meta sea ser Patinador… Sabes lo que se piensa en general de los patinadores o bailarines

—Afeminado, maricón, homosexual—refunfuño, solía pasarle lo mismo pero cayó a muchos restregándoles en la cara lo que había logrado y más aún su medalla de plata—Ya lo sé…

—Y que cuando era más pequeño, de verdad era gordito, tenía los cachetes rosaditos, recuerdo cuando me pidió que le enseñara para dejar de ser gordo, fue muy tierno—rio levemente recordándolo—Pero… siempre ha sido tímido, la mezcla de todo es una infancia muy solitaria

—Nunca he dicho que planeo olvidarlo o algo así—refunfuñó con el ceño fruncido—Cuando termine el GPF, venza a Viktor volveré para pasar el tiempo aquí…

—Genial, podre ver que más ha aprendido en ese tiempo—festejó la mujer, Yuuri llego limpiándose los lentes y el ceño fruncido por no poder ver nada—Cada día estás más ciego, deberían cambiarte esos lentes

—Es que estos son los viejos, los otros se rompieron—Yuri enrojeció por completo, recordando que por su culpa se habían roto

—Avísale a tu mama, vas a quedar aún más ciego—río Minako acariciándole el cabello

—¡Miren! Ahora el cerdo usa zapatillas de ballet—Yuuri no volteo, solo apretó los labios y se puso los lentes, era mejor ignorarlo por ahora y llorar cuando nadie lo viera— ¿vas a bailar el lago de los cisnes?

—Creí haber dicho que no se acercaran a mi escuela, largo de aquí—regaño Minako tomando un bate de metal, los niños se fueron azules, tan solo 6 niñas se quedaron pues ellas eran estudiantes—Y ustedes, les había dicho que…

—Ya vamos Yuuri—dijo el ruso dándole un empujoncito mientras escuchaba de fondo el regaño de la maestra a sus alumnas

Ambos salieron del lugar y tomaron camino hacia la pista de patinaje en silencio, cada uno abrigado y caminando de la mano, más como una excusa para mantener en contacto con el niño que por otra cosa

—Cuando vayas a Rusia para participar en el Grand Prix… ¿Me llamaras? —pregunto Yuuri de repente

—No lo creo cerdo, debo concentrarme en practicar, ya estoy perdiendo mucho tiempo aquí—respondió algo seco, por simple costumbre y no queriendo profundizar más de lo que ya había profundizado, consideraba que esto podría herir a Yuuri en esa enorme cantidad de tiempo lejos uno del otro

—Pero… ¿Y si yo te llamo? —se estaba poniendo nervioso

—No lo se, no uso mucho el celular en la pista de hielo—estaba a punto de morderse la lengua por mentir, no había nadie en Rusia que usará tanto el maldito celular

— ¿Y si mando cartas? ¿Regalos?

—Ya te dije que no lo se

—Pero yo también te quiero animar cuando vayas a patinar—medio gritó deteniéndose—Tu… tu estas aquí ayudándome y animándome para que sea patinador. Yo también quiero estar ahí pero yo soy pequeño y no puedo—moqueo con la nariz roja por el frío y las ganas de llorar

El rubio no pudo evitar conmoverse, le resultaba extraño el que alguien además de su abuelo quisiera ir a verle. Tomó la mano de Yuuri de nuevo empezando a caminar—Ya veremos cómo lo haremos—le aseguro sonriendo débilmente, Yuuri le abrazo por la espalda sonriendo contento

***

—No sabía que tenías patines propios…—comento con la cara súper arrugada de fruncir el ceño

—Viktor me los dio en la madrugada—explicó y un tic en la ceja derecha de Yuri le hizo saber al pequeño que se avecinaba la desgracia

—A él le aceptaste... —empezó a decir en tono terrorífico, Yuuri se iba poniendo azul con una cómica morisqueta a la vez que retrocedía—...Unos malditos patines que cuestan más que un riñón seguramente y a mí...—el ángulo de las luces solo hacían que luciera más terrorífico—...Que sólo te compre ropa... ¿¡Te quejabas hasta hastiarme!?

—Vik-Viktor ya los había comprado y yo no lo sabía—lloriqueo de forma casi inentendible

—¡SILENCIO! ¡No saldrás de esa pista hasta que te quedes sin nalgas por tanto caerte!—rugía y Yuuri tan solo salió corriendo hasta la pista

Se sentía un poco celoso a decir verdad, si alguien le regalara unos patines también lo amaría más que a su propia vida, tal parece que Viktor le había ganado la carrera de regalos. Luego de un rato practicando saltos y que Yuuri lo hiciera regular, decidió que tocaba lo siguiente en la lista

—Haz cualquier presentación que recuerdes, Ágape, Eros, la que quieras—Yuuri desvió la mirada, con el labio sobresaliendo haciendo un pequeño mohín—¿Qué?

—Es que...—jalo un poco la tela que había quedado en sus puños al apretarlo—... me da pena que me veas...

—Pero... con Viktor no te da pena —resaltó frustrado y molesto ¿porque debía haber tanta diferencia entre él y Viktor? Solo porque él era perfecto no quería decir que amerita más atención y mucho menos la atención de su pequeño y único amigo

—N-no es eso—se apresuró a decir llamando la atención del rubio —Es que... tú te esfuerzas mucho para que yo aprenda y yo... no lo puedo hacer perfecto como tú quieres ver—había comenzado a sollozar viendo el piso

Yuri se le quedo viendo pasmado, notando el problema. Yuuri aunque tenía muy marcado su sueño y meta, el tenerles a su lado enseñándole causaba mucha presión, puesto que el niño no quería que sus enseñanzas fueran para nada y solo se podía demostrar haciéndolo... Solo que Yuuri no era como ellos, tenía talento pero no es un prodigio, no es tan fácil como para ellos que aprendían casi a la misma velocidad que una estrella fugaz. Se acercó hasta él y lo abrazó con fuerza con él, Yuuri sollozaba pasito para no llenar al rubio de lágrimas

—No quiero que lo hagas perfecto... De hecho con solo ver que lo intentas me harías muy feliz—confesó dando muy suaves palmaditas a la espalda del japonés—Sé que no eres como Viktor o yo que teníamos patines desde el vientre de nuestras madres pero... Tienes talento—se separó de él y se puso de rodillas tomándole las manos—Que no te salga perfecto a la primera no quiere decir que no te saldrá perfecto a la segunda o la tercera, ni siquiera importa si fallas... Lo de que tienes por obligación superarme a mí o a Viktor no es verdad, solo debes llegar tan alto como puedas sin pensar en ser mejor que nadie... Solo tienes que hacerlo como te plazca porque eres tu —le tomó del rostro limpiando la lágrimas. Pensó en abrazarlo peeeeeeeeeero...

— ¿¡Que te paso Yuuri!?—hasta ellos llegó Yuko examinando al menor

—Es un llorón, no debería sorprenderte—resopló Takeshi y Yuri vio a ambos de mala manera, en serio que sabían cómo interrumpir

—Has silencio—ordenó ella y se apartó junto a Yuuri para hablar. Yuri noto que el grande se ponía más molesto por esta acción

—Así que esto es todo lo que pasa—murmuró algo hastiado

***

—A ti… esa niña ¿Te gusta? —pregunto cuando ya estaban llegando a Yu-Topia, Yuuri le miró un poco extrañado

—No… Me gustaba cuando era más pequeño, ella me enseñó a patinar pero Takeshi siempre está con ella y

—Okay ya entendí, déjalo así—suspiró aliviado, con ganas de saltar de la alegría pero no podía hacerlo frente a Yuuri claro está

—Por ella conocí a Viktor como patinador… y si no hubiera conocido a Viktor no te hubiera conocido a ti, así que estoy muy feliz de haberla conocido—se estaba tomando la libertad de abrazar a Yuri a cada rato, no como que al rubio le molestara pero resultaba curioso la confianza que este le tenía para dejarlo –por lo general patearía al idiota que intentara siquiera tocarlo-

—Parece trabalenguas—tenía los cachetes algo inflados y la cara ardiendo por la vergüenza de aquella confesión

—Cierto… Pero es igual. Estoy muy feliz de que seas mi amigo… ¿Te pasa algo? —pregunto al ver la cara radiantemente roja de Yuri por la vergüenza, peor que un bombillo de semáforo

—So-solo camina cerdo—refunfuño apresurando un poco el paso

Al llegar a Yu-topia y como solía pasar Vicchan fue a recibir a Yuuri saltándole en las piernas, aunque esta vez estuvo la variación de que también empezó a ladrarle a Yuri, el cual estaba a punto de hacer un sonido raro, no tenía empatía por los perros, siempre preferiría su adorable gato

—Vaya que tardaron—ambos fijaron la vista en Chris que les miraba con cierto grado de seriedad—Debo admitir que es bueno que no estuvieran aquí la mayor parte del día

— ¿Paso algo?—pregunto Yuri quitándose el abrigo mientras Yuuri dejaba a Vicchan en el suelo y se quitaba los zapatos

—Alguien casi le rompe una pierna a Jean anoche... Está echándole la culpa a Viktor pero no recuerda nada porque estaba borracho—suspiro de forma cansina, todo el proceso de llevarle al médico y traerlo de vuelta había sido peor que un parto por la actitud del canadiense. Ni Chris ni Yuri se percataron en que Yuuri apenas se quitó su abrigo se había quedado tras el ruso, como si quisiera esconderse

—Pudo haberse caído, no tiene que ser culpa de Viktor toda puta desgracia que le ocurra—recalcó Yuri, pues Jean tenía esa horrible manía de culpar al peli plata

—Igual dice querer verlo y por alguna razón al pequeño Yuuri también—comentó cruzado de brazos— no entiendo si tiene algo que ver pero debería ir a hablar con... ¿Te pasa algo?—preguntó notando que se abrazaba a la pierna de Yuri

—No quiero hablar con Jean...—murmuró y Yuri le revolvió el cabello

—Ya sé que le estas agarrando molestia, no te va hacer nada, antes le doy una patada—aseguro con una expresión de molestia moderada, esa con la que solía hablar siempre

—Pero yo no...—iba a insistir pero su madre apareció de repente

—¡Yuuri! Por fin llegas, el Sr. Leroy quiere hablar contigo, anda rápido—ordenó la regordeta mujer y Yuuri se encogió aún tras Yuri

—Ya voy...—arrastró las palabras comenzando a caminar con el miedo inundando su cuerpecito. Iba con Yuri a su lado, lo cual daba cierto grado de confianza, aunque esto sería aún mayor si fuera Viktor que aún estaba desaparecido. Abrió la puerta lentamente y entró seguido de ambos rubios

—Ya llego Yuuri —murmuró Chris a modo de aviso, cerrando la puerta tras de sí. Jean se levantó de la cama en la cual estaba echado, mirando iracundo al japonés que se puso tras Yuri, el rubio no comprendía porque Yuuri lucía tan temeroso, podía estar nervioso pero que estuviera asustado...

—Deja de esconderte maldito niño—se levantó caminando hacia Yuuri que seguía escondido tras el rubio—¡POR TU CULPA NO PODRÉ COMPETIR!

—Él no tiene nada que ver con las estupideces que hayas hecho ayer borracho. Lo estas asustando—dijo Yuri con el ceño fruncido. De un empujón fue echado de lado, Jean tomo con una mano a Yuuri de la ropa —DÉJALO—chillo desde el piso, intentando levantarse

—Y-yo no hi-hice nada...—balbuceó casi a punto de llorar

—Cobarde infeliz...—gruñía Jean apretando los dientes— ¿Crees que el mundo es tan normal como para aceptar una jodida disculpa? No me importa que seas un niño—alzó el brazo importándole nada el tener el brazo fracturado, con el único objetivo de darle un golpe al de lentes

—Calmate un poco, como un niño va a poder romperte el brazo—intentó razonar Chris. Sucedió muy rápido, Yuri iba a darle una patada a Jean y Chris iba a intentar parar al canadiense pero todo esto se detuvo cuando una pelota golpeó la frente de Jean, este vio la dirección en la que vino el objeto, soltando a Yuuri en el proceso

—Todo este alboroto por los errores propios es muy patético, al menos en mi opinión

—¡Vik-Viktor!—Yuuri se levantó y corrió hasta el, guindándosele al instante. El peli plata le cargo, sintiendo como el japonés se ponía a llorar

—Ya ya...—le palmeaba la espalda suavemente— ¿Estás feliz? Creí que ya te había bastado con lo que le hiciste anoche—frunció el ceño

—¡ANOCHE ME ROMPISTE EL BRAZO Y CASI ME ROMPES EL CRÁNEO! POR TU CULPA NO PODRÉ COMPETIR—La ira ponía su cara roja a mas no poder—Tan desesperado estas por no perder—se mofo y Viktor sonrió burlón

—Nunca me has caído bien y no por eso te he intentado matar, no lo pienso negar, si disfrute el casi matarte con un tubo por lo que ibas a hacer —aclaraba aún dando suaves palmaditas a la espalda de Yuuri que hipaba

—Anoche no hice nada y tú me atacaste—afirmaba con completa seguridad Yuri miro con atención como el semblante de Viktor se ensombrecía

—¿Nada…? ¡¿NADA?!—bramó colérico—¡Casi violas a un niño de 8 años estando borracho y dices que no hiciste nada!—exclamó algo sarcástico

—Viktor... eso es algo muy serio—Chris le miraba un poco nervioso

—Yo no haría eso—negó y Viktor parecía tener muchas más ganas de asestar muchos golpes contra el canadiense

—No tienes como mentir ya que el niño al que casi violas es Yuuri, que desde el momento en que llegue a estado llorando de miedo—señaló y Yuri no sabía exactamente cómo reaccionar, si desplazado o no tomado en cuenta por Yuuri que no le contó... o querer tirarle unos cuantos dientes a Jean -si es que no se los tiraba todos-. El canadiense intentó formular una excusa pero no se le venía nada a la cabeza—El silencio te sienta mejor, ahora a menos que quieras que te denuncie por intento de violación y pederastia vas a mantenerte muy pero muy lejos de Yuuri—dicho esto se dio la vuelta y salió de la habitación con Yuuri en brazos

~*~

— ¿Estas molesto conmigo?—preguntó angustiado viendo al rubio. Había pasado una semana desde aquel "pequeño" pleito, Jean no se le acercaba pero Yuri estaba un poco lejano sin contar que Viktor desaparecía el día entero, volvía para la noche y dormían juntos en cualquiera de las dos habitaciones

—Porque no me dijiste que Jean intento hacerte algo tan... horrible—no sabía cómo expresar lo que sentía por saber que casi pudo pasar algo tan asqueroso, sin embargo lo que más le estaba doliendo es que Yuuri no le tuvo la confianza de contarlo. Tan solo lo guardo como un secreto... entre él y Viktor

—Viktor me dijo que no lo dijera—explicó con preocupación—Además no quería que te preocupas

—Me preocupo por ti pero... tu... no lo sé, es como si no sintieras el mismo aprecio que yo tengo hacía a ti—explicaba molesto consigo mismo de no saber expresarse

—¡Claro que sí! Eres de mis primeros amigos... Eres muy importante para mí

—¡PERO NO MÁS QUE VIKTOR! Todo lo haces con Viktor, si no es con Viktor...UGGH—gruño frustrado — ¿Que tengo que hacer para estar a su altura para ti? Qué más quieres que haga si ya te trato y te quiero como no he querido a nadie en mi corto periodo de vida—más que hablar con un niño parecía estarle hablando a otro adolescente. Yuuri apretó los labios y cerró la puerta del cuarto, acercándose a Yuri y dándole un besito suave en los labios

El beso fue profundizándose lentamente hasta un punto en el que se separaron para tomar aire—Viktor... me enseñó algo para ser más cercanos y que no me olvides nunca... Se llama Eros ¿Tú quieres hacerlo conmigo?—preguntó con su absoluta inocencia, pensando aun ilusamente que esto era algo un poco más importante. Yuri le miró pasmado, sintiéndose entre afortunado por recibir este ofrecimiento hasta sumamente asustado

—Te haría daño—comentó acariciando muy suavemente el cuerpo del menor

—No importa luego el dolor se va—afirmó abrazándolo

Una parte de su cerebro se desconectó, volviendo a funcionar al percatarse de que tenía a Yuuri bajo suyo, gimiendo ahogadamente con una almohada, habiéndose venido ya una vez y con la expresión más eróticamente adorable que haya visto en su vida. Por su lado también tenía la cara roja, no podía decir que el asunto no le diera vergüenza, nunca había tenido sexo con nadie, había visto porno –no lo iba a negar- pero esto era muy… no sabía cómo describirlo

—Yu-Yuri…—gimió apretando la almohada que tenía pegada a su pecho, abrazándola a la misma vez y con los ojos llorosos

—Nun-nunca he hecho esto a-así que dime si duele—dijo un tanto entrecortado por sus pequeños gemidos y jadeos leves, moviendo muy lentamente un par de dedos dentro del menor

A pesar de que sabía que Yuuri ya lo había hecho con Viktor –o más bien al revés- parecía como si ahí jamás hubiera entrado nada, por lo difícil que estaba resultando el siquiera mover los dedos. Metió un tercero ya algo ansioso, sin saber que hacer exactamente el dolor punzante en su miembro, sumamente excitado por lo erótico que resultaba todo su panorama

Mandando un todo un poco a la mierda saco los dedos que tenía dentro de Yuuri, estos estaban algo viscosos y húmedos así que debía poder entrar… Sin mucha dificultad. Cerro el ojo al momento de empujar suavemente su miembro contra la entrada de Yuuri, metiendo la cabeza de su virilidad apenas y jadeando fuertemente al hacerlo, clavando las manos en el colchón –pues él sí tenía una cama normal y no un futón-

—Du-duele…—sollozo Yuuri a duras penas con la almohada tapando una buena parte de rostro, no queriendo que Yuri viera que le estaba doliendo

—P-puedo sacarlo e ir a darme un baño y ya—ofreció ligeramente inclinado hacia él, respirando aceleradamente por los nervios. Yuuri le tomó de la cara y le apartó el pelo— ¿Yuuri?

—T-tienes una cara muy bonita—sonrió, en una especie de intento para alejar sus pensamientos del dolor punzante. Vamos que no era lo mismo que con Viktor –quizás la diferencia de edad influía en esa parte de la anatomía- pero igualmente dolía. Yuri se puso terriblemente colorado y movió la cadera casi sin darse cuenta, terminando de introducirse por completo dentro del pequeño, quien gimió con tono agudo y casi rompiendo la tela de la almohada por el brusco jalón que le dio—¡YU-YURI! —gimoteo mientras lagrimas caían por sus ojos

—Perdona pero…—resopló como una especie de toro, completamente colorado y negándose a ver el rostro del niño por miedo a terminar de perder el poco raciocinio que tenía y hacerle más daño—…Vy menya iskushayet tozhe, i ya ne sovsem nevinnyy

—¿A-ah? —gimió algo ido, con cierta satisfacción de que le hablara en ruso, cosa rara pues no entendió absolutamente nada. Se tapó la boca con la almohada para que sus gemidos no se oyeran, no era tarde, la gente hospedada debía seguir despierta pero la habitación de Yuri al igual que la suya y la de Viktor estaba en el ala más lejana y cercana a las agua termales, por consiguiente se acumulaba el bullicio y probablemente nadie sabría que era él quien gemía

Yuri quito la estorbosa y blanca almohada, tapando la boca de Yuuri con la suya y así ahogar los gemidos que ambos soltaban por el placer producido al unir ambos cuerpos en uno solo. El ruso se movía en un ritmo que aumentaba por momentos, además de sentir el miembro erecto de Yuuri rozándose y restregando el semen que había dejado salir por todo su abdomen

Se podría decir que tal como empezó terminó, de golpe y casi sin previo aviso al momento de gemirse el uno al otro mandando al puto infierno la prudencia, con el riesgo de que alguien pasara y les escuchara gemir el nombre del uno al otro con pasión y cariño desbordante.

Yuri se vino en una fuerte cantidad pegando cuanto pudiera su cuerpo al de Yuuri y dejándose caer sobre este por el cansancio. Apenas logró sentir el abrazo de Yuuri, escuchando el palpitar acelerado del menor

—Ah... ahora no me Olvidaras nunca—ronroneo y Yuri le rodeo con sus brazos, definitivamente lo que menos haría sería olvidarlo...

***

—Pareces feliz... paso algo mientras no estaba o qué—preguntó acariciando el cabello de Yuuri que estaba acostado en sus piernas, había llegado hace poco a Yu-Topia

—Si te digo te vas a molestar conmigo —infló los cachetes preocupado

—No podría molestarme con mi cerdito —afirmó apretándole los cachetes, eran como las 2 de la madrugada y ellos aún estaban despiertos, hablando de cualquier trivialidad

—Te diré pero será un secreto—dijo enderezándose para quedar arrodillado frente al ruso que ladeo la cabeza aún con su expresión juguetona de siempre. Yuuri le hizo una seña de que se acercara para contarle—Yuri y yo hicimos Eros

No había manera de describir cómo le sentó aquella confesión, abriendo los ojos cuando pudiese y la boca de forma mínima. Apartándose para ver al menor que estaba sonriente y feliz por haberle contado lo que hizo

—Ahora Yuri y yo somos amigos especiales igual que tu—decía inocente a más no poder abriendo los brazos en señal de absoluta impresión. Se lanzó sobre Viktor, abrazándolo fuertemente —Gracias por enseñarme a hacerlo, sino Yuri y yo no seriamos amigos especiales

En completo silencio y con la misma expresión de estar sufriendo una crisis devolvió el abrazo, apretándolo quizás un poco fuerte. Su Yuuri había hecho el amor con alguien más que no era él, para peor con quien era propenso a quitarle su lugar en el mundo del patinaje. No podía evitar sentir que básicamente Yuri estaba absorbiendo todo lo que era casi volviéndose algo mejor y ahora... No bastandole con estarse apoderando de su mundo quería apoderarse de su Yuuri

Si Yuri ya lo hizo, Jean lo había intentado, no faltaba mucho para que Chris también lo hiciera ¿qué pasaba si Yuuri los llegaba a preferir a ellos por sobre su existencia? O mucho peor... Preferir a Yuri. Ninguno se lo merecía, ninguno lo necesitaba y ninguno no le iba a querer como él, Yuuri no podía irse con ninguno de ellos, ni con nadie

Aunque sonara como un pensamiento egoísta... Podría considerarse dentro del Ágape como su mente dejaría las inhibiciones, moralidad y cordura en un lugar muy lejano

Notas finales:

Vy menya iskushayet tozhe, i ya ne sovsem nevinnyy:Me estas tentando demasiado y no soy precisamente inocente

Y asi finaliza mi maldad por esta semana :v la proxima viene el maldito final *golpeando el escritorio* llevo llorando dos putos siglos por el dinal, el desgraciado final que me esta doliendo mas que nada en esta putah vida </3


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