Desde ese día se podría decir que Zero había estado evitando a los dos vampiros, no muy seguro de cómo actuar con ellos, aun recordaba que el primer día después del cumpleaños de Cross Tsubaki le había dado una cachetada, que sabía se merecía, pero le había ordenado a Sayori no tomar represalias, era algo que tenía que solucionar por su cuenta.
Aunque lo primero era hablar con Alucard, una misión casi imposible, ya que si Zero estaba evadiendo a los mayores, el europeo también evitaba en todo momento al menor, pero esa situación no podía ser algo eterna, y menos cuando la transformación de Ichiru estaba cerca, después de todo, lo juntarían con el otro hombre lobo encontrado por Kaname, claro que ambos estarían en jaulas separadas, pero Zero esperaba que la presencia de un semejante ayudara a Ichiru un poco.
-No deberías preocuparte tanto-
Oír la voz de Sayori le saco de sus cavilaciones, miro las hojas que tenía en mano y solo cerro los ojos frustrado, no había podido concentrarse de manera correcta, pero agradecía que seguía sin haber algún tipo de ataque, sabía que eso no era normal, y seguramente más problemas vendrían por delante, pero ahora mismo no tenía la cabeza para pensar en todos esos problemas.
-Es más fácil decirlo que hacerlo-
-Me imagino, pero ahora mismo tu prioridad es tu hermano, nada más, si tú y Alucard quieren hablar, encontraran la manera-
-…- desvió la mirada a su escritorio antes de levantar de nuevo la cara y sonreír levemente -supongo tienes razón, lamento si tu relación con Tsubaki se complicó por mi culpa-
-Está bien, creo que entiende que los tres son culpables, tu por engañarlo, Kaname por acercarte a ti aun con cuando sabía que tenías algo con Alucard y Alucard, sé que no quieres oírlo, pero te había dejado de lado, y lo sabes-
Zero solo suspiro, y decidió que no tenía sentido seguir con esa platica, lo que en verdad necesitaba hacer era ver si Ichiru ya estaba preparado, sabía que Takuma había hablado con él acerca de eso, y el acercamiento de ambos era una ventaja, Ichiru se sentía cómodo en la academia y no parecía sospechar que era vigilado por los demás.
Pero era tiempo de dejar todo sentimiento atrás, se había prometido que la única persona por la que vería además de el mismo seria Cross y Yagari, ellos eran sus prioridades y después venían Takuma, Rima, Shiki, Sayori, Kaito.
Alucard nunca había sido así, sabía que podía protegerse solo y que sería un golpe a su orgullo ser tomado como algo que proteger, igual que Tsubaki, puede que esa fuera la razón de algunas peleas, la dificultad para mostrar que tan importante eran para el otro sin miedo a herir su orgullo, y eso era algo que no sucedía con Kaname, ambos habían destruido y construido su orgullo tantas veces que. Sacudió su cabeza, tenía que pensar en frio.
Así que cuando llego y vio a su hermano platicando tranquilamente con Takuma y no sintió remordimiento alguno por interrumpir supo que todo estaba bien, y la sonrisa de Sayori a su lado se lo confirmo.
-Supongo que Takuma ya te explico un poco lo que haremos mañana, cierto?-
-Así que, con otro hombre lobo?- el tono preocupado de su gemelo le saco una sonrisa.
-Es seguro, ambos estarán separados, además, ninguno tiene edad para pelear por el liderazgo aun, así que todo estará bien-
No sabía si eso había logrado tranquilizar de todo a Ichiru, pero no había nada más por hacer, así que termino por darle indicaciones al vampiro, ya que sería el quien lo acompañaría a refugio bajo tierra, mientras que Zero, Cross, Yagari, Alucard y Kaname estarían vigilando el proceso, Sayori junto a Tsubaki ayudarían a trasladar al otro hombre lobo a la celda vecina.
El día siguiente llego demasiado rápido para el gusto de todos, pero Ichiru intento no mostrar algún signo de miedo, entendía que todo esto era por el bien de los demás y el suyo propio, pero no le gustaba la idea de quedar solo con la compañía de un extraño.
Aun así, termino por aceptar su destino y cuando Takuma llego por él, Ichiru ya podía mantener el control de sus emociones, de manera que logro evitar ruborizarse cuando el vampiro le tomo de la mano, esposándolo y jalándolo, cuidando que no escapara.
Le sorprendió ver que no era el primero, el otro hombre lobo ya estaba ahí dentro, y solo miraba a todos con desconfianza, pero cuando sus ojos se encontraron, la curiosidad no pudo con él y se acercó lentamente, ambos moviendo un poco la nariz tratando de captar más olor, y terminar por gruñir, en definitiva no se agradaban.
-Entra Ichiru, estaremos aquí hasta que la transformación se complete-
Fue hasta que la voz de Zero se dejó oír, que salió del trance en el que estaba, y mirando como su gemelo estaba cerca de Cross, pero lejos de cualquiera de los purasangres no pudo evitar reír, pero obedeció y entro lentamente a la celda, no pudo reprimir un escalofrió cuando esta se cerró, y se dejó caer al piso, sin mirar a nadie.
Tuvieron que transcurrir horas hasta que la luna empezó a dejarse ver, y solo en ese momento gruñidos empezaron a oírse en todo el lugar, mientras que ambos cuerpos se tensaban y relajaban exageradamente, una y otra vez el movimiento se repetía, hasta que el proceso estuvo completo y un lobo plateado junto a uno gris estaban ahí presentes, mirándose por la reja que estaba en medio de las jaulas, gruñendo, pero también olisqueando y buscando como salir, pero las quemaduras que recibían al chocar contra las rejas les hicieron rendirse, ambos lamieron sus narices y se echaron al suelo, aburridos.
-Ichiru es muy lindo- un gruñido se dejó oír -vamos, no puedes negar eso-
Zero decidió ignorar que Takuma parecía estar hablando con su hermano siendo lobo y en su lugar camino fuera de ahí, no tenía nada más que hacer.
-Tenemos que hablar-
O tal vez si, miro a Alucard y asintió, para continuar caminando, lo harían en su oficina, no quería alterar a los hombres lobo con sus auras, así que era mejor alejarse.
-Les encargo el resto- todos los demás asintieron, menos Kaname que se paró a su lado.
-Yo también voy, es algo que nos incumbe a los tres-
Zero asintió, y salió de ahí seguido por los otros dos, mientras, Ichiru soltaba un aullido lastimero, comprendiendo el dolor de su gemelo.