Una semana después, el funeral de Roger había sido para los aurores algo muy doloroso, el hombre había tenido una muerte muy cruel. Luego del entierro del auror, la familia de este recibía mensajes y vociferadores de odio por parte de magos desconocidos quienes se alegraban de la muerte del hombre. Lentamente los actos de odio se volvían una guerra
Los estudiantes rebuscaban sus trajes de baño, estaban ilusionados por salir de los muros de la escuela. Las “Vacaciones” se iban a dividir en dos fines de semanas, el primero para los estudiantes de sexto año y el segundo para los estudiantes de último año. Los aurores, profesores y Dumbledore se reunieron en la oficina del director.
-Buena idea- dijo Tom sorprendido –los estudiantes tendrán que usar trajes de baños, así si tienen algún tatuaje podremos encontrarlo-
-Podrían maquillarse- Si fueron capaces de volverse seguidores del mago oscuro, serán capaces de ocultar cualquier tatuaje- dijo Severus muy serio.
-Es cierto, Severus, debemos encontrar la forma de solucionar eso-dijo Kingsley.
-Preparare una poción, les hare creer que es bloqueador solar, y claro, cualquier tatuaje que tengan aparecerá a la luz de todos- contesto Tom
Severus cerros su ojos, se sentó en una silla, había tenido un pequeño mareo, no había podido dormir la noche anterior, en sus sueños aquella figura oscura, lo había amarrado de pies y manos con unas cadenas, mientras él veía como aquella cosa, cortaba la piel de su Mamá como si fuera mantequilla.
-Kingsley, Minerva, Horace y Yo, acompañaremos al primer grupo- dijo Dumbledore. –Severus, debes quedarte aquí en mi ausencia, los aurores enviaran cada pista que logren encontrar sobre la ubicación del mago oscuro, se cree que aún está débil, es el momento adecuado para atraparlo, pero debemos ser sigilosos, para que no huya como una mosca al sentir el más mínimo acercamiento- dijo Albus Dumbledore.
-Me quedare a investigar con Tom, no te preocupes Albus, esto terminara pronto, sin la necesidad de una guerra- dijo Severus.
-Eso esperamos- dijo minerva muy preocupada.
Los profesores y aurores regresaban a sus clases, Tom se acercó al profesor Snape al ver su palidez; decidió invitarlo a almorzar en la torre de astronomía, algo que el profesor veía como una cita y claramente se negó al principio pero al final acepto con el fin de intercambiar información con Tom. Ambos magos subieron a la torre, en donde, al parecer Tom tenía todo listo.
-Así que ya sabías que vendríamos- dijo Severus al ver la mesa preparada para dos personas, y con una vela en medio de los platos de comida.
-No es nada formal, solo quería conocer al profesor más “Temido” de Hogwarts- Tom se sonrió –pero no es mi intención ofenderte-
-Claro que no me ofendes, prefiero que me teman, yo no soy de aquellos profesores que miman a sus estudiantes como si fueran bebés, yo forjo magos y brujas, no niños-
-¿Esa ideología se aplica en Lily Evans? ¿Hay algo entre tú y esa jovencita?-
Severus sonrió –Claro que no, no hay nada romántico o Sexual entre ella y yo. Yo veo a Lily como mi hija, la veo y me veo a mí mismo, ella es una bruja nacida de Muggles, yo soy un mestizo, los demás magos y brujas nos ven como seres inferiores. Lily será una gran bruja, ella les demostrara a todos que no necesitas tener “Sangre limpia” para ser una gran bruja o mago-
-Debe ser una gran chica, esperemos que no caiga en las manos de la oscuridad-
-¡Claro que no! Lily tiene un corazón demasiado puro para ser una mortifago. Aunque en estos días, he visto que tiene malas compañías alrededor de ella, tengo miedo de que alguien la dañe-
-¿De quién sospechas?-
-De los estudiantes de mi casa. En Slytherin solamente importa tu estatus, el mismo fundador, Salazar odiaba a los mestizos, y nacidos de muggle, yo mismo sufrí en Slytherin. Mis estudiantes creen en la pureza de la sangre, y hace días vi a uno de mis mejores estudiantes con una venda en el brazo izquierdo, temo que sea un seguidor del mago oscuro, temo que se vuelvan personas malas-
Tom vio con dulzura a Severus –Ya pronto todo terminara, no te preocupes- Severus apenas sonrió, devoro el trozo de pollo asado que tenía en su plato, moría de hambre –Te he visto muy pálido estos días ¿Te sientes mal?-
-He tenido pesadillas, horribles pesadillas, hay una cosa, un ser que usa una túnica negra, una máscara de porcelana blanca y tiene ojos amarillos, me tortura con pesadillas horribles-
La cara de Tom palideció también –Sev, solo los magos más poderosos tienen la capacidad de entrar a la mente de otras personas, pero solo utilizan este don para ver los recuerdos de esas personas, solo los magos tenebrosos lo usan para torturar a otros-
-¿Quiere decir…?-
-Tu puedes ser el siguientes- Tom estaba preocupado, sin poder evitarlo, coloco su mano sobre la de Severus –No te preocupes, yo te protegeré- En ese instante, Sirius y James entraron por la puerta, Severus aparto su mano rápidamente.
-¿Qué diablos hacen aquí? ¿No tienen clases?- dijo Severus.
-Sí, tenemos clases con usted, el profesor Shacklebot nos dijo que estarían aquí…Almorzando- dijo Sirius. James en cambio se había puesto algo molesto al ver a los profesores juntos en una mesa para dos. Severus se despidió de Tom y le agradeció por la comida. El profesor regreso a su aula con sus dos estudiantes, Sirius vio a su amigo que tenía una cara de molestia demasiado obvia.
Apenas entro al salón, Severus pido a los estudiantes que le dieran los pergaminos en los cuales estaban por escrito el progreso de las pociones, Llamo a cada estudiante por lista y cada uno de ellos había hecho el trabajo a excepción de uno.
-James Potter dime en el nombre de merlín ¿Por qué no preparaste tu pergamino? Y no quiero una de tus bobas excusas-
-Le diré lo que no hice profesor, no tuve una cita en la torre de astronomía- Severus tomo eso como un insulto, rápidamente se levantó de su silla, tomo a James Potter de su oreja izquierda y lo llevo a detención. El joven tenía la oreja roja, gracias a los dedos del profesor, Severus empujo a James al aula y cerró la puerta con su varita.
-Escúchame bien pequeña acromantula, te diré esto solamente una vez, mis asuntos personales no son tu problema y es mejor que te comportes o hare que faltes a tus prácticas de quidditch, o no presentes a ningún partido todo el año- Severus le dio a James un trozo de tiza y le hizo escribir en un pizarrón NO DEBO METERME EN LOS ASUNTOS DEL PROFESOR SNAPE.
El profesor volvió al aula, Snape estaba tan molesto que no noto que algunos de sus alumnos de Slytherin veían mal a Sirius Black. Remus le envió una nota a su amigo -¿Qué les hiciste a esas víboras? Te ven como un pato en temporada de caza-
-Nada, fue por lo del profesor Snape, están molestos por el hechizo que le envié por error- escribió Sirius.
Remus podía ver que los Slytherin tenían los ojos sobre Sirius, su lobo interno lo sentía. La clase pasó en general en silencio, a Severus no le gustaba que hicieran ruido en su clase. Apenas salieron, los tres Gryffindor salieron a buscar a su amigo, entraron a un closet vacío, sacaron su mapa que rápidamente les indico donde estaba James. Los tres amigos fueron primero a buscar el manto de invisibilidad de James, con el fin de evitar a Severus. En el camino de regreso, Lily le pido a Peter que la acompañara a la biblioteca para ayudarla en la tarea de pociones, Peter acepto.
James seguía escribiendo en el pizarrón, cuando la puerta se abrió. Debajo del manto salieron Remus y Sirius.
-¿Qué te paso? ¿Por qué le dijiste eso a Snivellus?- pregunto Sirius molesto a James.
James soltó la tiza –Es absurdo, él está en una cita con el profesor Ryddle y se molesta por que los interrumpimos-
-No, no es cierto, debiste hacer la tarea, y sabes que, revise tus pergaminos, y si la habías hecho ¿Por qué solamente no lo entregaste?- reclamo Sirius.
-Es que… es que…- James se quedó pensativo – Es que no estaba…bien…hecho-
-Dejen de molestar a Snape, los de Slytherin se lo están tomando a pecho- dijo Remus –He visto como nos miran, y creo que le hicieron daño a Peter, él tenía una venda en su brazo izquierdo-
-Él no nos dijo nada- dijo Sirius.-tal vez lo intimidan-
-¿Dónde está Peter?- pregunto James.
-Fue a estudiar con Lily, ella te manda Saludos- contesto Sirius.
James empezó a escribir nuevamente, aquella tarde los merodeadores se quedaron bromeando en el aula mientras James terminaba de escribir. –Hey Moony, ¿qué te parece unos bocadillos de la cocina?- dijo Sirius.
-¿Es una orden, petición o pregunta?- pregunto Remus. El lobo se levantó de su silla, se fue a la cocina a buscar algo que comer para sus amigos. Los pasillos de Hogwarts estaban vacíos, y eran muy terroríficos. Remus caminaba con una canasta de Sándwiches, le temblaban las piernas, su lobo interno sentía que algo lo buscaba. Remus se dio la vuelta y vio como una sombra, tomaba la forma de algo, Remus soltó los sándwiches y se echó a correr.
Corrió hasta llegar al aula, rápidamente entro y cerró la puerta, el lobo estaba agitado, por el susto y por el camino que tuvo que correr. -¡¿Mooney?! ¡¿Qué te paso?!- pregunto Sirius al ver a su amigo.
-¡Hay algo haya afuera!- grito Remus. James y Sirius traían sus varitas, Sirius aparto a Remus de la puerta.
-Mejor quédate aquí- susurro Sirius. Los chicos salieron del aula de forma lenta y silenciosa, al salir no había nada ni a la izquierda, ni a la derecha del pasillo. –Aquí no hay nada…- James no pudo terminar la frase ya que un escalofrió le recorrió la espalda, un olor apestoso les llego a la nariz, las llamas de las antorchas se apagaron, dejando oscuridad total en el pasillo, de una esquina, una nube negra salía y tomo la forma femenina de una mujer desnuda, pero con cabeza de cabra, la piel extremadamente oscura, dos grandes cuernos de carnero saliendo de su frente, y ojos rojos como las llamas. Los dos magos jamás habían visto una cosa así.
-Ojos, Sirius- susurro la cosa. Empezó a tomar velocidad, James tuvo valor y grito -¡Expelliarum!- pero no funciono, en cambio aquel ser lo levanto por los aires y lo arrojo contra la pared, aquella cosa iba sobre Sirius. El mago estaba inmóvil, sentía su muerte venir, en ese momento Severus apareció, al ver la cosa que se abalanzaba sobres Sirius, saco su varita y grito –¡Expecto Patronus!- un cierva de Luz se formó, y emitió una onda de Luz que deshizo al monstruo al instante.
Sirius cayo desmayado, mientras James estaba agonizando de dolor. Remus salió del aula y se asustó al ver a sus amigos en el suelo. Severus rápidamente los llevo a la enfermería. Severus, Albus, Kingsley y Minerva se volvieron a reunir en la oficina de Albus.
-Una Lamia- Dijo Severus –Yo lo vi, estaba a punto de arrancarles los ojos a Sirius Black-
-Las lamias no pueden atacar a menos que sean conjuradas y controladas. Y solo un mago tenebroso de al menos cien años puede hacer ambas cosas- dijo Tom.
-Es obvio, ya está aquí, está utilizando a los estudiantes, ¿Pero por qué Sirius Black?- dijo Kingsley.
-James Potter estaba bajo detención, sus amigos, deduzco fueron a acompañarlo, pero igual Alguien debe preguntárselo, la lamia busca una persona en específico , y había escogido a Black, será mejor que lo hagas tú, Albus- dijo Severus.
-No, yo lo hare.- dijo Tom, Albus debe irse con los estudiantes a la playa, no levantemos sospechas-
Los magos no pudieron dormir esa noche, Remus tuvo que irse a su habitación en contra de su voluntad, mientras James y Sirius pasaron la noche en la enfermería. Al día siguiente los profesores partieron con los estudiantes de Sexto de año, usando un traslador, que eran varias pequeñas mesas redondas que llevaron a los grupos hasta Mallorca.
Mientras Tom estaba en la enfermería, Remus ya estaba ahí acompañando a Sirius, mientras Lily y Peter estaban a lado de James conversando, la joven le daba sopa a su novio, algo que le pareció conmovedor a Poppy.
-Sirius, espero que te encuentres mejor, no es fácil ver a una Lamia y vivir para contarlo- dijo Tom.
-Gracias profesor, estoy bien…-
-Fueron los de Slytherin, ellos fueron, estaban molestos con Sirius porque el accidentalmente hechizo a Snape- dijo molesto Remus.
-Remus, eso es imposible, La lamia es un ser muy poderoso para ser convocado por un alumno, esto debe ser obra de algún mago muy mayor, ¿Tienes en mente a Alguien?-
-Solo mi madre, me hecho de casa hace unos meses, esto viviendo con James-
-Lo siento, no quería entrometerme…-
-No claro que no, ella cree en la supremacía de la sangre pura y yo no creo en eso, incluso me borro del árbol familiar-
-Está bien pensar así, los crímenes de odio empiezan con esa forma de pensar, será mejor que te deje descansar, si recuerdas algo, házmelo saber- Tom se fue a buscar a Severus, apenas paso por la cama de James, este le hizo una cara de desprecio. Severus estaba en la oficina de Albus, encargándose de todos los asuntos del director. Tom abrió la puerta y vio al hombre sentado en la silla del director.
-Te ves bien Severus, debería ser el director de esta escuela- dijo Tom de forma coqueta.
-No gracias, tengo suficiente con mis propios alumnos, ¿Encontraste algo?-
-Si, al parecer, Sirius te envió un hechizo por error, Remus Lupin dice que los chicos de Slytherin, querían vengarse en tu nombre, me parece absurdo, ninguno de ellos podrían controlar a una Lamia-
Severus estaba sorprendido, pero a la misma vez no podía creerle a los merodeadores, en especial Remus Lupin quien parecía colegiala enamorada al ver a Sirius Black.-Yo hablare con Regulus y Lily, sacare la información que necesito-
-Regulus está en Mallorca ahora mismo con Kingsley, si es un mago tenebroso lo sabremos apenas se aplique el bloqueador- Severus no alguien de muchas expresiones, pero solo escuchar los nombres de Lily y Regulus lo ponían tenso.
-Tengo que irme, voy a hablar con Lily- dijo Severus, levantándose de su escritorio.
-Sev, recuerda que no debemos decirle ni una palabra sobre esto, ella podría…-
-Ella nunca sería una de ellos- contesto Severus, tal y como su Tom lo hubiese insultado.
Severus fue a la torre de astronomía, ahí Lily lo esperaba.
-Profesor Snape ¿Qué sucede? ¿Me llamo por lo de James?- pregunto Lily nerviosa.
-Querida, quiero preguntarte algo pero debes ser muy honesta conmigo dime ¿Tienes algo que ver con Bellatrix, o Regulus o alguien que sea supremacista de la sangre pura?-
-Claro que no, yo nunca me juntaría con esa clase de personas, ¿Por qué me pregunta eso?-
Severus vio los ojos verdes de Lily, sus ojos no lo engañaban –Yo te vi con Narcissa, Alecto y Bellatrix, ellas no son personas como tú, ellas odian a las personas como tú-
Lily junto sus manos –Profesor, no piense nada malo, es solo que… Ellas… Ellas me pagan por hacer sus tareas de Runas antiguas, nosotras llevamos esa clase en común, ellas no entienden nada, y yo necesito dinero para mis útiles escolares…- Lily estaba a punto de llorar, Severus rápidamente la abrazo.
-Lo siento, lo siento, tanto querida, yo no quería hacerte llorar-
-No puedo creer que haya desconfiado de mí-
-Lily, lo siento pero hay seguidores…- Severus se calló rápidamente.
-¿Seguidores de qué? Profesor Snape ¿No confía en mí? – pregunto Preocupada Lily.
Severus vio a la pelirroja y la veía tal como si ella fuera su hija –Hay un mago oscuro que quiere ganar seguidores en Hogwarts, queremos encontrarlos para que nos lleven al mago oscuro que ahora se encuentra débil-
Lily estaba sorprendida -¿Ellos atacaron a James y Sirius? ¿Estamos en peligro?-
-Nunca dejaría que alguien te dañara, no te preocupes, pronto terminara todo- Severus y Lily se abrazaron.
Mientras en Mallorca, Kingsley obligo a todos los estudiantes de sexto año a aplicarse el bloqueador solar, Tom le dijo a los profesores que antes de medianoche, los tatuajes saldrían a la luz.
Los estudiantes, se metían al mar cristalino, algunos hacían castillos de arena, otros simplemente tomaban el sol, Los profesores daban rondas de vigilancia entre los estudiantes.
-Profesor Kingsley, ¿podría por favor aplicarme un poco de bloqueador en la espalda?- dijo Andrómeda Black.
-No, que lo haga mejor Regulus, él es tu primo-
-está bien, este bloqueador es demasiado espeso ¿De dónde lo consiguió?-
-Del… Del Tíbet- contesto el hombre.
Esa noche durante la cena, nada había pasado, no lograron encontrar ningún tatuaje, los estudiantes cenaban en el salón del hotel, mientras que los profesores estaban al pendiente de todo. Luego de la cena los estudiantes volvieron a sus habitaciones.
Tom rondaba los pasillos de Hogwarts, en busca de otra posible Lamia, Tom admira a Severus, era un mago poderoso, e inteligente, pero sentía que Lily era algo negativo en su vida, Tom sonreía al pensar en Severus y se preguntaba si el profesor le daría una oportunidad, Tom escucho unos pasos, se escondió entre las sombras del castillo. Para su sorpresa eran Narcissa y Lily. Hasta donde Sabia, Lily salía con James Potter y Narcissa estaba comprometida con Lucius Malfoy. Las dos jóvenes estaban muy cerca una de otra, la quijada casi se le cae a Tom, al ver que las dos jóvenes empezaron a besarse, y no un beso normal, sino un beso apasionado.
Tom se alejó para dejar a las jóvenes solas. Mientras Albus y Kingsley rondaban en el hotel.
-No funciono, Tom se equivocó, no apareció ningún tatuaje- dijo Kingsley.
-Debemos tener paciencia- dijo Albus,- esta noche se siente muy oscura-
A las once de la noche, mientras estaban en el balcón, los aurores vieron una luz verde salir entre los arboles del pequeño bosque cerca del hotel, ambos se transportaron rápidamente, al adentrarse escucharon voces, entre los arbustos, Antonin, Regulus, Alecto, Barty crouch Jr. Estaban junto a un traslador, y el cuerpo del cuidador tirado en una esquina. Los 4vjovenes poseían la marca tenebrosa.
-¡Alto!- Grito Kingsley, los 4 jóvenes se alertarlo y rápidamente sacaron sus varitas – ¡Deténganse! ¡Están bajo arresto!- Kingsley vio el cuerpo del hombre y vio que había sido víctima de un avada kedavra.
-¿Por qué? ¿Por qué han matado a este hombre?- pregunto Albus, decepcionado de saber que sus estudiantes eran mortifagos.
-Pensaba regresarnos al hotel, que idiota fue- dijo Barty.
-Son unos tontos, el mago oscuro nunca ganara, su corazón tiene demasiada maldad, ustedes serán las victimas- dijo Albus
Los 4 chicos sonrieron –No seas tonto, nuestra gente será limpia nuevamente, luego de exterminar a los sangre sucia, seguirán los muggle- dijo Barty.
-¡Avada Kedavra!- grito Regulus, enviando la maldición a Kingsley pero Albus se interpuso, perdiendo la vida al instante. Albus cayó en los brazos del auror, los 4 chicos huyeron en el traslador. Kingsley estaba en shock, debía haber sabido que esos ya no eran niños, eran asesinos.