Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Siempre... por FruttiKouki

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Hola! Bueno, primeramente, me alegra mucho que haya sido bien recibido este nuevo Fanfic. 

Muchisimas gracias por el apoyo y los reviews que me dejaron. Por cierto, al final daré unas cuantas explicaciones. 

¡Nos leemos abajo!

Mis ojos te siguen en cada paso que das.
Observan los frágiles aleteos que tus pequeñas alas revolotean;
No eres completamente feliz,
Pero aceptaste tu realidad, sin más.

La primera vez que miré a Furihata mi cerebro lo catalogó como un chico del montón, con él es sencillo y normal que suceda eso. Poco tiempo después noté que era diferente, que lo que le distinguía de los demás no era algo que se pudiera conocer a simple vista; como Kagami con su cabello rojo y gran altura. Sus ojos eran universos que deseaba explorar sin detenerme, que quería guardar solo para mí.

Solo yo para él.

Solo él para mí.

Mis ojos casi se inundaban en lágrimas de felicidad cuando creí que aceptó mis sentimientos, lágrimas que él lloró por mí. Lo cuidé, lo besé, lo amé. Siempre con la atención sobre él.

Aun, a pesar, de que él no me quería cerca, pero a la vez sí.

…..

Las sonrisas no paran, sobre todo en los labios de Furihata. Yo lo miro mientras estamos en el transporte que ha conseguido para las salidas del equipo al inicio de este año escolar, nunca he podido comprender cómo es que logra ese tipo de cosas. Su sonrisa resplandeciente parece brillar más que las de los otros, más que la de Kagami cuando habla de Aomine, me preguntó si para Aomine también le parecerá la mejor sonrisa la de Kagami.

- ¡Deberíamos ir a festejar! – opina Kouki, y los demás asienten en total acuerdo. Yo tengo tarea pendiente, pero puedo posponerla para lograr pasar más tiempo con él. – Fukuda, ¿nos puedes decir cuánto tenemos en el fondo del club?

Fukuda se había vuelto el tesorero casi el mismo día que Furihata fue nombrado capitán. Por eso mismo me desagradaba que pasarán tanto tiempo juntos.

Fukuda asiente y saca una pequeña libreta de su mochila, parece ser la de las cuentas. – Tenemos el suficiente dinero como para comer en un restaurante familiar. – Avisó haciendo que todos sonriéramos, aunque yo lo hago porque me agrada ver a Kouki tan feliz, tan imparable, tan imposible.

- En ese caso, ¿algún lugar al que quieran ir? – pregunta el capitán mirando a todos. Kagami levanta la mano, desde hace un par de días que ha dejado de evitar a Furihata por la vergüenza que sentía al haberle declarado su relación, Kouki lo señala para darle la palabra. – Kagami.

- Vayamos al Magi – una respuesta simple y esperada de mi amigo, pero que parece satisfacer a todos en el autobús. Furihata asiente en total acuerdo y sabe que los demás también lo están, incluso yo.

Se levanta de su lugar, a un lado mío, y camina hacia el conductor. Yo lo miró y viene a mi mente la primera vez que me senté a su lado, sentí que mi corazón latía a mil por hora y mis manos sudaban. Recuerdo que me brindó una sonrisa sincera y una mirada de calma, le devolví la sonrisa, o al menos eso intenté. En todo el camino no pude pensar en otra cosa que no fuera Furihata, justo como hoy en día. No le he dicho a nadie sobre mis sentimientos por nuestro capitán, pero puede que en un futuro cercano se lo cuente a Kagami, después de todo él me ha confiado muchos secretos.

Veo a Kouki acercarse cuando termina de dar instrucciones al hombre que maneja, es su hermano, pero nunca les he visto hablar demasiado; se sienta a mi lado y, aunque sigo estando nervioso como la primera vez, controlo un poco más el latir de mi corazón.

¿Por qué el corazón es más ruidoso cuando intentas que menos lata?

- Hiciste un gran trabajo hoy, Kuroko – me felicita y creo sentir mi rostro caliente. Asiento, no porque no le tomo en cuenta, sino porque siento que si abro la boca en este momento arruinaré la amistad que he logrado con él. – También Kagami ha estado genial, todos lo han sido. Me hacen sentir bien como capitán, siento que estoy haciendo bien las cosas. – Su mirada baja hasta sus manos que están en su regazo, aunque lo que dice debe ponerlo feliz, su mirada no desprende eso.

Con un pequeño temblor en la mano, tomo las suyas con una haciendo que me mire, es una suerte que estemos en el último asiento, todos se concentran en sus pláticas ignorándonos por completo. – Eres un excelente capitán, Furihata-kun. – Doy un ligero apretón en sus manos y, por alguna razón que desconozco, sus ojos que siempre me parecen tan alegres se llenan de lágrimas mientras sus labios se curvan en un mal intento de sonrisa. Mi cuerpo se tensa casi por completo cuando me rodea con sus brazos y mis nervios se disparan no dejándome pensar claramente por unos segundos. Le devuelvo el abrazo casi por inercia y él hunde su rostro en mi pecho, espero que no logré escuchar mi acelerado corazón. - ¿Qué sucede, Furihata-kun? – Él niega sin despegarse y parece tomar aire antes de separarse de mí, cosa que me molesta.

- No es nada, perdona. – Ríe con vergüenza mientras se limpia los ojos, sus mejillas están rojas y húmedas por las lágrimas derramadas, su nariz también está un poco roja y me recuerda a Rodolfo el reno. Lo miro con preocupación sin saber qué decir exactamente. Él me mira y, como si supiera que la respuesta que me ha dado no me satisface, me sonríe tímido como sólo él sabe hacerlo. – Te contaré al rato.

Yo asiento, feliz y triste, sorprendido al saber que puedo sentir a estos dos a la misma vez. Feliz porque ahora sé que él confía en mí al dejarme verlo llorar, triste porque no sé qué hacer al verlo de esta manera. Con una de mis manos le ayudo a limpiar los rastros de lágrimas que han dejado marcas en sus sonrosadas mejillas. – Está bien, hablemos al terminar. – Le miro a los ojos, aquellas hermosas estelas que titilan sin parar, y me sonríe, me sonríe con amistad, me sonríe con amor, me sonríe con ilusión.

…..

El festejo ha terminado tarde, por eso mismo decido acompañar a Furihata a casa, aun cuando él dice que no es necesario, pero yo insisto. Caminamos por la banqueta bajo la luz resplandeciente de la luna, quien nos observa risueña desde el cielo siendo acompañada por las estrellas. Nuestros pasos son lentos y concisos, no llevamos prisa, quiero mantener el mayor tiempo posible junto a él.

- ¿Me podrías decir qué paso en el autobús? – pregunto, por fin, luego de medio camino recorrido. No lo veo, pero puedo jurar que se ha tensado y tiembla, un pequeño gesto que hace cuando está nervioso.

Aminora la velocidad de su caminar y me doy cuenta de ello cuando le he dejado atrás unos tres pasos, me giro a verle, él está parado junto a un farol que le alumbra el cuerpo entero, su cabeza gacha me indica que le es difícil hablar sobre esto.

Cuando estoy a punto de retirar lo dicho él apuñala las manos para comenzar a hablar. – Mi mamá murió hace poco. – Es apenas un susurro, una pequeña ventisca cuando la noticia conlleva un huracán.

Me quedo sin habla, siempre me deja de ese modo, pero ahora es completamente distinto. Me acerco con lentitud y le tomo de los brazos, me agacho un poco para verle el rostro, o al menos intentar hacerlo. – Lo siento mucho, no sabía. – Él sonríe débilmente, no queriendo en verdad, el suelo comienza a humedecerse con pequeñas gotas que pienso que son de lluvia, y que al poco tiempo me doy que son las lágrimas que salen de los ojos de Kouki.

- Es obvio que no sabrías – me dice de manera amarga, nunca lo había escuchado de ese modo, mi cuerpo se tensa del mismo modo en el que el de Kouki lo había hecho segundos antes. – Es solo que… - no lo alcanzo a mirar, pero estoy seguro que se está mordiendo el labio en ese momento, la preocupación me invade el pecho dejándome inquieto, el cuerpo debajo de la palma de mis manos comienza a temblar y sin pensarlo demasiado abrazo a Furihata pegándolo a mi pecho.

- Perdón, Furihata-kun. Lo siento. – comienzo a disculparme una y otra vez con él, sé que no sirve de nada decirle eso, pero me siento culpable por haberle hecho recordar tal acontecimiento doloroso. Con mi mano derecha sostengo su cabeza para que se mantenga pegada a mi hombro, con la izquierda sostengo su espalda que comienza a temblar conforme a sus sollozos ahogados.

Mi pecho duele de manera indescriptible, aunque estoy seguro que a Furihata le duele aún más. Kouki se deja caer en mis brazos como si comenzará romperse la fortaleza que había guardado desde la muerte de su madre. Ambos bajamos al suelo con la luz del farol iluminándonos, no me importa que alguien nos vea, para mí lo más importante es que Furihata paré de llorar.

Sigo susurrando en su oído mi pésame, sigo abrazándolo sin permitir que se aleje, lo quiero tener cerca de mí todo el tiempo posible, quiero evitar que salga lastimado, quiero evitar que derrame más lágrimas, pero me es imposible.

Es entonces que me doy cuenta, no quiero alejarme de él, no quiero que sigamos siendo solo amigos, pero, aunque hay muchas cosas que quiero y no quiero, nada de eso importa mientras él siga pensando que no siento nada por él.

- Furihata-kun – le llamo en voz baja, susurrante, suavizada. Él ha parado de llorar y ahora solo logro escuchar sus pequeños gemiditos de dolor, pero eso no me detiene. – Furihata-kun – le vuelvo a hablar logrando captar su atención en mí, y deseo que así sea siempre, que solo me vea a mí. – Te amo. – declaro con toda la dulzura que poseo, con aquel amor infinito que he profesado con mi almohada en solitud.

Kouki abre los ojos en sorpresa y, si pudiera, reiría sino fuera por la situación en la que nos encontramos. Parece incrédulo, impactado por mis palabras que inclusive para mí han sido sorpresivas, sus mejillas están más rojas que horas atrás en el camión. Con mis manos tomo su rostro entre mis manos y limpio con delicadeza aquellas lindas cerezas que se le han coloreado, mis dedos no tardan en humedecerse por las lágrimas, pero poco me importa. Espero paciente su respuesta, aunque tengo miedo de recibir un rechazo por su parte.

Su manzana en la garganta se mueve cuando traga saliva, seguramente nervioso o incomodo por mis palabras. – Yo… - titubea bajo mi toque, pero aun así no lo suelto, su rostro está caliente, excelente para el frío que comienza a invadir la noche. – No creo que sea correcto… - sus palabras se clavan en mi corazón como dagas recién afiladas y sonrío tristemente dejando que el dolor y la frustración invadan mi rostro para demostrarlo. – Es que… si fuéramos algo más… No creo poder seguir después de la preparatoria. – Mi dolor es cambiado por desconcierto en segundos, no comprendo del todo sus palabras, pero estoy dispuesto a aferrarme a cualquier cosa con tal de tenerlo solo para mí.

- Entonces, seámoslo hasta la graduación. – No me importa sonar desesperado, quiero estar a su lado no importa cómo o porqué. Kouki me observa por varios segundos, intentando comprender lo que le he dicho, ¿está él dispuesto a comenzar algo más? No lo sé, pero si su respuesta es afirmativa… - No me alejaré hasta que tú me lo pidas.

Furihata sonríe, sus ojos no lo hacen, ellos solo desprenden la tristeza que siente en ese momento, y lo entiendo. Me acerco a sus labios, rosados y suaves, con la yema de mis dedos los acaricio lentamente disfrutando del tacto, luego dejo que los míos se posen sobre los de él, es tan mágico el simple hecho de rozarlos, tan especial. Kouki me devuelve el beso, lento, pausado, dejando que sea yo quien tome la iniciativa y el mando, dejando en mis manos su cuerpo y fe, creo que inclusive su alma si eso fuera posible, o al menos así lo siento.

Nos separamos pocos centímetros y mis ojos se conectan con los suyos. – Te amo. – Vuelvo a repetir para que esa incredulidad desaparezca de su mirada.

- Lo sé. – me responde, aunque sé que no me cree del todo, pero lo dejaré así por ahora, dejaré que me deje creer en esta pequeña mentira que he formado sobre nuestra relación, permitiré que el lloré  en mis brazos hasta que él mismo me aleje. 

Notas finales:

Buneo, primero que nada debo aclarar que la historia comenzará cuando comience su relación, es por eso que no hay tanta batalla en eso de comenzar a salir. Es decir que... aquí viene lo bueno, o más bien en el proximo capítulo (xD).

Les invito a dejar su review para saber qué es lo que opinan al respecto del capítulo de hoy. Lo esperare con ansias ya que es la primera vez que escribo en primera persona (-nervios, nervios- >u<). 

Nos vemos en el siguiente capítulo OwO)/" 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).