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39. Un Frío día de Invierno (25) por dayanstyle

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Jongin paseaba en su oficina tratando de descifrar su sueño. Había visto un elf, el mismo elf que sabía que era la pareja de Eric, el mismo elf que hizo que Jongin enviara a Eric al Centro recreativo el día que el destino podía intervenir.

Solo que esta vez el elf estaba acostado como si estuviera muerto.

Jongin sabía que sus sueños tenían significado, no había nada ordinario en esos sueños.

El sueño significaba algo, pero no podía imaginar qué. ¿No estaba el elf en casa de los Moon? ¿No había encontrado Eric a su pareja el día que fue al Centro recreativo?

Golpeando el escritorio con su puño, Jongin gruñó. No importa qué problemas tuviera con los osos, no dejaría que muriera un hombre inocente.

La parte que más le intrigaba era la visión del niño. Jongin no tenía idea de por qué un niño estaba atado a todo esto, pero si el niño estaba en peligro, él encontraría al responsable y lo cortaría del cuello al ombligo.

Jongin tomó el teléfono y marcó. Veía la pared mientras sentía una ira que hacía mucho tiempo no sentía en su interior. Iba a encontrar respuestas y al responsable de lastimar al elf y al niño.

Y cuando lo hiciera el hijo de perra iba a morir.

 

 

 

Sorpresivamente, Eric no había cambiado y reducido su casa a escombros. Solo estaba parado ahí en una nube de confusión viendo la mancha de sangre en la alfombra.

Si, su corazón ya no latía, pero eso estaba bien. Estaba bien porque Hyesung no estaba ahí para decirle lo contrario.

No, Hyesung no estaba ahí, pero el olor de sangre si estaba.

 

Sabía que Hyesung no había huido porque Yoo Geun estaba abajo con sus hermanos.

Eso significaba que el líder de su tribu se lo había llevado.

 

Eric seguía viendo la sangre como si pudiera flotar de la alfombra y formar el cuerpo de Hyesung, mostrarle que su pareja realmente no se había ido.

Pero no sucedía. Y seguía ahí.

Aturdido.

 

—Pa —Hoon dijo su nombre suavemente desde el marco, como si temiera aproximarse—. Pa, tenemos que traer a Hyesung de regreso.

Eric sabía eso. Pero no podía moverse.

—Pa, Jongin está aquí. Está abajo.

 

Eric seguía ahí viendo la mancha de sangre, sintiendo como si su vida terminara. ¿Habrían matado a Hyesung? ¿Estaría muerto? ¿Su corazón volvería a latir?

 

—Necesitamos irnos. —La voz de Jongin retumbó en elcuarto, pero Eric no podía mover sus pies. Estaba asustado.

Asustado de encontrar a su pareja y ver que era demasiado tarde para salvarlo.

—¡Ahora!

 

Eric levantó la cabeza y su cuerpo entero cobró vida. Un fuerte rugido salió de su garganta cuando sintió que la sangre ahora llegaba a su cabeza.

—Eso está bien —dijo Jongin mientras se aproximaba a Eric, su cara seria mientras avanzaba hacia Eric con una sonrisa—. Mantén esa rabia. Úsala contra quien te haya robado lo que te pertenece.

Eric salió como tromba de la recámara con una sola cosa en mente. Hyesung. Tenía que encontrar a su pareja incluso a costa de su vida. Necesitaba saber que Hyesung estaría a salvo siempre. Empezó a cambiar pero Jongin lo detuvo.

—Guarda tu fuerza para la batalla.

 

Cuando sus hijos trataron de seguirlo, Jongin sacudió la cabeza, sus ojos ardían con maldad. —Quédense a proteger al niño. Tengo Centinelas rodeando la casa.

Sus hijos parecían que iban a discutir pero asintieron. Eric se apresuró a salir de la casa, listo para matar al bastardo que había sacado a Hyesung de su propia casa.

—¿Sabes quién pudo hacer esto? —Jongin preguntó subiendo a la camioneta.

Si, lo sabía. —Hyesung está huyendo del líder de la tribu de los elf, Hyun Joong.

Jongin maldijo y sacó su teléfono celular. —Chanyeol, voy tras Hyun Joong. Se robó una pareja e intenta secuestrar a un niño.

 

r13;Jongin colgó y sacó la camioneta de la entrada de la   casa de Eric.

 

El Alfa se giró hacia Eric, su tono era estoicamente seco. —Esto no cambia las cosas entre nosotros, oso. Pero nadie roba una pareja ni amenaza a un niño de mi manada.

Eric se ahogó al entenderlo. Jongin aun los consideraba de la manada, incluso aunque ahora estaban fuera. Eric tenía que admirar al lobo por eso. No había muchos hombres que pudieran hacer eso.

—Entiendo.

 

Eric se quedó en silencio tratando de imaginar por qué Hyun Joong quería a Yoo Geun con tanta urgencia. El cachorro era un inocente niño, así que ¿por qué lo cazaba hasta el punto de secuestrar al padre? Nada de eso tenía sentido.

Hyesung le había dicho que Yoo Geun era la clave para la salvación de los elves. ¿Qué significaba eso? ¿Cómo? ¿Qué sufrimiento de los elves llevaría a un hombre adulto a cazar a un niño? Eric sabía que moriría protegiendo a Hyesung y a Yoo Geun, pero quería respuestas, la razón que estaba causando todo esto en primer lugar.

¿Qué había tan especial en Yoo Geun que ahora era un Moon?

Eric estaba comenzando a frustrarse al no encontrar respuestas en su mente. Se les estaba acabando el tiempo, y no podía evitar sentir que Hyesung se deslizaba de él. Eso carcomía profundamente su interior, pero era una sensación que no se alejaba.

—Está muerto, oso.

 

Eric levantó la cabeza mientras veía a Jongin, pero el Alfa tenía compasión en su mirada.

 

—Soñé eso.

 

Eric no quería oír nada más. Se rehusaba a escuchar, se rehusaba a creer eso. No iba a perder a Hyesung cuando lo acababa de encontrar. No, el destino ya se había llevado a su amor antes. Eric se rehusaba a creer que la perra fuera tan cruel para llevarse a otro.

Esperaría, confiaba en encontrar a Hyesung y que su pareja aun respirara. No había otra opción viable en su mente.

No podía aceptar ninguna otra opción.

 

Eric estuvo malditamente cerca de saltar de la camioneta cuando entraron al territorio de los elf del bosque. Quería a su pareja de regreso. Eric no aceptaría un no como respuesta. Era su asunto y mataría a quien se interpusiera en su camino.

Se puso de pie en toda su altura, tomó de la camisa al primer hombre que vio y lo sacudió sin compasión. —¿Dónde está Hyesung?

El hombre señaló un pequeño hut de un solo piso con techo de paja. Eso era demasiado fácil. Eric no tenía un buen presentimiento sobre eso. ¿Dónde estaba Hyun Joong? ¿Por qué no se habían encontrado con más resistencia?

Vio a Jongin, el Alfa tenía la misma intrigada expresión que Eric sentía. Eric liberó al hombre y corrió hacia la construcción, pero Jongin lo detuvo antes de que se apresurara a entrar.

—Esto puede ser una trampa.

 

Podía ser, pero a Eric no le importó. Quería a Hyesung en sus brazos, gritando su nombre y viéndolo como si fuera el mundo entero para Hyesung. Eric quería oír a su pareja diciéndole papá oso  y  que  lo  reprendiera  cuando  se  comportaba  como  un imbécil.

 

Solo quería a Hyesung de regreso.

 

Eric jaló el brazo liberándose antes de atravesar la puerta. Inclinó la cabeza cuando vio a Hyesung acostado en la cama, inconsciente. No se veía herido. Eric acortó la distancia y jaló a Hyesung a sus brazos.

Gruñó cuando vio los moretones en la cara de Hyesung.

 

Eric se prometió hacer que Hyun Joong pagara por manchar la hermosa piel de Hyesung.

—¿Eric? —Hyesung preguntó, pero se oyó más como un quejido.

—Está drogado —le dijo Eric a Jongin.

 

El Alfa recorrió el lugar con la mirada mientras su expresión se oscurecía. —Esto fue demasiado fácil.

Eric estaba de acuerdo mientras tomaba a Hyesung en sus brazos y lo sacaba de la casa. Ahora no había nadie a la vista. Todo el mundo se había dispersado y se habían escondido en algún lugar. Pero ¿dónde estaba Hyun Joong?

—No me gusta esto —Siwon, el Beta de Jongin, dijo mientras abría la puerta de atrás de la camioneta—. Todo el mundo corrió tan pronto ustedes dos entraron en la choza.

—¡Abajo! —Jongin gritó.

 

Todo el mundo cayó de rodillas, Eric colocó a Hyesung entre su cuerpo y la camioneta cuando la hut explotó. Escombros saltaron al cielo y una lluvia de ellos cayó, algunos golpearon la camioneta.

—Lo mataré —gritó Eric cuando se dio cuenta lo cerca que habían estado de perder la vida y de perder a Hyesung.

 

Jongin  movió la cabeza alrededor, sus colmillos totalmente extendidos. —El bebé.

 

Eric sostenía cerca a Hyesung mientras la camioneta se dirigía a toda velocidad a la casa. Podía decir que Hyesung todavía estaba atontado a causa de la que fuera la droga que Hyun Joong le administró, pero no estaba herido, aparte del moretón en su mejilla y mandíbula.

Eso hacía que su presión arterial subiera al cielo cada vez que veía a Hyesung. Eric estaba preocupado por Yoo Geun. Era solo un cachorro, incapaz de defenderse. Rezaba porque sus hijos hicieran lo correcto y defendieran al inocente bebé.

Esto tenía que ser una trampa.

 

Hyun Joong debió de haber secuestrado a Hyesung para distraerlos y así poder ir tras Yoo Geun. Eric lo veía mientras pensaba que su pareja había sido usado como un peón.

—Casi estamos ahí —dijo Jongin apretando los dientes mientras presionaba el pedal del acelerador más duro e iban más rápido.

Pero no lo suficientemente rápido para Eric.

 

Hyesung dormido movió la cabeza sobre el brazo de Eric. Eric estaba feliz de que durmiera. Ningún padre quería tratar con el horror de saber que su niño estaba en peligro. Era mejor que Hyesung durmiera durante el viaje.

El hombre no estaría bien si despertaba ahora.

 

Retirando el cabello de los ojos de Hyesung, Eric veía hacia su pareja, grabando los rasgos de Hyesung en su memoria. No estaba seguro de por qué hacía esto. Eric nunca   olvidaría nada acerca del hombre en sus brazos.

 

El hombre era inolvidable como el sol.

Eric nunca pensó encontrar a su pareja. Ni siquiera creía tener una. Pero ni en sus sueños más salvajes pensó que lucharía solo para mantenerlo con él. Eric pasó la punta de sus dedos por la suave piel de Hyesung mientras rezaba porque todo esto terminara.

Sus dedos trazaron suavemente el moretón, su corazón dolía al ver la mancha en la hermosa cara de Hyesung. Era de un fuerte púrpura y verde, que resaltaba en la pálida piel de Hyesung.

Solo quería una vida con Hyesung y su familia que no involucrara huidas, luchas, o sobresaltos cada vez que alguien tocaba la puerta. Sus nervios estaban tan alterados que no estaba seguro cuánto más podía aguantar.

El estrés estaba atrapándolo.

 

Y Eric sabía que no hacía bien las cosas cuando estaba plagado de estrés. Realmente nadie lo hacía.

 

—Yoo Geun —Hyesung murmuró mientras trataba de levantar la cabeza del brazo de Eric—. Va tras Yoo Geun.

Eric besó la frente de su pareja, deseando poder alejar el dolor de Hyesung. Pero nada retiraría la agonizante miseria cuando Hyesung descubriera que Hyun Joong había preparado que ellos se fueran para ir tras el cachorro.

Suspirando, Eric se recargó en el respaldo apoyando la cabeza, sabiendo que nada que le dijera a Hyesung ahora sería correcto en ese asunto. Su pareja seguía drogado y ellos aun iban de camino a casa.

 

Mientras recorrían kilómetros, Eric se preguntaba por qué el destino le había enviado a alguien con tanto bagaje. Vivía una vida simple, a pesar de extraños momentos a causa del mundo paranormal; pero aun así simple.

Estar emparejado con Hyesung era todo menos simple.

 

El elf debería de ser accionista en Samsonite. Pero de nuevo, también lo tenía Ryeowook. ¿Quizás su propósito era ayudar a los desesperadamente necesitados? Eric había siempre mantenido la puerta abierta para la policía cuando necesitaban su ayuda.

No tenía el valor para darle la espalda a nadie.

 

Y ahora tenía el mayor desafío con su pareja. ¿No era eso un reto? Eric sabía que la persona a la que ahora ayudaba era la persona más importante de su vida.

Viendo por la ventanilla trasera, Eric se dio cuenta que debió de haberse quedado adormilado porque faltaba solo un par de kilómetros para llegar a su rancho. La noche había caído creando sombras por todos lados, sombras que podían significan todo tipo de depredador.

Sombras que a Eric nunca le habían importado antes de ahora.

Cuando se acercaron al rancho, Eric deslizó a Hyesung de su regazo y lo colocó suavemente en el asiento. Necesitaba estar preparado para cualquier cosa que los esperara. Su oso luchaba por liberarse, luchaba por defender a la pareja de Eric y al cachorro.

También estaba preocupado porque sus niños murieran. Ellos eran grandes, fuertes, capaces de cuidarse por sí mismos, pero Eric no estaba seguro que así fuera si los hubier atacado la tribu entera de elves. Ellos no eran tan buenos.

 

Cuando llegaron al camino de tierra del rancho de Eric, pudieron ver la lucha en el jardín del frente y en un costado de la casa. La luz de la luna iluminaba la batalla en extraños tonos rojos brillantes.

Jongin frenó y salió cambiando al más grande lobo que Eric hubiera visto y se unió a la batalla.

—Quédate aquí y cuida a tu pareja —Siwon gritó sobre su hombro antes de que él también saliera de la camioneta y se fuera.

Eric jaló a Hyesung de la camioneta, ignorando al Beta. Llevó a su pareja a la casa y a la sala, dirigiéndose al sofá. Nunca se había acobardado ante una pelea y no iba a empezar ahora.

Su ira explotó cuando vio a LEO herido e inconsciente en el suelo de la sala. Dejó a Hyesung en el sofá y se arrodilló al lado de su hijo, revisando el pulso. LEO estaba en su forma de oso, sangrando de un costado.

Eric revisó el área manchada de sangre, pero quien fuera que lo había causado ahora estaba sanando, dejando detrás una pequeña línea roja fuerte. LEO estaba descansando mientras sanaba. Eric suspiró aliviado mientras se ponía de pie viendo a su hijo mayor.

Incluso aunque su hijo estaba bien, estaba en primer lugar furioso de que LEO estuviera herido. Cambió y recorrió la casa, atacando al primer elf que vio. Pero cada vez que Eric trataba de agarrar al bastardo, desaparecía y aparecía al lado de él, golpeándolo.

Ellos  perderían. Eric podía ver eso, y  él moriría defendiendo a su pareja y a sus cachorros. 

Si, mantendría a Hyesung y a sus cachorros a salvo, Eric estaba preparado. Aunque realmente quería seguir con vida.

 

Acababa de encontrar a Hyesung, y no estaba listo para morir tan pronto.

Cuando Eric luchaba por detener al elf, aparecieron refuerzos. Kiseop, un elf de las sombras que eran enemigos de los elf de los bosques, y una docena más de hombres azules vestidos con algún tipo de armadura de piel. Ellos comenzaron a luchar contra los elves del bosque, llevándoselos uno a uno.

Eric fue tras Hyun Joong e iba a alcanzar al bastardo, pero antes de poder alcanzarlo, Hyun Joong desapareció y no regresó. Eric se paró en sus patas traseras, se levantó y rugió.

Él enfrentaría al diabólico hijo de perra tarde o temprano, y cuando lo hiciera, no iba a dejar suficientes piezas para que lo identificaran.

 

continuara....


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