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Fairy Tail: No todo es un cuento de hadas. por Reflejo

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Notas del capitulo:

  He tardado bastante, pero aquí esta. Mi internet se esta portando fatal... bueno, entiendan un poco por favor... en Venezuela casi todo falla.

  De todas formas, muchas gracias por ser pasientes, aquí esta el capítulo 9.

  Disfrutenlo.

  Un nuevo día en magnolia y tengo la fe de poder conocer a la llamada Lucy que se unió al gremio hace dos días. Desperté hace más de una hora. Gray no se ha movido y no quiero despertarlo. Poluska-sama me regañó por tener el brazo destrozado; resulta que se disloco el hombro de mi brazo Izquierdo y además de eso por todos los movimientos que hizo mi brazo mientras corría y saltaba… termine por empeorar el estado del hombro. Cuando la adrenalina se esfumo de camino a casa de Poluska-sama el punzante y agudo dolor se hizo presente. Gray me regañó por descuidado y regañó a Blake por no asegurarse de mi bien estar y Blake me regañó porque a él lo regañaron. Levy se disculpó tomando toda la culpa y responsabilidad como propia puesto que, ella como Jet y Droy, miembros del equipo “shadow gear”, debían de ser ellos los que detuvieran la batalla, pero Levy también se disculpó por haberse dejado acobardar por mi actitud. Gray dejo de regañar y se tranquilizó. A fin de cuentas lo que importa es que poluska me trato y ahora estoy bien y tendré por al menos mes y medio un yeso. Descansar es mi trabajo ahora pero… por Dios… soy un intranquilo de nacimiento. Calmado, sí, es cierto, pero solo mientras tenga algo que hacer, ya hallaré algo en que mantenerme ocupado.

  Es increíblemente agradable tener a alguien que te abrace y haga sentir seguro aun cuando no hay razón para temer. Gray se mueve y me abraza un poco más fuerte apegándome más a él y coloca su rostro entre mi cuello. Su respiración es cálida y eso me sigue haciendo pensar – “Muy cálido para ser mago de hielo” – me carcajeé para mí mismo.

-          ¿Me dirás que te causa risa? – su voz ronca y su aliento cálido rosando mi cuello y mejilla fueron muy excitantes.

-          No te diré

-          No saldremos a ningún lado – sentencio en forma de castigo.

-          No… yo quiero conocer a Lucy – hice puchero sin razón pues Gray no lo vio.

-          Que lastima ¿Cierto? – pregunto acurrucándose más a mí.

  No sé qué decir para que Gray desista de su idea de no ir al gremio ni a ningún lado. Quiero conocer a Lucy, él la conoció en su momento. Esto es injusto.

-          No cocinaré – lance mi mejor excusa para lograr que Gray desista de su decisión, pero, él solo soltó dos carcajadas ahogadas.

-          Eso está mejor, así puedo abrazarte más tiempo.

-          No permitiré que me toques.

-          ¿Qué esperas para irnos? – dijo levantándose de la cama con apuros. Eso sí es gracioso.

  Nos vestimos y salimos al gremio. La verdad es que en esta ocasión no me fije casi en el recorrido. Me pase el comino hablando con Gray sobre su inquietud cuando Erza volviese y me viese con el yeso, los raspones y moretones. Él siente que ella lo puede medio matar. A pesar de que sé que a él le molesta la actitud de Erza, intenta no maldecir su carácter frente a mí, pues sabe que yo a ella la quiero demasiado, pero incluso odiando su carácter él la quiere mucho al igual que a todos en el gremio, a fin de cuentas todos somos familia y nos preocupamos por todos.

  Llegamos al gremio y todo parecía normal. Yo hablaba Cana mientras todos estaban en lo suyo. Hablábamos sobre magos poderosos en Fiore. Está claro que no podemos comparar porque nunca los hemos visto, bueno, Cana conoce un puñado de ellos y era ella quien más agregaba. Yo hablo de Yura de Lamia Scale o de los 4 principales magos que ocupan el título de “Los 4 reyes celetiales de Ishgar”, a los que jamás he visto ni he oído hablar de ellos más que ser los más fuerte. Los 4 reyes de Ishgar son de saber que están muy por encima de los 10 grandes magos santos. Cana dice que en Quatro Cerberus hay un mago llamado Bacchus Glow que demostró estar a la par de Erza. Eso me sorprendió, sin duda, pero nuestra charla termino al ver a Loki corriendo fuera del gremio, y tras echar una vista a ver si encontraba una pista del porque Loki se ha echado a correr, ya que no es normal de él salir corriendo así, es que me doy cuenta de la presencia de una rubia aparentemente hablando con Mira-san. Me disculpo con Cana y me retiro de la zona para llegar a la chica a la que, en este momento, Natsu le cae encima tras haber sido lanzado por Gray  en una de sus discusiones. Me termino de acercar y le tiendo la mano para que se levante puesto que Natsu se levantó directo a discutirse con Gray sin siquiera ofrecer su ayuda a la que parece ser la nueva miembro.

-          Hola – saludé tendiendo mi mano frente a ella, la cual, gratamente acepto la ayuda– ¿Eres Lucy?

-          Sí, hola – respondió sacudiéndose la ropa y luego despegando la vista de sus ropas para mirarme – ¿Cómo te fracturaste?

-          Oh eso, fue luchando. No es nada.

-          ¿Te fracturaste en una de las peleas dentro del gremio? – preguntó asustada mientras una gota de sudor caía de su frente.

-          OH NO, no, no... fue ayer en un combate entre gremios semanal. Sé que parecemos bestias dentro del gremio, pero no somos capaces de lastimar a uno de nosotros gravemente.

  Claro que el fondo que tengo, con las voces de Gray y Natsu empezando una nueva discusión y muy posible pelea, no alienta a nadie a creer mis palabras. Me rasque la cabeza y reí penosamente al darme cuenta que ellos no podrían respaldar mis palabras o al menos no dan confianza suficiente para creerlas.

  Veo unas manos pasarse por los costados de Lucy pero antes de que esas manos lograran su cometido, pasando desapercibidas para la rubia, hice que un cubo de tierra de 100 kilo gramos le cayese encima al dueño de esas manos. Lucy se voltea al oír el ruido a sus espaldas y me ve buscando respuestas. Blake se levanta quitándose el bloque de encima.

-          ¿¡Qué te pasa!? – pregunto a modo de queja mientras me miraba molesto.

-          Deja de querer tocar los senos.

-          ¡Pero ni son tuyos! – grito para luego llevar su mano a su barbilla y cerrar los ojos – a menos que...

  No completo de hablar cuando ya estaba detrás de mí tocando mi pecho haciéndome sonrojar de la molestia y vergüenza.

-          No, aquí solo hay tabla.

  Eso fue el colmo. Claro que me di cuenta que Gray no paraba de mirar a Blake pero no creo que quisiera matarlo más que yo.

-          ¡TARADO! – grite golpeándolo en la cabeza.

-          Creí que te dieron celos pero me decepciono no encontrar nada – en lo que comenzó a hablar fue que se vio crecerle un chichón por mi golpe.

-          Atarantado – dije suspirando con una venita en mi frente. Escuche la risa de todos y una risa en particular adelante mío.

  Despojándome de mi molestia y mirándola sorprendido. Sin duda, un miembro más de este gremio. Eso me hizo sonreír y a mi lado Blake sonríe al igual que yo, parece que pensamos igual en este instante.

  La mañana fue larga, y más desde que llego Erza llevándose a Natsu, Gray y Lucy con ella. El equipo más fuerte de Fairy tail parece haber sido conformado, y aunque no conozco la magia o poder mágico de Lucy, tengo la impresión que en ese equipo pulirá su fuerza. Le pedí ir con ellos a la misión pero solo se negó y cuando quise insistir me miro como a los demás con esa cara que transmite miedo y aquella aura oscura casi demoniaca que nos advierte peligro. Blake salió en una misión y los demás también. Macao y Wakaba tomaron una misión y Mira-san me encargo el gremio mientras ella salía a resolver unos asuntos personales. Él maestro está en una conferencia o eso creo; debe de tener trabajo puesto que constantemente tiene que informar a los de arriba (el ministerio) sobre diferentes cosas que desconozco. Por otro lado la cocina del gremio esta toda para mí.

  Arroz sofrito, pollo rostizado, puré de patatas y brócoli hervido y de beber hice jugo de melón.

-          Quisiera no tener que comer solo – Dije recordando que el gremio estaba vacío.

-          Pues si sabe cómo huele, no me molestaría comer contigo – dijo pasando por el marco que da a la cocina del gremio.

-          Mistogan…

  Comimos en silencio. Mistogan menciono que le encanto la comida y tomando en cuenta que la comida que preparé es proveniente de Arakitashia, no estaba acostumbrado a los sabores, pero que sin duda eran esplendidos. También mencionó que llevaba mucho tiempo que no comía dentro del gremio. Le pregunte curioso: ¿hace cuánto fue eso? Pero solo respondió diciendo: “El segundo día después de entrar en el gremio”.

-          Haru – Mistogan llamó mi atención – ten – tendió un sobre sobre la mesa.

  Abrí el sobre y en este había información sobre Serpent smiling. Decía que Serpent smiling se volvió un gremio oficial hace escasas dos semanas. Sus miembros fueron apresados, o al menos los que estuvieron involucrados en asaltos, robos y demás. Todos aceptaron cumplir sus condenas respectivas para empezar otra vez. Y lo último es que su sede está en el pueblo Tulli de la ciudad Margarett – ciudad en la que se halla el gremio Lamia scale –  y que una vez 2 de sus magos clase S salgan de su aprisionamiento, serán 6 magos clase S. Además de tener unos 15 magos en totalidad en sus comienzos como gremio legal. 15 magos; 6 clase S, 4 magos clase A y 5 clase B.

-          El maestro me pidió que lo investigara para ti.

-          Pero le pedí esto al maestro anoche después de llegar de casa de Poluska-sama. ¿cómo conseguiste esto tan rápido?

-          Llegue anoche y anoche mismo partí a la ciudad Margarett y Era, en donde me infiltre en el consejo mágico.

-          Gracias.

-          ¿Por qué no te has dormido por mi magia?

-          Mi magia me ayuda a contrarrestar la tuya – sonreí.

  No creo que sea buena idea, pero Mistogan no le dirá a nadie sobre mi magia. Le cuento lo que he descubierto de mi magia para saber si él me puede ayudar a entenderla un poco. Le muestro los marcas que se extienden por mi cuerpo pero solo me dijo que con ese tipo de marcas, quizá, y no está seguro, solo freed pueda ayudarme. Le dije que es un estilo de Take over, pero él me dijo que jamás había visto un Take over tan extraño. Solo me prometió que averiguara lo que pudiese a donde sea que valla. Estaba por irse pero le propuse que se quedara para el postre a lo que no se negó.

  Después de hacer pastel de chocolate y muchas galletas le pedí a Mistogan que cuidase el gremio mientras yo volvía, pues necesitaba unos libros que estaban en mi habitación en casa de Erza.

  Mirajane llego al gremio después de que yo llegase y Mistogan haberse ido con una misión tomada del tablero. Hace una semana compre un libro que trata la simbología de los círculos mágicos y enseña cómo crear los propios. “Gladiador terraqueo” no es un hechizo, es solo creado por mi magia al extender las marcas por mi cuerpo, pero si lo vuelvo un hechizo fijo será más fuerte. Además de eso estoy estudiado hechizos medicinales, pero solo encontré tres hechizos usados hace unos 300 años atrás. Ahora hay curanderos por lo que esos hechizos ya no se usan. Yo quiero aprenderlos porque son hechizos fuertes con funciones fijas: el primero es un hechizo de simple de restauración de tejidos; el segundo es sobre restauración interna: órganos, coagulación de la sangre y sanación de los procesos del organismo y sistemas del funcionamiento del cuerpo; y el tercero es el más interesante, trata de la regeneración de cualquier tejido. Necesita magia como ningún u otro hechizo creado pues este hechizo crea piel, órganos, hueso y cualquier tejido usando únicamente magia. El primero une los tejidos, pero no los crea.

  Todo es muy complicado, pero todo es necesario. Si domino estas magias seré de ayuda para quien lo necesite.

  Apenas son las 2 de la tarde y todo está calmado, todo está... solitario. Mira-san había vuelto a salir disculpándose por tener que irse. Resulta que había venido por sus cosas que se le habían quedado y se fue apurada porque Elfman estaba herido. Espero que no sea nada grave. Las horas siguen pasando y aun nadie ha vuelto de sus misiones. Me cansé de estudiar. Puedo durar horas y horas estudiando, pero estando en un lugar tan grande del que sabes que jamás esta de esta manera, incomoda.

  La puesta se abrió dejando ver a Laxus. Me le quede viendo y él a mí. Entro y paso de largo por el salón del gremio para subir a la sala de magos clase S.

-          Hola Laxus. Buena tarde.

  No respondió y eso de cierta forma me molesto. Se acercó para girar a la izquierda luego de haber dejado atrás todas las mesas. Solo se escuchaban sus pasos. ¿Es que piensa ignorarme?

-          ¿Al menos puedes responder?

  Pregunte recordando claramente que el segundo día luego de recuperar la consciencia en la enfermería del gremio él me hizo esa pregunta al yo no responderle a su saludo, aunque claro que también estoy molesto como él en aquel momento por no contestar.

-          Buenas tardes.

  Contesto de mala gana, pero habiendo pasado tanto tiempo sin dirigirme palabra me sentí tan feliz.

  El siguió de largo y subió las escaleras hasta la sala de arriba. Quizá él no lo sepa, pero solo responderme me hizo tan feliz como antes.

  Pasaron unos minutos en silencio. Veo el pastel que hice y las galletas y solo me hacen pensar que a Laxus le gustan los dulces, no le encantan, pero comer uno, dos o tres diarios le agrada. No sé si ha comido algunos antes de llegar, pero me arriesgaré a llevarle algunos. Tomo una bandeja a la que le pongo dos platos, uno con un trozo de pastel y otro con algunas galletas, también pongo en la bandeja una cerveza de botella y un vaso y entre mi brazo le llevo una cubeta con hielo. Subo con la bandeja en una mano pero me llevo una sorpresa al llegar a la sala de magos clase S. Laxus está dormido sentado con la parte superior de su cuerpo sobre la mesa. Claro que al verlo pensé estaba desmallado o algo por el estilo, pero me alegro que no fuera eso. Deje sobre el otro extremo de la mesa lo que llevaba en la bandeja y le deje una nota para que cuando despertara supiera que lo había dejado para él. También lo cubrí con su abrigo pues lo había dejado sobre la el espaldar de la silla al lado de la suya. Baje y me digne a seguir estudiando, no me quedaba nada más que hacer pues antes de llegar Laxus, yo ya había barrido, trapeado y limpiado las ventanas.

  Por la puerta del gremio entro una alarmada Levy asustándome, pero todo fue falsa alarma, solo había dejado un libro en el gremio, libro que había dejado sobre una mesa y yo lo tome mientras limpiaba. Solo dándoselo volvió a irse, pero disculpándose de antemano. No pasaron más de 30 minutos cuando se volvió a escuchar ruido en el gremio, pero este ruido solo eran pisadas contra la madera de los peldaños de la escalera, bueno, ¿A qué más se le llama peldaño?

  Laxus traía en sus manos los platos, vaso, botella y cubeta colocándolo en la barra.

-          ¿No habrá algo de comer? – pregunto Laxus con un apenado sonrojo en sus mejillas.

  No necesitó decir nada más, su estómago hablo por él. Rugió fuerte y claro. Eso me hizo sonreír.

-          Espera, ya preparo algo – dije antes de darme la vuelta y cruzar el marco que da a la cocina.

  No puedo preparar nada pesado ni fuerte porque la cena debe ser siempre algo de nivel medio y no nivel alto como el almuerzo – me digo a mi mismo – ya está, lo tengo. Los bizcochos son esenciales y adecuados según las tantas variedades que hay de estos. Bizcochos simples hechos a la sartén, avena cosida con canela y ralladura de nueces, pan y panques de banana. Desde luego parece más un desayuno que una cena pero preocupado porque Laxus se llene, porque el rugido de su estómago no fue normal, me quise asegurar de que se llenase pero también que comiese saludable. Todo lo que preparé estaba exclusivamente puesto para que agarrase cuanto desease; mantequilla y salsa de 4 quesos para que untase y agua en una jarra para que se sirviese.

-          Sírvete a tu gusto, en fin solo estamos dos.

-          ¿Lo preparaste todo tú? – pregunto con ligero asombro.

-          Lo que te perdiste.

-          Lo siento, pero nadie debe saber.

  Sé a lo que se refiere, y no pienso decir nada, ni a Gray. Me inquietaba antes, pero ahora que dice: “nadie debe saber”, es que recuerdo sobre lo que siempre trató.

-          Buen provecho.

-          ¿Y si me ahogo?

-          Ahora no comerás – dije indignado.

  Él rio y aunque no lo demuestre en este momento, estoy más feliz que nunca. Me siento a su lado y me dispongo a comer.

  Pasamos la cena comiendo tranquilos, riendo, contándonos cosas y con Laxus alagando que para tener una mano enyesada fui bastante rápido cocinando.

  Es curioso que sean las 9 de la noche y aun nadie haya llegado, pero al menos no nos interrumpen en nuestra charla.

-          Gracias por la cena – acepté su agradecimiento – y gracias por no envenenarme – volvió a reír.

-          ¡Eres el peor, papá!

  Laxus paro de reír y yo me acabo de dar cuenta de mi error.

-          L-lo siento Laxus, no fue intencional, fue la impresión... no, tampoco quise decir eso... yo

-          No importa – no sé si su respuesta debió aliviarme o dolerme – pero me alegra que mi primer hijo seas tú – dijo abrazándome por sobre los hombros – además, fui yo quien te dijo que podías llamarme así si así lo querías.

  Es cierto. Es verdad lo que pienso y nadie lo sabe. Pero nadie sabe qué tan feliz me hace Laxus.

  Fairy Tail me dio a un papá, Laxus, un hermano, Blake, un abuelo, el maestro, toda una familia que puedo creer que son como tíos y primos y aunque aún me cuesta, aunque pienso que es irreemplazable mi mamá, Fairy Tail me ha dado una segunda mamá, Erza. Todos me duelen cuando sufren, todos me alegran, cuando están felices y así como me cuidan y protegen, quiero cuidarlos y protegerlos, y me molesta quien sea que los llegue a lastimar.

-          ¿Sabes que me gustaría? – pregunté a Laxus quien me miró.

-          ¿pasar una tarde donde solíamos entrenar? - lo miré sin creer que haya adivinado – yo también quisiera pasar un momento como aquellos.

-          ¿Lo juras?

-          Por ti y por mí.

  Insisto y repito. Nadie sabe cuan feliz me hace Laxus.

Notas finales:

  Antes que comenten, recuerden que en este fanfic Laxus dijo a Haruka en el capítulo 3 que podía llamarlo padre las veces que quisiera.

  Refrescado ese detalle, espero que les haya gustado.

  Comenten por favor. Se los imploro, quiero mejorar para que ustedes hacerles la lectura más grata. 

  Gracias por leer esta historía, y hasta la proxima.

  Nos leemos.


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