Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ESPECTRO... DE DOLOR L2 por Lory Backon

[Reviews - 44]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +



No podía dejar de revisar aquella cadena de oro blanco que me había dado mi madre y que era de donde colgaba aquello con que Sid se me había declarado. Me sentía feliz y ansioso, feliz por qué ahora era oficial; yo era el prometido de Sid, ansioso por que... Bueno yo nunca había estado prometido con nadie más... En si la palabra prometido era una palabra sería no?
- Sid...
Una vez más saqué la cadena bajo mi camiseta y miré aquel diamante azul que adornaba el anillo. El corazón de Sid también era un diamante azul pero era enorme, cuando tuve que tragarlo en realidad tuve que abrir mi boca al máximo, creí que moriría, pero en realidad este se deshizo al entrar a mi boca y se convirtió en agua de mar, aun no sabía cómo aquel diamante se había fusionado a mi. Pero éste era un diamante normal, bueno no normal... Ese Sid se había gastado una fortuna de seguro tratando de encontrar esta excentricidad... Aunque... Era preciosa! Caray! Me gustaba mucho! Mucho!
Cerré mis manos en torno a mi anillo, que era algo más allá que una joya rara y cara, era el símbolo de la unión de Sid y mía.
Él me lo había dado en la playa, hacia un par de semanas. Él dijo que era mi regalo de cumpleaños ese viaje y como yo conocía bien a Sid si no le tomaba la palabra sería capaz de salir con una excentricidad más grande así que decidí aceptar, ese día estaba la pequeña Aramis con nosotros y se me ocurrió que podríamos llevarla a conocer las playas de Londres. Sid estuvo de acuerdo y así fue como fuimos a parar a la isla de Sky en Escocia.
Sid tenía una propiedad lo cual no era de extrañarse, un lugar muy viejo, lúgubre y como él diría, barato, pero para nada era algo así. Parecía ser una casa de más de 200 años de antigüedad, lo asombroso fue que no asustó para nada a la pequeña Aramis que por el contrario dijo que era muy conveniente ese lugar ya que así nadie molestaría.
- Estás de broma?- Le respondí - Acaso no has escuchado de las casas embrujadas?
- Si, Stefy pero no creo que nadie se atreva a molestar a Papi! El asustaría hasta a los fantasmas más aterradores.
- Ah?
- No es bueno que asustes a Roja Steph.
Mire a Aramis y en su carita no veía ningún signo de estar asustada. En cambio yo sí.
Pasamos una gran semana los tres, días muy tranquilos y apacibles, Sid le enseño a Aramis a nadar en mar abierto a pesar de mi temor de que pudiera pasarle algo pero al parecer ella respondió bien y aprendió rápido, a mí me encantó poder convivir con ella debido a que se había guardado en mi un sentimiento de añoranza desde la abrupta partida de Sally, así que de cierta manera la presencia de Aramis era un bálsamo para mis sentimientos. Un atardecer antes de regresar a Londres, Aramis no se había despertado de sus siesta aun cuando Sid emergió del mar dejándome boquiabierto por su belleza. Los colores púrpuras y amarillos del atardecer de la isla de Skye le hacían un efecto en la piel como si fuera esculpida en mármol. La melena negra de Sid se movía de aquí para allá mojada y escurriendo chorros de agua que su cuerpo desnudo recibía con gusto, para colmo de males en un movimiento sutil pero áspero dejo salir sus enormes alas tupidas de plumas negras. Sid era en definitiva un ángel, y de esa idea ni el mismo Dios podría convencerme de lo contrario.
Yo que estaba sentado en una silla de sol sobre la arena a unos veinte metros de donde estaba él, podía ver sus lilas refulgentes que al parecer tenían algo que decirme.
Este a paso firme acortó la distancia y aunque no podía dejar de observarlo y casi venirme en mis pantalones hubo un detalle que a pesar de tremenda distracción noté; y este era que conforme Sid avanzaba el mar también avanzaba, era como si lo siguiera.
Al fin Sid y el mar llegaron a donde estaba yo sentado y él me miró desde arriba y sin decir nada, era como si mirase algo raro o a un fenómeno.
- Bueno que tanto me ves?!- Dije nervioso al cabo de unos minutos.
Pero este no contesto sino se hincó a mi lado y dijo al tiempo que sacaba un anillo con un diamante azul.
- Stephan quieres casarte conmigo?!
- Ah?!
Según la teoría de Sid eso no debía tomarme por sorpresa pero así fue, vamos! Quien demonios se iba a imaginar que él me pediría matrimonio?! La verdad es que nunca sabia que pasaba por la cabeza de Sid, en que cosas tan escabrosas estaba él pensando para hacer ese tipo de cosas, y quizás nunca lo sabría, pero así sucedió y cuando yo dije:
-Que?!
- Que si me harías el honor de ser mi esposa?
- Es... Es... Esposa?! Cómo que esposa?!- Dije molesto.
-Que dije algo mal?
- Dijiste esposa! Soy hombre!
- Ah... Perdón, pero Kuri dijo que así se decía- Él carraspeo la garganta y dijo- Corrijo, me harías el favor de ser mío?
Sus lilas tenían ese gesto natural de súplica e inocencia que hizo que aquel malentendido de hacia unos segundos se me borrará y me lleve las manos a la boca. No podía creer que esto estuviera pasándome a mi, voltee a los lados para asegurarme que fuera a mi a quien se le estaban proponiendo y como no vi a nadie más sentí aquel surco que iba dejando el agua que corría de mis ojos hacia mi mentón.
- Ay Sid, es broma verdad?
- No Steph y si es a ti a quien le estoy haciendo una propuesta de matrimonio.
- Tonto, no leas mi mente.
- Lo siento.
Mire el anillo que aún sus manos me ofrecían y las emociones me sobrepasaron, no podía hablar por ese nudo que se había formado en mi garganta. Él tomó mi mano izquierda que temblaba sin compasión y me miro a los ojos, tan directamente que yo sentía que me iba a desmayar en cualquier momento.
- Entonces Steph, me harías el honor de ser mi esposo?
Yo solo asentí y el puso aquel lindo diamante en mi dedo anular. En cuanto acabó no tuve mas que verlo y comencé a llorar a berridos.
- Buaaaaaa!
- Que pasa Steph, estás bien? Te ha ocurrido algo?
Dijo Sid muy preocupado.
- Bunashgash shoporto bhishuitegawa.
- Ah?! Steph no te entiendo..
- Shishe buzshagharrodipjpteragua.
Él me miró y comprendí que intentaba leer mi mente. Idiota, que no entendía que había dicho que estaba muy feliz y que era el mejor día de mi maldita vida?! Acaso no era claro?
- No si estas llorando de esa manera Steph- Dijo el que me secaba las lágrimas y luego de eso comenzó a besarme de una manera tan amorosa y apasionada que me sentía un pequeño trozo de mantequilla en el fuego, sus besos eran tan deliciosos y el roce de sus manos que bajaban por mi espalda y se deslizaban de mi cintura hasta mis caderas que prácticamente me envolvió por completo en un mundo distinto donde sólo existía este sentimiento.
Las cosas comenzaron a tornarse más y más calientes y yo sentí que una fiebre me atacaba, la fiebre de sentir sus dedos jugueteando por mi trasero, yo ya estaba muy puesto y quizás eso fue lo que me nublo a mi los sentidos pero Sid simplemente no tenía excusa, él sabía que había alguien más mirando y yo que no podía hacer otra cosa más que dejarme llevar no me enteré hasta que escuche la vocecita.
- Papi acaso Stefy está enfermo?
Eso me bajo por completo lo caliente y Sid metió más adentro de mi su dedo causándome un poco de dolor. De inmediato mire hacia un lado, Aramis estaba ahí parada mirándonos con demasiada atención mientras Sid tenía su mano en mi.
Me quedé quieto, no sabía que decir o hacer pues ella era una niña pequeña y yo no tenía una buena explicación para esto, en cambio Sid solo dijo.
- Si Roja, Stefy está enfermo, ahora déjanos.
Sid volvió a besar mi cuello y a moverse en mi interior y de inmediato lo pare.
- Waaaa! Déjame en paz idiota!
Dije quitándomelo de encima.
- Ah?
- Aramis no es nada, es solo que bueno... Yo... Tenía algo en la ropa y Sid...
Ella me miraba sin comprender bien, no cabía duda que la mirada de las mujeres era algo intimidante, incluso mi mamá a veces tenía una mirada intimidante y Aramis no era la excepción.
- Bueno es que...Mira lo que pasa es...Bueno tú sabes que...
Me acerqué a ella que seguía quieta y sin decir nada y me arrodille frente a su carita.
- Aramis no sé que...Como explicarme.
- Stefy debe dejarse tomar la temperatura por Papi, cuando uno está enfermo debe atender las indicaciones para poder mejorar.
- Ah?!
Ella puso su mamita en mi frente y repuso.
- Stefy está muy caliente, iré a ver si Beni puso algún remedio para la fiebre en mi maleta.
- Ah?!
Ella marchó con rumbo a la casa y Sid se me fue encima de nueva cuenta.
- Ahora continuamos...
- Nada de continuamos! Aramis casi nos atrapa!
- Y?
- Como que y? Ella es una niña pequeña! No podemos andar de exhibicionistas!
- Pero... Ella creyó que te estaba tomando la temperatura vía...
- Ash Sid cállate!
- Y entonces?
- Será después.
- Pero sigues muy mojado.
- No molestes! Ahora vamos por Aramis! Anda!
- Pero entonces te lo voy a cobrar al triple cuando estemos a solas en Londres!
- Ah? Por?!
- Por que ahora voy a tener que desquitarme con unas fotos tuyas de cuando duermes y no es justo que tenga que hacerme justicia con un papel cuando yo tengo al original.
- Que demonios?! Por qué tienes fotos mías cuando duermo?!
- Por que me sentía un poco solo y tú estabas dormido así que tuve que ponerme creativo.
- Eso no es ponerse creativo, eso se llama ser un pervertido!
Este dio media vuelta y se devolvió al mar.
- Como sea, estoy duro y necesito desahogarme aunque sea con un tu en papel.
- Pero... Pero...
- Cuando acaben de cenar Roja y tu regresaré.
- Pero...
Sid se metió en el mar que lo recibió con una euforia sobrenatural, parecía que el mar estaba picado y me pregunté si eso debía a que Sid se había quedado igual que yo de excitado.
El regreso a Londres fue una pena, la verdad me había encariñado mucho con Aramis y cuando la entregamos sana y salva a Benny me sentí un poco triste.
Las cosas no mejoraron mucho el día que regrese a trabajar pues discutí con Sid.
- Por que no?
- Por que no Sid, ya te dije que ni mi mamá ni los chicos en el trabajo pueden verme con un anillo de compromiso.
- Por que?
- Por que van a comenzar a preguntar.
- Y?
- Como que y? Que les voy a decir?
- La verdad, que tú eres mío y que nos vamos a casar.
- Sid, en primera deja de decir que soy tuyo, suena como si fuera un algo y no un alguien. En segunda nadie de la empresa sabe que yo... Bueno tú entiendes!
- No Steph no entiendo!
- Si, tú sabes...
-No, no se... Acaso es por ese oficial cara de perro chihuahua?
- Que? No! No metas a June en esto!
- Entonces!
- Aaaaaw por que no entiendes? Nadie en la empresa sabe que....- Carraspee la garganta un par de veces.
- Que te duele la garganta?
- No! Sid no! Que yo como del otro lado del plato!
- Ah? Steph comer de un lado del plato o del otro es lo mismo.
- No! Sid nadie sabe que yo bateo por la izquierda.
- Ah!- Dijo él y después puso cara sería y repuso- No es cierto Steph tu no eres zurdo y menos ambidiestro.
- Carajo, Sid que nadie sabe que soy gay!
- Ah- Él medito unos segundo aquello y dijo- Por que no lo dijiste antes?
- Te lo estaba diciendo indirectamente!
- No entiendo las indirectas, y no me gusta que de tus labios salgan palabras tan vulgares, no las digas de nuevo quieres?
- Bien, bien! Pero entonces ahora comprendes por que no puedo llevar puesto un anillo de compromiso? Dime qué lo entiendes.
- No.
- Queeee? Pero... Por?
- Por qué si el problema es que nadie sabe que tú y yo estamos juntos entonces el remedio es muy simple... Hay que decirle a todos! Es mas, si quieres convocó a una reunión general de la empresa y lo anunciamos, es cuestión de marcar a los departamentos y...
Este se apresuró a tomar el teléfono y de inmediato corrí a quitárselo de las manos.
- Nooo!
Sid me miró intrigado y dijo.
- Entonces?
- Una reunión general es mucho! Estás loco?
- Tienes razón Steph... Lo anunciaremos departamento por departamento en varias reuniones.
-No, Sid no!
- Entonces?
- No quiero que nadie lo sepa.
- Por?- Dijo el con el rostro serio.
- Por que aún... Aún no estoy preparado para salir del clóset.
- No estás en el armario Steph.
- Para declararme gay ante el mundo Sid! No estoy preparado para decir que me gustan los hombres.
- Ya te dije que no soy humano.
- Ya se! Ya se, pero como sea; tu cuerpo es el de un chico y no puedo decirlo...
Baje la mirada esperando sus reclamos y alegaciones pero solo escuche.
- Está bien.
De inmediato subi la mirada y él tenía ese gesto natural, era evidente que Sid estaba algo herido pero estaba haciendo el intento de sobrellevar aquello.
- Gracias.
Dije yo aún apenado, él extendió su mano y yo la tomé. Sid me sentó en sus piernas y dijo.
- No entiendo el por qué a los humanos les importa tanto el qué dirán otros humanos, los sentimientos, creencias y las razones que tiene alguien para hacer algo siempre serán de esa persona, no puedo mentir que sería algo maravilloso que pudiera decirles que eres mío pero si mantenerlo así te da tranquilidad, así será.
- Gracias Sid, lo aprecio.
- Eso solo para la empresa, quiero decirle a tu madre mamá.
- Que?! Estás loco?
- No, tu madre es alguien cercano y quiero que ella sepa.
- No! Mi mamá no puede saberlo.
- Por que no?
- Por que no!
- Eso no es un por qué.
- Por que mi mamá es... No sé... Mi mamá! Sid no puedo decirle.
- No estoy de acuerdo, tu mamá es tu familia y debes confiar en ella.
- No es que no confíe es que...
- Que?
- Me da vergüenza! No es fácil!- Dije enrojecido de la cara.
- Quiero decirle a Cathy mamá.
- No! Mira te propongo algo, le digo a los chicos de la asamblea.
- Ya saben.
- Que? Pero como?
- Yo le dije a Samael antes de irnos de vacaciones que te lo iba a proponer, y le pedí a Kuri la dirección de su mejor orfebre para que hiciera la joya. Incluso hicieron una quiniela, Samael, Kuri y Kanon fueron por que dirías que si. Layla fue por qué no y Elliot se abstuvo pues el dijo que iría por que tu dirías algo así como " No puedo casarme sin tomar unas clases de como hacer un buen blow con Elliot", lo cual se tomó como una abstención.
- Queeee? Ya regresaron Layla y Elliot de donde fueron? Y que apostaron?
- Regresaron la noche anterior a irnos de vacaciones y apostamos almas en el caso de los espectros, Layla apostó usar un disfraz de doméstica todo un día para cada uno de los contratistas.
Su respuesta me erizo los vellos de los brazos.
- Sid están locos?
- No.
- Osh, como sea! Bueno si ya saben los chicos de la asamblea es lo mismo como si supieran todos no? Además estoy contento de que hayan vuelto a salvo...
- No. No es lo mismo.
Su rostro serio me tenía algo espantado.
- Sid vamos! Mira no tenemos que gritarlo a todo Londres o si?
- Si.
- No crees que con que nosotros lo sepamos basta?
-No.
Este seguía serio, sabía que lo que me pedía Sid era justo pero aún no tenía la suficiente confianza en mí mismo como para proclamarme gay, tenía que pensar en algo que pudiera sustituir el decirle a mi mamá, algo así como decirle a un primo sordo o a un amigo muy lejano, alguien que no me conociera tanto... Vaya pero quién? Hacía tanto que había dejado de ver a mis amigos de la preparatoria, la última persona que había visto había sido antes de enloquecer a....Gabrielle! Eso era! Suspiré y dije.
- Mira no puedo decirle aún a mi mamá pero le voy a decir a una amiga de hace mucho tiempo. Que te parece?
- Una amiga?
- Si, es casi casi como mi hermana!
- En serio? Quien es?
- Se llama Gabrielle.
- Ah? La que te metió a trabajar en ese centro telefónico.
- Exacto! Que te parece?!
El hizo un mohín y dijo.
- Bien. Por ahora está bien, pero tendrás que decirle a mamá antes de que el año terminé.
- No le llames mamá, es mi mama no la tuya.
- Entendido Steph?
Suspiré de nuevo y dije.
- Bien, bien!
Así que colgué el anillo en la cadena que mi madre me había dado y lo lleve bajo mi ropa desde ese momento, como un amuleto de amor.
Ese viernes los chicos de la asamblea organizaron una fiesta de compromiso para nosotros y los muy aprovechados usaron la apuesta para obligar a Layla a usar un traje de maid. Ella Lucía muy hermosa en el, llevaba el cabello recogido en dos coletas altas de color cobre, adornadas por listones blancos. Su traje color negro de cuello y puños blancos con una falda amplia almidonada y rematado por un mandil color blanco, era supremamente sexy.
- Gracias pequeño traidor, al menos aún luzco sexy en esta cosa inventada por el patriarcado.
- Lo siento Layla, yo no sabía nada de la apuesta.
Ella me miró con un aire de incredulidad y dijo.
- Y tenías que aceptarle la propuesta de matrimonio al pez con cuernos?
- Bueno yo...
Me sonroje por completo cuando ella dijo eso de manera tan fresca, yo amaba mucho a Sid más sin embargo aún sentía mucha vergüenza de declararme gay, de pronto ella soltó una sonrisa de picardía.
-Así que ante Cathy y todo Londres tu y yo seguimos siendo pareja, no es así Steph?
Yo bajé la cabeza y asentí.
- Que bueno! Entonces ese pez aún no gana por completo! Aún tengo mi oportunidad!
Dijo y se fue contenta ofreciendo bocadillos de papel a los miembros de la asamblea.
Yo fui a sentarme al lado de Sid a comer algo de verdad, no esos bocadillos de papel que Elliot se había liado.
- Si sigues comiendo bocadillos de papel Elliot te vas a poner como un niño gordo Londinense. Entonces Kanon ya no te va a querer.- Dijo Layla al albino.
Elliot hizo un puchero y se trepó a los brazos de Kanon.
- Verdad que no es cierto eso Kanon? Verdad que tú me amaras aunque pesará una tonelada!
Kanon asintió.
- Ven? Kanon me amaría aunque pesará diez mil toneladas!
Kanon abrió los ojos como platos y luego de manera muy lenta dirigió su mirada a Elliot.
- Ves! Creo que a Kanon ya no le gusto lo que escucho!- Dijo Layla desde atrás.
-Que es eso de los bocadillos de papel?- Dijo Benny.
- Es una tontería que copió Elliot de la asamblea de Rusia.
Dijo Kuri dando un sorbo a su vino.
- No es una tontería, es una gran idea! Tú lo dices por que ahorita puedes comer cosas pero nosotros no. Mira Benny nosotros no podemos comer comida como los humanos por que en si nuestro cuerpo solo es un cadáver que hace la función de envase bien?
Benny asintió y Elliot se acomodo en las piernas de Kanon.
- Pues bien, en la asamblea de Rusia pudimos ver qué ellos tenían comida que en realidad estaba hecha de papel reciclado. Así podían pretender que comían comida y verse normales.
- Ah?! Y como la comían si no pueden comer?
- Así!- Dijo Elliot y llamo a Layla con un aplauso.
- Bocadillos enano?
- Perdón servidumbre, que dijiste?
- Bocadillos señor?
- Si!
Elliot tomo un bocadillo que había sido dibujado y lo arrugó con la mano.
- Listo! Comí! Ahora quiero un helado!
- Si señor enano!
Dijo Layla alejándose a buscar lo que el niño había pedido.
- Que estupidez- Dijo Benny.
- Te lo dije- Le contestó Kuri.
- Que? Por qué?! - Dijo Elliot- Son muy malos ustedes!
- Y como les fue en Rusia? Pudieron traer lo que Kuri necesita para vivir?
Elliot miró a un lado y dijo.
- Ya hablaremos de eso más tarde, ahora quiero que Steph y Sid nos cuenten todos los pormenores de su luna de miel en Skye! No olviden los detalles pervertidos eh?
- No fue una luna de miel Elliot!
- Y además aún no estamos todos reunidos para que pueda yo contar eso- Dijo Sid con tranquilidad, como si lo que hubiera dicho fuera normal.
- Que? Cómo que lo vas a contar?! Que demonios crees que vas a contar? Tu no vas a contar nada Sid!
- Pero quien falta?- Pregunto Kuri.
-Ya verán, ya está en camino.
- Oye Benny y por que no han traído a Aramis?
- Ah! Ah Steph es que se ha quedado a dormir en casa de una amiga junto con otras niñas de la nursery, en si yo no quería dejarla ir pero Kuri dijo que si.
- Vaya! Así que ya tiene amigas eh?
- Si- Dijo Benny con un dejo de tristeza- Supongo que si.
- Eso es bueno, uno debe aceptar que poco a poco ellos mismos se van formando un camino eh?
-Si, pero Aramis es una bebé aún Steph.
- Ah, eso que ni que!
Aramis crecía muy rápido y eso me puso nostálgico.
-Roja no es una bebé, es una niña- Dijo Sid- Y creo que ella es capaz de muchas cosas, quizás más de las que puedes pensar.
- Exacto!- Afirmó Kuri que le daba una enorme mordida a su emparedado- Roja es un diamante en bruto.
- Como sea, Aramis es mi hermana y no me gusta que este lejos de mi.
- Sobreprotector!- Dijo Kuri con un poco de resentimiento- Actúas como un padre sobreprotector.
- Eso no es cierto!
Yo me quedé callado.
- Si lo es, y ser sobreprotector no lleva a nada bueno, al final alguien sale herido.
Dijo el Ruso pero el comentario caló a Benny y este respondió.
- Lo dices por que a ti te abandonaron y eso te jode mucho!
Kuri lo miro seriamente y sin decir más se levantó y se fue.
- No, espe.... Carajo! - Se lamentó Benny.
- No debiste decir eso Benny- Dijo Elliot.
- Lo sé y lo siento pero es que fue su culpa.
Kuri regresó y todos le miramos sorprendidos, acaso tan rápido se le había pasado?
- Olvide mi emparedado, con su permiso.
Dijo tomando su plato y marchándose de nuevo.
- Kuri, no te vayas. Vamos, hay que pasarla bien!
Este me miró con seriedad y yo pensé en algo inteligente que decir pero es que simplemente no sabía ni que podía decir para arreglar las cosas cuando el timbre sonó.
- Llegó al fin- Dijo Sid- Yo atiendo.
Este se levantó y se fue rápidamente a abrir la puerta.
Layla y Samael se acercaron a nosotros y todos estábamos expectantes para saber quién era la persona que Sid había estado esperando. Un momento muy tenso fue cuando Elliot se acercó a mí y susurro, apuesto que es K. Apuesto que Sid lo trajo para ver qué se puede hacer por tu alma.
Tan solo escuchar que el maestro K. vendría me puso terriblemente nervioso. Yo no estaba nada preparado para verla, no quería verla ni por qué me regresará mi alma, prefería acordar por correo electrónico para eso pero supuse que ella no sería un espectro de correo; así que tragué saliva, respire hondo e intenté soportar todo aquello... Pero entonces Sid salió hacia el jardín con una sonrisa y dijo.
- Adelante, pasa.
Todos los espectros que me rodeaban a excepción de Kuri pusieron una cara de susto y un segundo después los demás también, incluido yo.
Una figura alta de cabellos negros y ojos que contenían al mar se plantó frente a nosotros.
- Ay Dios mío!- Dije en voz baja y un estruendo general se hizo notar.
- Waaaa!
- Basta Steph!
- Molesto! Molesto!
Yo voltee a ver los chicos y todos excepto Kuri y Benny se habían tapado los odios y se deshacían en muecas de dolor.
- En estos casos es muy útil ser humano- Decía Kuri divertido.
- Pero que sucede aquí?
Todos volvimos el rostro olvidando lo que acababa de suceder hacia el que venía uniformado.
- Pasa- Dijo Sid con una amabilidad maliciosa.
- Hola primor, pero que es esto?
- Whip- Susurré y luego le dirigí la mirada a Sid.
- Queríamos que estuvieras con nosotros en una fecha tan importante.
Dijo Sid con malicia.
- Fecha importante? No recuerdo que sea mi cumpleaños y el cumpleaños de Steph ya pasó.
- Si, bueno es que...
- No es nada Whip, solo es una reunión casual.
- Casual?!- El oficial le hecho un ojo a Layla y repuso- Pero que entienden los ricos por casual?
Yo sonreí nervioso y tome a Sid del brazo apartándolo a un extremos del jardín para increparle.
- Que demonios haces?!
-Yo?
- Si, tu! Acaso estás loco?
- No. Solo quería que nuestro querido amigo, el oficial June estuviera presente en una ocasión tan especial.
- Ni loco te creo una palabra Sid. Acaba con esto ya mismo.
- Que?
- Te prohíbo decirle a Whip que estamos comprometidos.
- Por que no? Acaso no quieres que sea participe en nuestra felicidad?
- Ja! No me vengas con tonterías, tú quieres que él se aleje de mi, no quieres que él sea participe sino quieres alejarlo.
- Bien si, quiero a ese perro policía fuera de nuestra vida y?
- Que yo no! Él es mi amigo.
- Pero te ve como un perro ve a una salchicha.
- Sid!
- Es verdad y lo sabes y tu eres mío! Mío! Y yo no comparto lo mío!
- Sid, no hables de mi como si fuera un maldito objeto!
- No eres un objeto Steph, eres mío y de nadie más, así de simple.
- Pues no! Y no le vas a decir a Whip de lo nuestro.
- Por?
- Por que no! No quiero que él sepa, ni él ni nadie!
- Pero...
- Sid comprende que no estoy listo.
- No estás listo o no quieres que él te deje en paz?
Yo miré a Sid con ira y di media vuelta dejándolo ahí.
- Whip, cómo estás?
- Bien primor, y tu?
El policía hecho una mirada a Sid y sonrió de medio lado.
- Problemas en el paraíso?
- No, para nada jejeje.
- Que bueno por que si, si, será una pena...
- Ah?!
Yo no sabía a qué se refería pero me dio miedo preguntar asi que mejor dejé la situación así.
- Y que celebramos hoy? Veo a todos tus amigos muy contentos.
- Amhhh nada especial, pero no te sientas comprometido de estar aquí jajaja.
- Descuida amor- Dijo este inclinándose hacia donde estaba yo- Contigo yo voy muy en serio y estoy muy comprometido.
- Ah...
- Bocadillo?
Dijo Kuri interponiendo un emparedado entre el oficial y yo.
- No gracias.
- Y que hace un tío como tú pretendiendo a un señor de edad como Stephan?
- Ah?- Se sorprendió Whip ante la pregunta .
- Como que señor de edad?! Que demonios te pasa Kuri?
- Pues este tío es más joven que tú no es así Steph?
- Bueno si.... Pero...
- Debería de conseguirse alguien de su edad.
- Ah sí?- Dijo Whip con singular curiosidad- Cuántos años tienes tú para poder darme un consejo de ese tipo eh?
- Muchos más de los que aparento- Dijo el ruso y de inmediato sentí la presión de alejar a Kuri del oficial.
- Ah, si mira Kuri ya me dio hambre, me puedes traer un bocadillo.
- Aquí hay un sándwich- Dijo ofreciéndome de suyo.
- Si pero no quiero eso, quiero de los de allá.
Kuri me miró con antipatía y fue por mi bocadillo, entonces le susurré a Benny al oído.
- Por favor apártalo de Whip, por favor!
- Haré lo que pueda- Dijo este y se fue con el Ruso.
- Ah bueno ya sé que ya los había presentado pero igual lo haré, chicos él es el oficial June Whipper. Oficial ella es Layla, el es su hermano Samael, el es Kanon y el es Elliot.
- Mucho gusto.
Dijo Whip.
- Que clase de nombre es June?- Dijo Elliot siguiendo la corriente de Sid y de Kuri.
- Ah, no lo elegí yo amiguito.
Respondió el oficial de manera amable hacia lo que él creía un niño pequeño.
- Pues el que te lo puso te odiaba mucho!
Dijo Elliot de manera descortés y Kanon le tapó la boca, hizo una ligera reverencia y se marchó cargando a menor; mientras Elliot peleaba con él.
- Ajajajajajaja discúlpalo Whip, Elliot no quería decir eso.
- Ah no te preocupes primor, seguro es por que es pequeño y tiene sueño, así son los niños chiquitos.
- Te escuche!- Grito Elliot ya en el lobby de la casa pero todos alcanzamos a escuchar.
- Si jajaja niños!- Maldición! Pensé, estos tipos me van a joder la vida.
- Aunque no se parece a su papá en absoluto eh?
-Su papá?
- Si, el enorme japonés, acaso no es su papá?
-Kanon padre de Elliot?- Dijo Layla divertida- Ay por Belcebú, eso está de fábula!
- Ahora si lo mato!- Se escuchó la voz de Elliot a la distancia.
- No para nada, no es su padre.
- Ah no? Entonces?
- Ah? Entonces?
- Elliot es amo y maestro de Kanon.
Respondió Samael con franqueza.
- Ah?-. Whip se quedó sin comprender y yo quería que se abriera la tierra y me tragara.
- Elliot es el legítimo dueño de Kanon.
- Ah? Dueño? No comprendo- Dijo Whip.
- Este... Es que...
Yo no sabía que decir o hacer y de nuevo Layla salió en mi rescate.
- Lo que quiere decir es que son medios hermanos pero Elliot es muy celoso de su hermano mayor y actúa como si Kanon le perteneciera.
- Así que un pequeño muy mimado eh?
- Nada que no se arregle- Dijo Layla.
- Una buena tunda en el trasero y listo!
- Whip!- Dije yo sorprendido pues un jarrón enorme se dirigía como proyectil rumbo al oficial cuando Samael alcanzó a interceptarlo antes de que este mismo se diera cuenta.
- Era una broma Steph, solo eso. Los niños pequeños así son-Respondiendo el oficial ante mi reacción que era mas atribuida al jarrón que a cualquier otra cosa.
Samael se retiró en silencio con el jarrón y Whip ni siquiera se dio cuenta de que su vida había corrido peligro por unos momentos.
- Venga oficial no quiere conocer la casa?- Dijo Layla que parecía que tramaba algo.
- Ah? Si, si se ve muy linda su casa.
- Oh no! No es mi casa, es la casa Santinni.
- Ah?! Esta es la casa de los Santinni?
- Si!
- Vaya, no lo puedo creer?! Con razón!
- Con razón que?- Dije yo que había sido apartado de la conversación.
- Nada amor, ven vamos a conocer la casa de tu novio.
- Ah!- Me sonroje al máximo cuando él dijo eso- No... No gracias yo ya la conozco.
- Bueno tú y está hermosa mujer me la van a mostrar que te parece?
Layla tomo el brazo del oficial como si fuera solo una inocente chica y él tomó mi mano y así comenzamos a andar los tres por Mousetrapp, ellos se miraban muy contentos y yo solo deseaba que Sid no se apareciera por en frente de nosotros.
Caminamos los largos pasillos de aquella mansión y Whip que era muy observador dijo.
- Que pena...
- Que pena que?- Dije yo.
- Ah!- El oficial sonrió y continuo- Perdón lo he dicho en voz alta. Es que estaba pensado que era una pena que está casa tan grande y elegante estuviera en este estado, acaso nadie vive aquí?
Me tomo por sorpresa el comentario del oficial Whip.
- A que te refieres Whip?
Layla lo miro con complicidad, como si ella supiera algo que yo no.
- Mira nada más, está casa está completamente despersonalizada. No hay fotos ni nada, solo pinturas antiguas pero ni siquiera retratos de los familiares de Santinni o algo así, no hay fotos ni nada, solo está el lujo y no más. La casa no tiene rastro de personalidad y eso es una pena, tanta casa y nadie que la habite. Apuesto a que el viejo Santinni no vive aquí ni nadie mas de su progenie.
- Ah?!- Yo jamás había notado que Mousetrapp que era la casa de Sid carecía de personalidad.
- Se equivoca oficial, mi primo Sid Santinni habita está casa.
- Ahora entiendo por qué invadió nuestro viernes de postres. Él vive en una casa vacía.
Mire la casa y era cierto, había pinturas y esculturas, una enorme biblioteca y habitaciones grandes, cómodas y lujosas pero Sid no tenía nada más, no fotos, no retratos, no nada más. Ni siquiera una habitación con su sello personal o que al menos pudiera decir que era su habitación.
- Quizás así sea- Dijo Layla- Ahora le voy a enseñar el jardín, venga.
Caminamos un buen rato, yo me cansé y cuando regresamos al jardín donde estaban los demás note que Sid no estaba, me sentí algo miserable por que después de todo era nuestra fiesta de compromiso no? Layla y Samael se despidieron algunos minutos después puesto que Samael tenía que regresar a cuidar a Theobald y Layla quería quitarse ese atuendo.
- Fue un placer oficial, cuando guste búsqueme en la empresa de mi madre.
Layla le extendió su tarjeta a Whip y este la tomó y le besó la mano.
- Un placer en verdad señorita Coleman.
- Igualmente- Dijo ella.
Samael solo se despidió de forma fría y Whip le siguió el juego. Unos momentos después estuvimos a solas.
- Y bien?
- Ah? Y bien que?
- Vamos amor, eres pésimo mentiroso. Dime a qué me trajo Santinni?
- Ah? No, bueno es que yo... Yo...
Whip se acercó a mí más y más, casi estábamos aliento con aliento y este me tomo por la cintura con delicadeza.
- Escucha Steph yo estoy enamorado de ti, y no hay nada que pueda hacer, incluso la misma reina Isabel no podría hacerme cambiar de parecer.
- Whip... Yo...
- Te amo y quiero estar contigo por siempre...
- Whip...
Sentía que mi corazón estallaría cuando note que estábamos siendo observados y escuchados.
- Se acabó, has tocado mi propiedad y eso no puedo tolerarlo, Stephan es mío! Es mío!
Grito la voz colérica de Sid. Whip sonrió de lado y beso mi frente al tiempo que me decía.
- Descuida primor, no dejaré de pelear por ti.
Yo lo mire con miedo y luego miré a Sid que estaba furioso y sus lilas eran dos llamaradas de fuego chispeante.
- Te perdonaré si juras que nunca, nunca más volverás a ver a Steph, ni siquiera a acercarte a él o hablarle.
- Eso jamás Santinni!
- Entonces no me vas a dejar otro remedio policía. Te voy a tener que poner en tu lugar.
- No me digas? Bueno estoy de acuerdo, así cuando te gané podrás marcharte con el rabo entre las patas.
- Vamos a pelear!- Dijo Sid que se quitó su camisa y apretó los puños.
- Bien!
Whip hizo lo mismo y me dio sus cosas.
- Whip no! Sid para con esta locura!
- Está bien nene, no me voy a acobardar. Esto es algo inevitable.
- Pero... Sid!
Sid ni siquiera me vio o me puso atención, su mirada estaba concentrada en el oficial Whip.
- Bien Santinni esto se decide ahora!
- No!- Grite- No, basta!
- Kuri, Kanon, Elliot, sujeten a Steph!- Ordenó Sid sin mirarme.
- Que?! Pero.... Sid mírame! Sid!
- Está vez no Steph, no quiero que intervengas, es ahora o nunca que debo defender lo mío!
- Es cierto amor, es ahora o nunca!- Dijo Whip.
Yo arroje las cosas del oficial dispuesto a intervenir pero de inmediato Elliot me aferró una pierna, Kanon por los hombros y Kuri por el brazo.
- Descuida primor, no perderé!
- Suéltenme! Qué carajos les pasa?!
Reclamé a los que me tenían sujeto, pero nadie dijo nada más, ni siquiera me miraban.
- Benny!
El italiano dio un paso y Kuri dijo.
- Tu no te metas en esto.
- Pero....
La mirada de hielo de Kuri detuvo por completo a Benny.
- Sid no por favor.
--------------------------------------------------------
Del libro de Layla.
- Por que demonios nos perdimos la pelea de ese policía y Sid eh?
- Ya te lo dije Samael, esa pelea es muy importante.
- Por eso mismo deberíamos estar viéndola!
- No entiendes, esa pelea va a a poner de rodillas a Sid. Ese Leviatán orgulloso al fin va a saber que significa perder.
- Mmmh no.
- No?
- En esa pelea no hay posibilidad que la gane el policía humano, incluso si alguien de la asamblea lo defiende, ese tipo está ya mismo muerto, Sid es muy fuerte.
- No me refiero a eso, por fuerza Sid lo va a matar pero si lo mata pierde a Steph.
Samael guardo silencio mientras el coche avanzaba por la cuidad que comenzaba a cubrirse de lluvia.
Si Sid peleaba, él mismo estaba sentenciándose a un dolor enorme, el perder su corazón, lo cual era una ventaja para mí, pues tendría mi propia oportunidad con Steph, pez estúpido, sus celos le harían perder el control y terminaría perdiendo lo que más amaba. La otra posibilidad era que el perdiera a propósito pero Sid no era de esos, si él había aceptado pelear era por que estaba decidido a " ganar".
- Layla tu plan es muy inteligente pero aún está el policía. El rubio idiota lo tiene en muy alta estima, incluso si no existiera Sid, él podría representar un peligro para ti.
- Eso es cierto Samael pero no olvides que el policía es hijo de Adán y eso me pone en ventaja. Nunca olvides que soy una hija de Lilith, yo no peleó en esa forma tan primitiva, conservo la cabeza fría para poder atacar.
Samael no dijo más durante el camino, me dejó en la puerta de la empresa y se fue a cuidar a su amado humano.
Lo siento Steph pero yo te amo mucho más allá de todo y si esto representa mi oportunidad, la tengo que tomar.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).