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ESPECTRO... DE DOLOR L2 por Lory Backon

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Notas del capitulo:

Hola a todos gracias por leer! :)


Del Libro de Samael.
Risas.
Para cuando arribé al lugar Kanon estaba resistiendo muy bien los ataques de aquel enemigo, de inmediato busque con la mirada a mi pequeño amante el cual se encontraba en el suelo desmayado. Intenté buscar en su mente algún indicio de daño pero solo parecía estar dormido, eso me dejó más tranquilo. Investigue también en la mente del rubio y en la del italiano pero todos estaban dormidos.
Entonces las cosas se complicaron para Kanon.
- Te tengo!
Jasha tomo a Kanon por el cuello y lo apretó hasta que se le quebró, pero Jasha no lo liberó, sino comenzó a hacer presión sobre él.
- Te voy a arrancar la cabeza de una buena vez, eres un espectro inservible! Y si no puedes servir a la oscuridad, tu inútil existencia no vale la pena.
Kanon aferró la muñeca de Jasha intentando soltarse pero no ocurrió.
- Eres una vergüenza para los hijos de Belfegor! Agradece que yo me voy a tomar la molestia de eliminarte!
Kanon seguía luchando contra Jasha pero su piel comenzaba a ceder y me di cuenta de aquello cuando vi una estela de su esencia brillar fuera de su cadáver. Es tiempo, pensé y de inmediato me lancé contra Jasha en una patada que lo mando con todo y Kanon aún bien sujeto de su mano a estamparse contra un árbol.
- Lo siento pero no eres bienvenido aquí!
Este rápidamente y sin soltar a Kanon que ya tenía el cuello muy quebrado se incorporó.
- Que demonios?!
- Mi nombre es Samael y soy un hijo de Belcebú.
- Así que tu eres el ladrón de mentes eh? Nada menos que el líder de la asamblea de Cisjordania.
- Felicidades sabes quién soy.
- Claro que sí lo sé, eres muy famoso por dejar que tú asamblea fuera destruida al abandonarla.
- Yo no deje que fuera destruida, ellos fueron los que se dejaron destruir.
- Si el líder abandona la asamblea lo más usual es que la asamblea quedé a merced del peligro que acecha.
- Y cual es tu nombre y tu consejo para evitar que la asamblea se caiga sin su líder? Acaso sería traicionarlo, robarle su poder y acecharlo hasta que muera?
-Yo soy Jasha de Belfergor, señor de Belcebú y mi consejo es fácil decirlo pero difícil de acatar. La asamblea tiene que castigar a su líder si es débil y fortalecer a sus miembros más importantes.
- Castigar para ti es matar a tu líder?
- Bien sabe el señor de las moscas que no puedo matar a ese inepto líder, pero si puedo acelerar un poco su camino a la extinción.
- Es lo mismo, estás matando a alguien, peor aún , a un humano.
- Eso no es un humano.
- Pues come y respira como uno.
- Ahora, pero él y su hermano fueron monstros durante siglos.
- Alguien tiene mucho resentimiento contra otro alguien eh?
Jasha de Belfergor miró al césped y apretó el puño, entonces de inmediato reconocí el oportuno momento de debilidad y me cole a su mente.
Una imagen borrosa de una mujer muerta en la nieve y un sentimiento de odio hacia los gemelos me invadió. Rápidamente busque más allá de lo que él quería mostrar, pero aún había muchos candados, sin pensarlo me puse a trabajar en burlar las cerraduras y aunque me costó unos segundos al final lo logré.
La escena era muy triste, Yuri tenía su Shaska ensangrentada y le daba la espalda a la escena, Jasha de Belfergor miraba aquello con profundo dolor, no cabía en si de la conmoción. Le tomo unos minutos hablar.
- Pero su... Su alteza.
- Escucha bien Jasha, jamás se te ocurra desobedecer al líder. Jamás.
- Pero...
- Si tú no me obedeces significa que no me amas. Y yo no puedo permitir eso, ahora regresa de inmediato a palacio.
Yuri camino sin voltear a ver a Jasha o al cadáver que dejaba atrás y Jasha más por miedo que por amor siguió a su líder.
- Así que Yuri hizo eso...
- Maldito ladrón de mentes! Sal de mi cabeza!
Jasha se agarró los cabellos y sacudió un par de veces la cabeza.
- Quien era ella? Tu novia? Humana no era, es tabú matar humanos.
- Era Jade, hija de Caín y Lilith ya que tanto te urge saber, maldito ladrón de mentes.
- Caín? Por todos los demonios.
Yo conocía la historia de Caín, el que era el humano más viejo del mundo. Por que Caín aún conservaba su calidad de humano pero tenía más de dos mil años.
Yo conocía la historia de este qué tal como la estrella de la mañana, Lucifer, había elegido vivir maldito y en el destierro para bien del resto de la humanidad aunque la historia nunca se había contado bien, tal cual la de Lucifer. También sabía que Caín había vivido con Lilith un tiempo y estos habían procreado bastantes hijos, que ahora vivían escondidos del mundo, alguna vez uno que otro se había colado entre la humanidad y habían olvidado con inocencia o con saña sus orígenes, después de todo a quien le hubiera gustado que los asociasen con algo maldito? Como deje antes, yo había visto al mismo Caín, pues decidió residir en Jordania, la verdad tenía tanta curiosidad de conocerlo que mi propia asamblea se sorprendió de que aquello y no dudaron en invitarlo a la asamblea pero este se negó con un simple no. No lo conocí hasta que no fui yo mismo al lugar donde esté estaba, la ciudad de Petra que era una cuidad arqueológica ya en ese entonces.
Esa vez no charlamos mucho, más bien me gustaba pensar que nos dedicamos a conocernos en el más absoluto silencio, una intimidad de ese tipo se tiene con pocos espectros o enemigos.
- Y que demonios hacías con una hija de Caín?
- No es tabú amar a un descendiente de Caín.
- No, no lo es, pero igual no es común.
- Mi corazón era de ella, pero al líder no le pareció bien.
- A Yuri no le pareció bien?
- Es simple, me iba a marchar con ella a donde moraban los hijos de Caín.
Ahora comprendía la situación, si Jasha se marchaba con la hija de Caín la asamblea de Rusia perdía su título de legítima, aunque algo no me parecía que fuese muy claro, y es que Yuri era justo como líder y nuca cruel.
- No puedo opinar sobre lo que tu líder ahora príncipe del infierno de la avaricia hizo, pero si puedo decirte que es un acto sumamente grotesco la traición que le hicieron a su líder Kuri.
- Grotesco? Su gemelo mató al objeto de mi amor, yo mataré al objeto del suyo.
- Entonces no eres mejor que el príncipe de la avaricia y no tienes derecho a reclamar algo, incluso eres peor que este; ya que el la enfrentó de frente, al igual que a ti, pero tú y tu asamblea robaron el poder de Kuri y lo dejaron indefenso, si el tuviera sus poderes y se batieran en un duelo, incluso aplaudiría tu coraje pero solo eres un cobarde, sabes que no puedes ganarle a tu actual líder en condiciones normales y ahora vienes a reclamar una victoria suciamente.
- Cállate! Pelea!
Este se me lanzo y pude percibir en su mente un sentimiento de recuerdo, alguien ya le había dicho algo parecido, esquive sus golpes con facilidad y entonces este saco su espada Kindjal, y yo no le hice menos con mi falcata de mango de oro divino.
Estás no se hicieron esperar y se cruzaron en un choque tremendo que causó un resplandor en la temprana noche Londinense.
Yo pocas veces usaba mi falcata pero había aprendido a usarla bien en el lilim ya que por lo contrario a las hijas de Eva, las lilims son unas guerreras natas, no hay espada más pesada que con la que se entrenan las pequeñas para que cuando pasan a tener sus propias armas sus movimientos sean aún más rápidos. Y al igual me habían entrenado a mi.
Jasha de Belfergor no era nada estúpido aunque si muy persistente y eso no le impidió darse cuenta que varias veces estuve a punto de atravesarle de una estocada y eso lo hizo actuar de manera más irracional.
Justo cuando estábamos enfrascados en una batalla de roversos este dio un salto hacia atrás y giro en un serie de piruetas una tras otra hasta alcanzar a los humanos y tomar a mi pequeño castaño por los cabellos.
- Maldición!
- Este me parece muy bueno para ser el primero en morir, no te parece señor de las moscas?
- Déjalo!
- Guarda tu arma, pues sin importar lo que me suceda te juro que me lo llevo conmigo!
Lo miré furioso! Estaba repleto de irá, ese idiota estaba tocando mi propiedad con sus sucias manos manchadas de podredumbre y estaba aún más furioso por que Theobald estaba en peligro y yo lo había puesto ahí.
Guarde mi espada y Jasha sonrió de lado.
- Ahora si sucio ladrón de mentes, vas a conocer mi poder-Dijo este cuando Kanon se le fue encima mientras me decía.
" Atrápalo!"
Este me arrojo a Theobald y rápidamente lo atrapé, pero Jasha furioso le enterró su espada en medio de los omóplatos y el oriental por reflejo dejo salir su alas.
-Me hiciste enfadar maldito espectro de cuarta y por eso te voy a arrancar las alas, no te las mereces!
Rápidamente Jasha tomo el hombro derecho de Kanon y sujetó por el borde que se pegaba al omóplato el ala derecha de Kanon, entonces sentí esa presencia que me era familiar pero que sabía ocultarse bien.
Un segundo antes de que Jasha tirará de las alas de Kanon, del cielo cayó un querubín que le arrancó o de tajo casi todo el cuero cabelludo al ruso que emitió un potente alarido y liberó a Kanon.
- Waaaaaaa! Maldito!
- Jasha de Belfergor, le has tocado.
- Maldito Totschläger!
Detrás de Jasha salió el albino pequeño que ocultaba una mirada de suprema rabia. En tanto Layla acudía a ayudar a Kanon para alejarse de ahí y Sid se paraba a resguardar a los demás.
- Maldito Totschläger! Maldito! Te voy a acabar.
Elliot avanzo unos pasos pequeños y soltó una sonrisa de lado. Esto era bueno para nosotros pero terriblemente malo para Jasha.
- Has tocado mi propiedad, acaso no sabías que todo el que lastime a Kanon se enfrenta a mi furia?
- Maldito! Tú furia y tu son nada! Nada! Te voy a acabar!
Elliot metió sus alas pero esa vibra infernal que despedía me indicaba que era buen momento para retirarnos aunque me moría por ver pelear al asesino.
- Te voy a dar una oportunidad Jasha, pídele perdón a Kanon y arráncate tus propias alas y te dejaré a medio existir.
- Jamás me arrodillare ante un espectro de tan baja categoría! Si no fuera por ti ya habría dejado de existir!
- Esa es tu respuesta?
- Mi respuesta es que tú y tu mudo idiota se pueden ir al infierno mismo! Soy realeza y no importa que suceda, si existo existiré como un noble espectro y si dejo esta existencia será igual como un noble espectro, no humillado como él!
- Bien- Dijo Elliot que detestaba se dijeran cosas malas de Kanon o que era débil, pues él mismo defensor había sido el causante de tales debilidades- Samael! Sid! Llévense a todos en el coche! Layla, llévate a Kanon!
- Si!- Dijimos mi hermana yo al mismo tiempo pero Kanon se pronunció.
"Elliot no lo hagas"
Todos miramos al oriental que apenas se recuperaba del ataque.
"A ti no te gusta pelear"
- Te tocó, no puedo soportarlo... Kanon yo no puedo... Soportarlo!!!!!
Elliot al fin dejo salir su ira contenida y se transformó en un espectro horrible, sus cuernos quebraron el pequeño cráneo del albino y sus garras se dejaron ver. Rápidamente este se lanzó contra el espectro de Rusia, y en serio que fue tan rápido que nos tomó a todos por sorpresa y apenas si vi como del cuello se lo llevó por los cielos oscuros de Londres que se camuflajeaban con sus alas.
" Elliot" Dijo Kanon sin pensar que aún podíamos oírlo.
Yo llevé a Theobald en brazos hasta el coche donde Sid ya había metido a los demás.
Abordamos el Leviatán y yo y apenas anduvimos unos cuantos metros cuando en el cielo se desataron los relámpagos de enemigo, Sid conducía mientras yo miraba aquellos relámpagos, Elliot debía ser un espectro muy osado para liquidar a uno de otra asamblea en territorio enemigo, o debía estar muy enojado; quizá un poco de ambas.
Luego de unos instantes de conducir tranquilamente un enorme relámpago se dejó caer seguido de un trueno ensordecedor. Cualquier humano hubiese temblando de miedo ante aquel ruido pensando en la tormenta que se vendría, pero la vista humana dejaría pasar ese efecto rojizo que llevaría la luz que emitía el relámpago, signo del poder de Elliot.
- Ese pequeño asesino es algo serio.
Dijo Sid mientras metía el coche en el estacionamiento de Mousetrapp.
- En definitiva así es.
Justo cuando llegamos los humanos despertaron, todos excepto Kuri que por su estado físico estaba muy golpeado y además su cuerpo ya no podría soportar más, así que Sid y los demás lo llevaron a una habitación para revisarlo, en tanto Theobald comenzó un berrinche terrible.
- Ven Theobald vamos a que duermas algo.
- No quiero, me duele!
Este señaló su cabeza. Yo sabía de donde venía aquel dolor de cabeza y agradecía a Elliot haberle arrancado el cuero cabelludo a Jasha pues este había tirado de los cabellos de mi castaño.
- Anda, vamos! Se buen chico.
- No quiero! Me duele! Me duele!
De inmediato tome a Theobald de la mano y me dirigí a buscar a Kanon, sabía que Layla y él habían llegado a Mousetrapp desde antes.
Kanon estaba realmente afectado por el arma de Jasha. Era lógico, cuando Kanon había perdido su voz, había perdido el 70 por ciento de sus poderes.
- Que tan grave es?
Pregunté a mi hermana.
- Con descanso estará bien, pero es muy necio y quiere ir con Elliot.
- Mala idea, Elliot debe estar hecho un demonio casi.
- Lo sé.
- Hablaré con el a ver si así mejora la cosa.
Layla me cedió el paso y yo entre con Theobald que iba lloriqueando de mi mano.
-Kanon?
"Samael, quiero verle"
- Lo sé, pero sabes bien que no es bueno que lo veas así.
" Estará bien?"
- Por Belcebú! Kanon! Es Elliot! Es un asesino hecho y derecho!
"No digas eso por favor"
- Perdón- Dije corrigiéndome al ver su semblante ante la palabra asesino- Pero sabes bien que pocos espectros pueden ganarle a Elliot.
Kanon miró al piso, su cansancio era muy evidente, tenía que aprovecharlo.
- Kanon, tienes que descansar.
" Esperaré a que llegue Elliot, quiero asegurarme que está bien"
- Él esta bien. Te lo aseguro... Además quería que descansarás por que necesito un poco de ayuda.
Dije elevando la mano de Theobald que aún lloriqueaba. Kanon me miró con tristeza y yo le dije.
- Si me ayudas te prometo mandar a Elliot a verte en cuanto llegue.
Este torció en gesto y se levantó de donde estaba con trabajo.
" Si no me cumples, no te volveré a ayudar"
- Descuida, lo haré.
Kanon se recostó en la cama y yo llevé a Theobald en contra de su voluntad hacia donde estaba el oriental.
- No quiero! Me duele! No!
En cuanto Kanon lo pegó a él, su poder comenzó a darme mi tan amada tranquilidad.
- No! Nnnn... No... Qui...Quie...
Sus ojos se cerraron con rapidez y unos instantes después los de Kanon también. Qué pesadilla era para un espectro tener un punto débil. Kanon era el de Elliot y él mismo se lo había creado y yo estaba igual, yo mismo me había creado mi propio punto débil y mientras fuera parte de los condenados eso no cambiaría. Salí con rumbo a reunirme con los demás, lo que había sucedido seguro era apenas una pequeña alerta de que la asamblea de Rusia podía pisar nuestro territorio.
Sid se encontraba en la sala de estar junto a su rubio y a Roja.
- Como está Theobald?- Dijo el rubio.
- Bien, ahora está durmiendo junto a Kanon.
- Que bueno! Suficiente es con que Kuri este mal.
- Que tan mal está?
- Su cuerpo recibió mucho daño, necesitará unas semanas de hospital y algunas más de descanso- Respondió Sid- Ahora mismo Layla lo está atendiendo.
- Iré a verlo.
- Y Elliot? Pregunto el rubio.
- Quien sabe, debe estar por algún sitio oscuro de Londres devorando lo que quedó pendiente.
El Leviatán soltó una sonrisa risa y pude sentir el temor del rubio ante aquel comentario, el cual trato de disipar yendo a buscar a Roja.
Yo subí hasta la habitación donde habían recostado a Kuri, entré y de inmediato vi a Benedetto intentando ayudar a Layla en todo lo posible.
- Cual es el diagnóstico?- Pregunté.
Layla me dio esa mirada de complicidad, que indicaba que las cosas eran peores de lo que ella mencionaría.
- Nada bien, tiene rota una costilla, varios hematomas pero hay uno en su pierna que es demasiado grande.
Yo le abrí mi mente y le cuestione " hemorragia de la femoral?", a lo que ella me respondió de la misma forma " Es lo que me temo, pero no puedo hacer algún torniquete con Ben cuidándolo tan obsesivamente"
- Yo me encargaré de Kuri, ahora tú y Ben salgan de aquí. Si llega Elliot no dudes en mandarlo con Kanon, es imperativo!
- Que?!- Respondió Benedetto- No! Yo me quedo!
- Y que puedes hacer por él?- Dije yo con algo de despotismo- No eres médico ni tienes algún conocimiento de medicina o si?
- No, pero...
- Escucha bien voy a cuidar de él, solo mantente tranquilo y espera noticias, de acuerdo?
- Pero...
- No voy a dejar que muera este ruso idiota.
Sus ojos color aguamarina estaban a punto de dejar caer ese mar encerrado pero se resistían y se quedaban cristalinos, así que el chico término por asentir.
- Ahora fuera!
- Vamos Ben!- Dijo Layla que estaba consciente de que el ruso no tenía tiempo.
Nada más salieron ellos de la habitación y tome el débil cuerpo de Kuri, lo envolví entre mis brazos, estaba ya muy muerto, cuanto pesaría? 45 o 43 kilos?
- Vamos Kuri, eres un líder de asamblea, pelea como tal.
De inmediato extendí mis alas y me lancé desde la ventana para atravesar los cielos oscuros de Londres hasta el hospital.
Mientras volaba solo pensaba en una cosa, Theobald. El peligro en el que nos había puesto era inminente y al ver a Kuri así de débil me prometí una cosa a mi mismo. Si regresaba de la batalla de Rusia, no demoraría más en ir a cumplir, iría a buscar a ese odioso ser y esta vez hablaríamos en mejores términos. Si eso salvaba a Theobald era un lujo que podría darme.
_________________________________________________________________________________________________________
Del Libro de Elliot
Un cuento no del viejo Oeste.

Me había refugiado en mi propia casa, aún olía a su esencia, que delicia! En definitiva Jasha podía ser muy hablador pero si era un noble y además muy delicioso. Había perdido de nuevo los estribos, una de tantas veces, al menos esta vez mi mente no me había jugado ninguna broma. No! Aunque... No había podido ir al lado de Kanon por que aún olía a Jasha.
Cuando salí volando, le había atacado por el cuello y se lo había retorcido hasta que lo escuché tronar pero este no cayó, se mantuvo en vuelo.
- Crees que así de fácil me vas a derrotar asesino?
- Ni siquiera había comenzado, en realidad quería jugar un poco contigo pero me estás provocando.
- No importa que hagas, ni tú, ni los inútiles impostores de la asamblea segunda de Londres podrán vencer al señor Ivka pues nuestro propósito esas grande y glorioso.
- Que quieres decir? Acaso no sabes que tenemos a un Leviatán.
- Si y también sé que tienes al premio del maestro K. Así que con más razón te vamos a destruir, a ti, a tu asamblea, a ese Leviatán inútil.
- Para que de enfrentarán a un Leviatán o a mi? Eso sólo causaría un conflicto innecesario que terminaría en la extinción de toda una asamblea.
- Como te dije, nuestro propósito es más noble, mi señor Ivka desea restaurar la gloria de Rusia, que fue empañada con la partida de los gemelos y todo eso fue por ti, maldito asesino y como veraz ahora somos mucho más fuertes que ustedes.
- Ah sí? Yo no veo como.
- Es simple, ustedes tienen al premio del maestro que por lo que se y por lo que vi es un completo retardado. Además sus puntos débiles son los humanos a los que les han dado su corazón y el tuyo obvio la vergüenza de mi estirpe.
- Tenemos una hija de Lilith.
- Una maldita! Qué puede hacer ella contra un espectro del rango del señor Ivka?
Yo guarde silencio, no sacaría todas mis cartas de una sola entrega.
- Un Leviatán.
Dije yo nuevamente para provocarlo pero su respuesta me dejó pasmado.
- Tampoco estamos solos!- Dijo en un comentario lleno de ironía.
- Que quieres decir?
- Quiero decir que basta de charla!
Este se lanzó contra mí en una pelea de puños y como yo aún estaba intentando descifrar lo que había querido decir alcanzó a atestarme un par en la cara, eso me hizo reaccionar de nuevo y me lance contra él. Le sujete del cuello y en un movimiento rápido le torcí la cabeza luego fije mis pies en sus hombros pero este se zafó y se lanzó en picada, ya harto le alcance rápidamente tomándolo por lo que le quedaba de cabello y comencé a elevarme más y mas con mi máxima velocidad provocando que los rayos se volvieran más constantes y más letales para nosotros. En una voltereta y ya con suficiente altura enganché mis antebrazos a los de él en medio de aquella lluvia de relámpagos. Esperaba que aquello funcionase pronto pues mi fuerza física estaba impedida por mi tamaño.
- Maldito enano! Crees que podrás ganarme?
- No, pero ellos si.
Los enemigos comenzaban a dejarse ver, apenas ángeles menores pero estos comenzaban a afinar la puntería.
- Estás loco? Nos van a hacer polvo de cadáver!
Yo sonreí y entonces le empuje más arriba cuando un relámpago quemó la punta de un costado de mi ala derecha.
- Te han dado! Zoquete!
De inmediato uno perforó su mano y vi a un enemigo apuntarme. Lo conocía bien, no era precisamente un fan mío así que sonreí, mientras sentía que Jasha estaba a punto de zafarse de mi agarre.
- Suéltame idiota! Acaso no ves que nos van a desaparecer a los dos!
- Solo eres una basura Jasha! Donde esta la cantaleta de "Soy realeza y no importa que suceda, si existo existiré como un noble espectro y si dejo esta existencia será igual como un noble espectro." Hablador, basura miserable, mi Kanon tiene más coraje y no nobleza en su dedo meñique que tu en toda tu asquerosa existencia!
- Suéltame! Asesino loco!- Dijo desesperado cuando un relámpago de rozo la mano.
- Esa es la diferencia entre tu pobre asamblea y la asamblea de Londres, la cual está bajo mi mando. Nosotros jamás retrocedemos ante nada! Creemos por completo en nuestra forma de existir, nosotros creemos!
- Suéltame!
El enemigo apuntó en mi dirección y en una fracción de segundo lo vi articular con aquellos labios impíos de ángel aquella palabra.
- Totschläger.
En sus labios, la palabra me dolía, aunque era verdad que solo aquel ente era dueño de llamarme así.Pude ver cómo por costumbre cerró los ojos y sus cabellos dorados se agitaron con el impacto de la luz.
Era ahora o nunca! Me moví en mi máxima velocidad y dejé que el impacto le atravesará el cuello, uff que cerca estuve! Sin perder el tiempo y aprovechando aquello me cubrí con el cuerpo de Jasha y me deje caer hacia la tierra. Un relámpago nos persiguió, era algo considerablemente grande y poderoso, cerré los ojos para recibir ambos impactos; el del suelo contra mi cuerpo y el del relámpago que aunque el impacto directo lo recibiría el cuerpo de Jasha, sería tan terrible que me alcanzaría a mi, luego vino aquel terrible impacto, los huesos de mi cuerpo se tronaron por completo y tuve que dejar salir más por necesidad que por otra cosa mi forma natural, el cuerpo de Jasha se quedó sobre el mío y de inmediato vino el impacto del rayo, y el trueno le siguió.
El dolor del impacto indirecto fue demasiado pero aún así aferre a Jasha con todo lo que me quedaba de fuerzas, incluso enterré mis garras en su piel y cerré los ojos, pues sabía que mi vista se vería severamente afectada.
Cuando todo terminó sentí como la masa que tenía en mis manos comenzaba a moverse y abrí los ojos, lo sabía! Apenas si percibía sombras y Jasha debía estar igual a mi, aún así como yo ya había estado en esta situaciones y además de que como espectros la pérdida de algún sentido no significaba nada para nosotros aferre a mi presa que estaba severamente herida, seguro tendría un enorme agujero por el cual se escapaba el olor delicioso de su esencia.
Me puse en pie rápidamente empujando el bulto que ahora representaba el espectro Ruso, le tome por las alas y di un buen tirón de ellas.
- Waaaaaaa!- Se quejó este con una voz insípida así que yo di un segundo tirón y este volvió a quejarse una vez más.
- Ay vamos Jasha! Desaparece con algo de honor, no era eso lo que pregonabas?
- A... asesino..
- Sabes algo? No me gusta ese apodo, nunca me ha gustado!- Dije y tire una vez más con saña de sus alas hasta que estás se desprendieron.
- Waaaaaaa! De... Déjame!
- No quiero. Me estoy divirtiendo montones. Ahora en que estábamos? Ah! En que morirías como un noble?
- As..esino....
- Te dije que dejes de llamarme así!- Dije apoyando una rodilla justo en sus espalda para quebrársela- Me irrita que me digan asesino.
- Eso eres...- Dijo juntando sus pocas fuerzas- Tu le qui...Quitaste su poder a Haruki...Tu...Lo... Hiciste débil por que era un peligro para ti y ahora... Te ofendes de que se diga la verdad? Asesino! Asesino!
- No me gusta que me digas así!
Dije pegándole una mordida en la parte de su cuello donde le habían herido con el primer rayó y dejando que mi poder actuará devorando su esencia.
Él intentaba ya sin fuerzas escaparse y yo en tanto veía las cosas de otro color o sabor distinto.
Al final al terminaron sus fuerzas por ceder, Jasha no podía pelear más y en ese momento fue cuando elegí vengarme de sus ofensas.
- Me llama asesino aquel que iba a traicionar a su líder?
Sus ojos se abrieron de par en par.
- Ajá! Yo lo sé todo! Su antiguo líder Yuri me lo contó, tu y esa hija de Caín tenían planeado atacar a Kuri, ya lo habías intentado antes no? Pero Yuri te descubrió aunque tu líder solo te reprendió. La mujer quería desaparecer a Kuri y meterse en esa asamblea, al fin el del poder era Yuri no es así? Kuri entonces significaba un estorbo para ustedes, cómo fallaron su primer intento, esperaron cincuenta años, lo planearon por cincuenta años Jade y tu, ah! Pero no tomaste en cuenta que te metías con el objeto del amor de tu líder y que esté no se dejaría engañar de tu falso comportamiento con Kuri, tanta amabilidad, él me lo dijo así, "Tanta amabilidad, tanto amor a Kuri de parte de Jasha el traidor era insoportable, incluso hiriente, el quería meter a esa mujerzuela que apenas conozco a mi cama, debió tenerme algo de respeto, así que tuve que liquidarla, al fin no era importante para Jasha ni para el mundo, nadie la extrañará a fin de cuentas" Y mira nada más lo que son las cosas, tampoco nadie te va a extrañar a ti.
Abrí mis fauces y le pegue tremenda mordida que el cadáver de este dio un respingo, luego comencé a tragarme su esencia.
En cuanto termine y vi como el envase se hacía cenizas volé de inmediato a mi casa a resguardarme, tenía que esperar a que esta sensación de haber vuelto a matar se me pasase.
Claramente esto había sido una provocación, y conforme pasaban las horas y el dolor del ala se me agudizaba y la vista apenas si volvía a aclararse y mi esencia se iba guardando de poco en poco dentro del pequeño cuerpo que habitaba iba pensado con más claridad.
En definitiva la asamblea de Rusia no estaba sola y no sé por qué tenía el presentimiento de que la pelea que se avecinaba no sería la única batalla que tendría que pelear y que por alguna razón no sería algo que no nos pusiera en riesgo a todos, esa sola idea me causaba resentimiento, quizás era la mera idea de perder a Kanon, de que algo le sucediera, eso me ponía mal, entonces mi esencia se agitaba y volvía al punto de partida. Así que tarde casi la noche completa en poder controlarme; antes del alba fui a Mousetrapp aún con las alas de fuera debido al daño recibido y aún bastante ciego.
- Elliot!- Dijo Layla que fue la primera que encontré en mi camino- Tus ojos!
- Donde está Kanon?- Pregunté sin decir más.
- Está durmiendo.
- Como está?
- Bien, supongo ya está casi repuesto y... Tienes que ir a verlo!
- Eso es seguro!- Dije interrumpiendo a la muñeca francesa que me siguió con preocupación.
- Elliot que sucedió?
Yo no respondí a sus preguntas, solo camine aprisa y cuando hallé la habitación donde estaba Kanon abrí la puerta con cuidado y le dije a Layla.
- Layla, no deseo ser interrumpido por nadie, necesito un favor, reúne a la asamblea, sin humanos, no quiero humanos cerca, la sesión será aquí pero no quiero a ningún humano fisgoneando por aquí! Puedes ayudarme?
- Si, claro! Claro!
Respondió está y le cerré la puerta en la cara, no era correcto mi comportamiento pero ella entendía que en estos momentos lo que yo necesitaba tenía nombre y apellido.
Entre de puntillas y miré a Kanon dormido, yo nunca había comprendido lo que significaba dormir, quizás era como estar en pausa pero no comprendía el placer que le causaba a Kanon. Pero comprendía el placer que me causaba a mí el verlo en paz, y comprendía que no era un placer sexual ni nada similar, sino un placer de bienestar. Me senté a su lado y revolví sus cabellos un poco; este abrió los ojos de inmediato.
- Lo siento amor te he despertado?
" Elliot has regresado"
Yo asentí, estaba colapsando por dentro, mi esencia estaba inquieta, revuelta, cansada.
- Vuelve a dormir mi amado Kanon.
" Elliot tus alas! Tus ojos, que ha sucedido?"
- No importa, no importa, yo estoy bien, lo que importa es que tú te mejores.
"No seas tonto! Claro que importa! A mí me importa! "
Dijo este y se levantó de inmediato a revisar mis alas.
"Esto fue un impacto de un enemigo, que sucedió?"
Yo le platique brevemente lo que había sucedido y luego de eso él guardo silencio.
- Ves? No es gran cosa.
Este se metió molesto bajo las cobijas y se tapó de nuevo hasta la cabeza, eso me decía que estaba muy molesto conmigo y ya yo me suponía el por qué.
- Kanon?
El no respondió.
- Kanon, vamos... Yo... Yo sé que tienes mucho para estar molesto pero quiero decirte que no importa que, yo siempre te voy a cuidar y a amar. No sé que pienses de todo lo que has escuchado pero lo que sea que tú creas, yo...
Quizás es tiempo de decir la verdad Elliot, pensé, quizás si digo la verdad eso sería su salvación. Quizás así pueda él odiarte y huir lejos de ti, quizás cuando le pregunten algo sobre ti, niegue haberte conocido. Pero...
- Perdón- Dije sin más que decir, no tenía ni como comenzar a contarle lo que había sucedido los últimos mil años de mi existencia.
Me quedé con la mirada concentrada en la manta, mi ala estaba herida pero no hacía nada en comparación a lo que me hacían mis recuerdos.
" Eres un niño tonto" Dijo Kanon saliendo de la mata y sentándose en esa posición erguida que tanto me gustaba.
Yo no subí la mirada en absoluto pero él continuó.
" Tú dime qué es verdad y que no, lo que tú me digas que crea es lo que voy a creer, las habladurías de esos espectros no son nada en mis oídos, su lenguaje me es ajeno, lo único que yo sé es que tú fuiste mi protector y mi padre desde que me acuerdo, sé que eres como un hermano molesto y lo más importante es que sé que te amo y que tú a mí me amas. Elliot lo que tú me digas eso será. Nunca me has dado la oportunidad de dudar de ti, ni de tu amor. Entonces dime, que es la verdad? "
Yo subí la mirada de inmediato y Kanon me miró seriamente, luego habló a mi mente de nuevo.
"Elliot, tu hiciste todo aquello? Tú mataste a los humanos que eran mis padres y a los aldeanos esos? Tú hiciste todas esas cosas? Tú... Me quitaste mi poder?"
Vamos! Di la verdad! Vamos Elliot pequeño cobarde! Dilo! Díselo! Explícale que si hubiese sido por ti incluso le hubieras matado. Díselo! Se valiente!
- No!- Dije con seguridad- No Kanon, yo no haría tal cosa.

Cobarde! Triste e idiota cobarde! Pensé pero al ver como su mirada cambiaba y una ligera sonrisa pintaba en su rostro me sentí aliviado.
" Yo lo sé, pero aún así me enfada que te pongas en peligro, por que tienes que pelear tu?"
" Él te tocó"
" También lo hace el viento y el agua"
- Entonces tendremos que hacer algo con ellos!- Dije con cinismo. y una sonrisa.
"Elliot vamos!" Dijo este ya poniéndose más serio "no me gusta que minimices las cosas que te digo. No me gusta que pelees, y menos que pase eso" - Dijo señalando mi ala quemada " Tampoco que digas cómo si fuera gracioso que no importa o que no es gran cosa"

Yo amaba lo suficiente a Kanon para poder ser fuerte por los dos y callar mis injurias. La verdad sería muy dolorosa para él y aunque quizás algún día le confesaría todo, no sería hoy el día que le contara sobre cómo un asesino le arruinó la vida.

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Del Libro de Kuri
La apuesta que no fue apuesta.
Apenas volví en si, vi sus ojos aguamarina con ese gesto de preocupación genuina, en ese caso me fue imposible dudar sobre que podía existir alguna posibilidad en que este mocoso algún día me pudiera amar.
- Kuri! Ay Dios! Qué bueno que ya despertaste!
Este se me fue encima y no pude evitar quejarme de un dolor que quien sabe dónde se ubicaba.
- Lo siento! Lo siento!
Dijo el castaño que se apartó rápidamente. Yo estaba envuelto en mantas y comencé a luchar contra estas para poder sacar la mano y quitarme la mascarilla de oxígeno que tenía puesta.
-No! No te la quites Kuri.
Yo seguía insistiendo pero nada más no podía liberarme.
- A ver, está bien yo lo hago.
Este me quito la mascarilla y al fin pude hablar.
- Ben, donde estamos?
- En el hospital. Llevas un par de días aquí.
- Carajo! Ben ayúdame a salir de estas mantas, quiero irme.
- Eso no! Estás loco? Tienes pulmonía y además estás muy bajo de peso, costillas lastimadas y casi te mueres por ponerte al tu por tu con ese monstro!
- Pero Ben...
-No Kuri-Dijo el mocoso con enfado.
- Ya te dije que no me voy a morir, no te vas a ir al infierno.
- Idiota! No entiendes que eso no importa!- Dijo él con furia, pero inmediatamente después se dio cuenta de que se había delatado- Bueno no es que no importe es que yo....
Él se puso rojo y se dio media vuelta para evitar que yo lo mirará.
- Ben?
- Ah? Dime?
Dijo intentando disimular su vergüenza.
- Gracias por preocuparte- Dije así sin más.
Él guardo silencio por un momento y luego dijo.
- De nada.
La tarde transcurrió sin muchas novedades, Samael era ahora mi doctor, en realidad Samael era el mas diestro como doctor, después había sido mi amado Yuri y el ángel Ephy los que le seguían en practicar la medicina lo mejor posible y luego yo. Los últimos eran Kanon, ya que este no llevaba tantos siglos ejerciendo como nosotros y luego Sid y hasta el final Elliot, Sid era bueno pero incapaz de darle importancia a algo más que no fuera su rubio de ojos negros y Elliot jamás fue a la escuela de medicina así que sabía lo que los demás le habíamos enseñado. Así que mi recuperación fue bastante rápida debido al gran conocimiento de Samael.
- Cuando podré irme a mi casa?
-Osh, nada más se vuelven humanos y son muy fastidioso!- Dijo el hijo de Belcebú- Te voy a dar de alta esta semana pero quiero que reposes, Kuri, no puedes seguir así, tu cuerpo está muy mal. A este paso no llegarás ni al día de San Silvestre.
- Samael, yo...
El espectro acomodo sus gafas, siempre me parecieron una pretensión pues era más que obvio que no las requería pero ahora comprendía aquel truco, eso lo hacía ver más humano.
- Lo se Kuri, se que estás ya muy cansado, tu cuerpo se está rindiendo pero debes de pelear.
- Es muy difícil, Samael! Es muy cansado, quizás debería...
- No seas tonto, no te dejes morir como humano, tu no eres así. Tú eres ambicioso y eres mucho más que esto.
- Pero ya estoy muy cansado.
- Lo sé, por eso debes de hacer caso a lo que te digo.
Ambos guardamos silencio unos momentos, yo me aferre a las mantas que me cubrían sintiendo esa impotencia dentro de mi.
- Kuri, no seas bobo, no te rindas.
Dijo Samael y yo voltee a verle.
- Ese mocoso ha estado al pie del cañón junto a tu cama todos estos días, ayer lo sorprendí cabeceando frente a la máquina de café; en cuanto me vio intentó fingir que no estaba cansado para que no lo corriera, él no me lo dijo pero lo leí en su mente. En realidad es genuina su preocupación, lo que no lograste como espectro lo hiciste como humano Kuri, lo has enganchado.
- Por lástima.
- No creo, hazme caso yo se lo que he visto en su mente.
Su último comentario me hizo sentir un poco mejor, pero Samael y yo sabíamos que la situación con mi cuerpo no iría mejor.
Este término de revisarme y dejó al chico entrar.
- Como está Kuri Señor Samael?
- Bien, aunque la dieta que lleva la vamos a cambiar un poco y necesita reposo, mucho! Lo daré de alta en cuanto estén los exámenes. Crees poder hacer que se este quieto unos días?
- Así tenga que amarrarlo a la cama, lo haré!
- Que?!- Dije yo indignado al escuchar aquello.
- Bien dicho- Dijo Samael sonriendo de lado- Por ahora es todo.
- Muchas gracias por todo-Dijo Ben haciendo una reverencia a Samael que se marchó en seguida - Escuchaste Kuri?
- Osh! Ustedes dos son una molestia!
Mire con atención a Ben que estaba arreglando mis mantas y comprobé que era cierto, estaba muy cansado, me sentí un poco alegre por que eso decía que le preocupaba y otro poco miserable, por que se estaba desgastando por mi culpa.
-Ben?
- Que pasa?! Tienes sed? Quieres comer algo?
Negué y dije con firmeza.
- Vete a la casa a dormir.
- Ah?
- Estás muy cansado, anda, vete.
- Que cosas más tontas dices Kuri, estoy bien.
- No estás bien! No engañas a nadie!
Dije alterado y este me miró de cierta manera y por un segundo como antes, con miedo y furia.
- Perdón! Perdón! No quise ser grosero.
Me disculpé. Ben no dijo nada más ni se movió, solo oculto lo mirada, lo había vuelto a arruinar y ni como saber que estaba pensado así que comencé a explicarme.
- Perdón Ben, en serio aprecio mucho todo lo que has estado haciendo al cuidarme y al dejar a Aramis con Steph y Sid, no creas que es una orden ni nada parecido, no! Solo que... No quiero que tú enfermes, estás muy cansado y todo eso es por mi culpa- Mis puños se cerraron en automático, me daba coraje ser tan débil, yo debía cuidar de él, no al revés-No me malentiendas Ben, yo solo... No pienses en mí, debes pensar en ti también- Me vi interrumpido por que este puso su mano sobre mi puño y eso me hizo alzar la vista, su rostro era hermoso.
- Estoy bien, descuida.
- Pero... No es cierto...
- Vamos a decirnos la verdad Kuri, quieres?
Asentí y él continuó.
- Si estoy cansado pero estoy bien. Una vez en Italia a Aramis le dio una infección de vías urinarias, ella era una bebé de dos años y pase muchas noches sin dormir cuidando si fiebre, descuida estoy acostumbrado.
- Pero no tienes que desgastarte así conmigo.
- Ya lo sé.
- Ben... Perdón- Dije completamente vencido.
- Te propongo un trato- Dijo Ben y se sentó frente a mi- Te damos un baño por que vaya que si lo necesitas! Y entonces después de eso, me voy a dormir un rato a la sala de estar.
Lo mire, sabía que estaba siendo condescendiente pero al menos podría dormir.
- Bien! Pero te vas a la casa a dormir.
- No.
- Si!
- Que no Kuri!
- Que si!
- Con una condición!
- Cual?
- Tienes que permanecer en absoluto reposo. Ab-so-lu-to!
Dijo el haciendo énfasis en la última palabra.
- Bien! Hecho!
- Hecho!
Estrechamos nuestras manos y él agrego.
- Si no lo haces, tú me llevaras a algún lugar que yo elija y harás de mi esclavo! Además nunca volveré a cocinar algo que te guste jamás! Jamás!
- Si lo hago, tú me llevaras a algún sitio que yo elija y harás de mi esclavo! Ah! Y en cuanto salga de aquí cocinaras pasta para comer!
- Es un trato- Dijo él con una sonrisa.
- Es un trato- Repetí emocionado- Era nuestro primer trato legal, no era yo un espectro pero me pareció disfrutarlo más que si hubiera sido yo un espectro.
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Del Libro de Samael.
La paz del silencio.

La mañana siguiente estuvimos reunidos desde la mañana hasta el atardecer, detestaba dejar a Theobald con tanta enfermera e institutriz pero ahora la emergencia era inminente.
- La asamblea de Rusia nos dio una muestra de su poder y de nuestro descuido- Dijo Elliot seriamente - Se bien que todos están preocupados por la situación, pero arreglaremos esto de manera de que podremos dejar a los humanos y a Kuri lo más protegidos posiblemente, ahora mi estrategia es esta, primero necesitamos recabar toda la información necesaria para poder conocer al enemigo, Rusia es un campo amplio y es por eso que la vez pasada jugamos mucho al azar...- El niño albino comenzó por indicar las ventajas de su elección mientras yo pedía a la luz que no dijera mi nombre en primer lugar pero eso no sucedió- Entonces Samael irá primero debido a que necesitamos que robe toda la información que pueda de la mente de los enemigos.
Yo asentí y me di cuenta de la mirada que Lay me había dirigido. Jamás en toda mi existencia me había dado miedo desaparecer, siempre me había jactado de ser un guerrero muy valiente y sin ataduras pero ahora no era miedo sino tristeza, si algo me sucedía mi Theobald quedaría desprotegido al mundo.
- En cuanto la información sea recibida seré yo quien vaya, después Layla. Tendremos diferencia de arribos por una semana más o menos dependiendo de las condiciones en las que esté la situación. Ahí elaboraremos el plan de batalla. Finalmente Sid- Dijo Elliot que dirigió su atención al Leviatán y este le correspondió- Necesitamos que alguien fuerte se quede a vigilar a los humanos pero si la situación se complica guía a Kanon hasta Jasy Jatere, de ahí vuelve. Necesitaremos toda la ayuda posible.
- Que sucederá con los humanos? No sería más factible repartirlos?- Dije yo viendo aquel punto débil en el plan.
- Eso es cierto- Dijo Layla- Si están todos juntos en un mismo sitio son blancos fáciles.
Elliot se quedó mirando la madera de la mesa por un segundo y dijo:
-Kanon se quedará con Jasy Jatere.
- Quiero que Kanon sea custodio de Theobald- Dije yo y miré a Elliot tratando de explicarle que no era un pedido sino mi expresa voluntad.
- Bien.
- Steph se quedará con Kukulcán.
Todos volteando a ver a Sid que parecía estar más ausente, pero este solo daba esa apariencia pues explicó el por qué de manera muy justificada.
- No es que me guste la idea, ni que piense que pueden apagar mi existencia, pero no voy a escatimar en seguridad para Steph y la bestia del Dandain es el único que puede protegerlo de cualquier espectro desde los de bajo rango hasta los Leviatánes que quieran ir tras el.
Sid había sido muy cauto, él sabía bien que cualquiera de sus hermanos irían tras Steph, ya Nereo y Nefy lo habían secuestrado una vez y aún quedaba algo de eso en el rencor de Sid, además ningún Leviatán se atrevería a pisar el territorio de Behemot.
- Eso además de que la falta de corazón de aquella bestia me harán estar más tranquilo.
Todos los presentes pusimos cara de incredulidad ante esto último.
- Ash Sid, ya comenzaba a creer en tu seriedad- Dijo Elliot.
- Sid siente celos de Stephan hasta de una lata de alubias- Dijo Layla.
-Quien demonios es aibia?!-Dijo Sid en tono serio.
- Que le vamos a hacer- Dije yo soltando una sonrisa divertida pero de inmediato se puso todo serio de nueva cuenta.
- Que sucederá con Ben y Roja?- Dijo Elliot.
- Roja se puede quedar en el lilim- Dijo Layla.
- Eso no!- Repuso Sid- Ellos irán a donde la bestia del desierto.
Yo sabía que Sid tenía una rara predilección por Roja, y ya bien sabía que esa niña tenía un secreto guardado, que si regresaba me daría a la tarea de averiguar.
- Bien entonces, Kanon será custodio de Theobald y ambos se quedarían al cuidado de Jasy Jatere. En cuanto a Steph, Roja y Benny se irían con Kukulcán.
Reafirmó Elliot y todos guardábamos silencio pues esperábamos que nada de aquello fuese necesario. La reunión duro más tiempo pues se discutieron algunas estrategias que debíamos tomar, o que fueron sugeridas y se pusieron sobre la mesa. Al fin terminé cuando Kanon arribó.
- Entonces Samael, prepara lo pertinente para tu partida.
Asentí y salí de ahí, Layla me siguió con la mirada pero no me detuve ante eso, no quería dar explicaciones de más solo quería abrazar a Theobald.
- Samael!- Dijo en cuanto me vio y corrió a mis brazos.
Todo el mundo pensaba que Theobald era detestable y caprichoso y quizás lo era, pero había un sitio en nuestra intimidad donde él hacia este tipo de cosas; nada más con verme corría a mis brazos y se estrellaba en un abrazo, era su forma de aferrarse a mi ropa, de restregar su carita en mi pecho, de sentir aquella emoción al verme cruzar la puerta, su mente se tornaba en millones de colores y luego de aquella fiesta donde mi pequeño quedaba sin aliento venía la calma.
- Samael, que bueno que has venido, mira he pintado algo.
Este me arrastró hasta su habitación antes llena de libros de medicina y de sus deberes y ahora llena de libros para llenar de color.
- Mira! Mira! No me he salido de la línea!
Tome asiento a su lado en la cama y este posó sus esmeraldas con gran expectativa en mi reacción.
- Es magnífico Theobald! Simplemente magnífico!
- Lo hice para Samael y es por eso que me esforcé y salió muy bonito, no lo crees?
- En definitiva!
- Te gusta Samael?
- Si, gracias Theobald, me gusta mucho.
Mire el dibujo y note que aún con la mente de un niño, Theobald no dejaba de sorprenderme. Había pintado un Monet con aquella técnica de pintar con números y efectivamente le había quedado excelente. Siempre sería un humano destacado en lo que se propusiese.
- Theobald ya cenaste?
- No, quería esperar a Samael pero ya que llegaste ya tengo mucha hambre!
- Vamos a cenar, anda.
Tome de la mano a Theobald y este apretó la mía.
- Donde vas a poner tu dibujo? Si te gusto? Si no, sé que puedo hacerlo mejor Samael, solo debes decirme y lo hare mejor, veraz!
Ahí estaba, ahí estaba el viejo Theobald, ahí estaba el motivo de mi preocupación saliendo a la luz. Esa devoción a la perfección del objeto de mi afecto. Ahí estaba la obsesiva enfermedad de Theobald.
- Me encantó, no cambiaría nada más.
Él sonrió y yo leí su mente que decía..." Me esforzaré más la próxima vez para complacer a Samael".
El peligro en el que se encontraba Theobald iba más allá de Rusia o la sede, era más bien algo que no lo dejaría de seguir hasta que yo me rindiera ante mi enemigo.

 

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