Cap. 1: “La parca dicta mi destino”
Zero enserio quería llevar a su nuevo lacayo a su casa. Sin embargo eso no hubiera sido… conveniente.
Había sido un absoluto dolor en la parte baja el que su hermano y su amigo lo dejaran en paz, y esperar aún más que se fueran de una vez a la escuela, junto con papa Cross, para ir a por Rido y a ver… a cierta persona en específico; A la única persona en la que podía confiar que siempre, siempre, sabría que mierdas estaba pasando en la línea del tiempo en la que se despertaba.
(Internamente Zero se había preguntado más de una vez si ella era la razón de sus viajes en el tiempo/Dimensiones, Lo-que-sea)
Katsue era extraña en más de mil palabras.
Junto con Cross y Shizuka, era una variable completamente impredecible. Eso y el hecho de que era técnicamente una bruja maldita; vampiresa de sangre pura que disfrutaba de joderle la existencia. Aun así se preguntaba cómo era posible que no solo él y sus hijos (si estos nacían) volvieran en el tiempo junto con esta maldita bruja también.
Aun así le tenía un gran aprecio (por alguna desconocida razón que ni el mismo sabia).
Llegaron a una tienda destartalada en un rincón olvidado de la mano de dios en la parte más alejada del pueblo cerca de la academia, ni que decir tiene que un pequeño querubín con angelical presencia en compañía de un hombre más sexi que el pecado desato muchas habladurías. Lo más probable era que no durara mucho tiempo antes de que su hermano, Cross, su maestro (o peor aún; el bastardo sobre protector Kuran) se enteraran de lo sucedido.
No había pensado en cómo explicarle a Rido que tendría que vivir con su…(amiga? Aliada? Verdugo?) bruja personal y que técnicamente tenía 7 años.
Afortunadamente, no necesitaba hacerlo.
Rido se paró frente a la casa y frunció las cejas antes de asentir a Zero impresionado.
--Entiendo, como un ser divino debes mezclarte con tu entorno para evitar sospechas.
Rido estaba tan encantado con la aparición angélica de Zero y su introducción que hizo sus propias explicaciones.
Fue muy práctico en realidad.
Al entrar a la tienda (de antigüedades y también era una botica, pero a Zero no lo engañaban. Esta era la guarida de una bruja. Punto.) se toparon con la imagen de una bella muchacha de unos, aparentemente, veintitantos años (más o menos) con el pelo blanco plateado (con algo de tonalidades castañas) y los ojos eran de un color desconocido, pues hasta ahora Zero no había podido verlos pues siempre estaban cerrados. Tenía el pelo recogido en un moño, ayuda por lo que parece ser un tipo de volantes de banda para el cabello con un largo mechón de pelo desatado en la parte delantera.
Llevaba puesto (como siempre) un vestido de terciopelo blanco y el color de las correas son un patrón de rombos. Incluso el collar que lleva en el centro está conectado con el vestido. Ella también llevaba un tipo de tela de coloración azul claro alrededor de sus brazos con guantes blancos que llegan casi hasta los hombros. Su expresión era sobretodo serena sus bellos rasgos que la marcaban como una sangre pura eran incluso más radiantes que los de una vampiresa normal (Y -Rido señalo para sí mismo- sus rasgos eran parecidos a los de un Kuran, pero también tenían ese toque angelical como las del ángel).
Katsue les sonrió cálidamente al entrar en la tienda.
--Ze-Chan, estás en casa, ¿quién es tu amigo?— Katsue sonrió a Rido, al parecer, completamente despreocupada con el extraño que Zero había dejado entrar en su casa.
Rido parecía sorprendido al verla antes de mirar primero a Zero y a Katsue con asombro.
--Era usted muy minucioso en esconder sus orígenes divinos.
Katsue se ruborizó ligeramente, halagada ante el asombrado rostro de Rido y su cumplido involuntario, Zero (a pesar de su gran experiencia de vida y de haber sido corrompido por el bastardo Kuran más de una vez –de alguna manera seguía manteniendo un poco de inocencia-) no entendió la referencia.
--Ustedes dos están a tiempo, hice el almuerzo.
Los tres fueron a la parte trasera donde estaba un claro departamento, se sentaron a la mesa de la cocina y comieron una simple comida de estofado y pan, ah! Y copas de sangre (si incluso Zero, pues sabía que era sangre de un sangre pura Katsue se negaba a beber de otra cosa que no fuera eso. Como Cazador al beber la sangre de un vampiro sangre pura este le daba más poder-lo único que quería saber era ¿de quien era la sangre y de donde la conseguía esta mujer?).
Hasta donde Rido sabía, estaba degustando ambrosía. Los sabores simplemente estallar en su lengua! Nunca había comido nada tan bueno. Se sentía tan honrado comiendo la comida de los Dioses.
(Sus papilas gustativas podrían haber sido un poco sesgadas considerando que no había comido nada en un tiempo muy largo.)
--Entonces, Ze-chan, ¿qué vas a hacer con Kuran-san? -preguntó Katsue quien (de alguna manera) miró al hombre sentado junto a ella con ojos hambrientos.
--Por lo pronto tengo que informarme, posterior mente planificar y prepararme para mi gran viaje, necesito salvar el mundo vampírico—el “De nuevo” quedo suspendido en el aire. Katsue tarareo desentendiéndose del asunto, entonces una voz joven llamo la atención, sorprendiendo a Rido quien no lo había notado.
--Asegúrate de no exagerar, ah! No olvides que tu despertar será en aproximadamente ente tres semanas, vamos a preparar algunos “bocadillos” para ello y no te olvides de coger a Bloody Rose del armario—dijo el joven, Katsue asintió aprobando sus palabras, distraídamente, y todavía mirando con lentitud al apuesto hombre.
--De acuerdo Takeru—dijo Zero dando un ligero asentimiento al joven.
El joven que respondía al nombre de Takeru era muy guapo, de entre unos veintitantos años, su color del pelo blanco plateado con algo de tonalidades doradas y estaba en un estilo parecido al de Zero pero con más puntas hacia todos lados y con unos bellos ojos color verde esmeralda.
Era muy parecido a Katsue, casi hubieran pasado por gemelos. Su rostro, sin embargo, tenía un defecto muy visible, con una cicatriz que cruzaba por su nariz. Llevaba puesto una gabardina de color negro y rojo, con pantalones vaqueros negros también con un collar con un crucifijo alrededor de su cuello.
Lleva una camisa vino tinto con un cinturón marrón alrededor. Tenía una expresión por demás divertida y no dejaba de ver entre Rido y Katsue con una ceja alzada para después dar un asentimiento y que Katsue sonriera extasiada.
Rido estaba tambien en éxtasis. ¡Esto demostró que Zero era un ángel! ¡Ningún Padre y/o Madre dejaría que su hijo de 7 años saliera de casa en tal tarea!
Claramente se hizo una idea equivocada…
Eso y que nunca había conocido a Katsue y Takeru antes.
Por lo que Zero sabía. Takeru se fue de casa a la madura edad de 10 años para convertirse en un aventurero, fue muy exitoso durante muchos años y sólo se estableció –técnicamente, porque seguía yendo de aquí para allá- cuando Katsue entro en su vida. En cuanto a ellos, Zero estaba estableciendo sus pasos. Estaban muy orgullosos.
--¿Por qué no se queda Kuran-san aquí por la noche y lo informamos, para cuando vengas a recojerlo ya tendré tus “bocadillos” listos y Ze-chan no se olvides de mantenerte en contacto—dijo Katsue mientras deslizaba por la mesa un celular del tipo caro y unas llaves junto con un sobre manila que Zero sabia contenía todo lo que necesitaba saber superficialmente.
Evito hacer una mueca, tendría que regresar otra vez para que le dieran aún más detalles pues esta información escrita, si caía en malas manos, sería fatal, si Katsue y Takeru lo estaban dando así era una clara invitación para que se fuera lo más pronto posible, no es que a Zero le importase, prefería no estar cerca de estos dos si se podía, cuando se acaramelaban eran insoportables.
--Seguro Tsue-Chan--Zero removió un poco de estofado hambriento. No había tenido la cocina de Katsue en años. Él se perdió completamente la mirada que Katsue y Takeru estaban enviando a Rido.
--Querido ¿Por qué no le enseñas la habitación de huéspedes a Kuran-San?—Katsue ofreció con entusiasmo. Ambos hombres consintieron con facilidad.
Cuando se fueron Katsue bebió lentamente su Té, en lo que a Zero respectaba eso significaba que tenía un máximo de 5 minutos para exprimir toda la información que pudiera.
--Así que… ¿Resumen?
-- Tus padres están vivos pero en coma, igual los Kuran mayores están vivos, la Princesita despierta, Ancestro devuelta, Intento fallido de Rido en contra de sus hermanos. Básicamente: Ellos no pensaron que todo esto volvería a su marioneta en una paria, a Rido lo han obligaron a dormir entre 5 sangre puras, dos de ellos ancestros. Nadie había esperado que Rido fuese tan poderoso, pero en lo que a nosotros respecta eso también está a nuestro favor, aun sí su fuerza es culpa de Ellos. Que hayas podido entrar en la mansión sin ser detectado por la asociación o el consejo es una hazaña encomiable, pero no quiero saber que sucederá cuando se den cuenta de que no está.
-- Mmm. Interesante. Y quienes fueron sus carceleros?
--Obviamente sus hermanos; que siguen enojados por el sacrificio de su hijo, su prometida; tu madre sustituta quien solo lo hizo porque estaba aburrida, y los dos ancestros fueron Kaname-sama; por razones que ya sabes y Shoto Izaya-sama… Este último lo desconozco, solo sé que Cross y Juuri fueron a pedir su ayuda.
--Ehh, extraño… Mi edad?
-- Universo alternativo?
-- Me estás diciendo o me estas preguntando?
-- Da igual, estas destinado a lo mismo, solo que con una variable extraña. La parca es misteriosa en sus acciones.
-- La parca y sus acciones me tiene sin cuidado, solo quiero saber porque yo?
-- La parca dicta mi destino, es misteriosa en sus razones pero así es como se ha tejido mi sino*
--Tenéis al destino en un alto concepto, por cierto.
--Y vos?
--Yo? Sabes soy escéptico en cuanto a previsiones del futuro… Incluida el mío.
-- Cuánta razón tienes, eres la perfecta encarnación acerca del efecto mariposa. Por mi parte nunca intervengo más de lo debido. Mi aleteo no es tan fuerte como el tuyo… Mira la hora, casi sale la clase nocturna bebes regresar ya.
-- Heck, esperaba durar más tiempo… bueno, me voy. Dejo a Rido en sus relativamente competentes manos—Zero se levanta lentamente, pero Katsue parece recordar algo y dice.
--Ah! Por cierto, creo que deberías ir por Senri.—Zero frunció el ceño antes de mirarla con una expresión confundida.
-- Para que quieres a su hijo?
--Me refería a su esposa—aclaro Katsue, Zero alzo la ceja consternado.
--Porque… exactamente?
--Rido y Mei se amaban profundamente, no me veas así que realmente lo hacían, pero Ellos necesitaban a Rido bajo su control, sin embargo él era incontrolable y si alguien podía hacer que Rido hiciera lo que ella quería esa era Senri Mei, esa noble tenía casi tanto poder como un sangre pura pues su abuela, y su padre lo eran, eso y que tenía a sus pies a un Kuran primogénito la convertían en una amenaza, y por lo tanto…
--En una poderosa aliada para nosotros.—Zero termino para que Katsue asintiera, el hombre en el cuerpo de niño suspiro pesadamente para inclinar ligeramente la cabeza en señal de acuerdo y despedida—Sabes? Debiste habérmelo dicho muchas vidas antes.
--Ahora, ahora… Donde estaría lo divertido en eso?
Cuando Rido bajo junto con Takeru (ligeramente ruborizado, pero Zero no se dio cuenta) le contaron que Zero volvería por el dentro de los próximos días y que tenía que prepararse para un viaje a un pueblo un poco alejado a recoger a alguien, Zero se despidió de los tres y sacó a Bloody Rose del armario, poniéndolo en una infantil mochila con forma de conejito donde tenía el celular y las otras cosas que le dio Katsue.
--Gracias Tsue-Chan, Takeru, Rido me contactare cuando pueda.
Rido asintió con un gesto de adiós a Zero que simplemente le sonrió a cambio. Rido se ruborizo ligeramente.
Más tarde esa noche, Rido fue visitado por los seres divinos mayores y fue bendecido.
Repetidamente, y en diferentes posiciones imaginativas.
De hecho, los seres de divina procedencia habían dejado una impresión increíble en Kuran Rido. El viaje a su redención estaba apenas comenzando y ya estaba impresionado, humillado y un poco adolorido. Rido no podía dejar de preguntarse qué tenía en mente Zero a continuación. Algo extraordinario estaba seguro.
--“Me pregunto si puedo hacer estallar el laboratorio de esos locos con ellos todavía dentro.”— pensó Zero alegremente.
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.Continuara
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Omake: Vista
Vida Nº…?: En la que Ai es una niña precoz.
--¡Madre, padre! ¡Por favor, permítame casarme con Ren!
Zero miró fijamente a su hija mayor, desconcertado.
Al otro lado de la mesa, Ai se sentó frente a sus padres con una mirada decidida en su rostro.
--¡Quiero casarme con Ren! ¡Por favor, dame su bendición!— repitió.
--No me importa mucho—dijo Kaname impasible. Zero se voltio hacia él con una mirada de pura traición.
Ai se animó ante la aprobación de su padre.
--¡Gracias Padre!
-- Woah! ¡Espera!— Interrumpió Zero— Ai, ¿entiendes lo que estás diciendo? ¿Qué trajo esto?
-- Por supuesto—respondió Ai como si fuera la cosa más obvia en el mundo—Ren sigue haciendo amigos—dijo, escupiendo la palabra era si era algo vil, y su expresión antes agradable se torció en una mirada oscura.—Ya era bastante malo que Ru-Ni entrara -y lo tenga que aguantar- pero ahora todas estas molestas plagas quieren quitarme a Ren. Si Ren se convierte en mi prometido, no tendré que preocuparme por ellos.
Zero se quedó en silencio durante todo su sermón mientras Kaname tenía una mirada de aprobación y satisfacción.
De repente, en un ataque de violencia, Zero se volvió y agarró un puñado de cara de Kaname y golpeó la cabeza con fuerza contra el suelo de madera dura.
--¡TÚ! ¡POR TI, NUESTRA HIJA A ES ASI!
Calmamente levantándose para calmar al enfurecido peli plata, Kaname se apoderó suavemente de Zero para evitar que él se moviera violentamente.
--Ahora, ahora. Ten cuidado. Estás en un estado delicado ahora mismo.
-- DELICADO MI TRASERO! ¡ESTE ES TU FALLO TAMBIÉN!
--Creo que se necesitan dos personas para concebir a un niño, Cariño.
Ai observó a sus padres con paciencia. Un día, Ella y Ren podrían ser tan amorosos como sus padres. Recordando el rostro de Ren, pudo ver por qué su padre disfrutaba de la cara enojada de su madre.
Un rato después, una vez que Zero finalmente se calmó, él y Kaname se sentaron de nuevo a la mesa, bebiendo té.
--Ok, entiendo que quieres casarte con Ren, tu hermano, para que puedan quedarse juntos, pero no tienes que casarte para hacer eso. ¿Y todavía no eres demasiado joven para pensar en esas cosas? Sólo tienes ocho años.
--Eh?
--No me refiero a tu padre y a mí—Zero aclaro ante la mirada de Ai—Bueno, Eso implicaría que estamos en una relación de compromiso de algún tipo - que no estamos.
--¿Oh?—Kaname levantó una fina ceja—Tú llevas a mi tercer hijo. Creo que el compromiso ha sido establecido desde hace mucho tiempo.
Zero lo miró en respuesta antes de aclarar su expresión y volviéndose hacia su hijo mayor.
--Me refería a los nobles y compañeros, Aidou, Kain, Takuma, Shiki, Rima, Seiren, M hermano, Maria, Kaito y el resto son todavía buenos amigos míos. Ai frunció el ceño y soltó un terco:
--No. Si no lo hago, Ru-Ni no dejará de pegarse. Además, Ren y yo ya compartimos nuestro primer beso.
--¿Hah?—Zero miró, atónito, murmurando para sí mismo—Mis bebes ya tuvieron su primer beso?
Viendo que Zerono iba a salir de su trance, Kaname se hizo cargo del interrogatorio.
--¿Y? ¿Qué tiene eso que ver?
--¿No es obvio? Desde que nos dimos nuestro primer beso, tenemos que casarnos.
El cuello de Zero se quebró cuando el se sacudió para mirar a su hija.
--¿Qué? ¿Quién te dijo eso?
--Tío Kai— respondió Ai—Dijo que teníamos que casarnos con quien sea nuestro primer beso. Ya que no queríamos casarnos con algún extraño, compartimos nuestro primer beso.
-- ¡Kaito!, ¡Ese bastardo!—Zero tembló en su asiento antes de levantarse abruptamente—¡Lo mataré!
Antes de que pudiera marcharse, Kaname le apreto la muñeca para evitar su escape.
--Cálmate, Zero. Piense en tu condición. Y además, ¿no está bien?
--¡No está bien! ¡Amigo o no, no le perdonaré por haber corrompido a mis hijos!—En este punto, los furiosos ojos de Zero estaban cargados de lágrimas no derramadas mientras sus hormonas salían de control—¡Lo destruiré a él ya sus estúpidas armas!
Con un suspiro indulgente, Kaname luchó suavemente y sin esfuerzo contra su no-esposo embarazado (como el insistió en su no-matrimonio) en su regazo y encerró su pequeña forma en sus brazos. Cuando Zero empezó a calmarse, Kaname parpadeó cuando recordó algo, y se volvió hacia su hija.
--Aunque no me importa particularmente, ¿estás seguro de que estarás bien con casarte con tu hermano, tres años menor que tú?—Ai asintió decididamente
—Ren es Ren. Además, estará bien, ¿verdad? Después de todo, Crecerá ¿verdad? Creo que a la larga no le importará convertir en mi novio. Si él sigue siendo más pequeño que yo, tampoco me importa.
Zero resopló en el hombro de Kaname.
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En otra vida, se juntó con Kaname en una relación de No-Matrimonio una vez más.
Cuando en su primer embarazo Takuma le dijo que estaba esperando un niño y que dicho niño se sentía exactamente igual que Ren (su hijo menor) él no sabía si debía o no maldecir a la fuerza externa que lo enviaba en el tiempo por entrometerse en la vida de sus hijos..
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