Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El Reino de Konoha por Natsy

[Reviews - 39]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, he aqui el nuevo capitulo, espero que lo disfruten :)

Pese a que el animal me dijo que aquel rubio se encontraba bien, no podía evitar sentirme un poco preocupado, después de todo lo había expuesto a un peligro que pudo costarle la vida. Yo en su lugar me hubiera alejado sin pensarlo, pero Naruto había decidido salvar mi vida, todavía no entendía ¿Cómo fue posible? Pero, siendo honesto quería agradecerle. 

Deje salir un suspiro,– ¿Por qué me ayudo?- para mi sorpresa en esta ocasión el zorro se encogió de hombros ,  le sonreí al animal pensando en lo ridículo de la situación  -¿se encuentra bien?- esta vez obtuve un sí. Me sentí calmado ante saber esto – claro debí saber que los Dobes difícilmente mueren –

Sentí un fuerte tirón y para mi “sorpresa” el zorro me había mordido del pie y tiro de mí como un perro queriendo jugar, mientras dejaba salir un gruñido, lo había perdonado una vez, debió haber aceptado mi misericordia cuando tuvo la oportunidad, ya  que sería la única.

Rápidamente tome mi espada y con la funda intente golpearlo, ante esto el animal me libero y se coloco frente mío con la piel erizada y soltando gruñidos, mostrándome sus colmillos. Me coloque de pie con espada en mano. Esta vez no saldría ileso.

De un movimiento intente golpearlo, pero este hábilmente me esquivo con un salto, aterrizando suavemente en  la funda de mi espada, aprovechándose de esta para impulsarse y saltar sobre mí dando un giro, formando con su cuerpo una pelotita anaranjada  que paso sobre mi cabeza aterrizo en una raíz varios metros de mí. Cuando lo mire, este parecía sonreír ante su hazaña –interesante- dije pues esa sonrisa era claramente un desafío.

Respire hondamente y cerré un momento mis ojos, buscando lo que sabía que estaba dentro de mí, pronto comencé a centriolo, como empezaba en mi estomago y poco a poco se extendía a lo largo de mis extremidades, cuando abrí mis ojos el zorrito continuaba en la raíz moviendo sus colas.  Sonreí, pues a pesar de la agilidad que había demostrado ese animalito no sería capaz de hacer nada contra mí.

De un movimiento me coloque delante de él, quien retrocedió apenas a tiempo para evadir mi ataque. De un salto corrió por el tronco hasta volver a colocarse en una rama a lo alto de la copa. Sonreí ante la situación.

Aquel animal había escapado de mi antes usando ese mismo truco, pero una cosa era que no me sentía de humor para estar persiguiéndolo”debió aprovechar mi misericordia”  coloque mi pie sobre el tronco y poco a poco comencé a subir, los ojos azules que estaban en la cima de árbol me miraban incrédulos ante lo que pasaba.  Poco a poco comenzaron a retroceder, ante esto una sonrisa se dibujo en mis labios.

El zorro salto hacia otra rama, sin embargo era algo que yo podía hacer. De un salto me transporte a otra rama y en seguida a otra de otro árbol, justo  detrás del animalito que saltaba de una en una intentando escapar de mí.

Esto me estaba resultando de lo más divertido. Normalmente la casa no suele gustarme, por lo predecible que podían ser los animales, sin embargo este se movía de una forma totalmente diferente, era un verdadero reto, bueno casi un reto.

De un salto me coloca delante del zorro quien detuvo su marcha, el pequeño animal se quedo rígido mientras daba pasos torpes hacia atrás, anticipe su movimiento justo cuando iba a dar un salto hacia otra rama me para justo enfrente de él  cortándole el paso. Este hecho se repitió 4 veces más  y en cada ocasión el zorro se veía más frustrado por no lograr su cometido. Cuando la cuarta vez se repito el animal me dedico una mirada de desprecio – te tengo –

El animal me observo por unos segundos, antes de volver intentar escapar por otra rama “¿que no entendía que era inútil?” volví a cortarle el paso, pero el zorro se apoyo en un tronco cercano, re-direccionando el salto hacia abajo, hacia la tierra, lo seguí, “era interesante ver sus intentos por escapar” observe como poco a poco la tierra estaba más cerca y como el zorro mantenía extendida las patas para aterrizar en cuanto llegara.

Observe como giraba levemente su cabeza hacia mí y note una pequeña ¿sonrisa?, ante mis ojos el zorro desapareció y yo aterrice en un tronco, al mirar arriba me tope que pegado al tronco se encontraba el zorro mirándome desde lo alto “¿Cómo lo había hecho?”. Me dispuse a volver a atacar al animal, pero pronto me percate que el tronco bajo mis pies crujió, pronto todo poco a poco se fue alejando, fue entonces que me di cuenta de que estaba cayendo.

Grupo de Kakashi

Un grupo de soldados caminaba por un camino, la noche anterior habían decidido tomar un descanso por el bien de todo el grupo. (Puesto que tenían algunos heridos) sin embargo el peliblanco que los guiaba, se sentí preocupado. Pues el príncipe no había vuelto con ellos desde que ingresaron al bosque.

Sabía que había sido decisión suya el de no mandar a un grupo para buscar al príncipe, pero eso no quitaba que se no se sintiera preocupado por el estado de este (después de todo prácticamente lo crio). Un sonido llamo su atención. Algo bajaba a gran velocidad de su lado derecho. Cada uno de los soldados que podían sostener su arma se puso en posición de ataque, cuando una figura salió de entre el bosque, cayendo contra su espada.

 Aquel figura fue levantándoseos, su ropa estaba rasgada y sucia, su cabello negro que enmarcaba su piel clara cubría sus ojos, dejando ver una sonrisa aterradora. Su mano estaba sobre su espada listo para desenfundarla y atacar, pero lo que más preocupaba al grupo era que desprendía un aura totalmente negra.

Más de uno pensó que era un espíritu maligno que venía a amenazarlo, pero el peliblanco abrió grande los ojos al observar a la joven figura frente a él – Su majestad – dijo sin titubear. El mencionado giro la cabeza encontrándose con el grupo y su fiel consejero y maestro. 

Poco a poco Sasuke fue relajando su expresión y la tenebrosa aura alrededor de él fue disipándose. Su mirada se torno seria como era normal en él y se paro derecho contemplando al grupo. –Hakake – contesto cuando el volvió a la normalidad, lo que calmo a más de uno.

Tras una revisión rápida por parte de su maestro (ya que observo la ropas destrozadas y llenas de sangre) el azabache le dijo que la sangre no era suyo para tranquilizar al mayor (después de todo todavía no entendía lo que había sucedido)

Kak- de todas maneras – dijo y observo por donde había llegado el azabache – ¿cómo fue que caíste desde ahí?- 

El joven príncipe desvió la mirada, pues decir que un zorro le había tendido una trampa no era algo que pudiera decir.

Sas – mientras avanzaba encontré un tronco – dijo totalmente serio como si eso hubiera pasado –cuando intente usarlo como puente este se rompió – kakashi lo miro dudoso pues  no convencía al peliblanco, a pesar de su seriadas sabía que estaba aculatando algo (después de todo eran contadas las veces que desprendía esa aura). Ante la mirada de su maestro empezó a hablarles a sus hombres.

Sas – como sea, necesito que me comuniquen que lo que a sucedido, después…. – no termino, ya que sintió un liquido sobre su cabeza “lluvia” pensó, pero al mirar al frente se dio cuenta de que los demás no les caía absolutamente nada, lo que es mas abrieron grande los ojos ante lo que observaron, su maestro que observaba su espalda también los abrió descomunalmente.

Un tick apareció en el ojo del azabache, quien al levantar un poco la mirada, noto una figura anaranjada, con una pata levantada. El liquido dejo de caer, ante esto un pequeño zorro se limpio las patas antes de desaparecer de la vista de todos los presentes.

Sasuke bajo la mirada, cubriendo su rostro con sus azabaches cabello, se había detenido porque su orgullo no le dejaba saber a sus hombres que había sido engañado por un patético animal de ese estúpido bosque, solo por eso, solo por ese motivo se detuvo y el maldito no había aceptado que lo perdonara una segunda vez.  una leve capa de aura negra empezó a sobresalir de su piel.

Kakashi empezó a retroceder lentamente “esto es malo”, mientras un soldado se acerco unos pasos temerosos –su majestad- el joven levanto la mirada dejando ver unos ojos rojo con un diseño en la iris de color rojo “muy malo” el zorro le había orinado en la cabeza, y era más que obvio que no permitiría que nadie supiera de ese hecho. 

Lo que paso después, nadie lo sabe, los que estuvieron presentes no vieron nada, no había pasado nada. Y nadie hablaría de eso.

Con el zorro

Saltando de rama en rama, el zorrito se alejaba del grupo que se encontró tiempo atrás, mientras mostraba una sonrisa triunfante “es lo que te mereces por meterte con migo” pensó orgullosamente y victorioso.

Se mantuvo constante en su paso, para cuando estuvo lo suficientemente alejado se paro en una rama, para descansar unos momentos  y hecho un vistazo hacia atrás. Encontrando solamente arboles, esto lo entristeció un poco, pues dentro de él tenía la pequeña esperanza de que aquel azabache lo hubiera seguido. Se sentó en la rama y respiro agitadamente, se sentía exhausto, los descanso que había tomado apenas si le habían ayudado a recuperarse, su cuerpo le estaba pesado y no lo le dejaba moverse como deseaba. Por ello decidió descansar unas minutos antes de volver a la base “ya me había demorado demasiado”

 Mientras descasaba pensaba en todo lo sucedido, especialmente en el azabache,  aquella persona le resultaba extrañamente curiosa, en ocasiones era arrogante, en otras actuaba de forma incomprensible (refiriéndose a cuando lo protegió) y en otras era amable, recordando como lo avía abrasado en el lago de forma protectora y la forma en que lo acaricio cuando él se despertó, su tacto era cálido y reconfortante, pero sobretodo él también era terriblemente irritante.  

Lo que fuero que le provocaba sabia que se había terminado, lo más seguro es que no volvería a verse, así eran las cosas y así se mantendría.

Se puso de pie y avanzo rápidamente por un largo rato saltando de rama en rama, sin embargo su mirada comenzaba a ponerse borrosa y sus patas en ocasiones parecían que le fueran a fallar, pero no podía detenerse aunque quisiera “maldición” pensó. En un salto, sus ojos y piernas le fallaron y todo se volvió oscuro por unos momentos “demonios” empezó a caer  – NARUTO – al escuchar que aquella voz conocida y sintió como sujetaban su  cuerpo, miro y pudo distinguir un rostro conocido. Para poco después quedarse profundamente dormido

Unas horas después.

Un grupo de personas se encontraban frente a una gran puerta de madera y un guardia observaba a los recién llegados con duda, - príncipe Sasuke Uchiha – dijo con cierto desconcertado. Pues el joven “¿príncipe?” se encontraba con ropas rotas, sucias y llenas de sangre, si alguna vez aquellas prendas pertenecieron a un traje lujoso, ahora no quedaba más que arrapaos, a demás desprendía un olor algo desagradable. Por otra parte, sus soldados se encontraban uniformados y a pesar de tener algunas marcas de suciedad y sangre no estaban tan dañadas. También pudo notar como algunos soldados cargaban a otros.

El joven mostro su espada, mostrando en ella una insignia que no le era desconocida, un abanico blanco con la punta roja, el guardia observo al joven y su piel se puso palidad. Anuncio rápidamente a sus compañeros para que les dieran acceso. Las paredes de piedra liza rodeaban todo el castillo que se alzaba frente a ellos, podía contemplar las múltiples torres de la misma roca, al entrar se encontraron con un enorme vestíbulo decorado con mármol y piedra caliza. También se encontraba diversos cuadros cada uno con diferente temática, mas sin embargo el azabache se percato en uno en particular. Una pintura sobre la creación del mundo.

Había nueve criaturas, cada uno estaban colocados  formando un circulo, el joven se acerco al cuadro para verlo mejor, en el centro se encontraba una persona en medio de un pentagrama. La persona del cuadro extendía sus brazos hacia todas las creaturas, dándole una sensación de que les daba el bien venido.

 Por otra parte si  seguimos las manecillas de reloj, la primera criatura era un Taniki (un perro mapache) de color arena, le seguía un gato azul de dos colas, después una tortuga con un caparazón con picos y  tres colas, un mono de cuatro colas con pelaje rojo, un caballo color gris de cinco colas, después una babosa que tenía seis,  un bicho similar a una libélula con siete alas de color verde pasto, un pulpo y por ultimo un zorro de nueve colas. 

Ante el ultimo un pequeño tick apareció en su ojo del  Uchiha “ese zorro” todos sus hombres dieron un paso atrás, pues un aura oscura apareció sobre el joven príncipe.

-su majestad – al escuchar esto el joven miro hacia donde provenía la voz, encontrándose con un joven de pelo blanco sujeto en una coleta.  Vestía un traje de color negro con toques grises y algunos botones dorados. – mucho gusto mi nombre es kabuto Yakushi, soy el consejero de su majestad - se presento bajando la cabeza en señal de respeto.

Saludo que Sasuke correspondió  (aunque bajando meno las cabeza), poco segundos después Hakeka  se presento con formalidad, quien también recibió el saludo del recién llegado.

Kab – veo, que aprecia esa hermoso cuadro – dijo con una sonrisa – es una alusión a.. –

Sas – a la leyenda de la creación – interrumpió – conozco perfectamente la historia -

Kab-lamento mi atrevimiento – dio un nueva reverencia -  se que estarán cansados por su largo viaje, por favor siéntanse libres de utilizar las instalaciones del palacio como les parezca –

Sas – agradecemos su hospitalidad – dijo – le pido por favor que nos proporcione medicina y médicos – miro a sus hombres – cuando llegamos al bosque fuimos emboscados y varios de mis hombres están lastimados –

El peliblanco puso cara de sorpresa y llamo a varias personas para que transportar a los heridos a la enfermería. Después pidió a alguien que lo guiara a los representantes a sus aposentos,  el rey no podía atenderlos hasta. Por ello la invitación de que descansaran por el momento.

La habitación de sasuke estaba decorada con una alfombra roja, cortinas de seda y alguno que otro cuadro. También había una mesita de noche que tenía un jarrón con flores. La cama era cómoda de sabanas azules obscuro. No era mucho de su agrado pero era mejor que nada. Se sentó en la cama y respiro hondamente. “Por fin había llegado” observo por si ventana y noto el pueblo además del bosque, luego la habitación y después sus manos y las apretó con fuerza. Debía estar preparado para lo que se aproximaba.

En el bosque.

En un cuarto de piedra se encontraba un pequeño zorro dormido sobre un cojín, de color ceniza, frente a él, había un mapache que lo observaba atentamente. El cuarto estaba construido por piedras y en las paredes se encontraban algunas antorchas que los iluminaban, dando a las paredes un color rojo.

El mapache lo observaba detenidamente mientras que su compañero respiraba tranquilamente, pronto escucho como una puerta de alado se abría y ahí se encontraba un felino de color azul de dos colas que se acerco corriendo a donde estaban los otros dos.

-¿Cómo se encuentra?- pregunto cuando llego a su lado.

-todavía no despierta -  dijo observando al pequeño zorro – el dijo que había usado su energía de mas, es por eso que está dormido – la gatita coloco su cabeza sobre la del mapache en un gesto de consuelo.

-debes ir a descansar Gaara – dijo suavemente, pero este movió levemente la cabeza negando, no quería irse ni aparátese. Cuando lo encontró casi se le para el corazón al ver como se desvanecía en sus brazos, fue tal su impresión que regreso tan rápido como pudo, lo hizo tan rápido que pensó que sus pulmones estallarían, (aunque al llegar y escuchar a su líder lo había tranquilizado un poco) no se había apartado de él en ningún momento desde que llegaron. La gatita siguió mimándolo, tratando de brindarle un poco de calma.

-se que estas preocupado, pero no has dormido nada desde ayer, tienes que descansar –

-pero.. – no pudo terminar ya que un movimiento llamo su atención. El pequeño zorro que estaba dormido se había movido, para acomodar su cabeza sobre su pata. La gatita dejo salir un suspiro.

-puedes dormir aquí- dijo – yo los vigilare a ambos mientras duermen, así estarás más tranquilo – le dedico una sonrisa, ahora Gaara ahora movió la cabeza en forma afirmativa. El pequeño mapache se acorrucara junto al zorro, quien instintivamente se movió para darle espacio. Poco después el mapache se quedo profundamente dormido (no se había dado cuenta qué estaba exhausto)  

Tras asegurarse de que estaban dormidos miro hacia la puerta –ya puedes pasar – dijo suavemente, pasaron unos segundos y después por la misma entrada que uso la felina, se observo una pequeña tortuga que avanzaba lentamente y temeroso.

-¿Cómo se encuentra?- pregunto después de cruzar la puerta. Ella le dijo que él estaba bien que no debía preocuparse. La tortuga bajo la mirada. La gatita suspiro y se acerco a él.

-escucha- dijo frente a ella – lo que paso no es tu culpa, no importa lo que el líder diga – ante esto el reptil tembló.

-el me va a castigar por esto – la felina se quedo quieta ante el cometario, y sintió como sus patas se tensaban, desvió la mirada de solo pensar  en aquella posibilidad. Era frustrante pero sabía que así eran las cosas, nadie lo retaba, nadie lo desafiaba y por ningún motivo se desobedecían sus órdenes.  (Ella lo sabía perfectamente)

-no es momento de pensar eso- le dijo, bajo la cabeza a la altura de la tortuga y lo acaricio de forma maternal -  será mejor que tu también te vayas a descansar- se levanto de nuevo – mañana será un mal día para ti y Naruto – no tenía ningún caso mentir – necesitaran sus fuerzas  -

Notas finales:

llegamos al final, jajajaja espero que les gustara :) 

Y antes de despedirme, queiro agradecer sus comentarios y consejos, eso me ayuda a darme cuenta de cosas que pase por alto. 

Gracias por acompañarme y espero que me sigan acomáñando. 

Felices bacaciones. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).