Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Chispitas de Chocolate Blanco por cancion del viento

[Reviews - 76]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡¡¡Buenas!!!

¿Cómo están?

4:30 am y yo aquí actualizando…

-Sin importar lo que suceda Tony, yo estaré contigo. –le sonrió tiernamente el rubio a lo que Tony se sonrojó. –Puedes confiar en mí.

-Steve… ¿Puedo decirte un secreto que he estado guardando por mucho tiempo? –preguntó el menor desviando la mirada.

-Claro que sí. –se acercó más al castaño que en estos momentos le parecía desprotegido, por lo que ese sentimiento de sobreprotección creció. –Puedes contármelo…

El menor le sonrió sinceramente y de una forma agradecida. –Gracias Steve, pero me gustaría decírselo a los dos, ya sabes a James y a ti, si no es mucho problema… y que también me ayuden… a hablar con Jarvis…

El rubio lo analizó, le era imposible negarle cualquier cosa, si Tony la estaba pasando mal y quería hablar con los dos no se lo negaría. –De acuerdo. –acarició su cabeza cariñosamente. –Cuando Buck salga de bañarse hablaremos…

-Gracias…

El timbre sonó dando a entender que el repartidor de la pizza había llegado. El capitán se levantó de su asiento y fue por la comida, y en cuanto regresó dejó la pizza en la mesa, vio al castaño en sentado en el sofá. –No tenemos un cuarto para visitas, así que… -el rubio se le vino a la mente decirle que durmiera con él su habitación pero… era una pijamada por lo tanto descartó esa idea. –Tony… dormiremos en la sala.

El menor agrandó los ojos emocionado, sería muy divertido. –Suena genial.

El capitán se regresó a su habitación por varias almohadas, colchas y cobijas para después acomodarlas en el piso de la sala, hizo hacia atrás el sofá y después invitó al menor a acostarse con él y sin pensarlo el menor accedió, recostándose a un lado del rubio.

-Oh ¿Vamos a dormir en la sala? –preguntó sonriendo Bucky que venía entrando a la sala. –Hagan espacio. –y sin pensar se echó del otro lado de Tony, dejando al castaño menor en medio. –Tengo hambre…

-Buck… –Llamó el rubio con un tono serio cosa que atrajo la atención el Barnes.

-¿Qué pasa? –preguntó preocupado.

-Tony quiere decirnos algo importante. –miró a Stark. –puedes confiar en nosotros…

-Así es Anthoska… -el castaño mayor intuyó que era algo realmente serio.

Los tres chicos se sentaron, Tony quedó en medio de los dos fortachones. –Chicos… nunca he hablado de esto con alguien… -se rascó la nuca. –No sé  cómo empezar…

-Anthoska. –habló James dulcemente. –A veces es complicado hablar sobre ciertas cosas, sin embargo también es necesario sacarlo, no siempre uno tiene que cargar con todo. –le dijo. –Supongo que ya te lo dijo Steve, sin importar lo que sea que quieras decirnos te apoyaremos.

Aquellas palabras hicieron sonrojar al menor. –Gra-gracias James. –le dio fuerzas para continuar. –Yo… cuando tenía 10 años papá llevó un nuevo socio a la casa para comer. –empezó los dos fortachones solo estaban atentos a lo que decía. –Su nombre es Obadiah Stane, al principio creía que era buena persona… era amable conmigo, pero…

-Pero. –dijo Steve para que continuara.

-Pero algo cambió cuando cumplí mis 11 años de edad. –los ojos del menor se cristalizaron. –Una vez que Obadiah fue a la casa y mi papá todavía no llegaba del trabajo, yo me encontraba en mi habitación y Jarvis después de atenderlo tuvo que regresar a sus labores. Yo bajé todo emocionado a saludarlo… llegué con él y lo abracé, entonces el afianzó muy extrañamente sus brazos a mi… al principio no lo comprendí pero me asusté demasiado cuando… cuando… -empezó a sollozar. –Cuando comenzó a tocarme… -cubrió escondió su rostro en sus rodillas.

-Tony…

-Anthoska…

Ninguno de los dos fortachones estaba contento, su amado estaba siendo acosado por un tipo en contra de su voluntad, lo único que querían era desfigurarle la cara a ese bastardo. –¿Cuánto tiempo ha estado pasando eso? ¿Todavía lo sigue haciendo? –preguntó James.

-Cada vez que tiene la oportunidad él… -comentó Tony abrazando sus rodillas.

-Ya no digas nada más Tony. –Steve se acercó al castaño menor y lo abrazó protectoramente acto que fue correspondido por el menor.

-¿Por qué nunca dijiste nada? –cuestionó Bucky enojado.

-Tenía miedo… -desvió su mirada hacia otro punto. –Yo…

-Bueno. –interrumpió Rogers. –Tal como dijiste Tony, mañana iremos a tu casa y se lo diremos a Jarvis, como te prometimos, no te dejaremos solo…

-¿Quién y quien está enterado? –James se preocupó.

-Solamente ustedes dos… -dijo desganado el menor.

De un momento a otro pareció que el tiempo de detuvo, a pesar de saber que Tony estaba pasando por mal momento ellos estarían ahí para él sin importar lo que sucediera, se dieron cuenta de que detrás de esa bella sonrisa y hermosos ojos achocolatados, Tony estaba sufriendo.

El rubio tomó suavemente el rostro del menor con sus manos, ambos hicieron contacto visual y sin previo aviso el mayor lo besó dulcemente, demostrándole que todo estaría bien, haciéndolo sentir seguro, y ese beso fue correspondido por Stark, ante una mirada de celos de Bucky, pero decidió no interrumpir, algo le decía que se esperara.

Steve y Tony se separaron de aquel beso, Tony estaba levemente sonrojado cosa que le pareció adorable a ambos fortachones, sin previo aviso Stark volteó y miró a James a los ojos, Bucky no desaprovecharía la oportunidad, lo besaría y si lo rechazaba se haría a un lado.

 Barnes de la misma forma se acercó más al menor le extrañó que su amigo no hiciera nada, tal vez estaba esperando su reacción. –Anthoska… -le limpió el resto de las lágrimas con sus pulgares para posteriormente darle un beso lleno de seguridad y amor que de la misma manera fue correspondida.

Al separarse Tony se quedó ruborizado por lo sucedido además de que estaba muy preocupado pues acababa de revelar su secreto por primera vez, ni siquiera había sido Jarvis o su papá, si se lo había contado a Steve y James significaba que eran importantes para él, además de que Jarvis ya se lo había mencionado, que parecía que Tony le gustaba esos dos chicos.

Y al contrario esos fortachones estaban algo sorprendidos, ya que Stark había correspondido el beso de ambos, tal vez se aprovecharon de la debilidad del menor en ese momento o tal vez realmente Tony sentía algo por ellos, tenían la intención de preguntarle, pero no por el momento, dejarían que descansara el día de hoy por la carga emocional que acababa de soportar pues revelar un secreto no es fácil de sobre llevar sobre todo si lo estuvo guardando por mucho tiempo.

Bucky trató de aligerar el ambiente y más que nada hacer sacarle una sonrisa a su kotenok. –¿Qué tal si comemos y vemos pocoyo?

El castaño menor sonrió, le encantaba los intentos de James por hacerlo reír y lo cuidadoso que es Steve con él. –Si… me gustaría… -y después de que todo se relajara, comieran, jugaran y vieran la tv, finalmente los tres chicos cayeron en los brazos del Morfeo.

Mientras tanto en otro lugar, en una enorme casa, una que casi podía parecer una mansión, en el sótano de dicho hogar, se encontraban dos hombres; Howard y Yinsen.

-Entonces… -mencionó Howard.

-Con esto. –señaló lo que tenía en sus manos. –Ayudará bastante el corazón de Tony.

-Hemos trabajado mucho en el reactor. –dejó salir el aire de sus pulmones. –Ahora solo queda operarlo para colocar el reactor.

-Entre más rápido mejor. –Yinsen dejó el reactor en la mesa. –Lo mejor es que lo hagamos este fin de semana ya que entre más pasa el tiempo más débil se vuelve su corazón.

-Aun así tengo miedo… colocarle el reactor a mi hijo puede ser peligroso, por lo que pudimos deducir hay un 40% de probabilidad de que falle. –se sentó en una de las sillas del sótano que más bien parecía un laboratorio. –No solo eso, si todo sale bien Tony podrá llevar una vida más o menos normal, ya que poco a poco su condición actual se reduciría.

-Ah ya entiendo. –comentó Yinsen sirviendo dos copas de vino blanco. –Tienes razón, después de todo vivir con un reactor incrustado en el pecho no es normal, pero debes de pensar que eso lo mantendrá vivo.

-Supongo que tienes razón. –el Stark mayor se encogió de hombros. –Pero también me refiero a su condición física. ¿Me ayudaras con la operación? En cuanto llegue también hablaré con Vincent.

-Claro que te ayudaré. –bebió de su copa. –Ya sabes que después de todo ese niño es mi sobrino hijo de mi hermano de una desconocida. –se burló.

-Te lo agradezco bastante. –sonrió, Howard tenía esperanzas en sanar a su hijo. –María se pondrá feliz cuando lo sepa sin mencionar a Jarvis claro.

-Howard, sobre eso. –lo miró fijamente. –No creo que se ponga feliz.

-¿A qué te refieres? –se extrañó por lo que dijo su amigo.

-Quizá sean suposiciones mías. –se encogió de hombros. –Pero desde el nacimiento de Tony, algo no me cuadra con tú esposa.

-Exactamente ¿qué tratas de decirme? –comenzó a perder la paciencia el castaño.

-¿Tú nunca has notado un comportamiento extraño, ya sea por parte de María o por parte de Tony? –preguntó el de lentes siendo analítico. –Solamente te he visitado dos o tres veces desde el nacimiento de Tony y créeme, he notado un ambiente medio extraño.

Howard solo se le quedó viendo serio, jamás se había puesto a pensar en algo así. –Pero Tony jamás me ha mencionado algo como eso, ni mi esposa tampoco, Jarvis nuca me ha dicho nada. –se talló el rostro con sus manos en señal de frustración. –¿Crees que deba hablar con mi hijo? Digo, yo no he visto comportamientos de esa índole.

-Te lo recomiendo. –le dio otro sorbo a su vino. –Sonará cliché, pero uno nunca sabe, trata de decírselo con calma para no alterarlo en caso de que mi hipótesis sea cierta.

-Creo que se lo preguntaré llegando, después de todo ese tema no es fútil. –Howard tomó de la copa que Yinsen anteriormente le había ofrecido. –Es bueno hablar contigo después de todo.

-Por algo somos amigos. –sonrió Yinsen.

La mañana siguiente había llegado, eran alrededor de las 9 de la mañana cuando el primero en abrir sus ojos fue el rubio debido a su costumbre madrugadora, aunque esta vez se había despertado una hora tarde, pero al ser domingo lo dejaría pasar.

Cuando el rubio despertó se dio cuenta de la posición en la que los tres se encontraban, de inmediato se ruborizó pero no quiso hacer movimiento alguno por temor a despertar al más bajo. Ya que Tony estaba recargado contra el pecho del capitán y la espalda del más bajo estaba recargada en el pecho de Barnes, éste último tenía a Tony abrazado por la cintura mientras que Steve tenía uno de sus brazos siendo ocupado como almohada por su amado.

Quizá Tony buscó el calor durante la noche o tal vez otra cosa, pero estar en esa posición le fascinaba, y más ver el rostro de su canelita dormido tan tranquilamente. De repente escuchó que su amigo le susurraba, ya que al parecer también acababa de despertar, y si alguno hacía algún movimiento algo brusco podrían despertar a Tony y no querían porque les parecía adorable verlo de esa manera.

-Oye Steve. –le llamó el castaño mayor. –¿Estas despierto?

-Si ¿Qué pasa? –le preguntó el rubio.

-Estaba pensando en lo que pasó ayer… ya sabes, lo del beso. –le susurró en un tono en que Rogers no pudo descifrar. –¿Te das cuenta de lo que acabamos de hacer?

-Es cierto. –suspiró. –A ambos nos correspondió el beso.

-Exacto. –respondió James. –No creo que haya sido por la debilidad del momento, pude sentirlo… además vaya manera de tener nuestro primer beso con Anthoska.

-Pues sí… pero después de esto debemos preguntarle lo que siente realmente… -comentó el rubio bajito.

-No creo que tarde en despertar. –afianzó más el abrazo en Tony. –Es lindo tenerlo así de cerca.

-Tienes razón. –se rio el rubio. –Además es gracioso que estemos susurrando demasiado cerca de Tony y ni siquiera se despierte. Creo que tiene el sueño pesado.

-Seee…

-Hoy iremos a su casa, no lo olvides, debemos tratar este asunto antes de que le suceda algo de lo cual nos arrepintamos. –mencionó serio el rubio.

-¿Crees que sea ilegal sacarle la columna a ese tipo? –cuestionó serio y con un aura asesina Bucky.

-… Eh… por supuesto que es ilegal. –respondió el capitán.

-Entonces tendré que conformarme con golpearle en la cara. –dijo serio el castaño mayor.

-Te apoyo. –de la misma forma contestó Steve. –En cuanto desayunemos, iremos a su casa…

-¿Por qué no te has levantado a hacer el desayuno? –preguntó con hambre Bucky.

-Porque Tony está usando mi brazo como almohada. –dijo dulcemente viendo al chico que estaba recargado en su pecho. –Te pediría que lo hicieras tú, pero solo nos envenenarías.

-Por algo voy en el curso de cocina… obligatoriamente por sí no te has dado cuenta. –respondió James. –Solo esperemos a que despierte… me muero por tomarle una foto…

-No te culpo Buck, yo también quiero tomarle una foto. ¿Quieres algo en particular para el desayuno?

-Sabes que todo tipo de comida me entra. –dijo como si nada Barnes.

-Entonces ¿Huevos con tocino? –preguntó Steve.

-No… -contestó Bucky.

-¿Tostadas con mermelada?

-No.

-¿Hot cakes?

-No.

-¿Pues no que cualquier cosa estaba bien? –se enojó el rubio.

-Sí, dije que cualquier cosa estaba bien. –se rio. –Pero no se me antoja eso…

-Entonces… ¿Waffles? ¿Fruta?

-Las dos últimas opciones están bien… -dijo triunfal Bucky.

-A veces me desesperas… -habló Steve con un tic en el ojo.

Notas finales:

Gracias por leer.

¿Qué les pareció?

¡Nos vemos!

(≡^v^≡)/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).