Souichi completamente sorprendido de esa nueva revelación, impactado casi dejó caer su té, pero lo logró agarrar pensativo, procesando la información.
Eso no era realmente posible.
_ ¿Estás bien?, Esas cosas no son de verdad, los humanos no son animales...bueno, podemos tener una que otra reacción que se puede considerar como salvaje, pero jamás se convierten en uno_ Souichi no podía creerlo, estaba cien por ciento seguro que eso era solo simples palabras, quizás, la mujer delante de él estaba delirando por una fiebre que desconocía, preocupado por las palabras y la salud de esa mujer tocó rápidamente la frente de Mogui y la suya propia para verificar si había un cambio de temperatura, ella se reía de las ocurrencias de Souichi.
_ Joven Souichi, jajajaja, es verdad lo que le digo, venga conmigo si no me cree_ después de decir esas palabras, Mogui observó fijamente a Souichi para luego levantarse recogiendo las dos tazas de té ahora vacías y con un ademán de mano le pidió que la siguiera mientras caminaba a la puerta.
Entonces, Souichi un poco desconcertado de que las cosas que creía de la existencia de solo una especie humana en el planeta, parecían cambiar, aceptó la propuesta, su curiosidad ganó.
Mogui lo llevó afuera recorriendo desde la casa principal, entre largos caminos atravesando casas con algunos niños regresando a casa, si se daban cuenta de su presencia le saludan con gran entusiasmo antes de seguir su camino, siguió recorriendo calles hasta llevarlo por primera vez al bosque, en un monte apartado llenos de flores de especies muy extrañas para él, al cual ni siquiera se atrevió a tocarlos, teniendo muy en claro en su mente la última vez que por error comió una y terminó en este lugar, aún llevado por la magia de la noche y el espectáculo de luciérnagas y flores danzando entre los vientos, algo llamó su atención, en lo más alto del monte, allí, charlando con gran entusiasmo entre ellas se encontraban muchas mujeres acompañando a hombres, mientras que con cariño parecían despedirse susurrando palabras preocupadas y amorosas, los hombres agradecían con caricias y besos, portando una túnica con un cinturón, fácil para vestirse.
_ ¿Qué están haciendo? _ aún con la duda palpitando en sus venas, no podía estar más que sorprendido mientras seguía a Mogui, cruzaban entre todas las parejas quienes al verlos saludaban con un movimiento de cabeza mientras decían una palabra extraña, Souichi suponía que significaba alguna bienvenida, en algún momento de su viaje, Mogui había intercambiado las tazas por una túnica blanca y limpia con un grueso cinturón de tela con patrones extraños, en medio de aquel cinturón se decoraba un lobo y una luna.
_ esperando al Joven Morinaga _ Ella finalmente se detuvo después de responderle, se veía tan emocionada por lo que sea que estaban haciendo, su mirada no hacía más que cuestionarse si lo que ella había comentado era o no real_ El Alfa, es el jefe de esta manada prospera y honesta_ después de una rápida mirada a su persona, volvió a caminar entre el pasto, Souichi sorprendido por esa nueva revelación, se dispuso a procesar aquella noticia mientras observaba como todas las parejas se despedían con sonrisas y abrazos comentándose el uno a las otras palabras extrañas.
_ y, ¿Cuál es el motivo por el que están aquí?, claro, aparte de esperar por el alfa_ aun procesando la información sin poder creerlo aún, volvió su mirada al cielo alumbrado con millones de estrellas preguntándose porque todo esto le estaba ocurriendo a él.
_ las mujeres son esposas, prometidas o enamoradas de los hombres, todos aquí, claro, menos tú, son lobos, pero solo los machos de nuestra manada van a patrullar las fronteras_ Mogui volvió a detenerse cerca de un claro, Souichi sorprendido notó cómo todas las parejas estaban prácticamente atrás de ellos, los habían seguido.
_ ¿Por qué?, ¿Hay algún peligro? _ cuestionó Souichi asombrado, pero sintió un suave movimiento a su alrededor que no supo que fue, pero al notar que todos estaban bien y al parecer no habían sentido nada, descartó cualquier duda.
_ así como somos una aldea de lobos , también existen aldeas de panteras, gatos y otras especies, no siempre las aldeas están en amistad entre sí, la mayoría de veces una u otra aldea o clan están en enemistad con otras, desean absoluto poder y control de las dos aldeas o la destrucción de una, estamos preocupados por un conflicto con un clan, el clan del oso, la situación no es grave, pero ellos pueden pasar nuestras fronteras por accidente y crear un desastre, por lo que, para evitar esto, los lobos patrullan y esparcen su olor por las fronteras, para que ningún animal trate de entrar a nuestras tierras y sepan de lo que les puede ocurrir si lo hacen, para humanos esto solo los confunde, es prácticamente un ritual que se hace por mucho tiempo, desde hace ya varias generaciones_ respondió sonriendo esperando a un lado de él, junto a la demás manada al Alfa.
_ entonces, la madre de Morinaga..._sutilmente, Souichi quería saber más de lo que ocurría entre la madre de Morinaga y éste último, preocupado de que lo que creía que hubiese entre ellos sea más que un conflicto interno.
Las expresiones de Mogui se paralizaron en una seriedad escalofriante, siendo más dura al responder_ ella también pertenece a un clan, en realidad a dos, el Clan del lobo y el Clan del perro_ volvió a sonreírle tratando de tranquilizarlo.
_ (entonces es una... ¿Perra o una loba?) _ se preguntó en sus pensamientos, pero cuando iba a realizar la pregunta a Mogui, unas fugaces sensaciones de viento detrás de él llamaron su atención, un lobo con tres lobos más cruzaron a un lado de su persona, Souichi juró reconocer al más grande, por su piel y ojos tan llamativos que le recordaban a cierta persona, era algo raro porque de algún modo, Souichi tenía un poco de temor a los demás pulgosos, pero al más grande de aquel grupo, solo podía sentir tranquilidad y emoción.
Aunque en realidad antes de llegar al viaje con esos mocosos, nunca antes había conocido ningún lobo en su vida, aunque algo si tenía claro, no le tenía horror, pudo haberse olvidado las cosas que ocurrieron antes de amanecer en la cama de Morinaga, pero no olvidó lo que sucedió antes de ello, cuando los lobos le gruñeron y él atacó, saliendo victorioso, claro.
Al llegar los tres lobos plantándose en frente de ellos, se transformaron lentamente en humanos, fue una transformación completamente increíble para los ojos de Souichi, pero lamentablemente todos esos eran hombres y estaban desnudos.
Mogui se iba acercando para vestir a un Morinaga ya curado y desnudo, aquello de alguna forma, hizo sentir a Souichi acalorado, unos cosquilleos en su entrepierna con un deseo desconocido comenzaban a aumentar, no sabía el porqué de esas sensaciones, aunque ver a otros de los hombres desnudos no habían surtido ningún efecto en él, Morinaga cambiaba algo en su organismo.
Morinaga había sonreído a su nana Mogui para detenerla y tranquilizarla, después de unos segundos en silencio, dirigió su mirada al acompañante de ella, por fin se dio cuenta que allí estaba un sorprendido y avergonzado Souichi.
_ ¿Q-Qué hace aquí? _ cuestionó nervioso Morinaga pensando en todos los posibles pensamientos de Souichi, preocupándose más si este se iba a desmayar por la transformación, pero obviando el asunto que aún se encontraba desnudo frente a él.
_ yo lo traje, no te preocupes por él, ya vio todo_ respondió Mogui sonriendo atrevida observando a ambas personas sonrojarse de su insinuación.
Souichi estaba sorprendido por la transformación y por la desnudez casi impresionante de Morinaga, el calor persistía con el deseo que se negaba a responder, un ardiente sentir diferente a lo que jamás pensó conocer comenzó a instalarse en su pecho.
_ ¿Pero qué haces? _ preguntó enfurecido Souichi quitándole rápidamente la túnica blanca de las manos de Mogui_ ¡MALDITO PERVERTIDO! _ vociferó molesto lanzando la túnica a Morinaga quien un poco asustado logró atraparlo, cumpliendo su cometido de tapar la desnudez de ese tonto Alfa frente de todos, se giró evitando observar de más, aunque en sus pensamientos insistían en volver a observar_ (¡No lo miren!) _ aún molesto no pudo escuchar un par de jadeos de unas mujeres jóvenes que lo sacaron de su paz mental.
Los hombres, posesivos con sus mujeres, las abrazaban evitando que ellas vieran al Alfa y agradecieron en pensamientos al desconocido que tiró la túnica a su Alfa Morinaga.
_ lo siento mucho_ respondió avergonzado mientras los demás hombres se reían lanzando palabras de consuelo, sin embargo, Souichi seguía molesto con las manos cruzadas en su pecho sin mirarle, rápidamente se visitó_ pensé que estarías en Shock o talvez te desmayarías de la impresión al ver la transformación_ soltó Morinaga con sinceridad y avergonzado de sí mismo.
_y... ¿Por eso no me lo habías dicho? _ preguntó molesto a lo que Morinaga asintió como un niño_ ¡NO ME TRATES COMO UN IDIOTA!, ¡JAMÁS HARÉ EL RIDÍCULO POR DESMAYARME, TONTO! _ sintiendo un poco de dolor en su cabeza, Souichi volvió a suspirar calmándose de inmediato.
_ lo siento_ susurró cabizbajo, Souichi creyó ver dos orejas caídas de lobo en la cabeza de Morinaga, eso sinceramente se vio algo divertido y extraño.
_ bueno, ya basta_ susurrando suavemente vencido por esa mirada, se tranquilizó al ver la mirada de Morinaga quién se animó de inmediato, haciéndolo sentir...bien.
_ bueno, entonces sigamos, ¡GRUPO A!, ¡LOS NECESITO EN LA ZONA DEL NORTE, GRUPO B, ¡LOS QUIERO EN EL SUR, ¡LOS DEMAS EN EL ESTE Y NUESTRO GRUPO, PATRULLAREMOS EL OESTE, ¡SI SUCEDE ALGO NO OLVIDEN AVISARME, VAMOS! _ después de ese grito, Morinaga rápidamente se quitó la túnica para volver a transformándose con los demás y partieron en pequeños grupos tal como Morinaga les había organizado.
Souichi estaba sorprendido por la coordinación entre los pequeños grupos, si para formar a los alumnos del profesor que le pidió de favor el viaje, ya fue difícil, imaginar lo que debía de hacer Moringa para mantener el orden en la manada no hizo más que tener un profundo respeto por él.
_ nunca debes humillar en público al Alfa, esta vez lo pasamos, pero la próxima, olvídate de que existes_ alguien hablo detrás de él, un escalofrió subió por su espalda de lo oscuro que se había escuchado, girándose observó a un hombre anciano de aspecto severo, muchas de las mujeres se alejaron del anciano con temor, preocupando a Souichi.
_ ese hombre es uno de los Consejos, son aquellos que se encargan de que no encontrar conflictos en ningún clan o aldea, sus reglas son para todos_ susurró Mogui recogiendo la túnica que Morinaga dejó caer antes de su transformación, las mujeres de igual forma seguían la acción de Mogui y se iban conversando entre ellas sobre alguna noticia o chisme.
Mogui empujó a Souichi de vuelta a la casa principal, guiándolo en el camino.
_ si es así, ¿Por qué la madre de Morinaga puede humillar a su hijo ?, acaso ellos no saben lo que está pasando en el clan, es absurdo que no hagan nada_ Souichi seguía molesto por lo observado en la mañana, quería poder ayudar a Morinaga, pero no encontraba de qué forma hacerlo.
_ la madre de Morinaga está bajo protección de muchas personas y algunos clanes, es muy poderosa a pesar de ser solo la Omega del anterior Alfa_ respondió seriamente Mogui, al parecer el tocar el tema de la madre de Morinaga tocaba de alguna forma una fibra en ella.
_ ¿Omega del anterior Alfa? _ se preguntaba interesado en el asunto.
_ En la organización o jerarquía de los lobos está el Alfa , jefe de los lobos , se encarga de muchas cosas importantes en su manada, especialmente de preservar la paz en el interior con los demás lobos o exterior del territorio con los demás clanes , el beta es asignado como un secretario del Alfa, solo los superiores a ellos pueden destituirlos del cargo, es aquel que ayuda al jefe de la manada, se encarga de asuntos que el jefe no puede tratar, si el Alfa cambia o muere, el secretario se queda a servir al siguiente, incluso pueden elegir el Alfa que creen que es correcto para ocupar el puesto, el Alfa también es el encargado de elegir otro Beta si así lo cree conveniente y finalmente el Omega, pareja que el Alfa elige a través de su lobo y sus instintos, es decir, tienen una relación romántica ya establecida, Souichi, si un lobo ama, ama de verdad, te será fiel para toda tu vida incluso hasta que su propia vida se extinga, porque un lobo puede morir de soledad si no está con su pareja destinada_ respondió Mogui llegando al hogar principal del Alfa, abriendo la puerta para él.
_ eso es...como sacado de una novela ficticia_ se encontraba sorprendido de lo escuchado, había vivido durante mucho tiempo ignorante de tantas cosas que jamás se le pasó por su cabeza, tal parece, había muchas más cosas que desconocía.
_ pero es muy real, el Consejo no permitirá la unión de ningún lobo y humano por esa razón, hombres ambiciosos no deberán saber jamás de nuestra existencia, eso, y otra razón más_ después de entrar se dirigieron a la cocina, Mogui comenzó a preparar platillos para la cena de hoy y Souichi cerró la puerta hasta sentarse en una silla.
_ ¿Por qué el lobo será posesivo con su pareja? _ se preguntó Souichi recordando la forma en como los lobos machos abrazaban a su pareja, se quedó observando por mucho tiempo a Mogui quién solo negaba su suposición.
_ el corazón de los humanos, no, sus sentimientos son muy frágiles y cambiantes, por lo tanto, no le sería fiel en corazón ni en cuerpo al lobo a quien elegirían, si no podría ser fiel a su especie, tampoco lo serán con otra, no morirían si su pareja muere, nosotros sí_ Mogui sonrió suavemente dejando intrigado a Souichi.
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Continuará