— ¡Esto está muy mal! —Alegaba Suga tratando de detener a los villanos —Es tu momento de brillar —Regañaba a Jungkook
—Oye se luchar pero Yetis son Yetis
Ambos miraron al frente, ahí habían a unos 10 metros de distancia cientos de Hombres de las nieves o Yetis congelando todo, lanzando enormes cubos de hielo que creaban con magia
— ¿Dónde están Hoseok y Jiminie? —Preguntó el elementalista
—Están sacando a las criaturas tal y como dijiste
—Muy bien, no dejaré que los lastimen porque están aquí por eso —Apuntó hacia el anillo, Suga podría decirse que era Villano pero su ciudad natal la defendería con su vida si era posible
—Lo es y no lo usaré hasta que todos estén a salvo —Gruñó desviando la mirada sin poderle decir la verdad
Que no podía usarlo….
— ¿Qué es eso?
Dejaron de hablar para ver como seres corrían hasta ellos a toda velocidad
— ¡Trolls!
Uno se fue tras Jungkook golpeándolo y mandándolo a volar estrellándose con una casa, mientras que Suga corría para esquivar el otro golpe de otro Troll, se acomodó y de su mano brotó una llama que se convirtió en llamarada, extendió su brazo hacia el monstruo y lo quemó escuchando sus quejidos
Jungkook por su parte se puso de pie quitándose los escombros y al ver como asestaba el golpe este lo detuvo inclinándose un poco por la inmensa fuerza que tenían estas criaturas, sus dientes crujían al hacer la fuerza pero agregándole un poco más logró empujarlo alejándolo de él, sin perder ni un segundo corrió y dando un salto lo pateó en el rostro haciéndolo retroceder de nuevo
Fijó su vista al suelo al ver una sombra que se agrandaba y descubriendo que era, brincó hacia la izquierda evadiendo el gigantesco subo de hielo
Por otro lado Suga continuaba luchando creando bolas de fuego que las lanzaba hacia los cubos derritiéndolos antes de golpearlo, carecía de fuerza pero era ágil cuando uno de los Trolls intentaba acercarse hacia un circulo de fuego para protegerse mientras seguía derritiendo los cubos y así no destruyeran las casas o edificios
Un nuevo golpe lo hizo caer en 4 patas, Jungkook jadeaba por el cansancio ya llevaban un rato luchando contra ellos y hacia unos segundos había recibido una llamada de Jimin comentando que no era posible regresar a ayudarlos ya que en la salida de la isla también había Yetis atacando
Se mordió el labio pensando que hacer, frustrado —No puede ser que unos simples Yetis nos acaben así, tanto me falta para estar con él —Miro el cielo pensando en su papa — ¡ARGH! —Negó con la cabeza y continúo luchando contra los Trolls
Cuando menos se dio cuenta estaba rodeado de 3 enormes Trolls, que gruñían y emitían sonidos acercándose cada vez más
—No hay de otra, tendré que convertirme —Pensó en su estado frenesí
Mientras intentaba concentrarse empezó a ver como la tierra se levantaba creando un pequeño remolino que impedía la vista de todos
— ¿Que está pasando? —Se cubrió la vista con su mano y retrocedió al no poder ver nada
Escuchó de pronto como alguien atacaba a los monstruos por los chillidos que hacían y cuando se despejó vio a los seres enterrados hasta la mitad
— ¿Cómo? —Avanzó lentamente sin acercarse demasiado pues ellos trataban de soltarse por todos los medios, creo una espada y les cortó la cabeza sin pensarlo dos veces
Miró hacia adelante y encontró a NamJoon sonriéndole confiadamente
—Andando
No lo esperó y fue hasta las demás criaturas, Jungkook aun confundido buscó con la vista a su compañero asombrado de lo que estaba viendo
Era Jin a un lado de Suga luchando codo a codo venciendo a los Yetis con el fuego que creaban, perdió la noción del tiempo prestándoles solo atención a ellos
— ¡Oye!
Pestañeó varias veces escuchando el llamado del robot y en un segundo se compuso para luchar, ya con su ayuda lograba atacar y vencer más fácil a las criaturas
Luego de varios golpes y evasiones lograron derrotar a los que se encontraban con ellos
— ¿Qué hacen aquí?
El robot soltó una risita y caminó hasta los otros dos quienes también ya habían terminado, no los mataron pero lograron que se rindieran
Tanto Suga como Jin se vieron entre si
—Gracias—Comentó el pelinegro
—De nada —Vio sus manos, el fuego era el elemento que menos lograba dominar por el momento
—No sabía que había otro fuego cerca…
Escucharon pisadas y al mismo tiempo giraron para encontrarse con los ojos furiosos de Jungkook
—Es el más fuerte —Comentó entre dientes
— ¿Eh? —Dio un paso hacia atrás observando a Jin de pies a cabeza
—Hola—Se cruzó de brazos con un tono sarcástico
Jin se puso frente a él molesto también mirando el anillo antes de que escondiera la mano en su brazo
— ¿Solo están ustedes?
—No —Suga alertó a Jungkook —Hoseok y Jimin deben de estar en peligro, vamos
—Si —Respondió pero sin moverse
Namjoon se ofreció a ayudarlos y corrieron sin percatarse que ni Jungkook ni Jin se habían movido de su lugar
—No puedo creer que me hayas engañado
—No puedo creer que me hayas engañado
Dijeron al mismo tiempo
— ¿Yo? —Se apuntó Jin confundido —Tu hiciste que te entregara ese anillo, pensé que tenía valor sentimental para ti
—¡JA! Eso que, me mentiste estaba buscando al más fuerte y no me dijiste que eras un elementalista —Lo señaló de forma acusatoria — ¡Incluso me preguntaste que eran!
—Eso que tiene que ver
— ¡Que! —En un segundo se colocó a centímetros de Jin —Estoy seguro que a estas alturas sabes lo que significa que estemos juntos cierto —Rio de lado tomándolo de la ropa
—No me das miedo
— ¿En serio? Porque deberías —Alzó una ceja coquetamente
Sin permitir que escapara abrió un portal y lo arrojó lanzándose el también, Jin sintió que voló por varios segundos hasta caer boca abajo en pasto, quejándose por el golpe, atrás de él cayó Jungkook apoyándose de una rodilla, el mayor se puso de pie identificando de inmediato el lugar, frio y nublado con algo de viento
— ¿Qué hacemos aquí? —Fijó su vista en su casa
—Estamos en Marion, porque no tienes ganas de ir a tu casa —Se tronó los nudillos
—Si pero que hacemos aquí
Se hizo para atrás cuando Jungkook lo iba a golpear
— ¿Pero qué haces? —De nuevo evadió otro ataque
—Vaya has estado practicando
Tronó su cuello y continuó atacando hasta adentrarlo a la casa tumbando la puerta, lo tomó de la ropa y lanzó hasta un sillón, rio de lado y en un segundo se colocó entre sus piernas sometiéndolo y agarrando sus brazos poniéndolas en la parte superior de su cabeza
— ¡Que estás haciendo!
—Pues que más, no quiero perder más tiempo, es momento de hacer realidad la profecía no crees —Alzó una ceja
— ¿De qué hablas?
—Ay por favor, estoy seguro que ese angelito ya soltó todo —Jin se quedó callado —Ahhh entonces si sabes
—Estás loco, tus compañeros están en peligro por lo que escuché y tus estas aquí luchando conmigo
—No pasa nada solo es cuestión de tiempo para ver la estrella roja y conseguir el siguiente anillo
—Eso sí que no —Intentó zafarse pero Jungkook era más fuerte
—No me digas que también estas en busca del anillo
— ¡Si! Y será mío —Por fin se soltó y lo aventó haciéndolo caer en el suelo
Pero a diferencia del moreno este no lo atacó si no que, presto atención a su casa, tal vez en este tiempo no había pasado nada pero allá ya había estado más de 3 meses y se sentía extraño, todo estaba igual ni siquiera había polvo aun, fue hasta un espejo y se visualizó tampoco había cambiado ni siquiera la barba le había crecido sorprendiéndose mientras se tocaba la barbilla
— ¿Qué tanto te ves? —Lo regañó
—No ha cambiado nada…. Ni yo… Espera yo si…. —Cerró sus puños —Tengo una misión —Observó por el rabillo del ojo a Jungkook —Debo vencerte
—No me hagas reír —El moreno caminó hasta el mayor haciéndolo girar toscamente por el hombro —“Necesitamos engancharnos”
— ¿Qué?
Lo empujó hasta la pared arrinconándolo y con coquetería movió paso su dedo índice por la orilla del pantalón
— ¿Qué… que… estas…. Tratando….? —Jin se puso rojo y alejó de ahí
Quiso dar un paso pero el vampiro lo jaló al sillón de nuevo acostándolo, colocando sus piernas en los costados
— ¿Qué es enganchados? —Sus mejillas se pusieron rojas al presenciar el cuerpo de Jungkook a escasos centímetros de el —Esto es un chiste verdad
— ¿Quisieras que fuera un chiste? —Usó un tono grave pero bajito, casi en susurro —Haré lo que sea para ver esa estrella roja
Los ojos de Jin se blanquearon cuando la lengua del moreno mojó su cuello dejando un camino, escuchando como terminaba tronando un beso
—Esto no puede ser…
De nuevo guardó silencio y cerró sus ojos arrugando su frente, la lengua estaba en su oreja humedeciéndola por completo y terminando con un ligero mordisco
—Esto…Es lo que trataba…. De evitar Tae…
—Estoy seguro que sí, pero mira nada más, tú viniste por mí
Las manos de Jin por fin libres sujetaron con fuerza los brazos de su compañero pero había algo, algo que hacía que su corazón no dejara de palpitar y que su vientre ardiera en deseos
“¿Es parte de la profecía?”
Se sentía tan extraño, en su interior quería continuar pero su cabeza no lo dejaba, era un extraño listo para violarlo prácticamente y ¿Estaba feliz?
—Admítelo tú también quieres, y es parte de nuestro destino… Mejor hay que acelerarlo
Sonrió al ver como lentamente bajaba las defensas pues el agarre de sus manos ya no era como al principio, pego sus frentes pero no lo besó simplemente rozó sus labios encendiendo a Jin
—Te propongo algo, déjame penetrarte y juntos buscaremos ese anillo…
Jin negó de inmediato
—O si quieres hazlo no me importa la verdad….
Escuchó un ruido extraño y movió su cabeza sin levantarse riendo al ver las hornillas de la estufa encendidas
—Vaya parece que a alguien le gusta la propuesta
Regresó su rostro en la primera posición y mordió el labio de Jin no muy fuerte solamente para alborotarlo y vaya que si lo estaba haciendo, porque en vez de alejarlo lo atrajo enrollando sus brazos en la cintura del moreno y beso con hambre
Ese roce había sido la perdición para Jin, convirtiéndolo en otro, jamás pensó que se volvería así con tanta rapidez pero los labios, la saliva y la lengua que saboreaba de Jungkook era lo más exquisito, era una fuerza que no podía controlar
El moreno abrió un ojo percatándose de las hornillas estas estaban con la flama más alta de lo normal
“No dejes que te domine”
Esas palabras retumbaron en la cabeza del más alto y abrió sus ojos, percatándose de lo que en realidad estaba ocurriendo
Los cerró concentrándose y realizó lo primero que se le vino a la mente
—Vaya parece que alguien está caliente
Se burló Jungkook viendo las hornillas con la llama casi hasta el techo de la casa, cuando iba a besarlo otra vez retrocedió de inmediato por la sorpresa, dejó lo que estaba haciendo y contempló la casa
Todo estaba cubierto de nieve, incluso Jin estaba tan lleno de nieve que ni siquiera lograba verse, hizo una mueca y soltó una estruendosa carcajada
—Así es que esto fue tu mejor plan —Se abrazó por la corriente helada que pasó
Jin se enderezó quitándose la nieve del cabello y rostro tomando segundos despues a Jungkook de los hombros
—No, es esto
Ya no lo dejó actuar y se lo llevó ahora a las profundidades del océano
Todo parecía un sueño, Jungkook con la boca cerrada observaba todo pero no se veía casi nada, arriba a varios metros estaba la superficie mostrando solo algunos rayos de sol, su cabello y ropa se movía a causa del agua e infló sus cachetes cuando se quedó viendo detenidamente al mayor
Este también contemplaba el lugar y entrelazando sus manos comenzó a patalear hacia la superficie, Jungkook no hacía nada pareciera que estuviera en una especie de trance así que solo de dedicaba a observar el lugar siendo jalado por el mayor
Cuando llegaron hasta arriba ya podían pisar la arena y arrastrándose respirando por fin avanzó hasta la orilla de la playa dándose cuenta que sus compañeros se encontraban a unos metros
—Nos trajiste a…. —Tosió
—Si la isla
— ¿Cómo lo hiciste?
— ¡Jungkook!
— ¡SeokJin!
Ambos atendieron los llamados, Namjoon corrió hasta Jin ayudándolo a pararse
— ¿Él te…?
—No… No pasó nada
El robot suspiró aliviado y lo tomó del brazo ayudándolo mientras que Jin se limpiaba el agua del rostro y exprimía la ropa igual que su compañero
— ¡Jin hola!
—Hey
Hoseok y Jimin lo saludaron y este les devolvió el saludó cortésmente
— ¿Qué hacen aquí a todo esto? —Preguntó ya molesto el moreno haciéndose el cabello hacia atrás
—Te tengo una propuesta —Habló Jin seriamente
— ¿Cuál?
—Aquí no, vayamos a un lugar más tranquilo
—Estoy de acuerdo —Jadeó Jimin recargándose en el hombro de Yoongi y pasando su brazo por el suyo —Siento que me estoy evaporando… —Sacaba la lengua del cansancio que sentía
Yoongi palpó su hombro para reconfortarlo y afirmó con la cabeza también
—Bueno vayámonos entonces a otro lugar
Sin pensarlo dos veces caminaron, escuchando atentamente a Suga mientras los ponía al día de lo que había ocurrido en su ausencia
Jungkook y Jin cruzaron miradas algo desconfiados uno del otro…