Han pasado tres días desde que TaeHyung conoció a JungKook, se cepilla el cabello con parsimonia, observa su reflejo en el espejo, ladea su cara , corrobora su perfil , se pregunta si realmente es bello. No ve nada extraordinario en su reflejo, el sujeto le debió mentir, no sabe con que intención, pero no puede evitar sentirse perturbado, lo ha dicho tan seguro, el tono de su voz, la forma en que lo observó, su pose dominante, la mirada profunda, sus labios entreabiertos , acercándose a el lentamente, acariciando su rostro… ¿Iba a besarlo? Como en esas novelas románticas que leía a escondidas de su esposo, romances que nunca le sucederían a el, porque bueno el era un hombre casado, no debía tener ese tipo de pensamientos, ni siquiera debería de leer ese tipo de libros, eran prohibidos.
Se acostó en su cama, abrazando su almohada, cerró los ojos, si tan solo no hubiera reaccionado como lo hizo, pero fue casi instintivo, lo abofeteó, el tipo era un atrevido, ni siquiera lo conocía.
– ¿Estas preparado?
– Si.
Hoseok se quitó la bata quedando totalmente desnudo, TaeHyung suspira, se gira para quedar boca arriba, abriéndose un poco la camisola larga que traía, esperando. Durante el desayuno ya le había dicho su esposo que en la noche debería cumplir con 'sus obligaciones maritales' y no es que al moreno le desagradará, si bien hace unos años, en su noche de bodas fue un choque para su primer encuentro sexual, pues al ser tan joven , no tenia información , no había sido violento, pero tampoco considerado, había sido su primera vez para el pero no para Hoseok que si tenia experiencia sexual, era lo común. Con el paso del tiempo su vida marital fue tolerable, podría decirse que era el momento mas intimo que tenían. Pero siempre transcurría todo en silencio. Ahogaba un poco sus gemidos por temor a ser considerado un libertino, un descarado, como esos donceles que se alquilaban para dar placer a los señores, al menos eso le había dicho su padre después de su noche de bodas.
Hoseok se acuesta a su lado, termina de abrir la camisola y acaricia sus pezones, se inclina dándole un beso en los labios, algo suave, se acuesta sobre el y continua besándolo con delicadeza, abre sus piernas, con lentitud. TaeHyung lo abraza, siente la boca de el contrario besar su cuello, cierra los ojos y su imaginación vuela.
Si el chico pelinegro lo besara, ¿lo haría de la misma manera? Le susurraría palabras al oído diciéndole lo hermoso que era mientras le… le hacia el amor , su silueta era de un hombre fuerte, aun vestido lo denotaba que bajo la ropa debía tener fuertes brazos… se sobresalto dándose cuenta que era su esposo quien lo penetraba en ese momento y el estaba fantaseando con otro hombre, pero no pudo evitar sentirse excitado, cerro los ojos tratando de borrar el pensamiento pero fue mas intenso, los oscuros ojos, la mirada coqueta, los labios rosas, su rostro completo… tanto le atraía la imagen que estaba a punto de llegar a su orgasmo, cuando sintió ser inundado por su esposo, la humedad escurrió de su cuerpo. Suspiró.
– Quédate acostado y eleva la pelvis – El sabia porque se lo decía , solo obedeció. Hoseok se levantó para ir a asearse, después regresó con una toalla humeda para limpiarlo. Cerró su camisola y se acostó desnudo a su lado, dándole un beso en la frente. – Descansa, mañana tendré un día ajetreado, debo levantarme temprano. Se dio la media vuelta cubriendo su cuerpo con las sabanas.
Y así, nuevamente TaeHyung se quedo con los ojos abiertos , sin poder dormir como hacia varias noches atrás – tres para ser exactos- no pudo evitar sentir tristeza por haber perdido la oportunidad de tener una aventura romántica , se había esfumado con esa bofetada proporcionada al lindo joven.