Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"Solos y juntos" por Astarisk665

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, gracias por leerme xD

aqui un nuevo cap y espero les agrade a todos jeje, disfruten

 

Aclaraciones:

10 gumis = 1 dolar

Comesueños=espiritu de KH dream drop distance

 

~Emporio el chocobo feliz~

La temperatura de las calles era totalmente horrible, podías ver diminutos copos de nieve que poco a poco se aglotomeraban en níveas montañas de está. Varias eran las personas que iban y venían por las calles. Algunas con cajas de regalo, otras con ollas o bolsas con comida para degustarlos con familiares o amigos. Y entre esas personas destacaba un peliblanco de ojos aguamarina, el cual recientemente había cortado su frondosa melena, quedando como resultado un corte que le daba cierto parecido a un personaje de cierta franquicia que no se mencionaran por derechos de autor.

Después de haberse cortado el cabello y arreglarse como una persona decente, decidió ir rápido por un regalo para el moreno, todavía restaban unas 2 horas para que se alzara la navidad, y el peliblanco no tenía tiempo que perder. Sin embargo, el no se esperaba con esta “pequeña” gran piedra en su zapato.

-¡¿Agotado?!-exclamo Riku con asombro al ver que, en efecto, las estanterías de la tienda se encontraban prácticamente desiertas, restando unos pocos objetos que, según él, no le regalaría ni a su ex novia

-pues vera señor, como podrá ver no queda que le podamos proveer, la gente arraso con todo desde la mañana, y me temo que en las tiendas de por aquí suceda lo mismo-dijo el empleado con tristeza

-no puede ser…-Riku se enderezo en el frio metal de la caja de pago, pensando que, al menos, podría comprar comida o algo de licor, para no tener que llegar con las manos vacías

-aunque, puede que tengamos algo..pero le informo que el precio es bastante elevado, incluso para el gerente de la tienda-dijo tecleando en su computadora, viendo los objetos que estaban archivados

-¿y de que estaríamos hablando?-pregunto Riku tratando de ocultar su alegría, pensando que quizás no estaba tan perdido después de todo

-es un peluche, pero el problema no solo es el precio, si no el tamaño, estábamos pensando en devolverlo puesto que su tamaño y precio nos dificultaba el venderlo-explico amablemente el cajero

-el tamaño puede ser un inconveniente, pero el dinero no es problema-dijo abriendo su billetera

-pues cuesta aproximadamente….750$ gumis señor-dijo mientras observaba detenidamente si no se había equivocado en el valor del peluche-y además es un animal bastante raro, es como si un gato hubiera arrasado con un restaurant, y su precio es otro problema, si usted no puede….-fue interrumpido por una mano, la cual se estrello frente al cajero, y al mirar abajo, en la caja de pago había un cheque, el cual tenía una suma considerable de dinero

-me lo llevo-dijo con seguridad, mientras que el atónito empleado asentía y abría la caja para darle el cambio-oh, no es necesario, quédeselo. Si no es problema, me gustaría llevármelo cuanto antes

-ah…sígame-dijo el sujeto, indicándole a Riku que lo siguiera a la bodega para buscar el aclamado juguete

 

~Departamento de Sora~

Perfume, desodorante, pasta dental, una afeitada, una ducha de media hora, un cepillado intensivo de cabello. Eso y más fue lo que hizo el castaño mientras que el peliplata se ausentaba para asearse. Normalmente cuando estaba con sus amigos no era importante su imagen, puesto que ya se conocían y había confianza, pero con Riku, era una historia completamente distinta.

Después de su ducha, batallo durante un buen rato con su peinado, doliendo como el infierno cuando trataba de bajar sus puntas. Luego de tanto forcejeo, su peine quedo roto y aprendió una valiosa lección, su pelo era una perra imposible de vencer.

-Ni para las juntas con compañías vecinas me arreglo tanto-dijo con incredulidad mientras se observaba al espejo, jeans y una camisa negra, la cual estaba arremangada hasta los codos, unos botines color negro que encontró en lo más profundo de su armario, junto con una amigable araña que trato de inyectarle veneno, pero fuera de eso todo bien.

El pollo y las verduras ya estaban hechos, incluso había hecho puré de papa, y puso al congelador un vino que llevaba añejándose bajo su cama desde su graduación. Incluso había decidido hacer aderezo y huevos rellenos para que se viera más completo, las decoraciones y un pequeño pero tierno arbolito que estaba en la esquina del comedor lucían bastante adorables, sin duda todo estaba listo.

Aunque había un problema, el peliplata aun no llegaba. El castaño llamo incontables veces a la puerta de su vecino pero no consiguió respuesta alguna. Incluso pregunto por si las dudas al portero y este le respondió que lo había visto salir hace algún momento

-“¿quizás se fue con algunos amigos?”-si ese había sido el caso, el castaño tenía unas inmensas ganas de romperle el cuello a su vecino, pero desecho inmediatamente la idea, no sería lógico haber dejado la comida y decoración aquí para irse a otro lado sin avisar-“¿quizás olvido algo?”

Sea cual sea el motivo, si que se había atrasado, ya solo faltaba media hora para que sea navidad. Aunque no todo esto fue malo, ya que el castaño se había replanteado la idea de los condones, dándose cuenta de que era una reverenda estupidez. Prefirió no regalarle nada, al fin y al cabo, era mejor nada a ponerle unos condones en la cara y decir “feliz navidad”. Sora se golpeaba por la idea

-“¿Debería empezar a comer?”-se repetía por quinta vez en la noche, su estomago le estaba dando unos buenos golpes en las costillas por tenerlo vacio, la comida seguía tibia y el solo la miraba con deseo, pues toda tenia la minúscula dignidad de esperar a su invitado para poder comer-no, no, debo ser educado…¡Maldita sea! Me educaron muy bien…

Mientras que el moreno maldecía a sus progenitores, pudo escuchar un ruido sordo proveniente del exterior de su departamento, seguido de un insulto proveniente de una voz bastante conocida para el. Inmediatamente se levanto a abrir la puerta para ver qué pasaba, y se encontró con un peliblanco siendo aplastado por lo que parecía ser…

-¿Un gato?-pensó el moreno al ver como el peliplata, que ahora poseía el cabello corto, trataba de levantar semejante mastodonte de felpa-Riku, ¿Qué es eso?

-¡Oh, Sora!-exclamo el más alto al ver al moreno asomarse por la puerta-emh… ¡¿Feliz navidad?!-dijo con una sonrisa nerviosa mientras que entraba al gato de felpa al comedor de Sora

-¿Eh?-el más bajo no comprendía lo que el de tez pálida quería decir, aunque se hacia una idea, pero quería que él se la confirmara

-¡Que feliz navidad! Yay, yija, hurra, bravo, esto es para ti-decía tirándole el peluche encima, provocando que el pequeño cuerpo del mas bajo cayera por el peso y la sorpresa-no preguntes, solo gózalo-dijo para luego, literalmente tirarse en el sofá del castaño, exhausto por cargar ese monstruo por todo el camino hasta allí

-¡Wow! ¿Enserio es para mí?-dijo mirando con asombro al animal de felpa , poniéndolo a un lado para inmediatamente saltar encima de él, sintiendo su suavidad y esponjosidad, característico de este tipo de juguetes

-no como crees, es para mí-dijo mientras tomaba un poco de agua y miraba con una sonrisa como el castaño disfrutaba su nuevo obsequio-pero oye, espera unos minutos, que todavía no son las 12-dijo quitándole el peluche y tirándolo al sillón con toda la fuerza que le quedaba-maldito monstruo, por tu culpa casi me rompo la cadera

-¡Oye! Tu dijiste “gózalo”-dijo mirando con los ojos lagrimosos al más alto

-solo es un rato, no te vas a morir-dijo con los ojos entrecerrados viendo como el moreno hacia muecas de disgusto. Entonces se le ocurrió una idea para distraer al castaño de momento-¿y si mejor comemos?-sugirió viendo como el castaño se detenía, y miraba la mesa con deseo al ver la comida que había preparado-“vaya, eso fue rápido”-pensó con sorpresa

-¡SI!-dijo tomando al más alto por el brazo, casi torciéndoselo por la fuerza, y lo acomodo en la silla mientras el ponía los vasos y cubiertos-casi me como el sofá de tanto esperar, te demoraste un montón

-¿eh? ¿Tú no has comido todavía?

-por supuesto que no, hasta yo tengo corazón-dijo sonriéndole al de tez pálida, sacándole un pequeño sonrojo, pero luego este comenzó a reírse de manera espeluznante

-yo te abría dejado morirte de hambre-dijo viendo por el rabillo del ojo como el castaño le fruncía el ceño

-¡Deberías de estar agradecido que te espere! Un “Muchas gracias Sora, eres de lo mejor” hubiera estado bien, o al menos un “gracias”-dijo con un puchero mientras servía la comida, hasta que sintió como alguien soplaba en su odio, haciendo que soltara el cucharon con el que estaba sirviendo puré de la impresión-¡Ah!

-hum, muchas gracias Sora-dijo el peliblanco con una mirada picara en su rostro

-¡¿Po-por que fue eso?!-Grito el afectado tras ver como el peliplata retomaba su asiento y miraba expectante la comida

-¿Qué fue qué?-pregunto fingiendo inocencia

-eso de soplarme-dijo todavía con el sonrojo que previamente le había causado el peliplata

-pues no lo sé, simplemente quería hacerlo y lo hice-dijo mientras se levantaba y se posicionaba frente al moreno-¿por? ¿Acaso te pusiste nervioso?-dijo mientras levantaba una ceja con complicidad, mirando fijamente a los zafiros del castaño

-¡N-NO! Solo no lo hagas de nuevo, no me gusta que invadan mi espacio personal-dijo esquivando la intensa mirada del más alto, mientras que este solo lo observaba con diversión

-“tierno…”-dijo, hasta que noto algo muy importante-por cierto Sora-Riku apreso al moreno entre sus brazos, haciendo que este chillara por la sorpresa, y no de una forma masculina-feliz navidad-y al segundo se escucharon como varios vecinos gritaban y festejaban

-¡Suéltame maldita sea!-exigió el más bajo, aunque, para sorpresa de Riku, este dejo de protestar al instante-un segundo, ¡es navidad!-y de un codazo en las costillas se soltó del más alto y corrió hacia el sofá, lanzándose sobre su nuevo peluche-¡OH! Es tan suavecito~

-según el vendedor, se llama comesueños, o algo así

-es como estar en una nube-dijo hundiéndose en la esponjosa felpa. Se hubiera quedado relajado por más tiempo hasta que recordó la comida-¡es cierto! Hay que comer antes de que se enfrié… más de lo que ya esta-dijo levantándose del peluche y acercándose a la mesa-Riku ¿podrías traer hielo?

-de acuerdo-dijo mientras que el moreno servía el pollo y el puré. Al abrir el congelador el más alto quedo estupefacto por un momento, pero luego una maliciosa sonrisa adorno su níveo rostro-Sora-llamo al moreno

-Dime-dijo levantando la vista hacia el peliplata, quien tenía una alegre cara mientras que un vino se dejaba ver en sus manos

-¿Qué te parecería…beber un poco?-dijo para luego sentarse en la mesa mientras que el más bajo lo miraba con sospecha…

.

.

Continuara….


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).