Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Últimos Pensamientos por AMMU TEIKOKU YUDAINA

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Por favor lean, disfruten y comenten. 

Nos vemos abajo. 

---Cinco Años---

Siento mi cuerpo muy pesado…

Me está faltando el aire…

Mis ojos se cierran, no puedo abrirlos…

Mi cabeza… Me siento muy mareado…

Mi mente se está nublando…

¿Por qué me siento así?

No puedo recordar que hice antes.

En algún punto, ese sentir desapareció.

-Mu, deja de jugar y comienza tu entrenamiento-

Esa voz… ¿Por qué viene a mí?

-¿Maestro?- Apenas su pudo salir audible de mi boca… Verlo como la última vez que estuvo a  mi lado.

Suspiró cansado, su edad se lo demanda así –Te quedaste dormido de nuevo…- Se sentó a mi lado, acariciando mi cabeza –Debes de seguir aprendiendo, más tarde entrenaremos tu cuerpo- Me sonrió como lo recordaba.

Quiera lograr en ese momento.

¿Todo lo que pase solo fue producto de mi imaginación?

Desee abrazarlo, pero… Mi cuerpo no respondió y solo asiento, regresando a aquella labor que me estaba enseñando.

Pasar otra vez… Siento yo el aprendiz…

Me siento tan feliz…

Aunque el entrenamiento fue bastante duro como siempre, mi maestro… No es considerado, pero lo entiendo ahora.

Si hubiera sido más suave, posiblemente no explotaría mi potencial.

Ese día transcurrió tan agradable, no quería que acabara.

-Mañana regresaremos al santuario, así que alista tus cosas- Tan tranquila sonaba su voz, mientras conversábamos.

Me encantaba escucharlo.

-Sí, maestro- Mi tono siempre ha sido bajo, pero… ¿Por qué no pudo expresar mi entusiasmo?

-No quiero que te distraigas tanto con los otros aprendieses- Me sentencio, pero no se notaba molesto, si no fue como una advertencia suave.

-Entiendo maestro, pero… ¿Puedo hablar con ellos un poco?- Baje mi mirada, jugaba con mis manos, esperando su aprobación.

Suspiro, con sus ojos cerrados, asintiendo levemente.

Entendía que me daba ese permiso, mi ilusión siendo tan grande.

No sé, no recodaba cuanto tiempo hemos estado en la torre, pero no importa.

Llegamos al día siguiente, es extraño… ¿Cómo llegas así de rápido?

Cierto… Teletrasportarnos para nosotros es muy fácil…

Pero… Me giro a ver al patriarca, su rostro ahora… Luce diferente…

Quiero preguntarle qué le pasa, pero… No logro verlo después…

¿Cómo pudo alejarse tanto, estando en la primera casa?

-¡¡¡MU, HAS VUELTO!!! ¡¡¡ME ALEGRO MUCHO!!!- Esa voz grave, la reconozco en cualquier lugar.

-Hola Aldebarán- Le dedico una sonrisa a uno de mis mejores amigos.

-¿Cómo estás? ¿Qué has hecho?- Me bombardeo de inmediato con varias preguntas.

-Bien, ya sabes entrenar… ¿Cómo has estado? ¿Cómo están todos?- Esa sonrisa que no puedo ocultar.

-Muy bien, igual que tu… Pero no ha pasado mucho solo dos meses te has ido- Esa carcajada que no se puede ocultar, me hace pensar que de nuevo estoy en mi hogar o lo que conocía como tal.

Se sorprendió mucho… ¿Porque siento que fueron años? Muchas cosas no tiene sentido, pero… No quiero cuestionarlas, soy feliz de nuevo… Sin embargo algo… Siento que no está bien…

-Sabes… Por una broma de Death, Aioria terminó atrapado en un árbol y Aioros tuvo que bajarlo- Sin duda debió ser algo muy divertido, mostraba sus dientes por la anécdota.

-¿Enserio? Pobre…- Me preocupé bastante, de solo imaginarme aquello.

-Deberías ir a saludarlos a todos, de seguro están felices de verte- Me dijo esto, caminando hacia la salida de Aries.

-No esto seguro… Pero…- Me voltee a verlo, pero también desapareció -¿Alde?- Lo llame, pero no contestó.

Sentí que debía seguir subiendo a los demás templos…

Lo hice, pero con cada paso que daba, mi cuerpo se sentía diferente…

El tercer templo… No pude escuchar a nadie, estaba en silencio absoluto, que podía escuchar mis propios latidos y sangre corriendo por mis venas…

-Es extraño… Por qué no está…- Baje mi vista… Negando con la cabeza -¿Por qué no recuerdo…?-

Quise volver… Más detrás de mí solo podía apreciar oscuridad… No podía retroceder, mis pies seguían hacia adelanté.

Cáncer, lucia tan lúgubre, más de lo que Death lo lograba hacer… Pero aun vacía, escuchaba unas risas burlescas…

-¿Qué está pasando?- Quise llamar a mi maestro por vía cosmos, no pude.

Fue allí que me asuste, mis muñecas… Siento que me arden…

-¿Qué me pasa?- No resistir esa sensación y tuve que quitarme los vendajes.

Temblé ante lo que veía, mi corazón latía demasiado y no podía mantener mi compostura -¿Por qué? Se supone que…- La sangre escurría de mis heridas abiertas… Se sentía tan cálida, pero me aterraba tanto…

No podía detener el sangrado, aun con mis habilidades.

No lo pensé más, y me fui directamente a Leo.

-¿Mu? ¿Qué te pasa?- Aioria me miraba bastante preocupado.

-¡¡¡AIORIA!!! No puedo… Mis manos… La sangre- De seguro estaba pálido.

-¿Qué tienes?- Me tomo de los hombros, riéndome bastante conmocionado.

-Mira- Le mostré mis muñecas.

-¿Qué te pasa?- Las tomo ambas, pero sus manos no se anchaban de mi sangre… ¿Por qué?

-¿No ves… La sangre?- Ya no sabía que pasaba… Abrió mis ojos a más no poder, agitada mi respiración, mi corazón latía demasiado de prisa.

-Mu, creo que necesitas descansar- Me miro sonriendo nervioso –Debiste entrenar demasiado y te está afectando.

No espere más, salí corriendo hasta donde mis piernas me dieron posibilidad.

Mis lágrimas estaban cayendo, pero mis muñecas no me dolían más... Pero ahora el miedo me invadió…

Solo podía seguir adelante, lo que había ya corrido desapareció, solo volviéndose oscuridad.

No me detuve, hasta que choque con alguien, y caí al suelo de sentón.

Aun estando impresionando porque la sangre no paraba…

-¿Por qué estas corriendo por Virgo?- Esa voz tan serena y fría, levante mi cabeza, con lágrimas en mis ojos.

-¿Sha…Shaka?- Quise abrazarlo, pero… Me detuve… No sabía si me había vuelto loco, pero nadie veía la sangre en mis muñecas.

Caí al piso y ni siquiera él podía verlo.

-¿Estas muy alterad? ¿Qué te atormenta Aries?- Estaba delante de mí, sus ojo abiertos…

En ese momento, pude darme cuenta que este lugar, no era el santuario que conocía.

-No eres real… Nada de esto lo es…- Mis labios templaron, retrocedí.

Pero su mano me detuvo, sujetando con fuerza.

-Mu... No te vallas de nuevo por favor- Aquel tono sonaba tan dulce, me transmitía una calidez tan extraña.

-Shaka… Yo… Esto no…- Me sonroje, lo sentía. Aunque había perdido tanta sangre, aun podía… Sus manos de nuevo no se impregnaron del líquido vital.

-Tienes razón… No es real…- Sentí como me rodeo…

Fue allí cuando me di cuenta que mi cuerpo, mi edad… No era la actual… Yo volví a tener seis años, éramos unos niños…

¿Cómo no me di cuenta?

Yo… Tengo diecisiete…

-Quisiera que esto fuera verdad…- Me estaba dejando llevar por ese cálido abrazo que Shaka me daba, extrañaba eso… Los extrañaba a todos… Pero… ¿Por qué no podía quedarme?

-Maestro-

-¡¡¡MAESTRO MU!!!-

-¡¡¡¿QUÉ TIENE?!!! ¡¡¡¿QUÉ LE PASA?!!!-

-¿Quién me llama?- En mis oídos resonaba una voz infantil, que me distraía de mis pensamientos.

-Sabes que no puedes abandonarlo- La voz de mi buen amigo, sabía que no era solo eso, me sonrió.

-No puedo… No debo…- Volví a cerrar mis ojos, despidiéndome de ese lugar.

De a poco sentí como mi cuerpo es movido con un poco de fuerza.

Siento unas pequeñas manos en mis muñecas, y unas cálidas lágrimas cayeron sobre mi cara.

-Maestro… Por favor… Despierte- Está llorando…

-Abra sus ojos… Por favor…- Su sollozó, me trae de nuevo a una realidad… a una donde no podía irme aun.

Me moví un poco, mi cabeza pesaba, abriendo mis ojos con suma pesadez.

-¿Ki… Ki? ¿Qué tienes?- Le pregunte, como si lo que le pasara n tuviera que ver conmigo.

-¡¡¡MAESTRO!!!- Su rostro en lágrimas, yo no entendía, hasta que revisé mis muñecas, mi pequeño las sostenía con fuerza, pero sentía muy húmedo y parte de mi ropa igual.

Levante levemente la cabeza, mirando que esa humedad, es por que sangraba.

No tuve cuidado en reparar las armaduras, y por mi culpa, mis muñecas dejaban escapar el líquido rojo.

Por esa razón me había desmayado, estaba perdiendo mucha sangre y yo no me di cuenta.

-Kiki, está bien… Yo… Ahora me recuperare…- Le sonreí, pero me pregunto qué tan mal me veía, para que llorara más.

No soltaba mis muñecas, usaba presión para que no brotara más, sus pequeñas manos estando cubiertas de mi sangre.

Debía curarme… Solo debo hacerlo.

Moviendo una de mis manos, sobre la herida abierta, pude lograr que dejara de sangrar, pero me sentía tan débil…

Aunque logre que se detuviera, no podía levantarme del suelo, incluso sentía que cerraba mis ojos de nuevo.

-¡¡¡NO MAESTRO!!! ¡¡¡NO SE DUERME DE NUEVO!!!- Kiki, sostenía mi rostro, perdía la fuerza de mi cabeza para mantenerla en alto.

-Está bien… Solo necesito descansar un poco- Le dedique una sonrisa tan forzada como pude.

Está preocupado, enfoque todas mis fuerzas para ponerme de pie y demostrarle que está todo bien.

Mi cosmos me ayudara, no me siento capaz de usar mi fuerza física, eso muy débil.

-Kiki… Iré a descansar en mi habitación… No te preocupes- Le acaricia su cabeza, no quería que siguiera llorando.

Se aferró a mí, con cuidado… Abrazándome…

-Maestro… ¿Puedo ir? No quiero que me deje solo…- Está asustado, verme de esa manera… Debió ser demasiado para él.

Asentí, aun siendo un pequeño de cinco años, quiso ayudarme, que me apoyara en él, no lo podía hacer… Pero eje que pensara que me ayudo a sostenerme.

El hecho de pensar, que muy posiblemente lo deje… Ver como se puso… Me hace sentir mucha pena…

Suspire… Y subimos… Después de ese punto creo que caí dormido por unas horas o días… Pero no recuerdo bien…

Solo sé que… Kiki no se apartó de mí ni un instante…

Quisiera que la vida fuera así, que no tuviera que alejarme de mi pequeño, pero las cosas no pueden ser así.

Lo sé perfectamente bien.

Lo viví antes.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar? Yo estoy super feliz, aunque este capitulo me saco lagrimas... Neta... Me dolió... Mu, casi te nos mueres... Y Kiki sintió que podría perderlo.

No, no, no, no... Enserio... Me dolió tanto...

Es que... Pensar que esto pudo haber pasado, que unos minutos mas... Y... ¿Podría pasar? No se... Pero me lo imagine y dije... Alooooo... Que crudo.

Pero bueno... Es que no se... No se que decirles... O mas bien escribirles, mejor dejo que ustedes me den sus opiniones, por que... Este cap, me dejo sin palabras... Ooooh.

Vamos a poner la pregunta del día de hoy.

¿Como se sintieron con el capitulo? Creo que es la pregunta, por que a mi me dejo sin palabras... La verdad... Dolio... Eso, Dolor... Me hizo sentir eso.

Espero sus respuestas, comentarios y reclamos.

Bueno mis terrones de azúcar, esos son todos los hermosos comentarios que me han dejado.

En verdad los agradezco tanto, son los mejores, cada día veo que la familia terrón crece y me pingo tan contenta de que seamos tantos, siempre he querido lograr llegar a tantos terrones, y me alegra poder hacerlo. Y mas con diversión, yaoi, lectura y mis locuras, el año que viene seguiré con mis loqueras, dependiendo del tiempo que tengan.

Pero cruzaremos ese puente cuando tengamos que hacerlo.

Me tengo que despedir terrones, nos vemos mañana sin falta en el siguiente fic.

Por favor disfruten mucho este capitulo.

Cuídense, pórtense bien, acaten las medidas de seguridad, no se confíen de mas y sigan sus sueños. Los quiero.

Ammu se va. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).