Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Lunas de nieve por Silence Tsepesh de Lenfet

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

No hay suficiente trabajo en el hospital para mantenerme tan ocupado como quisiera. No estoy tan nervioso como ese día que Ash me llamo e hice caso a Eddie sobre no buscarlo y darle su tiempo. Ha pasado una semana y no hay señales de Ash. Tengo que recordarme que antes de esto tampoco lo veía por el hospital.  De no ser por Donelly creo que ya hubiera perdido la cabeza. Es tan diferente a lo pensaba de él, en una buena manera. Estoy descubriendo muchas cosas que no sabía que quería o necesitaba ¿quién imaginaba que cocinar junto con alguien era tan divertido? O que venga por mi cuando termino mi turno para ir a casa con un helado o alguna bebida con mucho hielo, paraguas porque lloverá…

— estas sonriendo.

— si— Tay recoge mis expedientes ya terminados.

— así que si estas saliendo con ese chico.

— sí.

— me alegro por ti. Te vez realmente feliz y no como una máquina que seguía una rutina con una sonrisa todo el tiempo.

— yo no hacía eso— me quejo.

— como sea, deberías traerlo contigo la próxima vez que salgamos— no estoy tan seguro de que Donnie sea la clase de persona que va a divertirse a un bar, ya he visto la clase de lugares que prefiere.

— se lo preguntare— terminamos de ordenar los expedientes de las últimas consultas y los dos vamos a registrar nuestro fin de turno. No puedo evitar voltear al piso de salud mental aunque hoy es sábado y solo hay personal de psiquiatría de guardia los fines de semana. Supongo que seguiré esperando. Ya no es tan malo, al menos no sigo pensando que es como el fin del mundo porque nuestra existencia se descubrió, el video no está en Internet ni salió en las noticias y básicamente el mundo sigue igual. Ahora lo único que siento es culpa por pensar que Ash sería capaz de hacer algo así y que los demás decidirían expulsarme por mi descuido.

— Tarik— un codazo me regresa a la realidad.

— ¿Qué?

— ¿ese no es tu novio?— que bien se escucha esa palabra. No me cuesta nada encontrar a Donnie, como si supiera en donde esta exactamente. Me hace una seña, y yo levanto las cejas, no por el gesto sino por la motocicleta en la que esta reclinado. No la tenía esta mañana que nos despedimos.

— lo es. Nos vemos mañana, Tay— camino hasta llegar a él— ¿esto es tuyo?

— mi nuevo bebé— sonrió, intentando no hacer un comentario. Sé que tenía una motocicleta antes de que no—muriera pero no sé qué le paso después ¿Kalila la vendió? ¿La perdieron? Donnie me pasa un casco, una monstruosidad color negro y muy pesado— vamos.

— eh… espera… vamos como ¿los dos?

— si ¿regresaras caminando o qué?— él ya tiene otro casco en sus manos— ya había pensado en conseguirme una pero puedo traerte y venir por ti cuando no este de turno. Puedes tener más tiempo para tus cosas… ¿no te gusta?

— no es que no me guste— la motocicleta es muy cool, en color negro y detalles plateados— un auto es más seguro… el sesenta por cierto de los accidentes automovilísticos están relacionados con motocicletas, y hay treinta y cinco veces más probabilidades de que sea un accidente mortal. Y nunca he subido a una— intento no sonar tan nervioso como me siento, sé que no lo logro cuando escucho su risa— no es divertido, Donnie. Los accidentes son algo serio.

— sí, sí. Tarik, eres un hombre lobo. Si te caes de la moto solo tendrás unos moretones. Por lo demás, intentare no ir muy rápido.

— i… ¿intentaras?

—Si no quieres subir no puedo obligarte. En serio, no te sientas obligado a venir solo porque estoy aquí.

— ¿estás intentando manipularme con psicología inversa o algo así?— se ríe. Miro la motocicleta, supongo que Donnie tiene algo de razón con lo que soy un poco más resistente que un humano.

— si sabes conducirla ¿verdad?

— ¿piensas que la traje empujando hasta aquí?— podría ser. Suspiro y me pongo el casco. Es muy incómodo ¿Cómo pueden usar esto? no me deja ver bien, no escucho bien ni puedo oler otra cosa que no sea el plástico. Donnie sube, escucho el motor encendiendo.

— sigo sin creer que solo dos ruedas sean seguras— apoyo mi mano en su hombro para subir…— ah. Creo que descubrí tu plan secreto al conseguirte una de estas.

— ¿Qué?— me rio y pongo mis manos en el único que lugar que puedo para no caerme: alrededor de su cuerpo. Le siento reír y escucho su voz muy amortiguada.   

— de haberlo pensado antes…— contengo la respiración cuando levanta el pie y solo mantenemos el equilibrio en las dos ruedas. Me aferro más a Donnie cuando nos movemos, avanzando por la calle. Es una buena señal que no hayamos caído al piso ya ¿cierto? me rio, respirando bien por primera vez desde que me subí sin duda liberando los nervios aunque Donnie no está conduciendo rápido.  Me sorprende llegar a casa, apenas estaba disfrutando el viaje— ¿Qué te parece?    

— nada mal. Esto no fue de mi agrado— levanto el casco— pero lo demás no fue malo como había pensado.

— me alegra escuchar eso porque así puedo seguir llevándote a donde quieras— le paso el casco para buscar mis llaves— ¿sabes? en realidad estoy algo inquieto.

— ¿por la comida del domingo?

— sí— no es la primera a la que va, solo que los hermanos de Rowan vienen este domingo y pasaran unos días aquí. También Mariam accedió a venir aunque no creo que ella sea la causa de que él este inquieto— Leyre dijo que quería venir. Aun no dice si vendrá o no.

—  creía que ella te agradaba— sería raro que fuera invitada a algo tan familiar como esa comida pero no es algo malo o fuera de— los humanos también irán así que será algo normal aunque no queramos. Y ya te dije que Rehan y Rusher saben comportarse aquí.

— es difícil quitarse años de prejuicios contra ellos ¿sabes?— me rio, dejando mis cosas. Estos días aparecen muchas cosas de Donnie por aquí pero lejos de molestarme me parece algo normal, como si siempre hubieran estado allí y ese fuera su lugar. Hemos decidido hacer la relación oficial anunciándolo a los demás en la comida del domingo, mañana ¿eso es lo que lo tiene nervioso? no lo parecía cuando le dije que podíamos hacerlo— ¿Tarik? ¿Estás cansado? Tuviste un turno largo— solo fueron veinticuatro horas

— un poco.

—pediré comida. Nada de cocinar hoy.

— bien. Voy a bañarme y ponerme algo más cómodo— siento que estoy sonriendo como tonto mientras tomo mis cosas para ir al baño— en serio estoy volviéndome flojo por tu culpa— murmuro, no sé si me escucha y no tengo intención de que lo haga porque solo es mi costumbre de hablar solo— es tan cómodo tener a alguien aquí. Otra vez, no me di cuenta de que me sentía solo hasta que tuve a alguien en casa. Que irónico— pero supongo que así es como funciona ¿Cómo saberlo si no experimentas lo contrario?  

El olor a comida llena la sala cuando regreso, cierro los ojos e intento adivinar qué es lo que pidió.

— ¿terminaste?    

— no hay carne ¿pediste comida vegetariana?

— a Murray, Killian la trajo hace un momento.

— oh, no pude verlo.

— lo ves diario, dale un respiro— hago una mueca. Busco en la cocina los platos para comer.

— también te veo a ti diario ¿debería darte un respiro?

— ¿Qué? no. con tus turnos en el hospital apenas puedo verte por las noches, y eso si no cubres el turno nocturno, tampoco me dejas ir a comer diario. Luego esta mi turno de trabajo— me rio otra vez, suena como un niño quejándose porque no lo dejan jugar más tiempo en el parque. Le doy unas palmaditas en la cabeza.

—ya, ya. Iré a visitarte a tu trabajo.

— acepto— me siento en la sala, en el piso junto a Donnie. Me gustaba ver televisión cuando regresaba y comía viendo alguna película o un reality show pero ahora lo estoy disfrutando mucho con su compañía. Sé que a él no le gusta mucho la televisión, no estoy seguro de si es porque le recuerda mucho los años perdidos o siempre fue así. Supongo que ver televisión era difícil si viajaban en casas rodantes.

— Donnie ¿alguna vez pensaste en buscar a tu familia otra vez?

— no… me pregunto seguido por donde estarán o que estarán haciendo. Alguna vez me pregunto si siguen vivos pero me niego a pensar que no siguen por allí. Si sabes que buscarlos es una misión muy difícil ¿verdad?— claro que lo sé, podrían estar en cualquier lugar— yo me fui, renuncie a ellos y ahora esta es mi familia entonces no quiero buscarlos, si alguna vez vienen por aquí entonces… supongo que estaré feliz de mostrarles todo lo que tengo ahora— sé que fue algo que ya pregunto a los otros cuando volvió.   

— eso es muy lindo. Espero de todo corazón que te encuentren alguna vez.

— ¿quieres conocer a mi familia?— ah, no había pensado eso, claro que si se encuentran entonces vendrían aquí. Me encojo de hombros.

— ¿Por qué no? no tienes nada contra ellos ni ellos contra ti— solo siento su mano en mi cabello. Suspiro, relajándome. El clima sigue siendo cálido y aún quedan meses para el invierno. Es tan fácil acostumbrarse a este tipo de vida tranquila— Hey ¿quieres quedarte esta noche? me pregunto qué es lo que los otros piensan que haces cuando no estás en la casa ¿sospechan que estás viéndote con alguien?

— no lo sé, nadie me preguntado y se toman en serio lo de dar privacidad a los demás, más que otros que conozco. Lo que es más sorprendente es que Kalila no se haya enterado. Supongo que Rowan y Eddie sospechan que tenemos algo— aprieto los labios para no decirle que Eddie ya lo sabe y muy posiblemente si se lo dijo a Rowan. No tengo intención de seguir ocultándonos ni buscar escusas para vernos. Me reclino en su pierna, suspirando— por cierto, me quedo. No podre relajarme si me quedo allá.

— bueno, se me ocurren algunas cosas para distraerte.

— Umm ¿Cómo qué?— su mano me acaricia la cabeza, bajando por mi cuello con lentitud.

— Juegos de mesa— respondo, su mano de detiene— por supuesto que sexo ¿a qué otra cosa me referiría?— resoplo, saltando de mi lugar al sofá y después a sus piernas. sus manos me sujetan por la espalda baja, muy cerca de mi trasero.

— ah, qué alivio. Por un terrible momento pensé que jugaríamos monopolio— mis risas se detienen cuando me besa. El beso pronto se vuelve rudo, una lucha de lenguas, dientes y mordidas marcando territorio. Me separo para respirar y sacarme de un movimiento la camisa, apenas la lanzo ya tengo la boca de Donnie sobre mi piel, dejando marcas con fuerza suficiente para que duren algunas horas— lo siento ¿duele?— toco con mis dedos la ultima mordida en mi piel.

— me gusta…— le beso, jalando su ropa. Sus manos se alzan, dejándome libre para exponer su piel. Le muerdo también, pasando mi lengua por la marca en su piel— Donnie…— gimo cuando mueve su cadera, frotando su pierna en mi entrepierna cada vez mas despierta. Él jadea, sus ojos brillando como lunas. Su mano me acaricia la mejilla y me inclino hacia el toque, disfrutándolo con los ojos cerrados.

— ¿Cómo quieres hacerlo hoy?— ladeo la cabeza, pasando mi lengua entre sus dedos y luego mordiendo con cuidado.

— quiero hacértelo. 

— todo tuyo, cariño— resoplo con diversión, pasando mis manos por su cuello y acariciándole el cabello— ¿continuamos aquí?

— a la cama— otro beso, algo rápido, y me encuentro de pie tan rápido y con tanta brusquedad que cuando Donelly se inclina y me hace caer sobre su espalda apenas estoy procesando que está cargándome como hacen los rescates en los incendios.

— Wow… admito que esto es menos sexy de lo que había imaginado— Donelly se ríe. Sus pasos son rápidos al dirigirse a la habitación y cuando llegamos me arroja a la cama. Me giro rápidamente para poder apreciarlo venir a mí. Estiro mi pie para apoyarlo en su pecho y detenerlo— fuera pantalón— jadeo divertido cuando en lugar de quitar su pantalón jala el mío, dejándome desnudo en la cama. Se levanta, saliendo de la cama y cuando noto que se esta tomando más tiempo para desvestirse me doy cuenta de que solo quiere fastidiarme.

— ¿te gusta lo que ves?— resoplo, pero no lo niego ¿Cómo hacerlo? salgo de la cama, alcanzándolo y atrapándolo contra la puerta.

— ¿no dijiste que eras todo mío?

— adelante— resoplo, riendo y besándole el cuello, dejando ,mas marcas. Hago que gire, y continuo con las marcas en su espalda. él solo se deja guiar por mí, su cuerpo siguiendo mis movimientos. Bajo mis dedos por el centro de su espalda, que se arquea y le escucho un gruñido.

— ¿estas distraído ahora?— susurro en su oreja, besándole.

— podrías estar haciendo un mejor trabajo— su cuerpo se inclina contra el mío para frotarse, sus manos apoyadas en la puerta. El mueble queda más cerca, solo estiro la mano y tanteo hasta encontrar lo que busco. Su gemido al sentir el frio del lubricante me hace querer apresurar todo— siempre… eres tan… lento…

— te gusta lento— muevo mis dedos dentro de él y ya no hay mas palabras: solo los gemidos y gruñidos de los dos. Me tomo un tiempo, aunque no demasiado porque no es así como quiero que termine, ya tendremos toda la noche para hacer más cosas. Retiro mis dedos, presionando más mi cuerpo contra el suyo, encuentro su mirada, esperando por lo que sigue. empujo despacio, entrando poco a poco a pesar de que él se mueve también en un intento de apresurarlo. Los dos gemimos cuando estoy completamente dentro de él, me contengo para no moverme, para no terminar ya…. hasta que Donelly mueve la cadera, empujando contra mí.

 — no te contengas, no me haces daño— su voz entrecortada por el placer es demasiado sexy. Me muerdo el labio, aunque sé que no le hare daño también sé que no podré contenerme. Donelly sigue moviéndose, y finalmente me rindo, dejo que el placer tome el control y me muevo, empujando contra él, llegando tan profundo como puedo, buscando ese lugar que le hace gemir más alto… otra serie de balbuceos sin sentido y los sonidos del sexo en la habitación… me inclino contra él, mi pecho en su espalda, mi mano entre sus piernas para llegar a su erección. Le hago sisear cuando la acaricio con los dedos hasta que la sujeto y comienzo a masturbarle. Sus movimientos pierden el ritmo, sometido completamente a mí… su expresión de placer… mi orgasmo me sorprende, me deja la mente en blanco y completamente saciado.

Donelly se mueve, empujándome un poco. Le suelto, dándome cuenta de que también termino. Nuestras miradas se encuentran y es él quien me atrae esta vez, besándome con fiereza, mordiéndome… nos hago ir a la cama, por el momento no creo ser capaz de sostenernos de pie. Le acaricio y le beso, disfrutando del bajón después del orgasmo.  Y por suerte, aún faltan muchas horas para seguir distrayéndonos.       

 

 

Ha estado nublado desde esta mañana, es muy agradable porque no parece que vaya a llover y el olor a bosque es intenso. Donelly sigue refunfuñando a mi lado porque no nos quedamos en la casa tonteando más tiempo, o durmiendo ya que según él nos dormimos cerca de las cuatro de la mañana. Yo no me di cuenta.

— Aww, yo quiero ver a los demás, si no quieres venir puedes regresarte. Nadie te obliga a venir— otro gruñido que me hace reír— puedo solo llegar y decirles a todos que estamos saliendo y que no quisiste venir.

— ¿en serio? espera… esa es mi camisa.

— ¿oh? no me había dado cuenta— ahora es él quien se ríe. Claro, es imposible que no me diera cuenta que no es mi ropa. Cuando llegamos a la calle de la casa, nos encontramos con Mariam. La vi poco antes de que se fuera, tan insegura y nerviosa de estar rodeada de desconocidos. Ha ganado algo de peso y su rostro no se ve agotado— Hola, Mariam. Me alegra que vinieras, he tenido poco tiempo para pasarme por tu casa estos días. Ah, Killian estará feliz de verte ¿ha ido a visitarte últimamente?

— sí, llevo a Nell hace unos días.

— ¿sigues trabajando en el restaurant?

 — sí.

— ¿y no has tenido problemas? ¿No has visto a tus… otros compañeros?— Siento la presencia de Donnie a mi lado, su hombro junto al mío antes de que sujete mi mano. Mariam nos mira, lo que la hace dudar un momento antes de responder.

— no, no es su estilo regresar a un lugar donde hubo conflicto. Pienso que se mantendrá alejado de aquí— eso espero. Caminamos a la casa,  el auto que usan los hermanos de Rowan ya está aquí. Mariam y yo seguimos hablando sobre su trabajo y sobre Nell.  Aun no parece del todo cómoda con estar aquí pero ya estoy muy sorprendido de que haya venido. Nos somos los últimos en llegar, y la atención de todos los que están aquí se centra en Mariam. Saludo a Gabriela y Fabien.

— vaya ¿ustedes dos?— parpadeo, sin saber que decir ¿Cómo es que Lon supo? Nosotros íbamos a decirlo… ah, las manos, seguimos tomados de la mano— ¿desde cuándo?  ¿Cómo es que apenas me entero? Donelly bastardo, si te atreves a hacerle daño a Tarik no terminaras bien— me rio cuando Lon me aparta de Donnie como si fuera alguna clase de criminal— si te molesta dímelo.

— idiota— murmura Donnie.

— no necesito que me defiendas. Puedo arreglármelas.

— aun así, eres como mi hermano forastero. Llegamos casi al mismo tiempo a esta manada.

— ¿Por qué hay tanto escándalo?— la voz de Kalila viene de nuestras espaldas.

— Donelly quiere tener a Tarik para él solo.

— estamos saliendo— intervengo antes de hacer más grande esto. O esa era mi intención, Kalila le da un golpe en la espalda, no muy suave por lo que pude ver.

— ¿en qué demonios piensas? Si Tarik se va de aquí por tu culpa nunca voy a perdonarte, me pondré de su lado si terminan mal y votare para expulsarte a ti.

— ¡¿Por qué todos asumen que yo voy a hacer algo mal!? Tarik, deja de reírte y explícales— ah, mi estómago. Esto es tan divertido. Me aparto de Lon, quien también está riendo. Donnie me mira mal ¿en serio piensa que Kalila haría eso? es obvio que solo están riéndose de él.

— basta, no hicimos nada malo— me suelto y vuelvo a ponerme a su lado. No hay más escandalo ni alboroto, al menos no más que el normal por ser un día en el que nos reunimos: las risas por las bromas, las seis o siete pláticas diferentes, Rowan quejándose de sus hermanos mientras ellos se siguen burlando, la música, los gritos emocionados de Nell al recibir juguetes nuevos, el olor de la comida… aún faltan semanas para la luna llena que a mi parecer seria lo único que haría perfecto este día. Esta atardeciendo cuando Donnie se sienta a mi lado, la emoción del día se está acabando.

— ellos no me agradan mucho.

— ¿Quién?

— los imbéciles hermanos de Rowan. Ese no para de decir que va a llevarte con él.

— ah, Rehan. Me ha invitado a su manada, admito que la invitación es buena porque su manada si tiene hospital pero llegue primero aquí y estoy feliz viviendo con todos. No iré con él así que no dejes que te moleste.

— ¿que no me moleste?— resopla, claramente molesto.

— Donnie ¿quieres mudarte a mi casa? posiblemente es algo rápido, pero si quieres hacerlo… o si lo prefieres, no tiene que ser mi casa— dios, estoy nervioso ¿en que estaba pensando para proponer esto de pronto?— sabes, paso algo gracioso cuando Rowan y Eddie aun no vivían juntos, Eddie no se dio cuenta de que Rowan prácticamente se había mudado a su casa y pasaba todo el tiempo libre allí ¿fueron dos semanas? No lo recuerdo pero fue gracioso que fuera el último en notarlo. Todos lo sabíamos.

— eso suena a algo que haría Rowan. Está bien, quiero mudarme contigo.

— ¿sí?

— tú lo propusiste— lo hice. No puedo evitar sonreír— me gusta tu casa, no creo que tengamos que buscar otro lugar si no quieres— no quiero, me gusta mi casa ¿Por qué viviría en un lugar que no me gusta? Puedo mudarme si quiero pero es difícil encontrar un lugar tan agradable.

Somos de los últimos en irnos. Los hermanos de Rowan siguen aquí, pero es suficiente para mi… y para Donelly. Se siente extraño este regreso a casa, que no es el primero pero si el primero teniéndolo como el nuevo habitante de la casa. Eso me hace extremadamente feliz porque significa que ya no regreso a una casa vacía.

— traeré mis cosas mañana,  no tengo muchas aún.

— bien. Te conseguiré un juego de llaves, sé que no lo necesitas pero terminaras en la cárcel si alguien te ve forzando la puerta para entrar. Ya vuelvo— creo que aun necesitamos algunas cosas para ambos, en especial cosas para aseo. Me tardo unos momentos en el baño pero cuando salgo lo escucho hablando ¿una llamada?

— Umm… voy a mudarme aquí… es decir, viviré aquí a partir de hoy y espero que no les moleste— sus ojos encuentran los míos, solo un momento porque todo se pone borroso— ¿Tarik? Hey ¿Qué pasa? ¿estás bien? ¿te duele algo?

— no… ¿Cómo…? ¿Qué estabas…?— la voz apenas me sale,  me aclaro la garganta pero la mezcla de emociones no me deja hablar. No me había dado cuenta de que me había descubierto hablando con mi familia. 

— hablas con tu familia cuando estas solo… lo hice sin pensar, no lo hare otra vez si te molesta— está nervioso. No corro, pero me siento moverme rápido para abrazarlo. Me tomo mi tiempo sintiendo su calidez y me relajo con su olor.

— ¿Cómo podría molestarme con algo como eso? es… gracias— cualquier duda que pudiera tener sobre si es buena idea salir con Donnie se acaba de ir. Ahora mismo siento que cualquier cosa que me preocupa no es importante, si estoy con mi familia, con Donnie, todo está en orden.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).