El sol estaba algo fuerte a la tarde, claro era más o menos medio día y estaba en lo más alto, además de todo un buen pirata debe de resistir a los cambios climáticos así también como a todo peligro que se le venga en frente, por lo que el sol fuerte en mi cara no era la gran cosa, comparado con lo que Kunimitsu y toda la tripulación había vivido. Si quería ser un pirata tenía que enfrentarme a todo aquello y no temer ante nada, cosa a la que ya estaba más que listo para enfrentar pase lo que pase, no importa quién o que se me ponga adelante.
-Syusuke…- dijo Tezuka sacándome de mis pensamientos- Si quieres pertenecer a esta tripulación debes conocerla primero, no te pongas a mirar al mar- me dijo dándome un pequeño coscorrón.
-Lo siento- dije mirando a las tablas en el piso.
-No pasa nada, solo no te distraigas de nuevo- dijo mas tranquilamente-Escucha bien, esta tripulación se divide en tres grupos, los Sanguinarios, los estrategas y los tramposos…Los sanguinarios son los que van a los lugares sumamente peligrosos y acaban con todo, son los que tienen una remera blanca con un chaleco amarillo, a ellos los manda Yukimura Seiichi, el primer demonio, es el de pelo azul y que mira igual que tu, después esta el que se tapa la cabeza, el es Sanada Genichirou, el segundo demonio, apodado de cariño “El emperador”, el tercer demonio de ese grupo es Renji Yanagi, es el de ojos cerrados y brazos cruzados, el resto son Kirihara Akaya, el diablo menor, Nioh Masaharu “El estafador”, Marui Bunta, el pelirrojo que esta mascando tabaco, Kuwahara Jackal el que es medio brasileño, Hiroshi Yagyuu “El caballero”, es el de lentes.
-¿Ellos matan?- pregunte algo nervioso y con un poco de miedo.
-Sí, pero solo si sus vidas corren peligro, si no es así ellos no lo hacen- me tranquilizo- Después esta el grupo de los tramposos, los que visten de camisa blanca con un chaleco marrón sin mangas, tu hermano ya es parte de ese grupo, El líder, con quien anda tu hermano mucho, se llama Akasawa Yoshirou, es bueno a pesar de todo lo que se diga en su contra, después esta Mizuki Hajime, el que juega con su pelo, le siguen Shinya Yanagisawa y Kisarazu Atsushi, los dos que andan muy pegados, los últimos, pero no menos importantes, Kaneda Ichirou y Nomura Takuya, son los dos novatos y claro tu hermano menor Fuji Yuuta ya es todo uno de ellos.
-¿Cómo hacen ellos para robar?- pregunte intrigado
-Ellos, hablan con los encargados del banco, un grupo de ellos distrae y el otro se ocupa de entrar a robar, muchas veces se dividen en tres, un grupo distrae, el otro grupo saca claves y llaves y el tercero roba.
-¿El otro grupo cómo es?- pregunte curiosa viéndole sonreír.
-Bueno, los estrategas, mi grupo, somos los que toman muchas precauciones antes de actuar, no llegamos a asesinar y no nos gusta hacer amistad con nuestras víctimas de robos, nos vestimos de camisa blanca y chaleco azul o a veces solo de camisa blanca, Yo soy el líder Tezuka Kunimitsu, después esta mi co-líder Oishi Syuichirou, Kikumaru Eiji es el que está a su lado, son los dos de allá abajo son el Golden pair, después en el grupo están el ardiente Kawamura Takashi, le sigue nuestro “Rey de los datos” Inui Sadaharu, el de lentes que no dejan ver sus ojos, le sigue Kaoru Kaidoh “Serpiente” es el que está al lado de Inui, Momoshiro Takeshi es el que está al lado del más pequeño, le dicen “Momo” y después esta Echizen Ryoma, nuestro mejor pirata, después de mi claro, es el más pequeño y joven de toda la tripulación, pero que no te engañe su apariencia.
-Me uno a tu grupo- dije rápidamente.
-Me agrada que digas eso- sonrió- Bueno ahora ven te presentare a todos.
-Muy bien.
-Todos vengan aquí- dijo subiendo un poco el tono de voz, todos los que deambulaban fueron a donde hasta donde estábamos- buenos días a todos.
-Bueno días- dijeron todos al ponerse en frente a Tezuka.
Dos chicos se pusieron junto a Tezuka, uno de ellos estaba con mi hermano y lo llevo junto a mí- Tezuka por favor- dijo el chico algo orgulloso en su tono de vos.
-Hoy se unirán a la tripulación los dos polisones, se llaman Fuji Syusuke y Fuji Yuuta, como es tradición en este barco, los líderes de los grupos a los que se unirán les elegirán apodos acordes a lo que ellos nos han demostrado- Dijo Tezuka mirando al frente como si fuera el general de una brigada.
-Yuuta, tu quieres quedarte con los St Rudolph así que te nombro como el asesino zurdo de Yuuta Fuji- dijo el chico de cabellos castaños dándole a mi hermano una palmada en la espalda.
-Syusuke, me has demostrado que eres muy ingenioso e inteligente, así que como decidiste quedarte en el Seigaku yo como capitán del grupo te nombro como El Tensai Syusuke Fuji- dijo Kunimitsu poniendo una de sus manos en mi hombro en sentido de confianza.
-Muchas gracias, prometo que no te arrepentirás- dije sonriendo un poco apenado por tener que decirlo en público.
-Ya pueden volver a lo que hacían- dijo relajándose un poco Tezuka, terminando la reunión así como la empezó- Akasawa, Yukimura, hay que llevarlos para que vean las habitaciones.
-Hay un ligero problema- dijo el chico con una vos muy suave- con la ultima integración, el sector de camas se lleno por completo, no hay cama alguna.
-Eso es verdad, hace rato cuando le mostraba el barco a Yuuta note eso- dijo el otro muchacho.
-En ese casi abra que buscarles un lugar donde dormir- comenzó a pensar Tezuka.
-Si no les molesta, muy gustoso Yuuta puede dormir conmigo, mi cama es para dos personas.
-Bien entonces hasta que consigamos dos camas mas en el siguiente pueblo Yuuta duerme con Akasawa y Syusuke conmigo ¿no les molesta dormir separados?-pregunto Tezuka.
-No- respondimos mi hermano y yo a la vez.
-Queda todo arreglado en ese caso, me voy con los míos- dijo el de la voz muy suave comenzó a caminar hacia donde estaban los suyos.
-Nos vemos después para armar el próximo asalto Yukimura- lo despidieron los otros dos.
-Syusuke ven, te mostrare todo para que te asientes un poco más, luego te daré una espada para que comiences a practicar con ella.
-Lo que tu digas- dije alegrándome, iba a comenzar a ser un pirata de verdad, comenzaría a vivir aventuras, como en mis libros, nada en ese momento me podía hacer más feliz.
El barco era sumamente inmenso, tenia cámaras para todo, habitaciones y hasta cosas que uno no espera que tengan, cada parte del barco tenía un objetivo y uso, la sala de los capitanes era inmensa y estaba llena de planos, de bancos, mansiones y hasta oficinas de gobierno. Las primeras habitaciones que vi eran de a dos, había dos camas en cada una, dos mesas de luz, un baño y sobre todo un lugar que parecía una caja, donde ponían ropa. Las segundas que vi tenían una sola cama, dos mesas de luz, una gran espacio para poner la ropa, el baño y lo que más sobresalía de ellas era las grandes ventanas que estaban arriba de las camas, solo eran tres habitaciones así.
La habitación de Tezuka era enorme, aun mas que la de los capitanes, la cama parecía la de un rey, en la mesa de luz de la derecha decantaba una taza de té con algunas galletas en la otra un reloj de arena junto con mas planos, en la pared estaba la gran imagen de un hombre, lo mire detenidamente y pregunte- ¿Quién es?
-Mi padre- me respondió- el era un gran pirata, él es uno de los pocos hombres con la capacidad de poder generar vida.
-¿Qué le paso?
-A él…vive en casa de mi abuelo, en tu pueblo, junto con Don…durante su juventud él era un gran pirata hasta que su padre un día lo agarro y en vez de llevarlo a la policía lo obligo a casarse con Don- dijo poniendo sus brazos en la espalda- mi padre dice que jamás hizo el amor con él, que él le da muchos gracias al cielo por haberme tenido sin necesitar del otro hombre.
-Interesante- dije viendo asombrado.
-Me padre me ha contado muchas historias, de las cuales todas creo menos una- sonrió viendo más detenidamente la gran imagen- según él tuvo un romance perfecto con un hombre…no me acuerdo su nombre, la cosa es que él lo amaba mucho y estaban listos para escapar cuando los padres del otro los separaron para siempre, mi padre juro volver por él, pero mi abuelo no solo no lo dejo, sino que lo caso con Don.
-¿Por qué no lo crees?- pregunte un poco curioso, esa historia era muy parecida a la de mi padre.
-Porque mi abuelo dice que mi padre es una oveja descarriada y que nunca logro domar, además, Don y mi abuelo condicen en que mi padre nunca fue sociable y que por sobre todo peleaba mucho con otros niños, mi abuelo me dijo que lo caso con Don para que no causara mas pleitos y peleas, ni siguiera deshonrando a la familia entera- dijo mirando algo melancólico la imagen- se de sus aventuras de pirata por que el me enseño todo lo que se, este barco era de él y de los padres de Yukimura y Yoshirou y él me lo entrego a mí, al igual que los tesoros que recaudo antes de ser casado con Don.
Mire la imagen muy detenidamente, me parecía irreal que alguien con la apariencia de ese hombre allá sido pirata y vivido tales aventuras, pero su hijo era igual, el se había escapado de su casa para vivir los sueños de su padre, ser libre de casarse con quien él quisiera y lo más importante, el hacer su vida como quería, sin tener que temer por deshonrar a su familia ni nada, ser el mismo y vivir sus propias experiencias sin temor al fracaso, evolucionar por sí mismo y no ser la marioneta de sus padres.
El almuerzo es cuando a la mayoría le ruge el estomago o las tripas, y eso es cuando a los pelirrojos más un grupo de otros tantos más jóvenes les da hambre. El almuerzo es proporcionado ni más ni menos que de la naturaleza, dijo mi hermano al ver que comeríamos pescado y mas pescado, acompañado por algunas cosas que había en la despensa, como lechugas, jitomates, cebollas, huevos que habían hecho hervir y como bebida mucho agua, que estaba en la despensa guardada.
Me senté junto a Tezuka por miedo a que los demás miembros de la tripulación me hicieran algún daño, había muchos que parecían amigables, pero la apariencias engañan a veces.
-Hola, nya- me dijo un chico pelirrojo de ojos azules- me llamo Eiji nya.
-Hola- le respondí al saludo muy tímidamente- mucho gusto.
-El gusto es mío, ¿vienes de una familia rica? nya-
-Si, algo- dije llevando una mano a la espalda.
-Me dicen Neko, nya, ¿puedo decirte Fujiko?
-Sí, claro ¿Por qué no?
-Me alegro de que te nos unas a nosotros, Fujiko.
-Lo mismo dijo.
-Eiji- dijo el chico ojos verdes y cabello negro a su lado- perdona si te molesta.
-No para nada- dije sonriendo más abiertamente- Tu debes ser Oishi verdad.
-Sí, mucho gusto, Fuji, ¿verdad?
-Sí, así me apellido.
-Oishi, Inui, Kawamura, Momo, Kaidoh y Echizen los necesitaré después para algo muy importante- dijo Tezuka recordando mi primer entrenamiento que tenía que afrontar para ser un pirata.
Llegada la tarde, más o menos cuando el sol estaba a un cuarto de distancia para ocultarse, Tezuka me dio una espada que tenia y luego me dio algunas indicaciones de cómo debía utilizarla, primero con lentitud me fue haciendo pequeñas posiciones, mientras yo le imitaba, luego él con lentitud se enfrento a mí, movía su espada muy lentamente mientras me decía como debía responder a los ataques y en qué momento atacar, cosa que no tarde mucho en aprender. Finalmente tenía que enfrentarme con algunos de los chicos, para protegernos de los ataque de espadas nos poníamos dos grandes almohadones en el pecho y un casco hecho de varias tablas de madera para proteger la cabeza.
Mi primer oponente fue el chico con una pañoleta en la cabeza, se llamaba Kaoru Kaidoh, el que llamaban serpiente. Era realmente bueno y tenía una gran habilidad, era muy “elástico” por decirlo simplemente, su mayor habilidad era poder estirar cuanto quisiera su brazo derecho para golpear con una “golpe de serpiente” un golpe que es muy fuerte, pero después de algunos momentos de aprieto logre vencerlo.
Las practicas con la espada eran cada vez más intensas y se volvieron todo un reto con el pasar de las horas, hasta que al fin anocheció, la noche era muy diferente al día, Tezuka se encerró con Yukimura y Akasawa en la sala de capitanes, mientras el resto hacia lo que les parecía mejor.
Me puse a mirar las olas pasar, el agua estaba muy calma y solo la suave luz de la luna nos iluminaba la noche, era magnifico el paisaje, salvo por que estaba en un barco pirata que se mecía de un lado a otro y se movía hacia el oeste, en dirección a la siguiente cuidad a asaltar.
-Es muy hermoso, no aniki- me dijo Yuuta parándose a mi lado.
-Sí, ¿Qué tal tu grupo?
-Ya aprendía a estafar, estafe al chico de allá, se llama Kirihara- dijo señalándome al chico con una cara de amargado- no fue fácil, pero lo engañe y gane cincuenta monedas de oro, mañana a la tarde me toca el entrenamientos de tiro.
Continuara
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