EL DIOS DEL CAOS por AICEN

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Notas del capitulo:
Vamos con el segundo capitulo, ¿que?.

¿Alguien tiene ya una idea de que personaje va a ser el dios Caos?.

Es un pequeño juego por si quereis participar, yo en cada capitulo voy dando una pista.

En el primero: CAOS se disfraza de SOLDADO.

En el segundo: MANEJA UNA ESPADA

Caos abrumado por la belleza de ese joven de cabellos de ébano, quiso acercarse a él, desesperado sin saber el motivo necesito oír la voz de ese muchacho, sentir en sus manos el tacto de aquella suave piel pálida, y que aquellos ojos amatistas le mirasen.

Supo que a pesar de su apariencia de soldado, no podía fingir que estaba herido, pues en aquella zona de la isla, solo se trataban a los niños, y aunque aquel joven le tratara en un principio, no tardarían en trasladarlo a la zona correspondiente a los soldados heridos, y Caos no quería solo unos minutos con ese muchacho, quería sin comprender todavía el porqué, la eternidad a su lado.

Pero como bien le había dicho Zeus, no podía decir su verdadera identidad hasta el último momento, ¿Qué hacer entonces?...

La respuesta, como caída del cielo, le vino cuando sintió como alguien daba un tirón en uno de los camales del pantalón que llevaba puesto. Al bajar la mirada, se encontró a la criaturita más inocente que hubiese visto, una pequeña niña.

Con una cabellera plateada recogida en dos desordenadas trenzas, aquella niña de ojos azules no debía de tener más de cinco años, vestía algo que parecía más un saco que un vestido, le habían atado los bajos en dos nudos, y supuso que aquella tela le vendría demasiado larga a aquella pequeña, sus bracitos finos y blanquecinos, llevaban rastros d polvo, barro y los restos de lo que antaño fuese una venda, y en su carita redonda no quedaba ni un solo hueco que no estuviese manchado.

-señor- dijo la pequeña.

Cuando oyó esa dulce vocecita, tuvo un impulso que llevo a cabo, se agacho un poco y rodeo a la pequeña, en unos segundos, la cargaba en sus brazos.

-que te pasa chiquilla?- pregunto el dios enternecido al ver los ojos enrojecidos de ese angelito y los restos de las lagrimas aun en sus mejillas.

-mami- dijo la pequeña.

-¿te has perdido angelito?.

La niña respondió con un pequeño asentimiento de cabeza y el claro signo de que en pocos instantes volvería a derramar lagrimas.

-¿no encuentras a tu mama?-volvió a preguntar el dios.

La niña, que comenzaba a derramar lágrimas hizo un gesto de negación.

-¿la buscamos juntos?.

Y después de abrir los ojos como platos, la niña le regalo al dios del caos, la más bella de las sonrisas.

-muy bien, vamos allá¡- dijo alegre el dios.

Y entonces tuvo la idea, tenía a un angelito perdido en sus brazos, y justo delante al más hermoso ser que hubiese visto, había que empezar a buscar por algún sitio a la madre de esa pequeña, ¿Por qué no preguntarle al ese muchacho que le tenía cautivado?

Así que poniendo bien a la pequeña, se encamino hacia la cabaña donde aquel joven seguía curando el tobillo fracturado de otro niño, y conforme se iba acercando, un suave aroma a vainilla y romero llego hasta él.

Ahora que lo tenía a pocos centímetros lo supo el dios del caos ya tenía dueño, y era un joven muchacho humano al que si se lo permitían, amaría toda la eternidad.

-disculpa- dijo el dios.

-¡Sinie!- dijo el muchacho al voltearse.

-o Sinie, me tenias tan preocupado, mi niña, no te vuelvas a escapar.

Comprendió entonces el dios, que Sinie era la pequeña que estaba entre sus brazos, y que aquel muchacho, era el encargado de cuidarla.

-mami- dijo la niña llorando de nuevo.

Y su belleza, su muchacho, cerró los ojos un segundo y lanzo un amargo suspiro, y sin saber muy bien como llego a esa conclusión, el dios del caos comprendió algo en un segundo, la madre de aquella niña que llevaba en brazos, ya no estaba en este mundo.

-la encontré a unos metros de aquí- dijo el dios.

-disculpe las molestias señor, se nos escapa a menudo, y por lo que veo, se ha vuelto a arrancar las vendas- dijo el muchacho.

-no es molestia joven.

-Minios señor, mi nombre es Minios.

-un honor muchacho, ¿necesitas ayuda con este angelito?- pregunto el dios.

-no quiero abusar de su tiempo señor, veo que es un soldado ¿está herido, necesita ayuda?- dijo Minios.

-tranquilo, no estoy herido, y para mi, ayudarte con este angelito será lo mejor del día.

-EPOCA ACTUAL-

-Caos es un ser destructivo y sin escrúpulos que solo conoce el mal- comenzó Hades el relato.

-un dios oscuro cuyos poderes han sido forjados y perfeccionados en un lugar mucho peor que el infierno. No conoce la piedad, ataca a niños, ancianos, mujeres indiscriminadamente.

-su espada lleva la sangre de muchas almas en su filo y en sus ojos solo hay muerte y destrucción.

-todo lo que hace, lo hace por odio, el más puro y poderoso odio. Al mundo, a los hombres, a los dioses el busca la destrucción completa- prosiguió el dios del inframundo- y no me refiero a arrasar con todo a su paso, sino a su arma más mortífera el “Zinsery”.

-¿Zinsery?- pregunto Shion cortando el relato.

-en nuestro idioma lo llamamos “la nada” (1).

-¿Qué es?- pregunto nuevamente el patriarca.

-sabes lo que son los agujeros negros verdad?, imagínate el poder de millones de ellos juntos, añádele una misteriosa nube negra que avanza sin descanso y deja un vacío tras de sí, eso es el Zinsery.

-y cuando digo vacio- prosiguió hades- no me refiero a un espacio devastado, con ruinas o tierra baldía, no, es como si ante ti, todo hubiese desaparecido, la tierra, el cielo, el agua, y en su lugar solo queda una oscuridad infinita y eterna en la que nada ni nadie puede sobrevivir.

-increíble- dijo Shion.

-no amigo mío- dijo Hades- el Zinsery puede ser muchas cosas, pero increíble no es una de ellas.

-debéis tener en cuenta una cosa, tanto el Zinsery como Caos, son personajes malvados y oscuros, en al pasado, cuando eran los auténticos dioses y no sus reencarnaciones los que habitaban, muy, muy tarde se dieron cuenta de una cosa.

-¿Cuál mi señor?- dijo Aiacos.

-solamente hay una manera de pararlos- intervino entonces Poseidón- da igual cuantos dioses, caballeros, guerreros o soldados juntemos, da igual si juntamos ataques, si formamos un ataque único, nada que nosotros hagamos pueden pararlo.

-solo existe una manera, solo una.

-¿Cuál mi señor?- pregunto Isaak.

-un ataque al que muy adecuadamente llamaron “Sacrificio”, la oscuridad vencida por la luz.

-el odio- dijo Saori- vencido con amor.

-y la vida de alguien a cambio de todo, del mundo, de la humanidad, de los dioses, de todo.

-pues, a la persona que invoque el “Sacrificio”, no se la puede resucitar- hablo la diosa.

-¿Por qué?-pregunto Aioros.

-si resucitas a quien venció al mal, este mal, resucitara también.

-pero habéis dicho que nosotros no podríamos hacer nada- dijo Ikki- si ese dios volviese, solo habría que aprender ese ataque ¿no?.

Se hizo un silencio sepulcral entre los dioses, algunos de los caballeros le habían puesto algo más de leña a una fogata casi extinta por el paso del tiempo. Debido al relato, se habían ido formando pequeños grupos alrededor del fuego, y como si presintiesen que el estar contando aquella historia tenía un significado en concreto, los treinta y seis hombres supieron algo, el tiempo de paz, acabaría pronto.

-caballero del Fénix- dijo Hades- solo ha habido una pelea contra Caos, las consecuencias fueron nefastas desde luego, costo años vencerle, muchas vidas inocentes se perdieron y el mundo, tal y como lo conocemos cambio.

-la última decisión que tomaron los dioses unánimemente- dijo Odín- fue cruel y sabia al tiempo.

-cruel porque dejaron el destino del mundo en manos de un hombre, ya que la decisión fue la de que solo única y exclusivamente esa persona manejaría el poder del sacrificio.

-nunca nadie- prosiguió el dios- podría volver a manejar o aprender ese ataque.

-¿y entonces?- pregunto Mu- ¿Por qué también fue la más sabia?.

-porque eligieron al único ser capaz de parar a Caos.

-¿Minios?- pregunto el caballero de Aries.

Un movimiento afirmativo fue la única respuesta del dios vikingo.

-Maestro- pregunto Hagen a su dios- ¿Quién es Minios, un guerrero?.

-no mi pequeño, ojala lo hubiese sido.

-quizás así- dijo Saori- no hubiese sufrido tanto.

-¿a qué os réferis princesa?- pregunto Hagen dirigiéndose a la reencarnación de Atenea.

-¿Quién era realmente Minios mi señora?- pregunto Shura.

Y tras un instante en que la diosa cerró los ojos, dio un largo suspiro y una lágrima comenzase a recorrer su mejilla, dio la respuesta a una pregunta, que dejaría a treinta y seis hombres en completo silencio.

-Minios…

-Minios era el esposo del dios del caos y la destrucción.

Notas finales:
(1) la idea de "LA NADA" la he cogido prestada sin permiso de la pelicula LA HISTORIA INTERMINABLE lo siento por el mini pequeñito plagio pero la necesitaba para la historia, no me riñan.

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