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Los errores que cometemos…
¿Cómo podemos enmendarlos?
Siempre pensé que con un lo siento sería suficiente…
Ahora descubro que no es así…no siempre
En nuestro egoísmo somos capaces de dañar a las personas que más amamos, porque nos dejamos llevar, porque no tenemos la fuerza suficiente para pensar dos veces en lo que vamos a hacer…
Porque el dolor nos ciega y terminamos perdiendo el control de nuestras acciones…
Y entonces viene el arrepentimiento, el deseo de volver atrás y cambiar todo…
¿Pero qué sentido tiene perder tiempo en ello?
No importa lo que hagamos, no importa cuanto lo deseemos, no importa cuantas lagrimas derramemos por ello…jamás podremos volver
He estado buscando una forma de enmendar el daño, pero no la encuentro
Solo quiero verte sonreír y ni siquiera soy capaz de hacerlo yo…
Quiero que permanezcas al lado de aquella persona que te hará feliz y tengo miedo…
Tengo miedo de ser yo esa persona y haber arruinado todo para siempre…
Pero tengo aún más miedo de no ser yo y descubrirlo ahora…
Podré repetir mil veces un “lo siento” y no será suficiente…
Podré desear cien, mil veces volver atrás, pero no es posible…
Y ni siquiera tengo el valor para mirarte a la cara…
¿Qué hago?
Estos sentimientos…
¿Dónde los guardo?
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-¿De verdad pasó todo eso?-
Asentí sin mirar a Evan, se notaba que intentaba ser cuidadoso con el tema
Llevaba una semana encerrado en mi habitación, y solo hoy había dejado entrar a Evan y a Benjamín
Sabía que mamá estaba preocupado, que papá estaba preocupado, incluso Derek, que me traía la comida todos los días e intentaba convencerme para que le abriera la puerta
Pero no quería nada…
Y tenía miedo de preguntar por mi hermano
-No sé que hacer- sollocé abrazándome a mí mismo
-Honey, primero tienes que estar seguro de lo que sientes, no puedes pedirle una nueva oportunidad a Erick si sientes algo por Varick o por Blake-
Mordí mi labio inferior con fuerza
¿Qué demonios me pasaba con ellos?
Varick era malditamente interesante, todo aquello prohibido estaba representado en él, y sentía que por más que intentara dejar de verle, no tendría sentido
Pero…
¿Tenía alguna esperanza con él?
No la había, estaba seguro de ello, pero la atracción era horrible
Aparte de que la diferencia de edad sobre nosotros era algo abismal
Tenía que olvidarme de ello…
¿Podría conseguirlo?
Pero Blake…
Un solo día, unas pocas palabras y había conseguido llegar tan alto
Tenía miedo…
Tenía mucho miedo de que aquellos sentimientos eventualmente pudiesen crecer
¿Qué haría entonces?
Su sola sonrisa conseguía desestabilizarme
Un día…y todo se había ido al demonio
-No lo sé- confesé finalmente
Benjamín se acercó a mí
-No importa cuanto tiempo te tome, debes descubrirlo, y en el proceso pedirle perdón a tu hermano por el daño, es todo lo que puedes hacer de momento, estoy seguro que eres consciente que pedirle una nueva oportunidad ahora, cuando no estás seguro de nada, sería destruir cualquier posibilidad con él-
Asentí encontrándole toda la razón
-Y mucho menos puedes seguir aquí encerrado sweetie-
-Tengo miedo de salir- susurré
-¿Por qué?-
Miré a mis primos con vergüenza
-No quiero ver a Erick y notar la indiferencia en su rostro- acepté
Evan suspiró y tomo mis brazos jalándome para levantarme
-No importa que tan grande sea el error que cometiste, reconocerlo habla bien de ti-
Parpadeé procesando sus palabras
¿Realmente era Evan quien me hablaba?
-¡No me mires así!- se quejó haciendo un puchero
Sonreí levemente
-Ese es mi Mat, debes volver a sonreír- Benjamín revolvió mi cabello
-¡Ahora ve a darte una ducha!- exclamó el de ojos celestes empujándome al baño
Me demoré más de lo acostumbrado en algo tan normal como bañarse, el miedo hacía que mordiera mi labio y no fuera capaz de cerrar la llave del agua
-¡Sal ya Matthew!- gritó el de ojos oscuros
Suspiré profundamente
Debía ser valiente, tenía que serlo…
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-¿Quién es?-
Palidecí al escuchar la voz de mi hermano del otro lado de la puerta
-Soy Matt- respondí sintiendo como me costaba horrores decir aquello
Mis primos se habían preocupado de encontrarme una ropa que no evidenciara mi delgadez producto de aquel encierro e incluso Evan me había obligado a usar perfume
-Entra- sentenció Erick con una voz horriblemente helada
Cerré los ojos con fuerza y entré a su habitación
Realmente fue triste verle sentado frente a la ventana leyendo, pensaba en las veces que me había quedado dormido en su regazo, observando a través de aquel enorme ventanal
Y ahora la realidad frente a mis ojos me golpeó en el rostro
-Veo que saliste de tu habitación- comentó mi hermano con tono neutro
Asentí
-Tenía que hacerlo algún día ¿no?-
Erick le dio la vuelta a una página despreocupadamente, todavía no me había visto, al parecer incluso se negaba a mirarme
-¿A qué viniste?-
Empuñe mis manos con fuerza, intentando recordar las palabras que había repetido tantas veces en mi cabeza
-Sé que con un lo siento no será suficiente, pero de cualquier forma lo diré, lo siento…lo siento mucho, lamento haber roto esa promesa con tanta facilidad-
-Si sabes que no será suficiente, ¿Por qué lo dices?-
Por primera vez me miró y me sentí aún peor, porque me miraba con tristeza
Y todo era mi culpa
Sonreí levemente
-No importa si lo digo o no ¿verdad?, arruiné todo, pero no quiero que pienses que no te quiero, porque no es cierto, de momento, será lo mejor permanecer de esta forma, porque no quiero pedirte una nueva oportunidad hasta estar seguro de que te merezco, de que podré hacer que confíes nuevamente en mí- susurré
Mi hermano se puso de pie y se acercó a mí
-¿Eres consciente de lo que dices? Dejar todo de esta forma… ¿Qué pasa si me enamoro de alguien más?-
Aparté mi mirada para que no me viera llorar
-Entonces seré feliz, porque habrás encontrado la felicidad- respondí obligándome a sonar seguro
-Mat, el amor no se trata de merecer a la otra persona-
-Incluso aunque lo pensara de esa forma, no hay manera en la que estemos juntos ahora sin hacernos daño, no quiero verte sufrir, por eso voy a dejar este amor por un tiempo, mientras consigo la seguridad que necesito para no volver a cometer el mismo error-
-“Dejar este amor”…el amor no es una mascota-
-Lo sé, por eso, si encuentras a alguien que te haga feliz en este tiempo, seré la primera persona en pararme frente a ti con una sonrisa-
Dolía, dolía horrores decir aquellas palabras
Pero como le había confesado a mis primos, no estaba seguro de nada
No podía ser tan cruel con Erick
No podía ser tan masoquista y desear hacerme daño de esta forma, y mucho menos desear dañar a mi hermano
-¿Estás seguro de lo que dices?-
No…
No lo estoy…
No quiero perderte, pero si ese es el precio a pagar por mis actos voy a aceptarlo
De la misma forma que terminé aceptando que no eres mi hermano de sangre, de la misma forma que acepté mi amor por ti
-Sí-
Él suspiró y tomó mi rostro
Cerré mis ojos para que no me viera llorar, pero las lágrimas cayeron de igual forma
-Lamento haberme comportando así, incluso si no cumpliste la promesa de ser fiel, no fue escusa para mi comportamiento, Derek consiguió que lo entendiera-
Sin saber por qué, sonreí con amargura
-Él es realmente bello, ¿sabías?- susurré conteniendo mis sollozos
-Matt…-
-Incluso si se tratara de él, ¿Cómo podría yo intentar evitar un amor que pudo haberse desarrollado durante tantos años?-
-No te hagas esto- me pidió acariciando mi mejilla
Negué suavemente
-Aunque duele, si estoy seguro de algo es que esta es la decisión correcta y eso consigue…ayudarme un poco…no importa cuanto tiempo pase, no importa quienes lleguen a mi vida, voy a guardar este amor donde nadie puede alcanzarlo y en el futuro, si no volvemos a estar juntos, lo recordaré con una sonrisa…porque pese a las dificultades, fue muy…hermoso- terminé alejándome violentamente
-Matt-
Negué con fuerza y salí corriendo
Necesitaba escapar
Necesitaba ir a un lugar donde pudiese llorar sin tener que recibir miradas de lástima
-¡Matt!-
Corrí lo más fuerte que pude, chocando con personas cuyos rostros no pude identificar debido a las lágrimas en mis ojos
Cuando dejé de escuchar los llamados de Erick miré hacia atrás, intentando averiguar si venía detrás de mí
-¡Hey!-
De pronto choqué contra alguien de frente
-¡Lo siento!- me disculpé llevando una mano a mi boca, intentando ahogar mis sollozos
-¿Matt?-
Esa voz…
Alcé mi vista y con bastante esfuerzo reconocí a Blake
-¿Por qué estás llorando?-
Cerré mis ojos con fuerza, pero el dolor en mi pecho era demasiado intenso y no parecía querer disminuir
-Sácame de aquí- rogué
-¿Pero qué…?-
-Por favor- supliqué mirándole fijamente
-Bien, ven conmigo-
Tomó mi mano y me condujo hasta su motocicleta
No pregunté a dónde íbamos, solo dejé que me pusiera el casco y me aferré a su cintura
Hermano…
Había podido verlo…
Ni siquiera él mismo lo había notado aún…
Pero Derek…
Sacudí mi cabeza intentando alejar aquellos pensamientos y de paso mis lágrimas
Pasaron varios minutos, pensé que me llevaría hasta la plata nuevamente, pero no habíamos abandonado la ciudad, y finalmente se detuvo frente a un edificio abandonado
-¿Qué es esto?- pregunté observando el lugar
Era un edificio muy grande, pero por alguna razón había un aviso de demolición en sus puertas, probablemente hace unos años, vivir en él debió ser todo un lujo
-La casa de mis padres-
Miré atónito a Blake
-¿Tus padres?- repetí
Él no comentó nada más, se sacó un colgante del cuello que resultó ser una llave y abrió la puerta lateral con facilidad
Mi mente no dejaba de pensar en lo que había dicho, ¿Eso podía significar que la familia de Blake era millonaria?
Pero su abuela…
Subimos por la escalera de emergencias los cuatro pisos de la mansión, Blake abrió una puerta lateral al final del pasillo y resultó ser el camino a la azotea
-Vaya- fue todo lo que conseguí decir al sentir la brisa contra mi rostro
La ubicación de aquella mansión hacía que la vista fuese realmente hermosa
-Es un lugar realmente tranquilo- comentó el castaño como si nada sentándose en el borde
Me paré cerca de él sin atreverme a hacer lo mismo
-¿No quieres sentarte?-
-No es eso- susurré sin querer mirar por el borde
Blake se puso de pie
-¿Qué es entonces?-
Sonreí nervioso
-Me dan miedo las alturas- confesé
Su hermoso rostro se contrajo en una expresión de desconcierto
-¿Confías en mí?- cuestionó de pronto
Nos miramos fijamente hasta que asentí sin saber por qué
-Toma mi mano-
Extendió su mano derecha hacia mí, dude un poco al principio pero no parecía haber algo que temer por lo que acepté su ayuda
-Ven-
Avanzó hasta el borde tirando levemente de mi mano
Cerré los ojos con fuerza intentando no pensar en donde me encontraba
-Tienes que abrir los ojos- susurró abrazándome por la espalda sorpresivamente
Negué rápidamente
-¿No que confiabas en mí?-
Tragué duro y abrí los ojos, estaba parado en el borde de la azotea de una mansión de cinco pisos
-Esto es…-
No tenía palabras para describir como se sentía, pero Blake no pareció necesitarlo
-Hay lugares mucho más altos, por lo que si este te da miedo…-
Sonreí
-¿La próxima vez me llevaras a la azotea de centro comercial?-
-Ojalá no hubiera una próxima vez-
Me giré algo asustado
-¿Por qué dices eso?-
Blake acarició mi mejilla con su mano libre, pues aún no soltaba su agarre de mi mano
-Cada vez que te veo, estás huyendo de algo, si es por eso me gustaría que no hubiese una próxima ocasión-
-No es…nada importante- mentí descaradamente
-¿Debo suponer entonces que lloras por cosas sin importancia?-
No me atreví a mirarle y mantuve mi vista fija en los enormes edificios de la ciudad
-Mi…novio y yo terminamos- confesé sintiendo como el dolor regresaba
-Un corazón roto- susurró Blake a mi lado
-Tomar decisiones, por muy convencido que estés de que es lo correcto duele mucho- murmuré alzando mi cabeza para evitar llorar
-Hay ocasiones en que no tenemos más opción que seguir por un camino, sin saber a dónde nos llevará, sin saber si pudimos habernos quedado atrás-
-¿Eso no se asemeja más a mirar a tu alrededor y descubrir que estás encerrado en una jaula?-
El castaño ladeó su cabeza
-¿Te sientes atrapado en una?-
-No lo sé-
Había demasiadas cosas que no sabía
-No importa el qué, el destino finalmente se encargará de solucionar todo- sentenció con seguridad
Sonreí con amargura
-Se suponía que sería feliz con él ¿sabes?, todo lo que me costó aceptar este amor…y yo mismo me encargué de arruinarlo-
-Las relaciones son de dos personas-
Mordí mi labio inferior con fuerza
-Eso no me hará sentir mejor-
-¿Por qué tendría que hacerte sentir mejor? Solo te muestro la realidad, en el momento en que decidieron estar juntos, toda la responsabilidad se dividió en dos-
Negué lentamente
-Yo le mentí-
Blake tomó mi rostro entre sus manos
-Para que alguien mienta, es necesario que alguien más crea esa mentira, no seas tan duro contigo, las cosas pasan por algo-
Pensé en mi hermano y en la expresión en sus ojos al pronunciar el nombre de Derek…
¿Realmente no lo había notado?
No…
No había querido verlo…
¿Pero era yo la persona que debía hacérselo ver?
El dolor en mi pecho me indicaba que no, al menos por ahora, no tenía la fuerza suficiente como para hacer eso
“Tal vez porque sería alejar definitivamente a tu hermano de ti”
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-¿Dónde está Varick?-
Uno de los sujetos que trabajaba para Varick salió a mi encuentro bajando las enormes escaleras de la mansión
-El señor se encuentra ocupado en una reunión, por lo tanto no puede verle- sentenció con neutralidad
Alcé una ceja
-No me importa lo que esté haciendo, tengo que hablar con él- repliqué con dureza
Avancé hasta donde se encontraba el sujeto, alguien como él no iba a impedirme pasar
-Me temo que no puedo dejarle pasar-
Sonreí con superioridad
-¿No puedes? Si no te haces a un lado te juro por el mismo Varick que no descansaré en paz hasta encontrar a tu hermanita menor y encargarme de que pague por tu insolencia- siseé mirándole fijamente a los ojos
El sujeto tragó duro y se hizo a un lado, agradecí a mi suerte el haber acertado con lo de la hermana y avancé rápidamente hacia el segundo piso
Sabía que el de ojos verdes estaría en el salón de reuniones, pero me importaba un carajo de lo que pudiese estar hablando
Había dos sujetos más frente a las puertas del salón y se acercaron a mí después de mirarse desconcertados
-Anuncia mi presencia- le ordené al más alto
Él observó a su compañero, quien solo se encogió de hombros
-Dije que anunciaras mi presencia- repetí con voz helada
Finalmente pareció hacerme caso porque avanzó hasta la habitación y después de golpear levemente la puerta, ingresó
-El señor Evan está aquí- anunció manteniendo su mirada en el suelo
-¿Evan?...deja que pase-
-Sí, señor-
El sujeto se giró a mirarme y sonreí mientras ingresaba al lugar
A pesar del lucir un tanto parecido al lugar de “reuniones” del tío de Amanda, sin duda al menos este espacio tenía algo de luz, y claro está, la presencia de Varick
-¿A qué has venido Evan?-
Varick estaba sentado a la cabeza de la mesa, un par de hombres vestidos elegantemente habían dejado de prestarle atención a unos documentos para mirarme
-Tengo que discutir contigo ciertos asuntos…familiares- respondí con naturalidad pero intentando transmitirle la urgencia de mis palabras
-Señores, si me disculpan un par de minutos-
El de cabello oscuro se levantó y me indicó que le siguiera a la habitación contigua
Una vez en ella cerró la puerta y me miró fijamente
-Espero que sea algo bueno, mis inversionistas no pueden arriesgarse a ser…descubiertos a la luz del día en mi casa-
-No me pueden interesar menos un par de sujetos a los que fácilmente manipulas- repliqué con sinceridad
-Bien, tienes razón, pero eso no despeja mis dudas, ¿A qué has venido?-
Intenté recordar las palabras que había ensayado en mi casa
-Bien…Benjamín y yo…tuvimos un encuentro cercano con cierto enemigo tuyo- comencé lentamente
-¿Enemigo mío?-
Asentí lentamente
-Digamos que la curiosidad me llevó a su…lugar de reuniones-
Varick pareció prestarme mucha más atención al escuchar aquello
-No sé su nombre, pero estoy seguro que es tu principal contrincante-
-¿Alto? ¿Pelirrojo? ¿Ojos oscuros?- me lo describió brevemente el mayor
-Yes, y no solo eso…nos ofreció lo que deseáramos a cambio de…traicionarte-
El de ojos verdes sonrió
-¿Debo entender que, al venir a decírmelo, has negado su oferta?-
Sonreí
-Parece que tienes buena comprensión auditiva-
Él sonrió, incluso parecía un poco más relajado
-Es una excelente posibilidad, podrían fingir que aceptan su oferta y entregarme información-
Mordí mi labio inferior lentamente
-No creo que eso sea posible- repliqué suavemente
-¿Y eso por qué?-
Suspiré profundamente
-Mi hermano está de su lado, y sabe perfectamente que no voy a traicionarte, incluso aunque fingiera hacerlo, él podría delatarme-
Varick se cruzó de brazos
-¿Crees que lo haría?-
-Con tal de alejarme de todo este asunto podría hacerlo- admití
-Así que finalmente te enteraste de que está intentando salvarte-
Fingí no sorprenderme con esas palabras
-¿A qué te refieres?-
-Bueno, es obvio que si trabaja de su lado, habrá puesto como condición que tú estés a salvo de cualquier ataque, pero…-
-…en el preciso instante en que él traicione a los suyos yo estoy muerto- completé entendiendo perfectamente
-Así es, es muy inteligente, una lástima que se haya quedado con Rafael-
Así que ese era su nombre…
Pero eso implicaba que Max estaba protegiéndome…no sería suficiente
Yo también tenía que hacerlo, aunque él nunca se enterara
-Bien, en ese caso también pondré una condición- sentencié con seriedad
El mayor me miró fijamente y luego sonrió
-Puedo imaginarme de qué se trata, pero adelante…-
-Voy a jugar de tu lado, haré aquello que me pidas, de hecho, dejaré que me entrenes para volverme un jugador más importante, sé que con lo que hago actualmente tengo que valerme de Blake y esa no es la idea, así que permitiré todo aquello…a cambio de que me jures que mi hermano permanecerá a salvo-
Nos miramos fijamente, obviamente Varick estaba evaluando cuidadosamente mi petición, una parte de mí quería retractarse, no podía evitar pensar en Kevin, y en que sus hijos estábamos repitiendo su pasado
Pero…¿El destino no se había encargado de jugarnos una broma?
Incluso aunque no hubiese sabido que Vin fue un asesino…nada habría cambiado, porque Max y yo seguiríamos metidos en este asunto
Y si lo hubiésemos sabido…¿Me habría alejado de Varick? ¿Habría evitado conocerle?
Probablemente no…
-Puedo decir, que tu petición es bastante…valiente de tu parte, sin embargo aceptaré-
Mi corazón se detuvo levemente al escuchar aquellas palabras
Ya no había marcha atrás
-Te juro por todo lo que soy y todo lo que me importa, que al menos desde este lado, al que desde ahora deberás obedecer, no saldrá lastimado en forma alguna tu gemelo, sin embargo, si él intenta asesinarme, no voy a quedarme de brazos cruzados-
Asentí, era algo bastante razonable
-Desde mañana comenzarás a entrenarte, Diego se encargará de ello-
Lo miré sorprendido
-¿Diego?- repetí algo confundido
Estaba seguro que Diego era el hermano menor de Zes, sabía que ella era de las que trabajan para Varick como algo más que una camarera, pero ¿su hermano?
-Sabes que Blake y Zes son los mejores, pero actualmente no tienen tiempo para entrenarte, luego de ellos Diego sería el más cercano a su nivel, y estoy seguro de que sabrá entrenarte…¿O me equivoco?-
De la nada misma apareció el mismo Diego, quien se inclinó respetuosamente frente a Varick
-No se equivoca- sentenció con neutralidad
-Bien, entonces dejaré a tu cargo a Evan, sabes cuan importante son para mí él y Benjamín así que cuida de él-
Me sorprendió mucho escuchar aquellas palabras de Varick
-Así será-
-Por cierto, ¿Dónde está Benjamín?- preguntó el mayor de los tres mirándome fijamente
Me encogí de hombros
-Supongo que en alguna de sus clases de piano- respondí sabiendo que mentía
Probablemente estaba planeando algo en contra de Daniel, pero eso era algo que Varick no tendría por qué saber
-Siempre tan macabro- sonrió el de ojos verdes antes de salir del salón
Miré la puerta desconcertado
¿Eso significaba que Varick sabía lo que estaba haciendo mi mejor amigo?
-El entrenamiento comenzará mañana-
Me giré hacia Diego
-Jamás pensé que eras un asesino- acepté con cierta burla
Él siempre se mostraba amable, cuando Zes me lo presentó pensé que solo se dedicaba a estudiar o algo así
-Nunca confíes de las apariencias- soltó devolviéndome una sonrisa macabra
Casi retrocedí por aquel cambio tan drástico
-Bueno, habrá que ver que tan bueno eres- repliqué con altivez
Si sonrisa no flaqueó ni por un instante
-No importa la relación que tengas con Varick, tendré contigo la misma consideración que por cualquier sujeto, así que espero que no seas demasiado débil…Evan- sentenció con frialdad antes de marcharse
Me obligué a tranquilizarme, ¿Qué tan malo podía ser haber tomado aquella decisión?
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-¡Levántate!-
Observé el suelo fijamente, había perdido la cuenta de las veces que él me había arrojado contra el piso
-¿Qué estás esperando? ¿Quieres que te levante yo?-
Utilicé la fuerza que me quedaba para ponerme de rodillas, sentía cada minúscula parte de mi cuerpo arder
Finalmente me puse de pie frente a Diego, mientras que yo tenía que hacer grandes esfuerzos para respirar y me sostenía la muñeca derecha con mi otra mano producto del dolor, el muy maldito ni siquiera se había despeinado
-Vamos, tú mismo lo dijiste, ¿Para qué perder tiempo con clases teóricas? Es mucho mejor el proceso práctico- se burló volviendo a desaparecer
Me obligué a normalizar mi respiración, necesitaba aprender a detectar esa clase de presencias o estaría muerto en menos de lo que me demoro en decir “honey”
-Si no eres capaz de verme…-
Me congelé al escucharle detrás de mí y automáticamente me giré, pero no sirvió de nada
-…¿Cómo vas a siquiera intentar golpearme?- finalizó antes de patearme a la altura de la espalda
Caí de rodillas y mordí mi labio inferior intentando no quejarme
-Enséñame a verte entonces- espeté
Diego se inclinó frente a mí sonriendo
-Eso no se enseña, en el momento en que estés desesperado al recibir tantos golpes y no poder ver quien y cómo te los propina, tu cerebro despertará aquella parte que te ayudará a hacerlo…es la única forma, todos hemos pasado por eso-
Tragué duro, ¿A mi hermano lo habían golpeado de estar forma?
-¿Quieres que me detenga?-
Negué rápidamente volviendo a incorporarme
-Como desees- sentenció antes de volver a desaparecer
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-Luces realmente horrible-
Miré a Benjamín desde mi cama y volví a dejar caer mi cabeza sobre mi cómoda almohada
-Ya llevo una semana, ¿Qué esperabas?-
Mi mejor amigo negó suavemente y se sentó en el pequeño sofá junto a mi cama
-¿Tus padres aún no lo notan?-
Bufé
-Diego ha intentado dejarme marcas solo en lugares no visibles, no siempre resulta, pero las demás las cubro con maquillaje-
El castaño se acomodó en el sofá
-¿Estás seguro de esto?-
-Ya no hay marcha atrás, Varick juró no hacerle daño a mi hermano a cambio de que haga esto-
-¿Debería agradecer no tener hermano?- se preguntó
Sonreí
-Maybe…-
-Por otra parte, ¿Has visto a Blake?- preguntó cambiando su expresión de tranquilidad
Negué suavemente, yo también estaba frustrado por no poder verle
-Si lo hubiese hecho te habría avisado, a mi tampoco me agrada para nada que se haya acercado tanto a Matt- sentencié recordando lo que me había contado mi primo
Fingir que no estábamos sorprendidos había sido realmente difícil, ¿Cómo diablos Blake osó acercarse de esa forma a Matt?
-¿Estás celoso?- cuestionó mi amigo
Negué con seguridad
-Es cierto que me acosté con él en varias ocasiones, pero supongo que solo fue por placer…y de paso para no sentirme tan imbécil porque Max me engañaba con cualquiera- respondí
No, no estaba celoso, estaba preocupado
-¿Se te ocurre alguna forma de evitar que se encuentren?-
Cerré los ojos con fuerza
El destino era un hijo de puta, parecíamos estar destinados a caer en aquello que nuestros padres intentaron ocultar
-Dicen que es mejo enemigo conocido que por conocer, a pesar de todo, prefiero que Matt se acerque a Blake o a Varick que al mismo Erick-
-¿Sigues con lo mismo?- me reclamó mi mejor amigo rodando los ojos
-Puede que tú no dudes, pero el mismo hecho de que a “nadie” le haga dudar, me provoca incertidumbre-
Benjamín sonrió
-Parece que tanto golpe te ha puesto paranoico-
-No es la primera vez que me lo dices- me reí
-De cualquier forma, si la felicidad de Mat está con Erick lo sabremos-
Yo tenía mis dudas sobre ello pero estaba realmente cansado como para reclamar
Entrenar todos los días durante cuatro horas era horrible, y todavía no era capaz de ver al maldito de Diego…
-Hijo, ¿puedo pasar?-
Miré sorprendido a Benjamín
-Ayúdame a sentarme- le pedí en voz baja
-Claro Vin- respondí cuando me pude apoyar contra el respaldo de mi cama
Kevin entró sonriendo
-¡Les tengo un regalo a ambos!- exclamó agitando dos boletos en su mano
Alcé una ceja
-¿De qué se trata?-
-Well, son dos entradas dobles para ir al cine, le ofrecí una a tu hermano pero me dijo que estaba ocupado bajando no sé qué juego de no sé qué parte así que tomen-
Acepté el regalo algo confundido
-Gracias pero ¿No piensas ir con papá?-
Vin inmediatamente comenzó a reírse frenéticamente, miré a mi amigo esperando que no se asustara con aquel gesto pero obviamente Benjamín estaba ya acostumbrado
-¡Ajajajajajaja! So funny! No, tu sexy padre y yo nos iremos el fin de semana a un hotel de lujo en la montaña, así que procura no matarte con tu hermano, Bye bye!-
Y tan rápido como había entrado, salió de mi habitación
-Tus padres no pierden la chispa ¿no?-
Me encogí de hombros
-Si Vin fuera como tío Angel, tendría decenas de hermanos, estoy seguro-
Mi amigo se estremeció
-No es mi idea de una tarde entretenida imaginar a tus padres teniendo sexo-
Sonreí divertido
-¿Qué te molesta? No es muy diferente de ti tirando con Aaron-
El castaño entrecerró los ojos
-Creo que poner las palabras Aaron, yo y sexo en la misma oración aún es una maldita broma- se quejó
Lo miré sorprendido por la noticia
-¿Aún no hacen nada?-
-¿Tú qué crees?-
Suspiré profundamente
-Para tratarse de ti van muy lento…¿No fue Aaron lo que siempre quisiste?-
Él asintió
-El que exista una desigualdad tan grande en nuestra relación provoca esto…pero tampoco me voy a lanzar desnudo sobre él-
Estuve a punto de estallar en carcajadas, pero me dolía mucho el estómago así que me obligué a controlarme
-Eso es exactamente lo que yo haría, ¡Es un hombre! ¿Cómo no entiende que tienes necesidades? Y peor aún… ¿El no las tiene? Teniendo a uno de los chicos más codiciados del instituto como novio…se conforma con tomarle la mano y unos cuantos besos…realmente un desperdicio-
Mi amigo sonrió pero se encogió de hombros
-Ya veré lo que hago, creo que utilizaré estas entradas para el cine, ¿A quién piensas invitar?-
Su pregunta me cayó como un balde de agua helada
-¿Seria muy estúpido si invito a Max?-
Benjamín apartó su mirada
Era obvio que hacer algo como eso sería tremendamente estúpido…e ingenuo de mi parte
Pero no iba a rendirme…
-No importa cuantas veces tenga que recibir un “no” como respuesta, seguiré intentándolo- aseguré apretando aquellas entradas con fuerza
-Eres increíble-
Negué lentamente
-No sweetie, solo estoy enamorado patéticamente-
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-¿Max?- llamé a su puerta no muy seguro de si se encontraba en casa
“A lo que has llegado…”
Benjamín ya se había ido y nuestros padres también, era la oportunidad perfecta para hablar con mi hermano sin hacer un escandalo…o al menos para que nuestros padres no se enteraran
-¿Hermano?-
Extendí mi mano para abrir la puerta, pero no fue necesario pues mi gemelo lo hizo y se quedó mirándome fijamente
-¿Qué es lo que quieres?-
Sonreí brillantemente a pesar de que tenía cierto dolor en mi espalda, que según Diego, tardaría varios días en irse
-Vin me dio estas entradas y me preguntaba si…-
-¿Estás bromeando?-
Max se me quedó mirando como si esperara que estallara en risas
Mi sonrisa se borró levemente
-Solo…me gustaría pasar tiempo contigo- aseguré con sinceridad
Él alzó una ceja, parecía comenzar a enfadarse
-Que vivamos en la misma casa no significa que debamos pasar tiempo juntos… ni siquiera que me consideres tu hermano-
Tuve que usar todo mi cinismo para mantener una expresión alegre
-Ignoraré tus palabras, incluso aunque intentes eliminar el título de “hermanos”, nuestro parecido seguirá siendo innegable, así que ¿Por qué no vienes conmigo al cine?-
Observé con cierto temor como apretaba sus puños en sendos puños
-Evan, ¿Por qué crees que me teñí el cabello? ¿Es necesario que deforme mi rostro también? ¿Qué me vaya de esta casa? ¿Qué no vuelva a ver a mi familia? ¿Todo porque no eres capaz de dejar de lado tus estúpidos caprichos?-
-No digas estupideces… ¿Dejar la familia? ¡Solo tienes dieciséis años! ¿Sabes cuanto sufrirían nuestros padres?-
-Exacto, ¿Quieres que eso ocurra? Ninguno lo desea así, por lo tanto, DE-JA-ME EN PAZ-
Retrocedí un paso pero no iba a darme por vencido
-Por favor, no voy a obligarte a hacer nada, solo quiero que pasemos tiempo juntos- supliqué
Max rodó los ojos y tomó mi muñeca arrastrándome dentro de su habitación
-¿Quieres que pasemos tiempo juntos? ¿No será que quieres sexo?-
Tragué duro, realmente, al ver como estaba nuestra relación, ni siquiera yo había pensado en eso
-¿No hay nadie más con quien puedas acostarte?-
Fruncí el ceño
No tenía derecho a sentirme ofendido, pero aun así me enfadaba oírle hablar así de mí
-Puede que haya sido así antes, pero…-
-¿Pero qué?, espera, ¿Vas a decirme que desde la última vez que nos acostamos no lo has hecho con nadie más? ¿Crees que soy tu estúpido príncipe azul? Por favor…no intentes verme la cara de imbécil, lárgate, vete con cualquiera que este dispuesto a acostarse contigo, pero déjame en paz-
-No lo haré, no importa cuanto me lo repitas- espeté herido
Mi hermano sacudió su cabeza y alzó su mano, sin embargo me mantuve parado fingiendo no sentir el dolor que provocaban mis heridas
No iba a ceder
-Me quedaré aquí hasta que me digas que irás conmigo al cine, no importa lo que hagas, la única forma en que podrás evitarlo será matándome-
-¿Todo esto por un estúpido viaje al cine?- exclamó conteniendo su furia
-¿Qué no lo entiendes? No pienso renunciar a ti, no importa lo que hagas-
Nos miramos fijamente, por un instante observé algo parecido a la rendición en su mirada pero de pronto Max avanzó hasta mí y me empujó contra la pared
Me mordí la lengua para no lanzar un grito de dolor, no me había empujado tan fuerte, pero había recibido tantos golpes en mi espalda que era obvio que eso pasaría
-¿Qué pasa? ¿Ahora te quedas callado?-
Cerré mis ojos con fuerza, momento que aprovechó Max para colar su mano bajo mi camisa
-¿No es esto lo que deseas?- susurró contra mi oído
Me estremecí, él no podía verme desnudo, había maquillado las marcas visibles, pero no aquellas que cubría mi ropa
-¡No!- exclamé alejándome y dejando caer las entradas
-¿Ahora te niegas?- sonrió mi gemelo macabramente
-¡Volveré después!- exclamé recogiendo las entradas e intentando huir
Pero de nada sirvió, porque me tomó por la cintura y me arrojó sobre su cama con fuerza
Agradecí que el colchón fuese blando, de no haber sido así probablemente no habría bastado con morder mi labio para contener el dolor
-¿Qué estás escondiéndome?-
Negué rápidamente e intenté escapar pero mi hermano me inmovilizó sobre la cama
Me odié por ser tan débil, porque incluso aunque consiguiera cierta musculatura estaba seguro que no podría compararme con su fuerza
¿De dónde la sacaba él si se suponía que somos gemelos?
-El gran Evan intenta escapar desesperadamente cuando alguien le ofrece sexo, aquí hay algo mal ¿No lo crees?- se burló y alzó mi camisa
Sentí mi cuerpo temblar violentamente
-¿Qué…?-
Max me volteó rápidamente, cerré los ojos, sabía lo que estaba viendo, los golpes que me daba Diego al entrenarme habían dejado horribles marcas moradas sobre mi piel
-¡Déjame!- intenté escapar pero Max no aflojó su agarre sobre mis muñecas
-¿Quién te hizo esto?-
Parpadeé confundido, lucía realmente enfadado
-¡Me caí!- exclamé lo primero que pasó por mi cabeza
-No es una broma Evan, dime quien demonios te hizo esto, no pueden ser las marcas de lo que te hizo Amanda porque esas ya debieron haber sanado- siseó aumentando su agarre
Reprimí un gemido de dolor
-¡No te interesa! ¡Sueltamente!- exclamé intentando huir
No iba a decirle qué era lo que estaba pasando, aún tenía orgullo
-¿Que te suelte? ¡DIME QUIEN TE HIZO ESTO DE UNA VEZ!-
De haber podido retroceder lo hubiese hecho, jamás había visto una mirada tan aterradora en sus ojos
-¿Y para qué quieres saberlo? ¿No que no te importo?-
-¿Fue Varick?-
Palidecí violentamente, no importaba cuanto estuviese intentando proteger a mi hermano, Varick lo había dicho, si intentaba atacarlo él no iba a quedarse de brazos cruzados
-¿Y por qué tendría que ser Varick? ¡Entre él y tú es mucho más probable que tú lo hagas!- no había medido mis palabras y por un instante pude ver el dolor que causó escuchar eso venir de mí
Max me soltó, luciendo desconcertado
-¿Es eso lo que piensas?-
-Yo…-
-Debí suponer que te las hicieron en alguna sesión de sexo salvaje, no que te atacaron, fue realmente imbécil de mi parte-
Aparté mi mirada
-Exactamente, no quería que me vieras por eso- mentí obligándome a sonar seguro de lo que estaba diciendo
-Por un instante consideré hacerte caso e ir a ver esa estúpida película, creo que no debo creer nada que digas, porque todo es una maldita mentira que solo busca manipularme, Amanda tenía razón-
Alcé mi cabeza pero no me atreví a mirarle
¿Amanda le había dicho aquello?
Inconscientemente llevé una mano a mi pecho, había dolido mucho escucharle decir aquello
Pero no tenía otra opción
No la había
No importaba que tanto le quisiera, de mi boca jamás escucharía del trato que hice con Varick
-Pues está bien que de una vez por toda lo entiendas ¿no?- solté con superioridad mientras me levantaba
-¿Tan descarado eres? ¿Hasta ese nivel de hipocresía has llegado? Ni siquiera soy capaz de entenderlo bien, ¿Qué fue aquello que te hizo cambiar de esa forma? A un ser tan despreciable, tan hipócrita…ni siquiera mereces que tenga algún recuerdo tuyo en mi memoria-
Agradecí estar de espaldas, porque no hubiese podido ocultar la expresión de dolor en mi rostro al escucharle hablar así de mí
-Tendré que usar estas entradas con alguien más, bueno, al menos lo intenté ¿no?- sonreí con amargura y salí para que no pudiese verme llorar
En cuanto cerré la puerta de mi habitación me dejé caer al suelo y cubrí mi boca con mi mano para evitar ser oído
No importaban cuantas palabras me dijera, no me iba a rendir…
No importaba cuantas veces repitiera que le encuentra razón a esa mujer…
Incluso si me gritaba cuanto me odia, cuanto me desprecia…
Seguiría resistiendo…
Incluso si todos me gritaban que es algo totalmente inútil y estúpido
Voy a hacer que digas que me amas…
Una vez, solo una vez será suficiente…
---------------------------------------------------End Evan------------------------------------------------
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-------------------------------------------------Benjamín-------------------------------------------
¿El profesor no notaba que llevaba más de media hora hablando sobre uno de sus viajes a Europa?
Que fastidio…
Como si le pagaran por hablar de ello…
Observé a Matt, lucía realmente cansando, ¿Por qué sería?
Suspiré profundamente, con todo lo que le estaba pasando tampoco era muy difícil encontrar una explicación para ello…
A su lado Evan tenía el entrecejo fruncido y se movía cuidadosamente
¿Seguía con eso del entrenamiento?
A este ritmo iba acabar muerto antes de lograrlo…si solo Max supiera lo que estaba haciendo su hermano por él
Ya había pasado una semana desde la fallida invitación al cine y desde ese tiempo Evan parecía haber recibido el doble de golpes
Tal vez su actitud prepotente no le ayudaba en nada con Diego
Y luego estaba yo y Aaron…
A pesar de que él seguía siendo como siempre no podía evitar pensar que estábamos pasando muy poco tiempo juntos
Siempre se justificaba con algo y eso…
Solo podía significar que me estaba ocultando algo
Miré de reojo a mi novio que parecía totalmente distraído, de hecho miraba fijamente por la ventana sin siquiera importarle el profesor frente a nosotros
Aquí había algo y yo iba a descubrirlo…
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-¿Quieres que siga a Aaron?-
-Baja la voz- ordené mirando a nuestro alrededor
No era el mejor lugar para hablar, pero tratándose de Kyle sería aún más estúpido citarle en un espacio cerrado y vacío
-Bien, bien, ¿Quieres que vigile a tu perrito?-
Fruncí el ceño
-No me mires así, es una simple analogía- replicó sonriendo
Rodé los ojos
-Quiero saber que está haciendo-
-¿Y por qué la duda? ¿La hermosa relación parece haberse metido a un oscuro bosque?-
-Solo has lo que te pido- siseé ignorando sus palabras
Pero Kyle tomó mi muñeca y me obligó a mirarle a los ojos
-Nunca confíes en el amor de un hombre Benjamín-
Parpadeé totalmente confundido
-¿De qué hablas? En ese caso tampoco podría confiar en lo que siento por él-
-Si lo hicieras, no me enviarías a seguirle, ¿No lo crees?-
Me solté de su agarre frunciendo el ceño
-No son tus palabras lo que necesito, si tienes razón ya lo veremos- sentencié antes de alejarme
¿De qué carajos estaba hablando Kyle?
Que Aaron ya no pasara tanto tiempo conmigo no implicaba que me estuviera engañando
Además, ¿Con quién podría hacerlo?
¡Me había encargado de alejar a todos de él!
¡A TODOS!
Todo con la maldita esperanza de que recordara, pero no había funcionado y si el estúpido de Kyle tiene razón, significa que tampoco funcionó nuestra relación
-¿Estás seguro de obsequiarme esto?-
Me detuve abruptamente y me escondí tras un árbol, a unos seis metros a mi derecha y sentados en un banco frente a una de las piletas del instituto estaba Aaron con un sonriente Daniel
-Es tu cumpleaños ¿no?-
El enano sostenía un paquete en sus manos y realmente parecía no caber en si de su felicidad
-M-muchas gracias-
-No me lo agradezcas, de verdad quería dártelo, después de todo, quince años no se cumplen todos los días-
Apreté mi mano con fuerza, ni siquiera me detuve al sentir como me enterraba las uñas en la palma
¿Así que por eso había estado tan ocupado Aaron?
-Yo…-
Por favor, ¿Se puso a llorar?
Rodé los ojos, ¿Qué acaso Daniel no tenía nada de orgullo propio?
-No llores, pensaré que no te gustó-
-No es eso, me encantó es realmente bello-
Alcé una ceja, desde mi posición no era fácil ver de qué se trataba, pero cuando el mismo Aaron tomó la gargantilla en sus manos y la abrochó alrededor del cuello de Daniel consiguió despejar cualquier duda
-Entonces me alegra aún más-
Mordí mi labio inferior con fuerza
Tenía dos opciones, la primera, quedarme mirando como ellos seguían observándose con sonrisas en el rostro, la segunda, actuar
Y por supuesto que decidí actuar
Me acerqué a ellos con actitud despistada
-Aaron estaba buscan…dote-
Ambos me miraron como si hubiesen sido descubiertos en un robo, sin embargo sonreí levemente
-¿Cómo estás Daniel?- pregunté educadamente
El menor se llevó una mano a la gargantilla automáticamente
-B-bien gracias- sonrió nervioso
-Me alegra, lamento interrumpir pero vine a robarme a mi novio- remarqué las últimas palabras sin mirar al menor, no iba a ser tan obvio
Aaron lucía algo nervioso, una alerta se encendió en mi cabeza
¿Hace cuanto tiempo se reunía con Daniel y yo no tenía ni idea?
Nos alejamos varios metros de aquel banco
-¿Qué es lo que pasa?-
Estuve a punto de largarme a reír
¿Qué era lo que pasaba?
Y luego decían que yo era el descarado
-Me pregunta…si te gustaría venir a mi casa hoy, Gabriel me enseñó a preparar un platillo…en realidad fue tío Angel, pero sabes como es Gabriel- respondí acercándome a él y rodeando su cuello con mis brazos
Aaron suspiró
-Lo siento, mi familia organizó una cena familiar para mañana- se disculpó
Alcé una ceja pues Evan me había comentado que Kevin había invitado a Lucas y a Gabriel a ir de compras mañana
Lo de la “cena familiar” era una mentira
-¿En serio? Es una lástima, supongo que tendremos que dejarlo para otro día- sonreí levemente alejándome
Mi novio me miró fijamente
-¿Qué te parece el viernes? Estoy seguro que la pasaremos bien-
Sonreí brillantemente
-El viernes será entonces-
Aaron se acercó a mí y me besó levemente
-Nos vemos pronto- se despidió
Solo cuando lo perdí de vista quité esa estúpida máscara de felicidad de mi rostro
Daniel me las iba a pagar…
Rápidamente marqué el número de Kyle
-¿Qué sucede cariño?-
-Mañana Aaron saldrá con Daniel, estoy seguro, así que ve y grábalos y encárgate de conseguir también la evidencia del trabajito que tiene Daniel, esta vez conseguiré que lo expulsen de este instituto-
-Como quieras, pero a cambio quiero un beso tuyo, en la boca, cariño-
Alcé una ceja
-Será como quieras, pero primero tráeme las malditas pruebas- espeté cortando la llamado
Pobre enano, estaba en serios problemas
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-Aquí está todo-
Miré con curiosidad a Kyle, tenía un par de magulladuras en la mejilla derecha
-¿Qué te pasó en el rostro?-
El de ojos azules sonrió
-El lugar donde trabaja nuestro querido Daniel no es seguro en lo absoluto, un grupo de imbéciles quiso asaltarme pero no eran nada del otro mundo-
El castaño me extendió un sobre café por sobre la mesa, habíamos acordado reunirnos en la misma cafetería ya que dentro de todo era un lugar bastante confiable
Abrí el sobre, había muchas fotografías, al parecer mi querido novio había decidido dar un paseo en el parque de atracciones con Daniel…
Y no solo eso…
-¿Se besaron?- jadeé mirando la fotografía
¿Daniel y Aaron se habían besado?
-Lamento tener que confirmártelo pero era de esperarse, según lo que averigüé llevan cerca de un mes saliendo a distintas partes, unas dos veces por semana-
Arrugué aquella hoja en mi mano
No podía creerlo…
No era posible…
No…
¡Solo hace tres días me había reunido con Aaron para cocinarle su maldito platillo favorito!
Alcé mi mirada, Kyle estaba reclinado sobre su asiento
-En ese pendrive está el video de tres presentaciones de Daniel, atrae bastante público- sonrió el mayor
Mordí mi labio inferior con fuerza
-No puedo creerlo- sentencié observando las fotografías
-¿Ni siquiera con las pruebas entre tus manos? Realmente estás enamorado de mi primo ¿no?-
Escondí mi rostro entre mis manos por unos instantes
¿Aaron me estaba engañado?
¡Él no era esa clase de persona!
No lo es…
Pero no iba a ser tan estúpido como para culpar por todo a Daniel
En un engaño, como en las relaciones siempre la culpa es de los dos…
¿Eso significaba que su engaño también era mi culpa?
¿En qué demonios había fallado?
Aaron desconocía lo que yo había estado haciendo…
-Tengo que irme, pero quiero que averigües todo lo que hacen, ambos, en especial Daniel- sentencié devolviendo todo al sobre y poniéndome de pie
-Sabes que tendrá un precio-
Miré con los ojos entrecerrados a Kyle
-¡Hazlo! No me interesa si tengo que acostarme contigo- siseé con rabia
Salí de aquel lugar apretando aquel maldito sobre entre mis manos
¿Cómo diablos habíamos llegado a esto?
En mi vida hubiese imaginado que Aaron me haría algo como eso…
“Eres hermoso…no importa lo que pase, siempre voy a protegerte”
-Si solo recordaras tus propias mentiras- susurré con rabia
Caminé por las calles de la ciudad sin rumbo alguno, intentando procesar lo que estaba pasando y sin conseguirlo
¿Esa era la verdad?
No importaba lo que hiciera, Aaron sencillamente parecía no ser la persona para mí
¿Debería darme por vencido?
Incluso Evan, que tenía un panorama mucho más difícil con su propio hermano gemelo, estaba determinado a luchar
Suspiré profundamente, ¿Llorar?
Aaron y yo seguíamos siendo novios ¿no?
Solo tenía que hacer un último esfuerzo y sacar a la luz la verdad sobre Daniel
Solo un último esfuerzo, y si incluso eso fallaba me alejaría definitivamente
No importaba si la forma en que conseguí momentáneamente lo que siempre quise fue buena o mala, el resultado incluso cambiando de método parecía ser el mismo
-¿Por qué tan triste?-
Felipe me miró fijamente, llevaba un abrigo negro y las manos en el bolsillo, recordándome que hacía bastante frío en la calle
-¿Debería llorar? La persona en la que me convertí…no siento que tenga derecho a ello- susurré bajando mi cabeza
-No importa lo que hagas, no importa cuanto manches tu alma, ni siquiera cuanto intentes dejar de ser un ser humano…naciste como uno y morirás como tal-
Avancé hasta abrazar a Felipe y escondí mi rostro en su pecho
-Sé que no tengo derecho, pero no puedo evitar que duela- reconocí
-¿Y eso es malo?-
Sonreí levemente, era increíble que la persona que había jurado verme destruido estuviese devolviéndome el abrazo
-Lo es si se supone que debo fingir que no sé lo que pasa- respondí finalmente
Felipe me meció levemente entre sus brazos
-No quiero verte llorar, eres un enemigo fuerte, ¿Vas a dejar que este asesino te vea en un estado tan lamentable? No importa lo que haya pasado, no permitas que nadie te vea llorar-
Mordí mi labio inferior y asentí levemente
-Lo haré…pero no me sueltes- supliqué sorprendiéndome
El rubio apoyó su cabeza sobre la mía
-No tenía pensado hacerlo-
-------------------------------------------------End Benjamín------------------------------------------------
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Este amor está rompiéndose en pedazos
Siento que inconscientemente lo hemos destruido
Jamás debí alejar a todos de ti, dejándote en la soledad casi absoluta, deseando que solo pudieses verme a mí, solo pensar en mí…solo hablarme a mí, solo tocarme a mí…
Hoy he descubierto que no importa lo que haga, jamás será suficiente…
Así como yo no soy la persona perfecta que finjo ser ante todos, tú no eres aquel que conocí hace tiempo…
Porque aquel Aaron no me habría engañado…
Aquel Aaron me hubiese recordado…
No puedo olvidarte y no soy lo suficientemente como para pedirte perdón y enfrentarte
Así que… ¿Qué debo hacer?
Seguir en una mentira suena tan fácil…
Pero solo estaría prolongando una farsa sin sentido
Sé, que pese a que tus sentimientos hacia mí eran verdaderos, ahora están cambiando…
Jamás habrías besado a Daniel por lástima, lo hiciste porque lo deseabas, porque lo quieres…
¿Cómo luchar contra alguien que tiene todo aquello que perdí?
No tiene sentido…
Sin embargo, y sin importar las consecuencias de mis actos voy a exponer la verdad de aquel niño frente a tus ojos…
No importa en qué clase de monstruo me convierta
Porque nada puede ser peor a lo que soy actualmente…
Nada.
Benjamin