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Hay quienes dicen que los seres humanos somos terriblemente inútiles a la hora de juzgar a otros
Me pregunto si la causa de ello será debido a la falta de autocrítica
Sencillamente, si ni siquiera eres capaz de analizarte objetivamente a ti mismo, ¿Cómo podrías hacerlo con alguien más?
Es algo estúpido.
Pero los humanos somos estúpidos.
A diferencia de los animales (y es a considerar esto, dado que la mayoría se considera infinitamente superior a ellos) cometemos los mismos errores una y otra vez.
Somos testarudos, nos cegamos, mentimos, nos burlamos de otros, nos gusta jugar a ser superiores, escondemos deficiencias con apariencias…
¿Cómo podríamos entonces mirar a otra persona y criticarle cualquier cosa?
Sin embargo, como en todo orden de cosas, existen excepciones
Hay personas, muy pocas, pero existen quienes son capaces de mirar a los demás desde una perspectiva inusual para la mayoría
Son capaces de advertir conductas, pueden determinar comportamientos futuros y también leer nuestro pasado
Tú eres uno de ellos Erick y me pregunto si eres capaz de ver el futuro que supuestamente nos espera…
Porque yo no puedo
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-Oh, pero que alegría encontrarme contigo-
Había salido hace menos de cinco minutos de instituto y al escuchar aquella voz me arrepentí de no haber esperado a mi hermana…
Joder…
-¿Qué pasa? ¿Tienes miedo?-
Cerré mis ojos con fuerza, deseando haberle pedido ayuda a Blake antes, con esto, Claire se iría directamente al otro mundo en cuanto Varick la encontrara
-¿Qué haces aquí?- cuestioné girándome y rogando por lucir tranquilo
La mujer estaba apoyada en un automóvil negro con vidrios polarizados
-¿Yo? Pues quería saludarte e invitarte amablemente a que me acompañes-
Alcé una ceja y sostuve con fuerza mi bolso en mi hombro
-No gracias, tengo cosas que hacer-
Un brillo siniestro en su mirada me dijo que tendría difícil escapar
-Lamentablemente querido, no puedes escoger-
De la nada, sentí cuatro manos sosteniendo mis brazos, miré con inquietud y miedo creciente a los dos sujetos que me sostenían y que, literalmente, habían aparecido de la nada
-Es bastante descuidado de parte de tu hermano dejar que vayas libremente por la calle ¿Sabías?- se burló ella acercándose a mí
Intenté retroceder pero los hombres encajaron sus dedos con fuerza en mis brazos
-¿Por qué haces esto? ¡Varick no te dará otra oportunidad! – exclamé intentando hacerla entrar en razón
Pero ella sacudió su mano, restándole importancia al asunto
-Jamás pedí otra oportunidad, no necesito una maldita oportunidad, lo que quiero, es verte a ti y a tu primito desangrándose frente a ellos-
No entendía de quien hablaba
¿Cuál de mis primos?
Mordí mi labio inferior pensando que Varick ni siquiera había tenido que esperar una semana, solo habían bastado cuatro días para que Claire atacara nuevamente
-No tienes que hacer esto, puedes elegir-
La mujer soltó una carcajada cargada de odio
-¿Elegir? ¿Cuándo pude elegir si se puede saber? No niño, yo jamás tuve opción alguna, si mi madre no se hubiese revolcado con el muy desgraciado de mi padre jamás habría tenido que cargar con el peso de ser una bastarda sin derechos, si yo no pude elegir, ¿Por qué debería demostrar misericordia hacia los demás?-
-Porque tal vez en algún momento necesitarás de la misericordia de alguien…-susurré pensando en mi hermano
Ella comenzó a carcajearse
-¿Sabes que acostarte con tu hermano es ilegal verdad?- comentó con malicia
Palidecí brutalmente
¿Cómo lo sabía?
-Se te nota en cada partícula de tu cuerpo niño, incluso hueles a él, ¿En qué mierda estaba pensando Erick para meter a un bebé en su cama? Teniendo la posibilidad de acostarse con cualquiera…- chasqueó su lengua denostando disgusto
Entrecerré los ojos sintiéndome ofendido
-No creo que ese sea su problema- espeté
-Bien, bien, estamos llamando demasiado la atención, así que tráiganlo pronto-
Intenté decirle algo para detenerla pero un fuerte golpe en mi nuca me envió directamente hacia las sombras
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-Despiértenlo-
La voz me llegaba terriblemente lejana, como si se encontrara a cientos de metros de distancia… pero se oía
El impacto del agua helada contra mi cuerpo me hizo despertar bruscamente, miré asustado a mi alrededor, intentando regular mi respiración
-Oh, pero si has despertado-
La voz era horriblemente engañosa…
Era la voz de una asesina
Claire lucía diferente, a pesar de que su ropa seguía siendo muy apretada, cubría todo su cuerpo y era totalmente negra
Una daga en su mano derecha destellaba bajo la luz de la lámpara
Observé la habitación, no tenía ventana alguna y solo había una puerta…
Una entrada, una salida… como un sótano
Intenté incorporarme pero estaba atado a la pared con cadenas en mis muñecas y el largo de estas me impedía ponerme de pie, dejándome de rodillas sobre el cemento
-¿Dónde estoy?-
-Sería realmente estúpido de mi parte si te lo dijera ¿no?, solo te diré que incluso si escapas de este lugar sería muy difícil que encontraras el camino a casa-
Tragué duro, no quería pensar en lo que esa mujer iba a hacerme
-Creo que tendremos mucho tiempo para conocernos mejor Matthew- sonrió ella divertida
-¿Vas a matarme?- interrogué consciente de la respuesta
Ella extendió su sonrisa
-No te preocupes, muerto no me sirves de nada, así que vivirás, pero creo que no es algo de lo que debas alegrarte… cualquiera en tu posición preferiría morir-
Mi corazón latía con fuerza, la adrenalina que circulaba en mi sangre producto del peligro me instaba a hacer algo… pero ¿Qué?
-¿Con qué finalidad? Varick me dijo que incluso aunque asesines a toda mi familia jamás conseguirás un solo centavo…-
Claire se me quedó mirando fijamente unos instantes
-¿Recuerdas a Benjamín? Tu adorable y perfecto primo… él se parece mucho a mí ¿Sabías?-
La miré confundido
¿Benjamín parecerse a ella?
-Él jamás será como tú- aseguré
-Puede que no haya asesinado a nadie aún, pero su instinto de venganza es como el mío, cualquiera que haga peligrar lo que él ha conseguido es considerado un estorbo, ¿O vas a decirme que lo que le hizo a su profesora fue un juego?-
Aparté mi mirada consciente de que ese era un tema que me preocupaba… no, que NOS preocupaba
-Sabes que tengo razón, de hecho, esto segura de que si él fuese entrenado sería alguien de temer… como su padre-
Alcé mis ojos sintiendo miedo de esa mujer
¿Cómo podía conocer tantos detalles?
Era escalofriante pensar en la cantidad de información que manejaba
-¿Su padre?- cuestioné intentando no tartamudear
Ella ladeó su cabeza y volvió a sonreír
-Supongo que debería ser más específica pero en realidad, la diferencia entre su padre biológico y su padre adoptivo no es mucha, si se conocieran se llevarían perfectamente-
Mi cabeza era un maldito caos
¿Tío Bastian y quién más?
Sabía que tío Bastian y tío Kevin eran… asesinos, o lo habían sido antes de establecerse y estaba convencido de que la razón para hacer algo tan horrible era porque…
Joder, ¿Existe una razón lo suficientemente buena como para justificar andar asesinando personas?
No, no la existe…
-Ahora, lo que voy a pedirte es algo muy sencillo Matthew…-
Claire se acercó a mí lentamente, después de depositar la daga en una mesa
-¿Qué cosa?- susurré intentando parecer más tranquilo, pero todo mi cuerpo estaba temblando por el temor
-Cuando llegue el momento, grita lo más fuerte que puedas, me ayudará mucho…-
Inconscientemente intenté liberarme de las esposas
-¿Qué?-
-Estoy segura que Varick, tu novio y tu padre estarán encantados con ello…créeme-
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-------------------------------------------------------Evan-----------------------------------------------
-Bien, tenemos un problema-
Miré a Varick sin creerme que se tomara el asunto con tanta calma
-¿De qué hablas? ¡ES OBVIO QUE TENEMOS UN MALDITO PROBLEMA!- exclamé poniéndome de pie y comenzando a caminar por su estudio
¿Cómo pudieron llevarse a Matt?
-¿No tenías a NADIE cuidándole?- reclamé mirándole con furia
El de ojos verdes me miró con preocupación
Pero algo no me calzaba…
-Se supone que Blake…-
Claro, Blake…
De pronto el mayor tomó su teléfono y marcó un número, luego de dos palabras cortó bruscamente
-¿Qué vamos a hacer?- cuestioné sintiéndome horriblemente preocupado
Esa maldita mujer estaba loca
¡Totalmente loca!
¿Quién en su sano juicio busca la muerte de forma tan desesperada?
¡Era obvio que en cuanto intentara ponerle un dedo encima a Matt estaría acaba!
Sin embargo actuaba con seguridad, como si no le tuviese miedo a las represalias…
-Vamos suena a muchos, tú no harás nada-
-…-
El impacto de las noticias hizo que mi mandíbula cayera
-¿Qué?-
-Mira Evan, tendré suficiente con Sebastian cuando se entere que su hijo favorito fue secuestrado por una loca-
Detuve abruptamente mi caminar
-Sorry pero ¿QUE?- salté incrédulo
Varick se llevó ambas manos a la cabeza
-No necesitas saber mucho más, pero Erick y Sebastian van a arder en furia, créeme-
Bien, lo de Erick era totalmente esperable, pero ¿Qué podría hacer en contra de Claire?
Supongo que el de cabello oscuro debió leer la pregunta en mi rostro porque sonrió con tanta malicia que estuve a punto de retroceder
-Lamentablemente, las acciones de Claire han adelantado muchas cosas, será interesante ver como las verdades salen a la luz… por ahora lo único que necesitas saber es que Erick no tiene nada que envidiarle a su padre-
Fuck…
Ni siquiera quería detenerme a pensar en las consecuencias de aquello…
Matt jamás se lo perdonaría si había estado mintiéndole…
El sonido de mi teléfono en mi bolsillo me distrajo de mis pensamientos, tomé el aparato y observé la pantalla como si se tratara de algo totalmente ajeno a mí
-Contesta-
Por muy extraño que pareciese para venir de Varick, no era una orden, rozaba lo que cualquiera denominaría como petición… y eso fue suficiente para terminar de levantar mis alertas
De pronto, ya no estaba tan seguro de que Varick pudiese proteger a Matt
-¿Si?-
-¡Joder Evan!-
-¿Qué pasa Benjamín?-
La voz de mi mejor amigo sonaba alterada
-¡Hace dos malditas horas intentaron secuestrarme! ¡Claire estuvo en el departamento de Felipe y si no fuese por Erick…!-
Me quedé mirando fijamente a Varick, una horrenda sonrisa plasmada en su rostro
Y algo parecido a un rayo cayendo sobre mi cabeza, disipando cualquier duda
“Él ya lo sabía…”
Mierda…
-¿Realmente creíste que yo era bueno?- cuestionó el mayor con un tono parecido al que se hubiese esperado del mismísimo demonio
El teléfono resbaló por mi mano…
-¿Evan?- la voz de Benjamín seguía escuchándose hasta que el aparato chocó contra el suelo y yo sentí la pared contra mi espalda
-Tú…- pero no fui capaz de terminar lo que quería decir pues él golpeó duro mi estómago
-¿Yo? – me instó golpeándome nuevamente
Intenté ingresar aire a mis pulmones pero mi diafragma difícilmente podía expandirse
-¿Crees que después de todos los años de entrenamiento que recibí iba a estar feliz obedeciendo a Sebastian?- siseó son sorna
-Nosotros no tenemos nada que ver…- jadeé intentando alcanzar mi teléfono
Varick me pateó con fuerza
-¿No? ¿No son ustedes los hijos estúpidamente consentidos de aquellos que ayudaron a Sebastian a mentir con tanto descaro?-
De pronto todo estaba demasiado claro en mi mente, ¿Cómo iba Claire a trabajar sola?
Por muy fuerte que pareciera debía haber alguien ayudándole... Era Varick
Joder, era Varick
-¡Matt no tiene la culpa!- exclamé antes de recibir otro golpe
-No, no la tiene, pero lamentablemente es a quien ama su hermanito, es bastante penoso ¿no?-
¿De verdad todo esto era un maldito plan de Varick?
-¿Qué tiene que ver Erick en esto?- gruñí intentando ponerme de pie
Otro golpe, esta vez en mis costillas me regresó al suelo
-¿Sabías que Sebastian es mi primo?-
La sangre en mis venas se detuvo por un instante al escuchar aquello
SU primo…
Su primo…
¿Cómo mierda no nos habíamos dado cuenta?
Si lo observabas detenidamente el parecido era muy notorio…eran los mismos ojos…
-Bueno, resulta que él engañó a un chico muy inocente hace casi veinte años…jamás debió conocer a Angel, y Angel jamás debió enamorarse de alguien igual a mí… intenté hacerle ver la verdad, realmente lo intenté, pero no quiso escucharme y Sebastian me ordenó administrar su puto negocio, ocultándoselo a Angel…-
Las palabras llegaban a mis oídos y se tardaban en ser procesadas
¿Realmente tío Sebastian había hecho algo como eso?
Sabía que había sido un asesino… pero supuestamente lo había dejado…
“Eso es como pensar que tú te alejaste de Varick”
-Lamentablemente, ahora Matt será quien pague por los errores de sus padres…-
¿Pero qué errores?
-Estás utilizando a Claire- sentencié cuando pude respirar con normalidad
El de mirada verde se inclinó frente a mí y sujetó mi mentón con fuerza
-Es cierto, incluso si Erick llega a detenerla jamás sospecharán de mí-
Tragué duro
Eso me quitaba del juego por saber la verdad…
-No, no voy a matarte Evan- añadió con calma
Varick me tomó del brazo y me obligó a ponerme de pie
-¿No lo harás?- cuestioné sabiendo que si me iba a dejar vivo era por algo
Varick era perfectamente capaz de matarme y eliminar cualquier rastro de mi cadáver
-No, porque estás atado convenientemente a mí ¿O creíste que el trato que acepté sería en vano?-
Abrí mucho los ojos, comprendiendo finalmente a qué se refería
-No podrías…-
-¿Por qué no?, no dudes que asesinaré a tu hermano si dices una sola palabra… lo cortaré en cientos de trozos y te enviaré cada parte lentamente después de asegurarme que las torturas lo dejen irreconocible… ¿No sería divertido de ver?- se rió
Quería llorar, realmente quería hacerlo, pero eché mi cabeza hacia atrás
Si algo le había aprendido a Kevin era su capacidad para controlarse y lucir indiferente…
“Aunque puede que tu hermano haya aprendido la técnica un poco mejor ¿no?”
-¿Esperas que te obedezca sabiendo que pretendes hacerle daño a mi primo?-
Ni siquiera quería hablar de Benjamín aún, ¿Por qué también había convencido a Claire de secuestrarlo?
-¿Daño? Yo no le haré daño, las únicas personas que lo harán serán Sebastian, Erick y por supuesto Claire…-
Entrecerré los ojos intentando averiguar su plan
Todo parecía indicar que Varick sí tenía cierta obsesión… ¿Pero era con Matthew o con tío Ángel?
De pronto alguien llamó a la puerta
-Adelante-
Blake apareció con semblante serio
-Qué bueno que llegas, quiero que entregues unos documentos…-
El de ojos oscuros se mantuvo parado como una estatua frente a Varick, cuando este le entregó un sobre, hizo una venia y se retiró sin haber pronunciado palabra alguna
-Bueno, creo que entendiste mi punto Evan…-
De haber podido matarlo, estaba seguro que lo habría hecho
-Estás demente- acusé mirándole con ira
-Tu odio no me afecta, de ahora en adelante seguirás mis instrucciones al pie de la letra, si tan solo intentas desobedecerme lo sabré y el primero en pagar será tu hermano-
Apreté mis puños y me obligué a respirar profundamente
-¿Por qué Matthew?-
El mayor se dejó caer en la silla frente a su escritorio con una enorme sonrisa
-Podría conseguir a Angel, ciertamente, pero creo que a mí querido primo le dolerá más Matthew y en cualquier caso que sea novio de Erick le da un plus demasiado valioso como para ignorarlo… -
-¿Pretendes volverlo en contra de su familia?- interrogué con frialdad
El de ojos verdes se me quedó mirando fijamente
-¿Qué no has aprendido nada relacionándote conmigo? Será inmensamente divertido ver como el palacio de cristal que construyó Sebastian para Angel se derrumba sin que puedan hacer nada-
Entonces no era realmente contra Matt el asunto…
Fruncí el ceño, ¿Qué iba a hacer?
Estaba seguro que Varick enviaría a alguien para espiarme, si me atrevía a desobedecerle no me cabía duda alguna de que mi hermano pagaría…
No podía hacerle eso a la persona que amo…
Pero por otra parte… Matt es mi primo
-¿Cuál es tu obsesión con ellos? ¿No puedes dejarles viviendo en paz?-reclamé consciente de que podría despertar su furia
Varick sonrió macabramente
-El que Sebastian me haya dejado con vida es prueba suficiente de que es un maldito mentiroso, él no es mejor que yo, hay tanta sangre en sus manos como en las mías, pero decidió seguir mintiéndole a su pareja porque es un cobarde que no se atreve a ser honesto y sabe que incluso aunque lo sea, Angel jamás se quedará al lado de un asesino… yo solo me voy a divertir un poco, después de todo, se supone que estoy muerto para ese precioso angelito-
Fuck, eso era lo suficientemente esclarecedor
¡Varick intentaba separarles!
¡Incluso después de todos estos años seguía obsesionado con Angel!
Y por supuesto, su obsesión con Matthew era resultado del parecido de mi primo con su padre…
-Incluso si consigues lo que te propones nada te garantiza que perdure en el tiempo, si Sebastian fue mejor que tú en el pasado probablemente lo siga siendo- espeté con enojo
Por supuesto, mis palabras no afectaron en lo más mínimo al mayor
-Eso no me preocupa en lo absoluto, para cuando decida matarme su familia va a estar totalmente destruida… y yo lo voy a disfrutar inmensamente-
-----------------------------------------------------------End Evan----------------------------------------------------------
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-----------------------------------------------------Benjamín------------------------------------------------
-¡Felipe!-
Golpeé con fuerza la puerta de su departamento, comenzando a sentirme desesperado
¿Qué estaba pasando?
La dura madera había conseguido adormecerme la mano por los golpes, pero no iba a desistir…
-¡Ábreme! ¡Voy a quedarme aquí hasta que lo hagas!- golpeé con mayor fuerza, sin importarme el que pudiese fracturarme la mano
Sentía mi corazón latiendo con excesiva fuerza en mi pecho, me estaba advirtiendo, estaba seguro, pero tampoco quería convencerme de ello
…Felipe
Cerré mis ojos con fuerza, negándome a llorar y seguí tocando el timbre
-¡Maldicion Felipe!- exclamé frustrado
¿Realmente había decidido por su cuenta?
¿Y yo qué?
¡Pensaba que todo había mejorado entre nosotros!
-----------------------------------------------------------Flashback-------------------------------------------
Me giré lentamente, consciente de que si antes no entendía que sucedía, ahora no podía estar más perdido
-¿Qué se supone que haces aquí… Erick?-
El de ojos verdes me miró fijamente mientras una ligera sonrisa se formaba en su rostro
“Maldición, definitivamente tengo que hacerle un altar a Evan”
-Ayudando a un amigo-
No estaba hablando de mí
Observé con recelo a ambos rubios
-¿Están todos muertos?- cuestionó el novio de Matt acercándose con sigilo
Felipe asintió sin dignarse a mirarme
-¿Son amigos?- cuestioné sin creérmelo
-Técnicamente es mi jefe- replicó Felipe observando el suelo
Mi garganta se secó
-Creí que Rafael era tu jefe- susurré con mucho esfuerzo
Erick me sonrió mientras pateaba ligeramente uno de los cuerpos
-No lo es, somos, ¿Cómo decirlo?, creo que estaría bien decirte que no hay uno que mande, somos tres-
De pronto las palabras de Claire comenzaron a tomar cierto sentido
-¿Tú?-
Dejé la pregunta inconclusa consciente de que estaba siendo bastante estúpido
¿No era suficientemente obvio que cargara un arma y él mismo se definiese como uno de los que “mandaban” junto a Rafael?
“No olvides a Felipe por favor, tú pensabas que obedecía a otros y resulta que tenía más libertad de la que imaginas…”
-Si los tres mandan, eso significa…-
-No significa mucho realmente cada uno tiene sus razones para pertenecer a la organización-
Alcé una ceja
¿Organización?
¿Así le llamaban ahora a la mafia?
Que lindo nombre…
-¿Cuáles son las tuyas?- cuestioné acercándome al de ojos verdes
-No creo que este sea el lugar más apropiado para hablar…-comenzó
-Pienso lo contrario Erick, nada mejor que muertos para hablar de la vida de dos asesinos- espeté intentando controlarme
Así que todo el tiempo Evan tuvo razón…
Erick era demasiado perfecto…
-Benjamín…- me llamó Felipe
Le lancé una mirada helada
-No, es suficiente, esa mujer intento llevarme con ella quizás para qué, voy a preguntar lo que quiera y ustedes dos me van a responder o te juro que en este momento llamo a Matthew y le digo que su hermano es un maldito asesino-
-¿Me juzgas por ser algo que tu propio novio es?- se burló el futuro médico con una sonrisa
-No Erick, te juzgo porque has estado mintiéndole a mi primo- refuté con calma
-…-
El tenso silencio que se formó no me incomodó en lo absoluto, sabía que él iba a tener que responderme
Ambos percibíamos que el mellizo menor no se lo iba a tomar precisamente bien cuando se enterara de todo este enredo
-Bien, pregunta lo que quieras, de cualquier forma llamé a los chicos para que limpien esto- comentó dejándose caer en el enorme sofá del salón
Caminé esquivando cadáveres y me paré frente a él
-¿Desde cuándo?-
Sus ojos verdes me analizaron con neutralidad
-¿Desde cuándo eres un asesino?-
Por un instante pensé que me enviaría al carajo, pero Erick me sonrió con cierta alegría
-Primero debes jurarme que no le dirás a nadie lo que yo te responda- aclaró con severidad
Asentí no muy convencido
-Te lo juro-
Su mirada se relajó y aquello, inevitablemente también me hizo tranquilizarme un poco
Estaba acostumbrado a tratarle como el hombre normal que aparentaba ser, no como un asesino…
¿Cómo definirlo?
No vi emoción alguna en sus ojos cuando disparó… supongo que eso es algo que tienen en común con Felipe
-¿Entonces?- le alenté
-A los dieciocho, cuando me fui a estudiar a la universidad-
Vaya…
-¿Por qué lo hiciste?-
-Mi entrenamiento había terminado y estaba en facultades de hacerlo, además si yo no lo hacía, él me hubiese asesinado…-
Por alguna extraña razón la tranquilidad en su voz no me perturbó, sonaba tan…normal
Como si aquello hubiese sido parte de él desde hace demasiado tiempo
-¿Cuándo crearon esa organización?-
-Eso puede respondértelo mejor Felipe- respondió, un brillo malévolo en sus ojos
Me giré hacia mi novio, que se había recargado en la pared y tenía los brazos cruzados
-Rafael detesta a Varick, cuando le conocí yo acababa de matar a diez sujetos, él me ofreció trabajar para él pero lo rechacé, odio recibir órdenes…-
Alcé ambas cejas, mostrando mi confusión
-Pensé que…-
-Te equivocas Benjamín, cada una de las acciones de Felipe son determinadas por él mismo, es el mejor asesino que tenemos, así que no es llegar y ordenarle algo…-
Me estremecí al escuchar a Erick, no estaba mintiendo, Felipe realmente era el mejor en esa… organización
Por un instante tuve miedo, y me aterró la idea de haber estado a punto de acostarme con él, pero sacudí mi cabeza automáticamente, intentando alejar aquellos pensamientos
-De cualquier forma, meses después conocí a Erick y él me convenció, llegamos a un trato con Rafael, los tres estaríamos a la cabeza, después de todo, nuestro intereses finales se relacionan y no interfieren entre sí…ha funcionado perfectamente los seis años que llevamos al mando-
Me costaba mucho entender que pudiesen convivir tres personas a cargo de algo tan peligroso como una organización de asesinos
Solo tenía que mirar a Varick y a Claire para recordarme que las traiciones están en todas partes…
-¿Ya no tienes más preguntas?-
-Tú padre era un asesino, ¿Crees que esto era lo que él quería para ti?- inquirí con cierto pesar
No era solo Erick, también Evan, Max y yo habíamos caído en el círculo que nuestros padres intentaron exterminar…
Para mi total desconcierto, el hermano de Matt sonrió tranquilamente
-La razón por la que me fui de mi casa, Benjamín, fue porque me enamoré de mi hermano pequeño-
Retrocedí un paso consciente de que su brutal honestidad era demasiado para mí
Yo estaba acostumbrado a guardarme todo, a fingir y a sonreír cuando fuese necesario
El Erick que tenía frente a mí era totalmente despreocupado, decía lo que quería cuando así lo deseaba… me pregunto si será de esta forma con Matthew también…
-¿Y?-
-Se lo dije a mi padre-
Sentí mi mandíbula caer y carraspeé intentando no perder la compostura
¿Qué hijo iba a decirle a su padre que se había enamorado de su hermano?
Sin duda alguna Erick o era demasiado valiente o demasiado tonto…
-También le dije que conocía acerca de su pasado y que quería ser entrenado para saber defenderme, finalmente y después de muchas discusiones conseguí convencerle, por supuesto Angel no podía enterarse o nos mataría a ambos…- se rió al imaginar lo último
Wow… ¿Cómo habrá sido su entrenamiento?
¿Cómo el de Evan quizás?
Ladeé mi cabeza ligeramente recordando los moretones de mi mejor amigo… probablemente el de Erick fue más brutal que eso…
-Mi padre no quería que yo asesinara a nadie a menos que tuviese que escoger entre su vida y la mía, cuando descubrí que había dejado a Varick vivo para que se encargara de los otros asuntos de mi familia me enfadé mucho-
La forma de expresarse de Erick era la misma que la que utilizaría una persona que regresó de un paseo y comenta acerca del clima
Joder, me esperaba amargura y tristeza, ¡Definitivamente esto no me cuadraba!
Pero aun así estaba siendo honesto…
-Espera… ¿Dejó a Varick vivo?- repetí captando un asunto totalmente impactante
Erick bufó
-Supongo que sabes que intentó asesinar a Angel, bien, Sebastian en lugar de matarle le dejó vivo… aunque Angel creyó que había muerto, la lealtad de Varick no está con nadie, él solamente toma decisiones en relación a cuan divertido le parece el asunto-
Bien, ahí tenía un punto muy importante y totalmente cierto
-Como Sebastian y Varick son primos…-
Abrí mucho los ojos
-Espera, ¿QUE?-
-Un detalle, supongo-
El rubio agitó su mano restándole importancia pero yo palidecí
Matt no sabía aquello, pero Varick sí, lo que significaba que probablemente el mayor se le había acercado consciente de quien era…
Demasiado consciente para ser algo bueno…
Maldición
-Le dije a mi padre que no podía entender por qué había hecho aquello, si él mismo aceptaba que Varick no poseía lealtad alguna, ¿Por qué dejarle a cargo?, le dije que yo podría hacerlo, pero él… bueno, se enfadó mucho, nuestros padres hicieron todo para darnos una vida tranquila y yo voy y le pido que me deje a cargo de… bueno, esa organización-
Cualquiera con dos dedos de frente entendería el malestar de Sebastian
Ceder ante un entrenamiento era una cosa, incluso aunque a muchos les parecería inhumano, desde otro punto de vista le estaba dando algo con lo que sobrevivir a su hijo… pero ir más allá…
-En la última discusión que tuvimos antes de que me marchara a la universidad creo que pensó mejor las cosas, él sabía que yo iba a intentar aquello con su permiso o sin él, así que me dijo que inevitablemente tendría que escoger, o la organización o… Matt-
Sonreí ligeramente pensando que Erick era demasiado parecido a tío Sebastian, incluso aunque todos les obligaran a escoger ellos conseguirían ambas cosas…
-Le respondí que iba a entrenar, me iba a volver lo suficientemente fuerte y veloz, además de inteligente, como para conseguir ambas cosas, iba a conseguir quitar a Varick de la organización, alguien que en cualquier momento podría volverse en contra de nuestra familia y atacar de nuevo, y también me encargaría de proteger a mi hermano…-
No sabía que pensar
Sebastian era alguien lógico, ¿Por eso le ocultó todo esto a su esposo?
Ni en cien mil años Angel hubiese aceptado que su hijo fuese entrenado como un asesino y mucho menos que luchara contra Varick… era algo inconcebible
Pero el padre de Matt era consciente de que no podría detener a su hijo mayor…
Además, tampoco sonaba tan mal que él mismo se obligara a ser lo suficientemente fuerte como para proteger a la persona que ama…
Confuso y sin atreverme a opinar sobre el asunto aún, decidí cambiar un poco el tema
-Espera un momento-
Para sorpresa de ambos tomé mi teléfono y marqué el número de mi mejor amigo
-¿Si?-
Su voz sonaba extrañamente ahogada
-¡Joder Evan!- exclamé frustrado
Me giré y comencé a caminar entre los cuerpos sintiendo el shock de la realidad golpeando contra mí…
Estaba caminando entre malditos cadáveres…
-¿Qué pasa Benjamín?-
-¡Hace dos malditas horas intentaron secuestrarme! ¡Claire estuvo en el departamento de Felipe y si no fuese por Erick…!- me contuve de decir más allá de lo que debería
Evan no respondió y aquello me extrañó
-¿Evan?- le llamé escuchando el sonido de una respiración ahogada
Fruncí el ceño al escuchar el tono que indicaba la finalización de la llamada
Me di media vuelta bruscamente, un mal presentimiento atacándome casi de forma paranóica
“Por favor, es Evan, probablemente esté teniendo sexo…”
Bueno, eso era perfectamente factible…
Suspiré profundamente intentando relajarme, no era para tanto, le llamaría dentro de unas horas y ya
-¿Qué pasó?-
Felipe sonaba intrigado
Le miré fijamente, sin saber qué pensar
-Si tú también mandas, ¿Por qué obedeces a lo que te dicen?- cuestioné con rudeza
-No es que obedezca, es lo que tengo que hacer, y no me arrepiento de ello-
Sonaba como alguien que no piensa dar su brazo a torcer, decidí ir por otro lado
-Bien, tú y yo hablaremos después, ahora quiero saber Erick, ¿Por qué me contaste todo esto con tanta tranquilidad?-
Técnicamente la palabra era “Facilidad”, pero decidí que era mejor no tentar mi suerte
El rubio volvió a sonreírme
-¿No es obvio? Eres el novio de Felipe, creo que aquello es suficiente mérito como para merecer mi total confianza… por otra parte, juraste no revelar nada, si lo haces creo que tendrás problemas-
No era una amenaza, había usado el mejor de los tonos cordiales para decírmelo, pero aun así me inquietó su mirada
-¿Y Matt?-
Él suspiró
-No creo que esté preparado para enterarse de la verdad ahora… pero tarde o temprano deberé decírselo… no quiero cometer los mismos errores que mi padre-
“Ya lo estás haciendo” pensé inevitablemente
-De cualquier forma, deberías llevarte a Benjamín, Pyro, no creo que sea buena idea que vea la limpieza-
El de ojos azules se encogió de hombros
-¿Así lo deseas?-
¿Desde cuándo tan servicial?
-Vamos- caminé hacia la puerta con tranquilidad a pesar de la información que acababa de recibir
No sabía si sentirme más seguro o en más inseguro, pero quería hablarlo con Felipe y no con Erick… en especial considerando que su despreocupación me perturbaba mucho
Al principio pensé que era porque él se lo tomaba así, pero pensándolo bien, ¿Quién se toma tan importante de esa forma?
¡Era ilógico!
“Olvidas que Felipe y Varick son iguales…”
-Oh, por cierto Benjamín…-
Me giré un poco hacia el futuro galeno
-¿Si?-
-Sería bastante prudente de tu parte alejarte de Varick, es obvio que esa mujer tiene ayuda de él en esto, sino ¿Cómo habría podido actuar de una forma tan descuidada?-
-Ahá-
Salimos de aquel lugar con cierta rapidez, ya no soportaba mucho más, había estado apartando todo de mi mente en un intento de evitar que me conmocionara
Joder, tenía demasiada razón
Pero, ¿Varick quería hacernos daños?
No me cabía en la cabeza eso…
Además, él nos había protegido antes… ¿Por qué ahora querría dañarnos?
¡Incluso sabía de mi relación con Felipe!
Observé mi expresión de incredulidad en el espejo del ascensor cuando este se abrió
“SI lo sabía es demasiado probable que él mismo le hubiese comentado aquello a Claire”
Por supuesto…
-¿Cómo estás?-
Me negué a responderle a Felipe, de cierta forma me sentía… traicionado
-Bien, eso es suficiente para saber que estás enfadado-
¡Ni siquiera sonaba arrepentido!
Fruncí el ceño, sintiendo mi ira crecer
Me subí al automóvil del rubio apretando mis puños y deseando tener algo para golpearlo
El trayecto en vehículo fue bastante breve… y silencioso
Por supuesto, él no iba a ser el primero en hablar, él lucía como alguien a quien le importaba un carajo todo
Al estacionar el auto y extenderme la mano después de abrirme la puerta le ignoré olímpicamente
Sí, me estaba comportando como un niño, pero estaba asustado…
Podía recordar claramente las palabras de Claire
“Sé que en algún lugar de este departamento está una persona que es lo más importante para dos de las tres cabezas de la asociación…”
Estaba claro que yo no era lo más importante para Erick, esa persona es Matt
Pero eso solo dejaba a Felipe y a Rafael…
¿Rafael?
¿Por qué?
Avancemos dentro de otro lujoso edificio, aún más alto que en el que vivía Felipe, pero extrañamente el conserje lo saludó como si le conociera de toda la vida
Pasé a su lado directo a los ascensores comenzando a sentirme perdido
¿Había sido engañado por él?
Mierda… y ahora iba directo a encerrarme en un departamento con Felipe
El elevador se detuvo en el último piso, el espacio alrededor no era muy amplio pues había una única puerta con un teclado a un costado, el rubio tuvo que digitar un código para que esta se abriera
Observé el interior de aquel enorme espacio sintiéndome más pequeño que nunca
Evidentemente era un penthouse, pero no entendía por qué teniendo algo tan grande como esto, Felipe prefería vivir en el otro departamento que debía ser un cuarto de este
-¿Por qué no vives aquí?- cuestioné incapaz de quedarme callado
El rubio se quitó el abrigo sin mirarme
-Es demasiado grande para mí-
Bueno, en eso tenía razón, para una sola persona debía ser… solitario
Pero eso no explicaba cómo lo había conseguido
-¿Cómo lo conseguiste?-
Él se giró y su mirada azul me atravesó
-Mis padres me lo regalaron-
¿Qué?
¿Sus padres eran millonarios?
-¿Dónde están ellos?-
Incluso antes de hacer la pregunta supe que estaba cometiendo un error, pero no pude evitarlo
Él retrocedió un poco y luego dirigió su camino hacia un mini bar ubicado en el salón
-Muertos-
Mierda
Bajé mi mirada al suelo sintiéndome mal por ello
-Ni siquiera pienses en sentir lástima Benjamín-
Alcé mis ojos, estaba bebiendo vodka pero no dejaba de mirarme
-Lo siento mucho-
Realmente lo sentía
-¿Lo dices porque es lo correcto?-
-No, lo digo porque así lo siento- repliqué consciente de que él tenía demasiadas razones para pensar de esa forma
-…-
Suspiré avanzando hacia el enorme ventanal que había en el salón
Abarcaba toda la pared y daba a un balcón cubierto de cerámica
-¿A qué se refería Claire al decir que yo era lo más importante para dos de las tres cabezas de la organización?-
A pesar del silencio, sabía que él estaba buscando las palabras para responderme, así que me mantuve quieto, esperando
-Supongo que tiene razón- respondió al cabo de lo que se sintió como una eternidad
-¿Por qué?-
Sentí sus brazos rodeando mi cintura y me estremecí
-Felipe…- no quería que cambiara el tema o me distrajera, realmente ansiaba conocer esa respuesta
-No puedo responder completamente, pero creo que imaginas que eres lo más importante para mí-
Una cálida sensación de calor surgió en mi pecho y recorrió todo mi cuerpo
-¿Me amas?-
Él me giró entre sus brazos, sus ojos azules brillando gracias a la luz que ingresaba desde la calle
-Sí, amo cada parte de ti- respondió acariciando mi mejilla
“¿Entonces por qué ella dijo que tú sabías la verdad sobre mis padres?”
Alejé aquel pensamiento de mi cabeza y alcé mis pies para besarle
Pero Felipe retrocedió sonriéndome con amargura
-No estoy seguro de que esto sea lo correcto-
Intenté ignorar el sentimiento de decepción que me inundó, realmente lo intenté, pero no lo conseguí muy bien
-¿Es porque aún no nos acostamos?-
-¿Realmente crees que estoy contigo por sexo? De ser así me habría aburrido hace mucho- espetó con resentimiento
Ok, no fue la pregunta adecuada
-¿Entonces cuál es el problema?-
Que yo supiera nos queríamos ambos y… ¿Por qué no quería acostarse conmigo?
Porque eso era lo que íbamos a hacer… ¿Cierto?
-Yo…-
“Que no me diga que es hetero…”
-¿Qué hubiese pasado sin Erick? Ellos te habrían llevado…-
Rodé los ojos, así que se trataba de eso
A pesar de la frustración me sentí… querido
A Felipe realmente le preocupaba el asunto
Intenté sonreírle trasmitiéndole todo mi cariño
-¿Sabes que es lo que más me gusta de estar contigo?-
Se me quedó mirando con curiosidad, obviamente no lo había pensado detalladamente
Pero yo solo quería convencerle de que estar con él era mucho mejor a que escogiera alejarse solo por protegerme…
-No tengo que fingir nada, no debo reaccionar como la sociedad espera… maldición, es lo más cerca que estoy de ser libre… y esa parte de mí me grita… que quiero acostarme contigo- añadí luchando por no avergonzarme
Su expresión cambió drásticamente y de pronto sentí mi espalda chocando contra su enorme sofá
-Si te arrepientes después…-
-No lo haré- le corté mirándole directamente a los ojos
Estaba seguro de ello
El rubio ladeó ligeramente la cabeza
-¿Puedo hacerte el amor?-
Sonreí divertido
-mmm, yo diría que s…-
Ni siquiera alcancé a terminar de hablar cuando sus labios me atacaron, nunca nos habíamos acostado, pero jamás le había sentido tan necesitado
Mi mente recordó la ocasión en que intenté seducir a mi “profesor” y me maldije por no notar que debajo de esa actuación había alguien tan… caliente
Felipe me besaba como si la vida se le fuera en ello y mi cuerpo respondía automáticamente bajo sus caricias
La piel de mi estómago se erizo cuando sus manos me acariciaron con cuidado
“No voy a romperme…”
Jadeé luchando por el vital oxígeno cuando decidió darme un respiro
-¿Puedo hacerte lo que quiera?-
Parpadeé sin entender bien a qué se refería, además del hecho de que mi cuerpo se había calentado y me impedía pensar bien
-¿De qué…?-
Pero el de ojos claros se puso de pie y técnicamente corrió hacia el pasillo del departamento
Decidí tomar medidas en lugar de frustrarme por su desaparición y desabroché mi camisa
Cuando comencé a preguntarme si era buena idea quitármela, pues a una parte de mí le preocupó que él me reclamaría por quitarle ese derecho, el mayor reapareció con una enorme sonrisa… una sonrisa que no presagiaba NADA bueno
-¿En qué estás pensando?- cuestioné con algo de temor
-Cierra los ojos-
Alcé una ceja
-¿Por qué?-
-Ya verás-
De pronto se dejó caer sobre mis caderas y estiró mis brazos sobre mi cabeza
-Felipe…-
-Cierra los ojos…- susurró besando mi cuello
Me estremecí bajo su cuerpo, ¿Cómo decirle que no a alguien así?
Hice lo que me pidió, pocos segundos después algo suave se depositó sobre mis ojos, deduje que era un trozo de tela
-¿Así que te gusta esto?- comenté sonriendo
-Esto y mucho más…- replicó con voz grabe
Mierda…
Intenté alejarme un poco pero él anudó rápidamente la tela y apretó mis muñecas
-Oh no, hasta que no me ruegues no voy a soltarte Benjamín…-
¿Era normal que me excitara este juego?
Tendría que discutirlo con Evan…
“Olvídalo, si es Evan no es alguien objetivo…”
-Benjamín…- me llamó volviendo a besar mi cuello
-¿mmmm?-
Era increíble que con solo sentirle contra mi piel pudiese enviar todo pensamiento a volar
Con mis manos atadas sobre mi cabeza y mi visión cegada lo único que podía hacer era gemir e imaginarme su expresión…
Y debía ser una muy buena expresión de lujuria para provocar que su voz se enronqueciera tanto…
-ahh…- gemí cuando sus labios bajaron por mi cuello hasta mi pecho y se entretuvieron en mi pezón izquierdo
-¿Se siente bien?-
Oh sí, demasiado bien…
Asentí rápidamente y recibí una pequeña carcajada como respuesta
Felipe siguió lamiendo hasta que se aseguró que estuve lo suficientemente excitado como para tirar de la tela que aseguraba mis muñecas
-Quiero tocarte…- me quejé suspirando
-Y yo quiero que me toques, pero primero voy a probarte entero-
Aquellas palabras enviaron una corriente por mi espina dorsal… una corriente que bajó hasta cierta parte de mi anatomía
Luché por acomodarme, pero sus manos rodearon mi espalda y se deslizaron hasta mi trasero, separando mis piernas lo suficiente para dejarle a él entre ellas
El rubio siguió besando mi piel y deslizando su lengua de una forma que me encendió lo suficiente como para calentar el ambiente de todo el salón
Cada beso se sentía como una pequeña quemadura que me provocaba más y más placer… y no se terminaba
-¿Puedo dejarte marcas?-
Pero qué considerado…
-Debiste preguntarlo antes de marcarme el cuello- repliqué con un exceso de concentración
-¿En serio?-
Maldito infeliz…
Mi novio se entretuvo besando mi ombligo lo suficiente como para que sus manos se encargaran de desabrochar mi pantalón y bajarme ligeramente la ropa
-Y finalmente sabré a qué sabes…-
Mis caderas se movieron al escucharle decir aquello, oh, por supuesto que yo también quería averiguar a qué sabía él…
-ahhh… para ser alguien que habla tan poco, en estas ocasiones resultaste peor que Evan- me burlé consciente de que pagaría caro por ello
-¿Por qué tenemos que pensar en Evan cuando vamos a acostarnos?-
Me encogí de hombros y por enésima vez tiré de lo que fuese que amarraba mis muñecas, estaba comenzando a desesperarme
-Tranquilo, si no te mueves juro que voy a recompensarte…-
Nuevamente una corriente y sentí mi miembro comenzando a luchar por escapar
¿Qué clase de recompensa sería?
Sus dientes mordieron mis caderas con fuerza antes de que su lengua se deslizara lentamente hasta mi pene
-¡Ahhhhh!- grité al sentir como lamía la punta
Mordí mi labio deseando verle
¡Mi imaginación no estaba funcionando con tanto placer!
Una nueva lamida y mi cuerpo tembló producto del deseo
-mmm… es agradable- comentó separando más mis piernas y metiéndoselo todo a la boca
De haber podido saltar lo habría hecho, jamás pensé que tener a Felipe haciéndome sexo oral se sentiría tan bien
Su lengua subía y bajaba lentamente, todo lo contrario a mis pulmones que no conseguían darme el oxígeno suficiente como para respirar
Sentía que me ahogaba producto del placer y no podía estar más feliz por ello
Incluso mientras su boca se encontraba tan ocupada, sus manos seguían acariciándome, pero con ternura
Como recordándome que había un sentimiento mucho más profundo detrás de todo esto
Me resigné a no controlar mi cuerpo cuando este comenzó a sacudirse violentamente
El calor seguía subiendo y solo podía pensar en cómo lucirían sus ojos mirándome fijamente mientras él continuaba en su… labor
-Ahh… más rápido- supliqué consciente de que mi orgullo me había traicionado en el preciso instante en que conocí a Felipe
-¿Más?-
-Ahhh… sí, más…-
¿Se podía llorar de placer?
Porque yo estaba a punto de hacerlo y no podía imaginar lo que vendría después
Mi “profesor”, aumentó la velocidad y pronto dejé de respirar, deseando poder tocarle, y a la vez agradeciendo el haber sido rescatado por Erick…
Joder Erick, si no fuera por ti yo no estaría aquí con Felipe…
De pronto mi cuerpo completo se estremeció y comprendí que me había corrido… en su boca
-Es bastante agradable el sabor- sentenció como si hablase de un postre
Ni siquiera me molesté en lucir avergonzado, estaba atado de manos y vendado en su sofá, no quedaba espacio para la decencia
Los estragos del orgasmo seguían adormeciendo mi cuerpo cuando me quitó la venda
Tuve que parpadear varias veces para acostumbrarme a la luz pero cuando lo conseguí valió la pena… se estaba quitando la camisa
-Oh mierda…- solté sintiendo mi boca seca
¿Cómo podía tener ese cuerpo?
Cada músculo estaba marcado moderadamente, delatando todo el ejercicio que debía realizar para mantenerse en forma… y esa piel…
-Esa boca- me regañó sonriendo
-¿No te gusta mi boca?- repliqué empujando mis caderas contra su entrepierna
Por primera vez gruñó y me sentí como un niño con un dulce
-Desátame- no era una petición
-En tus sueños-
Sin apartar su mirada me quitó los pantalones y la ropa interior y acarició mis piernas con ligereza, casi como si estuviese evaluando la suavidad con la yema de los dedos
-Eres un…-
-¿Dios en la cama?-
Fruncí el ceño pero no respondí nada
No es que hubiésemos llegado al final pero con lo que me había dado… era suficiente
-De haber sabido que sería así lo habría intentado mucho antes- confesé sonriendo
-Eso me habría hecho sentir aún más pedófilo- reconoció mientras se quitaba los pantalones
Mordí mi labio inferior, una idea cruzando mi cabeza
-Pero profesooor… ahhh- gemí descaradamente
Noté como el bulto entre sus piernas crecía
“Te tengo”
-¿Qué dijiste?- susurró con voz grave, girándose hacia mí mientras se despojaba de la última prenda
-Profesoooor… yo… ahhh… lo encuentro…atractivo-
Caliente era la palabra adecuada en realidad
El mayor se abalanzó sobre mí como un leopardo sobre su presa
-Eres un manipulador-
-Me amas- ignoré sus palabras aún consciente de que eran ciertas
-Sí- respondió con seguridad antes de volver a besarme
Su lengua atacaba mi boca sin reparos y de haber podido probablemente la habría metido más y más profundo
Gemí sintiendo su miembro duro contra el mío, ni siquiera parecía como que acabase de tener un orgasmo, Felipe tenía ese efecto sobre mí
-¿Puedo entrar?-
Joder, eso era demasiado para mí
Asentí cortando el beso para respirar un poco
Acercó tres dedos de su mano derecha a mi boca y no tuve que pensármelo mucho para saber qué pretendía, lamí cada uno de esos dedos sin apartar la mirada de ese par de ojos azules que me miraban cargados de lujuria
-¿Ya?- cuestioné cuando solté el último
Él volvió gruñir y asintió
Con maestría dobló mi pierna con su mano izquierda y acomodó un cojín bajo mi espalda
Oh, oh…
Supongo que el repentino pánico se mostró en mi rostro porque se inclinó contra mis labios
-No voy a hacer nada que no quieras, así que relájate…- intentó tranquilizarme al mismo tiempo que introducía el primer dedo, incursionando en mi interior
“No quería que me ataras…” pensé al mismo tiempo que arqueaba mi espalda
No se sentía mal, pero tampoco era placentero… era… extrañamente doloroso
Jadeé al sentir el segundo dedo entrar
-mmm… no es…-
¿No es qué?
Felipe comenzó a morder mi cuello al mismo tiempo que hacía movimientos en forma de tijeras en mi interior y consiguió distraerme perfectamente…
Mis muñecas dolían horriblemente por mis intentos de liberarme pero inconscientemente seguía tratando… oh y también moviéndome contras sus dedos
Cuando el tercer dedo se unió, algo rozó cierta zona en mi interior que me hizo arquear la espalda
-¡Ahhhh!... ¡Ahí!- exclamé entrecerrando los ojos
El rubio mordió con fuerza antes de incorporarse
-No sabes lo que me calienta verte así- gruñó deslizando sus manos por mis caderas
“Podría decir lo mismo…”
Cerré mis ojos y eché mi cabeza hacia atrás al sentir la punta de su miembro presionando contra mi entrada
-Será mejor que te relajes…-
¿Será mejor?
Intenté retroceder un poco pero él me sostuvo firmemente antes de empujarse con fuerza dentro de mí
Abrí bruscamente los ojos y me quedé mirando fijamente el techo producto del dolor
¡Ni siquiera podía gritar!
Solo sabía que su maldito pene me estaba partiendo en dos…
-¡Joder!- exclamé cuando recuperé la voz
-Te lo dije…-
Maldito hijo de…
-¡Ahhhhhhh!- grité sin entender qué pasaba
De pronto se había empujado mucho más dentro de mí, pero aparte del dolor infernal también había… ¿Placer?
Soy tan masoquista…
Respiré profundamente intentando calmarme y controlar el dolor, pero realmente fue gracias a Felipe y sus besos que conseguí alejar aquel malestar de mí
Ni siquiera se quejó por no poder moverse, solo se mantuvo quieto, enterrado en lo más profundo de mi interior mientras mi corazón latía con fuerza en mi pecho
Cuando dejé de sentir dolor tuve que reconocer que esto era mucho mejor que en mis fantasías…
-¿Ya pasó?- preguntó con calma al percibir mis movimientos
Oh, quería más, mucho, mucho más
-Sí- acepté mordiendo su labio inferior para luego lamerlo
-Perfecto-
Fue como si con aquellas palabras hubiésemos apagado el interruptor de la consciencia y encendido el de los instintos
No había nada racional en los movimientos de Felipe, eran intensos y certeros, y parecía decidido a quedarse en mi interior por toda la eternidad
Por supuesto, la idea no me desagradaba en lo más mínimo
A medida que las embestidas se volvían más y más profundas mi interior parecía reclamar por más, como si jamás fuese a obtener suficiente de aquel hombre que se movía entre mis piernas como si aquel fuese el lugar al que siempre perteneció
Mis gemidos aumentaban de volumen proporcionalmente a la intensidad de sus movimientos pero finalmente dejé de intentar cortar la corbata que ataba mis muñecas y aprovechándome de la posición en la que nos encontrábamos pasé mis brazos sobre su cabeza y los apoyé en su cuello
Porque al quitarme la venda había descubierto que lo que me ataba las muñecas era una corbata
-mmm… sí… un poco más…-
Las palabras salían solas de mis labios, traicionando cualquier pensamiento que pudiese formarse en mi cabeza
Apenas alcanzaba a comprender lo bien que se sentía estar así con él
Era la unión más profunda que se podría conseguir entre dos hombres… entre dos personas que se aman
Y quería quedarme así para siempre
Quería conservar su pasión, sus besos, su lujuria, su energía… su necesidad
Había necesitado de Felipe más de lo que podría llegar a aceptar
Le había deseado más de lo que llegaría a reconocer en voz alta
Le amaba… realmente amaba estar con él
Amaba su forma de mirarme, su forma de tocarme, de besarme, de acariciarme
Sus manos sobre mi piel desnuda, su voz contra mi oído, sus ojos sobre mi cuerpo…
Todo…
Era demasiado perfecto para ser real y a la vez sabía que no lo era
Ya ni siquiera anhelaba tocar el cielo porque con él me sentía caminando sobre él
El placer era tan intenso que humedecía mis ojos, erizaba cada centímetro de piel y hacía temblar cada parte de mi cuerpo
¿Cómo podía desear tanto a alguien?
¿Era sano?
¿Estaba bien sentirme tan querido y anhelado por alguien?
¿Entregarle mi cuerpo y mi alma?
Ya era demasiado tarde para arrepentirme…
Incluso si así fuera no iba a hacerlo…
No mientras pudiese recordar sus ojos azules velados por el placer, su voz enronquecida por el placer compitiendo con la mía desgastada por los gemidos
Su piel perlada por el sudor resbalando contra la mía, sus manos recorriendo mi cuerpo una y otra vez, anhelando memorizarme…
No, jamás sería suficiente y no podría arrepentirme…
Volví a derramarme, esta vez entre nuestros cuerpos, sintiendo que pronto dejaría de estar consciente y caería en el mundo de las sombras
Pero me obligué a permanecer consciente solo para escuchar mi nombre salir de esos labios
Esos labios que había besado mi cuerpo como si fuese lo más valioso en el mundo…
-¡Benjamín!- exclamó fundiéndose en lo más profundo de mi interior
Tiré de él con mis últimas fuerzas y volví a unir nuestros labios
Te amo
Te amo tanto que me asusta
Pero aun así estoy feliz de hacerlo
Por favor… no me hagas daño, no podría soportarlo.
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Seguí insistiendo hasta que observé la sangre cayendo por mis manos… mis manos que mostraban muñecas rojas producto de lo que había pasado hace dos días
-¡Ábreme! ¡Necesito tu ayuda!- sollocé desesperándome
¡A Matt lo habían secuestrado!
¡Esa mujer se lo había llevado!
Recordé la expresión de Samantha al decirme que su mellizo había desaparecido y una ola de terror me inundó
“Matt no aparece Benjamín… no sabemos dónde está mi hermano…”
-¡FELIPE!- grité dejándome caer de rodillas
-No me abandones…-
¿No dijiste que te quedarías a mi lado?
Alcé mi cabeza al escuchar pasos acercándose, automáticamente me puse de pie, pero no se trataba de mi novio
Un chico de unos veinticinco años de cabello oscuro y mirada café me miraba sorprendido
-¿Necesitas algo?- cuestionó con curiosidad y preocupación
Me sequé las lágrimas con un movimiento brusco y me obligué a volver a mi fachada
-¿Sabes dónde está la persona que vive aquí?- señalé la puerta con un patético intento de desinterés
El muchacho me miró sorprendido
-¿Me buscas?-
Sacudí mi cabeza deseando haber escuchado mal
-¿Disculpa?-
-Eso, ¿Me buscas?-
Sonreí sintiéndome víctima de una broma
-No, por supuesto que a ti no, al hombre que vive aquí, Felipe- aclaré frunciendo el ceño
El chico alzó ambas cejas
-Yo vivo aquí, me mudé ayer-
Mi corazón se detuvo y de pronto sentí que iba a desmayarme
No…
-¿Y el dueño anterior?- cuestioné con el poco aliento que me quedaba
-No lo sé, mi familia compró este lugar, estaba a un precio realmente bajo para tratarse de un penthouse- sonrió levemente
Y de pronto el suelo bajo mis pies desapareció
---------------------------------------------------------End Benjamín-------------------------------------------------------
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Se nos cae todo el cielo inevitablemente
Cuando parece que rozas la felicidad esta se aleja de ti…
¿Tiene sentido seguir persiguiéndola?
Conseguir escasos momentos donde la acaricias antes de que vuelva a huir de ti…
¿Por qué huye?
¿Mereces sufrir?
Un corazón que solo desea amar, un corazón que desea ser protegido y acariciado…
Te vas y me quedo en la soledad, muriendo por el frío de tu ausencia
Muriendo por dentro debido a tus dudas
Temblando por la tristeza, llorando por la desesperación
No merezco esto…
No merecemos sufrir…
¿Por qué me abandonas?
No quiero resignarme, más no sé dónde buscarte
Quiero volver a alcanzarte pero eres como el viento… corres y corres y solo puedo percibirte cuando acaricias mis cabellos y rodeas mi cuerpo
Hace tanto tiempo que no me sentía de esta forma que creo que moriré
Me juré no volver a sufrir y por ti estoy sufriendo más que nunca
No quiero esto…
Te quiero a ti.
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